Elizabeth Piceno Hernández

Matrícula: 12-011-0407
Reseña Crítica.
Materia: Crítica literaria.
Profesor: Jesús Anaya Rosique.

CRÍTICA DE LA CRÍTICA
Tzevetan Todorov

Todorov escribe a manera de ensayo este texto que debe reconocerse como un
material fundamental para el desarrollo y ejercicio de la crítica literaria. Su discurso se
desenvuelve en un margen crítico, con un marco histórico delimitado sobre el objeto de
estudio que se trabaja, es decir: la literatura. Todorov como pocos críticos literarios decide
encarar una perspectiva de la crítica literaria pocas veces explorada y que va más allá de su
reconocimiento como el doble necesario de la literatura, la propone como un lenguaje
que camina paralelo a la construcción de la misma y que debe coexistir para su adecuada
comprensión y apreciación.

En primera instancia, hace un breve esbozo sobre la concepción del concepto de

la literatura, enunciando las principales corrientes y teorías que enmarcan el pensamiento
sobre la literatura. Todorov señala como insuficiente la definición conceptual de la
literatura, en la medida en que se concibe a esta como un lenguaje opuesto al utilitario, y
que puede bastarse así mismo, señalando que en conjunto con la práctica crítica literaria,
estas son dos cuestiones recientes.

Este texto nos muestra el pensamiento de Todorov respecto a su definición del

lenguaje, misma que lo sitúa más allá de lo práctico, considerando la existencia de los
grandes ejes literarios, pero haciendo una mención específica del lenguaje poético y
narrativo, es decir la poesía y novela, respectivos eventos, que relaciona con el pensamiento
como metáfora y figuración.

El autor postula precisamente que el problema de la crítica literaria radica en la

corta historia del quehacer literario, situación que se agrava con una situación evidente: la

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despreocupación de la literatura y el necesario análisis de la misma como un producto
aislado.

La contribución de pensamiento en este libro es realmente valorable puesto que es

uno de los pocos textos que describen y reflexionan el papel de la crítica literaria dentro de
un mundo instrumental e individualista, y de los menos aún que señalan la misma como un
acontecer que se gesta y reproduce su ideal a partir del lenguaje, lenguaje que debe ser
considerado como parte la naturaleza social de un individuo; una muestra de la condición
humana de la cual todos formamos parte.

Menciona los principales elementos y momentos que consolidan la historia,

sustento y mantenimiento de la metodología y fines de la escuelas literarias, cuyo enfoque,
desde su perspectiva, obedece a un tipo de desvalorización sobre lo que las obras dicen,
expresan o enseñan, pues estas corrientes centran toda su atención en la estructura y el
enlace interno que se da en ella como tal; buscando lo funcional o lo instrumental dentro
de ellas.

Esboza brevemente la historia de la literatura a partir de los románticos hasta

nuevas corrientes literarias contemporáneas, desde el romanticismo, pasando por el
estructuralismo, para llegar hasta el formalismo ruso. Nos adentra también, en el
conocimiento y problemática del New Criticismo, haciendo breve mención sobre círculos
elementales de estudios literarios tales como los de la Teoría de la recepción, y los estudios
de Jauss sobre la obra y el lector, para después emular y analizar las formas en que se
construyen las emociones estéticas de acuerdo a varios autores, a la vez que añade
comentarios personales.

Tzevetan se sitúa dentro de la problematización de la crítica literaria y sus

consideraciones sobre los puntos en que se limita al texto a un estudio de tipo sintáctico y
gramático, cuya elemental disertación es casi exclusivamente de contenido y forma,
cuestión que deja de lado el contenido y valor social de una obra.

Esto, desde su opinión es insostenible, puesto que él considera que la experiencia

social y personal, tanto en el momento de la creación, como en el momento de la lectura
de un libro o un texto literario, es en sí misma una experiencia viva, y esa experiencia

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supera cualquier posición o forma mecanicista en que se puede usar o trastocar el uso del
lenguaje en ella.

Todorov nos guía a una reflexión sobre el mundo moderno y cómo el

individualismo afecta y constituye al mundo literario, nos ayuda con su marco teórico a
hacer las respectivas consideraciones a los grandes ejes, obras y autores que rigen el
mundo literario, con la fundamentación de diversos análisis, muestra cómo la crítica
literaria debe implicar en su ejercicio el conocimiento de la literatura mundial. La fuerza y
la calidad de una crítica, para Todorov, se mide en la potencia de su comentario, en la
capacidad de criticar objetivamente y la independencia del crítico de una línea editorial.

Así pues, lanza fuertes comentarios respecto a la crítica actual, la cual considera le
hace falta una buena salud para aportar y propiciar la intelectualidad clara. La crítica así
mismo, debe reseñar novedades, ser un espacio legítimo e ir más allá de la impresión y de
las figuras a medias, debiendo superar el narcisismo y el mito de la inexistencia, aquellos
que hablan superficialmente de la obra y anulan el potencial o la deficiencia del mismo en
pos del servicio mercantil.

El comentario crítico no debe lanzarse sin argumentos, esta consideración suya,

obedece a la tendencia constante a la institucionalización y el mercadeo de la literatura
como objeto. La crítica desde el imaginario de Todorov, debe combatir la literatura
impostora, el valor estético de una obra debe ser una relación sostenida entre valor estético
y la búsqueda de lo él determina “la verdad”, aun así, el valor minoritario debe realizarse
de tal manera que pueda superarse la hexégesis.

A diferencia de muchos otros textos sobre crítica literaria, la obra de Todorov, va

más allá de una receta o una guía sobre cómo hacerla, busca guiarnos por una reflexión
acerca del por qué y para qué hacer el comentario literario, superando la receta estructural
de muchos autores respecto a los elementos, que según el mercado editorial, debe
contener y destacar el crítico literario de una obra.

Todorov considera que la crítica literaria es parte de una economía cultural que ha
delineado la crítica como una herramienta de mercado, más allá de la búsqueda de un

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sentido pleno; cuando la realmente, el ejercer o trabajar la crítica , debe enfocarse a la
búsqueda del sentido pleno, esta búsqueda implica la capacidad de un autor de poder,
debatir e impugnar, se trata de un acto cuya función implica la naturalidad, pero también la
objetividad.

Finalmente propone, como punto final, también el más interesante y transgresor,

la existencia de una crítica dialógica, la cual debe obedecer, a la fundamentación y el
ejercicio del crítico literario; en la medida en que esté debe proporcionar elementos
valorativos y objetivos, que permitan al lector decidir y opinar por sí mismo, de tal forma
que pueda lograr la interacción, y la respuesta a tales construcciones sea el eje primordial
dialógico entre crítico, autor y lector.

Se trata pues, desde su perspectiva, de la crítica como una posibilidad, como un

instrumento de búsqueda de la verdad, que supere la creencia de la literatura solamente
como un objeto de apreciación estética, que valore el acto creativo y exponga la literatura
impostora, situando y revalorando al lector como sujeto pensante y dialogante.

Bibliografía:

 Todorov, T. (2005). Crítica de la crítica. Barcelona: Paidós.