Professional Documents
Culture Documents
Renacimiento: movimiento comprendido entre los siglos XV (según Hauser, fines del
XII) y XVI en Europa, iniciado más específicamente en Italia. Durante el mismo se
conforma la nueva clase social conocida como burguesía, surgen nuevas ciudades como
asentamientos y el racionalismo, con la aplicación de metodologías científicas,
antropocentrismo, heliocentrismo y naturalismo. Esta etapa se caracteriza en cuanto al
arte por un acercamiento a los preceptos clásicos grecolatinos, tanto en contenido (temas
mitológicos, por ejemplo) como en forma (equilibro, claridad, belleza). El público de este
arte estaba conformado por los ciudadanos burgueses y la nobleza; las obras se realizaban
por encargo de estas figuras y eran apreciadas por una minoría culta que apadrinaba a los
artistas y se convertía en su mecenas. En la Península, es discutido si el movimiento
alguna vez tuvo lugar; Bell sostiene que se comenzó a dar en España desde el 1520, y
Casalduero propone que los valores más importantes para la literatura española en esta
época son simetría, sencillez, equilibrio e idealización. Algunos de sus tópicos son:
tempus fugit, carpe diem, memento mori (todos relacionados con la velocidad de la vida
y fugacidad de la bellez/juventud), ubi sunt (dónde están), entre otros.
Manierismo: estilo europeo dado entre los años 1520 y 1600, principalmente relacionado
con la pintura. Consistía más que nada en el alargamiento de las figuras y la generación
de “bellas maneras”, contrapuestas a las reglas impuestas, novedosas, orientadas a generar
impacto/sorpresa. Se puede dividir en primer manierismo (riqueza de colores, contrastes
lumínicos, Rafael y Miguen Ángel como exponentes) y anti-manierismo (vuelta a ideales
renacentistas).
Barroco: movimiento posterior al Renacimiento que señala el inicio de una nueva crisis,
donde la estética es utilizada como forma de evasión; primacía de la forma, el “cómo”
antes que el “qué”. Surge de un vocablo de origen portugués (Barrôco) y tiene una
connotación negativa/despectiva asociada a lo grotesco y altamente ornamentado. Se
caracteriza por el uso de un lenguaje aristocratizante, grandilocuente, recargado de figuras
retóricas para dificultar la lectura y delimitar el público (alusión y elisión relacionadas
con la mitología, obras comprendidas únicamente por lectores cultos). Su etapa temprana
se da de 1570/80 a 1610/30 (manierismo barroco), la segunda de 1610 a 1630/80 (Barroco
maduro) y la última de 1630/80 a 1750 (barroquismo). Las figuras que predominan son
las ya mencionadas alusiones y elisiones, antítesis, hipérbole, hipérbaton o frase
latinizante, metáforas, entre otras.
EL PRÍNCIPE – MAQUIAVELO: proposición de una nueva ética, exclusiva de la
política, alejada de la moralina cristiana: lo que es malo, sigue siendo malo, pero no será
dañino en tanto pueda ser justificado (“el fin justifica los medios”). Los gobernantes
debían aspirar a la gloria, a la perdurabilidad de sus principados, saber discernir entre el
bien y el mal y cuándo utilizarlos - gracias a la sabiduría y la prudencia -, ser temidos
antes que amados, entre otras. La sabiduría y la prudencia son ofrecidos en la obra
mediante razonamientos inductivos, recabados de ejemplos de monarcas del pasado
(concepción empírica del conocimiento). No se termina de entender si Maquiavelo pensó
su obra como un instructivo para el ejercicio de los principados o como una crítica hacia
los ideales políticos imperantes.
GÓNGORA:
Barroco. Culteranismo. Los recursos expresivos más utilizados por el autor para eludir la
representación directa de la realidad son: la alusión y perífrasis, estableciendo un sistema
fijo de referencias y esquivando una palabra a un concepto (recursos relacionados con lo
mitológico); la elusión, evocando la realidad al tratar de esconder un término y la frase
latinizante, pensada para trastocar el orden de las palabras y complejizar la lectura. La
metáfora aparece estrechamente ligada a lo hiperbólico, de manera que los
desplazamientos semánticos que se realizan siempre tienden a la exageración (como
comparar a Polifemo con un monte). En el Barroco, el arte estaba pensado/orientado hacia
una minoría, he aquí que los poemas estén tan altamente ornamentados y que haya
alusiones a la mitología difíciles de descifrar superficialmente. EPIFONEMA:
exclamación al cerrar una idea. Las obras de Góngora, según Dámaso, tienen una
distribución temática que recuerda a una sinfonía, he aquí la musicalidad de las mismas.
En la Fábula de Polifemo y Galatea, se ve también la dualidad de los personajes (el cíclope
es temible pero enternecido por su amor a Galatea) y el amor asociado con la belleza (las
intenciones que Galatea corresponde son las de Acis, cuyo amor la equipara en atractivo,
y no el querer monstruoso de Polifemo).
GARCILASO:
Égloga III: está constituida por 47 octavas reales, endecasílabos. TÓPICOS: descriptio
puellae, ubi sunt, carpe diem.
Inicia con una invocación a María y descripción del paisaje (locus amoenus): 15
estrofas (puede que se refiera a la esposa del virrey de Nápoles).
La segunda parte, de 23 estrofas, narra el episodio/escenario de cuatro ninfas que
bordan un lienzo. Las ninfas son Filódose (historia de Orfeo y Eurídice), la segunda es
Dinámene (Apolo y Dafne), la tercera es Climene (Adonis y Venus) y la última es Nise
(Elisa y Nemoroso, historia “contemporánea”, intertextualidad).
La tercera parte concluye con las historias anteriores, e inicia el canto Amebeo
alternado (dialógico, pero sin retroalimentación) de Tirreno y Alsino.
La cuarta parte es intercambio entre los últimos dos personajes, que explican sus
desventuras amorosas (Tirreno con Flerida y Alsino con Filis).
Conclusión: estrofa 47.
Endecasílabo sáfico: acentos en 4.ª, 8.ª y 10.ª o 4a, 6a y 10ma Baja intensidad,
lento, reposado.