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Las Legalidades Anticonstitucionales:

“Por encima de la ley es lo político (…) cuando algún jurista me dice: Evo, te estás
equivocando jurídicamente, eso que estás haciendo es ilegal, bueno, yo le meto por más
que sea ilegal. Después les digo a los abogados: si es ilegal, legalicen ustedes. ¿Para qué
han estudiado?”(Evo Morales, Presidente de Bolivia, 29 de julio de 2008, en un discurso
pronunciado en Cochabamba).
No es necesario ser la persona más intelectual para advertir que en un país con tanto
potencial como Venezuela lamentablemente se vive una situación social y política que
cumple al pie de la letra la antes mencionada cita, como si hubiese sido expresada por su
propio Jefe de Estado, ya que son evidentes los constantes atropellos y violaciones hacia la
Carta Magna Venezolana por parte de los mismos individuos que una vez juraron respetarla
y hacerla cumplir.

Sumado a una sociedad decadente, existe un problema más notorio y abrumador aún: la
terrible crisis económica por la que atraviesa el país. Esta se considera producto de la mala
administración del los recursos con los que cuenta la Nación y sobre todo consecuencia de
las acciones anticonstitucionales realizadas con el presupuesto nacional, hábilmente
disfrazadas u ocultadas para hacerlas “legales”. Pero ¿en qué consiste el tan importante
Presupuesto Nacional que afecta la economía de todo un país? ¿Qué establece la
Constitución de República respecto al tema?, pues, bien, es vital tomarse un rato para
tenerlo claro y así comprender las razones por las cuales se ha llegado a un punto tan
deprimente económicamente hablando.

Ahora bien, en términos generales, un presupuesto es un plan de acción expresado en


términos financieros con el fin de cumplir con una meta u objetivo previsto mediante el
cálculo anticipado de los ingresos y gastos durante un determinado periodo de tiempo, lo
cual permite establecer prioridades y evaluar la consecución de los objetivos. Entonces,
aplicándolo al ámbito económico de una Nación, el presupuesto público es la previsión de
los ingresos necesarios para cubrir los gastos públicos correspondientes a un ejercicio
económico, el cual tiene la duración de un año; si al término de éste los ingresos superan
los gastos, se habla de superávit presupuestario, pero si por el contrario, los gastos son
mayores que los ingresos, se está ante lo que se denomina déficit presupuestario.
En Venezuela, esa estimación de recursos y a qué serán destinados, queda plasmada en
un documento llamado Ley de Presupuesto que esta conformado por el presupuesto de
ingreso, el presupuesto de gasto y la distribución interinstitucional del gasto. Cabe destacar
que el ingreso público venezolano proviene principalmente de los tributos (impuestos, tasas
y contribuciones especiales) dados por los ciudadanos en cumplimiento del artículo 133 de
la Constitución, acompañados de los ingresos patrimoniales (como la renta petrolera), el
endeudamiento público y la emisión de dinero. De igual manera, es importante aclarar que
el gasto público venezolano está destinado a cubrir proyectos de interés social, así como los
gastos que conlleva la Seguridad Social, provisión de bienes y servicios públicos (como
educación y salud), sostener la inversión y el mantenimiento público, el pago de intereses
de la deuda pública, entre otros.

Sabiendo esto, es posible profundizar en las bases legales que regulan el mencionado
presupuesto, reflejadas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
específicamente en la sección primera del régimen presupuestario, donde establece que la
gestión fiscal debe regirse con principios basados en eficiencia, transparencia y sobre todo
equilibrio para lograr que los ingresos ordinarios sean suficientes para hacer frente a los
gastos ordinarios (artículo 311); en ese mismo artículo, se encuentra claramente estipulado
el deber que tiene el Ejecutivo Nacional de presentar ante la Asamblea Nacional (para fines
de sanción legal) un marco plurianual para la formulación presupuestaria que establezca los
límites de gastos y endeudamiento máximos. Más adelante, en el artículo 312, se reflejan
las condiciones respectivas al endeudamiento público, cuyos límites serán fijados por la ley
teniendo en cuenta la capacidad de generar ingresos del Estado, además de recalcar que las
operaciones de crédito público (exceptuando las establecidas en la ley orgánica) para ser
válidas requieren una Ley Especial, la cual deberá presentarse ante la Asamblea Nacional
en conjunto con la Ley de presupuesto. Con igual claridad, la Carta Magna afirma
textualmente que “El Estado no reconocerá otras obligaciones que las contraídas por
órganos legítimos del Poder Nacional, de acuerdo con la ley” (artículo 312, primer aparte),
así como también la no realización de gastos no previstos en la Ley de Presupuesto y los
únicos parámetros bajos los cuales podrán decretarse créditos adicionales (artículo 314).
Esta vigente Constitución, hace notar que, el Presupuesto Nacional para su vigencia debe
presentarse y autorizarse por la Asamblea Nacional, así como también responde a la
interrogante de lo que ocurriría de no ser presentado o aprobado el Proyecto de Presupuesto
de Ley, y lo hace en el artículo 313, en cuyo encabezamiento dice que “si el Poder
Ejecutivo, por cualquier causa, no hubiese presentado a la Asamblea Nacional el Proyecto
de Ley de Presupuesto dentro del plazo establecido legalmente, o el mismo fuere rechazado
por éste, seguirá vigente el presupuesto del ejercicio fiscal en curso.”

Ahora bien, ese plazo establecido legalmente del que habla el artículo antes citado, está
definido en la Ley Orgánica de Administración Financiera del Sector Público, cuyo artículo
38 expresa que “El proyecto de Ley de Presupuesto será presentado por el Ejecutivo a la
Asamblea Nacional antes del quince (15) de octubre de cada año.” Misma ley que exige al
Poder Ejecutivo a través de su artículo 155 que cada trimestre le informe a la Asamblea
Nacional lo referente a la ejecución de las políticas ya acordadas.

Habiendo estudiado de esta breve manera algunos de los varios textos legales que
teóricamente rigen el amplio ámbito presupuestal, es más sencillo comprender el porqué se
habla de “legalidades anticonstitucionales”, puesto que en la práctica es fuertemente notorio
el incumplimiento del marco legal anteriormente citado, la invisibilidad del deber ser que se
vive actualmente y la mayor prueba de ello es el Presupuesto Nacional para el ejercicio
económico del año 2019, equivalente a 1 billón 529 mil 780 millones de Bolívares
Soberanos, el cual fue presentado por el Gobierno ante la Asamblea Nacional
Constituyente, en lugar de hacerlo ante la el Poder Legislativo como lo establece la
Constitución; presupuesto del cual se destinó el 75,4% a la inversión social. Tristemente no
es la primera que se evidencia un episodio de ilegalidades que se hacen legales por fuerza,
tal parece que se ha hecho costumbre ignorar la ley, ya que para el Presupuesto Nacional
del ejercicio fiscal del año 2018 ocurrió algo muy similar, cuando la cifra de gasto adicional
superó considerablemente al presupuesto programado para ese año, que fue 36,1 billones de
Bolívares Fuertes, el cual también fue presentado a la Asamblea Nacional Constituyente y
cuyos textos no circularon en gaceta, historia que ya se había visto el año anterior cuando el
Ejecutivo Nacional no presentó ante la Asamblea Nacional el proyecto de Ley de
Presupuesto del año fiscal 2017, y en su lugar, de forma inconstitucional recurrió al
Tribunal Supremo de Justicia para que autorizara el hecho de presentar el Presupuesto
Nacional del dicho año por el Presidente Nicolás Maduro ante la Sala Constitucional,
violentando de todas las maneras posibles los artículos 311 y 313 de la Carta Magna.

Después de leer estos ejemplos que contradicen y enmudecen los parámetros y estatutos
consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y demás leyes
pertinentes, es más que claro que el Gobierno operador de Estado se ha encargado de
manipular a su convenir el régimen presupuestario, y a convertir sus hechos no respaldados
por la ley en maquilladas nuevas legalidades, cuya consecuencia es, entre muchas otras, la
deplorable situación económica, política y social que protagoniza el panorama actual
venezolano.

Referencias bibliográficas:

 https://economipedia.com/definiciones/presupuestos-generales-del-estado.html

 https://www.monografias.com/trabajos106/presupuesto-o-gasto-publico-
venezuela/presupuesto-o-gasto-publico-venezuela2.shtml

 http://www.eluniversal.com/economia/23969/gobierno-presenta-presupuesto-2019-
por-bss-153-billones
 http://cronica.uno/lo-que-sabe-hasta-ahora-presupuesto-de-la-nacion-para-2019/
 http://www.el-nacional.com/noticias/politica/jose-guerra-presupuesto-aprueba-
asamblea-nacional-presidente-maduro_3812

 http://www.bancaynegocios.com/el-presupuesto-nacional-de-2019/
 http://www.asambleanacional.gob.ve/actos/_acuerdo-sobre-la-ley-de-presupuesto-y-
de-endeudamiento-para-el-ejercicio-fiscal-2018
 Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (Gaceta Oficial N°5453
extraordinario, 24 de marzo de 2000).

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