Fébula: El Pastor bromista
Cada vez que salia con su rebaho, un pastor
gritaba con desesperacion:
-iSocorra! iAyuda! iMe ataca el lobo!
Al escucharlo, los otros pastores acudian en su
ayuda. Pero siempre era una falsa alarma y el
pastor bromista se burlaba de ellos.
Un dia oyeron en el campo los gritos de
costumbre, pero los pastores, cansados acudir
en vano, no hicieron nada Sin embargo, esta
vez la desesperacién era real: €| lobo habia
aparecido y, al no tener la ayuda de sus
compaferos, el bromista acabé bajo las garras
del animal.
Esopo.
Moraleja:
En boca del mentiroso, lo cierto se hace
dudosoFdabula: El nifio y los dulces
Un nifio metid su mano en un recipiente
lleno de dulces. Y tomé lo mds que pudo,
pero cuando traté de sacar la mano, el
cuello del recipiente no le permitid
hacerlo.
Como tampoco queria perder aquellos
dulces, lloraba amargamente su desilusién.
Un amigo que estaba cerca le dijo: -
Conférmate solamente con la mitad y
podrds sacar la mano con los dulces-.
Moraleja:
Nunca trates de abarcar mds de lo debido,
pues te frenards.Fabula: El lobo con piel de oveja
Pens6 un dia un lobo cambiar su
apariencia para asi facilitar la obtencién
de su comida. Se metid entonces en una
piel de oveja y se fue a pastar con el
rebano, despistando totalmente al pastor.
Al atardecer, para su proteccién, fue
llevado junto con todo el rebafio a un
encierro, quedando la puerta asegurada.
Pero en la noche, buscando el pastor su
provisibn de carne para el dia siguiente,
tomé al lobo creyendo que era un cordero
y lo sacrificé al instante.
Moraleja:
SeguUn hagamos el engafo, asi recibiremos el
dafio. “
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