REPÚBLICA DE COLOMBIA ISSN 0121-8425

MINISTERIO DE MINAS Y ENERGÍA

INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN E INFORMACIÓN
GEOCIENTÍFICA MINERO - AMBIENTAL Y NUCLEAR

www.ingeominas.gov.co

CATÁLOGO DE LAS UNIDADES

LITOESTRATIGRÁFICAS DE COLOMBIA

BATOLITO ANTIOQUEÑO
(K 1ta)
Cordillera Central
Departamento de Antioquia

Por

Humberto González I.
Ana Cristina Londoño

COMISIÓN ESTRATIGRÁFICA DE INGEOMINAS

 REPÚBLICA DE COLOMBIA
MINISTERIO DE MINAS Y ENERGÍA

INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN E INFORMACIÓN

GEOCIENTÍFICA, MINERO-AMBIENTAL Y NUCLEAR

CATÁLOGO DE LAS UNIDADES

LITOESTRATIGRÁFICAS DE COLOMBIA

BATOLITO ANTIOQUEÑO
(K1ta)
Cordillera Central
Departamento de Antioquia

Por
Humberto González I.
Ana Cristina Londoño

2002
INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN E INFORMACIÓN
GEOCIENTÍFICA, MINERO-AMBIENTAL Y NUCLEAR

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Esta publicación es de INGEOMINAS

Cofinanciada por el Fondo Nacional de Regalías
 Batolito Antioqueño

CONTENIDO
1. PROPONENTE DEL NOMBRE ........................................................................5

2. PROVINENCIA DEL NOMBRE Y DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA .......................5

3. RESEÑA HISTORICA ....................................................................................5

4. DESCRIPCIÓN GEOLÓGICA .........................................................................8

5. COMPOSICIÓN ESTRATIGRÁFICA Y EDAD ...................................................15

6. CORRELACIÓN.............................................................................................16

7. LOCALIDAD TIPO.........................................................................................16

8. GÉNESIS .......................................................................................................17

9. REFERENCIAS BIBLIOGRÁGICAS ...................................................................18

FIGURAS

1. Mapa de Localización Batolito Antioqueño .......................................................... 6

2. Esquema Geológico del Batolito Antioqueño......................................................... 7

3. Diagrama Q-A-P (Streckeisen, 1976) Indicando la compasión modal de las Facies del
Batolito Antioqueño.............................................................................................. 10

4. Diagrama Q-A-P (Streckeisen, 1976) Indicando composición normativa del Batolito

Antioqueño ......................................................................................................... 11

5. Diagrama P-Px-Hb (Streckeisen, 1976) para Facies Gabroide del Batolito Antioqueño.13

6. Diagrama Q-A-P (Streckeisen, 1976) Indicando composición modal de los cuerpos

relacionados al Batolito Antioqueño......................................................................... 14

3 INGEOMINAS
González H., Londoño A.

TABLAS

1. Composición modal de las facies normal del Batolito Antioqueño ...................... 9

2. Composición modal de rocas de las facies félsica y gabroide del Batolito

Antioqueño............................................................................................... 9

3. Composición química de rocas del Batolito Antioqueño ................................... 12

4. Edades radiométricas en el Batolito Antioqueño.............................................. 16

INGEOMINAS 4

CATÁLOGO DE LAS
UNIDADES CRETÁCICO
LITOESTRATIGRÁFICAS DE
COLOMBIA
1. PROPONENTE DEL NOMBRE
Botero, 1940a, 1940b.
2. PROVENIENCIA DEL NOMBRE Y
DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA
El nombre de este cuerpo proviene del
Departamento de Antioquia, donde aflora en
la parte axial de la Cordillera Central (Figura
1) y cubre un área de 7.800 km2, sin incluir
los cuerpos satélites separados del cuerpo
principal por rocas metamórficas.
Es un cuerpo elongado trapezoidal, con su
dimensión mayor norte sur y alcanza 110 km
y un ancho máximo de 80 km a lo largo de la
línea férrea entre Medellín y Puerto Berrío
(Figura 2). Los mejores afloramientos se
encuentran en la región oriental del
Departamento a lo largo de los cauces de los
ríos Cocorná, Samaná, Bizcocho, Nare (parte
media), Nechí y en los carreteables que
cruzan el cuerpo, en especial, las carreteras:
Santuario - San Luis, Granada - San Carlos,
El Peñol - Guatapé - San Rafael, Santo
Domingo - Barbosa, Santa Rosa - Yarumal,
Barbosa - Cisneros - San José del Nus,
aunque es de notar que en estas vías es
notorio el avance del proceso de
meteorización poco tiempo después de la
apertura de la vía.
3. RESEÑA HISTÓRICA
Las rocas graníticas que afloran en el núcleo
de la Cordillera Central, en el Departamento
de Antioquia, fueron descritas inicialmente
5 INGEOMINAS
Batolito Antioqueño
BATOLITO ANTIOQUEÑO
(K2ta)
Cordillera Central - Departamento de
Antioquia
Humberto González
Ana Cristina Londoño
por Zujovic (1884) a partir de muestras
llevadas a Europa por Boussignault en 1825,
quien las clasificó como granitos anfibólicos
y biotíticos.
El trabajo de Tulio Ospina (1911, 1939) sobre
la geología de Antioquia indica,
aproximadamente, el área ocupada por
plutones graníticos a los cuales describe
como de composición diorítica a granítica.
Grosse (1926) considera como roca normal la
Diorita de Poleal y a sus facies marginales les
da diferentes nombres geográficos. Lleras
Codazzi (1928) describe microscópicamente
varias muestras provenientes del túnel de la
Quiebra. Scheibe (1934) describe varias
muestras tomadas en su viaje a Antioquia en
1917 y las considera pertenecientes a
plutones dioríticos y graníticos, y Posada
(1936) asigna edades diferentes a los ciclos
de actividad plutónica en Antioquia.
Botero (1940a, b; 1942, 1963) fija el carácter
batolítico de este cuerpo, su extensión
aproximada y características petrográficas, y
asigna el nombre con el cual es conocido hoy
en día. Liégois (1958) hace énfasis sobre los
procesos de meteorización en las rocas del
batolito y su génesis. Los trabajos de
Feininger et al. (1972), Hall et al. (1972) y
Feininger & Botero (1982) han
complementado el conocimiento sobre las
características de ocurrencia, contactos,
petrografía y génesis del Batolito Antioqueño
mientras que el de Álvarez (1983) enfatiza en
sus características geoquímicas como parte de
un modelo genético que permite definir los
mecanismos y la edad del emplazamiento
 Batolito Antioqueño

Figura 1. Mapa de Localización Batolito Antioqueño

7 INGEOMINAS
González H., Londoño A.

Figura 2. Esquema Geológico del Batolito Antioqueño

INGEOMINAS 8

González (1997) presenta, en el Mapa
Geológico de Antioquia, escala 1:400.000, el
contorno del batolito, mientras que en la
memoria explicativa hace una síntesis de sus
características petrográficas, químicas y un
análisis de las edades radiométricas
disponibles.
Los mapas geológicos del Departamento de
Antioquia (Servicio Geológico Nacional,
1944; INGEOMINAS, 1979; González et al.
1997) muestran el contorno del batolito y sus
relaciones con las rocas encajantes, y
permiten definir su extensión, en especial, en
el último, donde se separan los cuerpos
satélites del cuerpo principal y se precisan los
contactos al tener una escala de trabajo
mayor.
4. DESCRIPCIÓN GEOLÓGICA
Una de las características fundamentales del
Batolito Antioqueño es su homogeneidad
litológica, donde cerca del 92% de él está
constituido por tonalitas - granodioritas que
difieren poco de un lugar a otro tanto en
dirección norte sur como este oeste. Estas
rocas constituyen la facies denominada
normal (Tabla 1). Dos facies petrográficas
subordinadas, una félsica y otra gabroide
(Tabla 2), han sido reconocidas. La
descripción petrográfica de las características
de este cuerpo, se basa en el trabajo de
Feininger & Botero (1982), quienes recopilan
la información disponible y presentan el
trabajo más completo hasta ahora publicados
sobre él.
La roca de la facies normal es fanerítica de
grano medio a grueso, color moteado, índice
de color promedio de 21, sal y pimienta, con
textura hipidiomórfica granular y rojizo, y, por lo general, muestra evidencias
composición tonalita a granodiorita, rara vez
cuarzomonzonita (Figura 3). La desviación
estándar es muy pequeña en cada uno de los
minerales constituyentes, y hace más notoria
la uniformidad petrográfica de esta facies. La
composición química se indica en la Tabla 3,
mientras que la clasificación normativa y su
9 INGEOMINAS
Batolito Antioqueño
variación se muestra en la Figura 4.
Mineralógicamente está constituida por
cuarzo, feldespato, hornblenda y biotita que
varía su contenido (Tabla 1) entre valores
relativamente próximos; como minerales de
alteración, clorita, epidota y calcita.
El cuarzo se presenta en cristales anhedrales
dispersos y como relleno intersticial entre
plagioclasa; ocasionalmente, muestra
extinción ondulatoria. Feldespato potásico
no maclado ocurre como cristales anhedrales
principalmente en continuidad óptica,
intersticial entre cristales euhedrales de
plagioclasa, hornblenda y biotita, y se
desarrolla micropertita en algunas muestras.
La plagioclasa, principalmente andesina,
constituye cerca de la mitad de la roca,
aparece en cristales euhedrales a subhedrales,
bien maclados según albita, albita - Carlsbad
y periclina, es común el zonamiento normal a
oscilatorio, aunque en una misma muestra
pueden aparecer cristales no zonados; puede
contener inclusiones pequeñas de hornblenda
y clinopiroxeno, y en zonas de cizalladura
puede ser reemplazada por feldespato
potásico. Hornblenda se presenta
principalmente en cristales subhedrales a
euhedrales de hábito prismático, con
pleocroismo bien definido X= amarillo
verdoso; Y= verde; Z= pardo verdoso con
cambios ocasionales en la coloración debido,
probablemente, a una variación en las
relaciones Fe/Ti y FeO/Fe2O3;
ocasionalmente presenta núcleos incoloros de
clinopiroxeno y opaco finogranular asociado.
La biotita se presenta en láminas euhedrales a
subhedrales en la mayoría de las muestras
libres de deformación, fuertemente pleocroica
con X= amarillo pálido; Y= Z= pardo a pardo
de cloritización con segregación de esfena
que se acumula como agregados
microgranulares a lo largo de los planos de
clivaje y son comunes inclusiones de circón
con halo pleocroico fuerte.
González H., Londoño A.

Tabla 1. Composición modal de la facies normal del Batolito Antioqueño.

1 2 3 4
Cuarzo 23,9 42,0 12,5 25,5
Feldespato K 6,7 32,1 0,0 8,6
Plagioclasa 48,4 68,7 25,3 48,7
Biotita 9,3 28,8 0,0 7,9
Hornblenda 9,3 27,7 0,0 7,6
Opacos 0,2 3,0 Trazas 0,2
Esfena 0,1 1,7 0,0 Trazas
Circón Trazas 0,1 0,0 Trazas
Apatito 0,1 0,5 Trazas 0,1
Clinopiroxeno 0,1 1,7 0,0 -
Clorita 0,1 1,7 0,0 -
Biotita + clorita 10,9 28,8 1,6 1,9
Otros 0,3 8,5 0,0 0,1
An plagioclasa 43,5 55 33 39
1. Valor promedio 214 muestras (Feininger & Botero, 1982).
2. Valor máximo 214 muestras (Feininger & Botero, 1982).
3. Valor mínimo 214 muestras (Feininger & Botero, 1982).
4. Promedio 131 muestras (Álvarez, 1983).

Tabla 2. Composición modal de rocas de la facies félsica y gabroide del Batolito Antioqueño.
1 2 3 4
Cuarzo 35,8 29,5 34,7 0-9.2
Feldespato K 24,7 11,9 20,7 0-1.7
Plagioclasa 36,4 49,0 38,9 5.8-72.9
Hornblenda - 2,6 10.2-67.7
Clinopiroxeno - 3,1 0-27.6
Ortopiroxeno 2,0 - 4,0 0-54.3
Biotita 2,0 - 4,0 0-2.9
Opacos 0,5 0,9 0,1 0.1-1.1
Apatito Trazas 0,2 Trazas 0-0,3
Esfena Trazas 0,2 Trazas 0-0,9
Clorita 0,6 0,2 0,3 0-6,6
Circón Trazas Trazas Trazas 0-Trazas
An plagiclasa 32 34 29 70-88

1 y 2. Carretera Santo Domingo - Alejandría (Feininger & Botero, 1982) facies félsica.
3. Composición promedia 8 muestras (Feininger & Botero, 1982).
4. Valores máximo y mínimo para 8 muestras facies gabroide (Feininger & Botero, 1982).
Los minerales accesorios predominantes en con megacristales de plagioclasa o de
esta facies son apatito, magnetita y circón, y, hornblenda que contrastan, por su color y
en menor proporción, esfena, epidota, calcita, composición, con la roca que las encaja.
allanita y prehnita, esta última de origen Estas formas conocidas en la literatura del
deutérico. batolito como gabarros (Botero, 1963) tienen
Es común en las rocas de esta facies la la misma composición de la roca normal
presencia de formas lenticulares a ovoides de excepto por el cuarzo y el enriquecimiento en
grano fino, macizas y de color gris oscuro máficos.

INGEOMINAS 10
 Batolito Antioqueño

Figura 3. Diagrama Q-A-P (Streckeisen, 1976) Indicando la composición modal del Batolito
Antioqueño

11 INGEOMINAS
González H., Londoño A.

Figura 4. Diagrama Q-A-P (Strekckeisen, 1976) indicando composición normativa del Batolito
Antioqueño

INGEOMINAS 12
 Batolito Antioqueño

Tabla 3. Composición química de rocas del Batolito Antioqueño.

1 2 3 4 5 6
Si O2 55,94 72,49 63,6 62,5 52,1 46,1
TiO2 0,77 0,08 0,41 0,58 0,39 0,29
Al2O3 19,39 14,68 16,2 15,2 5,6 12,2
Fe2O3 6,39 1,52 1,9 1,7 1,4 1,8
FeO - 1,34 3,0 4,0 11,4 8,8
MnO 0,10 0,03 0,15 0,38 0,09 0,02
MgO 2,64 0,18 2,6 4,2 21,3 17,8
CaO 3,44 1,65 6,2 6,6 6,4 10,3
Na2O 2,10 3,21 3,2 2,8 0,32 0,96
K2O 1,99 3,57 2,0 1,3 0,08 0,18
P2O5 0,50 0,16 0,12 0,27 0,04 0,02
H2O 4,81 1,17 0,38 0,34 0,63 1,0
H2O- 1,80 0,34 0,20 0,22 0,17 0,17
1 y 2. Valores extremos en SiO2 (Álvarez, 1983).
3 y 4. Facies normal (Feininger & Botero, 1982).
5 y 6. Facies gabroide (Feininger & Botero, 1982).

La facies félsica muestra una mayor
alteración que las otras facies del batolito y
ocurre, generalmente, como bloques
dispersos; la roca característica es de color
blanco amarillento a gris claro, maciza de
grano medio a grueso y composición
granodiorítica a cuarzomonzonítica (Tabla 2,
Figura 5).
Comparada su composición mineralógica con
la de la facies normal, la félsica es más rica
en cuarzo y feldespato potásico, la
plagioclasa es más sódica y su índice de color
es menor. Microscópicamente, el cuarzo es
anhedral, no deformado; la plagioclasa es
euhedral, bien maclada y, por lo general,
zonada, y su composición varía de oligoclasa
a andesina sódica. El feldespato potásico
aparece dispuesto entre cristales de
plagioclasa y rara vez tiene carácter
intersticial; por lo general, los cristales son
pertíticos. El único máfico presente es
biotita, en parte cloritizada, pleocroica de X=
incolora a amarillo pálido; Y=Z= pardo
verdoso, presenta abundantes inclusiones de
circón con fuerte halo pleocroico. Los
minerales accesorios son escasos (Tabla 2) y
aparece moscovita que no se encuentra en la
facies normal.
La facies gabroide, según Feininger & Botero
(1982), es gradacional con la facies normal y
está definida por un aumento en el contenido
de máficos, piroxeno y olivino a expensas de
la disminución en el contenido de cuarzo y
feldespatos, y se hace, además, más cálcica la
plagioclasa. La roca característica de esta
facies es de color negro a gris oscuro
verdoso, de grano medio a grueso y textura
hipidiomórfica a idiomórfica equigranular.
Su composición mineralógica (Tabla 2) es
variable entre piroxenita y gabro
hornbléndico (Figura 5). Las rocas más
máficas están más frescas que los gabros, ya
que al aumentar el contenido de plagioclasa
cálcica, ésta muestra saussuritización y el
piroxeno es reemplazado por anfíbol fibroso.
Los diques relacionados con el batolito son
de dos tipos: diques apófisis del batolito que
intruyen las rocas encajantes y diques
posbatolito que cortan (intruyen) las rocas del
batolito, cuya composición (Figura 6),
extensión y forma varían ampliamente con
predominio de andesitas, felsitas y alaskitas
(granito leucocrático). Los diques apófisis
varían muy poco con respecto a la
composición de la facies normal del batolito
(Feininger & Botero, 1982).

13 INGEOMINAS
González H., Londoño A.

Figura 5. Diagrama P-Px-Hb (Streckeisen, 1976) para Facies Gabroide del Batolito Antioqueño

INGEOMINAS 14
 Batolito Antioqueño

Figura 6. Diagrama Q-A-P (Streckeisen, 1976) Indicando composición modal de los cuerpos
relacionados al Batolito Antioqueño.

15 INGEOMINAS
González H., Londoño A.
5. POSICIÓN ESTRATIGRÁFICA Y
EDAD
El Batolito Antioqueño intruye la Formación
San Pablo y el Gabro de Yarumal del
Cretácico Inferior (Hall et al. 1972), las
sedimentitas del Aptiano – Albiano en San
Luis (Feininger et al., 1972), la Dunita de
Medellín del Cretácico Inferior (Toussaint,
1996) y metamorfitas paleozoicas en el flanco
este de la Cordillera Central (Feininger et al.
1972) y forma, en la mayoría de los casos,
una amplia aureola de contacto (Figura 2).
La relación de los contactos con las
estructuras en las rocas adyacentes son
discordantes y aun donde el rumbo del
contacto del batolito y la foliación de las
rocas encajantes coincide, la cartografía
detallada muestra que los buzamientos son
diferentes (Feininger et al. 1972).
Excluyendo las fallas de intrusión, muy poca
deformación puede atribuirse a la intrusión
del Batolito Antioqueño y, además, los
plegamientos regionales en la roca encajante
están más bien truncados que deflectados.
Excluyendo el borde sur donde intruye shales
cretácicos, los contactos tienen buzamientos
suaves o casi horizontales; esta interpretación
se corrobora por el descenso uniforme y
progresivo en la elevación, 20 a 30 m por
kilómetro: en Yarumal, el techo está a 2.400
msnm, cerca a Amalfi, 60 km al este está a
1.600 m; cerca a El Tigre, 30 km más al este,
está a 1.000 m; al este de Maceo está sólo a
600 msnm.
La cubierta del batolito está compuesta por
rocas masivas o de laminación fina muy débil
o con lineación, donde pueden observarse
estructuras de flujo, definidas por la
orientación subparalela de los ejes mayores
de los minerales máficos. El rumbo de esta
estructura de flujo varía ampliamente, pero su
inclinación es suave, menor de 30°. Las
características anteriores permiten considerar
que el batolito puede tener un volumen menor
que el que implica su extensión y Feininger et
al. (1972) y Feininger & Botero (1982)
INGEOMINAS
proponen una estructura profunda en forma
de lámina para, al menos, la parte norte del
cuerpo; para Toussaint (1978), el batolito se
intruyó durante una corta fase de distensión
que siguió a un evento tectometamórfico que
afectó el occidente colombiano.
La edad del Batolito Antioqueño es conocida
a partir de numerosas dataciones (Tabla 4) en
el rango de 90 + 5,6 Ma (Restrepo et al., en
publicación, en: Toussaint, 1996) y 56 Ma
(Fujiyoshi et al. 1976). Los datos más
recientes se han interpretado como
representativos de una deformación
cataclástica posterior a la intrusión (Fujiyoshi
et al. 1976) y, posiblemente, relacionada con
grandes movimientos de rumbo que afectaron
los bordes y el núcleo de la Cordillera Central
a finales del Cretácico y principios del
Cenozoico. Los datos más antiguos
provienen del sector suroriental en cercanías
de San Luis, lo que parece indicar que ésta es
la zona más antigua del batolito o que, al
menos, se ha enfriado más rápidamente. La
mayoría de estas edades son K/Ar e
indicarían la edad de enfriamiento a
temperaturas de unos 300°C y, por lo tanto, la
edad de cristalización de los magmas es
mucho más antigua. Las edades obtenidas
por huellas de fisión en circón (Paucar &
Saenz, 1995) son unos 20 Ma más jóvenes e
indican el momento en el cual se alcanzó una
temperatura de unos 200° C. Las edades
radiométricas indican que este cuerpo es
posterior al evento tectónico del Albiano
(Toussaint, 1996), marcado por el
emplazamiento tectónico de ofiolitas de la
Dunita de Medellín, así como de las rocas
ultramáficas del Complejo del río Nechí.
Faure (1978) reporta algunas edades Rb/Sr
tanto convencional como isócrona en el rango
del Paleozoico, pero no indica la localización
de las muestras ni hay una interpretación de
los resultados obtenidos. Teniendo en cuenta
las relaciones estratigráficas con rocas
sedimentarias fosilíferas del Cretácico
Inferior, intruidas por el batolito y que forma
16
 Batolito Antioqueño

Tabla 4. Edades radiométricas en el Batolito Antioqueño.

Método Material Analizado Edad (Ma) Referencia
K - Ar Biotita 74 + 3 Pérez, 1967
K - Ar Biotita 72 + 3 Pérez, 1967
K - Ar Biotita 79 + 3 Botero, 1963
K - Ar Biotita 68 + 2 Feininger et al. 1972
K - Ar Biotita 71 + 3 Pérez, 1967
K - Ar Biotita 80 + 3 Pérez, 1967
Rb - Sr Biotita 68 Fujiyoshi et al. 1976
Rb - Sr Biotita 58 Fujiyoshi et al. 1976
Rb - Sr Biotita 60 Fujiyoshi et al. 1976
ni ni 90 + 5,6 Toussaint, 1996
Huellas de Fisión Circón 55,8 Paucar y Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 63,3 Paucar y Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 49,4 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 62,8 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 58 + 6 Jaramillo, 1978
Huellas de Fisión Circón 60,4 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 58,0 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 49,1 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 53,4 Paucar & Saenz, 1995
Huellas de Fisión Circón 67,1 Paucar & Saenz, 1995

ni: No indicado.

1996). Varios cuerpos cercanos

una amplia aureola de contacto, se descartaría
para el batolito, al menos en esta región, una
edad más antigua que de fines del Cretácico
temprano. Además, Feininger et al. (1972)
consideran que no hay evidencias para
interpretar el Batolito Antioqueño como
resultado de una inyección múltiple a través
del tiempo.
6. CORRELACIÓN
El Batolito Antioqueño hace parte del ciclo
de actividad magmática del Cretácico tardío
en Colombia relacionado a un proceso de
subducción que permitió la generación del
magma a partir del cual cristalizaron este
cuerpo y plutones relacionados. La posición
de esta zona de subducción no es posible
precisarla, aunque varias hipótesis (Toussaint
& Restrepo, 1976; Barrero, 1979) suponen
que ésta se encontraba al occidente de la
Cordillera Occidental, pero teniendo en
cuenta que no se conoce la posición real de
ésta con respecto al oriente colombiano, no se
puede descartar que la posición de la
subducción haya sido diferente (Toussaint,
geográficamente al Batolito Antioqueño han
sido considerados como pertenecientes al
mismo evento magmática (González, 1997).
Entre éstos se consideran el Batolito de
Ovejas (72 Ma, Pérez, 1967), la Cúpula de La
Unión (64 + 3,8 Ma, Restrepo et al. 1991) y el
Stock de Belmira. Hacia el sur, el Plutón de
Manizales pertenece a este evento
magmático, con edad de 62,4±3,6 Ma huellas
de fisión en circón (Jaramillo, 1978) y 56+ 3
Ma K/Ar biotita (McCourt et al. 1984).
Al noreste de Yarumal, algunos plutones de
composición tonalítica, aunque no datados,
por sus características mineralógicas y
ambiente estructural, pueden considerarse
relacionados a este mismo ciclo de actividad
magmática.
7. LOCALIDAD TIPO
Los mejores y más característicos
afloramientos del Batolito Antioqueño, en su
facies normal y predominante, se encuentran
en los ríos Cocorná, Guatapé, Calderas,
Nechí, San Rafael y Dormilón, y a lo largo de

17 INGEOMINAS
González H., Londoño A.
las carreteras Santuario - río Samaná, Barbosa
- Cisneros y El Peñol - Guatapé - San Rafael.
La facies gabroide tiene sus mejores
exposiciones entre San José del Nus y
Cristales, pero, por lo general, roca fresca
sólo se encuentra como bloques residuales
(Feininger et al. 1972). La facies félsica se
encuentra bien expuesta en la carretera Santo
Domingo - río Nare, en la quebrada La
Doncella al este de Maceo y en el carreteable
Maceo - La Susana (Feininger et al. 1972;
Feininger & Botero, 1982).
8. GÉNESIS
Dos hipótesis se han considerado para
explicar el origen del Batolito Antioqueño:
por inyección magmática (Botero, 1963;
Feininger et al. 1972; Feininger & Botero,
1982; González, 1997) o por
reemplazamiento in situ de rocas
preexistentes (Radelli, 1965, a, b, c; 1967).
Los criterios de campo y laboratorio
expresados en los diferentes trabajos de
geología regional son más compatibles con
un origen magmático; entre estos criterios,
vale la pena destacar los siguientes:
• Contactos. En ninguno de los
afloramientos localizados y descritos cerca
del batolito se observa gradación entre la
roca del batolito y la roca encajante,
contactos agudos son producidos por la
inyección de un magma.
Todos los contactos son discordantes y las
rocas del batolito cortan la foliación y el
bandeamiento composicional de la roca
encajante. Las relaciones espaciales
sugieren que el contacto con las rocas
encajantes, es también discordante.
• Inclusiones. Las inclusiones de roca
encajante en el batolito tienen una
estructura interna rotada con relación a las
inclusiones vecinas y truncadas por la roca
del batolito.
INGEOMINAS
• Aureola de contacto. El batolito presenta
una aureola de contacto de alta
temperatura, cuyas paragénesis
metamórficas están en desequilibrio con
las observadas en las rocas encajantes.
• Diques. Los diques del batolito en la roca
encajante son discordantes y presentan
contactos agudos. Cuando cortan rocas
calcáreas han sufrido desilicatación para
formar rocas ricas en silicatos de calcio
por reacción con la roca calcárea.
• Uniformidad. La extraordinaria
uniformidad composicional puede
explicarse más fácilmente por
cristalización a partir de un magma
homogéneo.
• Textura. La textura hipidiomórfica
granular, que caracteriza la facies normal
del batolito, es concordante y puede
explicarse por la cristalización de una
masa fundida que sigue un orden
determinado de acuerdo con una
temperatura decreciente y un aumento en
el contenido de sílice en las fases
minerales presentes. No se encontraron
evidencias de un reemplazamiento
incompleto de rocas metamórficas o de
otras rocas.
• Plagioclasas zonadas. Son consistentes
con la cristalización en equilibrio de un
magma silíceo y corresponden a la serie
continua de reacción de Bowen, obtenida
experimentalmente. Núcleos de
clinopiroxeno en hornblenda, y el hecho
que la biotita sea menos euhedral que la
hornblenda, reproducen el orden de
cristalización de los materiales máficos o
parte de mezclas silíceas fundidas y
constituyen la serie discontinua de
reacción.
18

Los contactos agudos y discordantes del
batolito y la ausencia de foliación son
característicos de los batolitos intruidos en la
epizona (Buddington, 1959).
9. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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