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CAPÍTULO

Síndromes frecuentes

Varios cuadros clínicos de la patología Es la primera causa de hospitalización de los


respiratoria o pulmonar se pueden considerar niños en unidades de cuidado intensivo, y aún
síndromes, en la medida que se presentan como más, es la primera causa de muerte en ellas.
conjuntos de síntomas y signos. En muchas Las explicaciones sobre la fisiología pulmo‑
ocasiones, el diagnóstico sindromático es válido, nar sobrepasan el propósito de este trabajo, pero
pero incompleto, y se debe procurar complemen‑ es indispensable comprender todas las etapas
tarlo con el topográfico y etiológico. Algunos de de la respiración para entender e interpretar
estos síndromes están imbricados por completo adecuadamente los elementos patológicos que
(por ejemplo neumopatía crónica y obstrucción componen este síndrome.
de las vías aéreas), pero quizás sea práctico Sus manifestaciones son esencialmente res‑
presentarlos en forma independiente y sintética, piratorias, generales, cardiacas y neurológicas.
para llegar a una interpretación más integral de •• Las respiratorias son: taquipnea, polipnea o
las situaciones clínicas y del impacto que oca‑ bradipnea, cianosis, irregularidad del ciclo
sionan en la salud del niño. En este capítulo se inspiratorio/espiratorio en su profundidad
revisan tres de los síndromes más importantes y o frecuencia, retracciones (en especial
frecuentes de la patología respiratoria infantil. subcostales), uso de músculos accesorios,
aleteo nasal, quejido, pujo o jadeo, disnea
y apnea y disminución o ausencia de ruidos
respiratorios (figuras 4.1, 4.2).
Síndrome de dificultad o •• Generales: fatiga y sudoración, signos de
insuficiencia respiratoria choque: hipotensión, disminución de la
perfusión y palidez.
Es un complejo sintomático resultante de
•• Cardiacas: taquicardia, hipertensión o hipo‑
tensión, bradicardia y paro.
la incapacidad del organismo de captar •• Neurológicas: se deben a hipoxia cerebral
oxígeno y eliminar dióxido de carbono. y suelen ser cefalea, irritabilidad, depre‑
Puede afectar cualquiera de las tres fases sión, confusión, papiledema, convulsiones
de la respiración: ventilación, perfusión y coma.
y difusión, así como la relación ventila‑
ción‑perfusión. El complejo clínico que constituye la dificul‑
tad o insuficiencia respiratoria plantea al médico

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60 El Diagnóstico clínico en Neumología pediátrica

La dificultad o insuficiencia respiratoria


puede ser aguda o crónica:
•• Aguda:
ww En el recién nacido: atresia de coanas,
obstrucción nasal por sangre o secrecio‑
nes del canal del parto, taquipnea transito‑
ria, prematurez, membrana hialina, hernia
diafragmática, neumonía.
ww En lactantes: broncoaspiración, larin‑
gitis, neumonía, bronquiolitis, cuerpos
extraños.
ww Preescolares y escolares: neumonía, larin‑
gitis, epiglotitis, cuerpos extraños, etc.
ww Adolescentes: intoxicaciones, asma, cuer‑
pos extraños, etc.
•• Crónica: Insuficiencia renal, fibrosis pulmo‑
Figura 4.1   Lactante mayor con severo tiraje o retracción nar, lesiones intersticiales, etc.
subcostal como manifestación de insuficiencia respiratoria,
ocasionada por neumonía grave.
Sus causas son múltiples y las clasificaciones
son igualmente numerosas. Una forma práctica
un verdadero desafío para el diagnóstico, porque de hacer un abordaje inicial es determinar en
el universo de patologías que posiblemente lo cuál área del aparato respiratorio se origina la
provocan es infinito, las nosologías son diversas, dificultad o insuficiencia, por tanto, son:
las etiologías son múltiples y, en cambio, las •• De vías altas: obstrucción nasal del recién
manifestaciones clínicas son limitadas, por lo nacido o lactante menor, atresia de coanas,
cual se requiere tener muy en cuenta los datos epiglotitis, laringitis, laringomalacia, cuer‑
epidemiológicos, los factores de riesgo, la fisio‑ pos extraños.
patología y las características de cada persona. •• Bajas: traqueítis, cuerpos extraños, traqueo
o broncomalacia y broncoaspiración.
•• Parénquima pulmonar: en el intersticio, neu‑
monitis viral, edema pulmonar y taquipnea
transitoria; en los alvéolos, edema o hemo‑
rragia, neumonía y broncoaspiración.
•• Caja torácica y músculos: distrofia torácica
asfixiante (enfermedad de Jeune, rara entidad
en la cual el niño y sus requerimientos van
creciendo, pero no su caja torácica, hasta
cuando entra en insuficiencia respiratoria en
pocos días o semanas) y anomalías neuro‑
musculares como poliomielitis y Síndrome
de Guillain‑Barré. No se debe olvidar que
después de una cirugía torácica o abdominal
el niño puede quedar con cierta restricción
de los movimientos torácicos (habitualmente
puede perder hasta el 20% de su funciona‑
lidad por un largo periodo, sólo por el acto
quirúrgico); hay que tener especial cuidado en
evitar cualquier tipo de vendaje, apósito o ves‑
timenta que restrinja la función respiratoria o
la motilidad abdominal, dada la importancia
Figura 4.2   Niño de 9 meses de edad con retracción del diafragma como músculo respiratorio.
subxifoidea por insuficiencia respiratoria alta, debido a •• Vascular: tromboembolismo pulmonar,
laringitis intensa. estado de choque.

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Síndromes frecuentes 61

Otra forma de clasificar la dificultad o in‑ cias que puede tener para la perfusión del niño,
suficiencia respiratoria es determinando si su se impone cerciorarse siempre de la eficiencia de
origen es respiratorio, en el cual pueden verse la circulación colateral del miembro utilizado;
afectadas una, dos o las tres fases de la respira‑ toda manipulación para extraer sangre arterial
ción (ventilación, difusión o perfusión) y sucede debe ser realizada por personal entrenado especí‑
en cualquiera de las entidades que afectan di‑ ficamente, pues no es fácil hacerlo en los niños,
rectamente las estructuras respiratorias. El otro especialmente si son pequeños.
origen puede ser no respiratorio, y obedece a la Aunque detallar el equilibrio ácido-básico
afectación de una estructura no respiratoria, pero sobrepase la intención de este escrito, es bueno
que incide directamente en ella; por ejemplo, en recordar que los datos fundamentales obteni‑
los trastornos neurológicos por intoxicación, dos en los resultados de la valoración de gases
anestesia o traumatismo. son:
Una buena cantidad de afecciones respi‑ •• PaO2: indica el estado de oxigenación de la
ratorias cursan de manera combinada; no son sangre. En Bogotá (FiO2 de 21%) es normal
aisladas, sino que afectan uno o más sistemas o entre 60 y 65 mmHg. A nivel del mar está
partes anatómicas, o más de un compartimento. entre 90 y 100 mmHg.
Por ejemplo, un prematuro tiene un sistema •• PaCO2: refleja la concentración del ácido
nervioso inmaduro, al igual que sus pulmones; carbónico (H2CO3) sanguíneo y, por tanto,
la broncoaspiración o la membrana hialina detecta el componente respiratorio del equi‑
pueden afectar las vías aéreas y los alvéolos; las librio ácido-básico (es decir, la eficiencia o
neumonitis virales afectan las vías aéreas y el normalidad de la ventilación). Normal: de 30
intersticio pulmonar, es decir, en un niño dado a 35 mmHg a la altura de Bogotá y 40 mmHg
es frecuente que se presenten como bronquiolitis a nivel del mar.
más neumonitis. El síndrome de insuficiencia •• pH: corresponde a la concentración de hidro‑
respiratoria progresiva suele afectar todos los geniones en la sangre; normalmente su valor
componentes pulmonares de la respiración. es de 7,35 a 7,45.
La condición esencial en el transcurso de •• Datos de bicarbonato (HCO3, principal
la dificultad o la insuficiencia respiratoria es, amortiguador [buffer] del organismo, o
por definición, que se produzca hipoxemia, componente metabólico del equilibrio
hipercapnia o ambas. Los signos de la hipoxe‑ ácido-básico, normalmente de 22  mEq/l a
mia pueden ser tan leves o moderados, que el 26 mEq/l): se obtienen indirectamente con
examinador no se percate de ellos, por lo que los resultados de la PaCO2 y del pH por
es necesario un alto grado de sospecha ante los medio del nomograma de Siggaard-Ander‑
factores de riesgo capaces de desencadenar la sen, al igual que la base exceso (normal: más
situación de insuficiencia. Si bien la cianosis de 26 mEq/l) o el déficit de base (normal:
es un síntoma y signo cardinal de la hipoxia, menos de 22 mEq/l).
es necesario recordar que su aparición depende •• El análisis de la PaCO2 (componente res‑
del grado de perfusión de los tejidos, de la tem‑ piratorio) informará sobre la presencia de
peratura corporal, de la cantidad de hemoglo- acidosis respiratoria o metabólica, primarias
bina y su eficiencia como transportador, etc.; (iniciales) o secundarias (compensadoras),
además, para que la cianosis se haga patente según el pH.
debe haber como mínimo 5 g de hemoglobina •• El análisis del HCO3 (componente meta‑
desaturados. bólico) indicará la presencia de acidosis o
Así como los exámenes de laboratorio, las ra‑ alcalosis metabólica, primaria (inicial) o
diografías de tórax, el electrocardiograma (ECG) secundaria (compensadora), según el pH.
y otros estudios pueden ser de gran apoyo para •• Los hallazgos gasométricos habituales son:
el diagnóstico de la dificultad o insuficiencia hipoxemia (aguda o crónica), hipercapnia
respiratoria, la valoración mediante los gases (aguda o crónica) y acidosis (respiratoria o
arteriales es trascendental para conocer el grado metabólica).
real y la evolución de la afectación pulmonar y
del equilibrio ácido-básico. En términos muy Otros exámenes que pueden ser de apoyo
generales, recordemos que es indispensable una en la valoración de un niño con insuficiencia
buena toma de muestra y que, por las consecuen‑ respiratoria son: cuadro hemático, electrolitos

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en suero, parcial de orina, glucemia y pruebas Las obstrucciones altas de cualquier origen
de función renal. son causantes en muchos casos de apneas y de
Los pacientes que están en estado crítico ALTE (sigla inglesa de episodio de aparente
deben ser monitoreados con frecuencia, clínica‑ amenaza a la vida).
mente (ojalá con registro continuo de frecuencia Las causas más frecuentes de obstrucción
cardiaca, frecuencia respiratoria, tensión arterial, son: rinitis, pólipos, desviación del tabique,
temperatura, electrocardiograma y saturación hipertrofia de cornetes, estenosis de las coanas,
de O2). micrognatia, macroglosia (hipotiroidismo, sín‑
drome de Pierre Robin), hipertrofia de amígdalas
o de adenoides, granulaciones de la faringe,
papilomatosis laríngea, laringomalacia, compre‑
Síndrome de obstrucción sión extrínseca por masas, estenosis subglótica
de las vías aéreas superiores o cuerpos extraños en fosas nasales, laringe o
esófago (porción superior).
La obstrucción aguda parcial de porciones Los síntomas de las alteraciones de esta área,
del aparato respiratorio superior es muy frecuen‑ corresponden al órgano afectado:
te y casi siempre es ocasionada por procesos in‑ •• Nariz:  rinorrea, prurito nasal, lagrimeo.
fecciosos autolimitados, como la rinofaringitis, •• Faringe:  dolor, sensación de escurrimiento
que ocasiona en el niño síntomas muy evidentes posterior, carraspeo, halitosis.
–molestos, pero casi nunca peligrosos–. •• Laringe:  disfonía, afonía, estridor.
Las rinitis son frecuentes en los niños, y
El síndrome obstructivo de las vías aéreas la predominante es la causada por una infec‑
puede llegar a ser muy severo cuando se ción viral que sucede en el contexto de un
disminuye su diámetro, como los casos de cuadro de resfriado común, pues éste es una
aspiración de cuerpo extraño laríngeo o rinofaringitis viral aguda que se manifiesta por
epiglotitis, pues su presentación es dra‑ rinorrea hialina, mucosa o mucopurulenta. La
mática y de alto riesgo vital; requieren presencia de material purulento no implica
acción inmediata por parte del médico para una infección agregada; este aspecto da cuenta
conservar la vida del niño y evitar graves de la destrucción de células inflamatorias que
secuelas. están interviniendo en el proceso. Otros sínto‑
mas son el prurito, los estornudos, el lagrimeo
Ante cualquier patología respiratoria es y la obstrucción nasal; entre los signos más
necesario valorar la participación en ella de las importantes al hacer una rinoscopia están la
alteraciones de la vía aérea superior, por su gran secreción, la obstrucción y el enrojecimiento
frecuencia y sus implicaciones en la infancia. de la mucosa, la cual se observa muy edema‑
Aunque no constituye una enfermedad, tosa y eritematosa, y también puede haber
la obstrucción alta en su forma crónica es un agrandamiento de los cornetes. Las rinitis
complejo clínico que en la práctica puede tener bacterianas son más raras en los niños que en
una vía común de expresión, y eventualmente no los adultos.
sólo produce en el niño molestias locales, sino La rinitis alérgica es una inflamación de la
también repercusiones importantes en la función mucosa del conducto nasal causado por alergia
respiratoria en las vías inferiores, el parénquima a diferentes antígenos (polvo casero, ácaros,
y la vasculatura, sobre todo si la obstrucción alta plumas, esporas de hongos, mascotas, pólenes,
es prolongada: por ejemplo, un paciente con una caspa, saliva de animales, etc.), por irritantes o
obstrucción sostenida de la nariz (normalmente por cambios térmicos o climáticos. Se presenta
el niño es respirador nasal) puede cursar con congestión nasal, obstrucción, estornudos (espe‑
aumento del trabajo respiratorio y con hipoxia, cialmente en salvas), sensación de oídos tapados
lo cual termina en hipertensión pulmonar. Por y prurito nasal, ocular, palatino y faríngeo. Al
otra parte, con frecuencia la patología alta se efectuar el examen se comprueba la existencia de
considera acompañante o desencadenante de la obstrucción, de secreción hialina o de moco;
alteraciones periféricas, por ejemplo rinitis la mucosa, aunque edematosa, suele ser pálida
alérgica o pólipos nasales con asma. o con parches.

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Síndromes frecuentes 63

Las rinitis también pueden ser originadas motivo de consulta es la tos; también puede ser
por cambios en la humedad y temperatura del que está “crónicamente con gripa”, “vive moco‑
ambiente (aire muy frío o muy seco), exposición so” o “siempre le suena el pecho”, según refieren
al cigarrillo o a vapores y olores de gasolina, las mamás. Este cuadro, que es muy frecuente
desinfectantes (cloro), pinturas, perfumes, di‑ en la infancia, a veces se presenta no sólo con
solventes (en especial los alifáticos), aguarrás, manifestaciones clínicas algo vagas, sino con
insecticidas, ambientadores; contaminación imprecisiones en el tiempo de aparición y en la
ambiental, humos de leña o pólvora, y en las forma de evolución. Por lo anterior, a muchos
adolescentes, por uso de anticonceptivos o por de estos niños no se les realiza un diagnóstico
estado de gestación. oportuno y certero y comienzan a peregrinar
Los pólipos nasales son formaciones pro‑ de un médico a otro buscando que alguno de‑
tuberantes de la mucosa nasal que, además, se fina su situación y les indique un tratamiento
encuentra edematizada y congestionada. Estos adecuado.
pólipos pueden llegar a obstruir la cavidad nasal; Compete al clínico abordar este tema y tratar
se asocian a fibrosis quística, estados alérgicos de llegar a un diagnóstico certero en un tiempo
crónicos y asma, en especial la asociada con prudencial, para poder brindar una auténtica
aspirina. atención integral al niño. Establecer un diag‑
Los cuerpos extraños en las cavidades nasa‑ nóstico acertado es un verdadero reto.
les de los niños son extremadamente frecuentes
y pueden ser de naturaleza vegetal (semillas,
algodones), mineral (piezas de juguetes, fichas De acuerdo con las definiciones y clasifica‑
o tapas de plástico), grasosa (leche, aceites, ciones propuestas en el Instituto Nacional
petrolatos volátiles mentolados de frecuente de Pediatría de México por LF Pérez Fer‑
uso popular, como el Vick VapoRub®) o animal nández, aplicadas en múltiples sitios de
(hormigas, mosquitos y otros insectos). Ante América Latina, el síndrome de neumopatía
una obstrucción siempre debe sospecharse este crónica es un conjunto de síntomas y signos
diagnóstico, en especial si la secreción es de respiratorios que se presentan durante más
predominio unilateral o si tiene mal olor. Bajo de tres meses continuos y con más de seis
observación puede aplicarse una gota de algún episodios por año.
vasoconstrictor en cada fosa nasal (no se debe
olvidar que tiene un efecto de rebote muy incon‑ En un niño menor de tres meses, si la evo‑
veniente), a fin de observar mejor si en realidad se lución de su sintomatología es prolongada,
trata de un cuerpo extraño, de un gran edema de aunque no cumpla estrictamente el período de
la mucosa o de un cornete muy hipertrofiado. tres meses, puede asumirse que se trata de un
A todo niño que presente un cuadro obs‑ neumópata crónico. Tratándose de edades muy
tructivo alto se le debe realizar una cuidadosa cortas, puede significar que la mayor parte de su
rinoscopia para evaluar el estado de las diferen‑ vida ha estado enfermo (por ejemplo, un niño de
tes estructuras y apreciar la posibilidad de des‑ dos meses de edad que tosa y presente cianosis
viación del tabique, hipertrofia de los cornetes, cuando se está alimentando es un enfermo con
cuerpos extraños, pólipos, etc. patología crónica, en términos de su edad, y lo
Los cuadros más severos de obstrucción de más probable es que tenga una alteración de su
la vía aérea superior, especialmente los agudos y deglución).
súbitos, causados por cuerpos extraños o epiglo‑ El otro aspecto que se debe tener en cuenta
titis, se revisan con mayor detalle en el Capítulo es que cuando se habla de más de seis episo‑
V (“Hallazgos en enfermedades específicas”). dios de síntomas respiratorios por año, éstos
deben ser de cierta envergadura clínica, por lo
cual se exceptúan los cuadros autolimitados y
leves de resfriado común, de los cuales un niño
Síndrome de neumopatía presenta normalmente de siete a diez episodios
crónica por año.
Es clave entender que este es un diagnóstico
Es muy común encontrar niños con sinto‑ provisional y que es preciso definirlo con clari‑
matología respiratoria crónica cuyo principal dad. Se propone, entonces, aplicar una guía de

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trabajo que nos vaya orientando hasta precisar la ww Diafragma: eventración, hernias de Boch‑
causa de los síntomas respiratorios crónicos. daleck y Morgagni.
Las causas o grupos de enfermedades que se ww Vasculatura: hipoplasia o agenesia de las
manifiestan como neumopatía crónica son muy arterias pulmonares.
diversas y pueden clasificarse así: ww Lobulación: lóbulos supernumerarios,
•• Infecciosas carencia de lóbulos.
•• Inflamatorias reactivas (asma y asociacio‑ ww Quística: bronquiales, broncoentéricos y
nes) entéricos; malformación adenomatoide
•• Broncoaspirativas quística, secuestros pulmonares.
•• Congénitas
•• Cardiopatías
•• Síndrome obstructivo de la vías aéreas supe‑ Cardiopatías
riores (SOVAS)
•• Infección respiratoria a repetición Las alteraciones cardiacas que repercuten
•• Sistémicas en el aparato respiratorio ocasionando sínto‑
•• Intersticiales mas crónicos son aquellas cuyos componentes
•• Ambientales fisiopatogénicos de aumento de flujo, aumento
•• Iatrogénicas de presión y estasis sanguínea alteran la hemodi‑
namia pulmonar, como son las comunicaciones
interauriculares o interventriculares, la coarta‑
Infecciosas ción aórtica, etc.

Las causas infecciosas son: secuelas post‑


infecciosas virales y bacterianas o infecciones Síndrome de obstrucción
crónicas per se (tuberculosis, sida, neumonía por de las vías superiores (SOVAS)
Pneumocystis jirovecii), hongos y parásitos.
Este grupo incluye: desviación del tabique
nasal; pólipos nasales; hipertrofia de los corne‑
Inflamatorias reactivas tes, de las amígdalas y de las adenoides; cuerpos
extraños, y la papilomatosis laríngea. Estas
Las principales entidades inflamatorias reac‑ patologías –tan frecuentes en pediatría– pueden
tivas son: asma, rinitis, sinusitis y otitis. desencadenar cuadros de máxima severidad, como
la apnea del sueño y la hipertensión pulmonar.

Broncoaspirativas
Cuadros supurativos
En este grupo las más frecuentes son: enfer‑ e infecciones a repetición
medad por reflujo gastroesofágico, alteraciones
del mecanismo de la deglución, anillos vascu‑ Se producen por defectos anatómicos (este‑
lares, fístulas traqueoesofágicas, compresiones nosis, malacias y disquinesias; dilataciones con‑
y estenosis esofágica congénitas o adquiridas, génitas o adquiridas, como las bronquiectasias),
espasmo del cricofaríngeo, ectopia de restos ciliares (disquinesias congénitas, síndrome de
embrionarios. Kartagener, exposición al humo de cigarrillo),
espesamiento anormal del moco (fibrosis quís‑
tica), defectos inmunológicos (congénitos o
Congénitas adquiridos), secuelas postinfecciosas y cuerpo
extraño (figuras 4.3, 4.4, 4.5, 4.6).
Hay varios tipos:
•• Moleculares: fibrosis quística, deficiencia
a1‑antitripsina. Enfermedades sistémicas
•• De los componentes tisulares o celulares. con componente respiratorio
•• Malformativas de:
ww Caja torácica: pectus carinatum, pectus Miliares (tuberculosis, histoplasmosis),
excavatum. neuromusculares (síndrome de Guillain‑Barré),

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Síndromes frecuentes 65

Figura 4.3   Niño de 5 años de edad hospitalizado por


neumonía de la língula y del lóbulo inferior izquierdo. Tenía
antecedentes de otro episodio similar en la misma localización,
tres meses antes.

Figura 4.5   Imagen lateral del tórax que demuestra la


afectación del lóbulo inferior con dilataciones bronquiales.
Ante la sospecha de cuerpo extraño se le practicó al paciente
una broncoscopia, extrayendo del bronquio inferior izquierdo
restos de alimento en descomposición.

•• Por exposición: a tóxicos, herbicidas cua‑


ternarios (como el Paraquat®), defoliantes y
diferentes formas de neumoconiosis.
•• Proliferativas.
•• Descamativas.
•• Ambientales.
Figura 4.4  Una vez tratada la neumonía, se observó, en la •• Por exposición al humo de cigarrillo: asma,
placa de control, atelectasia residual e imágenes aéreas de neumonitis alérgica extrínseca.
dilatación bronquial en el lóbulo inferior izquierdo, compatibles •• Por exposición a sustancias inertes: neumo‑
con bronquiectasias. coniosis, tóxicos, polvos.
(Figuras 4.7, 4.8, 4.9).

inmunodeficiencias (congénitas o adquiridas,


como el sida), inmunológicas (vasculitis, sar‑ Iatrogénicas
coidosis), neoplasias (metástasis de tumor de
Wilms), vasculares (hipertensión pulmonar), •• Postintubación.
renales (síndrome de Goodpasture), metabólicas •• Por toxicidad del oxígeno: displasia bron‑
(infecciones respiratorias en diabetes). coalveolar.
•• Medicamentos: ácido salicílico, esteroides,
agentes quimioterápicos, bloqueadores
Intersticiales beta.
•• Irradiación.
Infecciosas: sida, tuberculosis miliar, mi‑ •• Estados posventilación y posreanimación.
cosis.
•• Postinfecciosas: secuelas diversas de bron‑ El diagnóstico preciso en las neumopatías
quiolitis y neumonitis (por ejemplo, fibrosis crónicas sólo se logra mediante una juiciosa
posterior a neumonitis por adenovirus). realización de la historia clínica, la cual debe

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66 El Diagnóstico clínico en Neumología pediátrica

Figura 4.6   Algunos cortes de TAC demuestran la atelectasia y las bronquiectasias


del lóbulo inferior izquierdo.

incluir: marco epidemiológico; datos perinatoló‑ que, si bien son inespecíficos, pueden orientar
gicos: embarazo, parto; adaptación, recién naci‑ hacia una enfermedad dada.
do; vacunas, alimentación, hábitos; antecedentes Las pruebas que pueden ser de ayuda por
personales y familiares, motivo de consulta, grupo, son:
anamnesis y examen físico. Es indispensable •• Infecciosas: detección del germen, bacilo
precisar el cuadro clínico predominante y en de Koch (BK), hongos, parásitos, virus de
concordancia plantear una estrategia de estudio inmunodeficiencia humana (VIH). De las
que permita llegar a un diagnóstico adecuado. postinfecciosas es muy difícil contar con
Los estudios preliminares que ayudan a un examen que determine con precisión el
ubicar la posible lesión y el grado de afectación origen de la lesión y los datos más valiosos
son: radiografía de tórax, derivado proteico son, naturalmente, los que aporta la historia
purificado (PPD), saturación de oxígeno, gases clínica.
arteriales y las pruebas de función respiratoria
(PFR). Algunos exámenes básicos sirven como
apoyo diagnóstico; por ejemplo, el cuadro he‑
mático, los coprológicos y la medición de IgE

Figura 4.7   Niño de 3 años de edad con histiocitosis


pulmonar. En los RX se observa extensa fibrosis pulmonar con Figura 4.8   Imagen lateral del mismo niño en la que se
áreas de hiperinsuflación y formación de lesiones quísticas. observan a los trayectos fibrosos y la herniación pulmonar a
través del mediastino anterior y superior.

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Síndromes frecuentes 67

la suplencia vascular por una arteria


sistémica a la lesión (generalmente en
la base izquierda), con una resonancia
magnética o, si es indispensable, con una
arteriografía.
•• Cardiopatías: ECG, ecocardiograma,
Doppler o una arteriografía, dependiendo
del tipo de alteración.
•• SOVAS: están indicadas la rinoscopia, Rx de
senos paranasales (SPN), cavum faríngeo,
video de función faríngea y endoscopia.
•• Supuración o infecciones respiratorias
repetitivas: dependiendo del tipo de altera‑
Figura 4.9   Niño de 10 años de edad con metástasis
ción, se podrá realizar iontoforesis, estudio
pulmonares múltiples de carcinoma de testículo.
ciliar o tomografía axial computarizada
(TAC).
•• Inflamatorias reactivas: cuadro hemático, •• Sistémicas: depende de la enfermedad de
IgE, eosinófilos en moco nasal y coproló‑ base o acompañante.
gicos. •• Intersticiales: depende de la enfermedad
•• Broncoaspirativas: estudio de mecanismo sospechosa de estar ocasionando la pato‑
de la deglución, vías digestivas altas, gam‑ logía respiratoria. Para clasificar y valorar
magrafía para reflujo, endoscopia o biopsia el estadio de la lesión se debe realizar un
y si se cuenta con los recursos, manometría lavado broncoalveolar, biopsia a cielo abierto
y pHmetría. o ambos procedimientos.
•• Congénitas: •• Ambientales: la historia clínica es la prepon‑
ww Moleculares: fibrosis quística, iontofo‑ derante para hacer el diagnóstico; en algunos
resis; defecto de a1-antitripsina, medir casos específicos, como en la alveolitis o
la enzima. la neumonitis alérgica extrínseca, se puede
ww Inmunodeficiencias: perfil inmunoló‑ hacer medición de anticuerpos contra antí‑
gico. geno de paloma.
ww Alteración ciliar: motilidad y microscopía •• Iatrogénicas: la historia clínica es la clave
electrónica para observar la estructura de diagnóstica, como en las anteriores, pero
las cilias. hay situaciones en las que un estudio puede
ww De tipo malformativo y quísticas: depen‑ ayudar a aclarar el diagnóstico; por ejemplo,
de de la lesión; por ejemplo, en el en un niño con un estridor postintubación es
secuestro pulmonar se debe demostrar posible demostrar una estenosis laríngea.

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