Fundamentación para Desayuno/Merienda e Higiene:

Se trata de una primera aproximación a la investigación dentro del área del nivel inicial. El
momento de la desayuno/merienda fué elegido para tenerlo en cuenta como un momento
favorable para la socialización del niño en el cuál la maestra puede favorecer el desarrollo del
lenguaje y la resolución de conflictos a través del diálogo.
La tarea cotidiana del jardín ofrece numerosas oportunidades para que los niños ejerciten
prácticas sociales de iniciación en la ciudadanía. Ellos necesitan encontrar regularidades en el
jardín, porque eso les da confianza y permite anticipar lo que vendrá. La rutina diaria marca la
organización de la tarea de la institución, de la sala y de la acción del niño.
Incorporar hábitos resulta necesario para que vayan construyendo de a poco cierta
independencia y autonomía en sus propias acciones.
Desde esta secuencia se trabajara en la sala de 4 años la importancia de la higiene, no solo de las
manos sino que también de los elementos de uso cotidiano, para que los niños comprendan la
importancia de dichas acciones. También se trabajará el orden y cuidado de los elementos del
desayuno/merienda, ya que muchos niños no tienen una independencia en el momento de
guardarlos. Trabajar estos contenidos con los niños les permitirá entender el valor y riqueza de
estas conductas de convivencia, para ponerlas diariamente en práctica.
Es importante destacar que estos momentos cotidianos como lo son el desayuno/merienda, no
caigan en una ritualización diaria y los niños encuentren en ellos la verdadera enseñanza de cada
acción.

Actividades:

Cada día los niños se sentarán en las mesas para desayunar y a partir de alguna canción o rima1
se seleccionará un encargado por mesa. Los responsables deberán contar cuántos niños hay en
sus mesas para decirme y pedir así los vasos necesarios. Separaré la cantidad de comida
destinada al desayuno y ellos se encargarán de abrir los paquetes, colocarlo en el plato, cortar el
alimento con un cuchillo de plástico en caso de que sea necesario (si son vainillas o alfajores) y
servirlos en las paneras. Repartirán después las paneras y los vasos.
Durante el desayuno iré recorriendo las mesas y, en el caso de que no se encuentren
conversando espontáneamente, propondré algún tema de conversación o juego. Por ejemplo:
qué hicieron el fin de semana o el día anterior. Me incorporaré yo también a compartir este
momento.
Una vez finalizado se les pedirá que cada uno recoja su vaso y que los encargados de las mesas
levanten las paneras.
Esta actividad se repetirá todos los días.

1
Ver Anexo.