ANALISIS DE LA PSICOLOGIA JURIDICA EN COLOMBIA La psicología jurídica surge debido a la necesidad de estudiar al individuo no solo en un estudio como lo es la psicología, sino también en el derecho, lo que la hace una rama interdisciplinaria donde ambos puedes usar y combinar sus respectivos conocimientos. Este campo de la psicología aparece en Colombia debido a las necesidades sociales que emergen a partir de una mayor especialización y de una mayor equidad en los procesos jurídicos y sociales ante las instituciones mismas que el poder designa para regular a la misma sociedad. Su objeto de estudio va enfocado hacia la orientación de unas leyes más adecuadas a las personas y a los grupos humanos, la cual se puede percibir como limitada en ciertos aspectos, ya que se puede afirmar que esta no está preparada para afrontar problemas donde se puede ver implicada. En cuanto al aporte que propone esta rama dentro de su postura psicológica se encuentra en exponer el papel importante que juega esta especialidad dentro de las circunstancias de violencia y atropellos contra la integridad física, mental, psicológica y sexual del ser humano. A pesar de que esta cuenta con muchas funciones que son parcialmente importantes, terminan enmarcándolos en algunas en las que no se ve destacado como perito en la materia e incluso funciones que realmente no tienen importancia alguna. Tuvo sus inicios en 1999 en la Pontificia Universidad Javeriana (P.U.J) con la apertura de un proyecto de práctica, en el cual se fue haciendo evidente que se requería de asesoría psicológica ya que existía la necesidad de dar una solución integral debido a que en las audiencias se percibía que no solo se hallaban conflictos en el área jurídica, sino que también se encontraban conflictos emocionales, los cuales impedían que algunos casos llegaran a finalizar satisfactoriamente. La psicología tiene un papel de suma importancia, pues debe aportar en la tarea de hacer un mejor Derecho; si bien el Derecho se concentra en el deber ser, la Psicología se concentra en el ser y sus conocimientos pueden ser muy útiles; ya que aportarían al mejor diseño de lo normativo, desde la comprensión del ser que es su destinatario final. La psicología en el Derecho que sugiere que todo el Derecho, o gran parte del mismo, está lleno de componentes psicológicos; y que por tanto requiere de la psicología para su puesta en funcionamiento. En cuanto a definiciones sobre esta área del conocimiento no hay consenso; también es cierto que todos los que nos dedicamos a este campo la entendemos como el escenario del conocimiento que utiliza los hallazgos y avances de la ciencia psicológica para intentar comprender, explicar y predecir, los acontecimientos que se dan en el ámbito legal; una vez que el hombre entra en contacto con él. Esta no está solamente interesada en ver la relación sujeto-ley, sino que le interesa además la manera como se construye y se fundamenta la ley, pues no debemos olvidar que el fin último de la ley es intentar crear un conjunto normativo legal y legítimo, que haga posible la solución de los conflictos humanos y la convivencia pacífica del hombre en la sociedad. Así como para un proceso jurídico es indispensable un abogado, de esta misma manera es la psicología, específicamente la jurídica, está volviéndose imprescindible en algunos momentos de dicho proceso; gracias a los grandes aportes que ha podido hacer a muchos de los interrogantes que no se habían podido resolver en el campo legal como: la peligrosidad, el establecimiento de penas, el esclarecimiento de la imputabilidad o inimputabilidad, la validación de testimonios, sobre todo en niños pequeños; entre otros interrogantes que existían y que siguen existiendo. A pesar de ser una rama relativamente nueva en el campo de la psicología y a ser una de las que más se le resta valor todo apunta a que, con la llegada del ya vigente Sistema Penal Acusatorio, la perspectiva de la Psicología Jurídica puede llegar a cambiar de manera positiva; donde finalmente el psicólogo jurídico será realmente tomado en cuenta como un agente que va a marcar la diferencia dentro de la dinámica y puesta en marcha de los aspectos psicológicos que se encuentran dentro de la rama del Derecho y de los mismos con respecto a los actores jurídicos que participan en los procesos legales, ya que estos pueden llegar a colaborar a adquirir conocimientos más allá de solo al acto cometido y pueden corroborar en el esclarecimiento del estado emocional en el que se encontraba el acusado, por lo que este puede ayudar a que el caso sea revisado no solo desde lo legal, sino también desde lo emocional, comportamental y mental, lo que conlleva a que un caso pueda ser finalizado con satisfacción y llegando así a poder favorecer las partes implicadas. El posicionamiento de la psicología jurídica en este país se podría comparar entonces con un niño que apenas está empezando a caminar, los primeros pasos que esta nueva disciplina de la psicología está dando dentro del campo laboral en Colombia han sido muy lentos debido a la falta de información y formación que con respecto a ésta se han omitido, tanto en profesionales de otras disciplinas, incluyendo agentes juristas y hasta los mismos psicólogos que no comprenden la verdadera dimensión que involucra el desempeño de la psicología dentro del ámbito jurídico, y la importancia que tendría si se le diera al psicólogo el lugar que merece dentro del trabajo interdisciplinar en dicha área del derecho ;además del soporte en la eficiencia de la administración jurídica en la población Colombiana. Por lo tanto se podría empezar por investigar mucho más acerca del desempeño del psicólogo en el ámbito jurídico y permitir un espacio de trabajo en grupo en donde se evite la competencia y se dé prioridad a la complementariedad en conocimientos; al mismo tiempo que se educa a la sociedad acerca de la relevancia y el beneficio que genera la asistencia al psicólogo, para de esta manera empezar a ocupar la posición que como ciencia y como disciplina profesional la psicología merece.