Professional Documents
Culture Documents
2015;86(1):3-11
www.elsevier.es/RCHP
ACTUALIDAD
Introducción GRTXHXQDVLJQLÀFDWLYDSDUWHGHORVSDFLHQWHVKRVSLWDOL]DGRV
en unidades pediátricas complejas tienen enfermedades
Las enfermedades humanas tienen un componente genético con un fuerte componente genético, con estadías recurren-
reconocido, ya sea como factor causal (por ejemplo, tras- tes, más largas y con mayores gastos que los pacientes sin
tornos monogénicos, de genes contiguos y cromosómicos) o una condición preexistente12–14. En nuestro medio, las herra-
como factor predisponente (por ejemplo, trastornos multi- mientas genéticas disponibles para estudios de estos pa-
factoriales o complejos). cientes son limitadas y no siempre son las más adecuadas
En el transcurso de la última década, con el impulso del para todos los casos. La experiencia reportada en otros paí-
Proyecto Genoma Humano (HGP, por sus siglas en inglés) he- ses ha mostrado casos en que el aporte de la genómica ha
mos entrado en una revolución del diagnóstico molecular, permitido un diagnóstico etiológico insospechado, con po-
donde han surgido avances tecnológicos que permiten anali- tenciales implicancias en el manejo terapéutico15–18.
zar todo el genoma de una forma más rápida, de manera Estos datos no implican que en todos los casos se deba
simultánea y con gran capacidad de resolución. partir haciendo un estudio del genoma completo, pues nada
Es así como progresivamente, durante los últimos años, las puede reemplazar el juicio clínico basado en una anamnesis
técnicas genómicas comienzan a estar disponibles para uso completa, que incluya una historia familiar adecuada, junto
clínico, y existe una amplia gama de ensayos moleculares es- con un examen físico minucioso. Es así, como en el caso de
SHFtÀFRVTXHRIUHFHQODFRQÀUPDFLyQHWLROyJLFDSDUDDOUHGH- un diagnóstico genético probable, uno debiera hacer el es-
dor de 4000 condiciones monogénicas durante el año 20141. WXGLRPHMRULQGLFDGRSDUDVXFRQÀUPDFLyQ\DVHDGHOiPEL-
En este contexto, los ensayos basados en análisis genómicos WRFLWRJHQpWLFRFDULRJUDPDKLEULGDFLyQÁXRUHVFHQWHin situ
ya están impactando en diferentes campos de la medicina, R),6+HVSHFtÀFRRPROHFXODUVHFXHQFLDFLyQFDSLODU6DQJHU
como la salud reproductiva, la oncología, el trasplante de del gen de interés, Multiplex Ligation-dependent Probe Am-
órganos, la inmunología y las enfermedades infecciosas2–7. SOLÀFDWLRQR0/3$HVSHFtÀFR6LQHPEDUJRVLQRVHOOHJDD
El presente artículo pretende resumir las potencialidades corroborar un diagnóstico o bien en el caso de que el pa-
del diagnóstico molecular desde el punto de vista genómico FLHQWHWHQJDXQDFRQGLFLyQQRFODVLÀFDEOHRFRQPDQLIHVWD-
para trastornos genéticos constitucionales y sus posibles im- ciones poco comunes, uno debiera plantearse la posibilidad
plicancias en la práctica clínica pediátrica. de un estudio amplio del genoma y sin sesgos19.
tectables con resolución estándar de 400-550 bandas citoge- Es así como la técnica de la hibridación genómica comparati-
néticas 20,21. En la década de 1990 emergieron técnicas va (CGH, por sus siglas en inglés)24, desarrollada en la década
citogenéticas moleculares que permitieron detectar microde- de 1990, recobró relevancia de la mano del desarrollo de bio-
leciones o microduplicaciones cromosómicas, es decir, pérdi- chips, llevando al ámbito diagnóstico los microarreglos (microa-
das o ganancias de material genético bajo el umbral de UUD\V. Los conceptos de microarreglos cromosómicos o
visibilidad en el microscopio óptico (tabla 1)21,22. Aquí destaca cariotipo molecular (CMA) implican diferentes plataformas tec-
la técnica de hibridación in situÁXRUHVFHQWH),6+TXHHVWi nológicas que permiten analizar o interrogar el genoma com-
disponible para un número limitado de patologías20. Adicional- pleto de un individuo en un chip25. El uso de esta herramienta
mente, se han incorporado al arsenal de herramientas diag- HQHOiPELWRFOtQLFRSHUPLWHODLGHQWLÀFDFLyQGHGHVHTXLOLEULRV
QyVWLFDVDOJXQDVWpFQLFDVGHELRORJtDPROHFXODUPiVÀQDVHQ genómicos submicroscópicos con una resolución de hasta 50 kb,
búsqueda de microdeleciones o microduplicaciones, entre las lo que equivale a cientos de veces mayor resolución que un ca-
cuales destaca la de MLPA (Multiplex Ligation-dependent Pro- riotipo con bandeo GTG convencional26,27. Los desequilibrios de
EH$PSOLÀFDWLRQ23. A diferencia del cariotipo convencional, tamaño submicroscópico y que resultan en pérdidas o ganancias
que es una mirada global a la información genética (genoma), de información genética sobre 1 kb son denominados variacio-
tanto la técnica de FISH como la de MLPA y otras relacionadas nes en el número de copias (CNV, por sus siglas en inglés)28,29.
están diseñadas para buscar de forma dirigida anomalías co- Los CNV son parte de la variabilidad interindividual, son relati-
QRFLGDVHQFLHUWDVUHJLRQHVFURPRVyPLFDVGHÀQLGDVSRUOR vamente comunes en la estructura de nuestros genomas y no
tanto, se debe contar con una hipótesis diagnóstica. necesariamente se asocian a una patología30.
Tabla 2. Ejemplos seleccionados de nuevos síndromes de microdeleción y microduplicación reconocidos a partir del uso del
CMA en el ámbito clínico
vamente más bajo por base secuenciada46. Esto se debe a no se encuentra mutación en los genes probables o no hay
que la tecnología de NGS permite “interrogar” a muchos una orientación clínica del posible gen involucrado, tendría
nucleótidos (por ejemplo, paneles, WES) o todos los nucleó- más utilidad considerar un WES o WGS. Por costos, WES pue-
tidos del genoma (por ejemplo, WGS) simultáneamente. de ser más costo-efectiva que WGS, pero hay que considerar
Además, el uso de los llamados barcode o códigos de barra que un resultado negativo no descarta que pueda haber una
VHFXHQFLDVHVSHFtÀFDVGHQXFOHyWLGRVLQFRUSRUDGRVHQORV PXWDFLyQHQXQDVHFXHQFLDQRFRGLÀFDQWH
extremos de los fragmentos a secuenciar) permite procesar Es importante indicar que los costos han bajado notable-
múltiples muestras de muchos pacientes a la vez41. Otra de mente desde las primeras experiencias de secuenciación
las ventajas es que los genes que se consideraban raramen- completa del genoma humano, y se espera que sigan dismi-
te implicados en una enfermedad y que por lo tanto no se nuyendo. Sin embargo, en el caso de WGS, el costo ronda
MXVWLÀFDEDHOFRVWRGHGHVDUUROORGHXQWHVWFOtQLFRSXHGHQ los 10 000 dólares50. Los esfuerzos están enfocados en obte-
ahora ser fácilmente incorporados en paneles de genes para ner ensayos que bordeen los 1000 dólares, aunque por el
HQIHUPHGDGHVHVSHFtÀFDVVLQDXPHQWDUFRQVLGHUDEOHPHQWH momento es una meta que algunos investigadores creen di-
el costo de la prueba46. fícil de conseguir por los cuellos de botellas de la interpre-
Por otra parte, la secuenciación masiva permite interro- tación y el análisis de los datos51.
gar al genoma y obtener múltiples tipos de información útil
para un diagnóstico. En este contexto, puede detectar SNP,
inserciones/deleciones (indels), CNV y translocaciones. Uti- Nuevos desarrollos clínicos basados
lizando la misma técnica, pero empleando ARN como mate- en el diagnóstico genómico
rial de partida, se puede evaluar transcripción de ARNm y/o
micro-ARN, entre otros41. $SHVDUGHODVGLÀFXOWDGHVORVDYDQFHVHQODVSUXHEDVJHQy-
micas ya están impactando directamente en la vida de las
Limitaciones del diagnóstico NGS personas. El ejemplo más notable de la potencia de NGS
Por supuesto, como con cualquier tecnología, también hay para revolucionar todo un campo de la medicina ha sido la
limitaciones para el diagnóstico de NGS. UiSLGDDGRSFLyQGHVGHÀQDOHVGHGHODSUXHEDSUHQD-
Desde el punto de vista técnico, aunque la tecnología se tal no invasiva para la detección de aneuploidías fetales en
GHVWDFDHQODLGHQWLÀFDFLyQGHPXWDFLRQHVUDUDVHVPHQRV embarazos de alto riesgo2.
HÀFLHQWHHQODE~VTXHGDGHindels que tienen más de 8-10 Otros avances que pueden afectar a la evolución de casos
pares de bases de longitud19. Asimismo, no es capaz por sí de difícil manejo clínico son las diversas experiencias repor-
VRODGHLGHQWLÀFDUPXWDFLRQHVLQHVWDEOHVSRUH[SDQVLyQGH tadas por centros de los EE. UU., que ofrecen diagnóstico de
nucleótidos, ni alteraciones epigenéticas19, las cuales deben NGS en plazos breves18. Un ejemplo de ello es la prueba ge-
ser corroboradas por otra técnica independiente. Por otra nética llamada STAT-Seq, del Centro de Medicina Genómica
parte, dependiendo de la cobertura y profundidad del análi- Pediátrica implementada en la unidad de cuidados intensi-
sis, puede haber bajo nivel de lecturas sobre algunas regio- vos neonatal en el Children’s Mercy Clinical Hospital de Kan-
nes del genoma, lo que puede significar una pérdida de sas City52,53. El principio de STAT-Seq se basa en reducir el
información putativamente relevante40. tiempo de diagnóstico a alrededor de dos días utilizando
También hay desafíos desde el punto de vista bioinformá- :*6FRQXQÁXMRGHDQiOLVLVpipeline) bioinformático auto-
tico en el análisis de los resultados producidos por NGS, más matizado. Habitualmente, las familias de los recién nacidos
HVSHFtÀFDPHQWHHQWpUPLQRVGHDOPDFHQDPLHQWRPDQLSX- con enfermedades genéticas esperan semanas, meses o in-
lación e interpretación de datos3. Los principales inconve- cluso años para tener la oportunidad de recibir un diagnós-
nientes de NGS están relacionados con la inmensa cantidad tico. Dada la existencia de más de 4000 enfermedades
de datos que se generan, lo que provoca verdaderos cuellos genéticas diferentes, muchas familias se quedan sin diag-
de botella en el análisis y la interpretación de un gran nú- nóstico etiológico, incluso con la realización de diferentes
mero de variantes no reportadas previamente, con el consi- WHVWHVSHFtÀFRV(QRWURVFDVRVKD\IDPLOLDVTXHUHFLEHQXQ
guiente impacto en los costos y en el tiempo de respuesta. diagnóstico post mórtem2. Con STAT-seq y otras experiencias
El desconocimiento de la magnitud de la variación genética similares, se pueden tomar decisiones informadas sobre las
normal puede llevar a la confusión en cuanto al verdadero mejores alternativas de manejo y seguimiento disponibles
VLJQLÀFDGRGHODVQXHYDVYDULDQWHVLQIRUPDFLyQTXHSXHGH con el conocimiento actual, e incluso existe la posibilidad
confundir a los tratantes y los pacientes. Estos inconvenien- de identificar una enfermedad potencialmente trata-
tes pueden resolverse mediante la realización simultánea ble18,52,53.
de este tipo de estudio en los padres del probando y en Estos son solo algunos ejemplos, ya que diversos centros y
otros familiares afectados47, así como el aumento de la co- compañías han desarrollado test con paneles de genes (es
municación y el intercambio de datos entre los laboratorios decir, se selecciona un grupo de genes que se sabe están
a través de bases de datos públicas, como ClinVar48. relacionados de alguna manera con la enfermedad) en pato-
Se debe considerar que WES tiene una tasa de detección logías tan diversas como: cáncer, enfermedades neurológi-
de un 25% para variantes patogénicas49, por lo que debe pro- cas, enfermedades cardíacas, enfermedades infecciosas y
curarse una juiciosa selección de los pacientes y racional- dermatológicas, entre otras54–58. Hablar de cada una de ellas
mente agotar las instancias previas según cada caso. Al igual se escapa del interés de este artículo; sin embargo, resulta
que en el caso de CMA, si uno tiene algún gen candidato, es interesante ver cómo cada día se van sumando nuevas pato-
mejor partir haciendo el análisis estándar. Si se trata de un logías al diagnóstico de NGS.
fenotipo con varios genes posibles, sería más útil considerar Si bien el diagnóstico molecular basado en NGS está em-
la realización por NGS de un panel de los genes conocidos. Si pezando a tomar fuerza, aún queda mucho por hacer e im-
8 Lay-Son G. y cols.
Whole exome sequencing (WES). Metodología que permite 15. Ng SB, Buckingham KJ, Lee C, Bigham AW, Tabor HK, Dent KM,
estudiar la secuencia completa del exoma. Huff CD, Shannon PT, Jabs EW, Nickerson DA, Shendure J, Bam-
shad MJ: ([RPHVHTXHQFLQJLGHQWLÀHVWKHFDXVHRIDPHQGHOLDQ
Whole genome sequencing (WGS). Metodología que permi- disorder. Nat Genet 2010; 42: 30-5.
16. Choi M, Scholl UI, Ji W, Liu T, Tikhonova IR, Zumbo P, Nayir A,
te estudiar la secuencia completa del genoma. Incluye al
%DNNDORÿOX$2]HQ66DQMDG61HOVRQ:LOOLDPV&)DUKL$
exoma, así como a las secuencias intrónicas e intergénicas. Mane S, Lifton RP: Genetic diagnosis by whole exome capture
and massively parallel DNA sequencing. Proc Natl Acad Sci
2009; 106: 19096-101.
&RQÁLFWRGHLQWHUpV 17. Worthey EA, Mayer AN, Syverson GD, Helbling D, Bonacci BB,
Decker B, Serpe JM, Dasu T, Tschannen MR, Veith RL, Basehore
Este trabajo cumple con los requisitos sobre consentimien- MJ, Broeckel U, Tomita-Mitchell A, Arca MJ, Casper JT, Margo-
WRDVHQWLPLHQWRLQIRUPDGRFRPLWpGHpWLFDÀQDQFLDPLHQ- lis DA, Bick DP, Hessner MJ, Routes JM, Verbsky JW, Jacob HJ,
WRHVWXGLRVDQLPDOHV\VREUHODDXVHQFLDGHFRQÁLFWRVGH Dimmock DP: 0DNLQJDGHÀQLWLYHGLDJQRVLVVXFFHVVIXOFOLQLFDO
intereses según corresponda. application of whole exome sequencing in a child with intracta-
EOHLQÁDPPDWRU\ERZHOGLVHDVH*HQHW0HG
18. Jacob HJ, Abrams K, Bick DP, Brodie K, Dimmock DP, Farrell M,
Geurts J, Harris J, Helbling D, Joers BJ, Kliegman R, Kowals-
NL*/D]DU-0DUJROLV'$1RUWK31RUWKXS-5RTXHPRUH
Referencias Goins A, Scharer G, Shimoyama M, Strong K, Taylor B, Tsaih SW,
Tschannen MR, Veith RL, Wendt-Andrae J, Wilk B, Worthey EA:
1. GeneTestsTM [Internet]. [acceso 22-08-2014]. Disponible en: Genomics in Clinical Practice: Lessons from the Front Lines. Sci
http://www.genetests.org/ Transl Med 2013; 5: 194cm5.
2. Nepomnyashchaya YN, Artemov AV, Roumiantsev SA, Rou- 19. Biesecker LG, Green RC: Diagnostic clinical genome and exome
myantsev AG, Zhavoronkov A: Non-invasive prenatal diagnos- VHTXHQFLQJ1(QJO-0HG
tics of aneuploidy using next-generation DNA sequencing tech- 20. Trask BJ: Human cytogenetics: 46 chromosomes, 46 years and
nologies, and clinical considerations. Clin Chem Lab Med 2013; counting. Nat Rev Genet 2002; 3: 769-78.
51: 1141-54. 21. Smeets DFCM: Historical prospective of human cytogenetics:
3. Xuan J, Yu Y, Qing T, Guo L, Shi L: Next-generation sequencing in from microscope to microarray. Clin Biochem 2004; 37: 439-46.
the clinic: promises and challenges. Cancer Lett 2013; 340: 284-95. 22. Salman M, Jhanwar SC, Ostrer H: Will the new cytogenetics re-
4. Rubio C: Next-generation sequencing: challenges in reproduc- place the old cytogenetics? Clin Genet 2004; 66: 265-75.
tive genetics. Fertil Steril 2014; 101: 1252-3. 23. Schouten JP, McElgunn CJ, Waaijer R, Zwijnenburg D,
5. Major E, Rigó K, Hague T, Bérces A, Juhos S: HLA typing from Diepvens F, Pals G: 5HODWLYHTXDQWLÀFDWLRQRIQXFOHLFDFLG
1000 genomes whole genome and whole exome illumina data. VHTXHQFHVE\PXOWLSOH[OLJDWLRQGHSHQGHQWSUREHDPSOLÀFD-
Plos One 2013; 8: e78410. tion. Nucleic Acids Res 2002; 30: e57.
6. Nijman IJ, van Montfrans JM, Hoogstraat M, Boes ML, van de 24. .DOOLRQLHPL$.DOOLRQLHPL236XGDU'5XWRYLW]'*UD\-:
Corput L, Renner ED, van Zon P, van Lieshout S, Elferink MG, Waldman F, Pinkel D: Comparative genomic hybridization for
van der Burg M, Vermont CL, van der Zwaag B, Janson E, Cup- molecular cytogenetic analysis of solid tumors. Science 1992;
pen E, Ploos van Amstel JK, van Gijn ME. Targeted next-genera- 258: 818-21.
tion sequencing: a novel diagnostic tool for primary immunode- 25. Cheung SW, Shaw CA, Yu W, Li J, Ou Z, Patel A, Yatsenko SA,
ÀFLHQFLHV-$OOHUJ\&OLQ,PPXQRO &RRSHU0/)XUPDQ36WDQNLHZLF]3/XSVNL-5&KLQDXOW$&
7. Padmanabhan R, Mishra AK, Raoult D, Fournier P-E: Genomics Beaudet AL: Development and validation of a CGH microarray
DQG PHWDJHQRPLFV LQ PHGLFDO PLFURELRORJ\ - 0LFURELRO for clinical cytogenetic diagnosis. Genet Med 2005; 7: 422-32.
Methods 2013; 95: 415-24. 26. Edelmann L, Hirschhorn K: Clinical utility of array CGH for the
8. Green ED, Guyer MS, National Human Genome Research Insti- detection of chromosomal imbalances associated with mental
tute: Charting a course for genomic medicine from base pairs retardation and multiple congenital anomalies. Ann N Y Acad
to bedside. Nature 2011; 470: 204-13. Sci 2009; 1151: 157-66.
9. Wordsworth S, Buchanan J, Regan R, Davison V, Smith K, Dyer 27. Lee C, Iafrate AJ, Brothman AR: Copy number variations and
S, Campbell C, Blair E, Maher E, Taylor J, Knight SJ: Diagnosing clinical cytogenetic diagnosis of constitutional disorders. Nat
idiopathic learning disability: a cost-effectiveness analysis of Genet 2007; 39(7 Suppl): S48-54.
microarray technology in the National Health Service of the 28. Feuk L, Carson AR, Scherer SW: Structural variation in the hu-
United Kingdom. Genomic Med 2007; 1: 35-45. man genome. Nat Rev Genet 2006; 7: 85-97.
10. Regier DA, Friedman JM, Marra CA: Value for money? Array ge- 29. Zhao M, Wang Q, Wang Q, Jia P, Zhao Z: Computational tools
nomic hybridization for diagnostic testing for genetic causes of for copy number variation (CNV) detection using next-genera-
LQWHOOHFWXDOGLVDELOLW\$P-+XP*HQHW tion sequencing data: features and perspectives. BMC Bioinfor-
11. Trakadis Y, Shevell M:0LFURDUUD\DVDÀUVWJHQHWLFWHVWLQJOREDO matics 2013; 14 (Suppl 11): S1.
developmental delay: a cost-effectiveness analysis. Dev Med 30. Redon R, Ishikawa S, Fitch KR, Feuk L, Perry GH, Andrews TD,
Child Neurol 2011; 53: 994-9. Fiegler H, Shapero MH, Carson AR, Chen W, Cho EK, Dallaire S,
12. Hall JG, Powers EK, Mcllvaine RT, Ean VH: The frequency and )UHHPDQ-/*RQ]iOH]-5*UDWDFzV0+XDQJ-.DODLW]RSRX-
ÀQDQFLDOEXUGHQRIJHQHWLFGLVHDVHLQDSHGLDWULFKRVSLWDO$P- los D, Komura D, MacDonald JR, Marshall CR, Mei R, Montgo-
Med Genet 1978; 1: 417-36. mery L, Nishimura K, Okamura K, Shen F, Somerville MJ, Tchin-
13. McCandless SE, Brunger JW, Cassidy SB: The Burden of Genetic da J, Valsesia A, Woodwark C, Yang F, Zhang J, Zerjal T, Zhang
'LVHDVHRQ,QSDWLHQW&DUHLQD&KLOGUHQ·V+RVSLWDO$P-+XP J, Armengol L, Conrad DF, Estivill X, Tyler-Smith C, Carter NP,
Genet 2004; 74: 121-7. Aburatani H, Lee C, Jones KW, Scherer SW, Hurles ME: Global
14. Soneda A, Teruya H, Furuya N, Yoshihashi H, Enomoto K, Ishika- variation in copy number in the human genome. Nature 2006;
wa A, Matsui K, Kurosawa K: Proportion of malformations and 444: 444-54.
genetic disorders among cases encountered at a high-care unit in 31. Schluth-Bolard C, Till M, Edery P, Sanlaville D: Syndromes chro-
DFKLOGUHQ·VKRVSLWDO(XU-3HGLDWU mosomiques émergents. Pathol Biol (Paris) 2008; 56: 380-7.
10 Lay-Son G. y cols.
32. Slavotinek AM: Novel microdeletion syndromes detected by 47. Korf BR, Rehm HL: New approaches to molecular diagnosis.
chromosome microarrays. Hum Genet 2008; 124: 1-17. -$0$
33. 9HUPHHVFK-5)LHJOHU+GH/HHXZ16]XKDL.6FKRXPDQV- 48. Landrum MJ, Lee JM, Riley GR, Jang W, Rubinstein WS, Church
Ciccone R, Speleman F, Rauch A, Clayton-Smith J, Van Raven- DM, Maglott DR: ClinVar: public archive of relationships among
swaaij C, Sanlaville D, Patsalis PC, Firth H, Devriendt K, sequence variation and human phenotype. Nucleic Acids Res
Zuffardi O: Guidelines for molecular karyotyping in constitutio- 2014; 42: D980-5.
QDOJHQHWLFGLDJQRVLV(XU-+XP*HQHW 49. <DQJ<0X]Q\'05HLG-*%DLQEULGJH01:LOOLV$:DUG3$
34. Manning M, Hudgins L: Array-based technology and recommen- Braxton A, Beuten J, Xia F, Niu Z, Hardison M, Person R, Be-
dations for utilization in medical genetics practice for detec- kheirnia MR, Leduc MS, Kirby A, Pham P, Scull J, Wang M, Ding
tion of chromosomal abnormalities. Genet Med 2010; 12: 742- Y, Plon SE, Lupski JR, Beaudet AL, Gibbs RA, Eng CM: Clinical
5. Whole-Exome Sequencing for the Diagnosis of Mendelian Disor-
35. Miller DT, Adam MP, Aradhya S, Biesecker LG, Brothman AR, GHUV1(QJO-0HG
Carter NP, Church DM, Crolla JA, Eichler EE, Epstein CJ, Fau- 50. Kucherlapati R: Genomics and Proteomics. En: Rimoin DL, Pye-
cett WA, Feuk L, Friedman JM, Hamosh A, Jackson L, Kaminsky ritz RE, Korf B, editores. Emery and Rimoin’s Principles and
(%.RN..UDQW],'.XKQ50/HH&2VWHOO-05RVHQEHUJ& Practice of Medical Genetics. Academic Press; 2013. p. 1-10.
Scherer SW, Spinner NB, Stavropoulos DJ, Tepperberg JH, Thor- 51. Perkel J: Finding the true $1000 genome. BioTechniques 2013;
land EC, Vermeesch JR, Waggoner DJ, Watson MS, Martin CL, 54: 71-4.
Ledbetter DH: Consensus statement: chromosomal microarray 52. The Children’s Mercy Hospital. Pediatric Genomic Medicine,
LVDÀUVWWLHUFOLQLFDOGLDJQRVWLFWHVWIRULQGLYLGXDOVZLWKGHYHOR- STAT-Seq [Internet] [acceso 16-08-2014]. Disponible en: http://
SPHQWDOGLVDELOLWLHVRUFRQJHQLWDODQRPDOLHV$P-+XP*HQHW www.childrensmercy.org/Health_Care_Professionals/Re-
2010; 86: 749-64. search/Pediatric_Genomic_Medicine/STAT-Seq/
36. ,QWHUQDWLRQDO&ROODERUDWLRQIRU&OLQLFDO*HQRPLFV,&&* In- 53. Saunders CJ, Miller NA, Soden SE, Dinwiddie DL, Noll A, Alnadi
ternational Standard Cytogenomic Array (ISCA) Consortium Da- NA, Andraws N, Patterson ML, Krivohlavek LA, Fellis J, Hum-
tabase Search [Internet]. [acceso 09-09-2014]. Disponible en: phray S, Saffrey P, Kingsbury Z, Weir JC, Betley J, Grocock RJ,
http://www.iccg.org/ 0DUJXOLHV(+)DUURZ(*$UWPDQ06DÀQD133HWULNLQ-(
37. Database of Genomic Variants (DGV) [Internet] [acceso 09-09- Hall KP, Kingsmore SF: Rapid Whole-Genome Sequencing for
2014]. Disponible en: http://dgv.tcag.ca/dgv/app/home Genetic Disease Diagnosis in Neonatal Intensive Care Units. Sci
38. Database of Chromosomal Imbalance and Phenotype in Humans Transl Med 2012; 4: 154ra135.
using Ensembl Resources (DECIPHER) [Internet] [acceso 09-09- 54. Foo JN, Liu J, Tan E-K: Next-generation sequencing diagnostics
2014]. Disponible en: https://decipher.sanger.ac.uk/ for neurological diseases/disorders: from a clinical perspecti-
39. Sanger F, Coulson AR: A rapid method for determining sequen- ve. Hum Genet 2013; 132: 721-34.
FHVLQ'1$E\SULPHGV\QWKHVLVZLWK'1$SRO\PHUDVH-0RO%LRO 55. Chang F, Li MM: Clinical application of amplicon-based next-ge-
1975; 94: 441-8. neration sequencing in cancer. Cancer Genet 2013; 206: 413-9.
40. Neveling K, Feenstra I, Gilissen C, Hoefsloot LH, Kamsteeg EJ, 56. %DU]RQ//DYH]]R(&RVWDQ]L*)UDQFKLQ(7RSSR63DO*
Mensenkamp AR, Rodenburg RJ, Yntema HG, Spruijt L, Ver- Next-generation sequencing technologies in diagnostic virology.
meer S, Rinne T, van Gassen KL, Bodmer D, Lugtenberg D, de -&OLQ9LURO
Reuver R, Buijsman W, Derks RC, Wieskamp N, van den Heuvel 57. Li X, Buckton AJ, Wilkinson SL, John S, Walsh R, Novotny T, Va-
B, Ligtenberg MJ, Kremer H, Koolen DA, van de Warrenburg BP, laskova I, Gupta M, Game L, Barton PJ, Cook SA, Ware JS:
Cremers FP, Marcelis CL, Smeitink JA, Wortmann SB, van Zelst- Towards clinical molecular diagnosis of inherited cardiac condi-
Stams WA, Veltman JA, Brunner HG, Scheffer H, Nelen MR: A tions: a comparison of bench-top genome DNA sequencers. Plos
post-hoc comparison of the utility of sanger sequencing and One 2013; 8: e67744.
exome sequencing for the diagnosis of heterogeneous diseases. 58. 7DNHLFKL7/LX/)RQJ.2]RHPHQD/0F0LOODQ-56DODP$
Hum Mutat 2013; 34: 1721-6. Campbell P, Akiyama M, Mellerio JE, McLean WH, Simpson MA,
41. 0HW]NHU0/ Sequencing technologies - the next generation. McGrath JA: Whole-exome sequencing improves mutation de-
Nat Rev Genet 2010; 11: 31-46. WHFWLRQLQDGLDJQRVWLFHSLGHUPRO\VLVEXOORVDODERUDWRU\%U-
42. Margulies M, Egholm M, Altman WE, Attiya S, Bader JS, Bemben 'HUPDWRO-XQGRLEMG>(SXEDKHDG
LA, Berka J, Braverman MS, Chen YJ, Chen Z, Dewell SB, Du L, of print].
)LHUUR-0*RPHV;9*RGZLQ%&+H:+HOJHVHQ6+R&+,U]\N 59. 5DPVH\%:'DYLHV-0F(OYDQH\1*7XOOLV(%HOO6&'ĥHYtQHN
GP, Jando SC, Alenquer ML, Jarvie TP, Jirage KB, Kim JB, Knight P, Griese M, McKone EF, Wainwright CE, Konstan MW, Moss R,
-5/DQ]D-5/HDPRQ-+/HINRZLW]60/HL0/L-/RKPDQ./ 5DWMHQ)6HUPHW*DXGHOXV,5RZH60'RQJ45RGULJXH]6
Lu H, Makhijani VB, McDade KE, McKenna MP, Myers EW, Nicker- <HQ.2UGRxH]&(OERUQ-69;6WXG\*URXS A
son E, Nobile JR, Plant R, Puc BP, Ronan MT, Roth GT, Sarkis GJ, &)75SRWHQWLDWRULQSDWLHQWVZLWKF\VWLFÀEURVLVDQGWKH*'
6LPRQV-)6LPSVRQ-:6ULQLYDVDQ07DUWDUR.57RPDV]$9RJW PXWDWLRQ1(QJO-0HG
KA, Volkmer GA, Wang SH, Wang Y, Weiner MP, Yu P, Begley RF, 60. Kirov G, Rees E, Walters JT, Escott-Price V, Georgieva L, Ri-
Rothberg JM: Genome sequencing in microfabricated high-densi- chards AL, Chambert KD, Davies G, Legge SE, Moran JL, McCa-
ty picolitre reactors. Nature 2005; 437: 376-80. rroll SA, O’Donovan MC, Owen MJ: The Penetrance of Copy
43. Collins FS, Hamburg MA: First FDA Authorization for Next-Gene- Number Variations for Schizophrenia and Developmental Delay.
UDWLRQ6HTXHQFHU1(QJO-0HG Biol Psychiatry 2014; 75: 378-85.
44. Illumina, Inc. The MiSeqDx Instrument [Internet] [acceso 16-08- 61. Itsara A, Cooper GM, Baker C, Girirajan S, Li J, Absher D,
2014]. Disponible en: http://www.illumina.com/clinical/diag- Krauss RM, Myers RM, Ridker PM, Chasman DI, Mefford H, Ying
nostics/ivd-assay-development/miseqdx-instrument.ilmn P, Nickerson DA, Eichler EE: Population analysis of large copy
45. Iglesias A, Anyane-Yeboa K, Wynn J, Wilson A, Truitt Cho M, QXPEHUYDULDQWVDQGKRWVSRWVRIKXPDQJHQHWLFGLVHDVH$P-
*X]PDQ(6LVVRQ5(JDQ&&KXQJ:. Genome sequencing in Hum Genet 2009; 84: 148-61.
microfabricated high-density picolitre reactors. Nature 2005; 62. 6DKRR77KHLVHQ$5RVHQIHOG-$/DPE$15DYQDQ-%6FKXOW]
437: 376-80. RA, Torchia BS, Neill N, Casci I, Bejjani BA, Shaffer LG: Copy
46. Thompson R, Drew CJG, Thomas RH: Next generation sequencing number variants of schizophrenia susceptibility loci are asso-
in the clinical domain: clinical advantages, practical, and ethical ciated with a spectrum of speech and developmental delays
challenges. Adv Protein Chem Struct Biol 2012; 89: 27-63. and behavior problems. Genet Med 2011; 13: 868-80.
Diagnóstico genómico 11
63. Dolcetti A, Silversides CK, Marshall CR, Lionel AC, Stavropou- Crosbie V, Luscombe S, Baatjes R, Zwaigenbaum L, Roberts W,
los DJ, Scherer SW, Bassett AS: 1q21.1 Microduplication expres- )HUQDQGH]%6]DWPDUL36FKHUHU6: Structural Variation of
sion in adults. Genet Med 2013; 15: 282-9. &KURPRVRPHVLQ$XWLVP6SHFWUXP'LVRUGHU$P-+XP*HQHW
64. Dibbens LM, Mullen S, Helbig I, Mefford HC, Bayly MA, Bellows 2008; 82: 477-88.
S, Leu C, Trucks H, Obermeier T, Wittig M, Franke A, Caglayan 71. Shinawi M, Liu P, Kang SH, Shen J, Belmont JW, Scott DA, Pro-
+<DSLFL=(3,&85(&RQVRUWLXP6DQGHU7(LFKOHU((6FKHIIHU bst FJ, Craigen WJ, Graham BH, Pursley A, Clark G, Lee J,
IE, Mulley JC, Berkovic SF: Familial and sporadic 15q13.3 mi- 3URXG06WRFFR$5RGULJXH]'/.R]HO%$6SDUDJDQD65RH-
crodeletions in idiopathic generalized epilepsy: precedent for GHU(50F*UHZ6*.XUF]\QVNL7:$OOLVRQ/-$PDWR66DYDJH
disorders with complex inheritance. Hum Mol Genet 2009; 18: 63DWHO$6WDQNLHZLF]3%HDXGHW$/&KHXQJ6:/XSVNL-5
3626-31. Recurrent reciprocal 16p11.2 rearrangements associated with
65. Helbig I, Mefford HC, Sharp AJ, Guipponi M, Fichera M, Franke global developmental delay, behavioural problems, dysmor-
$0XKOH+GH.RYHO&%DNHU&YRQ6SLF]DN6.URQ./6WHL- SKLVPHSLOHSV\DQGDEQRUPDOKHDGVL]H-0HG*HQHW
QLFK,.OHHIXVV/LH$$/HX&*DXV96FKPLW]%.OHLQ.0 47: 332-41.
Reif PS, Rosenow F, Weber Y, Lerche H, Zimprich F, Urak L, Fu- 72. McCarthy SE, Makarov V, Kirov G, Addington AM, McClellan J,
chs K, Feucht M, Genton P, Thomas P, Visscher F, de Haan GJ, Yoon S, Perkins DO, Dickel DE, Kusenda M, Krastoshevsky O,
Møller RS, Hjalgrim H, Luciano D, Wittig M, Nothnagel M, Elger .UDXVH9.XPDU5$*UR]HYD'0DOKRWUD':DOVK7=DFNDL
CE, Nürnberg P, Romano C, Malafosse A, Koeleman BP, Lindhout (+.DSODQ3*DQHVK-.UDQW],'6SLQQHU1%5RFFDQRYD3
D, Stephani U, Schreiber S, Eichler EE, Sander T: 15q13.3 mi- Bhandari A, Pavon K, Lakshmi B, Leotta A, Kendall J, Lee YH,
crodeletions increase risk of idiopathic generalized epilepsy. Vacic V, Gary S, Iakoucheva LM, Crow TJ, Christian SL, Lieber-
Nat Genet 2009; 41: 160-2. man JA, Stroup TS, Lehtimäki T, Puura K, Haldeman-Englert C,
66. Sharp AJ, Mefford HC, Li K, Baker C, Skinner C, Stevenson RE, Pearl J, Goodell M, Willour VL, Derosse P, Steele J, Kassem L,
Schroer RJ, Novara F, De Gregori M, Ciccone R, Broomer A, Ca- Wolff J, Chitkara N, McMahon FJ, Malhotra AK, Potash JB,
suga I, Wang Y, Xiao C, Barbacioru C, Gimelli G, Bernardina BD, 6FKXO]H7*1|WKHQ00&LFKRQ65LHWVFKHO0/HLEHQOXIW(
Torniero C, Giorda R, Regan R, Murday V, Mansour S, Fichera M, Kustanovich V, Lajonchere CM, Sutcliffe JS, Skuse D, Gill M,
Castiglia L, Failla P, Ventura M, Jiang Z, Cooper GM, Knight SJ, *DOODJKHU/0HQGHOO15:HOOFRPH7UXVW&DVH&RQWURO&RQVRU-
5RPDQR&=XIIDUGL2&KHQ&6FKZDUW]&((LFKOHU((A recu- tium, Craddock N, Owen MJ, O’Donovan MC, Shaikh TH, Susser
rrent 15q13.3 microdeletion syndrome associated with mental E, Delisi LE, Sullivan PF, Deutsch CK, Rapoport J, Levy DL, King
retardation and seizures. Nat Genet 2008; 40: 322-8. MC, Sebat J: Microduplications of 16p11.2 are associated with
67. Miller DT, Shen Y, Weiss LA, Korn J, Anselm I, Bridgemohan C, schizophrenia. Nat Genet 2009; 41: 1223-7.
Cox GF, Dickinson H, Gentile J, Harris DJ, Hegde V, Hundley R, 73. Ramocki MB, Peters SU, Tavyev YJ, Zhang F, Carvalho CM, Scha-
Khwaja O, Kothare S, Luedke C, Nasir R, Poduri A, Prasad K, DI&35LFKPDQ5)DQJ3*OD]H'*/XSVNL-5=RJKEL+<Au-
Raffalli P, Reinhard A, Smith SE, Sobeih MM, Soul JS, Stoler J, tism and other Neuropsychiatric Symptoms are Prevalent in In-
Takeoka M, Tan WH, Thakuria J, Wolff R, Yusupov R, Gusella JF, dividuals with MECP2 Duplication Syndrome. Ann Neurol 2009;
Daly MJ, Wu BL: Microdeletion/duplication at 15q13.2q13.3 66: 771-82.
among individuals with features of autism and other neurop- 74. Shimada S, Okamoto N, Ito M, Arai Y, Momosaki K, Togawa M,
V\FKLDWULFGLVRUGHUV-0HG*HQHW Maegaki Y, Sugawara M, Shimojima K, Osawa M, Yamamoto T:
68. Van Bon BW, Mefford HC, Menten B, Koolen DA, Sharp AJ, Nille- MECP2 duplication syndrome in both genders. Brain Dev 2013;
sen WM, Innis JW, de Ravel TJ, Mercer CL, Fichera M, Stewart H, 35: 411-9.
Connell LE, Ounap K, Lachlan K, Castle B, Van der Aa N, van Ra- 75. Bijlsma EK, Collins A, Papa FT, Tejada MI, Wheeler P, Peeters
venswaaij C, Nobrega MA, Serra-Juhé C, Simonic I, de Leeuw N, EA, Gijsbers AC, van de Kamp JM, Kriek M, Losekoot M, Broek-
Pfundt R, Bongers EM, Baker C, Finnemore P, Huang S, Maloney PD$-&UROOD-$3ROOD]]RQ00XFFLROR0.DW]DNL('LVFLJOLR
VK, Crolla JA, van Kalmthout M, Elia M, Vandeweyer G, Fryns JP, 9)HUUHUL0,0DUR]]D$0HQFDUHOOL0$&DVWDJQLQL&'RVD/
Janssens S, Foulds N, Reitano S, Smith K, Parkel S, Loeys B, Ariani F, Mari F, Canitano R, Hayek G, Botella MP, Gener B, Mín-
Woods CG, Oostra A, Speleman F, Pereira AC, Kurg A, Willatt L, JXH]05HQLHUL$5XLYHQNDPS&$Xq28 duplications including
Knight SJ, Vermeesch JR, Romano C, Barber JC, Mortier G, Pé- 0(&3 LQ ÀYH IHPDOHV ([SDQGLQJ WKH SKHQRW\SH WR VHYHUH
UH]-XUDGR/$.RR\)%UXQQHU+*(LFKOHU((.OHHIVWUD7GH PHQWDOUHWDUGDWLRQ(XU-0HG
Vries BB: Further delineation of the 15q13 microdeletion and du- 76. Lugtenberg D, Kleefstra T, Oudakker AR, Nillesen WM, Yntema
plication syndromes: a clinical spectrum varying from non-patho- +*7]VFKDFK$5D\QDXG05DWLQJ'-RXUQHO+&KHOO\-*RL-
JHQLFWRDVHYHUHRXWFRPH-0HG*HQHW ]HW&/DFRPEH'3HGHVSDQ-0(FKHQQH%7DULYHUGLDQ*
69. Weiss LA, Shen Y, Korn JM, Arking DE, Miller DT, Fossdal R, Sae- O’Rourke D, King MD, Green A, van Kogelenberg M, Van Esch H,
mundsen E, Stefansson H, Ferreira MA, Green T, Platt OS, Ru- *HF]-+DPHO%&YDQ%RNKRYHQ+GH%URXZHU$3 Structural
GHUIHU'0:DOVK&$$OWVKXOHU'&KDNUDYDUWL$7DQ]L5(6WH- variation in Xq28: MECP2 duplications in 1% of patients with
IDQVVRQ.6DQWDQJHOR6/*XVHOOD-)6NODU3:X%/'DO\0- unexplained XLMR and in 2% of male patients with severe en-
Autism Consortium: Association between Microdeletion and FHSKDORSDWK\(XU-+XP*HQHW
0LFURGXSOLFDWLRQDWSDQG$XWLVP1(QJO-0HG 77. 'HO*DXGLR')DQJ36FDJOLD):DUG3$&UDLJHQ:-*OD]H'*
358: 667-75. Neul JL, Patel A, Lee JA, Irons M, Berry SA, Pursley AA, Grebe
70. Marshall CR, Noor A, Vincent JB, Lionel AC, Feuk L, Skaug J, TA, Freedenberg D, Martin RA, Hsich GE, Khera JR, Friedman
Shago M, Moessner R, Pinto D, Ren Y, Thiruvahindrapduram B, NR, Zoghbi HY, Eng CM, Lupski JR, Beaudet AL, Cheung SW, Roa
Fiebig A, Schreiber S, Friedman J, Ketelaars CE, Vos YJ, Ficicio- BB: Increased MECP2 gene copy number as the result of geno-
glu C, Kirkpatrick S, Nicolson R, Sloman L, Summers A, Gibbons mic duplication in neurodevelopmentally delayed males. Genet
CA, Teebi A, Chitayat D, Weksberg R, Thompson A, Vardy C, Med 2006; 8: 784-92.