Factores principales de la caída del Imperio Romano según el Autor P.

Anderson
Para Perry Anderson, autor marxista, el factor principal que contribuyó a la caída del
imperio romano, fue la implementación de la mano de obra esclava como único modo
de producción, ya que, ante la imposibilidad de renovar la fuerza de trabajo, se
profundiza el agotamiento de los esclavos, produciéndose así, una crisis de población
esclava, lo cual pone en riesgo ese modo de producción. Esa escasez de esclavos, en la
fase imperial, va a estar dado por la necesidad de frenar la expansión territorial y por
consecuente la incorporación de nueva población que estaría destinada a la mano de
obra esclava. En el siglo III, los esclavos empiezan a resultar caros, dejar de ser
rentables para su explotación y disminuyen su condición reproductiva. Si bien, había
una parte del campesinado que era libre y cumplían esta función, no era suficiente para
compensar la falta del sector esclavo.
Otro de los factores que profundizó aún más la crisis fue la poca tendencia objetiva
a la utilización de avances técnicos y tecnológicos, y que de habérselos tenido en
cuenta, hubiese sido de una ayuda significativa, pero los pocos avances que existieron,
como los molinos giratorios y la prensa de husillo no fueron suficientes para mejorar la
productividad.
También están los factores externos, como por ejemplo la presión germana,
proveniente del otro lado de la frontera, donde se encontraban los pueblos bárbaros, a
causa de la expansión romana que iba desplazándose hacia el norte (Península ibérica),
e incorporando territorios dentro de la parte occidental del Imperio Romano y aunque
lograron entrar en las zonas bárbaras, no fue posible hacerlo en todas las zonas.
Otro de los factores fue la concepción negativa que tenían del Comercio, siendo
considerada una categoría despreciable, razón por la cual el Estado era el único
consumidor.
En el siglo III, etapa de mayor conflicto surge otro factor externo que son las invasiones
bárbaras- violentos ataques contra el imperio-, a lo cual se suma un periodo de
cincuenta años de guerras civiles, una sucesión de veinte emperadores, usurpaciones
extranjeras en las fronteras, devaluación de la moneda, epidemias que debilitaron a la
población de campesinos libres. Toda esta etapa violenta u oscura persiste hasta finales
del siglo III y principios del siglo IV, cuando se produce una recuperación del estado
imperial, gracias a la incorporación de cientos de voluntarios bárbaros,
recomponiéndose el orden social y reorganizándose el estado, etapa que va a durar
aproximadamente cien años. Las medidas que se dispusieron fueron el establecimiento
de un sistema fiscal, el aumento de los legionarios en el ejército y la división de
provincias- Principado-para lograr un mejor manejo de la cuestión territorial.
El principado va a dar paso al dominado generándose un desplazamiento hacia
oriente, constituyendo a Constantinopla como la capital del Imperio Romano de
Oriente. En cuanto a la crisis del modo de producción esclavista, en Occidente continúa
mientras que en Oriente se da el auge del comercio y surge una nueva religión, que será
el Cristianismo. El imperio Occidental cae mucho tiempo antes que el de Oriente (cae
en el siglo V), que se va a prolongar hasta la etapa feudal.
En Occidente se va a dar paso a un nuevo sistema de producción feudal. La iglesia
conformó una riqueza superior a la oligarquía secular y ante este contexto recibió el
modo de producción esclavista, el cual se vuelve escaso y da paso al “Colonato” que es
la conversión del esclavo en un “adscripto a la tierra” y así es como el propietario deja
de preocuparse por le mantenimiento de sus esclavos, dando paso a la nueva etapa
denominada “Feudalismo”.