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LOS 7 CIELOS

LOS 7 CIELOS

VILÓN: El primero de los niveles de cielos, es el llamado “Vilón”, el cual


actúa como filtro de los rayos solares durante el día.

RAKÍA: Luego se ubica el nivel de cielo llamado “Rakía”, que es donde


están dispuestos el sol, la luna, los demás planetas y las estrellas.

SHEJAKIM: El tercer nivel de cielo recibe el nombre de “Shejakim”, que es


donde es procesado el maná (alimento espiritual) para los justos.

ZEVÚL: El cuarto nivel de cielo es llamado “Zevúl”, allí se encuentra


Jerusalén, el Templo Sagrado, y el altar.

MAÓN: Luego se ubica el quinto nivel de cielo llamado “Maón”, que es


donde se encuentran las huestes de ángeles que entonan cánticos de alabanza
al Todopoderoso por las noches, y de día hacen silencio en honor de Israel,
quienes alaban al Todopoderoso en la tierra.

MAJÓN: El sexto nivel de cielo se llama “Majón”, y hay allí varios


depósitos de elementos para castigo (nieve y granizo, nubes malas, túnel de
vaho). Estos depósitos son espirituales, y a causa de que son para castigar,
sus entradas son de fuego espiritual.

ARAVOT: El séptimo y último cielo se llama “Aravot”, y en el mismo se


encuentran la justicia y la rectitud, los depósitos de vida, los depósitos de
paz, los depósitos de bendición, las almas de los justos que ya fallecieron,
los espíritus, las almas que en el futuro han de nacer, y el rocío con el que el
Eterno revivirá a los muertos.

LOS 7 CIELOS Y LOS 7 NIVELES DE CONCIENCIA DIVINA

De acuerdo con la descripción del Talmud de la fundación de cada uno de


los cielos, podemos considerar los siete cielos como niveles de conciencia
Divina a través de las cuales podemos ascender a un conocimiento completo
de Di-s y a una unión con Él:
1. Vilón (“Cortina”) – nuestra experiencia de la re-creación continua de Di-s
de toda la realidad.

2. Rakía (“Firmamento”) – nuestra experiencia de las letras del alfabeto


hebreo como canales de energía creativa de Di-s y como ladrillos de la
realidad.

3. Shejakim (“Piedras de molino”) – nuestra experiencia de Di-s


nombrándonos y dándonos una misión para cumplir en la Tierra.

4. Zevúl (“Domicilio”) – nuestra experiencia de Jerusalén y del Templo


Sagrado mientras existen en la esfera espiritual, listos para materializarse en
la esfera física.

5. Maón (“Residencia” – nuestra experiencia de las fuerzas Divinas que


operan en la naturaleza, permitiéndonos emular a Di-s en nuestras vidas.

6. Majón (“Lugar de Descanso”) – nuestras experiencias del Nombre


Inefable de Di-s Havaiá, su omnipotencia y omnipresencia, reflejadas en
cada aspecto de la realidad.

7. Aravot (“Cielos”) – llegando al estado definitivo de verdadera anulación


positiva (bitul) en la experiencia de Di-s solo, transformándonos en un
carruaje Divino, un vehículo de Di-s para cumplir Su deseo en la creación.

La “Tierra”, situada debajo de los siete Cielos y sobra la cual descansan las
siete Cielos, es el cimiento de esta escalera meditativa.

LOS 7 CIELOS SEGÚN RABÍ AKIVÁ

Cuando ascendí al primer palacio, yo era un devoto (Jasíd); en el segundo


palacio era un ser puro (Tahór); en el tercero sincero (Yashár); en el cuarto
estaba unido a Di-s (Tamím), en el quinto mostré mi santidad, en el sexto
dije la Kedushá (Kadosh, Kadosh, Kadosh) ante Aquel que habló y creó, a
fin de que los ángeles guardianes no me hiciesen daño: En el séptimo palacio
me mantuve erguido con todas mis fuerzas, mientras todo mi cuerpo
temblaba y pronuncié la plegaria: “Loado seas Tú, el exaltado, loado sea el
sublime en los aposentos de la Grandeza”.
1.Akivá dice que en el primer vestíbulo o palacio se encontraba en un estado
de devoción jasídica. Es la instancia en la que se descorre el velo (Vilón) y
se entra en el mundo del espíritu puro. Es un lugar donde ángeles y humanos
pueden comunicarse libremente.

2. El segundo palacio es Tahór, estado de suma pureza, y el cielo es Rakía o


firmamento. Aquí es donde reside el arcángel Gabriel. Es el lugar o estado
de conciencia donde los signos de los cielos son revelados a los profetas. Es
el lugar del Espíritu Santo en el hombre, de daat en las sefirot.

3. El tercer cielo es Shejakím. En él Akivá se encontró en una condición de


Yashár o sinceridad. Es el lugar donde se produce el tiempo.

4. El cuarto cielo es Zevúl, donde hay plenitud o Tamím. Es un contacto


directo con lo divino. Corresponde al arcángel Miguel y allí se ubica la
Jerusalén Celestial, lugar de encuentro de muchos cabalistas.

5. El quinto cielo es Maón o morada. Allí Akivá se encontró con los grandes
arcángeles guardianes, como Samael y Zadkiel.

6. El sexto cielo es Makón o el omnipresente. Es el espacio de seres más


elevados, pertenece al Trono Divino o de la Gloria (Kavod) y los guardianes
aquí son Domiel y Kaptziel.

7. El séptimo cielo es la presencia del Creador.

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