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Internacional
Manual para la Ratificación
e Implementación del
Estatuto de Roma
Un Proyecto Conjunto de
Rights and Democracy (nueva versión abreviada para el Centro Internacional para los Derechos
Humanos y el Desarrollo Democrático (ICHRDD) es un instituto canadiense con mandato internacional,
creado por ley en 1988. Trabaja con grupos civiles y gubernamentales en Canadá y en el extranjero con el fin
de promover los derechos humanos y la democracia. El instituto brinda apoyo financiero, político y técnico a
muchos grupos de derechos humanos, grupos de personas indígenas y movimientos democráticos alrededor
del mundo. El Instituto busca cambiar las políticas de las instituciones nacionales e internacionales, y ayuda a
fortalecer a sus similares para que puedan hacer lo mismo. Apoya a las organizaciones no gubernamentales
para que éstas puedan tener un mayor acceso a las instituciones multilaterales y trabaja por los mecanismos de
derechos humanos de las mujeres y por el desarrollo democrático. El Instituto busca aumentar la
sensibilización pública tanto en Canadá como en el extranjero, en aspectos como las violaciones a los
derechos humanos, publicaciones conjuntas, investigaciones, conferencias, misiones de investigación, así
como eventos públicos.
El Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del Delito y el Tratamiento del
Delincuente (ILANUD) tiene su sede en San José de Costa Rica y su mandato cubre los países de América
Latina y el Caribe. Fue establecido mediante acuerdo suscrito entre las Naciones Unidas y el Gobierno de
Costa Rica el 11 de junio de 1975, en cumplimiento de las resoluciones 731-F (XXVII) y 1584(L) del
Consejo Económico y Social. El acuerdo de creación establece que El objetivo principal del Instituto es
colaborar con los gobiernos en el desarrollo económico y social equilibrado de los países latinoamericanos,
mediante la formulación e incorporación en los programas nacionales de desarrollo de políticas e
instrumentos de acción adecuados en el campo de la prevención del delito y la justicia penal. Para lograr su
objetivo el Instituto realiza proyectos que comprenden actividades de investigación, documentación e
información, capacitación, y asistencia técnica.
Corte Penal Internacional
Nos complace compartir esta información e instamos el uso de este documento para
propósitos académicos y de capacitación. Agradecemos que todos los créditos sean
reconocidos al utilizar la información contenida en el documento en todo o en parte. La
reproducción comercial de este documento está prohibida.
Este manual fue traducido del inglés al español por el ILANUD, en San José,
Costa Rica, en febrero del 2001.
Reconocimientos
RECONOCIMIENTOS
Este manual fue realizado por un equipo de investigadores y escritores del International
Centre for Criminal Law Reform and Justice Policy (ICCLR, Centro internacional para la
reforma legal y política de justicia) en Vancouver, y Rights and Democracy (nueva versión
del International Centre for Human Rights and Democratic Development (ICHRDD,
Centro internacional de derechos humanos y desarrollo democrático) en Montreal. Los
colaboradores, en particular, fueron Daniel Préfontaine, Director Ejecutivo del ICCLR,
Warren Allmand, Presidente del ICHRDD, Joanne Lee, asociada al ICCLR, Alexandre
Morin, investigador en el ICHRDD, y Monique Trépanier, coordinadora del programa en el
ICCLR. Otros valiosos colaboradores fueron Valerie Oosterveld del Departamento de
Relaciones Exteriores y Comercio Internacional de Canada (DFAIT), Christian
Champigny, Asistente de Investigación del ICHRDD, y Bill Hartzog, consultor
independiente. La International Criminal Defence Attorneys Association (ICDAA,
Asociación de Defensores Penales Internacionales), brindó apoyo en la asistencia del
abogado defensor.
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Reconocimientos
La presente versión del manual fue preparada por ILANUD (Instituto Latinoamericano de
las Naciones Unidas para la Prevención del Delito y el Tratamiento del Delincuente y
terminado el 1º de marzo del 2001. La traducción completa del inglés al español fue
realizada por Cynthia Chamberlain. La supervisión técnico-jurídica y las notas al pie fueron
realizadas por Eduardo Andrés Bertoni1. También contribuyeron para su versión final para
países latinoamericanos, Hugo Relva, de Amnistía Internacional, Argentina, y Rodrigo
Jiménez, del ILANUD, Costa Rica.
1
La versión original del Manual no contaba con las notas al pie de página que se presentan en esta versión en
español. Su incorporación tiene el único objeto de actualizar algunas cuestiones e incorporar breves
referencias que pueden ser útiles para los países de América Latina. No se ha pretendido pues, hacer una
ampliación acabada del Manual
ii
Prólogo
PROLOGO
El Siglo XX fue testigo de una letanía de deshumanización y de la ilicitud como burla de la
noción de un orden global. En este momento, al comenzar el Siglo XXI, las medidas claves
para aplicar la ley y proteger los derechos humanos alrededor del mundo están al alcance de
todos. Lo que se necesita ahora es la voluntad política para avanzar, ratificar e implementar
las previsiones del Estatuto de Roma por una Corte Penal Internacional, como paso
histórico en la batalla contra la impunidad disfrutada por tanto tiempo por los perpetradores
de tan brutales crímenes. Este Manual busca ofrecer apoyo a esta voluntad, ofreciendo
consejos prácticos a los gobiernos y legisladores sobre cómo alcanzar estos objetivos.
El éxito político de la Conferencia de Roma en julio de 1998 fue solo una victoria parcial;
la corte permanente solo se establecerá cuando por lo menos 60 estados hayan ratificado el
Estatuto de Roma. Se requiere una movilización internacional que asista la ratificación y la
implementación del Estatuto por el mayor número de países posibles, lo más pronto
posible. Cualquier demora podría significar una pérdida de impulso que privaría a la
comunidad internacional de una instrumento fundamental para la defensa de los derechos
humanos y para perseguir y acusar a aquellos responsables por los crímenes más atroces
según el derecho internacional – genocidio, crímenes en contra de la humanidad y crímenes
de guerra.
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Resumen Ejecutivo
RESUMEN EJECUTIVO
1. INTRODUCCIÓN
1.1 Aspectos Generales de la Corte Penal Internacional
Esta sección del Manual prevé una introducción a las características principales de la
planteada Corte Penal Internacional (CPI). Describe cómo el Estatuto de esta Corte fue
finalizado en Roma, en julio de 1998 (Estatuto de Roma), representando la culminación
de 50 años de trabajo para crear una institución permanente para enjuiciar a aquéllos
acusados de los crímenes más serios de relevancia para la comunidad internacional en
su conjunto. El Estatuto entrará en vigor en el primer día del mes posterior al 60º día
siguiente a la fecha de deposito del 60º instrumento de ratificación.
Esta sección explica como la CPI será complementaria a las jurisdicciones nacionales y
como tiene el potencial para impedir y castigar el genocidio, los crímenes de lesa
humanidad, los crímenes de guerra y la agresión. Sin embargo, la CPI solo ejercerá su
jurisdicción sobre el genocidio, los crímenes de lesa humanidad y los crímenes de
guerra que hayan sido cometidos después de la entrada en vigencia del Estatuto, y la
Corte solo tendrá jurisdicción sobre el crimen de agresión cuando una definición
adecuada sea elaborada por los Estados Partes.
La Corte estará dirigida por una Asamblea de los Estados Partes, representada por
todos los Estados Partes. Además, cualquier Estado que haya firmado el Estatuto de
Roma o el Acta Final de la Conferencia de Roma podrá contar con un status de
observador en la Asamblea. Los Estados que no hayan firmado el Acta Final y que no
hayan firmado el Estatuto de Roma deberán tomar en cuenta que el Estatuto de Roma
estará abierto para firmas hasta el 31 de Diciembre del 2000. Después de esta fecha,
tales Estados no podrán participar en la Asamblea de Estados partes a no ser que firmen
y/o ratifiquen el Estatuto en el ínterin.
La Asamblea de los Estados Partes elegirá a los magistrados, el fiscal, y a los fiscales
adjuntos y será responsable de su separación del cargo por faltas graves de conducta o
incumplimiento de sus deberes. El proceso de selección para los jueces y el resto del
personal de la CPI asegurará que los sistemas legales principales del mundo, así como
las principales zonas geográficas del mundo, sean equitativamente representadas.
Adicionalmente, la Corte tendrá una representación equiparada de magistrados y
magistradas, y se tomará en cuenta la necesidad de contar con personas con suficiente
experiencia.
iv
Resumen Ejecutivo
El Manual ha sido desarrollado para asistir a los Estados que tengan interés de ratificar
e implementar el Estatuto de Roma. La CPI se apoyará en la cooperación y la asistencia
de los Estados Partes, para así lograr su objetivo, por lo que los Estados Partes deben
asegurarse de poder brindar esta asistencia. Las distintas secciones del Manual recalcan
las obligaciones de los Estados Partes con el Estatuto, y las características del Estatuto
que podrían afectar las medidas de los Estados hacia la ratificación e implementación.
Se reconoce que los puntos de vista y las declaraciones contenidas en el Manual no
pretenden ser la última palabra de todos los requerimientos del Estatuto de Roma para
su implementación por parte de los Estados.
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Resumen Ejecutivo
3.5. & 3.6 Ejecución de las peticiones de arresto y entrega de personas a la CPI;
La Sección 3.12 describe como los Estados deben de proteger la información que afecte
su seguridad nacional cuando estén brindando asistencia a la Corte, de acuerdo al
artículo 72 del Estatuto.
3.3 Procedimientos en los cuales la CPI y un Estado parte desean investigar un mismo
caso;
3.8. Permitir que los sospechosos sean transferidos por el territorio de un Estado rumbo
a la CPI;
3.13 La opción de los Estados de hacer cumplir las sentencias de prisión, incluyendo la
revisión por parte de la Corte para la reducción de condenas y otros asuntos pertinentes
a la aceptación de personas condenadas.
vi
Resumen Ejecutivo
Esta sección luego discute como los Estados podrían necesitar que se revisen los
siguientes aspectos, para asegurar la efectiva prosecución de los crímenes dentro de la
jurisdicción de la Corte: definiciones de crímenes, fundamentos para la defensa,
responsabilidad criminal y ofensas incoadas, responsabilidad de superiores, y reglas
procesales y de prueba en los procesos de justicia penal nacional.
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Al momento de la traducción ya están concluidos.
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Resumen Ejecutivo
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Tabla de Contenidos
TABLA DE CONTENIDOS
RECONOCIMIENTOS i
PROLOGO iii
RESUMEN EJECUTIVO v
1. INTRODUCCION 1
1.1 ASPECTOS GENERALES DE LA CPI 1
Cómo funcionará la CPI 2
Inicio de una investigación 4
Cómo se eleva un caso a juicio 7
1.2 PROPOSITO Y USO DEL MANUAL 9
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Tabla de Contenidos
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Tabla de Contenidos
xi
Tabla de Contenidos
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
1. INTRODUCCION
Una vez que la CPI entre en vigor, no solo será un medio importante para combatir la
impunidad, sino que también contribuirá a la conservación, restauración y
mantenimiento de la paz y la seguridad internacional. Más de 90 gobiernos estatales ya
han firmado el Estatuto, y el número de ratificaciones crece continuamente. El Estatuto
entrará en vigor una vez que sea ratificado por 60 Estados3.
Al ser una institución fundamentada en un tratado, la CPI tendrá una relación única con
el sistema de Naciones Unidas. Contrario a la TPIY/R, la CPI no es una creación del
Consejo de Seguridad, ni será dirigida por la Asamblea General de la ONU. Sin
3
Al momento de la edición de la versión en español de este manual, el estado de firmas y ratificaciones ha
aumentado considerablemente: al 31 de diciembre de 2000 firmaron 137 países y 27 habían ratificado. Nótese
que en un lapso breve se ha llegado casi a la mitad de las ratificaciones necesarias para la entrada en vigor del
Estatuto.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Los preceptos procesales del Estatuto de Roma han sido redactados creando un balance
óptimo entre las siguientes prioridades: (i) la necesidad de una Corte internacional,
independiente, apolítica y representativa, que pueda funcionar eficiente y efectivamente
para enjuiciar a aquellos responsables por los crímenes más graves de trascendencia
para la comunidad internacional en su conjunto; (II) el derecho de los Estados de
enjuiciar de manera prioritaria estos crímenes, si pueden y están dispuestos; (iii) brindar
adecuada compensación y reparación a las víctimas de estos crímenes; (iv) la necesidad
de proteger los derechos de las personas acusadas; y (v) el papel del Consejo de
Seguridad en el mantenimiento de la paz y seguridad internacional, de acuerdo a sus
potestades según el Capítulo VII de la Carta de las Naciones Unidas. Estas
consideraciones están todas reflejadas en las funciones y potestades de la Corte y su
relación con otras entidades, de acuerdo al Estatuto.
El personal de la Corte
El criterio para nominar a los jueces es: (i) alta consideración moral, imparcialidad e
integridad; (ii) que reúnan las condiciones requeridas para el ejercicio de las más altas
funciones judiciales respectivas en sus países; (iii) reconocida competencia en derecho
y procedimientos penales y la necesaria experiencia en causas penales en calidad de
magistrado, fiscal, abogado u otra función similar, en materias pertinentes de derecho
internacional, tales como el derecho internacional humanitario, y las normas de
derechos humanos, así como gran experiencia en funciones jurídicas profesionales que
tengan relación con la labor judicial de la Corte; y (iv) excelente conocimiento y
dominio de por lo menos uno de los idiomas de trabajo de la Corte, los cuales son inglés
y el francés (artículos 36(3) y 50(2)).
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Inicio de la investigación
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Para la elaboración del Estatuto de Roma se ha realizado una compleja tarea de armonización entre los
distintos sistemas de persecución penal todavía vigentes. Sin embargo, en lo que respecta al inicio de las
investigaciones, el modelo tiende claramente hacia un modelo "acusatorio". Este modelo no es extraño para
Latinoamérica ya que ha sido la base para las reformas procesales penales desde finales de la década del 80
(cfr. por todos, Alberto Binder, Política Criminal, de la formulación a la praxis, Ed. Ad-Hoc, Buenos Aires,
1997.) Fuente de muchas de las reformas lo constituyó el Código Procesal Penal Modelo para Iberoamérica
que discutió y aprobó el Instituto Iberoamericano de Derecho Procesal en varios de sus congresos. El Código
Modelo es de indudable raigambre acusatoria.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
un Estado Parte o de oficio por el Fiscal, y que todos los Estados tengan la oportunidad
de impugnar ciertas decisiones de la Sala de Cuestiones Preliminares en este sentido
(artículos 15 y 19). El Consejo de Seguridad podrá también solicitar a la Corte que
suspenda por un plazo 12 meses la investigación o el enjuiciamiento, de conformidad
con una resolución aprobada con arreglo a lo dispuesto en el Capítulo VII de la Carta de
las Naciones Unidas (artículo 16).
La Corte solo será competente respecto a los crímenes cometidos después de la entrada
en vigor del presente Estatuto (artículo 11(a)); y, en la mayoría de los casos, cuando:
(i) El crimen cometido haya sido cometido en el territorio de una Estado Parte; o
(ii) El crimen fuera cometido por un nacional de una Estado Parte (artículo 12).
Sin embargo, los Estados que no sean parte pueden consentir que la Corte ejerza su
competencia respecto de crímenes particulares cometidos dentro de su territorio o por
sus nacionales, por medio de una declaración depositada en poder del Secretario
(artículo 12(3)). Si un Estado se hace parte del Estatuto después de la entrada en vigor,
la Corte podrá ejercer su competencia únicamente con respecto a los crímenes cometidos
después de la entrada en vigor del Estatuto respecto de ese Estado, a menos que éste
haya hecho una declaración de conformidad con el artículo 12(3) como un Estado que
no es parte respecto al crimen en discusión (artículo 11(b), ver también artículo 126(2).
Adicionalmente, cuando el Consejo de Seguridad remita una situación a la Corte, el
Fiscal podrá investigar y enjuiciar los crímenes cometidos en el territorio, o por
nacionales, de Estados que no sean parte, y la Corte tendrá competencia sobre estos
asuntos (artículos 12 y 13).
5
Expresamente el Estatuto de Roma introduce el principio de legalidad como uno de los principios básicos
para el juzgamiento de las conductas tipificadas que en él se tipifican. Es importante resaltar que en el ámbito
Americano, la Convención Americana sobre Derechos Humanos recoge tal principio en su art. 9; en gran
medida, los Estados Parte de la Convención ya han incorporado a su legislación interna (constitucional o
infraconstitucional) el principio de legalidad, si es que no existía con anterioridad a la entrada en vigor de ese
acuerdo regional.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
El artículo 26 también estipula que ninguna persona que fuese menor de 18 años en el
momento de la presunta comisión del crimen podrá ser enjuiciada.
6
El Estatuto de Roma establece criterios de responsabilidad penal individual, no encontrándose disposiciones
que obliguen a los Estados Parte a regular la responsabilidad penal de las personas jurídicas, tal como
sugieren otros convenios internacionales elaborados recientemente en el ámbito de la Organización de las
Naciones Unidas. Es importante pues, tener en cuenta que en el proceso de implementación del Estatuto, los
distintos Estados Parte no tendrán que entrar en la discusión dogmática que hoy existe en cuanto a si las
personas de existencia ideal pueden ser sujetos que cometen actos ilícitos.
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La responsabilidad de los "jefes y otros superiores" tal como lo denomina el estatuto, parecería que responde
al otorgamiento a esas personas de una "posición de garante" respecto de los actos de sus subordinados. Si
ello es así, el núcleo de la responsabilidad lo constituiría la omisión de la realización de las medidas para
prevenir o poner fin a las conductas de los subordinados.
En el caso del Juzgamiento de las Juntas Militares que dieron el golpe de estado el 24 de marzo de 1976 en la
República Argentina, la Cámara Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal (causa 13) apeló para
la condena de los jefes militares a la elaboración doctrinaria de la autoría mediata.
Como vemos, el Estatuto de Roma, no ha seguido este camino, pero es auspicioso que se describiera
claramente la conducta reprimida.
8
El artículo 32 detalla las consecuencias que acarrean tanto el error de hecho como el error de derecho.
Nótese que se ha utilizado la formulación clásica, abandonándose la que desde hace años propone la
dogmática penal proveniente de las formulaciones germánicas (error de tipo y error de prohibición). En
muchos países de Latinoamérica, las consecuencias de estos errores ya se encontraban en sus códigos penales.
En caso de que así no fuera, deberá tenerse en cuenta, al menos los errores que destaca el Estatuto, cuando se
lo implemente.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
debe de señalar que el artículo 30 que estipula que la intención de cometer el crimen y el
conocimiento del crimen se deben de probar de acuerdo con las definiciones del
Estatuto.
9
El Estatuto de Roma crea la Corte Penal Internacional para perseguir crímenes aberrantes, pero respetando
las garantías de los acusados que están contenidas en la mayoría de los pactos sobre derechos humanos. Al
igual que apuntábamos en una nota anterior, la Convención Americana sobre Derechos Humanos, contiene en
el "Art. 8. Garantías Judiciales" la gran mayoría de las garantías que el Estatuto le otorga a los acusados. Ello
es importante porque para los países signatarios del convenio regional no les resultarán extrañas tales
garantías (vgr. presunción de inocencia, presencia durante el juicio, etc). En lo que respecta a la necesidad de
que el juicio sea oral y público, también esto ha sido uno de los pilares de los procesos de reforma penal en
Latinoamérica, siguiéndose, en gran medida, el Código Procesal Penal Modelo para Iberoamérica citado en
una nota anterior. Otros principios que hacen al juicio, como la inmediación (relación directa de los Jueces
con las pruebas y acusados) o el contradictorio, son garantías de los imputados que han sido recogidas
también por el Estatuto y que también han sido objeto de discusiones en los recientes procesos de reforma
latinoamericanos.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
El artículo 74 prevé que todos los magistrados de Primera Instancia deberán de estar
presentes durante cada etapa del juicio, y durante las deliberaciones, y deberán de
intentar que se llegue a un veredicto unánime. Sus decisiones deberán de entregarse
por escrito y deberán de estar fundamentadas (artículo 74(5)). El artículo 76(4)
estipula que cualquier sentencia se impondrá en audiencia pública y, cuando sea
posible, en presencia del acusado. El Estatuto también permite la impugnación de
las decisiones de Primera Instancia, tal como la decisión de condenar o imponer una
sentencia particular contra una persona (artículos 81-84). Todas las apelaciones
serán tramitadas por la Sala de Apelaciones, la cual está compuesta por el Presidente
y otros cuatro magistrados, en cada caso (artículo 39). La Corte puede imponer las
siguientes penas a una persona condenada: (i) máximo de 30 años de prisión; (ii)
cadena perpetua en aquellos casos en que se justifique por la extrema gravedad del
crimen; y/o (iii) una multa; y/o (iv) decomiso de los productos procedentes del
crimen (artículo 77). Adicionalmente, la Corte podrá ordenar que la persona
condenada pague reparaciones a las víctimas, incluyendo la restitución,
indemnización y la rehabilitación (artículo 75(2)).
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
El Estatuto va más allá y brinda voz a las víctimas, como testificar, participar en
todas las etapas del proceso de la Corte y protección a su seguridad, intereses,
identidad y privacidad. Esta participación inclusiva refleja los principios de la
Declaración de las Naciones Unidas sobre los Principios Básicos de la Justicia para
las Víctimas del Crimen y del Abuso de Poder, para ser implementada en los
sistemas judiciales nacionales. Las previsiones del Estatuto requieren que la Corte
garantice estas protecciones y derechos en sus procedimientos (ej. Artículo 68). La
inclusión de estas disposiciones dentro del Estatuto demuestra la importancia de las
víctimas en todo el proceso y se espera que la Corte devenga un foro efectivo para
manifestar las graves injusticias contra las víctimas alrededor del mundo.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Las secciones señaladas hacen énfasis en las obligaciones de los Estados Partes con
el Estatuto y las características del Estatuto que podrían afectar las acciones tomadas
por el Estado para ratificar e implementar el tratado. El Manual también ha sido
diseñado como un guía para los distintos sistemas legales de los Estados que
podrían implementar sus obligaciones a sus sistemas legales nacionales. Los
gobernantes, administradores gubernamentales y los distintos profesionales en
justicia penal podrán encontrar que este documento es muy provechoso para orientar
los impactos generales y específicos del Estatuto en sus respectivas jurisdicciones.
Aquellas personas que trabajen dentro del contexto militar también encontrarán que
este documento es de gran ayuda.
10
Para la mayor parte de las naciones que conforman la Organización de los Estados Americanos (OEA), con la ratificación del Estatuto
de Roma para la Corte Penal Internacional, surge palmaria la necesidad de adaptar la legislación nacional a las previsiones de esta nueva
institución del derecho internacional. Esa necesidad constituye en rigor un deber impuesto por normas consuetudinarias y
convencionales regionales y universales anteriores aún al citado Estatuto.
En ese sentido la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha manifestado que: “[e]n el derecho de gentes, una norma
consuetudinaria prescribe que un Estado que ha celebrado un convenio internacional, debe introducir en su derecho interno las
modificaciones necesarias para asegurar la ejecución de las obligaciones asumidas. Esta norma aparece como válida universalmente y
ha sido calificada por la jurisprudencia como un principio evidente ("principe allant de soi"; Echange des populations grecques et
turques, avis consultatif, 1925, C.P.J.I., série B, no.10, p.20). En este orden de ideas, la Convención Americana establece la obligación
de cada Estado Parte de adecuar su derecho interno a las disposiciones de dicha Convención, para garantizar los derechos en ella
consagrados (en caso Durand y Ugarte, Sentencia sobre el fondo de 16/08/2000).
No obstante, algunos Estados de la región ya disponen de legislación que parcialmente satisface el aludido deber y que se traduce, por
ejemplo, en la incriminación y castigo doméstico de los crímenes que caen bajo la competencia de la Corte Penal Internacional –principio
de complementariedad- y en normas que garantizan una adecuada colaboración y asistencia de las autoridades locales con el nuevo
Tribunal –principio de cooperación-. Sin embargo, las más de las veces, esta nueva institución jurisdiccional requiere de modificaciones
legislativas o administrativas que permitan una efectiva aplicación y puesta en práctica de los principios que consagra el Estatuto de la
Corte.
No obstante, algunos Estados de la región ya disponen de legislación que parcialmente satisface el aludido deber y que se traduce, por
ejemplo, en la incriminación y castigo doméstico de los crímenes que caen bajo la competencia de la Corte Penal Internacional –principio
de complementariedad- y en normas que garantizan una adecuada colaboración y asistencia de las autoridades locales con el nuevo
Tribunal –principio de cooperación-. Sin embargo, las más de las veces, esta nueva institución jurisdiccional requiere de modificaciones
legislativas o administrativas que permitan una efectiva aplicación y puesta en práctica de los principios que consagra el Estatuto de la
Corte.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
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El deber legal de implementar legislación o, dicho de otra manera, de “internalizar” las disposiciones de los
tratados, convenios y pactos y de la costumbre y práctica internacional, sólo se satisface atribuyendo a la
legislación nacional –según los casos- un alcance más reducido o extenso que el exigido por el Estatuto de
Roma, en virtud de otros compromisos internacionales previos de los Estados. Por ejemplo, el distinto
alcance otorgado a la obediencia debida en el Estatuto de Roma –que pareciera admitirla excepcionalmente- y
en el derecho internacional de los derechos humanos –que la rechaza de plano y sin excepciones-.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
libertad de escoger cómo implementará las obligaciones con el tratado, siempre que
proceda de buena fe y responda a todas las obligaciones bajo el Estatuto.
Algunos Estados generalmente ratifican primero los tratados, y así las reglas
incluidas en el tratado automáticamente devienen ley nacional luego de su
ratificación y publicación en el diario oficial (sistema monista). Otros Estados,
especialmente en la Comunidad de Estados Británicos, están obligados por sus
Constituciones a preparar primero la legislación de implementación, antes de
ratificar o acceder a cualquier tratado internacional (sistema dualista). Cada sistema
tiene sus propias ventajas y desventajas, las cuales se deben de tomar en cuenta
durante el proceso de ratificación e implementación. Por ejemplo, en algunos
Estados, el Poder Ejecutivo deberá contar con la aprobación del Poder Legislativo
para ratificar, o deberá consultar con el Tribunal Constitucional antes de ratificar.
Estos procesos inevitablemente atrasan los procesos de ratificación e
implementación, pero también brindan una oportunidad para que se considere el
impacto de los tratados en un Estado.
El artículo 126 del Estatuto dispone que la CPI entrará en vigor el primer día del
mes siguiente al 60º día a partir de la fecha en que se deposite el 60º instrumento de
ratificación. A partir de este momento, la Corte será competente para enjuiciar a las
personas acusadas de genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.
Cuanto más pronto se cree la Corte, más pronto podrá impedírseles a estas personas
la comisión de tales crímenes, bajo la amenaza de ser acusadas por la CPI. Los
12
En la República Argentina, el Poder Ejecutivo Nacional, por vía de sus Ministerios de Justicia y Derechos
Humanos, de Defensa y de Relaciones Exteriores, creó una Comisión Interministerial para el estudio de las
normas necesarias para la implementación del Estatuto de Roma al derecho positivo Argentino. Esta
Comisión fue creada aún antes de que el Congreso aprobara el Estatuto (hecho ocurrido en diciembre de
2000), con el objeto de adelantar el proceso de implementación aún antes de la ratificación del Estatuto. Esta
modalidad es importante para tener en cuenta en los países latinoamericanos donde muchas veces los procesos
legislativos de aprobación de instrumentos internacionales son lentos, pudiendo aprovecharse ese tiempo para
ir proyectando las reformas necesarias.
24
Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Existe otra ventaja en la ratificación expedita del Estatuto de la CPI por parte de los
Estados – una vez que 60 países lo ratifiquen, la Asamblea de los Estados Partes se
formará, y estará compuesta por representantes de esos 60 Estados ratificantes, más
cualquier otro que ratifique subsecuentemente (artículo 112). En las reuniones
iniciales de la Asamblea, se tomarán muchas decisiones importantes sobre la
administración de la CPI, tales como la elección de magistrados y fiscales, el
presupuesto de la Corte, y así sucesivamente. Estas reuniones también serán el foro
para la adopción de las Reglas de Procedimiento y Prueba de la Corte y los
Elementos de los Crímenes, los cuales tendrán un papel crucial sobre la efectividad
de la Corte. De esta manera, los primeros 60 Estados que ratifiquen el Estatuto
tendrán la oportunidad de contribuir significativamente con la futura dirección de la
Corte.
Los Estados que han firmado el Estatuto de Roma o el Acta Final, pero que no lo
han ratificado, tendrán status de observadores y no estarán facultados para votar en
la Asamblea hasta que no ratifiquen. (artículo 112). Aquellos estados que no hayan
firmado ni el Estatuto ni el Acta Final deberán tomar en cuenta que el Estatuto no
podrá ser firmado después del 31 de Diciembre del año 2000 (artículo 125(1)). No
tendrán status de observadores en la Asamblea de Estados Partes, a no ser que
firmen y/o ratifiquen el Estatuto con anterioridad.
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Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Así como se hace con cualquier tratado, los Estados pueden crear un solo
instrumento legislativo que abarque cada aspecto de la implementación, o reformar
por separado todos aquellos instrumentos relevantes en su legislación existente, para
así acoplarse con el Estatuto. Sin embargo, se deben de tomar en cuenta algunas
consideraciones especiales cuando se tomen las medidas para la implementación.
Los Estados Partes tendrán una relación especial con la CPI, particularmente en
aspectos de asistencia judicial. Como tal, existen algunas características especiales
de la CPI que no podrán ser incorporadas por reformas a los acuerdos existentes de
cooperación inter estatal. Por ejemplo, el Estado requerido para entregar una
persona no podrá rechazar esta solicitud a la Corte (artículo 89). Esto es claramente
distinto a los acuerdos comunes de extradición entre los Estados. Por ende, los
Estados podrían redactar una nueva legislación específica para la entrega de
personas a la CPI, en lugar de adaptar sus leyes existentes de extradición.
Cuando un Estado elige introducir una sola norma, o anexar el Estatuto de Roma a
una sola ley de implementación, podría convertirse necesaria la distinción de que
estas normas prevalecen sobre la legislación existente, si existiera un conflicto entre
la legislación de la CPI y la legislación existente. Esto ayudará a evitar posibles
conflictos de cooperación estatal. Sin embargo, aunque la adopción de una única ley
que cubra todos los aspectos posibles del Estatuto es posible, se necesitarán algunas
modificaciones o incorporaciones de referencia a las leyes nacionales, como el
código penal y de procedimientos penales, de mutua asistencia legal, extradición y
derechos humanos, para que se reconozca el status especial de la Corte.
26
Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
Si un Estado decide reformar todos sus instrumentos legislativos uno por uno,
deberá reconocer y distinguir de alguna manera la naturaleza única de la Corte, para
así brindar una descripción general del papel y el propósito de la Corte. Por ejemplo,
en muchas jurisdicciones consuetudinarias, la mayor parte de la legislación
propuesta presentada a las asambleas legislativas puede ser estudiada y comentada
por los ciudadanos, ya sea por escrito o en audiencias especiales. Estas audiencias
podrían organizarse de tal manera que todas las reformas relacionadas a la CPI se
discutan en el mismo momento, si no están todas incluidas en una misma norma.
Medida híbrida
Algunos Estados podrían crear una sola ley que también reforme de manera efectiva
todas las normas relevantes que ya estén en vigencia. Esta medida fue tomada por el
gobierno de Canadá en su ley (bill) C-19 (conocida como el “Crimes Against
Humanity Act”(Ley de Crímenes de Lesa Humanidad)), que implementa todas las
obligaciones de Canadá ante el Estatuto de Roma. Esta ley es una mezcla de
disposiciones y reformas novedosas a la amplia gama de leyes existentes. Se debe
tomar en cuenta, sin embargo, que esta ley va más allá de los requisitos mínimos del
Estatuto. Su redacción se orientó hacia las preocupaciones de orden constitucional
que probablemente no ocurrirán en la mayoría de los otros Estados. Sin embargo, la
lista de las leyes canadienses que se reformarán con esta ley ofrece una guía útil
para los otros Estados, enumerando el tipo de legislación nacional que deberá ser
revisada para la implementación del Estatuto (esta lista se ubica bajo el título
“Reformas Consecuentes” en la ley): Citizenship Act (Ley de la ciudadanía),
Corrections and Conditional Release Act (Ley de correcciones y libertad
condicional), Criminal Code (Código Penal), Extradition Act (Ley de extradición),
Foreign Missions and International Organizations Act (Ley de misiones
internacionales y organismos internacionales), Immigration Act (Ley de
inmigración), Mutual Legal Assistance in Criminal Matters Act (Ley de asistencia
legal mutua en asuntos penales), State Immunity Act (Ley de inmunidad estatal),
Witness Protection Program Act (Ley del programa para la protección de testigos).
27
Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
deberán conocer los distintos estándares, para así garantizar que la prueba que se
tome sea admitida y la manera en que se tome no afecte el posible éxito de un
proceso (artículo 69(7)). No se puede pretender que los nacionales conozcan los
requisitos de la CPI a no ser que haya una efectiva campaña publicitaria e
informativa con relación a la nueva legislación de la CPI. Para evitar posibles
conflictos con las obligaciones estatales, los ciudadanos deben de ser informados
por las agencias estatales.
Muchos países han tenido que introducir nuevos procedimientos en algunas áreas,
para así asegurar su cumplimiento con las obligaciones ante el Estatuto (artículo
88). El Estatuto abarca una amplia gama de áreas de administración, tales como el
proceso penal, productos del crimen, protección de las víctimas y testigos, asistencia
legal mutua, seguridad nacional, diseminación de reglas de combate en el derecho
militar, y asistencia financiera a la Corte. Será necesario que los Estados vayan más
allá de añadir el Estatuto de Roma a una norma legal para convertirlo en ley. La
coordinación entre los departamentos gubernamentales y entre las distintas ramas
del gobierno, así como las fuerzas armadas es esencial.
13
Como decíamos en notas anteriores, para el ámbito Latinoamericano, también muchos de estos principios
son adoptados por la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
28
Capítulo 2: Aspectos Generales de la Implementación
29
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Las secciones 9 y 10 del Estatuto describen los tipos generales de cooperación que
podrán ser solicitados por la Corte y las obligaciones de los Estados Partes al
respecto. Sin embargo, no se enumeran todas las formas de asistencia estatal en
estas secciones, ya que otras partes anteriores del Estatuto también mencionan la
cooperación que podría solicitar la CPI durante las investigaciones y procesos. Por
ejemplo, las distintas secciones de la CPI y de la Fiscalía de la CPI pueden solicitar
distintos requerimientos a los Estados durante las diversas etapas de un proceso
penal, y las funciones de estas entidades están enumeradas en la Parte 5 –
Investigación y Proceso; Parte 6 – El Juicio; Parte – Impugnación y Revisión. Por
ende, el resto de esta sección del Manual integra las distintas formas de asistencia
detalladas por el Estatuto, de acuerdo al orden llevado en una investigación penal.
Los lectores no deberán alarmarse ante la gran cantidad de material en esta sección
del Manual. Esto no significa que la implementación del Estatuto de Roma requiera
de gran intervención. El Manual prevé una guía sobre las obligaciones específicas
de los Estados bajo el Estatuto, pero también sugiere cómo los Estados pueden ir
más allá de estos requisitos, para la creación de una CPI aún más efectiva. Esta
distinción es clara a lo largo de todo el Manual, ya que cada requisito estará bajo el
título de “Obligaciones” en cada sección. Por ende, los Estados que no quieran
gastar recursos innecesarios implementando el Estatuto de Roma podrán claramente
distinguir cuál es el estándar mínimo en cada área de implementación. Podrán ver
que tan fácil es para ellos cumplir con los requisitos del Estatuto, en la mayoría de
los casos.
30
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
14
Las "Reglas de Procedimiento y Prueba" y los "Elementos de los Crímenes", fueron concluidos por la
Comisión Preparatoria de la Corte Penal Internacional en el plazo previsto: fueron adoptadas en la 23ª reunión
de la Comisión el 30 de junio de 2000. Vale destacar que ambos documentos deberán ser aprobados por la
Asamblea de Estados Parte.
31
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
Implementación
Descripción
“intencionalmente:
(a) Dar falso testimonio cuando se esté obligado a decir verdad de conformidad con el
párrafo 1 del artículo 69;
32
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
(b) Presentar pruebas a sabiendas de que son falsas o han sido falsificadas;
(e) Tomar represalias contra un funcionario de la Corte en razón de funciones que haya
desempeñado él u otro funcionario; y
Según el artículo 70(3), la pena máxima que se impondrá por la comisión de estas
ofensas no será superior a cinco años y/o una multa, de conformidad con las Reglas de
Procedimiento y Prueba.15 Las Reglas también establecerán los principios y
procedimientos que regulan el ejercicio de la Corte de su competencia sobre estos
delitos (artículo 70(2)).16 Contrario a las previsiones detalladas del Estatuto sobre la
admisibilidad de los casos de crímenes de la competencia de la Corte (artículos 1 & 17-
20), el artículo 70 no establece ni cómo ni dónde será competente la CPI sobre estos
delitos, casos en los cuales un Estado Parte podría también ser competente sobre la
misma ofensa y tendría la autoridad para ejercer su propia jurisdicción. Estos aspectos
se tratarán bajo un régimen especial que se estipulará en las Reglas, tomando en cuenta
los puntos de vista de todos los Estados Partes.
No obstante, el artículo 70(4) requiere que todos los Estados Partes amplíen sus leyes
penales que castigan estos delitos, y que incluyan los crímenes del artículo 70(1)
cuando éstos sean cometidos por sus nacionales o dentro de su territorio. El artículo
70(4)(b) además prevé que la Corte podrá solicitar a un Estado Parte para que remita a
la autoridad nacional competente un caso en particular para efectos de su
enjuiciamiento. Los Estados Partes deberán responder a estos requerimientos y deberán
tramitar tales asuntos “con diligencia y asignarán medios suficientes para que las causas
se sustancien eficazmente”. Por ende, se espera que los Estados Partes asistan a la Corte
en el enjuiciamiento de estos delitos, de conformidad con el artículo 86.
Obligaciones
15
Sobre este tema se refiere la Regla nº166 de las Reglas de Procedimiento y Prueba.
16
Sobre este tema se refiere la Regla nº165 de las Reglas de Procedimiento y Prueba.
33
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
a) El artículo 70(4)(a) requiere que todo Estado Parte “haga extensivas sus leyes
penales que castigan los delitos contra la integridad de su propio procedimiento
de investigación o enjuiciamiento de los delitos contra la administración de
justicia a que se hace referencia en este artículo y sean cometidos en su territorio
o por uno de sus nacionales”.
Implementación
(i) Extender la legislación nacional existente para incluir las ofensas contra la
administración de justicia de la CPI
Casi todos los Estados Partes cuentan ya con una legislación que contiene los delitos
contra la administración de justicia dentro de sus propios sistemas legales. Por
ejemplo, tales actividades están estipuladas en el Código Penal. El artículo 70(4)
dispone la ampliación de esta legislación para incluir a las personas involucradas
con los procesos de la CPI, de conformidad con el Estatuto de Roma. Estas personas
serán (tanto como sujetos y objetos de estos crímenes): personas acusadas que
comparezcan ante la CPI, testigos que comparezcan ante la CPI, y oficiales de la
CPI. Adicionalmente, los delitos nacionales que incluyan la interferencia con la
prueba deberán ampliarse para incluir la prueba requerida para un caso de la CPI.
Los Estados Partes deberán asegurar que su legislación nacional incluya todas las
ofensas enumeradas en el artículo 70(1). La manera más sencilla de hacerlo es
tomando las ofensas tal y como están en el Estatuto de Roma. La legislación deberá
contar con una aplicación tanto territorial como extraterritorial, para que así los
Estados Partes puedan enjuiciar tales ofensas cuando sean cometidas por nacionales
o por extranjeros dentro del territorio del Estado. De esta manera los nacionales
podrán ser enjuiciados en la Corte por actos cometidos dentro de un Estado. Según
el artículo 70(4), los Estados Partes deberán penalizar estas ofensas dentro de su
territorio cuando sean cometidas por un nacional, sin importar en qué lugar estaba el
nacional en el momento de la comisión del delito.
34
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El Estatuto es omiso respecto a la pena máxima o mínima que una Estado puede
imponer por estas ofensas. Sin embargo, estos crímenes lesionan el corazón mismo
de cualquier sistema de justicia, al despreciar potencialmente su legitimidad y
credibilidad. Por ende, una pena máxima no menor de 5 años para todas estas
ofensas es un buen estándar, tal como lo dispone el artículo 70(3). Los Estados
podrán también prever distintas penas para los diversos tipos de delitos,
dependiendo de su gravedad.
Los Estados podrán ir más allá de los requisitos del artículo 70, disponiendo de
variaciones más específicas de los delitos enumerados en este artículo, y asignando
distintas penas a distintas ofensas, algunas veces superiores a 5 años de prisión. Esto
tiene el beneficio de impedir a una mayor variedad de posibles ataques a la
integridad del sistema de justicia de la CPI.
Los Estados deberán asegurarse de que se incluyan todas los delitos enumerados en
el artículo 70(1) del Estatuto, y no solo aquellos de las Reglas de del TPIY/R,
porque estas reglas no incluyen ciertos delitos del artículo 70, tales como tomar
represalias contras los oficiales del tribunal (artículo 70(1)(e)).
Alternativamente, los Estados podrían incluir los delitos por medio de una norma
legal específica sobre los delitos contra la administración de justicia, o
incluyéndolos dentro de una norma legal más general sobre la CPI, como la ley
canadiense propuesta en su (Bill) C-19, Crimes Against Humanity Act. Algunas
secciones de esta ley proponen la creación de nuevos delitos en Canadá y para
ciudadanos canadienses, de conformidad con el Estatuto de Roma.
35
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
b) Dar competencia a los tribunales nacionales sobre los delitos del artículo 70
Los Estados Partes deberán adecuar sus propios tribunales para que enjuicien estos
delitos (artículo 70(4)(b). Esto se puede llevar a cabo agregando las “ofensas contra
la administración de justicia de la CPI”, o terminología similar, a la lista de delitos
sobre los cuales tienen competencia los tribunales. Todo el personal involucrado en
las investigaciones penales deberá tener competencia para investigar y enjuiciar
también estos crímenes. Debe resaltarse también que la CPI deberá de revocar la
inmunidad en aquellos casos en que los tribunales nacionales enjuicien a personal de
la CPI.
c) Disponer de recursos suficientes que posibiliten que los juicios nacionales sean
llevados a cabo con diligencia y conducidos efectivamente
d) Ejecución de sentencias
e) Medidas de Cooperación
36
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Los Estados deben contar con la legislación y los procedimientos que les permitan
cooperar en los casos de los delitos de la CPI estipulados en el artículo 70. Esta
cooperación incluirá la entrega de nacionales a la Corte, proveer prueba que
respalde o refute una denuncia de que un supuesto crimen ocurrió. Las condiciones
para brindar tal cooperación podrán estar reguladas por las leyes nacionales del
Estado requerido (artículo 70(2)), mientras que permita al Estado plena cooperación,
de conformidad con el artículo 86. La legislación y los procedimientos podrían ser
iguales a aquellos utilizados para otras investigaciones y enjuiciamientos penales de
la CPI.
3.3 Procedimientos en que tanto la CPI como un Estado Parte tienen interés de
investigar
Descripción
Una vez que se remita a la Corte una situación que requiera atención de la CPI, o
una vez que el Fiscal de la CPI identifique la aparente comisión de un crimen con
competencia de la CPI, el Fiscal de la CPI debe determinar si existe fundamento
razonable para iniciar una investigación (artículos 13-15). El Fiscal deberá solicitar
a la Sala de Cuestiones Preliminares de la CPI la autorización de cualquier
investigación iniciada de oficio por el Fiscal (artículo 15(3)).
37
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El artículo 18(2) señala que los Estados cuentan con un mes después de la recepción
de la notificación, para informar a la Corte de que está llevando o ha llevado a cabo
una investigación respecto al mismo caso, y para solicitar al Fiscal que renuncie a su
competencia a favor del Estado. Este corto plazo asegura que la Corte no padezca de
retrasos innecesarios con el cumplimiento de sus funciones. El artículo 18(2) prevé
que “el Estado podrá informar a la Corte de sus propias investigaciones” (no debe).
Aunque los Estados no están obligados a informar a la Corte de sus propias
investigaciones, sería aconsejable que un Estado recomendara a la Corte sobre sus
propias investigaciones, para así evitar una duplicación innecesaria de esfuerzos y
asegurar que la CPI se inhiba de su competencia a favor del Estado.
Responsabilidades de la CPI
38
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Protección de la Prueba
En el transcurso del proceso, podrán existir lapsos de tiempo dentro de los cuales
sea impreciso cuál autoridad – Estado o CPI – tomará eventualmente el mando de la
investigación o enjuiciamiento. Los Estados deben asegurar que toda la prueba del
caso en su posesión sea preservada, de acuerdo al artículo 93(1)(j). Los Estados
deberán tomar en cuenta también que la Corte podrá autorizar al Fiscal de la CPI
para que recolecte y preserve prueba durante estos lapsos, según los artículos 18(6)
y 19(8). Aún si un Estado impugna la admisibilidad de un caso ante la CPI, todas las
órdenes o mandamiento dictados por la Corte con anterioridad a la impugnación
seguirán siendo válidos (artículo 19(9)). Por consiguiente, los Estados podrían tener
el deber de cooperar con el Fiscal de la CPI hasta que no se decida si el Estado será
competente para investigar y enjuiciar en el caso en discusión (ver también el
artículo 19(8)).
Obligaciones
Implementación
18
En el ámbito Latinoamericano existen algunas experiencias en donde la "autoridad central" o autoridad de
enlace lo constituyen los Ministerios de Justicia. Esta es otra posibilidad, pero siempre se debe atender a que
sea la autoridad que pueda responder más eficientemente.
39
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
a) Notificación y coordinación
(i) un procedimiento por medio del cual los investigadores y jueces nacionales
deban notificar a la autoridad competente sobre el inicio de una
investigación o juicio de un delito que esté dentro de la competencia de la
CPI; y/o
(ii) designar a una persona dentro del órgano competente para que fiscalice
todas las investigaciones y/o juicios nacionales sobre crímenes que también
sean competencia de la CPI, o que pueda obtener información sobre los
casos particulares de manera expedita; y
b) Actualizaciones periódicas
40
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
d) Protección de la prueba
Las leyes de procedimiento y prueba son necesarias para garantizar que las
personas competentes tengan facultades para conservar la prueba y cooperar con
la investigación del Fiscal, de conformidad con el artículo 93, aún cuando exista
la posibilidad de que el Estado sea quien tome la competencia del caso. Ver
“Recolección y Conservación de Prueba” para más detalles sobre los requisitos
de implementación de estas obligaciones.
Descripción
(ii) otras asistencias prácticas para las investigaciones y juicios de la Corte, ej.:
recolección de prueba.
El artículo 86, de la Parte 9 estipula que todos los Estados Partes deberán cooperar
plenamente con la Corte en relación con la investigación y el enjuiciamiento de
crímenes de su competencia. Las palabras “cooperar plenamente” fueron escogidas
cuidadosamente por los redactores del Estatuto, para enfatizar el papel importante
que tienen los Estados en el funcionamiento efectivo y eficiente de la Corte. El
artículo 86 también prevé que los Estados Partes deberán cooperar plenamente “de
conformidad con lo dispuesto en el presente Estatuto”. Por consiguiente, toda
previsión del Estatuto que requiera la participación de un Estado deberá
interpretarse como cooperación plena, salvo que se especifique lo contrario.
41
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El artículo 88 estipula que los Estados Partes deberán “asegurar que en el derecho
interno existan procedimientos aplicables a todas las formas de cooperación
especificadas en la presente parte”. En otras palabras, se prevé que los Estados
utilicen sus leyes nacionales para establecer todos los procedimientos necesarios que
les posibiliten asistir a la Corte. Todos estos procedimientos deberán permitir a los
órganos estatales responder tan rápido como sea posible a los requerimientos de la
Corte.19
Competencia de la CPI
Según el artículo 12(1), un Estado, al aceptar ser parte del Estatuto, se adhiere por
ende a la jurisdicción de la Corte respecto a los crímenes estipulados en el artículo 5
(genocidio, crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y agresión, una vez que
sea definida). Esto significa que una vez que un Estado se convierte en Estado parte,
éste acepta automáticamente la competencia de la Corte sobre el genocidio, los
crímenes de lesa y crímenes de guerra, a partir del día en que entre en vigor el
Estatuto (artículo 11).
Nótese que los Estados que no sean parte también podrán aceptar la competencia de
la Corte respecto a un crimen en particular, por medio de una declaración de
conformidad con el artículo 12(3). Los Estados que no sean parte deberán cooperar
plenamente una vez que acuerden asistir a la Corte en una investigación en
particular (artículo 87(5)(a)). Si incumplen el acuerdo especial realizado con la
Corte, ésta podrá informar a la Asamblea de los Estados Partes o al Consejo de
Seguridad, según sea el caso (artículo 87(5)(b)).
19
Por ejemplo, la República Argentina sancionó el 16 de diciembre de 1996 (Boletín Oficial 16/01/97) la
"Ley de Cooperación en Materia Penal". Si bien esta ley regula -subsidiariamente a los acuerdos existentes-
las relaciones entre los países, leyes de este tipo constituyen una buena base de trabajo para implementar
internamente todo lo que hace al sistema de cooperación y asistencia con la Corte Penal Internacional.
42
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
a) Según el artículo 86, los Estados Partes deberán “cooperar plenamente con la
Corte en relación con la investigación y el enjuiciamiento de crímenes de su
competencia”.
b) Según el artículo 88, los Estados Partes deberán asegurarse de que en el derecho
interno existan procedimientos aplicables a “todas las formas de cooperación”
especificadas en la Parte 9 del Estatuto.
c) Según el artículo 87(5)(a), los Estados Partes deberán cumplir cualquier acuerdo
o arreglo especial de cooperación con la CPI.
Implementación20
El Estado que deviene Parte del Estatuto está, por ende, aceptando la competencia
de la Corte sobre los crímenes enumerados en el artículo 5, a partir del día en que
entre en vigor el Estatuto, y que la Corte podrá adquirir competencia sobre sus
nacionales o cualquier otra persona en su territorio, en algunos casos concretos. De
esta manera, los Estados Partes deberán garantizar que no existan obstáculos para
cooperar con la Corte. Un Estado que no sea parte y que acepte la competencia de la
Corte sobre un crimen en particular deberá también asegurarse de que no existan
obstáculos para la cooperación de conformidad con el acuerdo o el arreglo especial
realizado con la Corte. Por ejemplo, los Estados deberán asegurarse de que todas las
autoridades correspondientes puedan asumir la competencia de ser necesario, para
asistir las investigaciones y enjuiciamientos de la CPI.
20
En el plano regional, la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas (OEA, A.G., adoptada en Belem do Pará,
el 9 de Junio de 1994) declara el deber de todos los Estados Parte de establecer su jurisdicción local para dicho crimen dondequiera que
éste haya sido perpetrado, a menos que el Estado prefiriera extraditar (art.IV, para.2).
La Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura (OEA, A.G., adoptada en Cartagena de Indias, el 9 de
Diciembre de 1985) también consagra el deber de los Estados Parte de establecer su jurisdicción en relación a toda persona responsable
de ese crimen sin importar el lugar donde el ilícito hubiera sido cometido o la nacionalidad de la víctima o el victimario (art.12, para5.).
En virtud del principio aut dedere au iudicare el Estado se eximirá de responsabilidad internacional si decide no juzgar a los responsables
pero los extradita a otro país donde sí sean objeto de un proceso judicial.
Como hemos dicho anteriormente los Estados Parte del Estatuto de Roma darán satisfacción al mismo estableciendo su
competencia territorial y de personalidad activa en relación a los crímenes de competencia de la Corte, pero incumplirán los restantes
deberes que les imponen otras convenciones, los tratados y la costumbre internacional en relación a los crímenes de lesa humanidad y
crímenes de guerra.
El cabal cumplimiento de las obligaciones internacionales impone el establecimiento de la jurisdicción universal para los responsables de
tales crímenes.
43
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
44
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligación de consultar
Obligaciones
45
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
c) El artículo 96(3) estipula que los Estados Partes deberán consultar con la Corte
cualquier solicitud sobre las disposiciones de su derecho interno que puedan ser
aplicables para cumplir con las solicitudes de la Corte. A través de tales
consultas, los Estados Partes comunicarán a la Corte las disposiciones
específicas de su derecho interno.
e) Los Estados Partes deben cumplir con cualquier especificación que la Corte
realice según el artículo 99 (1), sobre la ejecución de una solicitud de asistencia,
salvo que la forma especificada esté prohibida por el derecho interno.
Implementación
46
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Embajada del Estado en La Haya debería ser designado como contacto con la
Secretaría de la Corte, para que así se puedan identificar posibles dificultades de
manera incipiente. Como mínimo, se debería designar una persona contacto que
mantenga archivos actualizados de todas las comunicaciones con la Corte y sus
distintos órganos.
Cuando los Estados Partes deban cumplir con requisitos particulares para ejecutar
las solicitudes de la CPI, deberán hacérselo saber a la Corte cuanto antes, luego de
la ratificación. Si no lo hacen deberán estar preparados para hacerlo cuando la Corte
solicite tal información.
Los Estados Partes podrían también necesitar leyes que permitan a las personas
especificadas por la Corte para presenciar y asistir en el proceso de ejecución, luego
de que el Estado Parte sea consultado (artículo 99(4)(b)). Estas personas incluirían a
personal de la CPI, tales como el Fiscal y Fiscales Adjuntos. Podrían también incluir
al Abogado defensor, en el caso de una persona investigada por la CPI, cuando sea
una orden o solicitud de cooperación de la Sala de Cuestiones Preliminares, de
conformidad con el artículo 57(3)(b).
Descripción
Los artículos 94 y 95 del Estatuto facultan a los Estados para aplazar la ejecución de
las solicitudes en ciertas situaciones. El artículo 94 describe la situación en que la
solicitud interfiera con una investigación o enjuiciamiento en curso de un asunto
distinto. Ante tal situación, el Estado requerido podrá consultarlo ante la Corte y
acordar un periodo de tiempo de prórroga para la ejecución. Este periodo no
excederá de lo necesario para concluir la investigación o el enjuiciamiento de que se
trate la ejecución de la solicitud. El Estado requerido podrá también prestar
asistencia con sujeción a ciertas condiciones, en el caso en que decida prestar la
asistencia de inmediato.
47
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
Implementación
Una vez que se consulte a las autoridades Estatales pertinentes, y se determine que
la ejecución de una solicitud interfiere con los asuntos del Estado, éste deberá
consultar ante la Corte y acordar un periodo de tiempo apropiado de prórroga para la
ejecución de la solicitud. El órgano que consulte ante la Corte deberá conocer el
estado en que se encuentran los procedimientos nacionales, para poder negociar el
periodo de tiempo de prórroga adecuado con la Corte. Alternativamente, el Estado
deberá tomar en consideración si la asistencia puede prestarse inmediatamente,
sujeta a ciertas condiciones. Cualquier condición deberá negociarse con la Corte.
48
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
requerido, tal Estado deberá contar con leyes y procedimientos vigentes que
permitan prestar al Fiscal la asistencia solicitada por la Corte.
Descripción
Según el artículo 100(1), los Estado deberán de estar preparados para sufragar “los
gastos necesarios que se deriven del cumplimiento de las solicitudes en su
territorio”, salvo algunas pocas excepciones. Estas excepciones son:
(c) Gastos de viaje y dietas de los magistrados, el fiscal, los fiscales adjuntos, el
secretario, el secretario adjunto y los funcionarios de cualquier órgano de la
Corte;
(f) Previa consulta, todos los gastos extraordinarios que puedan resultar del
cumplimiento de una solicitud.
Obligaciones
Los Estados deberán de cubrir los gastos de ejecución de todas las solicitudes de
asistencia dentro de su territorio (artículo 100), con la excepción de aquellas
enumeradas en el artículo 100(1).
Implementación
Los Estado Partes deberán contar con los fondos necesarios para sufragar los gastos
de ciertas solicitudes de la Corte. No obstante, se incurriría en algunos gastos
adicionales mínimos, ya que muchas de las formas de cooperación requeridas por el
Estatuto son una extensión del trabajo normal del personal que ya trabaja dentro del
sistema nacional de justicia penal y el Ministerio de Relaciones Exteriores.
49
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Según el artículo 87, las solicitudes de la Corte “se tramitarán por vía diplomática o
por cualquier otro conducto adecuado que ya designado cada Estado Parte a la fecha
de la ratificación, aceptación, aprobación o adhesión”. Se podrán realizar cambios
subsiguientes a este establecimiento, de conformidad con las Reglas de
Procedimiento y Prueba. Adicionalmente, cada Estado deberá indicar el idioma más
apropiado para la correspondencia en el momento de ratificar, aceptar, aprobar o
adherirse al Estatuto. Esto, también, podrá cambiarse subsiguientemente de
conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.21
Según el artículo 87(1), las solicitudes de la Corte podrán ser tramitadas por medio
de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) o de cualquier otra
organización regional competente.
Obligaciones
Implementación
21
Las Reglas de Procedimiento y Prueba han tratado la cuestión de las modificaciones de los conductos de
comunicación en la Regla Nº 180.
50
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
51
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Según el artículo 87(4), un Estado Parte podrá también ser requerido para proteger
cierta información en su posesión o control, cuando se necesiten medidas para
garantizar la seguridad o bienestar físico o psicológico de las víctimas, posibles
testigos y sus familiares. Estas medidas se aplicarán de conformidad con la forma en
que el Estado prevea y maneje la información y podría también involucrar la
confidencialidad de cierta información. Según el artículo 68(6), un Estado podrá
solicitar a la Corte la adopción de medidas necesarias para la protección de sus
funcionarios o agentes, así como de la información de carácter confidencial o
restringida.
Obligaciones
(b) Si la Corte realiza una solicitud de conformidad con el artículo 87(4) para
proteger cierta información, el Estado deberá cumplirla, para así proteger a las
víctimas, testigos y sus familiares.
52
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
Descripción
Todo procedimiento o ley nacional deberá ser lo suficientemente flexible para permitir
cambios a través del tiempo. Actualmente, una Comisión Preparatoria redacta las
Reglas de Procedimiento y Prueba de la Corte, las cuales proveerán más detalladamente
las disposiciones del Estatuto (artículo 51). Las Reglas podrán también ser reformadas
una vez que el Estatuto entre en vigor (artículo 51(2)). Estas Reglas normalmente no
requerirán de reformas legislativas a escala nacional, ya que éstas deberán coincidir con
lo que ya está señalado por el Estatuto (artículo 51(4)). No obstante, algunos
procedimientos nacionales podrían verse afectados por los requisitos señalados por
estas Reglas.22
Transcurridos siete años desde la entrada en vigor del Estatuto, cualquier Estado Parte
podrá proponer enmiendas a éste (artículo 121(1)). Por ende, los Estados Partes
deberán contar con los mecanismos que les permitan llevar a cabo los ajustes
necesarios en su legislación y procedimientos a través del tiempo, para garantizar que
no se excluya alguna prueba esencial por falta de compatibilidad con un nuevo artículo
o Regla, por ejemplo.
22
Como dijimos más arriba, las Reglas de Procedimiento y Prueba están terminadas.
53
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
Implementación
Los Estados Partes deberán prever futuras enmiendas a sus leyes y procedimientos
para cooperar con la CPI. Una manera de aplicar esto sería asegurando que
cualquier legislación relacionada con la CPI no sea difícil de reformar. Por ejemplo,
podrían existir obstáculos innecesarios para la implementación de las disposiciones
del Estatuto de Roma sobre cooperación estatal tal como una Ley Orgánica, la cual
requiere una mayoría calificada para reformarse. Por otro lado, sería recomendable
facultar a las autoridades relevantes para realizar enmiendas o regulaciones sencillas
necesarias posteriormente, sin necesidad de recurrir a la aprobación legislativa.
Sería útil que los Estados Partes estén informados sobre los avances de las reuniones
de la Comisión Preparatoria, durante el año 2000 y 2001. El trabajo realizado en
estas reuniones podría tener un impacto significativo en el desarrollo futuro de la
Corte. Por ejemplo, la reunión de noviembre/diciembre del 2000 discutirá los
acuerdos para el financiamiento de la Corte. La mayoría del material de estas
reuniones está disponible en la Internet (a través del sitio en la red de la ONU:
http://www.un.org) No obstante, frecuentemente existen retrasos para la publicación
de este material y muchas de las proposiciones de estas reuniones son informales.
Por ende, los Estados podrían requerir un representante que acuda a estas reuniones,
para así asegurar una información actualizada de los detalles procesales
negociándose actualmente.23
Existen tres medios a través de los cuales la CPI puede solicitar que una persona
sospechosa de la comisión de un crimen sea presentada ante la Corte:
23
El Comité Preparatorio de la Corte Penal Internacional, después de terminar las "Reglas de Procedimiento y
Prueba" y los "Elementos de los Crímenes" ha continuado trabajando desde el segundo semestre del año 2000.
54
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Los Estados deberán responder sin retrasos a todas las solicitudes de ejecución de
tales órdenes y realizar tales audiencias en su territorio (artículos 59(1) & 89).
Una vez que la persona es detenida por el Estado, éste deberá llevarla ante una
autoridad judicial competente para que se le brinde la oportunidad de solicitar
libertad provisional antes de su entrega (artículo 59(2)-(6)). En la mayoría de los
casos la autoridad judicial ordenará que la persona sea puesta a disposición de la
Corte tan pronto como sea posible (artículo 59(7)). Ver la sección “Entrega de una
persona a la CPI” para detalles y excepciones.
Las personas sujetos de la orden de la CPI tienen varios derechos, los cuales serán
observados por las autoridades estatales competentes (artículo 55) En algunos casos,
una vez que la CPI emita la orden, los Estados deberán tomar las medidas cautelares
para la ejecución (artículo 57(3)). Estas podrán incluir la identificación,
localización, congelamiento, embargo de frutos, propiedades, créditos e
instrumentos del crimen.
Descripción
55
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Una vez que la orden ha sido despachada por la Sala de Cuestiones Preliminares, la
Corte podrá entonces solicitar al Estado la ejecución de la orden de conformidad
con las disposiciones del caso, según la Parte 9 (artículo 58(5)). En la mayoría de
los casos, todas las solicitudes de detención y entrega deberán ser por escrito y
sustentadas por cierta información, documentos y declaraciones, según el artículo
91. Tal información incluirá el posible paradero de la persona (artículo 91(2)(a)). En
los casos de urgencia, la Corte podrá realizar las solicitudes por cualquier otro
medio que permita dejar constancia escrita, como el facsímil, siempre que tal
solicitud sea confirmada en la forma indicada para estas solicitudes (artículo 91(1)).
La Corte podrá también solicitar al Estado para que éste le comunique cualquier
información sobre requisitos adicionales según su derecho interno referente a los
documentos de fundamentación, adicionalmente los Estados están obligados a
consultar con la Corte tal solicitud (articulo 91(4)). Nótese que los requisitos del
derecho interno deberán, si es posible, ser menos engorrosos que aquellos aplicables
a las solicitudes de extradición, tomando en cuenta el carácter específico de la Corte
(artículo 91(2)(c). Este último punto se discute con más detalle en la sección
“Entrega de una persona a la CPI”.
Detención provisional
56
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Nótese también que el Estado Parte podrá ser requerido para cooperar con el Fiscal
en la prevención para que ciertas personas no evadan la justicia en el caso de que
esté pendiente una decisión sobre la admisibilidad del caso bajo el artículo 19,
cuando una orden de detención ya se haya emitido (artículo 19(8)(c)).
Obligaciones
(a) Los Estados Partes deberán tomar inmediatamente las medidas necesarias en
respuesta a las solicitudes de la CPI para la ejecución de órdenes de detención,
inclusive las órdenes de detención provisional (artículo 59). Esta obligación es
también aplicable a las órdenes despachadas posteriormente para una persona
liberada bajo el artículo 92(3) debido a que la documentación requerida no fue
recibida en el momento de la detención provisional (artículo 92(4)).
(b) Si la Corte así lo solicita, los Estados Partes deberán informarle sobre cualquier
requisito especial bajo el derecho interno sobre los contenidos de la solicitud de
detención y de entrega.
(c) Todos los oficiales y autoridades de los Estados que tengan contacto con la
persona por detener, deberán presumir su inocencia hasta que no se le demuestre
su culpabilidad ante la Corte, de conformidad con el derecho aplicable (artículo
66).
(d) Si: (i) una persona ha sido detenida provisionalmente y el tiempo límite para
recibir la documentación que la fundamente no ha expirado aún; y (ii) la persona
sujeto de la orden de detención provisional voluntariamente consiente su entrega
a la Corte y (iii) esto se permite bajo el derecho interno del Estado requerido;
entonces (iv) el Estado deberá proceder con la entrega de la Persona a la Corte
lo más pronto posible (artículo 92(3)).
24
Las Reglas Nº117 y siguientes de las "Reglas de Procedimiento y Prueba" regulan los aspectos referidos a
la detención provisoria y a la manera en la que ella puede ser sustituida por otro medio de coerción.
57
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
(f) Los Estados deberán tomar las medidas cautelas con el propósito de decomisar,
cuando se solicite, luego del despacho de una orden de detención o
comparecencia (artículos 57(3)(e) & 93(1)(k).
Implementación25
Los Estados Partes necesitan contar con un procedimiento que verifique los
contenidos de las solicitudes de detención y entrega de la CPI (de conformidad con
los requisitos del artículo 91), y luego remita la solicitud de forma obligatoria a la
autoridad competente. Por ejemplo, los Estados podrían requerir que un oficial
judicial verifique la solicitud de la CPI, y luego emita su propia orden de detención
según el derecho interno. Esto ayudaría a minimizar el número de enmiendas al
derecho interno respecto a la ejecución de órdenes de detención. Sin embargo, los
Estado deberán asegurar que cualquier procedimiento no atrase innecesariamente la
ejecución de la solicitud de la CPI.
Cualquier requisito especial para las solicitudes bajo el derecho interno deberá
comunicársele a la Corte lo más pronto posible luego de la ratificación del Estatuto,
para evitar cualquier atraso innecesario posterior. Estos requisitos se discuten en
detalle en la sección “Entrega de una persona a la CPI”.
Las leyes penales y de procedimientos penales son necesarias para facultar a las
autoridades correspondientes para la aprehensión, arresto y/o detención provisional,
tanto de nacionales como de extranjeros, por los crímenes dentro de la competencia
de la CPI. El Estatuto también se refiere a la necesidad de observar las leyes
nacionales, si éstas existen. En otras palabras, los Estados podrán otorgar esta
competencia a sus propios oficiales, los cuales ya están familiarizados con el
derecho interno.
Cualquier ley o procedimiento de este tipo debería permitir que las personas que
estén provisionalmente detenidas (de conformidad con el artículo 92) sean liberadas
25
Si bien el proceso de arresto para posterior entrega de imputados a la Corte no tiene la naturaleza de una
"extradición" propiamente dicha, ya que la entrega de la persona se hace a un Tribunal Internacional y no a
otro Estado para su juzgamiento, lo cierto es que las regulaciones dispuestas por el Estatuto de Roma
contienen una serie de principios que son bastante similares a los que gobiernan la extradición y que surgen
de los convenios bilaterales o multilaterales. En consecuencia, para los países Latinoamericanos no deberían
generarse inconvenientes en el proceso de implementación del Estatuto a este respecto. No se nos escapa la
cuestión de la prohibición de extradición de Nacionales que contienen algunas Constituciones, pero ese punto
es tratado más adelante en el Manual.
58
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Los Estados deberán llevar cuenta del tiempo que la persona permanezca bajo
custodia, para poder asistir a la Corte en cualquier resolución futura, si la persona es
condenada posteriormente (artículos 78(2) & 86).
Los Estados necesitan leyes y procedimientos que impidan que las personas sujetos
de una orden de fugarse. Por ejemplo, la legislación podría prever que cuando el
Fiscal emita tal orden, las autoridades nacionales correspondientes tengan el
derecho a despojar a la persona de su pasaporte, o algo similar. Las leyes y
procedimientos deberían también permitir que la persona sea aprehendida o detenida
por la fuerza pública.
(g) Decomiso
59
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Derechos de la Persona26
Descripción
(a) A ser informada de que existen motivos para creer que ha cometido un crimen
de la competencia de la Corte;
(b) A guardar silencio, sin que ello pueda tenerse en cuenta a los efectos de
determinar su culpabilidad o inocencia;
Estos son los derechos mínimos según el Estatuto, y los Estados podrán disponer de
derechos más extensivos para tales personas. Adicionalmente, los Estados Partes
26
Como dijimos más arriba, la persecución, enjuiciamiento y condena que lleve adelante la Corte Penal
Internacional debe efectuarse respetando los derechos de las personas establecidos por la mayoría de los
convenios internacionales sobre derechos humanos. Así lo dispone el Estatuto al establecer una serie de
derechos para los imputados. En el ámbito Latinoamericano, la vigencia de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos hace que, al menos en el plano normativo, estos derechos ya se encuentren garantizados.
60
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
deberán tomar en cuenta los siguientes derechos que se estipulan en el artículo 55(1)
y aplicarlos a todo aquel involucrado en una investigación de la CPI:
(c) Quien haya de ser interrogado en un idioma27 que no sea el que comprende y
habla perfectamente contará, sin cargo alguno, con los servicios de un intérprete
competente y las traducciones que sean necesarias a los efectos de cumplir el
requisito de equidad.
Obligaciones
a) Los Estados deberán observar los derechos del artículo 55(2) cuando existan
fundamentos para creer que la persona cometió un delito dentro de la competencia
de la Corte y la persona debe ser interrogada por el Fiscal, o por las autoridades
nacionales conforme a una solicitud según la Parte 9. Estos derechos deberán
comunicársele a la persona antes de ser interrogada e incluyen: ser informada de
que existen motivos para creer que ha cometido un crimen de la competencia de la
Corte; guardar silencio, sin que ello pueda tenerse en cuenta a los efectos de
determinar su culpabilidad o inocencia; ser asistida por un abogado defensor de su
27
Algunos Proyectos o Códigos Procesales Penales (vgr. Bolivia, Guatemala, Paraguay) en Latinoamérica ya
han introducido la cuestión referida al lenguaje en que se expresa el imputado; por ello no debe parecer
extraña la correcta disposición del Estatuto de Roma a este respecto.
61
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
Estos derechos están también incluidos en el PIDCP, y muchos Estados piensan que
representan el estándar mínimo bajo el derecho internacional para un debido
proceso. Adicionalmente, la CPI pretende hacer justicia, y el trato inadecuado de las
personas que podrían ser inocentes no es justo.
Los Estados deben revisar la legislación existente para asegurar que nadie someta a
tortura o tratamientos o castigos crueles, inhumanos o degradantes a una persona
bajo investigación, de conformidad con el PIDCP y la Convención Contra la
Tortura, la cual también ha recibido amplio apoyo de la comunidad internacional.
Los Estados Partes deberán capacitar a sus oficiales de policía para que respeten los
estándares básicos mínimos, si no lo hacen actualmente. Los Estados deberán
asimismo asegurarse de que existan recursos para pagar a defensores públicos, en el
caso en que la persona interrogada no cuente con los medios necesarios para pagar
62
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
por un abogado. Nótese sin embargo, que el artículo 100(1) dispone que los Estados
pueden no pagar por los servicios de interpretación y traducción cuando ejecuten
una solicitud de la Corte.
Desde un punto de vista óptimo, sería recomendable que los Estados Partes
dispusieran de establecimientos penitenciarios especiales para indiciados, salvo que
la persona ya esté bajo custodia por otra causa. Sería óptimo si los Estados Partes
establecieran un proceso para indemnizar a aquellas personas que sean arrestadas o
detenidas incorrectamente.
Descripción
Según el artículo 59(2), una vez que la persona es detenida, ésta será llevada sin
demora ante la autoridad judicial competente del Estado de detención. La autoridad
determinará lo siguiente, de conformidad con el derecho de ese Estado:
(c) si el detenido tendrá derecho a solicitar ante la autoridad competente del Estado
de detención la libertad provisional antes de su entrega.
Si la persona detenida ya está siendo investigada por el mismo delito por el Estado,
éste deberá notificárselo a la Corte, de conformidad con los procedimientos
señalados en la sección anterior “Procedimientos en que la CPI y un Estado desean
investigar el mismo caso”. Si la persona detenida está ya siendo investigada o
cumple una condena de prisión por un delito distinto, entonces el Estado está
siempre obligado a cumplir la solicitud de entrega, pero deberá consultar con la
Corte luego de decidir conceder la entrega, para determinar el método de acción más
apropiado (artículo 89(4)).
Cuando la persona ya fue enjuiciada por el mismo delito, o la conducta que tipifica
ese delito, se deberán de seguir los procedimientos de la sección “Entrega de una
persona a la CPI”, en especial el componente de ne bis in idem (artículo 20).
63
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
a) Una vez que la persona es arrestada, ésta debe de ser llevada sin demora ante la
autoridad competente del Estado de detención, para que se determine si el
arresto se llevó a cabo cumpliendo con ciertos requisitos y si la orden aplica a la
persona (artículo 59(2)). No obstante, la autoridad estatal no podrá considerar si
la CPI emitió correctamente la orden (artículo 59(4)). Solo la persona podrá
hacer tal impugnación ante la CPI.
Implementación
a) Tiempo de detención
Muchas jurisdicciones ya cuentan con una disposición que dispone que la persona
solo pueda permanecer detenida por veinticuatro horas, y definitivamente por no
más de unos pocos días, antes de ser llevada ante una autoridad judicial que
determine si la detención sigue aún en pie. Los Estados Partes deberán garantizar
que las personas no estén bajo detención por periodos largos, en espera de una
audiencia judicial que valide la detención.
c) Deber de consultar
64
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Libertad provisional
Descripción
Obligaciones
a) Las personas detenidas por medio de una orden de la CPI deberán tener la
oportunidad de ejercer su derecho a solicitar la libertad condicional antes de su
entrega. (artículo 59(3)). En algunas jurisdicciones, esta aplicación no sería
necesaria, ya que la autoridad competente ya se encuentra obligada a determinar
si la persona debe ser detenida o no, aunque ésta no solicite su libertad.
b) La autoridad competente del Estado requerido deberá tomar en cuenta si, dada la
gravedad del supuesto crimen, existen circunstancias urgentes o excepciones que
justifiquen la libertad provisional y si existen las salvaguardas necesarias para
que el Estado pueda cumplir su obligación de entregar a la persona a la Corte.
No obstante, el Estado requerido no puede examinar si la orden de detención fue
dictada conforme a derecho con arreglo al Estatuto de Roma (artículo 59(4)).
65
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
a) Libertad provisional
Las personas que tengan a su cargo los centros penitenciarios deberán llevar una
cuenta especial de cualquier persona detenida de conformidad con una orden de la
CPI, y enviar una copia de tal archivo a la CPI, cuando la persona se entregue ante
la Corte. Esto ayudará a la CPI a determinar una condena apropiada, si la persona es
posteriormente condenada.
Descripción
El artículo 58(7) faculta a la Sala de Cuestiones Preliminares para emitir una orden
de comparecencia, como alternativa a una orden de detención. Tal orden de
comparecencia podrá despacharse con o sin condiciones que restrinjan la libertad,
menos la detención, siempre que tales condiciones sean aceptadas por el derecho del
66
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Estado custodio. Por ejemplo, las leyes internas podrían permitir la confiscación del
pasaporte de la persona en tales circunstancias.28
Los párrafos (a)-(d) del artículo 58(7) enumeran los requisitos de las órdenes de
comparecencia:
Obligaciones
Implementación
28
El proceso de reforma procesal penal latinoamericano que hemos apuntado más arriba, también ha
introducido medidas alternativas al encarcelamiento preventivo (cfr. por todos, Julio B.J. Maier, Derecho
Procesal Penal, Tº1, Fundamentos, pág. 381, Ed. Del Puerto, Buenos Aires, 1996). Estas medidas alternativas
podrán ser incluidas cuando se piense en la implementación del Estatuto de Roma para los casos del art.
58(7).
67
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
El artículo 91(2) establece que los Estados Partes deberán tomar en cuenta el
“carácter específico de la Corte”, cuando determinen sus requisitos para el proceso
de entrega de personas. Además dispone que “aquellos requisitos no podrán ser más
onerosos que los aplicables a las solicitudes de extradición conforme a los tratados o
acuerdos celebrados por el Estado requerido y otros Estados, y de ser posible, serán
menos onerosos”. Se utilizó está redacción para persuadir a los Estados, en lo
posible, a introducir un proceso más sencillo para la entrega de personas a la CPI
que el proceso actual de extradición entre los Estados.
La idea detrás de esta disposición es eliminar los largos retrasos que involucran hoy
los actuales procedimientos de extradición de nacionales de una Estado a otro. Esto
es comprensible si se toman en cuenta las diferencias en la jurisprudencia y
parámetros de debido proceso entre distintas jurisdicciones, y el hecho de que los
Estados necesitan proteger a sus nacionales de posibles injusticias. Sin embargo, el
régimen de la CPI fue establecido por los mismos Estados Partes. Durante la entrega
de personas a la CPI, no se deben de tomar en cuenta las consideraciones relativas al
impacto a los valores nacionales en el ejercicio del derecho penal en los distintos
Estados. Estas inquietudes no surgen de la misma manera con la CPI, ya que no es
una jurisdicción extranjera, como en el caso de un tribunal de otro Estado. Todos los
Estados Partes participaron activamente en la redacción del Estatuto de Roma y
participarán activamente en el desarrollo futuro de reglas de procedimiento, a través
de su participación en la Asamblea de los Estados Partes. Consiguientemente, todo
nacional será tratado de conformidad con los estándares establecidos y mantenidos
por los Estados Partes y no se deben seguir los mismos procedimientos engorrosos
para la protección de nacionales de procesos que los Estados no pueden controlar.
68
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
69
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
c) Los Estados deberán garantizar que la persona sea entregada a la Corte lo más
pronto posible una vez que se emita orden de entrega de la persona (artículo
59(7)).
Implementación
a) Medidas sencillas
Los Estados podrían tomar medidas sencillas para la ejecución de las solicitudes de
entrega de la CPI, con el fin de asegurar que no se retrase innecesariamente la
valiosa labor de la Corte para la comunidad internacional. Dentro de lo posible,
éstos deberán establecer un procedimiento especial para la entrega a la CPI, que
elimine algunos de los obstáculos usuales del procedimiento de extradición. Por
ejemplo, podrían reducir la cantidad de apelaciones que pueda hacer una persona, o
eliminar el derecho a apelar, con el fin de facilitar el proceso de comparecencia de la
persona ante la CPI. Según el artículo 14(5) del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, el cual enumera los estándares básicos mínimos bajo el derecho
internacional, una persona solo tiene derecho a apelar contra una condena o
sentencia, no una orden de extradición o entrega. El Estatuto de Roma es omiso
respecto de las apelaciones contra órdenes de entrega a escala nacional.
b) Por lo menos, los Estados Partes deberían contar con un procedimiento expedito
para transportar a las personas a la CPI, una vez que la orden de entrega se emita
por el Estado. En la mayoría de los casos, deberían poder remunerárseles los
gastos de transporte de la persona hasta la CPI.
c) Nacionales y extranjeros
Los Estados deberán tener leyes y procedimientos vigentes que permitan la entrega
tanto de nacionales como de extranjeros que se encuentren en su territorio.
Los Estados deberán tomar en cuenta que el Estatuto de Roma no permite que los
Fiscales nacionales tengan discreción alguna respecto a la inmunidad de entrega de
personas debido a la necesidad de su asistencia con otras investigaciones o
enjuiciamientos. Esto es comprensible debido a la gravedad de los crímenes de la
competencia de la CPI. El artículo 65(5) prevé que el las consultas que el Fiscal
realice con la defensa para declarar la culpabilidad no tienen carácter obligatorio.
Solo la Corte puede decidir si se debe de tomar en cuenta la voluntad de una persona
para cooperar. Por ejemplo, podría considerarse como un factor atenuante durante el
proceso de condena, según el artículo 78(1) ( “circunstancias personales del
condenado”).
e) Prueba suficiente
70
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El artículo 91(2)(c) regula que los Estados determinarán sus propios requisitos para
la entrega de una persona en su Estado. Uno de los requisitos a considerar es la
prueba suficiente que se requiere para que el Estado permita la orden de entrega.
Este requisito deberá ser tan mínimo como sea posible, tomando en cuenta la
necesidad de que los Estados eviten la creación de requisitos tediosos para la Corte.
El artículo 58(3) determina que todas las órdenes de detención de la CPI
consignarán lo siguiente: (a) el nombre de la persona y cualquier otro dato que sirva
para su identificación; (b) una referencia expresa al crimen de la competencia de la
Corte por el que se pide su detención; (c) una descripción concisa de los hechos que
presuntamente constituyen esos crímenes”. Estos componentes deberían prever la
prueba suficiente para ordenar la entrega, tomando en cuenta a las garantías
procesales del Estatuto. Por consiguiente, el método mejor y más fácil para asegurar
la prueba suficiente requerida para cumplir con las solicitudes de la CPI es tomando
los contenidos requeridos por la CPI para una orden de detención como el requisito
mínimo.
71
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Ne bis in idem
Existe, sin embargo, un caso en el cual los Estados podrán aplazar la ejecución de
una orden de entrega. De conformidad con los artículos 20(3) y 89(2), la persona
que sujeto de la orden de entrega podrá impugnar la solicitud ante un tribunal
nacional, con base al principio de ne bis in idem. El artículo 20(3), dispone sobre
este principio: la Corte no perseguirá a nadie que haya sido perseguido por otro
tribunal en razón de los delitos de genocidio, crimen de lesa humanidad, o crimen de
guerra, tal y como están definidos por el Estatuto. La única excepción a este
principio se discute en la sección de “Complementariedad”.
29
El principio de la prohibición de la persecución penal múltiple no resulta extraño en el ámbito
Latinoamericano (cfr. Convención Americana sobre Derechos Humanos, art. 8.4). Este principio ya se
encuentra incluido en muchos de los Códigos Procesales de la región. Sobre un desarrollo de este principio,
cfr. por todos, Julio B. J. Maier, Derecho Procesal Penal, cit. Pag.595 y siguientes.
72
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
a) Los Estados Partes deberán consultar con la Corte sin dilación para resolver
cualquier problema que surja relacionado con la ejecución de una solicitud de
entrega, inclusive en el caso en que la persona en el Estado requerido no sea con
certeza la persona solicitada en la orden de detención (artículo 97(b)). No
podrán simplemente rechazar la ejecución de la orden de entrega.
b) Los Estados Partes deberán permitir que la persona sujeta de la entrega impugne
ante un tribunal nacional o cualquier autoridad competente, si la CPI busca a la
persona por una conducta que ya ha sido objeto de un juicio por genocidio,
crímenes de lesa humanidad o crímenes de guerra (artículos 20(3) y 89(2)). No
obstante, el tribunal o la autoridad nacional no podrán determinar si la cuestión
es o no admisible ante la CPI. Solo la CPI puede tomar tal decisión.
c) Si la persona sujeto de la entrega impugna tal orden ante una tribunal o cualquier
otra autoridad nacional, con base al principio de ne bis in idem, el Estado
solicitado deberá consultar inmediatamente con la Corte para que se determine
si ha habido una decisión sobre la admisibilidad de la causa (artículo 89(2)).
Implementación
a) Los Estados Partes deberán asegurarse de contar con los procedimientos que
permitan una comunicación rápida y eficiente con la Corte, aún si existe un
problema en la ejecución de una solicitud de entrega, inclusive sobre la
imposibilidad para localizar a la persona requerida (artículo 97(b)).
73
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
e) Una vez que sea evidente que la Corte ya decidió sobre su admisibilidad, el
Estado deberá organizarse para entregar a la persona lo más pronto posible
(artículo 59(7)).
f) Si hay una decisión sobre admisibilidad pendiente, los Estados deben considerar
si desean continuar o no con la entrega. Si desean, podrán continuar, caso en el
cual una vez que se decida la entrega, la persona deberá ser llevada ante la Corte
lo más pronto posible (artículo 59(7)). Si los Estados deciden posponer la
entrega, sería recomendable contar con legislación y procedimientos que
permitan a las autoridades en cuestión tener bajo su custodia temporal a la
persona, o poder restringir su libertad de alguna otra forma, hasta que la Corte
decida sobre su admisibilidad. De otra manera, la persona podría escabullirse.
Solicitudes concurrentes
Descripción
Obligaciones
a) Al recibir una solicitud, tanto de la CPI como de otro Estado para la entrega de
una misma persona con relación a una misma conducta, según el artículo 89 el
Estado Parte deberá notificárselo a la Corte y a al Estado que solicita (artículo
90(1)).
74
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
b) Cuando (i) el Estado que solicita es también un Estado Parte; y (ii) la Corte ya
ha decidido sobre la admisibilidad, tomando en cuenta la investigación o el
enjuiciamiento que lleva a cabo el Estado requirente; entonces (iii) el Estado
solicitado deberá dar prioridad a la solicitud de la Corte. Si la Corte aún está
considerando la cuestión de admisibilidad, el Estado no deberá extraditar a la
persona al Estado requirente hasta que la Corte decida la admisibilidad del caso.
Sin embargo, el Estado requerido podrá dar curso a la solicitud de extradición en
cualquier otro extremo (artículo 90(2)).
c) Cuando (i) el Estado requirente no sea un Estado Parte; y (ii) el Estado requerido
no está obligado por alguna norma internacional a conceder la extradición al
Estado requirente; y (iii) la Corte ha decidido sobre su admisibilidad; entonces
(iv) el Estado requerido deberá dar prioridad a la solicitud de entrega de la Corte
(artículo 90(4)). Si la Corte no ha determinado aún la admisibilidad de la causa,
el Estado requerido podrá discrecionalmente dar curso a la solicitud de
extradición , pero no deberá extraditar a la persona al Estado requirente (artículo
90(3) & (5)).
d) Cuando (i) el Estado requirente no sea un Estado Parte; y (ii) el Estado requerido
esté obligado por alguna norma internacional a extraditar la persona al Estado
requirente; y (iii) la Corte ya haya decidido sobre la admisibilidad de la causa;
(iv) el Estado requerido deberá decidir si hace la entrega a la Corte o concede la
extradición al Estado requirente. Para tomar esta decisión, el Estado requerido
tendrá en cuenta al menos estos factores pertinentes: (a) las fechas respectivas de
la solicitudes; (b) los intereses del Estado requirente, tales como si el crimen se
cometió en su territorio o fue cometido contra sus nacionales; y (c) la
posibilidad de que la Corte y el Estado requirente lleguen a un acuerdo respecto
de la entrega (artículo 90(6)).
e) Cuando (i) el Estado requirente sea o no un Estado Parte; y (ii) la Corte haya
determinado la inadmisibilidad de la causa, tras la notificación de varias
solicitudes concurrentes y la posterior decisión de admisibilidad; (iii) y
posteriormente el Estado requerido deniegue la extradición al Estado requirente;
(iv) entonces el Estado requerido notificará su decisión a la Corte, en caso de
que la decisión sobre la admisibilidad de la Corte se haya tomado basándose en
la habilidad de enjuiciamiento del Estado requirente (artículo 90(8)).
75
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Cuando todos estos factores se den, excepto que el Estado requerido si está obligado
por una norma internacional a conceder la extradición al Estado requirente, entonces
el Estado decidirá si entrega la persona a la Corte o la extradita al Estado requirente.
Cuando tome esta decisión deberá tomar en cuenta todos los factores enumerados en
el artículo 90(6), y tendrá especialmente en cuenta la naturaleza y la gravedad
relativas de la conducta de que se trate (artículo 90(7)(b)).
Implementación
Los Estado Partes deberán asegurarse de contar con las leyes y procedimientos para
tratar todas estas obligaciones de conformidad con el Estatuto. Cualquier legislación
o directriz política deberá determinar claramente cuál solicitud es prioritaria en cada
situación. La única excepción se da cuando el Estado deba tomar la decisión. En
cada uno de estos casos, la legislación o directriz política deberá requerir que la
persona que decida considere todos los factores relevantes, especialmente aquellos
enumerados en el artículo 90(6) & (7).
Descripción
76
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Al aceptar los artículos 27 y 86 del Estatuto, los Estado Partes abiertamente retiran
cualquier inmunidad contra la CPI. Por ende, cuando un nacional de un Estado Parte
es requerido por la Corte, ese nacional no podrá reclamar las inmunidades normales
que existan respecto al enjuiciamiento penal en el exterior, y el Estado requerido no
estará violando sus obligaciones internacionales si entrega la persona a la CPI.
No obstante, cuando la CPI haya determinado que la inmunidad sí existe, podrá dar
curso a la solicitud de entrega solamente si cuenta primero con el apoyo del Estado
de nacionalidad del acusado. En tal caso, el Estado requerido que proceda con la
entrega no violaría sus obligaciones internacionales de conformidad con la
Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
El artículo 98(2) establece que la Corte no podrá dar curso a la solicitud de entrega
que requiera que el Estado requerido viole sus obligaciones de conformidad con los
acuerdos internacionales que requieran el consentimiento del Estado que entrega a
una persona de ese Estado a la Corte. Esta situación podría surgir cuando una
persona detenida en el Estado requerido haya sido extraditada a ese Estado desde
otro país, bajo la condición de ser devuelta a su país luego de la investigación o
enjuiciamiento, o la ejecución de una condena. Podría también darse cuando, bajo el
acuerdo de Status de Fuerzas, los miembros de las fuerzas armadas de un tercer
Estado se encuentren en el territorio del Estado solicitado. Cuando el Estado que
entregue sea un Estado Parte del Estatuto de Roma, no deberá restringir la
posibilidad de que otros Estados entreguen a sus nacionales a la CPI, ya que cada
Estado Parte acepta la jurisdicción de la Corte sobre sus nacionales y no hay
fundamento para rechazar la entrega de una persona a la Corte. Sin embargo,
cuando la persona requerida alegue el principio de ne bis in idem, y la decisión de
admisibilidad de la CPI aún esté pendiente, el Estado requerido deberá consultar con
el Estado que entrega y la Corte, de conformidad con el artículo 89(2), para
determinar si se debe suspender o no la ejecución de la solicitud. De lo contrario el
Estado requerido tendría que contar con el consentimiento del Estado de la persona
que entrega. La Corte deberá contar con la cooperación del Estado que entrega, si no
es éste un Estado Parte, antes de que la Corte solicite la entrega.
Obligaciones
77
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación30
Podría creerse que algunas previsiones del Estatuto están en conflicto con los
requisitos constitucionales de algunos Estados, en especial aquellos relacionados a
la entrega de una persona a un tribunal fuera del Estado. Al determinar el posible
impacto del Estatuto en la constitución de un Estado, es importante tener en cuenta
los valores que busca la CPI en nombre de la justicia y la impunidad de aquellos que
aprovechan del poder de manera destructiva. Sería difícil encontrar una constitución
que no aspire a estos valores. Cuando los Estados toman en cuenta los intereses que
intentan protegerse en cada caso, seguramente encontrarán un punto en común. Este
30
El dictado de legislación complementaria puede satisfacer puntualmente las disposiciones del Estatuto pero
incumplir otros deberes internacionales de los Estados. Como hemos dicho, ello se funda en las exigencias
más rigurosas de otras disposiciones del derecho internacional convencional o consuetudinario, que expanden
aún más lejos el alcance que hoy consagra el Estatuto de Roma para ciertos institutos jurídicos.
El artículo 10 del Estatuto de Roma parece dar respuesta a esta aparente contradicción, al señalar que: “Nada
de lo dispuesto en la presente parte se interpretará en el sentido de que limite o menoscabe de alguna manera
las normas existentes o el desarrollo del derecho internacional para fines distintos del presente Estatuto”.
La existencia de numerosas convenciones y protocolos de protección de los derechos humanos en la región
americana y la interpretación que de los mismos han formulado la Comisión y la Corte Interamericana de
Derechos Humanos singulariza el cumplimiento de la obligación de implementar legislación en el continente.
78
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
punto deberá ser la vía para reconciliar cualquier conflicto aparente entre las
disposiciones constitucionales y los requisitos del Estatuto. Por ejemplo, algunos
Estados europeos han encontrado que es innecesario reformar las disposiciones
constitucionales sobre la inmunidad de su Jefe de Estado. Se cree que cualquier Jefe
de Estado que cometa alguno de los crímenes dentro de la jurisdicción de la CPI
dejaría de estar amparado por la Constitución.
Las siguientes disposiciones del Estatuto de Roma podrían representar algunos roces
constitucionales para los Estados Partes que sean requeridos para entregar una
persona a la CPI:
• las personas que comparezcan ante la CPI serán juzgadas por un tribunal
tripartito y no por un jurado (artículo 39(2)(b)(ii)).
79
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Los Estados Partes del Estatuto de Roma deben eliminar todas las formas existentes
de inmunidad para sus representantes. El Estatuto simplemente los obliga a disponer
de una excepción a la regla general, si aún no lo han hecho.
Obligaciones
80
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
Cuando las constituciones preven inmunidad absoluta para cualquier oficial del
Estado, el artículo 27 podría requerir reformas constitucionales o legislativas en los
Estados Partes. Podrían necesitar establecer una excepción a esta inmunidad
absoluta, para sus Jefes de Estado y cualquier otro oficial que de lo contrario sería
inmune al enjuiciamiento penal. Esta enmienda podría ser menor, y podría
simplemente consistir en agregar una disposición que cree la excepción al principio
de inmunidad para los Jefes de Estado y cualquier otro oficial, en el caso de que
cometan cualquiera de los crímenes enumerados en el Estatuto.
No obstante, algunos Estados europeos han decidido que no deben reformar sus
constituciones, con el fin de prever una excepción a las inmunidades según el
derecho interno. Ellos consideran que esto ya está implícito en las constituciones. Si
esta situación extraña surgiera, en que la CPI requiera la entrega de un oficial, tal
como el Jefe de Estado, una interpretación integral de la disposición constitucional
en cuestión permitiría la entrega de este oficial, dado el propósito de la CPI de
combatir la impunidad por “los más graves crímenes de relevancia para la
comunidad internacional en su totalidad”. Si un oficial de Estado comete un crimen
tal, esto sería una violación a los principios subyacentes de la propia constitución.
Por consiguiente, otros Estados podrían entregar a oficiales de la CPI, sin considerar
como un obstáculo la protección que sus constituciones otorgan a los oficiales en
circunstancias normales.
Los Estados también podrían disponer de previsiones que aseguren que sus propios
tribunales puedan enjuiciar al Jefe de Estado por los delitos de la competencia de la
CPI. La ventaja de esta medida yace en el principio de complementariedad que
según el Estatuto, indica que sería el Estado quien sería competente en este caso.
Otra ventaja es el hecho de que es más fácil para los Estados enjuiciar a sus propios
líderes por su cuenta.
81
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Imprescriptibilidad 31
Descripción
Obligaciones
Los Estados deben asegurarse de que las personas puedan ser entregadas a la CPI,
aún cuando la prescripción normalmente se aplicaría en el derecho interno por el
crimen que ellas cometieron.
Implementación
Los Estados podrían desear seguir los pasos de Francia, llevando a cabo una reforma
general a su constitución que les permita cooperar con la CPI en todas las
situaciones. O podrían introducir una reforma más específica, que prevea que la
31
Casi todas las legislaciones nacionales contienen normas relativas a la prescripción de las acciones
judiciales y sanciones de los llamados delitos ordinarios o comunes, pero sólo en muy contados casos esas
normativas locales consagran la imprescriptibilidad de los crímenes de derecho internacional, en clara
discordancia con las previsiones del Estatuto de Roma. El deber de dictar legislación de implementación o
complementaria para la adecuada cooperación de los Estados Parte con la Corte Penal Internacional es
generalmente coincidente con los requerimientos del derecho internacional convencional y consuetudinario.
Por ejemplo, la norma que consagra la imprescriptibilidad de los crímenes de derecho internacional está
contenida en el Estatuto de la Corte y se encontraba anteriormente consagrado en otras convenciones y en los
Estatutos de los Tribunales Internacionales Ad Hoc para la Antiagu Yugoslavia y Ruanda.
82
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
La CPI requerirá en ciertas ocasiones que un Estado Parte entregue a sus propios
nacionales, cuando la persona sea sospechosa de haber cometido un crimen de la
competencia de la Corte. No obstante, esto podría representar dificultades para
aquellos Estados en los cuales su constitución expresamente prohiba la extradición
de sus nacionales, y podría requerir de soluciones creativas. Tales Estados deberían
tomar en cuenta el “carácter específico de la Corte” (artículo 91(2)(c)) al decidir
sobre la mejor manera de asegurar que la nacionalidad de la persona requerida no
afecte su entrega ante la CPI.
Obligaciones
Los Estados Parte del Estatuto no podrán alegar bajo ninguna circunstancia que la
nacionalidad del acusado, o una disposición constitucional que prohibe la
extradición de nacionales impida su entrega.
Implementación
83
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
b) Reformar la Constitución
Descripción
32
La diferencia que se explica en el Manual debe ser tenida muy en cuenta a la hora de los procesos de
ratificación e implementación, sobre todo en los países que tienen cláusulas constitucionales que impiden la
extradición de sus nacionales.
84
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Durante las negociaciones sobre las penas de la CPI, muchos Estados estuvieron a
favor de la aplicación de la pena de muerte en los casos más extremos. El número de
Estados con pena de muerte es poco menor que el de aquéllos que no tienen pena de
muerte. No existe la oportunidad para rehabilitación alguna cuando se impone la
pena de muerte. Por ende, la cadena perpetua con la posibilidad de reducirla a 25
años, es un compromiso razonable entre la pena de muerte y la prisión máxima de
30 años. Los Estados deberán recordar que el artículo 80 expresamente establece
que el Estatuto no afecta la aplicación por parte de los Estados de aquellas penas
prescritas por su propio derecho interno, ni afecta la ley de aquellos Estados que no
impongan las penas prescritas en el Estatuto. Los Estados Partes no deben imponer
las mismas penas por los mismos delitos en su jurisdicción, ni deberán aplicar las
condenas de prisión a no ser que voluntariamente lo quieran hacer. En este caso, los
Estados podrán también especificar las condiciones bajo las cuales aceptarían a las
personas condenadas, inclusive la condición de no aplicar la cadena perpetua
(artículo 106(2). Por consiguiente, los Estados Partes que cuenten con las
disposiciones constitucionales que prohiban la imposición de la cadena perpetua
solo necesitarán permitir la excepción de entregar a la persona a la CPI, pese a que
tal persona pueda ser condenada a cadena perpetua.
Obligaciones
Los Estados Partes del Estatuto deberán entregar a la persona acusada a la CPI
cuando ésta así lo solicite, aún si existe la posibilidad de que dicha persona sea
condenada a cadena perpetua.
85
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
b) Reformar la Constitución
Descripción
86
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
Los Estados Partes del Estatuto deberán entregar a la persona a la CPI cuando así se
le solicite, de conformidad con las disposiciones del Estatuto, a pesar de que la
persona cuente con el derecho constitucional a ser juzgado por un jurado.
Implementación
Los Estados Partes deben revisar sus Constituciones y jurisprudencia existente sobre
el tema del derecho a ser juzgado por un jurado, para garantizar que esto no cree una
barrera que obstaculice la entrega de una persona a la CPI. Por ejemplo, podrían
encontrar que el derecho solo se aplica cuando los nacionales son juzgados por los
tribunales nacionales. Si se requiere una reforma constitucional, ésta simplemente
podría disponer que la entrega de una persona a la CPI es una excepción al principio
de que todo ciudadano de ese Estado deberá ser juzgado por un jurado.
3.8 Permitir el Tránsito de los Sospechosos por el Territorio Nacional hacia la CPI
Descripción
87
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
Implementación
Cuando los Estados ya cuentan con una legislación sobre la asistencia legal mutua,
solo deberán realizar reformas menores a éstas leyes, que les permitan cumplir con
sus obligaciones bajo estas disposiciones. Otros Estados deberán implementar leyes
y procedimientos que regulen el transporte por su territorio de aquellas personas que
estén siendo entregadas por otro Estado. Las leyes y procedimientos de los Estados
Partes deberán estipular que no se requiere autorización si la persona está siendo
transportada por vía aérea y no se prevé aterrizar en el territorio del Estado de
tránsito. Sin embargo, la legislación deberá regular aquellos casos en los que ocurra
un aterrizaje imprevisto. De manera ideal, el Estado de tránsito permitiría la
continuación del transporte sin demora luego de que se resuelva la razón que llevó
al aterrizaje imprevisto. El Estado de tránsito debería asegurarse de contar con leyes
que regulen la custodia de la persona en tránsito hasta un máximo de 96 horas
mientras permanezca en el país donde ocurrió el aterrizaje imprevisto. Nótese que
bajo el artículo 100(1)(e), los Estados podrían no tener que pagar aquellos gastos
“relacionados con el transporte de la persona que entregue a la Corte un Estado de
detención”. Los Estados deberían considerar aplicar las mismas disposiciones para
las personas condenadas que sean transportadas por su territorio.
88
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Las disposiciones del Estatuto en cuestión incluyen el artículo 66, el cual estipula
que las personas acusadas se presumirán inocentes hasta que no se demuestre su
culpabilidad ante la Corte, e incumbirá al Fiscal probar la culpabilidad del acusado
más allá de la duda razonable, para que la persona sea declarada culpable. Al mismo
tiempo, la Corte deberá asegurarse de que todo juicio sea justo y conducido de
manera imparcial (artículo 67(1)).
Tomando esto en cuenta, el Fiscal divulgará a la defensa cualquier prueba que obre
en su poder o está bajo su control y que, a su juicio, indica o intenta indicar la
inocencia del acusado, o que pueda afectar la credibilidad de las pruebas de cargo
(artículo 67(2)). La defensa tiene el derecho de oponer excepciones a las pruebas
presentadas por el Fiscal, al modo en que se obtuvieron, de conformidad con el
debido proceso. La defensa deberá tener también la oportunidad de presentar toda la
prueba que considere necesaria para asegurar que la Corte cuente con toda la
información relevante para el caso, previo a juzgar sobre la culpabilidad del acusado
(artículos 67(1)(e)) & 69(3)). Adicionalmente, la Corte tendrá la misma potestad
para solicitar la producción o presentación de cualquier prueba que considere para
lograr la verdad real (artículos 64(6)(d) & 69(3)).
En todos los casos, la calidad y la cantidad de la prueba que tanto el Fiscal como la
defensa presenten a la Corte tendrán un impacto importante en el número de
33
Como dijimos en otras notas, en Latinoamérica, en gran medida los requisitos del Estatuto de Roma se
encuentran también en la Convención Americana sobre Derechos Humanos, en particular en el art. 8.
89
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
condenas justas que se den. Es por esta razón que los Estados Partes deben de estar
preparados para asistir a la Corte de cualquier manera para la recolección y
conservación de la prueba, de conformidad con sus obligaciones estipuladas en las
distintas partes del Estatuto, para así agilizar el trabajo de la Corte. Según el artículo
69(8), la Corte podrá tomar en cuenta aquellas leyes nacionales que apliquen a la
relevancia o admisibilidad de la prueba recolectada por un Estado. Sin embargo, la
Corte no podrá fallar sobre la aplicación de la legislación de ese Estado. Por
consiguiente, aquellos que representen al Estado que recolecta la prueba para un
proceso de la CPI deben de estar familiarizados con los requisitos de la CPI así
como con sus propios requisitos nacionales. Para la CPI no es relevante si se
cumplieron los requisitos nacionales, salvo que estas leyes reflejen los estándares
internacionales.
Privilegios de confidencialidad
90
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
confidencialidad de cierta información que les es provista por las personas que
asisten o tratan, para que sus pacientes no teman revelar información importante
necesaria para un diagnóstico o tratamiento. Las Reglas de Procedimiento y Prueba
enumerarán taxativamente los tipos de comunicaciones que la CPI da carácter de
privilegiadas. Los Estados deberán tener en cuenta estos privilegios al recolectar
prueba para la CPI, con el fin de no perjudicar al juicio ante la Corte.
Obligaciones
Implementación
Para poder asistir a la Corte, los Estados deberán intentar garantizar que las
comunicaciones privilegiadas no requieran ser difundidas por persona alguna. La
mejor manera de asegurar esto es sosteniendo que ninguna de sus leyes requerirá la
difusión de tales comunicaciones, particularmente aquéllas parte de una
investigación de la CPI. Las personas bajo un proceso deberán de estar facultadas
para oponer excepciones ante una autoridad judicial, si alguien está por difundir
alguna de estas comunicaciones, o se niega a devolver una copia de ella que se
obtuvo sin el consentimiento de la persona. De igual forma la CPI no aceptará la
prueba que haya sido grabada secretamente, salvo que la persona a la cual ésta se
refiere renuncie a su privilegio.
Descripción
91
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Investigaciones
El Fiscal podrá también ejecutar las solicitudes en el territorio del Estado en algunas
circunstancias limitadas. Según el artículo 57(3)(d), la Sala de Cuestiones
Preliminares podrá autorizar al Fiscal para que tome determinadas medidas de la
investigación dentro del territorio de un Estado parte, aún si haber obtenido la
cooperación de éste, si la Sala determina que el sistema judicial del Estado u otras
formas de autoridad claramente no están en condiciones de cumplir una solicitud de
cooperación debido a que no existe autoridad u órgano alguno de su sistema judicial
competente, tal y como en el caso un conflicto armado. La Sala de Cuestiones
Preliminares deberá consultar a manera de lo posible con el Estado Parte, antes de
autorizar al Fiscal. Según el artículo 99(4), el Fiscal podrá ejecutar las solicitudes
que no requieran medidas obligatorias, tal y como la producción de prueba
voluntaria. Cuando la CPI no ha aún determinado si el caso es admisible, el Fiscal
deberá primero consultar con el Estado Parte y observar cualquier condición o
aspecto razonable que resalte el Estado Parte.
Audiencias
92
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Las solicitudes realizadas durante todas las etapas del proceso requieren de una
respuesta pronta por parte de los Estados, para que la Corte marche de manera
eficiente y eficaz. Nótese que la Corte podrá también hacer solicitudes urgentes para
la presentación de documentos o pruebas y éstas deban ser enviadas con urgencia
(artículo 99(2)). Adicionalmente, según el artículo 99(1), la Corte podrá solicitar
que determinadas personas estén presentes cuando se ejecute una solicitud de
prueba.
Obligaciones
a) Los Estados Partes deberán cumplir todas las solicitudes de asistencia para
presentar pruebas o información, ya sea que estas solicitudes sean del Fiscal, la
Sala de Cuestiones Preliminares, o cualquier otra Sala de la Corte (artículo 93).
No obstante, los Estados podrán rechazar tal solicitud cuando involucre asuntos
de seguridad nacional (artículos 72, 93(4) & 99(5), o cuando la ejecución de una
solicitud esté prohibida en el Estado requerido con base a un principio legal
fundamental existente de aplicación general (artículo 93(3)).
Implementación
b) Los Estados deben de contar con un procedimiento que asegure que todas las
solicitudes de asistencia estén dirigidas a la autoridad competentes lo más pronto
posible luego de haberse recibido, para que así prueba brindarse la asistencia de
manera expedita en todas las etapas de la investigación y procedimientos de la
Corte.
93
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
La mayor parte de los testigos que aceptan comparecer a un proceso de la CPI deben
de dar su testimonio personalmente, salvo que la Corte ordene lo contrario. Sin
embargo, la Corte podrá permitir que se presente un testimonio por medio de un
grabación de vídeo o audio (artículo 69(2)). Previamente a brindar el testimonio,
cada testigo se comprometerá a decir la verdad en su testimonio (artículo 69(1)).
La CPI no está facultada para ordenar el testimonio de una persona. Este fue uno de
los compromisos adquiridos en Roma cuando se finalizó la redacción del Estatuto.
Pero el Estatuto de Roma intenta compensar este aspecto brindando una amplia
protección a los testigos que acepten atestiguar, particularmente las víctimas. Por
ejemplo, la Corte contará con una Dependencia de Víctimas y Testigos, la cual
tratará cualquier aspecto que concierna a los testigos (artículo 43(6)). El artículo
93(2) también dispone que los testigos y o expertos que comparezcan ante la Corte
no serán enjuiciados o detenidos ni se restringirá su libertad personal por un acto u
omisión anterior a su salida del Estado requerido. Adicionalmente, la Corte podrá
solicitar a los Estados para que éstos “faciliten la comparecencia voluntaria ante la
Corte de testigos y expertos”, para que así alentarlos a comparecer ante la Corte
(artículo 93(1)(e)). No obstante, el artículo 100(1)(a) prevé que los gastos
relacionados con el transporte de los testigos y expertos correrán por cuenta de la
Corte.
En artículo 93(1), párrafos (a)-(f), (h) & (j) se enumeran los principales tipos de
asistencia que normalmente se le solicitará a los Estados Partes en relación con la
prueba testimonial.
Cuando el Estado así lo consienta, la Corte podrá también solicitarle que traslade a
una persona que ya está detenida por otro delito, con el fin de que brinde testimonio,
o identifique a alguna persona ante la Corte (artículo 93(1)(f) & (7)). El detenido
deberá también dar su libre consentimiento a ser trasladado y permanecerá detenido
durante el traslado (artículo 93(7)(a)(i) & (b)).
Obligaciones
En general, los Estados deberán asistir en los siguientes casos, cuando así lo solicite
la Corte.
94
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
k) Asegurar la protección de los derechos de todas las personas que formen parte
de las investigaciones, de conformidad con el artículo 55.
m) Brindar cualquier otro tipo de asistencia que no esté prohibida por el derecho
interno del Estado requerido, con el fin de agilizar la investigación y el
enjuiciamiento de los crímenes de la competencia de la Corte (artículo 93(1)(l)).
Implementación
95
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
ejemplo, los Estados podrían considerar una reforma a los procedimientos o leyes
existentes en cuestión de migración y aduanas, para facilitar que éstos conozcan
certeramente quién está transitando a través de sus fronteras.
También sería conveniente que los Estados crearan y tomaran archivos de los
distintos tipos de expertos que residen en su país, a los cuales podría solicitárseles
un informe, tales como médicos, peritos en balística, peritos de estrategia militar, o
expertos en el área de género. El artículo 100(1)(d) dispone que los gastos de
cualquier dictamen o informe pericial solicitado por la Corte correrán por cuenta de
ésta.
Se necesitará algún tipo de archivo para todos los testimonios que se brinden con
relación a una investigación de la CPI. Como mínimo, deberá haber un récord
escrito de éstos. Sin embargo, sería conveniente contar con un archivo más
completo, como grabaciones por vídeo, en el caso en que la persona no pueda
comparecer ante la Corte por alguna razón. De modo tal que la declaración será más
útil para la Corte, si la Corte acepta admitir esta prueba. Nótese que todos los gastos
de traducción, interpretación y transcripción correrán por parte de la Corte, según el
artículo 100(1)(b).
Nótese también el artículo 55(1), el cual aplica a todas las personas involucradas en
una investigación bajo el Estatuto de Roma. Deberán garantizárseles a todas las
personas interrogadas, inclusive las víctimas y posible testigos, los derechos
enumerados en este párrafo. No deberá obligárseles a declarar contra sí mismos, o
confesarse culpables, ni deberán sufrir de forma alguna de coerción, dureza o
amenaza, tortura o cualquier otra forma de tratamiento o castigo cruel, inhumano o
degradante, ni deberán ser arrestados o detenidos arbitrariamente. Aquellos Estados
que han implementados el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos o la
Convención contra la Tortura ya estarán conformes con estas disposiciones, siempre
que su legislación pueda aplicarse a las personas involucradas en una investigación
de la CPI. Otros Estados podrían requerir que se revise su legislación y
procedimientos respecto al tratamiento de las personas interrogadas.
Los Estados deberán contar con intérpretes y traductores competentes para aquellas
personas interrogadas que no comprendan o hablen fluido el idioma en el que se les
pregunta, o el idioma de los documentos sobre los cuales se les está preguntando. El
artículo 55(1)(c) estipula que la persona no deberá pagar por esto. Por consiguiente,
los Estados podrían crear una lista de intérpretes y traductores que estén disponibles
a corto plazo, para asistir en tales casos, y organizar una manera para que la Corte
cubra estos gastos, de conformidad con el artículo 100(1)(b).
96
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Los Estados deberán también revisar los estándares internacionales existentes para
las investigaciones, con el fin de que sus leyes no los contradigan.
Aún antes de que la CPI emita una orden de arresto, la Corte podrá solicitar al
Estado que interrogue a la persona que se sospecha cometió un delito de la
competencia de la CPI. Los Estados deberán contar con legislación y
procedimientos que les permitan cuestionar a tales personas, incluso posibilitar su
detención en los casos en que se requiera, en tanto que protegiendo los derechos de
la persona según el artículo 55(2). Estos derechos incluyen el derecho a que se le
impute, el derecho a la defensa técnica, el derecho a no declarar, y el derecho a ser
interrogado en presencia de un defensor. Sujetos a las garantías constitucionales, los
Estados podrían contar con leyes que les permitan detener a la persona hasta que se
le informe a la CPI sobre la declaración obtenida, siempre y cuando este periodo no
se alargue infundadamente, por ejemplo más de un día.
Los Estados podrían requerir, como mínimo, que se lleve un registro escrito de los
interrogatorios llevados a cabo.
Las legislación nacional deberá también disponer que el Fiscal y la defensa puedan
entrevistar a los nacionales o cualquier otra persona dentro del territorio, una vez
que la Corte lo haya consultado con el Estado, de conformidad con el artóculo
99(4)(b). Nótese que el artículo 100(1)(c) estipula que todos los gastos de traslado y
viáticos del personal de la CPI correrán por parte de la Corte.
Debido a que la CPI no puede obligar a las víctimas y testigos a brindar una
declaración o testimonio, los Estados no están obligados a exigir que tales personas
brinden declaraciones o comparezcan ante la Corte. No obstante, sería de gran
beneficio para la Corte si los Estados deciden utilizar citaciones y emplazamientos
para asegurar que la prueba vital se recabe en una manera expedita pero también
justa. Las personas que estén dentro del territorio del Estado requerido y sus
nacionales podrían ser citados por las autoridades del Estado para que declaren para
la Corte, siempre y cuando se protejan sus garantías. Esto podría requerir alguna
revisión de la legislación del Estado sobre la notificación de documentos, para que
se incluyan las citaciones. Por otro lado, los Estados podrían optar por entregar estas
solicitudes de entrega de prueba ante la CPI, sin ninguna coerción para la respuesta
de tal solicitud. La notificación de solicitudes también podría requerir que se
asegure de que la persona indicada reciba la solicitud y que ésta permanezca
siempre confidencial.
97
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El artículo 100(1)(a) dispone que la Corte cubrirá todos los gastos relacionados con
el viaje y la seguridad de los testigos y peritos. Sin embargo, los Estados deberán de
“agilizar la comparecencia voluntaria de los testigos y peritos ante la Corte”
(artículo 93(1)(l)). En otras palabras, los Estados deberán hacer todo lo posible para
que sea fácil para los testigos y peritos del su Estado viajar a la Corte, bajo su propia
voluntad. Esto incluye realizar cualquier diligencia para el viaje, disponer de
defensa extra, o cualquier otro asunto que el Estado consideré que ayudará a estas
personas.
La legislación nacional deberá regular la emisión de órdenes que permitan que las
personas en cuestión sean registradas si la CPI así lo requiere. También podrían
requerir que los representantes del Fiscal y la defensa puedan estar presentes durante
estas inspecciones, si así lo solicita la Corte, luego de consultar con el Estado en
cuestión.
Los Estados deberán designar una unidad de almacenaje para tales materiales, hasta
que se requieran en el juicio, y limitar el número de personas que pueden tener
acceso a ellos. Esto evitará cualquier posible contaminación de tal prueba.
98
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
necesidades de los testigos, por lo cual se deben de tomar distintas medidas para
cada uno. Sin embargo, la idea fundamental será la misma: estas personas deben de
ser protegidas de cualquier daño físico, o cualquier tipo de intimidación, antes,
durante y algunas veces después de un proceso de la CPI. Las medidas actuales de
protección requeridas por la CPI pueden variar. Estas podrán ser medidas como la
guardia temporal del domicilio de las víctimas, testigos, y sus familias, trasladarlos
a una localidad distinta dentro del territorio o a otro Estado si es necesario, quizás
también cambiar su identidad. Los Estados Partes podrán también recibir víctimas o
testigos extranjeros si su seguridad está peligrando en su propio país. Por ende, las
autoridades migratorias deberán otorgarles un tratamiento preferencial.
Se deberá tomar en cuenta el tipo de protección apropiada para cada situación. Por
ejemplo, los programas de protección de testigos en Norte América son exitosos
especialmente porque dada la extensión de la región, y la existencia de una
población étnica y racial tan variada. Estos factores hacen más fácil que los extraños
se entremezclen en una nueva comunidad, contrario a lo que sucede en un país
pequeño y homogéneo. Algunas veces las órdenes de restricción serán suficientes.
Muchos Estados cuentan ya con legislación sobre la asistencia legal mutua, la cual
les permite el traslado de personas detenidas de un Estado a otro, con el fin de
recabar prueba o alguna diligencia similar. Esta legislación solo deberá modificarse
para permitir que estos Estados trasladen detenidos a la Corte.
El artículo 100(1)(a) dispone que la Corte cubrirá todos los gastos relacionados con
el traslado de una persona detenida a la Corte.
k) Asegurar la protección de los derechos de todas las personas que formen parte
de las investigaciones, de conformidad con el artículo 55.
99
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Las personas acusadas podrán también protegerse de cualquier daño, para que así
puedan gozar de una juicio justo y que éste no se lleve a cabo de manera sumaria
por una persona que busque la venganza, por ejemplo. Si están detenidos, los
Estados podrían disponer de una celda en un área privada, para que otros detenidos
no puedan tener acceso a ellos.
La Corte podrá también solicitarle al Estado para que provea cualquier “otro tipo de
asistencia que no esté prohibida por el derecho interno del Estado solicitado, con el
fin de agilizar la investigación y enjuiciamiento de los delitos de la competencia de
la Corte” (artículo 93(1)(l)). Tal asistencia deberá negociarse con los Estados, de
conformidad con el artículo 93(5).
Objetos de Prueba
Descripción
Existe un número infinito de distintos objetos de prueba que puedan requerirse para
un procedimiento penal. El artículo 93(1) se refiere a alguno de ellos, inclusive los
contenidos de fosas comunes (párrafo (g)), archivos y documentos oficiales (párrafo
(i)), y posibles ganancias del delito (párrafo (k)). Otros párrafos del artículo 93
sugieren la cooperación de los Estados con la CPI respecto a: la localización de
objetos (párrafo (a)), la producción de cualquier tipo de prueba (párrafo (b)), la
inspección de lugares o sitios, inclusive la exhumación y examinación de fosas
(párrafo (g)), la ejecución de allanamientos y decomisos (párrafo (h)), y la
conservación de todo tipo de prueba (párrafo (j)).
Los Estados deben asegurarse de que no existan límites sobre los tipos de materiales
y objetos que se puedan tomar para la investigación de la Corte. Necesitan también
contar con legislación que, de conformidad con el Estatuto, permita al Fiscal y a la
Defensa obtener objetos en su territorio, o bajo el control de sus nacionales. Sin
embargo, esta legislación deberá proteger los derechos de buena fe de terceras
partes, si se requiere su propiedad como prueba ante la Corte (artículo 93(1)(k)). La
100
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
En términos generales, los Estados deberán asistir a la Corte en los siguientes casos:
Implementación
Los Estados deben revisar muchas normas que prohiben la visita, inspección o
disturbios en ciertos lugares dentro del territorio nacional. El Estatuto
101
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Los Estados podrán necesitar leyes que les permitan entregar documentos oficiales a
la CPI y a la Defensa. Por ejemplo, los datos de archivos policiales es mencionado
particularmente en las Pautas del Consejo de Seguridad sobre Legislación Nacional
para la Implementación, preparado para el Tribunal Internacional para Yugoslavia.
Normalmente la CPI también solicitará tener acceso a tal información, cuando se
relacione con un delito de su competencia.
Los Estados podrán necesitar leyes que restrinjan cuáles personas tendrán acceso a
la prueba que sea solicitada por la CPI, con el fin de reducir el riesgo de que
cualquier persona la altere. Los Estados también podrán necesitar algunos recursos
extraordinarios para conservar ciertos tipos de evidencia física. Por ejemplo, podría
requerirse que los oficiales de seguridad protejan la escena del crimen hasta que el
Fiscal de la CPI pueda inspeccionarla. También se necesitarán lugares para
refrigeración de muestras corporales.
Los Estados necesitan leyes especiales que permitan a las autoridades competentes
identificar, localizar y congelar aquellas ganancias, propiedades e instrumentos
102
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Cuando las ganancias del delito sean pecuniarias, los Estados podrían requerir la
introducción de procedimientos que permitan el rastreo de movilización de grandes
sumas de dinero dentro de un sector bancario privado. Por ejemplo, en algunas
jurisdicciones, los bancos deben de notificar a la autoridad competente todas las
transacciones superiores a los 10,000 dólares.
103
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
Obligaciones
104
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
Descripción
Obligaciones
Los Estado deberán seguir los procedimientos descritos en el artículo 73, antes de
difundir cualquier información de una tercera persona.
Implementación
Descripción
Una vez que una persona es condenada por la CPI, la Corte podrá solicitar a un
Estado Parte para que identifique, localice, congele o embargue cualquier producto,
propiedad, ganancias o instrumentos relacionados con el crimen, con el fin de
105
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Obligaciones
a) Según el artículo 75(4) y 93(1)(k), una vez que una persona ha sido condenada,
los Estados Partes deberán cumplir las solicitudes de la Corte para identificar,
localizar y congelar o embargar ciertos productos, propiedad, ganancias e
instrumentos de los crímenes, con el fin de eventualmente decomisarlos.
b) Según el artículo 109(1), los Estados Partes deberán dar eficacia a las penas
impuestas en forma de multas u órdenes de decomiso a una persona condenada
por la Corte, sin perjudicar los derechos de terceras personas de buena fe, de
conformidad con el procedimiento según el derecho interno.
c) Según el artículo 109(2), si los Estados Partes pueden ejecutar una orden de
decomiso, deberán tomar las medidas necesarias para recuperar el valor de los
productos, propiedad o ganancias ordenados a decomisar por la Corte, sin
perjudicar los derechos de terceras personas de buena fe.
106
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
e) Según el artículo 75(5), los Estados Partes deberán dar eficacia a las órdenes de
reparación de la Corte, de conformidad con los dispuesto en el artículo 109.
Implementación
El artículo 75(4) es una de las varias disposiciones del Estatuto que permite a la
Corte solicitar u ordenar la localización, embargo o congelamiento de productos e
instrumentos procedentes de un delito. El artículo 57(3)(e) faculta a la Sala de
Cuestiones Preliminares para buscar la cooperación de aquellos Estados que puedan
tomar medidas preventivas con el fin de decomisar, una vez que se emitan las
órdenes de arresto o de comparecencia, según el artículo 58. El artículo 93(1)(k)
requiere que los Estados cumplan con estas órdenes, localizando, embargando o
congelando los productos e instrumentos procedentes de un delito, en cualquier
etapa del proceso de investigación o enjuiciamiento de la CPI. Por ende, los Estados
Partes deberán asegurarse de contar con un plan comprensivo que les permita llevar
a cabo todas estas actividades, tales como legislación y procedimientos sobre los
productos procedentes de un delito.
El artículo 109(1) prevé que los Estados Partes deberán dar eficacia a todas las
órdenes “de conformidad con el procedimiento del derecho interno”. Por ende, los
Estados Partes deben de asegurase de contar con leyes y procedimientos que les
permitan ejecutar estas órdenes. Los Estados podrán decidir por sí solos cuáles son
las normas y procedimientos apropiados, siempre y cuando estén de acuerdo con lo
dispuesto en el artículo 109 y el Estatuto. Aquellos Estados que cuenten con una
legislación de asistencia legal mutua probablemente solo necesitarán hacer mínimas
modificaciones a su legislación y a los procedimientos administrativos existentes,
para que les permitan ejecutar este tipo de órdenes de la CPI. Sin embargo, los
Estados deberán asegurar los derechos de las terceras personas de buena fe en todos
los casos. También deberán asegurarse de que las autoridades competentes puedan
ejecutar de manera pronta estas órdenes, por ejemplo cuando se acepta una
apelación posteriormente a que se dio una orden.
107
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El Estatuto dispone que los Estados Partes no está obligados a aceptar a aquellas
personas condenadas, para que se ejecute la condena impuesta por la Corte. Esta
será una decisión voluntaria (artículo 103). Cuando los Estados están decidiendo
respecto a ofrecerse para tal función, deberán tomar en cuenta el efecto positivo que
esto tendrá sobre el buen desempeño de la Corte. La Corte contará con
infraestructura penitenciaria muy limitada en La Haya, por lo cual deberá apoyarse
casi totalmente en los Estados para que éstos ejecuten las condenas de prisión en sus
centros penitenciarios nacionales. Si existe una escasez de centros, esto podrá
acarrear dificultades administrativas para la Corte y podría llegar a que las personas
condenadas impugnen sus condiciones de detención, en el caso en que exista
hacinamiento penitenciario. Tales impugnaciones obstaculizarían el desempeño de
la Corte y podrían interferir con sus investigaciones y enjuiciamientos. Los Estados
podrían asegurar que sus nacionales, por lo menos, cumplan la condena en un centro
penitenciario del Estado, para asegurar que sus condiciones de encarcelamiento sean
conformes con los derechos de la persona según el derecho interno. Por ende,
existen muchas buenas razones para que los Estados Partes se ofrezcan y acepten a
las personas condenadas por la Corte.
Descripción
Obligaciones
Los Estados Partes no están obligados a aceptar a una persona condenada por la
CPI. Sin embargo, si así lo hicieren, deberán avenirse a los términos acordados con
la CPI.
108
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Implementación
Condenas de Prisión
Descripción
El artículo 103 dispone que una condena de prisión impuesta por la Corte deberá
cumplirse en el país designado por la Corte, conforme a una lista de los Estados que
aceptan a la persona condenada. Un Estado que ha declarado su deseo de aceptar a
una persona condenada podrá establecer condiciones para ser acordadas con la
Corte. Sin embargo, el Estado de ejecución deberá notificar a la Corte si estas
condiciones o cualquier otra circunstancia pudiesen afectar materialmente los
términos o duración de la pena de prisión (artículo 103(2)).
Una vez que el Estado designado acepta ejecutar la condena de la Corte, el artículo
105 dispone que ésta pena es inalterable. Salvo algunas condiciones previamente
detalladas por el artículo 103, el Estado no puede modificar la condena ex oficio.
Sin embargo, en el caso de que surjan nuevas circunstancias que no existían en el
momento de aceptar la ejecución y que afectan sustancialmente los términos o
duración de la pena, el Estado deberá notificar a la Corte para que ésta revise la
situación y, de ser necesario, transferir a la persona condenada a otro Estado
(artículo 103(2)). El artículo 104 también permite que la Corte transfiera a la
persona condenada a otro Estado en cualquier momento que lo considere necesario.
109
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
El artículo 106(3) confirma que la Corte está a cargo de supervisar los términos de
detención, declarando inequívocamente que “las comunicaciones entre la persona
condenada y la Corte deberán ser procuradas y confidenciales”. El Estado deberá
permitir la comunicación entre el condenado y la Corte con el fin de asegurar la
implementación de esta obligación.
El artículo 108 podría verse como una descripción detallada de la regla de especialidad.
Regula el derecho individual de proteger a una persona que está condenada o que
cumple una condena, para que no sea enjuiciado o extraditada, salvo que la Corte lo
acepte la solicitud del Estado. Sin embargo, el artículo 108(2) establece que la Corte
solo podrá referirse a la solicitud de un Estado “luego de haber escuchado la opinión
de la persona condenada”.
Obligaciones
Implementación
Esto podría requerir de cambios tanto legislativos como administrativos por parte
del Estado aceptante.
110
Capítulo 3: Aspectos Específicos de la Implementación
Descripción
El artículo 110 establece claramente que solo la Corte tiene la potestad de reducir la
condena luego de haber dado audiencia a la persona condenada. La revisión de una
sentencia por parte de la Corte deberá llevarse cuando la persona haya cumplido dos
tercios de la condena, o 25 años en el caso de cadena perpetua. La Corte podrá
reducir la sentencia basándose en los elementos enumerados en el artículo 110(4).
Obligaciones
Los Estados no deberán interferir con las condenas impuestas por la CPI, ya sea
reduciendo o modificando la sentencia.
Implementación
111
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
El Estatuto anima a los Estados para que sean ellos quienes ejerzan competencia sobre
los delitos de la CPI. En su Preámbulo se establece que se deberá garantizar el efectivo
enjuiciamiento de los delitos de la CPI, tomando medidas a nivel nacional y reforzando
la cooperación internacional. Adicionalmente, todo Estado tiene el deber de ejercer su
competencia penal sobre aquéllos que sean responsables de delitos internacionales. Sin
embargo, el Estatuto no establece explícitamente la obligación de enjuiciar por delitos
de la CPI. Esta obligación se establece en otros tratados, para algunos de los delitos
enumerados en el Estatuto, pero no para todos ellos. Según la IV Convención de
Ginebra de 1949, los Estados Partes se comprometen a crear cualquier legislación
necesaria que prevea las sanciones penales efectivas para aquellas personas que
cometan graves violaciones contra la Convención. Según el artículo 5 de la Convención
sobre el Genocidio, los Estados Partes se comprometen a legislar para darle eficacia a
las disposiciones de la Convención y establecer penas efectivas para aquellos culpables
de genocidio. La historia de la segunda mitad del Siglo XX demuestra que el respeto a
esta obligación fue mínimo.
Excepciones al principio
Sin embargo, es fundamental que los procedimientos iniciados por un Estado sean
llevados a cabo de buena fe, es decir, conforme al derecho internacional. Por ende,
34
Algunos países americanos han incriminado localmente a la tortura y al genocidio como crímenes de
derecho internacional atribuyéndoles distintas sanciones, pero han omitido hacerlo con relación a otros ilícitos
que quedarán complementariamente bajo la jurisdicción de la Corte Penal, como la desaparición forzada de
personas, diversos crímenes sexuales que el Estatuto contempla, la persecución de grupos políticos o
nacionales y los crímenes de guerra. En dicha virtud los Estados nacionales serán incapaces de hacer
comparecer ante sus tribunales a los presuntos responsables de tales crímenes, incumpliendo de tal modo la
obligación impuesta por el Estatuto de ejercitar –en primer término- su propia jurisdicción local.
112
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
existen algunas excepciones bajo las cuales la CPI podrá tomar un caso que ya ha sido
referido a un Estado. Esto se establece en el artículo 17:
Aunque era imperativo que se le diera prioridad a los Estados para enjuiciar y
condenar a los responsables de delitos internacionales, era igualmente necesario
contar con un mecanismo que estuviera listo para funcionar en el caso en que un
113
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Estado llevara a cabo juicios falsos o no contara con los medios técnicos requeridos
para llevar a cabo una investigación y un juicio apropiado. Sin este mecanismo,
sería muy fácil burlarse de la justicia. Un Estado que estaba no dispuesto a enjuiciar
al responsable de un delito podría manipular el procedimiento para asegurar una
sentencia absolutoria, ingeniando el estancamiento del proceso, la corrupción del
jurado, la violación deliberada de los derechos fundamentales del defensor, o
creando atrasos irrazonables. Aún más fácil, un Estado podía simplemente negarse a
presentar prueba de cargo para el juicio.
Ne bis in idem35
35
Sobre el Ne bis in idem, ver nota anterior sobre este tema.
114
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
El artículo 20 estipula que un Estado no podrá enjuiciar a una persona por un delito
del Estatuto si ya fue condenado o absuelto por la misma conducta por la Corte.
Según el artículo 20(1), si las autoridades judiciales del Estado ya han procesado a
una persona por una conducta constitutiva de crimen de competencia de la CPI, ésta
Corte no podrá enjuiciar a la persona de nuevo. Del hecho de si la persona fue
genuinamente enjuiciada por un crimen suficientemente grave según el derecho
interno (por ejemplo, por la comisión de homicidio múltiple en lugar de genocidio)
o por un delito internacional, dependerá si la CPI puede ejercer o no su jurisdicción.
Sentencias
ii) Sin embargo, el Jefe de Estado no podrá utilizar esta potestad cuando la
persona haya sido condenada por la CPI. El artículo 110(2) preve que solo la
Corte tiene la facultad de reducir la pena que ésta impuso a una persona.
115
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Descripción
36
La impunidad de quienes perpetran graves violaciones a los derechos humanos, consagrada mediante leyes
de amnistía, indultos u otras medidas similares que impidan que los responsables de tales hechos
comparezcan ante un tribunal, es contraria a las obligaciones que impone el Derecho Internacional.
Especialmente, las amnistías son incompatibles con la obligación de los Estados de garantizar a todos los
ciudadanos el derecho a un recurso judicial efectivo y a ser oídos por un tribunal para la determinación de sus
derechos y obligaciones (artículos 8 y 10, Declaración Universal de Derechos Humanos).
En ese sentido la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha interpretado que: "Las leyes de autoamnistía
conducen a la indefensión de las víctimas y a la perpetuidad de la impunidad, por lo que son manifiestamente
incompatibles con la Convención [Americana sobre Derechos Humanos]. Este tipo de leyes impide la
identificación de los individuos responsables de violaciones a los derechos humanos, ya que obstaculiza la
investigación y el acceso a la justicia e impide a las víctimas y a sus familiares conocer la verdad y recibir la
reparación correspondiente” (in re Barrios Altos, de 14 de Marzo de 2001, para.43). Y asimismo que:
“Como consecuencia de la manifiesta incompatibilidad entre las leyes de autoamnistía y la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, las mencionadas leyes carecen de efectos jurídicos y no pueden seguir
representando un obstáculo para la investigación de los hechos que constituyen este caso ni para la
identificación y el castigo de los responsables..." (íb. para.44).
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, por su parte, ha establecido que: “La
aplicación de las amnistías hace ineficaces y sin valor las obligaciones internacionales de los Estados parte
impuestas por el artículo 1.1. de la Convención [Americana sobre Derechos Humanos]; en consecuencia,
constituyen una violación de dicho artículo y eliminan la medida más efectiva para poner en vigencia tales
derechos, cual es el enjuiciamiento y castigo de los responsables” (Caso 10.843, informe 36/96, p.50, de
15.10.96 y en igual sentido en Caso 10.559, “Chumbivilcas”, informe 1/96 de 1.03.96).
La Conferencia Mundial de Derechos Humanos, efectuada bajo el auspicio de la ONU en Viena en 1993,
consagró en su Declaración y Programa de Acción que: “(...) los gobiernos deben derogar la legislación que
favorezca la impunidad de los autores de violaciones graves de derechos humanos, como la tortura, y
castigar esas violaciones, consolidando así las bases del imperio de la ley” (para.60).
De lo expuesto puede interpretarse razonablemente que cuando el Estatuto de Roma dispone en su artículo 21
(1) (b) que en la dilucidación de los casos se aplicarán, supletoriamente, “(...) los principios y normas de
derecho internacional...” ello conlleva implícito la inadmisibilidad de las amnistías, perdones u otras medidas
de similar naturaleza que impidan dirimir la verdad de los hechos y que eviten la comparencia de los
presuntos responsables ante un tribunal independiente e imparcial. A mayor abundamiento corrobora lo
expuesto el texto expreso del apartado 3 del citado artículo, que añade que: "La aplicación e interpretación
del derecho de conformidad con el presente artículo deberá ser compatible con los derechos humanos
internacionalmente reconocidos”.
116
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Competencia irretroactiva
El artículo 11 estipula que la Corte tiene competencia solo respecto a los delitos
cometidos posteriormente a la entrada en vigor del Estatuto. Si un Estado deviene
Estado Parte luego de la entrada en vigor, entonces la Corte podrá ejercer su
competencia solo respecto a los crímenes cometidos luego de la entrada en vigor del
Estatuto en ese Estado, excepto cuando se haga la declaración estipulada en el
artículo 12(3), en que se acepte la competencia de la Corte como un Estado no
Parte.
Requisitos de Complementariedad
Si un Estado Parte desea enjuiciar a alguien por un crimen de la CPI deberá contar,
como mínimo, con una legislación que le permita ejercer competencia territorial
sobre tales delitos y competencia extraterritorial sobre sus nacionales que cometan
los delitos en el extranjero.
Implementación
Los Estados que deseen enjuiciar a una persona por un delito de la CPI deberán
asegurarse de contar con la legislación nacional que les permita ejercer su
competencia sobre aquellas personas que cometan estos delitos dentro de su
territorio, y los nacionales que los cometan en el exterior. Esto podría requerir
simplemente de una enmienda al código penal nacional.
Por ejemplo, el Crimes Against Humanity Act de Canadá estipula que las personas
sospechosas de haber cometido un delito de genocidio, crímenes de lesa humanidad
o crímenes de guerra o violación a la responsabilidad de un comandante, fuera de
Canadá, podrán ser enjuiciados por estos delitos si: (a) en el momento en que se
cometió el delito, (i) la persona era un ciudadano canadiense o era empleado por el
gobierno canadiense en un despacho civil o militar, (ii) la persona era ciudadano de
117
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
un Estado en conflicto armado contra Canadá, o era empleado del gobierno de ese
Estado en un despacho civil o militar, (iii) la víctima del delito era ciudadano
canadiense, o (iv) la víctima del delito era ciudadana del Estado aliado a Canadá en
el conflicto armado; o (b) en el momento en que se cometió el delito, Canadá podía,
de conformidad con el derecho internacional, ejercer su competencia sobre la
persona con base a que la persona estaba en Canadá y, luego, la persona está aún en
Canadá”.
Genocidio
Descripción
• homicidio;
118
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Requisitos de Complementariedad
Implementación
a) Primero, podrían adoptar una definición tomada del artículo 6 del Estatuto, o
que se refiera a el directamente. La ventaja de esta medida yace es un
simplicidad, la cual beneficia al legislador de una ley de implementación,
además que sería una ley conforme con los requisitos del Estatuto.
b) Otra opción sería adoptar una serie de delitos independientes que se conectan
con cada una de las acciones enumeradas en el Estatuto. Por ejemplo, el código
penal del Estado podría especificar el homicidio múltiple cometido con la
intención de destruir en su totalidad o en parte, un grupo nacional, étnico, racial
o religioso, lo cual constituye genocidio. Lo mismo podría disponerse para las
otras cuatro aciones enumeradas en el artículo 6 del Estatuto. Esta medida es
similar a aquella tomada por Australia con su legislación existente sobre
Crímenes de Guerra.
c) Los Estados también pueden utilizar los delitos generales existentes para
enjuiciar a los autores de genocidio, utilizando delitos suficientemente graves
que describan el delitos cometido. Sin embargo, si algunas de las acciones que
constituyen genocidio no constituyen un delito bajo el derecho interno, el Estado
Parte podría reformar su código penal y crear nuevos delitos que cubran tales
119
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
La definición de genocidio podría ser modificada para ser adoptada por el derecho
interno, pero solo con el propósito de facilitarle un significado similar o más amplio
que aquél provisto por el Estatuto. Por ejemplo, Francia indica en su legislación
nacional que el genocidio podría ser cometido contra cualquier grupo. El proceso se
deberá tomar con cuidado, sin embargo, porque cada uno de los términos contenidos en
el artículo 6 tienen un significado particular y son el resultado de un extenso debate,
tanto en 1948 como en 1998.
Descripción
a) Ataque contra una población civil. Se entiende por “ataque generalizado” como una
línea de conducta que implique un alto número de víctimas, y “sistemático” en
cuanto al alto nivel de organización, ya sea un plan o política. La palabra disyuntiva
“o” determina que éstas no son condiciones acumulativas. El homicidio de un solo
civil puede constituir un crimen de lesa humanidad si se cometió dentro de un
ataque sistemático.37
c) Comisión de actos inhumanos. El Estatuto enumera los actos que podrían constituir
crímenes de lesa humanidad dentro del contexto de un ataque:
• Asesinato
• Exterminio
37
Para la interpretación del “carácter sistemático o generalizado del ataque a la población civil”, será útil
tener en cuenta la jurisprudencia que en la materia vienen desarrollando los tribunales penales internacionales.
Por ejemplo, el Tribunal Internacional para Rwanda estableció en el caso Akayesu (sept. 2 de 1998) que: "El
concepto de "generalizado" puede ser definido como masivo, frecuente, acción en gran escala, llevada
adelante en forma colectiva con seriedad considerable y dirigida contra una multiplicidad de víctimas. El
concepto de "sistemático" puede ser definido como bien organizado y siguiendo un plan regular sobre la base
de un política concertada que involucre recursos sustanciales públicos y privados".
120
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
• Esclavitud
• Deportación o traslado forzoso de población
• Encarcelación u otra privación grave de la libertad física en violación de normas
fundamentales de derecho internacional
• Tortura
• Violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización
forzada u otros abusos sexuales de gravedad
• Desaparición forzada de personas
• El crimen de apartheid
• Otros actos inhumanos de carácter similar que causen intencionalmente grandes
sufrimientos o atenten gravemente contra la integridad física o la salud mental o
física.
Finalmente, debe tomarse en cuenta que en el segundo párrafo del artículo 7 del
Estatuto, se detallan las definiciones de todos los términos importantes señalados en el
primer párrafo.
121
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Requisitos de complementariedad
Sería recomendable que los Estados Partes al Estatuto incorporen en su derecho interno
todos los actos definidos como crímenes de lesa humanidad en el Estatuto. Los Estados
que ya cuenten con legislación en relación con los crímenes de lesa humanidad podrían
modificarla para que refleje plenamente lo desarrollado por el Estatuto. Por ejemplo, el
Estatuto amplía el derecho penal internacional al enumerar expresamente las ofensas
sexuales y las desapariciones forzosas como crímenes de lesa humanidad. Las
definiciones contenidas en el segundo párrafo del artículo 7 también deberán respetarse
e incorporarse en el derecho interno.
Implementación
Los Estados Partes al Estatuto pueden incluir la conducta de delito de lesa humanidad
en su derecho interno de las siguientes maneras:
a) Primero, deberán adoptar una definición que refleje aquélla del artículo 7 del
Estatuto o que se refiera directamente a ella. La ventaja de esta opción yace en
su simplicidad, ya que el legislador de la norma de implementación podrá crear
una ley de conformidad con los requisitos del Estatuto.
c) Los Estados pueden también utilizar su legislación penal existente para enjuiciar
a los autores de los crímenes de lesa humanidad, haciendo uso de delitos
suficientemente serios que describan los delitos perpetrados. No obstante, si
algunas de las acciones que constituyen un crimen de lesa humanidad no está
incluida en la ley penal general, el Estado Parte podría requerir de una enmienda
a su código penal y crear nuevos delitos que incluyan estas acciones.
122
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Crímenes de guerra
Descripción
Los crímenes de guerra normalmente se han definido como una violación a los
principios y usos más fundamentales de la guerra. Tales actos criminales se
enumeran en numerosos instrumentos internacionales (ver la lista de instrumentos
del Apéndice II). El proceso de negociación que culminó con el Estatuto de Roma
se caracterizó tanto por el compromiso y el desarrollo del derecho internacional. La
definición de crímenes de guerra del Estatuto es en algunos aspectos más precisa
que aquellas definiciones tradicionales de crímenes de guerra. Al mismo tiempo, es
más general que la definición tradicional, ya que cubre acciones que nunca antes se
habían regulado. La mayor innovación del Estatuto está en el hecho de que valoriza
la reciente evolución de jurisprudencia internacional que penaliza los crímenes de
guerra cometidos en conflictos armados internos.
3. conflicto armado interno que involucre una o más ` egún` es` onal`
extranjeras;
4. conflicto armado interno que involucre una ` egún` es` ona de la ONU;
6. guerras de secesión.
Los actos cometidos durante un conflicto armado ` egún` es` onal, que se definen
como ` egún` es de guerra ` egún el artículo 8(2)(a) del Estatuto son los siguientes:
123
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
• tomar rehenes.
124
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
• tomar rehenes;
• dictar sentencias y llevar a cabo ejecuciones sin juzgamiento previo dictado por un
tribunal establecido normalmente, que respete todas las garantías judiciales
comúnmente reconocidas como indispensables.
Segundo, el párrafo 8(2)(e) penaliza algunos actos que se prohiben en los Protocolos
Adicionales de 1977, algunos tratados sobre las leyes de combate y usos del derecho
internacional. Sin embargo, según el párrafo (f), estos crímenes podrán perpetrarse
125
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
solamente cuando exista un conflicto armado en el territorio del Estado entre las
fuerzas estatales y grupos armados organizados, o entre grupos armados
organizados. Los Estados deberán tomar en cuenta que el punto de partida del
párrafo (e) del Estatuto es menor que el punto de partida del II Protocolo: no se
requiere la responsabilidad de los comandantes, ni el control de una parte del
territorio. Basta con la existencia de un conflicto armado. Los actos criminales
enumerados en el artículo 8(2)(e) incluyen:
• dirigir intencionalmente ataques contra la población civil como tal o contra civiles
que no participen directamente en las hostilidades;
• reclutar o alistar niños menores de 15 años en las fuerzas armadas o utilizarlos para
participar en hostilidades;
Requisitos de complementariedad
Sería recomendable que los Estados Partes al Estatuto de Roma incorporen el delito de
crímenes de guerra tal y como lo describe el Estatuto. Su legislación deberá cubrir,
tanto los crímenes de guerra cometidos durante un conflicto armado internacional
como durante un conflicto armado interno, y deberá aplicarse a los civiles y oficiales
estatales así como a los miembros de sus fuerzas armadas. Los Estados que han
ratificado los Convenios de Ginebra ya han legislado de la manera requerida para
sancionar penalmente de manera efectiva a los responsables de cometer graves
violaciones a estos instrumentos durante un conflicto armado internacional (ahora
todos las violaciones del artículo 8(2)(a)).
Implementación
126
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
revisar estos capítulos, con el fin de identificar las modificaciones y adiciones que se
podrían requerir en el derecho internacional, para garantizar el enjuiciamiento de todos
los delitos de la competencia de la CPI. De otra manera, los Estados Partes pueden
emplear una gama de métodos de incorporación de la definición de crímenes de guerra
a su derecho interno.
a) El método más sencillo es adoptar una definición tomando el texto exacto del
artículo 8 del Estatuto de Roma o referirse directamente a él. Esta solución tiene
la ventaja de ser sencilla para el legislador nacional y permite que éste se adhiera
a los requisitos el Estatuto.
c) Los Estados podrían utilizar su legislación penal existente para enjuiciar a los
autores de los crímenes de lesa humanidad, haciendo uso de delitos
suficientemente serios que describan los delitos perpetrados. No obstante, si
algunas de las acciones que constituyen un crimen de lesa humanidad no está
incluida en la ley penal general, el Estado Parte podría requerir de una enmienda
a su Código Penal para crear nuevos delitos que incluyan estas acciones, para
garantizar que no se impida la comparecencia de un responsable de estos
crímenes ante la justicia.
Descripción
Requisitos de Complementariedad
Los Estados que decidan enjuiciar a las personas acusadas por uno de los crímenes
mencionados en el Estatuto en sus tribunales nacionales no están obligados a
permitir a la persona alegar la excepción de una circunstancia eximente de
responsabilidad penal señalada por el Estatuto, o cualquier otro medio de defensa
aceptado por el derecho penal internacional. Sin embargo, los Estados Partes
podrían tener que revisar las circunstancias de excepción permitidas por el sistema
de justicia penal nacional, con el fin de garantizar que estas excepciones no
encubran a la persona de la responsabilidad penal por actos que constituyen delitos
de la CPI.
127
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
No obstante, los Estados podrían adaptar las disposiciones existentes para que éstas
estén conformes con los dispuesto por el Estatuto. Estas nuevas excepciones podrían
admitirse en los casos de enjuiciamientos de delitos internacionales. La ventaja de
esta solución está en el hecho de que brinda uniformidad a los procesos. La persona
que es acusada ya sea ante un tribunal nacional o la CPI podrá alegar las mismas
circunstancias eximentes de responsabilidad penal.
Descripción
1. la persona acusada estuviere obligado por ley a obedecer órdenes emitidas por el
gobierno o el superior de que se trate;
128
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Requisitos de Complementariedad
Implementación
Aún así, los Estados Partes que deseen armonizar los procedimientos penales,
podrían adaptar su legislación nacional a las disposiciones del Estatuto. En tal caso,
se necesitarían realizar los siguientes ajustes:
129
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Descripción
Es por esta razón que el Estatuto no restringe la responsabilidad penal por estos
delitos a los individuos que estuvieron directamente involucrados con su comisión,
pero la extiende a aquéllos que estuvieron también indirectamente involucrados.
Según el artículo 25, la persona será penalmente responsable si:
• Cometió el crimen por si solo, con otro o por conducto de otro, sea éste o no
penalmente responsable;
130
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Sin embargo, la persona que desiste de la comisión del crimen o impide de otra
forma que se consume no podrá ser penado de conformidad con el Estatuto por la
tentativa si renunciare íntegra y voluntariamente al propósito delictivo (artículo
25(3)(f)).
131
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Requisitos de Complementariedad
Los Estados Partes al Estatuto que deseen enjuiciar a los acusados en sus tribunales
nacionales, según el principio de complementariedad, deberán garantizar que su
legislación de implementación incluya todas las formas de responsabilidad penal
individual y ofensas incoadas dispuestas por el Estatuto. De lo contrario, no podrían
enjuiciar en sus tribunales nacionales la mayor parte de los individuos responsables
por la comisión de los delitos contenidos en el Estatuto.
Implementación
Descripción
132
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Jefes Militares38
Los jefes militares pueden ser responsables por aquellos crímenes que cometan sus
soldados, si los jefes conocían o deberían haber conocido que estos crímenes se
estaban cometiendo, y si por negligencia no tomaron las medidas necesarias para
prevenir o impedir la comisión de tales delitos. La responsabilidad de los jefes
militares está constituida por estos tres elementos esenciales:
• jefatura y control efectivos sobre las personas que cometan estos crímenes;
• el jefe conocía o debería haber conocido que el crimen estaba por cometerse o
ya se había cometido;
38
Bien se ha señalado que la jurisdicción de los tribunales militares sólo puede ser admitida para el juzgamiento de los delitos y faltas
eminentemente militares, considerando como tales aquellas infracciones que por afectar la existencia de la institución militar, sólo las
leyes militares contemplan y sancionan o, dicho de otro modo, delitos exclusivamente militares o puramente militares, que sólo un militar
puede cometer (conf. León C. Arslanian, La Jurisdicción Militar en la Opinión de la Corte Interamericana de Justicia, Revista del
Instituto Interamericano de Derechos Humanos, No.25, p.101/109).
La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre (artículo XVIII) y la Convención Americana sobre Derechos
Humanos (artículos 8 y 25) consagran el derecho de toda persona a un recurso judicial efectivo frente a las violaciones de sus derechos
fundamentales.
Teniendo en consideración que la generalidad de las violaciones graves a los derechos humanos en la región son perpetradas por agentes
estatales y, especialmente, por integrantes de las fuerzas armadas y de seguridad, o por civiles que cuentan con su apoyo, tolerancia o
aquiescencia, el juzgamiento de éstos por su pares no parece compatible con las disposiciones antes aludidas. Es que, como se ha
afirmado, los tribunales militares no reúnen las características propias de los tribunales independientes e imparciales, conforme lo exigen
los tratados regionales de Derechos Humanos, pues sus jueces, fiscales y defensores se encuentran sujetos a la cadena de mandos y
normas de obediencia propias de las instituciones armadas.
Más aún, con relación al crimen de desaparición forzada de personas la Convención Interamericana sobre la materia expresamente
prohibe esta clase de tribunales, al establecer en su artículo IX que: “Los presuntos responsables de los hechos constitutivos de
desaparición forzada de personas sólo podrán ser juzgados por las jurisdicciones de derecho común competentes en cada Estado, con
exclusión de toda jurisdicción especial, en particular la militar”.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha establecido que: “[e]n un Estado democrático de Derecho la jurisdicción penal
militar ha de tener un alcance restrictivo y excepcional y estar encaminada a la protección de intereses jurídicos especiales, vinculados
con las funciones que la ley asigna a las fuerzas militares. Así, debe estar excluido del ámbito de la jurisdicción militar el juzgamiento de
civiles y sólo debe juzgar a militares por la comisión de delitos o faltas que por su propia naturaleza atenten contra bienes jurídicos
propios del orden militar” y asimismo que: “Es necesario señalar que la jurisdicción militar se establece en diversas legislaciones para
mantener el orden y la disciplina dentro de las fuerzas armadas. Por ello, su aplicación se reserva a los militares que hayan incurrido
en delitos o faltas en el ejercicio de sus funciones y bajo ciertas circunstancias. (...) El traslado de competencias de la justicia común a
la justicia militar y el consiguiente procesamiento de civiles... supone excluir al juez natural para el conocimiento de estas causas. Al
respecto, la Corte ha dicho que "[c]uando la justicia militar asume competencia sobre un asunto que debe conocer la justicia ordinaria,
se ve afectado el derecho al juez natural y, a fortiori, el debido proceso, el cual, a su vez, encuéntrase íntimamente ligado al propio
derecho de acceso a la justicia” (caso Cantoral Benavidez, sentencia sobre el fondo de 18 de Agosto de 2000).
La Comisión de Derechos Humanos de la OEA en el asunto Durand y Ugarte ha sostenido que: “La independencia e imparcialidad del
tribunal constituyen aspectos centrales de las garantías mínimas de la administración de justicia y el artículo 8 [de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos] debe interpretarse siempre en los términos más amplios, de conformidad con el objeto y fin del
tratado...” y en consecuencia: “d) los tribunales militares no son órganos competentes, independientes e imparciales, porque forman
parte... del Ministerio de Defensa; es decir, se trata de un fuero especial subordinado a un órgano del Poder Ejecutivo. Los jueces del
fuero privativo militar son, asimismo, miembros de las Fuerzas Armadas en servicio activo, lo cual constituye un requisito para formar
parte de aquél... Además, no es necesario ser abogado para integrar un tribunal de este fuero. Resulta lógico sostener que si el cargo
judicial depende del grado militar o de la condición de funcionario activo, las decisiones que adopte el juez o tribunal se verán afectadas
por un interés incompatible con la justicia. Esta posibilidad puede implicar que el funcionario carezca de la autonomía e imparcialidad
necesarias para investigar hechos como los sucedidos...”.
Por lo expuesto podemos interpretar que, en lo que al sistema interamericano atañe, no es dable que las legislaciones nacionales confieran
jurisdicción a los tribunales militares para dirimir contiendas en donde se ventilen violaciones graves a los derechos humanos, como son
el genocidio y los crímenes de lesa humanidad. Tales disposiciones, de existir, contravienen los tratados constitutivos del sistema
interamericano de protección de los derechos humanos y la jurisprudencia de su Corte y demás órganos cuasi-jurisdiccionales. Esta
afirmación debe tenerse presente a la hora de implementar legislación complementaria a la Corte Penal Internacional pues, como es
sabido, serán las jurisdicciones nacionales las primeras en intervenir en caso de cometerse un crimen de los que el Estatuto atribuye
complementariamente a la Corte.
133
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
• el jefe no tomó todas las medidas necesarias y razonables dentro su poder para
prevenir el crimen o sancionar a su autor.
Jefes no militares
Los superiores no militares podrán ser responsables por los crímenes que cometan
sus subordinados cuando tenían el conocimiento, o conscientemente eludieron la
información que claramente indicaba que los subordinados estaban cometiendo o
estaban por cometer un crimen de la CPI; cuando los crímenes estaban relacionados
con las actividades bajo el control del superior; y cuando el superior
negligentemente no tomó las medidas necesarias para prevenir o impedir los
crímenes o para informar a las autoridades civiles competentes para investigar o
iniciar el proceso judicial oportuno. Los elementos de la ofensa son los mismos para
los jefes no militares, con la excepción del elemento relacionado al conocimiento de
la comisión del crimen. El artículo 28(b) del Estatuto indica que en el caso de un
jefe civil, la carga de la prueba para condenarlo es mayor que aquélla requerida para
condenar a un jefe militar. Ya sea el conocimiento de la comisión del crimen o la
negligencia deberán ser demostrados. En otras palabras, para establecer la intención
culpable de un superior no militar, es necesario demostrar la disponibilidad de la
información que indicaba la posibilidad de que los subordinados habían cometido o
estaban por cometer un crimen, y la posesión de esta información por parte del
superior, así como la decisión de éste de no actuar al respecto. Los civiles a quienes
se refiere esta disposición son los líderes políticos, hombres de negocios y altos
mandatarios. Los jefes militares están sujetos a estándares más estrictos según el
derecho internacional humanitario, debido a la estructura militar y la necesidad de
mantener la disciplina militar que hacen esta medida necesaria y conveniente.
Subordinados39
39
La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha rechazado con igual énfasis tales disposiciones, al concluir que: “(...) son
inadmisibles las disposiciones de amnistía, las disposiciones de prescripción y el establecimiento de excluyentes de responsabilidad que
pretendan impedir la investigación y sanción de los responsables de las violaciones graves de los derechos humanos tales como la
tortura, las ejecuciones sumarias, extralegales o arbitrarias y las desapariciones forzadas, todas ellas prohibidas por contravenir
derechos inderogables reconocidos por el Derecho Internacional de los Derechos Humanos" (caso Barrios Altos, de 14 de Marzo de
2001, para.41) (el subrayado no está en el original).
En conclusión, podemos afirmar que, conforme el derecho internacional consuetudinario –la práctica inveterada de las
naciones- y convencional, la obediencia debida no es admitida en absoluto como justificación o eximente de responsabilidad penal, sino
tan sólo para atemperar las sanciones impuestas a los responsables de graves violaciones a los Derechos Humanos o infracciones graves
al Derecho Humanitario.
El artículo 33 del Estatuto de Roma (Ordenes superiores y disposiciones legales) es notoriamente más indulgente en esta
materia, en especial para quienes cometan crímenes de guerra. Ello, pues la citada disposición habilita a escudarse en una orden para ser
eximido de sanción penal a quien acredite que estaba obligado por la ley a obedecer las ordenes de su gobierno o superior e ignorare que
la orden impartida era ilícita (y en tanto que dicha orden no fuere manifiestamente ilícita).
Si las legislaciones nacionales se contentaran y reprodujeran sin más la definición del Estatuto evidentemente cumplimentarían su
exigencia, pero incumplirían las que impone el Derecho Internacional en la materia. Nuevamente, el artículo 10 del Estatuto nos da la
explicación.
134
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
de autoridad y control sobre las acciones de los subordinados. El control puede ser
otorgado oficialmente o simplemente ejercido de hecho. Además, el poder legal
sobre los subordinados no constituye una condición absoluta para establecer la
responsabilidad de un jefe, quien puede ser en algunos casos parte de una línea
indirecta de poder. Por ejemplo, los líderes militares podrán ser responsables por
actos cometidos por individuos que no estén oficialmente bajo su control dentro de
la jerarquía de poder, pero sobre los cuales sí hubiesen podido ejercer poder de
hecho para prevenir o impedir la comisión del crimen.
Un superior solo podrá ser responsable por omisión cuando no haya tomado las
medidas que él estaba facultado o en capacidad de tomar. Por lo consiguiente, aún si
el superior no tenía oficialmente el poder para tomar medidas relacionadas con los
crímenes que se cometieron, éste podrá ser responsable si se demuestra que dadas
las circunstancias, éste podría haber actuado.
Requisitos de Complementariedad
Los Estados Partes al Estatuto que deseen procesar a los criminales en sus tribunales
nacionales, según el principio de complementariedad, deberán incorporar el
concepto de responsabilidad de jefes y superiores, en su derecho interno, tal y como
se define en el artículo 28.
Implementación
Descripción
Los principios del Estatuto sobre cuales se basan los procedimientos de la Corte, se
derivan de los estándares existentes de derechos humanos. El Estatuto no requiere
135
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
Requisitos de Complementariedad
Implementación
No todos los Estados Partes desearán ajustar sus reglas de procedimientos penales.
Al mismo tiempo, el ajuste posiblemente afectará pocas reglas. Sin embargo, cada
acto que normalmente constituya uno de los crímenes enumerados en el Estatuto de
Roma deberá considerarse según las reglas de evidencia y procedimientos con el fin
de determinar si cualquiera de estas reglas podría representar un obstáculo para el
funcionamiento normal de una investigación o juicio, y para asegurase de que las
personas no evadan así la responsabilidad penal. Las reglas de prueba y
procedimientos relacionadas con los delitos sexuales son aquéllas que normalmente
presentarán un problema de este tipo en muchas jurisdicciones.
Los tribunales militares, tal como los tribunales ordinarios, podrán procesar a los
autores de un delito de la CPI. El Estatuto no hace ninguna distinción entre estos dos
tipos de sistemas y los Estados Partes pueden escoger libremente cuál tribunal
nacional será competente para procesar un delito de la CPI. Un Estado Parte podrá
decidir que los procedimientos relacionados con el Estatuto serán competencia de
los tribunales ordinarios, de los tribunales militares, o de ambos, dependiendo de la
organización general de su sistema judicial. Sin embargo, los tribunales militares
normalmente tienen una competencia restringida. Solo pueden enjuiciar al personal
militar, y no tienen competencia sobre los civiles. Los crímenes de la CPI, sin
embargo, podrán cometerse en tiempos de paz, tanto por miembros de las fuerzas
armadas, así como civiles. Por ejemplo, la fuerza policial o grupos armados
paramilitares pueden cometer crímenes de lesa humanidad, como un civil que
participe reclutando niños o niñas, y que por ende cometa un crimen de guerra. Por
lo consiguiente, los Estados Partes que deseen enjuiciar a los autores de un delito de
136
Capítulo 4: Complementariedad de la Competencia de la CPI
la CPI deberán, la mayor parte del tiempo, utilizar sus jurisdicciones ordinarias,
salvo que los tribunales militares cuenten con una amplia competencia que cubra los
crímenes cometidos en tiempo de paz y aquéllos cometidos por civiles.
En muchos países, los procedimientos ante los tribunales militares son distintos a
aquéllos ante un tribunal ordinario. Los procedimientos son a veces más expeditos
ante un tribunal militar, y en algunas jurisdicciones el debido proceso puede que no
se garantice al mismo nivel que en los procedimientos penales comunes. Sin
embargo, la CPI no puede admitir un caso que se esté persiguiendo en una
jurisdicción nacional, en el que el procedimiento a nivel nacional tenga como fin
proteger a la persona de su responsabilidad penal o se esté llevando a cabo de
manera contraria a la intención de llevar a la persona ante la justicia. Por ende,
cualquier procedimiento militar que se lleve a cabo de buena fe normalmente no
será asumido posteriormente por la competencia de la CPI, solo porque el proceso
fue expedito. Los tribunales militares deberán determinar la responsabilidad penal
de un individuo tal y como lo describe el Estatuto, tomando en consideración a
manera de lo posible, las definiciones de los delitos, los medios de defensa, y los
principios generales de derecho penal descritos en el Estatuto.
137
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Descripción
La firma del Estatuto estará abierta hasta el 31 de diciembre del 2000, tal y como lo
estipula el párrafo primero del artículo 125. Para que un Estado devenga Parte, éste
deberá ratificar, aceptar, aprobar o adherirse al Tratado. El término “adhesión”
normalmente significa adherirse al Tratado una vez que éste haya entrado en vigor,
pero también podrá referirse a un proceso específico de un Estado. El Estado que
desee ratificar el Estatuto antes de que cierre el periodo de firmas, normalmente lo
firmaría y luego depositaría sus instrumentos de ratificación, aceptación o
aprobación en poder del Secretario General de Las Naciones Unidas.
Según el artículo 120, los Estados no podrán hacer reservas al Estatuto. Los Estados
Partes deberán aceptar el Estatuto tal y como fue adoptado en la Conferencia de
Roma.
No obstante, el artículo 124 del Estatuto dispone que el Estado podrá declarar que
“durante un periodo de siete años contados a partir de la fecha en que el Estatuto
entre en vigor a su respecto, no aceptará la competencia de la Corte sobre la
categoría de crímenes a que se hace referencia en el artículo 8 cuando se denuncie la
comisión de uno de esos crímenes pos sus nacionales o en su territorio”. El objetivo
de esta disposición es brindar a los Estados Partes tiempo suficiente para capacitar a
138
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
todo su personal militar sobre los requisitos del Estatuto con respecto a los crímenes
de guerra, ya que algunas de las disposiciones del Estatuto podrían ser contrarias a
las obligaciones nacionales existentes.
Renuncia al Estatuto
El artículo 127 dispone que un Estado Parte podrá denunciar el Estatuto por medio
de una notificación dirigida al Secretario General de las Naciones Unidas, alegando
que desea renunciar al Estatuto. La denuncia surtirá efecto un año después de la
fecha en que se reciba la notificación, a menos que en ella se indique una fecha
ulterior. Debería tomarse en consideración que el artículo 127(2) señala las
obligaciones del Estado, las cuales rigen a pesar de la renuncia y la notificación de
la misma.
Obligaciones
Implementación
Los Estados Partes probablemente contarán con los procedimientos para tratar estas
cuestiones. La única disposición que podría chocar significativamente con las
disposiciones comunes de tratados, es el artículo 124, sobre el caso especial de los
crímenes de guerra de la competencia de la CPI. Los Estados deberán tomar en
cuenta que los principios fundamentales subyacentes a las disposiciones sobre
crímenes de guerra del Estatuto no difieren de aquellas obligaciones del derecho
humanitario y derecho consuetudinario existentes. La diferencia más importante
yace en que se penalizan más violaciones que aquellas “violaciones graves” de los
Convenios de Ginebra.
Sin embargo, los Estados deberían contar ya con la legislación que regule tales
conductas como violaciones a las leyes de la guerra, y el personal militar debería
conocer estas disposiciones. Por ende, la mayoría de los Estados no necesitarán siete
139
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
años para capacitar al personal competente sobre los requisitos de las disposiciones
sobre crímenes de guerra del Estatuto. Sería una pena que un Estado decida hacer la
declaración del artículo 124, y éste es posteriormente invadido por una fuerza hostil
que cometa numerosos crímenes de guerra, quedando el Estado incapaz para
impugnar estos crímenes por no haber aceptado la competencia de la CPI y no
contar con los recursos propios para llevar a cabo el enjuiciamiento por sí solo. Por
consiguiente, los Estado deberán reflexionar cuidadosamente sobre hacer o no la
declaración del artículo 124 cuando ratifiquen el Estatuto, debido a que podría traer
consecuencias perjudiciales.
Financiamiento de la Corte
Descripción
El artículo 114 estipula que los gastos de la Corte y de la Asamblea de los Estados
Partes, inclusive su Mesa y sus órganos subsidiarios, se pagarán con los fondos de la
Corte. Los fondos de la Corte serán sufragados por los Estados Partes y cualquier
fondo procedente de contribuciones voluntarias, en lugar del presupuesto general de
las Naciones Unidas. Sin embargo, se dispone que las Naciones Unidas podrán
contribuir, con sujeción a la aprobación de la Asamblea General y en particular
respecto de los gastos efectuados en relación con cuestiones remitidas por el
Consejo de Seguridad (artículo 115(b)).
140
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
El Presupuesto
El presupuesto para el primer año fiscal de la Corte será adoptado por la Asamblea
de los Estados Partes, con base a una propuesta de la Comisión Preparatoria. Las
Reglas y Regulaciones Financieras de la Corte, y las reuniones de la Asamblea de
Estados Partes, incluyendo su Mesa y órganos subsidiarios serán establecidos por la
Asamblea de los Estados Partes, tal y como lo dispone el artículo 113.
Nótese que los derechos de voto de los Estados Partes en la Asamblea y en la Mesa
podrán afectarse en algunas circunstancias, según lo estipula el artículo 112(8),
cuando éste adeude una suma igual o superior al total de las contribuciones
adeudadas por los dos años anteriores completos. El mismo párrafo estipula la
suspensión de esta sanción cuando la Asamblea de Estados Partes llegare a la
conclusión de que la mora se debe a circunstancias ajenas a la voluntad del Estado
Parte.
Obligaciones
Implementación
141
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
escala de cuotas convenida. Todos los Estados Partes deberán asegurarse de que sus
presupuestos anuales incluyan las contribuciones convenidas para la CPI.
Descripción
Obligaciones
Implementación
Descripción
142
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Nótese que los Estados Partes podrán nominar solamente a un candidato para una
elección determinada. Los candidatos no deben ser nacionales del Estado Parte que
nomine, pero deberán ser nacionales de uno de los Estados Partes (artículo
36(4)(b)).
Según el artículo 35, todos los magistrados de la Corte deberán ser elegidos en
régimen de dedicación exclusiva y estarán disponibles para desempeñar su cargo en
ese régimen desde que comience sus mandato. Sin embargo, los magistrados que
conformen la Presidencia deberán desempeñar su cargo con dedicación exclusiva a
partir del momento en que son elegidos. La Presidencia también podrá decidir hasta
dónde deberán ejercer su cargo con dedicación exclusiva el resto de los magistrados.
Los Estados Partes también podrán ofrecer Fiscales y otro personal de la CPI para la
Corte, aunque no existe ningún derecho que determine la nominación de tales
personas, según el Estatuto. El Estatuto dispone que el Fiscal será elegido por voto
secreto por una mayoría absoluta de los miembros de la Asamblea de Estados
Partes, pero no especifica quiénes podrán nominar a los Fiscales (artículo 42(4)).
Sin embargo, si determina que el Fiscal ofrece una lista de posibles candidatos para
el puesto de Fiscal Adjunto. Según el artículo 44(4), los Estados Partes podrán
ofrecer personal gratuitamente para que asista con las funciones de la Corte.
El artículo 42(7) dispone que los Fiscales y Fiscales adjuntos no podrán participar
en un asunto en el cual hubiesen intervenido anteriormente, en cualquier calidad, en
una causa de que la Corte estuviere conociendo o en una causa penal conexa
143
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Obligaciones
Implementación
Los Estados Partes que deseen hacer uso de estas previsiones deberán implementar
los procedimientos adecuados para la selección y nominación de tales personas.
Podrían crear una lista de personas que serían candidatos convenientes para los
distintos puestos de la Corte. Deberán establecer procedimientos, si todavía no
cuentan con ellos, para llevar un registro exacto de las personas involucradas con los
procesos e investigaciones penales en el Estado, para asegurar que la CPI cuente con
toda la información relevante para fundamentar su decisión de recusar a una persona
en la participación en un caso de la CPI. Cuando los Estados Partes estén llevando a
cabo las candidaturas para la Corte, deberán tomar en cuenta que los idiomas de
trabajo de la Corte son el inglés y el francés en la mayoría de los casos, por lo cual
sus candidatos deberán dominar al menos uno de estos idiomas (artículo 50(2)).
Los Estados Partes poseen algunos derechos cuando se produzcan las siguientes
situaciones y éstos deseen implementar procedimientos que les faciliten ejercer
estos derechos:
• Según el artículo 13(a) & 14, los Estados podrán remitir una caso al Fiscal, lo
cual le da competencia a la Corte para investigar el caso. Tienen el derecho a ser
informados cuando el Fiscal concluya que la información remitida por el Estado
parte no es fundamento razonable suficiente para proseguir con la investigación
(artículo 15(6)). También tienen derecho a ser notificados de todas las
investigaciones que se inicien por el Fiscal, ya sea de oficio o con base a una
144
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
referencia del Estado Parte (artículo 18(1)). Cuando el Estado Parte haya
remitido una situación en particular al Fiscal, podrá presentar observaciones a la
Corte, cuando el Fiscal pida a la Corte que se pronuncie sobre cuestiones de
competencia o de admisibilidad (artículo 19(3)). El Estado Parte podrá también
solicitar a la Sala de Cuestiones Preliminares para que ésta revise la decisión
hecha por el Fiscal para iniciar o no una investigación (artículo 55(3)(a)).
El párrafo 112(8) estipula que el Estado Parte que esté en mora en el pago de sus
contribuciones financieras a los gastos de la Corte, adeudadas por los dos años
145
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Existen varias referencias adicionales a lo largo del Estatuto que detallan el papel y
las responsabilidades de la Asamblea. Por ejemplo, los artículos 2 &3 preven que la
Asamblea deberá aprobar los acuerdos que se lleven a cabo entre la Corte y la ONU,
y entre la Corte y el Estado anfitrión. Según el artículo 44, la Asamblea deberá
establecer las directrices para el nombramiento de personal “proporcionado
gratuitamente por los Estados Partes, organizaciones no gubernamentales y
organizaciones intergubernamentales”.
40
Como ya dijimos, la Comisión Preparatoria de la Corte Penal Internacional ya ha terminado los textos de
las Reglas de Procedimiento y Prueba y los Elementos de los Crímenes, que serán sometidos a la Asamblea de
Estados parte para su aprobación.
146
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
41
Idem nota anterior
42
Idem nota anterior
147
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Estas reglas deberán también ser conformes con el Estatuto, y en caso de conflicto,
el Estatuto prevalecerá sobre éstas (artículo 51(5)).
El artículo 123 dispone que siete años después de la entrada en vigor del Estatuto, el
Secretario General de las Naciones Unidas convocará a una Conferencia de
Revisión. Posteriormente a la Conferencia, la Asamblea considerará aquéllas
enmiendas propuestas por los Estados Partes, de conformidad con el artículo 121.
La Asamblea y el Secretario General podrán convocar a conferencias de revisión
posteriores cuando lo consideren necesario.
148
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Enmiendas al Estatuto
Procedimientos de enmienda
149
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
No hay ninguna diferencia con la mayoría de los Estados Partes requerida para la
adopción de la enmienda, pero la entrada en vigor de las enmiendas en esta
categoría es de seis meses después de su aprobación por la mayoría requerida de
Estados Partes, y no un año después de la ratificación o aprobación, tal y como lo
determina el caso del artículo 121. Las enmiendas a estos artículos se aplican a
todos los Estados Partes. No se necesita una ratificación posterior a la aprobación
por un Estado Parte para este tipo de enmienda.
Tanto los Estados Partes como otras entidades institucionales podrán proponer
enmiendas a las Reglas de Procedimiento y Prueba y a los Elementos de los
Crímenes, las cuales requerirán de una mayoría de dos tercios de los Estados Partes
para ser adoptadas (artículos 9(2) & 51(2)). El procedimiento a seguir es similar a
aquél de las enmiendas de carácter exclusivamente institucional. Además, los
Estados Partes podrán sugerir enmiendas a las Reglas en cualquier momento
después de su aprobación por la Asamblea de Estados Partes (artículos 9(2) &
51(2)(a)). Los derechos de los Estados Partes productos de estas enmiendas son
similares a los de carácter institucional, pese a que su entrada en vigor sea distinta.
150
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Se podrá tomar la opción de renuncia con efecto inmediato cuando se apruebe una
enmienda por siete octavos de los Estados partes. Cualquier Estado que no haya
aceptado la enmienda podrá, durante el periodo de un año posterior a la entrada en
vigor, renunciar inmediatamente al Estatuto.
Crimen de Agresión
151
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
152
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
El artículo 54 establece que el Fiscal deberá respetar plenamente los derechos de las
personas dispuestos por el Estatuto. Esto significa que las autoridades locales
deberán cooperar plenamente con la Fiscalía durante las investigaciones en el lugar
153
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
de los hechos, y cumplir con cualquier requisito que permita que la investigación
descubra tanto prueba inculpante como exculpante para presentar ante la CPI.
Con el fin de asegurar un juicio justo y efectivo, con una defensa plena y efectiva, el
Estado dentro del cual la Sala de Cuestiones Preliminares esté llevando a cabo sus
funciones según el artículo 57, deberá asegurar que se nombre un defensor lo más
pronto posible. Tales Estados deberán también facilitar el trabajo de la Sala de
Cuestiones Preliminares para salvaguardar y hacer disponible cualquier prueba que
se considere necesaria. Las autoridades locales serán los actores claves en esta etapa
investigativa. Las Escuelas Judiciales serán de gran ayuda para facultar el
nombramiento de un abogado local durante el proceso.
El artículo 65(5) estipula que cualquier consulta que celebren el Fiscal y la defensa
respecto de la modificación de los cargos, la declaración de culpabilidad o la pena
que habrá de imponerse no serán obligatorias para la Corte. Las Escuelas Judiciales
deberán asegurarse de que todos los miembros de la Defensa involucrados en el
proceso estén debidamente capacitados y plenamente conscientes de que la
declaración de culpabilidad no es obligatoria para la Corte.
El artículo 68(5), en especial, trata los temas referentes a los derechos del acusado.
El artículo 68(5) dispone las situaciones en las cuales la divulgación de prueba
podrá entrañar un peligro grave para la seguridad de un testigo o su familia. A la luz
de los derechos previstos para el acusado, el Fiscal deberá considerar
cuidadosamente estos derechos al determinar suprimir tales pruebas. Tales medidas
podrán ejercerse de manera que no sean perjudiciales o inconsistentes con los
154
Capítulo 5: Relación de la CPI y los Estados
Capacitación de Defensores
155
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
Carta para el Tribunal Militar Internacional para el Juzgamiento de Criminales de Guerra, apéndice
al Acuerdo para el Juzgamiento y Condena de los Criminales de Europeos del Eje, 8 de agosto de
1945, 59 Stat. 1544, U.N.T.S. 279, enmienda al Protocolo al Acuerdo y a la Carta, 6 de octubre,
1945.
I Convenio para el Mejoramiento de las Condiciones de los Heridos y Enfermos de las Fuerzas
Armadas en el Campo de Batalla, 12 de agosto, 1949. (1950) 75 R.T.N.U. 31, art. 50
Protocolo Adicional a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949, relacionado con la
Protección de las víctimas en los conflictos armados internacionales (Protocolo I), 8 de junio de
1977, 1125 R.T.N.U. 3
Protocolo Adicional a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949, relacionado con la
protección de víctimas de los conflictos armados internos (Protocolo II), 8 de junio de 1977,
R.T.N.U.
Estatuto de Roma para una Corte Penal Internacional (tal como se corrigió el 10 de noviembre de
1998 y 12 de julio de 1999), A/CONF.183/ 9 y 17 de julio de 1998.
Rules of Procedure and Evidence, International Tribunal for the Prosecution of Persons Responsible
for Serious Violations of International Humanitarian Law Committed in the Territory of the Former
Yugolsavia since 1999. In J.Oppenheim & W. Van der Wolf, Global War Crimes Tribunal
Collection, Volumen IIc The Yugoslav Tribunal, (Holanda: GLA/ Wolf Global Legal Publishers,
1999).
Proclamación Especial del Comando Supremo de los Poderes Aliados en Tokio, 4 Bevans 20,
amendado, 4 Bevans 27 (Carta del Tribunal de Tokio).
156
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
Estatuto del Tribunal Penal Internacional para el Enjuiciamiento de las personas responsables de
genocidio u otras violaciones graves al derecho internacional humanitario cometidas en el territorio
de Ruanda y los ciudadanos de Ruanda responsable spor genocidio y otras violaciones graves
cometidas en el territorio de los países vecinos, entre el 1 de enero de 1994 y el 31 de diciembre de
1994, anexado a la Resolución 955 del Consejo de Seguridad, (1994), UN Dov. S/RES/955.
Estatuto del Tribunal Penal Internacional para el Enjuiciamiento de las personas responsables de
genocidio u otras violaciones graves al derecho internacional humanitario cometidas en el territorio
de la Antigua Yugoslavia desde 1999, Informe del Secretario General referente al párrafo 2 de la
Resolución 808 del Consejo de Seguridad (1993(, UN Dov. S/25704.
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the Rome Statye of the International Criminal Court, and to make consequential amendments, 2nd.
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6.3 Jurisprudencia
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Lattanzi, F. Compétence de la Cour pénale international et consentement des États. 1999. RGDIP
425.
Nsereko, D.N., Ther International Criminal Court: Jurisdicitional and Related Issues. 1999. 10
Crim. L. Forum 87.
Schabas, W.A. Follow up to Rome: Preparing for Entry into Force of the International Criminal
Court Statute. 1999. 20 HRLJ. 157.
Van Zyl Smit, D. Life Imprisonment as the Ultimate Penalty in International Law: a Human Rights
Perspective. 1999. 9 Crim. L.Forum 5.
159
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
1) Ausencia de inmunidad para los jefes de Estado, contenida en el artículo 27 del Estatuto,
contradice tres artículos de la Constitución francesa.
Artículo 26
Ningún miembro del Parlamento podrá ser acusado, investigado, arrestado, detenido o
enjuiciado respecto a las opiniones expresadas o votos emitidos en el ejercicio de sus
funciones. Ningún miembro del Parlamento podrá ser arrestado por un crimen grave u otra
ofensa, ni podrá estar sujeto a cualquier otra medida de custodia o semi.-custodial, sin la
autorización de la del Directorio de la Cámara de la cual forma parte. Tal autorización no se
requerirá en el caso de un delito grave o de una ofensa cometida in flagrante. La detención,
la sujeción a medidas de custodia o de semi-custodia, o el enjuiciamiento de un miembro de
Parlamento deberá suspenderse durante la sesión de la Cámara de la cual éste es miembro.
La asamblea al respecto deberá convenir sobre nuevas plazas con el fin de permitir que el
párrafo precedente se aplique a las circunstancias que así lo requieran.
Artículo 68
Artículo 68-1
Los miembros del Gobierno serán penalmente responsables por los actos realizados en el
ejercicio de sus funciones clasificados como delitos graves u otras ofensas serias en el
momento en que se cometieron. Serán enjuiciados por la Corte de Justicia de la República.
La Corte de Justicia de la República estará sujeta a la definición de delitos graves y otras
ofensas serias y la determinación de sanciones establecidas por el estatuto.
(http://www.asamblee-nationale.fr/8/8ab.htm)
160
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
Existen dos casos en los cuales esto se daría. Primero, en el caso en que el Congreso
Francés otorgue una amnistía, la CPI podría decidir que es competente para enjuiciar a los
individuos favorecidos por tal beneficio. Además, debido a que no existe ninguna limitación
para los crímenes enumerados en el Estatuto, la CPI podría ser competente y enjuiciar a un
individuo a pesar de la existencia de leyes francesas que limiten estas ofensas penales,
inclusive los delitos internacionales.
3) Las potestades del Fiscal de la CPI afectan las condiciones del ejercicio de la soberanía
nacional
La potestad del Fiscal para recabar pruebas testimoniales y llevar a cabo inspecciones del
lugar en donde se cometió el delito en el territorio de un Estado contradice la disposición
que otorga a las autoridades judiciales francesas la responsabilidad de llevar a cabo acciones
que se soliciten como una cooperación legal con una autoridad extranjera.
El gobierno francés considera que estos no fueron obstáculos graves y podría ser
sobrepasados por la inclusión de una nueva disposición en la Constitución. Por ende,
agregaron el artículo 53-2, que dispone lo siguiente.
El Ministro de Justicia francés afirma que este nuevo artículo cubre todos los aspectos de
inconstitucionalidad que dispuso el Consejo Constitucional, lo cual permite a Francia la
ratificación del Estatuto de Roma (Ministro de Justicia de Francia, Cour pénale
international, adoption du projet de loi constitutionnel, 199,
http://ww.justice.gouv.fr/arbo/publicat/note13.htm). La ventaja de este tipo de reforma
constitucional está en el hecho de que implícitamente enmienda las disposiciones
constitucionales en cuestión, sin tener que dar paso a un extenso debate público sobre las
disposiciones mismas.
161
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
ANEXO II – INSTRUMENTOS
INTERNACIONALES QUE PENALIZAN LOS
CRIMENES DE GUERRA
Conention pour la protection des bien culturels en cas de conflit armé, 14 mai 1954, Acte
final de la Conférence intergouvernementale sur la protection des biens culturels en cas de
conflit armé, La Haye, UNESCO, 1954, aux pp. 7-67, art. 28.
Protocolo Adicional a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949, relacionado con
la Protección de las víctimas en los conflictos armados internacionales. 8 de junio de 1977,
1125 R.T.N.U. 3. Art. 4 y 85.
162
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
Sería también importante citar el IV Convenio sobre las Leyes y Usos de Guerra en tierra y
su Anexo: Regulaciones sobre las leyes y usos de la guerra en tierra, La Haya, 18 de
octubre, 1907; Segunda Conferencia de Paz de la Haya, 1907, Junio 15 – Octubre 18, 1907,
Actos y Documentos; La Haya, 1907, Vol. I, p. 626-637. Este tratado no regula las
violaciones a las leyes de conflicto armado, per contiene muchas reglas que han sido
incluidas en otros instrumentos.
163
Capítulo 6: Bibliografía y Anexos Seleccionados
Estados Unidos contra Tomoyuki Yamashita. Law Reports ofd Trials of War Criminals.
Vol. IV, p. 1; Re Yamashita (1945) 327 US1, p.14-16.
Estados Unidos contra Karl Brandt y otros. (Caso Médico). Trials of War Criminals before
the Nuremberg Military Tribunal under Control Council Law no. 10, Vol. II, 171, 121.
Estados Unidos contra Wilhem List y otros (Affaire des otages). Trials of War Criminals
before the Nuremberg Military Tribunal under Control Council Law no. 10, Vol. XI, 1230.
Re Hideki Tojo. The Complete Transcripts of the Proceedings of the International Military
Tribunal for the Far East, reprinted in R.J. Pritchard and S.Magbanua Zaide (eds.), The
Tokyo War Crimes Trial, Vol. 20, New York & Londres, Garland Publishing, 1981, en 49
831.
Estados Unidos contra Friedrich Flick y otros. Trials of War Criminals before the
Nuremberg Military Tribunal under Control Council Law. No. 10, Vol. VI, P. 1187.
Estados Unidos contra Oswald Pohl y otros. Trials of War Criminals before the Nuremberg
Military Tribunal under Control Council Law. No. 10, vol. V, p. 958.
Fiscalía contra Delalic, Mucic y Landzo (1998), Caso No. It-96-21, Tribunal Penal
Internacional para la Antigua Yugoslavia, Sala de Juicio.
164
Estatuto De Roma
NACIONES UNIDAS
1998
PREÁMBULO
Conscientes de que todos los pueblos están unidos por estrechos lazos y sus culturas configuran un patrimonio común y
observando con preocupación que este delicado mosaico puede romperse en cualquier momento,
Teniendo presente que, en este siglo, millones de niños, mujeres y hombres han sido víctimas de atrocidades que desafían la
imaginación y conmueven profundamente la conciencia de la humanidad,
Reconociendo que esos graves crímenes constituyen una amenaza para la paz, la seguridad y el bienestar de la humanidad,
Afirmando que los crímenes más graves de trascendencia para la comunidad internacional en su conjunto no deben quedar sin
castigo y que, a tal fin, hay que adoptar medidas en el plano nacional e intensificar la cooperación internacional para asegurar que sean
efectivamente sometidos a la acción de la justicia,
Decididos a poner fin a la impunidad de los autores de esos crímenes y a contribuir así a la prevención de nuevos crímenes,
Recordando que es deber de todo Estado ejercer su jurisdicción penal contra los responsables de crímenes internacionales,
Reafirmando los Propósitos y Principios de la Carta de las Naciones Unidas y, en particular, que los Estados se abstendrán de
recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado o en cualquier
otra forma incompatible con los propósitos de las Naciones Unidas,
Destacando, en este contexto, que nada de lo dispuesto en el presente Estatuto deberá entenderse en el sentido de que autorice a
un Estado Parte a intervenir en una situación de conflicto armado o en los asuntos internos de otro Estado,
Decididos, a los efectos de la consecución de esos fines y en interés de las generaciones presentes y futuras, a establecer una
Corte Penal Internacional de carácter permanente, independiente y vinculada con el sistema de las Naciones Unidas que tenga
competencia sobre los crímenes más graves de trascendencia para la comunidad internacional en su conjunto,
Destacando que la Corte Penal Internacional establecida en virtud del presente Estatuto será complementaria de las
jurisdicciones penales nacionales,
Decididos a garantizar que la justicia internacional sea respetada y puesta en práctica en forma duradera,
165
Estatuto De Roma
Artículo 1
La Corte
Se instituye por el presente una Corte Penal Internacional ("la Corte"). La Corte será una institución permanente, estará
facultada para ejercer su jurisdicción sobre personas respecto de los crímenes más graves de trascendencia internacional de conformidad
con el presente Estatuto y tendrá carácter complementario de las jurisdicciones penales nacionales. La competencia y el funcionamiento
de la Corte se regirán por las disposiciones del presente Estatuto.
Artículo 2
Artículo 3
Sede de la Corte
1. La sede de la Corte estará en La Haya, Países Bajos ("el Estado anfitrión").
2. La Corte concertará con el Estado anfitrión un acuerdo relativo a la sede que deberá aprobar la Asamblea de los Estados
Partes y concluir luego el Presidente de la Corte en nombre de ésta.
3. La Corte podrá celebrar sesiones en otro lugar cuando lo considere conveniente, de conformidad con lo dispuesto en el
presente Estatuto.
Artículo 4
2. La Corte podrá ejercer sus funciones y atribuciones de conformidad con lo dispuesto en el presente Estatuto en el territorio
de cualquier Estado Parte y, por acuerdo especial, en el territorio de cualquier otro Estado.
Artículo 5
a) El crimen de genocidio;
d) El crimen de agresión.
2. La Corte ejercerá competencia respecto del crimen de agresión una vez que se apruebe una disposición de conformidad
con los artículos 121 y 123 en que se defina el crimen y se enuncien las condiciones en las cuales lo hará. Esa disposición será compatible
con las disposiciones pertinentes de la Carta de las Naciones Unidas.
Artículo 6
Genocidio
A los efectos del presente Estatuto, se entenderá por "genocidio" cualquiera de los actos mencionados a continuación,
perpetrados con la intención de destruir total o parcialmente a un grupo nacional, étnico, racial o religioso como tal:
166
Estatuto De Roma
c) Sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial;
Artículo 7
a) Asesinato;
b) Exterminio;
c) Esclavitud;
e) Encarcelación u otra privación grave de la libertad física en violación de normas fundamentales de derecho
internacional;
f) Tortura;
g) Violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización forzada o cualquier otra forma de
violencia sexual de gravedad comparable;
h) Persecución de un grupo o colectividad con identidad propia fundada en motivos políticos, raciales, nacionales,
étnicos, culturales, religiosos, de género definido en el párrafo 3, u otros motivos universalmente reconocidos como inaceptables con
arreglo al derecho internacional, en conexión con cualquier acto mencionado en el presente párrafo o con cualquier crimen de la
competencia de la Corte;
j) El crimen de apartheid;
k) Otros actos inhumanos de carácter similar que causen intencionalmente grandes sufrimientos o atenten gravemente
contra la integridad física o la salud mental o física.
a) Por "ataque contra una población civil" se entenderá una línea de conducta que implique la comisión múltiple de
actos mencionados en el párrafo 1 contra una población civil, de conformidad con la política de un Estado o de una organización de
cometer ese ataque o para promover esa política;
b) El "exterminio" comprenderá la imposición intencional de condiciones de vida, entre otras, la privación del acceso a
alimentos o medicinas, entre otras, encaminadas a causar la destrucción de parte de una población;
c) Por "esclavitud" se entenderá el ejercicio de los atributos del derecho de propiedad sobre una persona, o de algunos
de ellos, incluido el ejercicio de esos atributos en el tráfico de personas, en particular mujeres y niños;
d) Por "deportación o traslado forzoso de población" se entenderá el desplazamiento forzoso de las personas afectadas,
por expulsión u otros actos coactivos, de la zona en que estén legítimamente presentes, sin motivos autorizados por el derecho
internacional;
e) Por "tortura" se entenderá causar intencionalmente dolor o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, a una
persona que el acusado tenga bajo su custodia o control; sin embargo, no se entenderá por tortura el dolor o los sufrimientos que se
deriven únicamente de sanciones lícitas o que sean consecuencia normal o fortuita de ellas;
f) Por "embarazo forzado" se entenderá el confinamiento ilícito de una mujer a la que se ha dejado embarazada por la
fuerza, con la intención de modificar la composición étnica de una población o de cometer otras violaciones graves del derecho
167
Estatuto De Roma
internacional. En modo alguno se entenderá que esta definición afecta a las normas de derecho interno relativas al embarazo;
g) Por "persecución" se entenderá la privación intencional y grave de derechos fundamentales en contravención del
derecho internacional en razón de la identidad del grupo o de la colectividad;
h) Por "el crimen de apartheid" se entenderán los actos inhumanos de carácter similar a los mencionados en el párrafo 1
cometidos en el contexto de un régimen institucionalizado de opresión y dominación sistemáticas de un grupo racial sobre uno o más
grupos raciales y con la intención de mantener ese régimen;
i) Por "desaparición forzada de personas" se entenderá la aprehensión, la detención o el secuestro de personas por un
Estado o una organización política, o con su autorización, apoyo o aquiescencia, seguido de la negativa a admitir tal privación de libertad
o dar información sobre la suerte o el paradero de esas personas, con la intención de dejarlas fuera del amparo de la ley por un período
prolongado.
3. A los efectos del presente Estatuto se entenderá que el término "género" se refiere a los dos sexos, masculino y femenino,
en el contexto de la sociedad. El término "género" no tendrá más acepción que la que antecede.
Artículo 8
Crímenes de guerra
1. La Corte tendrá competencia respecto de los crímenes de guerra en particular cuando se cometan como parte de un plan o
política o como parte de la comisión en gran escala de tales crímenes.
a) Infracciones graves de los Convenios de Ginebra de 12 de agosto de 1949, a saber, cualquiera de los siguientes actos
contra personas o bienes protegidos por las disposiciones del Convenio de Ginebra pertinente:
i) El homicidio intencional;
iii) El hecho de causar deliberadamente grandes sufrimientos o de atentar gravemente contra la integridad física o
la salud;
iv) La destrucción y la apropiación de bienes, no justificadas por necesidades militares, y efectuadas a gran escala,
ilícita y arbitrariamente;
v) El hecho de forzar a un prisionero de guerra o a otra persona protegida a servir en las fuerzas de una Potencia
enemiga;
vi) El hecho de privar deliberadamente a un prisionero de guerra o a otra persona protegida de su derecho a ser
juzgado legítima e imparcialmente;
b) Otras violaciones graves de las leyes y usos aplicables en los conflictos armados internacionales dentro del marco
establecido de derecho internacional, a saber, cualquiera de los actos siguientes:
i) Dirigir intencionalmente ataques contra la población civil en cuanto tal o contra personas civiles que no participen
directamente en las hostilidades;
ii) Dirigir intencionalmente ataques contra bienes civiles, es decir, bienes que no son objetivos militares;
iii) Dirigir intencionalmente ataques contra personal, instalaciones, material, unidades o vehículos participantes en
una misión de mantenimiento de la paz o de asistencia humanitaria de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas, siempre que
tengan derecho a la protección otorgada a civiles o bienes civiles con arreglo al derecho internacional de los conflictos armados;
iv) Lanzar un ataque intencionalmente, a sabiendas de que causará pérdidas incidentales de vidas, lesiones a civiles o
daños a bienes de carácter civil o daños extensos, duraderos y graves al medio ambiente natural que serían manifiestamente excesivos en
relación con la ventaja militar concreta y directa de conjunto que se prevea;
v) Atacar o bombardear, por cualquier medio, ciudades, aldeas, viviendas o edificios que no estén defendidos y que no
sean objetivos militares;
168
Estatuto De Roma
vi) Causar la muerte o lesiones a un combatiente que haya depuesto las armas o que, al no tener medios para defenderse,
se haya rendido a discreción;
vii) Utilizar de modo indebido la bandera blanca, la bandera nacional o las insignias militares o el uniforme del enemigo
o de las Naciones Unidas, así como los emblemas distintivos de los Convenios de Ginebra, y causar así la muerte o lesiones graves;
viii) El traslado, directa o indirectamente, por la Potencia ocupante de parte de su población civil al territorio que ocupa
o la deportación o el traslado de la totalidad o parte de la población del territorio ocupado, dentro o fuera de ese territorio;
ix) Dirigir intencionalmente ataques contra edificios dedicados a la religión, la instrucción, las artes, las ciencias o la
beneficencia, los monumentos históricos, los hospitales y los lugares en que se agrupa a enfermos y heridos, siempre que no sean
objetivos militares;
x) Someter a personas que estén en poder de una parte adversa a mutilaciones físicas o a experimentos médicos o
científicos de cualquier tipo que no estén justificados en razón de un tratamiento médico, dental u hospitalario, ni se lleven a cabo en su
interés, y que causen la muerte o pongan gravemente en peligro su salud;
xiii) Destruir o apoderarse de bienes del enemigo, a menos que las necesidades de la guerra lo hagan imperativo;
xiv) Declarar abolidos, suspendidos o inadmisibles ante un tribunal los derechos y acciones de los nacionales de la parte
enemiga;
xv) Obligar a los nacionales de la parte enemiga a participar en operaciones bélicas dirigidas contra su propio país,
aunque hubieran estado al servicio del beligerante antes del inicio de la guerra;
xvi) Saquear una ciudad o una plaza, incluso cuando es tomada por asalto;
xviii) Emplear gases asfixiantes, tóxicos o similares o cualquier líquido, material o dispositivo análogos;
xix) Emplear balas que se ensanchan o aplasten fácilmente en el cuerpo humano, como balas de camisa dura que no
recubra totalmente la parte interior o que tenga incisiones;
xx) Emplear armas, proyectiles, materiales y métodos de guerra que, por su propia naturaleza, causen daños superfluos
o sufrimientos innecesarios o surtan efectos indiscriminados en violación del derecho internacional de los conflictos armados, a condición
de que esas armas o esos proyectiles, materiales o métodos de guerra, sean objeto de una prohibición completa y estén incluidos en un
anexo del presente Estatuto en virtud de una enmienda aprobada de conformidad con las disposiciones que, sobre el particular, figuran en
los artículos 121 y 123;
xxi) Cometer atentados contra la dignidad personal, especialmente los tratos humillantes y degradantes;
xxii) Cometer actos de violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, definido en el apartado f)
del párrafo 2 del artículo 7, esterilización forzada y cualquier otra forma de violencia sexual que tambien constituya una infracción grave
de los Convenios de Ginebra;
xxiii) Utilizar la presencia de una persona civil u otra persona protegida para poner ciertos puntos, zonas o fuerzas
militares a cubierto de operaciones militares;
xxiv) Dirigir intencionalmente ataques contra edificios, material, unidades y medios de transporte sanitarios, y contra
personal que utilice los emblemas distintivos de los Convenios de Ginebra de conformidad con el derecho internacional;
xxv) Hacer padecer intencionalmente hambre a la población civil como método de hacer la guerra, privándola de los
objetos indispensables para su supervivencia, incluido el hecho de obstaculizar intencionalmente los suministros de socorro de
conformidad con los Convenios de Ginebra;
xxvi) Reclutar o alistar a niños menores de 15 años en las fuerzas armadas nacionales o utilizarlos para participar
activamente en las hostilidades;
c) En caso de conflicto armado que no sea de índole internacional, las violaciones graves del artículo 3 común a los cuatro
Convenios de Ginebra de 12 de agosto de 1949, a saber, cualquiera de los siguientes actos cometidos contra personas que no participen
directamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas que hayan depuesto las armas y las personas puestas
169
Estatuto De Roma
fuera de combate por enfermedad, herida, detención o por cualquier otra causa:
i ) Los atentatos contra la vida y la integridad corporal, especialmente el homicidio en todas sus formas, las
mutilaciones, los tratos crueles y la tortura;
ii) Los atentados contra la dignidad personal, especialmente los tratos humillantes y degradantes;
iv) Las condenas dictadas y las ejecuciones sin previo juicio ante un tribunal regularmente constituido, con todas las
garantías judiciales generalmente reconocidas como indispensables.
d) El párrafo 2 c) del presente artículo se aplica a los conflictos armados que no son de índole internacional, y por
consiguiente, no se aplica a las situaciones de tensiones internas y de disturbios interiores, tales como los motines, los actos esporádicos y
aislados de violencia u otros actos análogos.
e) Otras violaciones graves de las leyes y los usos aplicables en los conflictos armados que no sean de índole internacional,
dentro del marco establecido de derecho internacional, a saber, cualquiera de los actos siguientes:
i) Dirigir intencionalmente ataques contra la población civil como tal o contra civiles que no participen directamente en
las hostilidades;
ii) Dirigir intencionalmente ataques contra edificios, material, unidades y medios de transporte sanitarios y contra el
personal que utilicen los emblemas distintivos de los Convenios de Ginebra de conformidad con el derecho internacional;
iii) Dirigir intencionalmente ataques contra personal, instalaciones, material, unidades o vehículos participantes en una
misión de mantenimiento de la paz o de asistencia humanitaria de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas, siempre que tengan
derecho a la protección otorgada a civiles o bienes civiles con arreglo al derecho internacional de los conflictos armados;
iv) Dirigir intencionalmente ataques contra edificios dedicados a la religión, la educación, las artes, las ciencias o la
beneficencia, los monumentos históricos, los hospitales y otros lugares en que se agrupa a enfermos y heridos, a condición de que no sean
objetivos militares;
vi) Cometer actos de violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, definido en el apartado f) del
párrafo 2 del artículo 7, esterilización forzada o cualquier otra forma de violencia sexual que constituya también una violación grave del
artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra;
vii) Reclutar o alistar niños menores de 15 años en las fuerzas armadas o grupos o utilizarlos para participar activamente
en hostilidades;
viii) Ordenar el desplazamiento de la población civil por razones relacionadas con el conflicto, a menos que así lo exija
la seguridad de los civiles de que se trate o por razones militares imperativas;
xi) Someter a las personas que estén en poder de otra parte en el conflicto a mutilaciones físicas o a experimentos
médicos o científicos de cualquier tipo que no estén justificados en razón del tratamiento médico, dental u hospitalario de la persona de
que se trate ni se lleven a cabo en su interés, y que provoquen la muerte o pongan gravemente en peligro su salud;
xii) Destruir o apoderarse de bienes de un adversario, a menos que las necesidades del conflicto lo hagan imperativo;
f) El párrafo 2 e) del presente artículo se aplica a los conflictos armados que no son de índole internacional, y, por
consiguiente, no se aplica a las situaciones de tensiones internas y de disturbios interiores, tales como los motines, los actos esporádicos y
aislados de violencia u otros actos análogos. Se aplica a los conflictos armados que tienen lugar en el territorio de un Estado cuando
existe un conflicto armado prolongado entre las autoridades gubernamentales y grupos armados organizados o entre tales grupos.
3. Nada de lo dispuesto en los párrafos 2 c) y e) afectará a la responsabilidad que incumbe a todo gobierno de mantener o
restablecer el orden público en el Estado o de defender la unidad e integridad territorial del Estado por cualquier medio legítimo.
Artículo 9
170
Estatuto De Roma
1. Los Elementos de los crímenes, que ayudarán a la Corte a interpretar y aplicar los artículos 6, 7 y 8 del presente Estatuto,
serán aprobados por una mayoría de dos tercios de los miembros de la Asamblea de los Estados Partes.
c) El Fiscal.
Las enmiendas serán aprobadas por una mayoría de dos tercios de los miembros de la Asamblea de los Estados Partes.
3. Los Elementos de los crímenes y sus enmiendas serán compatibles con lo dispuesto en el presente Estatuto.
Artículo 10
Nada de lo dispuesto en la presente parte se interpretará en el sentido de que limite o menoscabe de alguna manera las normas
existentes o en desarrollo del derecho internacional para fines distintos del presente Estatuto.
Artículo 11
Competencia temporal
1. La Corte tendrá competencia únicamente respecto de crímenes cometidos después de la entrada en vigor del presente
Estatuto.
2. Si un Estado se hace Parte en el presente Estatuto después de su entrada en vigor, la Corte podrá ejercer su competencia
únicamente con respecto a los crímenes cometidos después de la entrada en vigor del presente Estatuto respecto de ese Estado, a menos
que éste haya hecho una declaración de conformidad con el párrafo 3 del artículo 12.
Artículo 12
2. En el caso de los apartados a) o c) del artículo 13, la Corte podrá ejercer su competencia si uno o varios de los Estados
siguientes son Partes en el presente Estatuto o han aceptado la competencia de la Corte de conformidad con el párrafo 3:
a) El Estado en cuyo territorio haya tenido lugar la conducta de que se trate, o si el crimen se hubiere cometido a bordo
de un buque o de una aeronave, el Estado de matrícula del buque o la aeronave;
3. Si la aceptación de un Estado que no sea Parte en el presente Estatuto fuere necesaria de conformidad con el párrafo 2,
dicho Estado podrá, mediante declaración depositada en poder del Secretario, consentir en que la Corte ejerza su competencia respecto
del crimen de que se trate. El Estado aceptante cooperará con la Corte sin demora ni excepción de conformidad con la Parte IX.
Artículo 13
Ejercicio de la competencia
La Corte podrá ejercer su competencia respecto de cualquiera de los crímenes a que se refiere el artículo 5 de conformidad con
las disposiciones del presente Estatuto si:
a) Un Estado Parte remite al Fiscal, de conformidad con el artículo 14, una situación en que parezca haberse cometido uno o
varios de esos crímenes;
b) El Consejo de Seguridad, actuando con arreglo a lo dispuesto en el Capítulo VII de la Carta de las Naciones Unidas,
remite al Fiscal una situación en que parezca haberse cometido uno o varios de esos crímenes; o
c) El Fiscal ha iniciado una investigación respecto de un crimen de ese tipo de conformidad con lo dispuesto en el artículo
15.
Artículo 14
Remisión de una situación por un Estado Parte
171
Estatuto De Roma
1. Todo Estado Parte podrá remitir al Fiscal una situación en que parezca haberse cometido uno o varios crímenes de la
competencia de la Corte y pedir al Fiscal que investigue la situación a los fines de determinar si se ha de acusar de la comisión de tales
crímenes a una o varias personas determinadas.
Artículo 15
El Fiscal
1. El Fiscal podrá iniciar de oficio una investigación sobre la base de información acerca de un crimen de la competencia de
la Corte.
2. El Fiscal analizará la veracidad de la información recibida. Con tal fin, podrá recabar más información de los Estados, los
órganos de las Naciones Unidas, las organizaciones intergubernamentales o no gubernamentales u otras fuentes fidedignas que considere
apropiadas y podrá recibir testimonios escritos u orales en la sede de la Corte.
3. El Fiscal, si llegare a la conclusión de que existe fundamento suficiente para abrir una investigación, presentará a la Sala
de Cuestiones Preliminares una petición de autorización para ello, junto con la documentación justificativa que haya reunido. Las
víctimas podrán presentar observaciones a la Sala de Cuestiones Preliminares, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
4. Si, tras haber examinado la petición y la documentación que la justifique, la Sala de Cuestiones Preliminares considerare
que hay fundamento suficiente para abrir una investigación y que el asunto parece corresponder a la competencia de la Corte, autorizará
el inicio de la investigación, sin perjuicio de las resoluciones que pueda adoptar posteriormente la Corte con respecto a su competencia y
la admisibilidad de la causa.
5. La negativa de la Sala de Cuestiones Preliminares a autorizar la investigación no impedirá que el Fiscal presente
ulteriormente otra petición basada en nuevos hechos o pruebas relacionados con la misma situación.
6. Si, después del examen preliminar a que se refieren los párrafos 1 y 2, el Fiscal llega a la conclusión de que la información
presentada no constituye fundamento suficiente para una investigación, informará de ello a quienes la hubieren presentado. Ello no
impedirá que el Fiscal examine a la luz de hechos o pruebas nuevos, otra información que reciba en relación con la misma situación.
Artículo 16
Artículo 17
Cuestiones de admisibilidad
1. La Corte teniendo en cuenta el décimo párrafo del preámbulo y el artículo 1, resolverá la inadmisibilidad de un asunto
cuando:
a) El asunto sea objeto de una investigación o enjuiciamiento por un Estado que tenga jurisdicción sobre él salvo que
éste no esté dispuesto a llevar a cabo la investigación o el enjuiciamiento o no pueda realmente hacerlo;
b) El asunto haya sido objeto de investigación por un Estado que tenga jurisdicción sobre él y éste haya decidido no
incoar acción penal contra la persona de que se trate, salvo que la decisión haya obedecido a que no esté dispuesto a llevar a cabo el
enjuiciamiento o no pueda realmente hacerlo;
c) La persona de que se trate haya sido ya enjuiciada por la conducta a que se refiere la denuncia, y la Corte no pueda
adelantar el juicio con arreglo a lo dispuesto en el párrafo 3 del artículo 20;
d) El asunto no sea de gravedad suficiente para justificar la adopción de otras medidas por la Corte.
2. A fin de determinar si hay o no disposición a actuar en un asunto determinado, la Corte examinará, teniendo en cuenta los
principios de un proceso con las debidas garantías reconocidos por el derecho internacional, si se da una o varias de las siguientes
circunstancias, según el caso:
a) Que el juicio ya haya estado o esté en marcha o que la decisión nacional haya sido adoptada con el propósito de
sustraer a la persona de que se trate de su responsabilidad penal por crímenes de la competencia de la Corte, según lo dispuesto en el
artículo 5;
172
Estatuto De Roma
b) Que haya habido una demora injustificada en el juicio que, dadas las circunstancias, sea incompatible con la
intención de hacer comparecer a la persona de que se trate ante la justicia;
c) Que el proceso no haya sido o no esté siendo sustanciado de manera independiente o imparcial y haya sido o esté
siendo sustanciado de forma en que, dadas las circunstancias, sea incompatible con la intención de hacer comparecer a la persona de que
se trate ante la justicia.
3. A fin de determinar la incapacidad para investigar o enjuiciar en un asunto determinado, la Corte examinará si el Estado,
debido al colapso total o sustancial de su administración nacional de justicia o al hecho de que carece de ella, no puede hacer comparecer
al acusado, no dispone de las pruebas y los testimonios necesarios o no está por otras razones en condiciones de llevar a cabo el juicio.
Artículo 18
2. Dentro del mes siguiente a la recepción de dicha notificación, el Estado podrá informar a la Corte que está llevando o ha
llevado a cabo una investigación en relación con sus nacionales u otras personas bajo su jurisdicción respecto de actos criminales que
puedan constituir crímenes contemplados en el artículo 5 y a los que se refiera la información proporcionada en la notificación a los
Estados. A petición de dicho Estado, el Fiscal se inhibirá de su competencia en favor del Estado en relación con la investigación sobre las
personas antes mencionadas, a menos que la Sala de Cuestiones Preliminares decida, a petición del Fiscal autorizar la investigación.
3. El Fiscal podrá volver a examinar la cuestión de la inhibición de su competencia al cabo de seis meses a partir de la fecha
de la remisión o cuando se haya producido un cambio significativo de circunstancias en vista de que el Estado no está dispuesto a llevar a
cabo la investigación o no puede realmente hacerlo.
4. El Estado de que se trate o el Fiscal podrán apelar ante la Sala de Apelaciones de la decisión de la Sala de Cuestiones
Preliminares, de conformidad con el artículo 82. La apelación podrá sustanciarse en forma sumaria.
5. Cuando el Fiscal se haya inhibido de su competencia en relación con la investigación con arreglo a lo dispuesto en el
párrafo 2, podrá pedir al Estado de que se trate que le informe periódicamente de la marcha de sus investigaciones y del juicio ulterior.
Los Estados Partes responderán a esas peticiones sin dilaciones indebidas.
6. El Fiscal podrá, hasta que la Sala de Cuestiones Preliminares haya emitido su decisión, o en cualquier momento si se
hubiere inhibido de su competencia en virtud de este artículo, pedir a la Sala de Cuestiones Preliminares, con carácter excepcional, que le
autorice a llevar adelante las indagaciones que estime necesarias cuando exista una oportunidad única de obtener pruebas importantes o
exista un riesgo significativo de que esas pruebas no estén disponibles ulteriormente.
7. El Estado que haya apelado una decisión de la Sala de Cuestiones Preliminares en virtud del presente artículo podrá
impugnar la admisibilidad de un asunto en virtud del artículo 19, haciendo valer hechos nuevos importantes o un cambio significativo de
las circunstancias.
Artículo 19
1. La Corte se cerciorará de ser competente en todas las causas que le sean sometidas. La Corte podrá determinar de oficio la
admisibilidad de una causa de conformidad con el artículo 17.
2. Podrán impugnar la admisibilidad de la causa, por uno de los motivos mencionados en el artículo 17, o impugnar la
competencia de la Corte:
a) El acusado o la persona contra la cual se haya dictado una orden de detención o una orden de comparecencia con
arreglo al artículo 58;
b) Un Estado que tenga jurisdicción en la causa porque está investigándola o enjuiciándola o lo ha hecho antes; o
3. El Fiscal podrá pedir a la Corte que se pronuncie sobre una cuestión de competencia o de admisibilidad. En las actuaciones
relativas a la competencia o la admisibilidad, podrán presentar asimismo observaciones a la Corte quienes hayan remitido la situación de
173
Estatuto De Roma
4. La admisibilidad de una causa o la competencia de la Corte sólo podrán ser impugnadas una sola vez por cualquiera de las
personas o los Estados a que se hace referencia en el párrafo 2. La impugnación se hará antes del juicio o a su inicio. En circunstancias
excepcionales, la Corte podrá autorizar que la impugnación se haga más de una vez o en una fase ulterior del juicio. Las impugnaciones a
la admisibilidad de una causa hechas al inicio del juicio, o posteriormente con la autorización de la Corte, sólo podrán fundarse en el
párrafo 1 c) del artículo 17.
5. El Estado a que se hace referencia en los apartados b) y c) del párrafo 2 del presente artículo hará la impugnación lo antes
posible.
6. Antes de la confirmación de los cargos, la impugnación de la admisibilidad de una causa o de la competencia de la Corte
será asignada a la Sala de Cuestiones Preliminares. Después de confirmados los cargos, será asignada a la Sala de Primera Instancia. Las
decisiones relativas a la competencia o la admisibilidad podrán ser recurridas ante la Sala de Apelaciones de conformidad con el artículo
82.
7. Si la impugnación es hecha por el Estado a que se hace referencia en los apartados b) o c) del párrafo 2, el Fiscal
suspenderá la investigación hasta que la Corte resuelva de conformidad con el artículo 17.
8. Hasta antes de que la Corte se pronuncie, el Fiscal podrá pedirle autorización para:
a) Practicar las indagaciones necesarias de la índole mencionada en el párrafo 6 del artículo 18;
b) Tomar declaración a un testigo o recibir su testimonio, o completar la recolección y el examen de las pruebas que
hubiere iniciado antes de la impugnación; y
c) Impedir, en cooperación con los Estados que corresponda, que eludan la acción de la justicia personas respecto de las
cuales el Fiscal haya pedido ya una orden de detención en virtud del artículo 58.
9. La impugnación no afectará a la validez de ningún acto realizado por el Fiscal, ni de ninguna orden o mandamiento
dictado por la Corte, antes de ella.
10. Si la Corte hubiere declarado inadmisible una causa de conformidad con el artículo 17, el Fiscal podrá pedir que se revise
esa decisión cuando se haya cerciorado cabalmente de que han aparecido nuevos hechos que invalidan los motivos por los cuales la causa
había sido considerada inadmisible de conformidad con dicho artículo.
11. El Fiscal, si habida cuenta de las cuestiones a que se refiere el artículo 17 suspende una investigación, podrá pedir que el
Estado de que se trate ponga a su disposición información sobre las actuaciones. A petición de ese Estado, dicha información será
confidencial. El Fiscal, si decide posteriormente abrir una investigación, notificará su decisión al Estado cuyas actuaciones hayan dado
origen a la suspensión.
Artículo 20
Cosa juzgada
1. Salvo que en el presente Estatuto se disponga otra cosa, nadie será procesado por la Corte en razón de conductas
constitutivas de crímenes por los cuales ya hubiere sido condenado o absuelto por la Corte.
2. Nadie será procesado por otro tribunal en razón de uno de los crímenes mencionados en el artículo 5 por el cual la Corte
ya le hubiere condenado o absuelto.
3. La Corte no procesará a nadie que haya sido procesado por otro tribunal en razón de hechos también prohibidos en virtud
de los artículos 6, 7 u 8 a menos que el proceso en el otro tribunal:
b) No hubiere sido instruido en forma independiente o imparcial de conformidad con las debidas garantías procesales
reconocidas por el derecho internacional o lo hubiere sido de alguna manera que, en las circunstancias del caso, fuere incompatible con la
intención de someter a la persona a la acción de la justicia.
Artículo 21
Derecho aplicable
174
Estatuto De Roma
1. La Corte aplicará:
a) En primer lugar, el presente Estatuto, los Elementos de los crímenes y sus Reglas de Procedimiento y Prueba;
b) En segundo lugar, cuando proceda, los tratados aplicables, los principios y normas del derecho internacional,
incluidos los principios establecidos del derecho internacional de los conflictos armados;
c) En su defecto, los principios generales del derecho que derive la Corte del derecho interno de los sistemas jurídicos
del mundo, incluido, cuando proceda, el derecho interno de los Estados que normalmente ejercerían jurisdicción sobre el crimen, siempre
que esos principios no sean incompatibles con el presente Estatuto ni con el derecho internacional ni las normas y estándares
internacionalmente reconocidos.
2. La Corte podrá aplicar principios y normas de derecho respecto de los cuales hubiere hecho una interpretación en
decisiones anteriores.
3. La aplicación e interpretación del derecho de conformidad con el presente artículo deberá ser compatible con los derechos
humanos internacionalmente reconocidos, sin distinción alguna basada en motivos como el género, definido en el párrafo 3 del artículo 7,
la edad, la raza, el color, la religión o el credo, la opinión política o de otra índole, el origen nacional, étnico o social, la posición
económica, el nacimiento u otra condición.
Artículo 22
1. Nadie será penalmente responsable de conformidad con el presente Estatuto a menos que la conducta de que se trate
constituya, en el momento en que tiene lugar, un crimen de la competencia de la Corte.
2. La definición de crimen será interpretada estrictamente y no se hará extensiva por analogía. En caso de ambigüedad, será
interpretada en favor de la persona objeto de investigación, enjuiciamiento o condena.
3. Nada de lo dispuesto en el presente artículo afectará a la tipificación de una conducta como crimen de derecho
internacional independientemente del presente Estatuto.
Artículo 23
Quien sea declarado culpable por la Corte únicamente podrá ser penado de conformidad con el presente Estatuto.
Artículo 24
1. Nadie será penalmente responsable de conformidad con el presente Estatuto por una conducta anterior a su entrada en
vigor.
2. De modificarse el derecho aplicable a una causa antes de que se dicte la sentencia definitiva, se aplicarán las disposiciones
más favorables a la persona objeto de la investigación, el enjuiciamiento o la condena.
Artículo 25
1. De conformidad con el presente Estatuto, la Corte tendrá competencia respecto de las personas naturales.
2. Quien cometa un crimen de la competencia de la Corte será responsable individualmente y podrá ser penado de
conformidad con el presente Estatuto.
175
Estatuto De Roma
3. De conformidad con el presente Estatuto, será penalmente responsable y podrá ser penado por la comisión de un crimen de
la competencia de la Corte quien:
a) Cometa ese crimen por sí solo, con otro o por conducto de otro, sea éste o no penalmente responsable;
b) Ordene, proponga o induzca la comisión de ese crimen, ya sea consumado o en grado de tentativa;
c) Con el propósito de facilitar la comisión de ese crimen, sea cómplice o encubridor o colabore de algún modo en la
comisión o la tentativa de comisión del crimen, incluso suministrando los medios para su comisión;
d) Contribuya de algún otro modo en la comisión o tentativa de comisión del crimen por un grupo de personas que
tengan una finalidad común. La contribución deberá ser intencional y se hará:
i) Con el propósito de llevar a cabo la actividad o propósito delictivo del grupo, cuando una u otro entrañe la
comisión de un crimen de la competencia de la Corte; o
e) Respecto del crimen de genocidio, haga una instigación directa y pública a que se cometa;
f) Intente cometer ese crimen mediante actos que supongan un paso importante para su ejecución, aunque el crimen no
se consume debido a circunstancias ajenas a su voluntad. Sin embargo, quien desista de la comisión del crimen o impida de otra forma
que se consume no podrá ser penado de conformidad con el presente Estatuto por la tentativa si renunciare íntegra y voluntariamente al
propósito delictivo.
4. Nada de lo dispuesto en el presente Estatuto respecto de la responsabilidad penal de las personas naturales afectará a la
responsabilidad del Estado conforme al derecho internacional.
Artículo 26
La Corte no será competente respecto de los que fueren menores de 18 años en el momento de la presunta comisión del crimen.
Artículo 27
1. El presente Estatuto será aplicable por igual a todos sin distinción alguna basada en el cargo oficial. En particular, el cargo
oficial de una persona, sea Jefe de Estado o de Gobierno, miembro de un gobierno o parlamento, representante elegido o funcionario de
gobierno, en ningún caso la eximirá de responsabilidad penal ni constituirá per se motivo para reducir la pena.
2. Las inmunidades y las normas de procedimiento especiales que conlleve el cargo oficial de una persona, con arreglo al
derecho interno o al derecho internacional, no obstarán para que la Corte ejerza su competencia sobre ella.
Artículo 28
Además de otras causales de responsabilidad penal de conformidad con el presente Estatuto por crímenes de la competencia de
la Corte:
a) El jefe militar o el que actúe efectivamente como jefe militar será penalmente responsable por los crímenes de la
competencia de la Corte que hubieren sido cometidos por fuerzas bajo su mando y control efectivo, o su autoridad y control efectivo,
según sea el caso, en razón de no haber ejercido un control apropiado sobre esas fuerzas cuando:
i) Hubiere sabido o, en razón de las circunstancias del momento, hubiere debido saber que las fuerzas estaban
cometiendo esos crímenes o se proponían cometerlos; y
ii) No hubiere adoptado todas las medidas necesarias y razonables a su alcance para prevenir o reprimir su comisión o
para poner el asunto en conocimiento de las autoridades competentes a los efectos de su investigación y enjuiciamiento.
b) En lo que respecta a las relaciones entre superior y subordinado distintas de las señaladas en el apartado a), el superior será
penalmente responsable por los crímenes de la competencia de la Corte que hubieren sido cometidos por subordinados bajo su autoridad
176
Estatuto De Roma
y control efectivo, en razón de no haber ejercido un control apropiado sobre esos subordinados, cuando:
i) Hubiere tenido conocimiento o deliberadamente hubiere hecho caso omiso de información que indicase claramente
que los subordinados estaban cometiendo esos crímenes o se proponían cometerlos;
ii) Los crímenes guardaren relación con actividades bajo su responsabilidad y control efectivo; y
iii) No hubiere adoptado todas las medidas necesarias y razonables a su alcance para prevenir o reprimir su comisión o
para poner el asunto en conocimiento de las autoridades competentes a los efectos de su investigación y enjuiciamiento.
Artículo 29
Imprescriptibilidad
Artículo 30
Elemento de intencionalidad
1. Salvo disposición en contrario, una persona será penalmente responsable y podrá ser penada por un crimen de la
competencia de la Corte únicamente si los elementos materiales del crimen se realizan con intención y conocimiento.
2. A los efectos del presente artículo, se entiende que actúa intencionalmente quien:
b) En relación con una consecuencia, se propone causarla o es consciente de que se producirá en el curso normal de los
acontecimientos.
3. A los efectos del presente artículo, por "conocimiento" se entiende la conciencia de que existe una circunstancia o se va a
producir una consecuencia en el curso normal de los acontecimientos. Las palabras "a sabiendas" y "con conocimiento" se entenderán en
el mismo sentido.
Artículo 31
1. Sin perjuicio de las demás circunstancias eximentes de responsabilidad penal establecidas en el presente Estatuto, no será
penalmente responsable quien, en el momento de incurrir en una conducta:
a) Padeciere de una enfermedad o deficiencia mental que le prive de su capacidad para apreciar la ilicitud o naturaleza
de su conducta, o de su capacidad para controlar esa conducta a fin de no transgredir la ley;
b) Estuviere en un estado de intoxicación que le prive de su capacidad para apreciar la ilicitud o naturaleza de su
conducta, o de su capacidad para controlar esa conducta a fin de no transgredir la ley, salvo que se haya intoxicado voluntariamente a
sabiendas de que, como resultado de la intoxicación, probablemente incurriría en una conducta tipificada como crimen de la competencia
de la Corte, o haya hecho caso omiso del riesgo de que ello ocurriere;
c) Actuare razonablemente en defensa propia o de un tercero o, en el caso de los crímenes de guerra, de un bien que
fuese esencial para su supervivencia o la de un tercero o de un bien que fuese esencial para realizar una misión militar, contra un uso
inminente e ilícito de la fuerza, en forma proporcional al grado de peligro para él, un tercero o los bienes protegidos. El hecho de
participar en una fuerza que realizare una operación de defensa no bastará para constituir una circunstancia eximente de la
responsabilidad penal de conformidad con el presente apartado;
d) Hubiere incurrido en una conducta que presuntamente constituya un crimen de la competencia de la Corte como
consecuencia de coacción dimanante de una amenaza inminente de muerte o lesiones corporales graves para él u otra persona, y en que se
vea compelido a actuar necesaria y razonablemente para evitar esa amenaza, siempre que no tuviera la intención de causar un daño mayor
que el que se proponía evitar. Esa amenaza podrá:
177
Estatuto De Roma
2. La Corte determinará si las circunstancias eximentes de responsabilidad penal admitidas por el presente Estatuto son
aplicables en la causa de que esté conociendo.
3. En el juicio, la Corte podrá tener en cuenta una circunstancia eximente de responsabilidad penal distinta de las indicadas
en el párrafo 1 siempre que dicha circunstancia se desprenda del derecho aplicable de conformidad con el artículo 21. El procedimiento
para el examen de una eximente de este tipo se establecerá en las Reglas de Procedimiento y Prueba.
Artículo 32
1. El error de hecho eximirá de responsabilidad penal únicamente si hace desaparecer el elemento de intencionalidad
requerido por el crimen.
2. El error de derecho acerca de si un determinado tipo de conducta constituye un crimen de la competencia de la Corte no se
considerará eximente. Con todo, el error de derecho podrá considerarse eximente si hace desaparecer el elemento de intencionalidad
requerido por ese crimen o si queda comprendido en lo dispuesto en el artículo 33 del presente Estatuto.
Artículo 33
1. Quien hubiere cometido un crimen de la competencia de la Corte en cumplimiento de una orden emitida por un gobierno o
un superior, sea militar o civil, no será eximido de responsabilidad penal a menos que:
a) Estuviere obligado por ley a obedecer órdenes emitidas por el gobierno o el superior de que se trate;
2. A los efectos del presente artículo, se entenderá que las órdenes de cometer genocidio o crímenes de lesa humanidad son
manifiestamente ilícitas.
Artículo 34
Órganos de la Corte
a) La Presidencia;
b) Una Sección de Apelaciones, una Sección de Primera Instancia y una Sección de Cuestiones Preliminares;
c) La Fiscalía;
d) La Secretaría.
Artículo 35
1. Todos los magistrados serán elegidos miembros de la Corte en régimen de dedicación exclusiva y estarán disponibles para
desempeñar su cargo en ese régimen desde que comience su mandato.
178
Estatuto De Roma
2. Los magistrados que constituyan la Presidencia desempeñarán sus cargos en régimen de dedicación exclusiva tan pronto
como sean elegidos.
3. La Presidencia podrá, en función del volumen de trabajo de la Corte, y en consulta con los miembros de ésta, decidir por
cuánto tiempo será necesario que los demás magistrados desempeñen sus cargos en régimen de dedicación exclusiva. Las decisiones que
se adopten en ese sentido se entenderán sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 40.
4. Las disposiciones financieras relativas a los magistrados que no deban desempeñar sus cargos en régimen de dedicación
exclusiva serán adoptadas de conformidad con el artículo 49.
Artículo 36
2. a) La Presidencia, actuando en nombre de la Corte, podrá proponer que aumente el número de magistrados indicado en
el párrafo 1 y señalará las razones por las cuales considera necesario y apropiado ese aumento. El Secretario distribuirá prontamente la
propuesta a todos los Estados Partes;
b) La propuesta será examinada en una sesión de la Asamblea de los Estados Partes que habrá de convocarse de
conformidad con el artículo 112. La propuesta, que deberá ser aprobada en la sesión por una mayoría de dos tercios de los Estados Partes,
entrará en vigor en la fecha en que decida la Asamblea;
c) i) Una vez que se haya aprobado una propuesta para aumentar el número de magistrados con arreglo al apartado b),
la elección de los nuevos magistrados se llevará a cabo en el siguiente período de sesiones de la Asamblea de los Estados Partes, de
conformidad con los párrafos 3 a 8 del presente artículo y con el párrafo 2 del artículo 37;
ii) Una vez que se haya aprobado y haya entrado en vigor una propuesta para aumentar el número de magistrados
con arreglo a los apartados b) y c) i), la Presidencia podrá en cualquier momento, si el volumen de trabajo de la Corte lo justifica,
proponer que se reduzca el número de magistrados, siempre que ese número no sea inferior al indicado en el párrafo 1. La propuesta será
examinada de conformidad con el procedimiento establecido en los apartados a) y b). De ser aprobada, el número de magistrados se
reducirá progresivamente a medida que expiren los mandatos y hasta que se llegue al número debido.
3. a) Los magistrados serán elegidos entre personas de alta consideración moral, imparcialidad e integridad que reúnan las
condiciones requeridas para el ejercicio de las más altas funciones judiciales en sus respectivos países;
ii) Reconocida competencia en materias pertinentes de derecho internacional, tales como el derecho internacional
humanitario y las normas de derechos humanos, así como gran experiencia en funciones jurídicas profesionales que tengan relación con
la labor judicial de la Corte;
c) Los candidatos a magistrado deberán tener un excelente conocimiento y dominio de por lo menos uno de los idiomas de
trabajo de la Corte.
4. a) Cualquier Estado Parte en el presente Estatuto podrá proponer candidatos en las elecciones para magistrado de la
Corte mediante:
i) El procedimiento previsto para proponer candidatos a los más altos cargos judiciales del país; o
ii) El procedimiento previsto en el Estatuto de la Corte Internacional de Justicia para proponer candidatos a esa
Corte.
Las propuestas deberán ir acompañadas de una exposición detallada acerca del grado en que el candidato cumple los requisitos
enunciados en el párrafo 3;
b) Un Estado Parte podrá proponer un candidato que no tenga necesariamente su nacionalidad, pero que en todo caso sea
nacional de un Estado Parte;
179
Estatuto De Roma
c) La Asamblea de los Estados Partes podrá decidir que se establezca un comité asesor para las candidaturas. En ese caso,
la Asamblea de los Estados Partes determinará la composición y el mandato del comité.
La lista A, con los nombres de los candidatos que reúnan los requisitos enunciados en el apartado b) i) del párrafo 3; y
La lista B, con los nombres de los candidatos que reúnan los requisitos enunciados en el apartado b) ii) del párrafo 3.
El candidato que reúna los requisitos requeridos para ambas listas podrá elegir en cuál desea figurar. En la primera elección de
miembros de la Corte, por lo menos nueve magistrados serán elegidos entre los candidatos de la lista A y por lo menos cinco serán
elegidos entre los de la lista B. Las elecciones subsiguientes se organizarán de manera que se mantenga en la Corte una proporción
equivalente de magistrados de ambas listas.
6. a) Los magistrados serán elegidos por votación secreta en una sesión de la Asamblea de los Estados Partes convocada
con ese fin con arreglo al artículo 112. Con sujeción a lo dispuesto en el párrafo 7, serán elegidos los 18 candidatos que obtengan el
mayor número de votos y una mayoría de dos tercios de los Estados Partes presentes y votantes;
b) En el caso de que en la primera votación no resulte elegido un número suficiente de magistrados, se procederá a
nuevas votaciones de conformidad con los procedimientos establecidos en el apartado a) hasta cubrir los puestos restantes.
7. No podrá haber dos magistrados que sean nacionales del mismo Estado. Toda persona que, para ser elegida magistrado,
pudiera ser considerada nacional de más de un Estado, será considerada nacional del Estado donde ejerza habitualmente sus derechos
civiles y políticos.
8. a) Al seleccionar a los magistrados, los Estados Partes tendrán en cuenta la necesidad de que en la composición de la
Corte haya:
b) Los Estados Partes tendrán también en cuenta la necesidad de que haya en la Corte magistrados que sean juristas
especializados en temas concretos que incluyan, entre otros, la violencia contra las mujeres o los niños.
9. a) Con sujeción a lo dispuesto en el apartado b), los magistrados serán elegidos por un mandato de nueve años y, con
sujeción al apartado c) y al párrafo 2 del artículo 37, no podrán ser reelegidos;
b) En la primera elección, un tercio de los magistrados elegidos será seleccionado por sorteo para desempeñar un
mandato de tres años, un tercio de los magistrados será seleccionado por sorteo para desempeñar un mandato de seis años y el resto
desempeñará un mandato de nueve años;
c) Un magistrado seleccionado para desempeñar un mandato de tres años de conformidad con el apartado b) podrá ser
reelegido por un mandato completo.
10. No obstante lo dispuesto en el párrafo 9, un magistrado asignado a una Sala de Primera Instancia o una Sala de
Apelaciones de conformidad con el artículo 39 seguirá en funciones a fin de llevar a término el juicio o la apelación de los que haya
comenzado a conocer en esa Sala.
Artículo 37
Vacantes
1. En caso de producirse una vacante se celebrará una elección de conformidad con el artículo 36 para cubrirla.
2. El magistrado elegido para cubrir una vacante desempeñará el cargo por el resto del mandato de su predecesor y, si éste
fuera de tres años o menos, podrá ser reelegido por un mandato completo con arreglo al artículo 36.
Artículo 38
Presidencia
180
Estatuto De Roma
1. El Presidente, el Vicepresidente primero y el Vicepresidente segundo serán elegidos por mayoría absoluta de los
magistrados. Cada uno desempeñará su cargo por un período de tres años o hasta el término de su mandato como magistrado, si éste se
produjere antes. Podrán ser reelegidos una vez.
2. El Vicepresidente primero sustituirá al Presidente cuando éste se halle en la imposibilidad de ejercer sus funciones o haya
sido recusado. El Vicepresidente segundo sustituirá al Presidente cuando éste y el Vicepresidente primero se hallen en la imposibilidad de
ejercer sus funciones o hayan sido recusados.
3. El Presidente, el Vicepresidente primero y el Vicepresidente segundo constituirán la Presidencia, que estará encargada de:
4. En el desempeño de sus funciones enunciadas en el párrafo 3 a), la Presidencia actuará en coordinación con el Fiscal y
recabará su aprobación en todos los asuntos de interés mutuo.
Artículo 39
Las Salas
1. Tan pronto como sea posible después de la elección de los magistrados, la Corte se organizará en las secciones indicadas
en el artículo 34 b). La Sección de Apelaciones se compondrá del Presidente y otros cuatro magistrados, la Sección de Primera Instancia
de no menos de seis magistrados y la Sección de Cuestiones Preliminares de no menos de seis magistrados. Los magistrados serán
asignados a las secciones según la naturaleza de las funciones que corresponderán a cada una y sus respectivas calificaciones y
experiencia, de manera que en cada sección haya una combinación apropiada de especialistas en derecho y procedimiento penales y en
derecho internacional. La Sección de Primera Instancia y la Sección de Cuestiones Preliminares estarán integradas predominantemente
por magistrados que tengan experiencia en procedimiento penal.
2. a) Las funciones judiciales de la Corte serán realizadas en cada sección por las Salas;
ii) Las funciones de la Sala de Primera Instancia serán realizadas por tres magistrados de la Sección de Primera
Instancia;
iii) Las funciones de la Sala de Cuestiones Preliminares serán realizadas por tres magistrados de la Sección de
Cuestiones Preliminares o por un solo magistrado de dicha Sección, de conformidad con el presente Estatuto y las Reglas de
Procedimiento y Prueba;
c) Nada de lo dispuesto en el presente párrafo obstará a que se constituyan simultáneamente más de una Sala de Primera
Instancia o Sala de Cuestiones Preliminares cuando la gestión eficiente del trabajo de la Corte así lo requiera.
3. a) Los magistrados asignados a las Secciones de Primera Instancia y de Cuestiones Preliminares desempeñarán el cargo
en esas Secciones por un período de tres años, y posteriormente hasta llevar a término cualquier causa de la que hayan empezado a
conocer en la sección de que se trate;
b) Los magistrados asignados a la Sección de Apelaciones desempeñarán el cargo en esa Sección durante todo su
mandato.
4. Los magistrados asignados a la Sección de Apelaciones desempeñarán el cargo únicamente en esa Sección. Nada de lo
dispuesto en el presente artículo obstará, sin embargo, a que se asignen temporalmente magistrados de la Sección de Primera Instancia a
la Sección de Cuestiones Preliminares, o a la inversa, si la Presidencia considera que la gestión eficiente del trabajo de la Corte así lo
requiere, pero en ningún caso podrá formar parte de la Sala de Primera Instancia que conozca de una causa un magistrado que haya
participado en la etapa preliminar.
Artículo 40
181
Estatuto De Roma
2. Los magistrados no realizarán actividad alguna que pueda ser incompatible con el ejercicio de sus funciones judiciales o
menoscabar la confianza en su independencia.
3. Los magistrados que tengan que desempeñar sus cargos en régimen de dedicación exclusiva en la sede de la Corte no
podrán desempeñar ninguna otra ocupación de carácter profesional.
4. Las cuestiones relativas a la aplicación de los párrafos 2 y 3 serán dirimidas por mayoría absoluta de los magistrados. El
magistrado al que se refiera una de estas cuestiones no participará en la adopción de la decisión.
Artículo 41
1. La Presidencia podrá, a petición de un magistrado, dispensarlo del ejercicio de alguna de las funciones que le confiere el
presente Estatuto, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
2. a) Un magistrado no participará en ninguna causa en que, por cualquier motivo, pueda razonablemente ponerse en duda
su imparcialidad. Un magistrado será recusado de conformidad con lo dispuesto en el presente párrafo, entre otras razones, si hubiese
intervenido anteriormente, en cualquier calidad, en una causa de la que la Corte estuviere conociendo o en una causa penal conexa
sustanciada a nivel nacional y que guardare relación con la persona objeto de investigación o enjuiciamiento. Un magistrado será también
recusado por los demás motivos que se establezcan en las Reglas de Procedimiento y Prueba;
b) El Fiscal o la persona objeto de investigación o enjuiciamiento podrá pedir la recusación de un magistrado con
arreglo a lo dispuesto en el presente párrafo;
c) Las cuestiones relativas a la recusación de un magistrado serán dirimidas por mayoría absoluta de los magistrados. El
magistrado cuya recusación se pida tendrá derecho a hacer observaciones sobre la cuestión, pero no tomará parte en la decisión.
Artículo 42
La Fiscalía
1. La Fiscalía actuará en forma independiente como órgano separado de la Corte. Estará encargada de recibir remisiones e
información corroborada sobre crímenes de la competencia de la Corte para examinarlas y realizar investigaciones o ejercitar la acción
penal ante la Corte. Los miembros de la Fiscalía no solicitarán ni cumplirán instrucciones de fuentes ajenas a la Corte.
2. La Fiscalía estará dirigida por el Fiscal. El Fiscal tendrá plena autoridad para dirigir y administrar la Fiscalía, con inclusión
del personal, las instalaciones y otros recursos. El Fiscal contará con la ayuda de uno o más fiscales adjuntos, que podrán desempeñar
cualquiera de las funciones que le correspondan de conformidad con el presente Estatuto. El Fiscal y los fiscales adjuntos tendrán que ser
de diferentes nacionalidades y desempeñarán su cargo en régimen de dedicación exclusiva.
3. El Fiscal y los fiscales adjuntos serán personas que gocen de alta consideración moral, que posean un alto nivel de
competencia y tengan extensa experiencia práctica en el ejercicio de la acción penal o la sustanciación de causas penales. Deberán tener
un excelente conocimiento y dominio de al menos uno de los idiomas de trabajo de la Corte.
4. El Fiscal será elegido en votación secreta y por mayoría absoluta de los miembros de la Asamblea de los Estados Partes.
Los fiscales adjuntos serán elegidos en la misma forma de una lista de candidatos presentada por el Fiscal. El Fiscal propondrá tres
candidatos para cada puesto de fiscal adjunto que deba cubrirse. Salvo que en el momento de la elección se fije un período más breve, el
Fiscal y los fiscales adjuntos desempeñarán su cargo por un período de nueve años y no podrán ser reelegidos.
5. El Fiscal y los fiscales adjuntos no realizarán actividad alguna que pueda interferir en el ejercicio de sus funciones o
menoscabar la confianza en su independencia. No podrán desempeñar ninguna otra ocupación de carácter profesional.
6. La Presidencia podrá, a petición del Fiscal o de un fiscal adjunto, dispensarlos de intervenir en una causa determinada.
7. El Fiscal y los fiscales adjuntos no participarán en ningún asunto en que, por cualquier motivo, pueda razonablemente
ponerse en duda su imparcialidad. Serán recusados de conformidad con lo dispuesto en el presente párrafo, entre otras razones, si
hubiesen intervenido anteriormente, en cualquier calidad, en una causa de que la Corte estuviere conociendo o en una causa penal conexa
sustanciada a nivel nacional y que guardare relación con la persona objeto de investigación o enjuiciamiento.
8. Las cuestiones relativas a la recusación del Fiscal o de un fiscal adjunto serán dirimidas por la Sala de Apelaciones:
182
Estatuto De Roma
a) La persona objeto de investigación o enjuiciamiento podrá en cualquier momento pedir la recusación del Fiscal o de
un fiscal adjunto por los motivos establecidos en el presente artículo;
b) El Fiscal o el fiscal adjunto, según proceda, tendrán derecho a hacer observaciones sobre la cuestión.
9. El Fiscal nombrará asesores jurídicos especialistas en determinados temas como, por ejemplo, violencia sexual, violencia
por razones de género y violencia contra los niños.
Artículo 43
La Secretaría
1. La Secretaría, sin perjuicio de las funciones y atribuciones del Fiscal de conformidad con lo dispuesto en el artículo 42,
estará encargada de los aspectos no judiciales de la administración de la Corte y de prestarle servicios.
2. La Secretaría será dirigida por el Secretario, que será el principal funcionario administrativo de la Corte. El Secretario
ejercerá sus funciones bajo la autoridad del Presidente de la Corte.
3. El Secretario y el Secretario Adjunto deberán ser personas que gocen de consideración moral y tener un alto nivel de
competencia y un excelente conocimiento y dominio de al menos uno de los idiomas de trabajo de la Corte.
4. Los magistrados elegirán al Secretario en votación secreta por mayoría absoluta y teniendo en cuenta las recomendaciones
de la Asamblea de los Estados Partes. De ser necesario elegirán, por recomendación del Secretario y con arreglo al mismo procedimiento,
un Secretario Adjunto.
5. El Secretario será elegido por un período de cinco años en régimen de dedicación exclusiva y podrá ser reelegido una sola
vez. El Secretario Adjunto será elegido por un período de cinco años, o por uno más breve, si así lo deciden los magistrados por mayoría
absoluta, en el entendimiento de que prestará sus servicios según sea necesario.
6. El Secretario establecerá una Dependencia de Víctimas y Testigos dentro de la Secretaría. Esta Dependencia, en consulta
con la Fiscalía, adoptará medidas de protección y dispositivos de seguridad y prestará asesoramiento y otro tipo de asistencia a testigos y
víctimas que comparezcan ante la Corte, y a otras personas que estén en peligro en razón del testimonio prestado. La Dependencia
contará con personal especializado para atender a las víctimas de traumas, incluidos los relacionados con delitos de violencia sexual.
Artículo 44
El personal
1. El Fiscal y el Secretario nombrarán los funcionarios calificados que sean necesarios en sus respectivas oficinas. En el caso
del Fiscal, ello incluirá el nombramiento de investigadores.
2. En el nombramiento de los funcionarios, el Fiscal y el Secretario velarán por el más alto grado de eficiencia, competencia
e integridad y tendrán en cuenta, mutatis mutandis, los criterios establecidos en el párrafo 8 del artículo 36.
3. El Secretario, con la anuencia de la Presidencia y del Fiscal, propondrá un reglamento del personal que establecerá las
condiciones en que el personal de la Corte será designado, remunerado o separado del servicio. El Reglamento del Personal estará sujeto
a la aprobación de la Asamblea de los Estados Partes.
4. La Corte podrá, en circunstancias excepcionales, recurrir a la pericia de personal proporcionado gratuitamente por Estados
Partes, organizaciones intergubernamentales u organizaciones no gubernamentales para que colabore en la labor de cualquiera de los
órganos de la Corte. El Fiscal podrá aceptar ofertas de esa índole en nombre de la Fiscalía. El personal proporcionado gratuitamente será
empleado de conformidad con directrices que ha de establecer la Asamblea de los Estados Partes.
Artículo 45
Promesa solemne
Antes de asumir las obligaciones del cargo de conformidad con el presente Estatuto, los magistrados, el fiscal, los fiscales
adjuntos, el secretario y el secretario adjunto declararán solemnemente y en sesión pública que ejercerán sus atribuciones con toda
imparcialidad y conciencia.
Artículo 46
183
Estatuto De Roma
1. Un magistrado, el fiscal, un fiscal adjunto, el secretario o el secretario adjunto será separado del cargo si se adopta una
decisión a tal efecto de conformidad con lo dispuesto en el párrafo 2 cuando se determine que:
a) Ha incurrido en falta grave o en incumplimiento grave de las funciones que le confiere el presente Estatuto y según lo
establecido en las Reglas de procedimiento y prueba; o
2. La decisión de separar del cargo a un magistrado, el fiscal o un fiscal adjunto de conformidad con el párrafo 1 será
adoptada por la Asamblea de los Estados Partes en votación secreta:
a) En el caso de un magistrado, por mayoría de dos tercios de los Estados Partes y previa recomendación aprobada por
mayoría de dos tercios de los demás magistrados;
3. La decisión de separar del cargo al secretario o a un secretario adjunto será adoptada por mayoría absoluta de los
magistrados.
4. El magistrado, fiscal, fiscal adjunto, secretario o secretario adjunto cuya conducta o cuya idoneidad para el ejercicio de las
funciones del cargo de conformidad con el presente Estatuto haya sido impugnada en virtud del presente artículo podrá presentar y
obtener pruebas y presentar escritos de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba; sin embargo, no podrá participar por
ningún otro concepto en el examen de la cuestión.
Artículo 47
Medidas disciplinarias
El magistrado, fiscal, fiscal adjunto, secretario o secretario adjunto que haya incurrido en una falta menos grave que la
establecida en el párrafo 1 del artículo 46 será objeto de medidas disciplinarias de conformidad con las Reglas de Procedimiento y
Prueba.
Artículo 48
Privilegios e inmunidades
1. La Corte gozará en el territorio de cada Estado Parte de los privilegios e inmunidades que sean necesarios para el
cumplimiento de sus funciones.
2. Los magistrados, el fiscal, los fiscales adjuntos y el Secretario gozarán, cuando actúen en el desempeño de sus funciones o
en relación con ellas, de los mismos privilegios e inmunidades reconocidos a los jefes de las misiones diplomáticas y, una vez expirado
su mandato, seguirán gozando de absoluta inmunidad judicial por las declaraciones hechas oralmente o por escrito y los actos realizados
en el desempeño de sus funciones oficiales.
3. El Secretario Adjunto, el personal de la Fiscalía y el personal de la Secretaría gozarán de los privilegios e inmunidades y
de las facilidades necesarias para el cumplimiento de sus funciones, de conformidad con el acuerdo sobre los privilegios e inmunidades
de la Corte.
4. Los abogados, peritos, testigos u otras personas cuya presencia se requiera en la sede de la Corte serán objeto del
tratamiento que sea necesario para el funcionamiento adecuado de la Corte, de conformidad con el acuerdo sobre los privilegios e
inmunidades de la Corte.
184
Estatuto De Roma
Artículo 49
Los magistrados, el fiscal, los fiscales adjuntos, el secretario y el secretario adjunto percibirán los sueldos, estipendios y dietas
que decida la Asamblea de los Estados Partes. Esos sueldos y estipendios no serán reducidos en el curso de su mandato.
Artículo 50
1. Los idiomas oficiales de la Corte serán el árabe, el chino, el español, el francés, el inglés y el ruso. Las sentencias de la
Corte, así como las otras decisiones que resuelvan cuestiones fundamentales de que conozca la Corte, serán publicadas en los idiomas
oficiales. La Presidencia, de conformidad con los criterios establecidos en las Reglas de Procedimiento y Prueba, determinará cuáles son
las decisiones que resuelven cuestiones fundamentales a los efectos del presente párrafo.
2. Los idiomas de trabajo de la Corte serán el francés y el inglés. En las Reglas de Procedimiento y Prueba se determinará en
qué casos podrá utilizarse como idioma de trabajo otros idiomas oficiales.
3. La Corte autorizará a cualquiera de las partes o cualquiera de los Estados a que se haya permitido intervenir en un
procedimiento, previa solicitud de ellos, a utilizar un idioma distinto del francés o el inglés, siempre que considere que esta autorización
está adecuadamente justificada.
Artículo 51
1. Las Reglas de Procedimiento y Prueba entrarán en vigor tras su aprobación por mayoría de dos tercios de los miembros de
la Asamblea de los Estados Partes.
c) El Fiscal.
Las enmiendas entrarán en vigor tras su aprobación en la Asamblea de los Estados Partes por mayoría de dos tercios.
3. Una vez aprobadas las Reglas de Procedimiento y Prueba, en casos urgentes y cuando éstas no resuelvan una situación
concreta suscitada en la Corte, los magistrados podrán, por una mayoría de dos tercios, establecer reglas provisionales que se aplicarán
hasta que la Asamblea de los Estados Partes las apruebe, enmiende o rechace en su siguiente período ordinario o extraordinario de
sesiones.
4. Las Reglas de Procedimiento y Prueba, las enmiendas a ellas y las reglas provisionales deberán estar en consonancia con
el presente Estatuto. Las enmiendas a las Reglas de Procedimiento y Prueba, así como las reglas provisionales, no se aplicarán
retroactivamente en detrimento de la persona que sea objeto de la investigación o el enjuiciamiento o que haya sido condenada.
5. En caso de conflicto entre las disposiciones del Estatuto y las de las Reglas de Procedimiento y Prueba, prevalecerá el
Estatuto.
Artículo 52
Reglamento de la Corte
185
Estatuto De Roma
1. Los magistrados, de conformidad con el presente Estatuto y las Reglas de Procedimiento y Prueba, aprobarán por mayoría
absoluta el Reglamento de la Corte que sea necesario para su funcionamiento ordinario.
3. El Reglamento y sus enmiendas entrarán en vigor al momento de su aprobación, a menos que los magistrados decidan otra
cosa. Inmediatamente después de su aprobación, serán distribuidos a los Estados Partes para recabar sus observaciones. Se mantendrán en
vigor si en un plazo de seis meses no se han recibido objeciones de una mayoría de los Estados Partes.
Artículo 53
1. El Fiscal, después de evaluar la información de que disponga, iniciará una investigación a menos que determine que no
existe fundamento razonable para proceder a ella con arreglo al presente Estatuto. Al decidir si ha de iniciar una investigación, el Fiscal
tendrá en cuenta si:
a) La información de que dispone constituye fundamento razonable para creer que se ha cometido o se está cometiendo
un crimen de la competencia de la Corte;
c) Existen razones sustanciales para creer que, aun teniendo en cuenta la gravedad del crimen y los intereses de las
víctimas, una investigación no redundaría en interés de la justicia.
El Fiscal, si determinare que no hay fundamento razonable para proceder a la investigación y la determinación se basare
únicamente en el apartado c), lo comunicará a la Sala de Cuestiones Preliminares.
2. Si, tras la investigación, el Fiscal llega a la conclusión de que no hay fundamento suficiente para el enjuiciamiento, ya que:
a) No existe una base suficiente de hecho o de derecho para pedir una orden de detención o de comparecencia de
conformidad con el artículo 58;
c) El enjuiciamiento no redundaría en interés de la justicia, teniendo en cuenta todas las circunstancias, entre ellas la
gravedad del crimen, los intereses de las víctimas y la edad o enfermedad del presunto autor y su participación en el presunto crimen;
notificará su conclusión motivada a la Sala de Cuestiones Preliminares y al Estado que haya remitido el asunto de conformidad con el
artículo 14 o al Consejo de Seguridad si se trata de un caso previsto en el párrafo b) del artículo 13.
3. a) A petición del Estado que haya remitido el asunto con arreglo al artículo 14 o del Consejo de Seguridad de
conformidad con el párrafo b) del artículo 13, la Sala de Cuestiones Preliminares podrá examinar la decisión del Fiscal de no proceder a
la investigación de conformidad con el párrafo 1 o el párrafo 2 y pedir al Fiscal que reconsidere esa decisión;
b) Además, la Sala de Cuestiones Preliminares podrá, de oficio, revisar una decisión del Fiscal de no proceder a la
investigación si dicha decisión se basare únicamente en el párrafo 1 c) o el párrafo 2 c). En ese caso, la decisión del Fiscal únicamente
surtirá efecto si es confirmada por la Sala de Cuestiones Preliminares.
4. El Fiscal podrá reconsiderar en cualquier momento su decisión de iniciar una investigación o enjuiciamiento sobre la base
de nuevos hechos o nuevas informaciones.
Artículo 54
1. El Fiscal:
186
Estatuto De Roma
a) A fin de establecer la veracidad de los hechos, ampliará la investigación a todos los hechos y las pruebas que sean
pertinentes para determinar si hay responsabilidad penal de conformidad con el presente Estatuto y, a esos efectos, investigará tanto las
circunstancias incriminantes como las eximentes;
b) Adoptará medidas adecuadas para asegurar la eficacia de la investigación y el enjuiciamiento de los crímenes de la
competencia de la Corte. A esos efectos, respetará los intereses y las circunstancias personales de víctimas y testigos, entre otros la edad,
el género, definido en el párrafo 3 del artículo 7, y la salud, y tendrá en cuenta la naturaleza de los crímenes, en particular los de violencia
sexual, violencia por razones de género y violencia contra los niños; y
c) Respetará plenamente los derechos que confiere a las personas el presente Estatuto.
b) Según lo autorice la Sala de Cuestiones Preliminares de conformidad con el párrafo 3 d) del artículo 57.
3. El Fiscal podrá:
b) Hacer comparecer e interrogar a las personas objeto de investigación, las víctimas y los testigos;
d) Concertar las disposiciones o los acuerdos compatibles con el presente Estatuto que sean necesarios para facilitar la
cooperación de un Estado, una organización intergubernamental o una persona;
e) Convenir en que no divulgará en ninguna etapa del procedimiento los documentos o la información que obtenga a
condición de preservar su carácter confidencial y únicamente a los efectos de obtener nuevas pruebas, salvo con el acuerdo de quien haya
facilitado la información; y
f) Adoptar o pedir que se adopten las medidas necesarias para asegurar el carácter confidencial de la información, la
protección de una persona o la preservación de las pruebas.
Artículo 55
b) Nadie será sometido a forma alguna de coacción, intimidación o amenaza, a torturas ni a otros tratos o castigos
crueles, inhumanos o degradantes;
c) Quien haya de ser interrogado en un idioma que no sea el que comprende y habla perfectamente contará, sin cargo
alguno, con los servicios de un intérprete competente y las traducciones que sean necesarias a los efectos de cumplir el requisito de
equidad; y
d) Nadie será sometido a arresto o detención arbitrarios ni será privado de su libertad salvo por los motivos previstos en
el presente Estatuto y de conformidad con los procedimientos establecidos en él.
2. Cuando haya motivos para creer que una persona ha cometido un crimen de la competencia de la Corte y esa persona haya
de ser interrogada por el Fiscal o por las autoridades nacionales, en cumplimiento de una solicitud hecha de conformidad con lo dispuesto
en la Parte IX, tendrá además los derechos siguientes, de los que será informada antes del interrogatorio:
a) A ser informada de que existen motivos para creer que ha cometido un crimen de la competencia de la Corte;
b) A guardar silencio, sin que ello pueda tenerse en cuenta a los efectos de determinar su culpabilidad o inocencia;
c) A ser asistida por un abogado defensor de su elección o, si no lo tuviere, a que se le asigne un defensor de oficio,
siempre que fuere necesario en interés de la justicia y, en cualquier caso, sin cargo si careciere de medios suficientes; y
187
Estatuto De Roma
d) A ser interrogada en presencia de su abogado, a menos que haya renunciado voluntariamente a su derecho a
asistencia letrada.
Artículo 56
1. a) El Fiscal, cuando considere que se presenta una oportunidad única de proceder a una investigación, que tal vez no se
repita a los fines de un juicio, de recibir el testimonio o la declaración de un testigo o de examinar, reunir o verificar pruebas, lo
comunicará a la Sala de Cuestiones Preliminares;
b) La Sala, a petición del Fiscal, podrá adoptar las medidas que sean necesarias para velar por la eficiencia e integridad
de las actuaciones y, en particular, para proteger los derechos de la defensa;
c) A menos que la Sala de Cuestiones Preliminares ordene otra cosa, el Fiscal proporcionará la información
correspondiente a la persona que ha sido detenida o que ha comparecido en virtud de una citación en relación con la investigación a que
se refiere el apartado a), a fin de que pueda ser oída.
2. Las medidas a que se hace referencia en el apartado b) del párrafo 1 podrán consistir en:
a) Formular recomendaciones o dictar ordenanzas respecto del procedimiento que habrá de seguirse;
d) Autorizar al abogado defensor del detenido o de quien haya comparecido ante la Corte en virtud de una citación a que
participe o, en caso de que aún no se hayan producido esa detención o comparecencia o no se haya designado abogado, a nombrar otro
para que comparezca y represente los intereses de la defensa;
e) Encomendar a uno de sus miembros o, de ser necesario, a otro magistrado de la Sección de Cuestiones Preliminares o
la Sección de Primera Instancia que formule recomendaciones o dicte ordenanzas respecto de la reunión y preservación de las pruebas o
del interrogatorio de personas;
f) Adoptar todas las medidas que sean necesarias para reunir o preservar las pruebas.
3. a) La Sala de Cuestiones Preliminares, cuando considere que el Fiscal no ha solicitado medidas previstas en el presente
artículo que, a su juicio, sean esenciales para la defensa en juicio, le consultará si se justificaba no haberlas solicitado. La Sala podrá
adoptar de oficio esas medidas si, tras la consulta, llegare a la conclusión de que no había justificación para no solicitarlas.
b) El Fiscal podrá apelar de la decisión de la Sala de Cuestiones Preliminares de actuar de oficio con arreglo al presente
párrafo. La apelación se sustanciará en un procedimiento sumario.
4. La admisibilidad o la forma en que quedará constancia de las pruebas reunidas o preservadas para el juicio de conformidad
con el presente artículo se regirá en el juicio por lo dispuesto en el artículo 69 y la Sala de Primera Instancia decidirá cómo ha de
ponderar esas pruebas.
Artículo 57
1. A menos que el presente Estatuto disponga otra cosa, la Sala de Cuestiones Preliminares ejercerá sus funciones de
conformidad con las disposiciones del presente artículo.
2. a) Las providencias u órdenes que la Sala de Cuestiones Preliminares dicte en virtud de los artículos 15, 18 ó 19, el
párrafo 2 del artículo 54, el párrafo 7 del artículo 61 o el artículo 72 deberán ser aprobadas por la mayoría de los magistrados que la
componen;
b) En todos los demás casos, un magistrado de la Sala de Cuestiones Preliminares podrá ejercer las funciones
establecidas en el presente Estatuto, a menos que las Reglas de Procedimiento y Prueba dispongan otra cosa o así lo acuerde, por
188
Estatuto De Roma
3. Además de otras funciones que le confiere el presente Estatuto, la Sala de Cuestiones Preliminares podrá:
a) A petición del Fiscal, dictar las providencias y órdenes que sean necesarias a los fines de una investigación;
b) A petición de quien haya sido detenido o haya comparecido en virtud de una orden de comparecencia expedida con
arreglo al artículo 58, dictar esas órdenes, incluidas medidas tales como las indicadas en el artículo 56 o solicitar con arreglo a la Parte IX
la cooperación que sea necesaria para ayudarle a preparar su defensa;
c) Cuando sea necesario, asegurar la protección y el respeto de la intimidad de víctimas y testigos, la preservación de
pruebas, la protección de personas detenidas o que hayan comparecido en virtud de una orden de comparencia, así como la protección de
información que afecte a la seguridad nacional;
d) Autorizar al Fiscal a adoptar determinadas medidas de investigación en el territorio de un Estado Parte sin haber
obtenido la cooperación de éste con arreglo a la Parte IX en el caso de que la Sala haya determinado, de ser posible teniendo en cuenta las
opiniones del Estado de que se trate, que dicho Estado manifiestamente no está en condiciones de cumplir una solicitud de cooperación
debido a que no existe autoridad u órgano alguno de su sistema judicial competente para cumplir una solicitud de cooperación con arreglo
a la Parte IX.
e) Cuando se haya dictado una orden de detención o de comparecencia con arreglo al artículo 58, y habida cuenta del
valor de las pruebas y de los derechos de las partes de que se trate, de conformidad con lo dispuesto en el presente Estatuto y las Reglas
de Procedimiento y Prueba, recabar la cooperación de los Estados con arreglo al párrafo 1 k) del artículo 93 para adoptar medidas
cautelares a los efectos de un decomiso que, en particular, beneficie en última instancia a las víctimas.
Artículo 58
1. En cualquier momento después de iniciada la investigación, la Sala de Cuestiones Preliminares dictará, a solicitud del
Fiscal, una orden de detención contra una persona si, tras examinar la solicitud y las pruebas y otra información presentadas por el Fiscal,
estuviere convencida de que:
a) Hay motivo razonable para creer que ha cometido un crimen de la competencia de la Corte; y
ii) Asegurar que la persona no obstruya ni ponga en peligro la investigación ni las actuaciones de la Corte; o
iii) En su caso, impedir que la persona siga cometiendo ese crimen o un crimen conexo que sea de la competencia
de la Corte y tenga su origen en las mismas circunstancias.
b) Una referencia expresa al crimen de la competencia de la Corte que presuntamente haya cometido;
c) Una descripción concisa de los hechos que presuntamente constituyan esos crímenes;
d) Un resumen de las pruebas y cualquier otra información que constituya motivo razonable para creer que la persona
cometió esos crímenes; y
b) Una referencia expresa al crimen de la competencia de la Corte por el que se pide su detención; y
189
Estatuto De Roma
c) Una descripción concisa de los hechos que presuntamente constituyan esos crímenes.
5. La Corte, sobre la base de la orden de detención, podrá solicitar la detención provisional o la detención y entrega de la
persona de conformidad con la Parte IX del presente Estatuto.
6. El Fiscal podrá pedir a la Sala de Cuestiones Preliminares que enmiende la orden de detención para modificar la referencia
al crimen indicado en ésta o agregar otros. La Sala de Cuestiones Preliminares enmendará la orden si estuviere convencida de que hay
motivo razonable para creer que la persona cometió los crímenes en la forma que se indica en esa modificación o adición.
7. El Fiscal podrá pedir a la Sala de Cuestiones Preliminares que, en lugar de una orden de detención, dicte una orden de
comparecencia. La Sala, de estar convencida de que hay motivo razonable para creer que la persona ha cometido el crimen que se le
imputa y que bastará con una orden de comparecencia para asegurar que comparezca efectivamente, dictará, con o sin las condiciones
limitativas de la libertad (distintas de la detención) que prevea el derecho interno, una orden para que la persona comparezca. La orden de
comparecencia consignará:
b) La fecha de la comparecencia;
c) Una referencia expresa al crimen de la competencia de la Corte que presuntamente haya cometido; y
d) Una descripción concisa de los hechos que presuntamente constituyan esos crímenes.
Artículo 59
1. El Estado Parte que haya recibido una solicitud de detención provisional o de detención y entrega tomará inmediatamente
las medidas necesarias para la detención de conformidad con su derecho interno y con lo dispuesto en la Parte IX del presente Estatuto.
2. El detenido será llevado sin demora ante la autoridad judicial competente del Estado de detención, que determinará si, de
conformidad con el derecho de ese Estado:
a) La orden le es aplicable;
3. El detenido tendrá derecho a solicitar de la autoridad competente del Estado de detención la libertad provisional antes de
su entrega.
4. Al decidir la solicitud, la autoridad competente del Estado de detención examinará si, dada la gravedad de los presuntos
crímenes, hay circunstancias urgentes y excepcionales que justifiquen la libertad provisional y si existen las salvaguardias necesarias para
que el Estado de detención pueda cumplir su obligación de entregar la persona a la Corte. Esa autoridad no podrá examinar si la orden de
detención fue dictada conforme a derecho con arreglo a los apartados a) y b) del párrafo 1 del artículo 58.
5. La solicitud de libertad provisional será notificada a la Sala de Cuestiones Preliminares, que hará recomendaciones a la
autoridad competente del Estado de detención. Antes de adoptar su decisión, la autoridad competente del Estado de detención tendrá
plenamente en cuenta esas recomendaciones, incluidas las relativas a medidas para impedir la evasión de la persona.
6. De concederse la libertad provisional, la Sala de Cuestiones Preliminares podrá solicitar informes periódicos al respecto.
7. Una vez que el Estado de detención haya ordenado la entrega, el detenido será puesto a disposición de la Corte tan pronto
como sea posible.
Artículo 60
190
Estatuto De Roma
1. Una vez que el imputado haya sido entregado a la Corte o haya comparecido voluntariamente o en cumplimiento de una
orden de comparecencia, la Sala de Cuestiones Preliminares se asegurará de que ha sido informado de los crímenes que le son imputados
y de los derechos que le reconoce el presente Estatuto, incluido el de pedir la libertad provisional.
2. Quien sea objeto de una orden de detención podrá pedir la libertad provisional. Si la Sala de Cuestiones Preliminares está
convencida de que se dan las condiciones enunciadas en el párrafo 1 del artículo 58, se mantendrá la detención. En caso contrario, la Sala
de Cuestiones Preliminares pondrá en libertad al detenido, con o sin condiciones.
3. La Sala de Cuestiones Preliminares revisará periódicamente su decisión en cuanto a la puesta en libertad o la detención, y
podrá hacerlo en cualquier momento en que lo solicite el Fiscal o el detenido. Sobre la base de la revisión, la Sala podrá modificar su
decisión en cuanto a la detención, la puesta en libertad o las condiciones de ésta, si está convencida de que es necesario en razón de un
cambio en las circunstancias.
4. La Sala de Cuestiones Preliminares se asegurará de que la detención en espera de juicio no se prolongue excesivamente a
causa de una demora inexcusable del Fiscal. Si se produjere dicha demora, la Corte considerará la posibilidad de poner en libertad al
detenido, con o sin condiciones.
5. De ser necesario, la Sala de Cuestiones Preliminares podrá dictar una orden de detención para hacer comparecer a una
persona que haya sido puesta en libertad.
Artículo 61
1. Con sujeción a lo dispuesto en el párrafo 2 y dentro de un plazo razonable tras la entrega de la persona a la Corte o su
comparecencia voluntaria ante ésta, la Sala de Cuestiones Preliminares celebrará una audiencia para confirmar los cargos sobre la base de
los cuales el Fiscal tiene la intención de pedir el procesamiento. La audiencia se celebrará en presencia del Fiscal y del imputado, así
como de su defensor.
2. La Sala de Cuestiones Preliminares, a solicitud del Fiscal o de oficio, podrá celebrar una audiencia en ausencia del
acusado para confirmar los cargos en los cuales el Fiscal se basa para pedir el enjuiciamiento cuando el imputado:
b) Haya huido o no sea posible encontrarlo y se hayan tomado todas las medidas razonables para asegurar su
comparecencia ante la Corte e informarle de los cargos y de que se celebrará una audiencia para confirmarlos,
En este caso, el imputado estará representado por un defensor cuando la Sala de Cuestiones Preliminares resuelva que ello
redunda en interés de la justicia.
a) Se proporcionará al imputado un ejemplar del documento en que se formulen los cargos por los cuales el Fiscal se
proponga enjuiciarlo; y
La Sala de Cuestiones Preliminares podrá dictar providencias respecto de la revelación de información a los efectos de la
audiencia.
4. Antes de la audiencia, el Fiscal podrá proseguir la investigación y modificar o retirar los cargos. Se dará al imputado aviso
con antelación razonable a la audiencia de cualquier modificación de los cargos o de su retiro. En caso de retirarse cargos, el Fiscal
comunicará las razones a la Sala de Cuestiones Preliminares.
5. En la audiencia, el Fiscal presentará respecto de cada cargo pruebas suficientes de que hay motivos fundados para creer
que el imputado cometió el crimen que se le imputa. El Fiscal podrá presentar pruebas documentales o un resumen de las pruebas y no
será necesario que llame a los testigos que han de declarar en el juicio.
c) Presentar pruebas.
191
Estatuto De Roma
7. La Sala de Cuestiones Preliminares determinará, sobre la base de la audiencia, si existen pruebas suficientes de que hay
motivos fundados para creer que el imputado cometió cada crimen que se le imputa. Según cual sea esa determinación, la Sala de
Cuestiones Preliminares:
a) Confirmará los cargos respecto de los cuales haya determinado que existen pruebas suficientes y asignará al acusado
a una Sala de Primera Instancia para su enjuiciamiento por los cargos confirmados;
b) No confirmará los cargos respecto de los cuales haya determinado que las pruebas son insuficientes;
i) Presentar nuevas pruebas o llevar a cabo nuevas investigaciones en relación con un determinado cargo; o
ii) Modificar un cargo en razón de que las pruebas presentadas parecen indicar la comisión de un crimen distinto
que sea de la competencia de la Corte.
8. La no confirmación de un cargo por parte de la Sala de Cuestiones Preliminares no obstará para que el Fiscal la pida
nuevamente a condición de que presente pruebas adicionales.
9. Una vez confirmados los cargos y antes de comenzar el juicio, el Fiscal, con autorización de la Sala de Cuestiones
Preliminares y previa notificación al acusado, podrá modificar los cargos. El Fiscal, si se propusiera presentar nuevos cargos o sustituirlos
por otros más graves, deberá pedir una audiencia de conformidad con el presente artículo para confirmarlos. Una vez comenzado el
juicio, el Fiscal, con autorización de la Sala de Primera Instancia, podrá retirar los cargos.
10. Toda orden ya dictada dejará de tener efecto con respecto a los cargos que no hayan sido confirmados por la Sala de
Cuestiones Preliminares o hayan sido retirados por el Fiscal.
11. Una vez confirmados los cargos de conformidad con el presente artículo, la Presidencia constituirá una Sala de Primera
Instancia que, con sujeción a lo dispuesto en el párrafo 9 del presente artículo y en el párrafo 4 del artículo 64, se encargará de la
siguiente fase del procedimiento y podrá ejercer las funciones de la Sala de Cuestiones Preliminares que sean pertinentes y apropiadas en
ese procedimiento.
Artículo 62
Artículo 63
2. Si el acusado, estando presente en la Corte, perturbare continuamente el juicio, la Sala de Primera Instancia podrá disponer
que salga de ella y observe el proceso y dé instrucciones a su defensor desde fuera, utilizando, en caso necesario, tecnologías de
comunicación. Esas medidas se adoptarán únicamente en circunstancias excepcionales, después de que se haya demostrado que no hay
otras posibilidades razonables y adecuadas, y únicamente durante el tiempo que sea estrictamente necesario.
Artículo 64
1. Las funciones y atribuciones de la Sala de Primera Instancia enunciadas en el presente artículo deberán ejercerse de
conformidad con el presente Estatuto y las Reglas de Procedimiento y Prueba.
192
Estatuto De Roma
2. La Sala de Primera Instancia velará por que el juicio sea justo y expedito y se sustancie con pleno respeto de los derechos
del acusado y teniendo debidamente en cuenta la protección de las víctimas y de los testigos.
3. La Sala de Primera Instancia a la que se asigne una causa de conformidad con el presente Estatuto:
a) Celebrará consultas con las partes y adoptará los procedimientos que sean necesarios para que el juicio se sustancie
de manera justa y expedita;
c) Con sujeción a cualesquiera otras disposiciones pertinentes del presente Estatuto, dispondrá la divulgación de los
documentos o de la información que no se hayan divulgado anteriormente, con suficiente antelación al comienzo del juicio como para
permitir su preparación adecuada.
4. La Sala de Primera Instancia podrá, en caso de ser necesario para su funcionamiento eficaz e imparcial, remitir cuestiones
preliminares a la Sala de Cuestiones Preliminares o, de ser necesario, a otro magistrado de la Sección de Cuestiones Preliminares que esté
disponible.
5. Al notificar a las partes, la Sala de Primera Instancia podrá, según proceda, indicar que se deberán acumular o separar los
cargos cuando haya más de un acusado.
6. Al desempeñar sus funciones antes del juicio o en el curso de éste, la Sala de Primera Instancia podrá, de ser necesario:
a) Ejercer cualquiera de las funciones de la Sala de Cuestiones Preliminares indicadas en el párrafo 11 del artículo 61;
d) Ordenar la presentación de pruebas adicionales a las ya reunidas con antelación al juicio o a las presentadas durante
el juicio por las partes;
e) Adoptar medidas para la protección del acusado, de los testigos y de las víctimas; y
7. El juicio será público. Sin embargo, la Sala de Primera Instancia podrá decidir que determinadas diligencias se efectúen a
puerta cerrada, de conformidad con el artículo 68, debido a circunstancias especiales o para proteger la información de carácter
confidencial o restringida que haya de presentarse en la práctica de la prueba.
8. a) Al comenzar el juicio, la Sala de Primera Instancia dará lectura ante el acusado de los cargos confirmados
anteriormente por la Sala de Cuestiones Preliminares. La Sala de Primera Instancia se cerciorará de que el acusado comprende la
naturaleza de los cargos. Dará al acusado la oportunidad de declararse culpable de conformidad con el artículo 65 o de declararse
inocente;
b) Durante el juicio, el magistrado presidente podrá impartir directivas para la sustanciación del juicio, en particular
para que éste sea justo e imparcial. Con sujeción a las directivas que imparta el magistrado presidente, las partes podrán presentar pruebas
de conformidad con las disposiciones del presente Estatuto.
9. La Sala de Primera Instancia podrá, a petición de una de las partes o de oficio, entre otras cosas:
b) Tomar todas las medidas necesarias para mantener el orden en las audiencias.
10. La Sala de Primera Instancia hará que el Secretario lleve y conserve un expediente completo del juicio, en el que se
consignen fielmente las diligencias practicadas.
Artículo 65
193
Estatuto De Roma
1. Si el acusado se declara culpable en las condiciones indicadas en el párrafo 8 a) del artículo 64, la Sala de Primera
Instancia determinará:
b) Si esa declaración ha sido formulada voluntariamente tras suficiente consulta con el abogado defensor; y
ii) Las piezas complementarias de los cargos presentados por el Fiscal y aceptados por el acusado; y
iii) Otras pruebas, como declaraciones de testigos, presentadas por el Fiscal o el acusado.
2. La Sala de Primera Instancia, de constatar que se cumplen las condiciones a que se hace referencia en el párrafo 1,
considerará que la declaración de culpabilidad, junto con las pruebas adicionales presentadas, constituye un reconocimiento de todos los
hechos esenciales que configuran el crimen del cual se ha declarado culpable el acusado y podrá condenarlo por ese crimen.
3. La Sala de Primera Instancia, de constatar que no se cumplen las condiciones a que se hace referencia en el párrafo 1,
tendrá la declaración de culpabilidad por no formulada y, en ese caso, ordenará que prosiga el juicio con arreglo al procedimiento
ordinario estipulado en el presente Estatuto y podrá remitir la causa a otra Sala de Primera Instancia.
4. La Sala de Primera Instancia, cuando considere necesaria en interés de la justicia y en particular en interés de las víctimas,
una presentación más completa de los hechos de la causa, podrá:
b) Ordenar que prosiga el juicio con arreglo al procedimiento ordinario estipulado en el presente Estatuto, en cuyo caso
tendrá la declaración de culpabilidad por no formulada y podrá remitir la causa a otra Sala de Primera Instancia.
5. Las consultas que celebren el Fiscal y la defensa respecto de la modificación de los cargos, la declaración de culpabilidad
o la pena que habrá de imponerse no serán obligatorias para la Corte.
Artículo 66
Presunción de inocencia
1. Se presumirá que toda persona es inocente mientras no se pruebe su culpabilidad ante la Corte de conformidad con el
derecho aplicable.
3. Para dictar sentencia condenatoria, la Corte deberá estar convencida de la culpabilidad del acusado más allá de toda duda
razonable.
Artículo 67
1. En la determinación de cualquier cargo, el acusado tendrá derecho a ser oído públicamente, habida cuenta de las
disposiciones del presente Estatuto, y a una audiencia justa e imparcial, así como a las siguientes garantías mínimas en pie de plena
igualdad:
a) A ser informado sin demora y en forma detallada, en un idioma que comprenda y hable perfectamente, de la
naturaleza, la causa y el contenido de los cargos que se le imputan;
b) A disponer del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su defensa y a comunicarse libre y
confidencialmente con un defensor de su elección;
194
Estatuto De Roma
d) Con sujeción a lo dispuesto en el párrafo 2 del artículo 63, el acusado tendrá derecho a hallarse presente en el proceso
y a defenderse personalmente o ser asistido por un defensor de su elección; a ser informado, si no tuviera defensor, del derecho que le
asiste a tenerlo y, siempre que el interés de la justicia lo exija, a que se le nombre defensor de oficio, gratuitamente si careciere de medios
suficientes para pagarlo;
e) A interrogar o hacer interrogar a los testigos de cargo y a obtener la comparecencia de los testigos de descargo y que
éstos sean interrogados en las mismas condiciones que los testigos de cargo. El acusado tendrá derecho también a oponer excepciones y a
presentar cualquier otra prueba admisible de conformidad con el presente Estatuto;
f) A ser asistido gratuitamente por un intérprete competente y a obtener las traducciones necesarias para satisfacer los
requisitos de equidad, si en las actuaciones ante la Corte o en los documentos presentados a la Corte se emplea un idioma que no
comprende y no habla;
g) A no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable y a guardar silencio, sin que ello pueda tenerse
en cuenta a los efectos de determinar su culpabilidad o inocencia;
Artículo 68
1. La Corte adoptará las medidas adecuadas para proteger la seguridad, el bienestar físico y psicológico, la dignidad y la vida
privada de las víctimas y los testigos. Con este fin, la Corte tendrá en cuenta todos los factores pertinentes, incluidos la edad, el género,
definido en el párrafo 3 del artículo 7, y la salud, así como la índole del crimen, en particular cuando éste entrañe violencia sexual o por
razones de género, o violencia contra niños. En especial, el Fiscal adoptará estas medidas en el curso de la investigación y el
enjuiciamiento de tales crímenes. Estas medidas no podrán redundar en perjuicio de los derechos del acusado o de un juicio justo e
imparcial ni serán incompatibles con éstos.
2. Como excepción al principio del carácter público de las audiencias establecido en el artículo 67, las Salas de la Corte
podrán, a fin de proteger a las víctimas y los testigos o a un acusado, decretar que una parte del juicio se celebre a puerta cerrada o
permitir la presentación de pruebas por medios electrónicos u otros medios especiales. En particular, se aplicarán estas medidas en el caso
de una víctima de agresión sexual o de un menor de edad que sea víctima o testigo, salvo decisión en contrario adoptada por la Corte
atendiendo a todas las circunstancias, especialmente la opinión de la víctima o el testigo.
3. La Corte permitirá, en las fases del juicio que considere conveniente, que se presenten y tengan en cuenta las opiniones y
observaciones de las víctimas si se vieren afectados sus intereses personales y de una manera que no redunde en detrimento de los
derechos del acusado o de un juicio justo e imparcial ni sea incompatible con éstos. Los representantes legales de las víctimas podrán
presentar dichas opiniones y observaciones cuando la Corte lo considere conveniente y de conformidad con las Reglas de Procedimiento
y Prueba.
4. La Dependencia de Víctimas y Testigos podrá asesorar al Fiscal y a la Corte acerca de las medidas adecuadas de
protección, los dispositivos de seguridad, el asesoramiento y la asistencia a que se hace referencia en el párrafo 6 del artículo 43.
5. Cuando la divulgación de pruebas o información de conformidad con el presente Estatuto entrañare un peligro grave para
la seguridad de un testigo o de su familia, el Fiscal podrá, a los efectos de cualquier diligencia anterior al juicio, no presentan dichas
pruebas o información y presentar en cambio un resumen de éstas. Las medidas de esta índole no podrán redundar en perjuicio de los
derechos del acusado o de un juicio justo e imparcial ni serán incompatibles con éstos.
6. Todo Estado podrá solicitar que se adopten las medidas necesarias respecto de la protección de sus funcionarios o agentes,
así como de la protección de información de carácter confidencial o restringido.
Artículo 69
195
Estatuto De Roma
1. Antes de declarar, cada testigo se comprometerá, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba, a decir
verdad en su testimonio.
2. La prueba testimonial deberá rendirse en persona en el juicio, salvo cuando se apliquen las medidas establecidas en el
artículo 68 o en las Reglas de Procedimiento y Prueba. Asimismo, la Corte podrá permitir al testigo que preste testimonio oralmente o por
medio de una grabación de vídeo o audio, así como que se presenten documentos o transcripciones escritas, con sujeción al presente
Estatuto y de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba. Estas medidas no podrán redundar en perjuicio de los derechos del
acusado ni serán incompatibles con éstos.
3. Las partes podrán presentar pruebas pertinentes a la causa, de conformidad con el artículo 64. La Corte estará facultada
para pedir todas las pruebas que considere necesarias para determinar la veracidad de los hechos.
4. La Corte podrá decidir sobre la pertinencia o admisibilidad de cualquier prueba, teniendo en cuenta, entre otras cosas, su
valor probatorio y cualquier perjuicio que pueda suponer para un juicio justo o para la justa evaluación del testimonio de un testigo, de
conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
5. La Corte respetará los privilegios de confidencialidad establecidos en las Reglas de Procedimiento y Prueba.
6. La Corte no exigirá prueba de los hechos de dominio público, pero podrá incorporarlos en autos.
7. No serán admisibles las pruebas obtenidas como resultado de una violación del presente Estatuto o de las normas de
derechos humanos internacionalmente reconocidas cuando:
a) Esa violación suscite serias dudas sobre la fiabilidad de las pruebas; o
b) Su admisión atente contra la integridad del juicio o redunde en grave desmedro de él.
8. La Corte, al decidir sobre la pertinencia o la admisibilidad de las pruebas presentadas por un Estado, no podrá
pronunciarse sobre la aplicación del derecho interno de ese Estado.
Artículo 70
1. La Corte tendrá competencia para conocer de los siguientes delitos contra la administración de justicia, siempre y cuando
se cometan intencionalmente:
a) Dar falso testimonio cuando se esté obligado a decir verdad de conformidad con el párrafo 1 del artículo 69;
c) Corromper a un testigo, obstruir su comparecencia o testimonio o interferir en ellos, tomar represalias contra un
testigo por su declaración, destruir o alterar pruebas o interferir en las diligencias de prueba;
d) Poner trabas, intimidar o corromper a un funcionario de la Corte para obligarlo o inducirlo a que no cumpla sus
funciones o a que lo haga de manera indebida;
e) Tomar represalias contra un funcionario de la Corte en razón de funciones que haya desempeñado él u otro
funcionario; y
f) Solicitar o aceptar un soborno en calidad de funcionario de la Corte y en relación con sus funciones oficiales.
2. Las Reglas de Procedimiento y Prueba establecerán los principios y procedimientos que regulen el ejercicio por la Corte
de su competencia sobre los delitos a que se hace referencia en el presente artículo. Las condiciones de la cooperación internacional con
la Corte respecto de las actuaciones que realice de conformidad con el presente artículo se regirán por el derecho interno del Estado
requerido.
3. En caso de decisión condenatoria, la Corte podrá imponer una pena de reclusión no superior a cinco años o una multa, o
ambas penas, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
4. a) Todo Estado Parte hará extensivas sus leyes penales que castiguen los delitos contra la integridad de su propio
procedimiento de investigación o enjuiciamiento a los delitos contra la administración de justicia a que se hace referencia en el presente
artículo y sean cometidos en su territorio o por uno de sus nacionales;
b) A solicitud de la Corte, el Estado Parte, siempre que lo considere apropiado, someterá el asunto a sus autoridades
competentes a los efectos del enjuiciamiento. Esas autoridades conocerán de tales asuntos con diligencia y asignarán medios suficientes
para que las causas se sustancien en forma eficaz.
196
Estatuto De Roma
Artículo 71
Sanciones por faltas de conducta en la Corte
1. En caso de faltas de conducta de personas presentes en la Corte, tales como perturbar las audiencias o negarse
deliberadamente a cumplir sus órdenes, la Corte podrá imponer sanciones administrativas, que no entrañen privación de la libertad, como
expulsión temporal o permanente de la sala, multa u otras medidas similares establecidas en las Reglas de Procedimiento y Prueba.
2. El procedimiento para imponer las medidas a que se refiere el párrafo 1 se regirá por las Reglas de Procedimiento y
Prueba.
Artículo 72
Protección de información que afecte a la seguridad nacional
1. El presente artículo será aplicable en todos los casos en que la divulgación de información o documentos de un Estado
pueda, a juicio de éste, afectar a los intereses de su seguridad nacional. Esos casos son los comprendidos en el ámbito de los párrafos 2 y
3 del artículo 56, el párrafo 3 del artículo 61, el párrafo 3 del artículo 64, el párrafo 2 del artículo 67, el párrafo 6 del artículo 68, el
párrafo 6 del artículo 87 y el artículo 93, así como los que se presenten en cualquier otra fase del procedimiento en el contexto de esa
divulgación.
2. El presente artículo se aplicará también cuando una persona a quien se haya solicitado información o pruebas se niegue a
presentarlas o haya pedido un pronunciamiento del Estado porque su divulgación afectaría a los intereses de la seguridad nacional del
Estado, y el Estado de que se trate confirme que, a su juicio, esa divulgación afectaría a los intereses de su seguridad nacional.
3. Nada de lo dispuesto en el presente artículo afectará a los privilegios de confidencialidad a que se refieren los apartados e)
y f) del párrafo 3 del artículo 54 ni la aplicación del artículo 73.
4. Si un Estado tiene conocimiento de que información o documentos suyos están siendo divulgados o pueden serlo en
cualquier fase del procedimiento y estima que esa divulgación afectaría a sus intereses de seguridad nacional, tendrá derecho a pedir que
la cuestión se resuelva de conformidad con el presente artículo.
5. El Estado a cuyo juicio la divulgación de información afectaría a sus intereses de seguridad nacional adoptará, actuando en
conjunto con el Fiscal, la defensa, la Sala de Cuestiones Preliminares o la Sala de Primera Instancia según sea el caso, todas las medidas
razonables para resolver la cuestión por medio de la cooperación. Esas medidas podrán ser, entre otras, las siguientes:
b) Una decisión de la Corte respecto de la pertinencia de la información o de las pruebas solicitadas, o una decisión
sobre si las pruebas, aunque pertinentes, pudieran obtenerse o se hubieran obtenido de una fuente distinta del Estado;
c) La obtención de la información o las pruebas de una fuente distinta o en una forma diferente; o
d) Un acuerdo sobre las condiciones en que se preste la asistencia, que incluya, entre otras cosas, la presentación de
resúmenes o exposiciones, restricciones a la divulgación, la utilización de procedimientos a puerta cerrada o ex parte, u otras medidas de
protección permitidas con arreglo al Estatuto o las Reglas de Procedimiento y Prueba.
6. Una vez que se hayan adoptado todas las medidas razonables para resolver la cuestión por medio de la cooperación, el
Estado, si considera que la información o los documentos no pueden proporcionarse ni divulgarse por medio alguno ni bajo ninguna
condición sin perjuicio de sus intereses de seguridad nacional, notificará al Fiscal o a la Corte las razones concretas de su decisión, a
menos que la indicación concreta de esas razones perjudique necesariamente los intereses de seguridad nacional del Estado.
7. Posteriormente, si la Corte decide que la prueba es pertinente y necesaria para determinar la culpabilidad o la inocencia del
acusado, podrá adoptar las disposiciones siguientes:
a) Cuando se solicite la divulgación de la información o del documento de conformidad con una solicitud de
cooperación con arreglo a la Parte IX del presente Estatuto o en las circunstancias a que se refiere el párrafo 2 del presente artículo, y el
Estado hiciere valer para denegarla el motivo indicado en el párrafo 4 del artículo 93:
i) La Corte podrá, antes de adoptar una de las conclusiones a que se refiere el inciso ii) del apartado a) del párrafo
7, solicitar nuevas consultas con el fin de oír las razones del Estado. La Corte, si el Estado lo solicita, celebrará las consultas a puerta
cerrada y ex parte;
197
Estatuto De Roma
ii) Si la Corte llega a la conclusión de que, al hacer valer el motivo de denegación indicado en el párrafo 4 del
artículo 93, dadas las circunstancias del caso, el Estado requerido no está actuando de conformidad con las obligaciones que le impone el
presente Estatuto, podrá remitir la cuestión de conformidad con el párrafo 7 del artículo 87, especificando las razones de su conclusión; y
iii) La Corte, en el juicio del acusado, podrá extraer las inferencias respecto de la existencia o inexistencia de un
hecho que sean apropiadas en razón de las circunstancias; o
i) Ordenar la divulgación; o
ii) Si no ordena la divulgación, extraer las inferencias relativas a la culpabilidad o a la inocencia del acusado que sean
apropiadas en razón de las circunstancias.
Artículo 73
La Corte, si pide a un Estado Parte que le proporcione información o un documento que esté bajo su custodia, posesión o
control y que le haya sido divulgado por un Estado, una organización intergubernamental o una organización internacional a título
confidencial, recabará el consentimiento de su autor para divulgar la información o el documento. Si el autor es un Estado Parte, podrá
consentir en divulgar dicha información o documento o comprometerse a resolver la cuestión con la Corte, con sujeción a lo dispuesto en
el artículo 72. Si el autor no es un Estado Parte y no consiente en divulgar la información o el documento, el Estado requerido
comunicará a la Corte que no puede proporcionar la información o el documento de que se trate en razón de la obligación contraída con
su autor de preservar su carácter confidencial.
Artículo 74
1. Todos los magistrados de la Sala de Primera Instancia estarán presentes en cada fase del juicio y en todas sus
deliberaciones. La Presidencia podrá designar para cada causa y según estén disponibles uno o varios magistrados suplentes para que
asistan a todas las fases del juicio y sustituyan a cualquier miembro de la Sala de Primera Instancia que se vea imposibilitado para seguir
participando en el juicio.
2. La Sala de Primera Instancia fundamentará su fallo en su evaluación de las pruebas y de la totalidad del juicio. El fallo se
referirá únicamente a los hechos y las circunstancias descritos en los cargos o las modificaciones a los cargos, en su caso. La Corte podrá
fundamentar su fallo únicamente en las pruebas presentadas y examinadas ante ella en el juicio.
3. Los magistrados procurarán adoptar su fallo por unanimidad, pero, de no ser posible, éste será adoptado por mayoría.
5. El fallo constará por escrito e incluirá una exposición fundada y completa de la evaluación de las pruebas y las
conclusiones. La Sala de Primera Instancia dictará un fallo. Cuando no haya unanimidad, el fallo de la Sala de Primera Instancia incluirá
las opiniones de la mayoría y de la minoría. La lectura del fallo o de un resumen de éste se hará en sesión pública.
Artículo 75
1. La Corte establecerá principios aplicables a la reparación, incluidas la restitución, la indemnización y la rehabilitación, que
ha de otorgarse a las víctimas o a sus causahabientes. Sobre esta base, la Corte, previa solicitud o de oficio en circunstancias
excepcionales, podrá determinar en su decisión el alcance y la magnitud de los daños, pérdidas o perjuicios causados a las víctimas o a
sus causahabientes, indicando los principios en que se funda.
2. La Corte podrá dictar directamente una decisión contra el condenado en la que indique la reparación adecuada que ha de
otorgarse a las víctimas, incluidas la restitución, la indemnización y la rehabilitación. Cuando proceda, la Corte podrá ordenar que la
indemnización otorgada a título de reparación se pague por conducto del Fondo Fiduciario previsto en el artículo 79.
198
Estatuto De Roma
3. La Corte, antes de tomar una decisión con arreglo a este artículo, tendrá en cuenta las observaciones formuladas por el
condenado, las víctimas, otras personas o Estados que tengan un interés, o las que se formulen en su nombre.
4. Al ejercer sus atribuciones de conformidad con el presente artículo, la Corte, una vez que una persona sea declarada
culpable de un crimen de su competencia, podrá determinar si, a fin de dar efecto a una decisión que dicte de conformidad con este
artículo, es necesario solicitar medidas de conformidad con el párrafo 1 del artículo 93.
5. Los Estados Partes darán efecto a la decisión dictada con arreglo a este artículo como si las disposiciones del artículo 109
se aplicaran al presente artículo.
6. Nada de lo dispuesto en el presente artículo podrá interpretarse en perjuicio de los derechos de las víctimas con arreglo al
derecho interno o el derecho internacional.
Artículo 76
Fallo condenatorio
1. En caso de que se dicte un fallo condenatorio, la Sala de Primera Instancia fijará la pena que proceda imponer, para lo cual
tendrá en cuenta las pruebas practicadas y las conclusiones relativas a la pena que se hayan hecho en el proceso.
2. Salvo en el caso en que sea aplicable el artículo 65, la Sala de Primera Instancia podrá convocar de oficio una nueva
audiencia, y tendrá que hacerlo si lo solicitan el Fiscal o el acusado antes de que concluya la instancia, a fin de practicar diligencias de
prueba o escuchar conclusiones adicionales relativas a la pena, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
3. En el caso en que sea aplicable el párrafo 2, en la audiencia a que se hace referencia en ese párrafo o, de ser necesario, en
una audiencia adicional se escucharán las observaciones que se hagan en virtud del artículo 75.
4. La pena será impuesta en audiencia pública y, de ser posible, en presencia del acusado.
Artículo 77
Penas aplicables
1. La Corte podrá, con sujeción a lo dispuesto en el artículo 110, imponer a la persona declarada culpable de uno de los
crímenes a que se hace referencia en el artículo 5 del presente Estatuto una de las penas siguientes:
b) La reclusión a perpetuidad cuando lo justifiquen la extrema gravedad del crimen y las circunstancias personales del
condenado.
a) Una multa con arreglo a los criterios enunciados en las Reglas de Procedimiento y Prueba;
b) El decomiso del producto, los bienes y los haberes procedentes directa o indirectamente de dicho crimen, sin
perjuicio de los derechos de terceros de buena fe.
Artículo 78
Imposición de la pena
1. Al imponer una pena, la Corte tendrá en cuenta, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba, factores tales
como la gravedad del crimen y las circunstancias personales del condenado.
2. La Corte, al imponer una pena de reclusión, abonará el tiempo que, por orden suya, haya estado detenido el condenado. La
Corte podrá abonar cualquier otro período de detención cumplido en relación con la conducta constitutiva del delito.
3. Cuando una persona haya sido declarada culpable de más de un crimen, la Corte impondrá una pena para cada uno de ellos
y una pena común en la que se especifique la duración total de la reclusión. La pena no será inferior a la más alta de cada una de las penas
impuestas y no excederá de 30 años de reclusión o de una pena de reclusión a perpetuidad de conformidad con el párrafo 1 b) del artículo
199
Estatuto De Roma
77.
Artículo 79
Fondo fiduciario
1. Por decisión de la Asamblea de los Estados Partes se establecerá un fondo fiduciario en beneficio de las víctimas de
crímenes de la competencia de la Corte y de sus familias.
2. La Corte podrá ordenar que las sumas y los bienes que reciba a título de multa o decomiso sean transferidos al Fondo
Fiduciario.
3. El Fondo Fiduciario será administrado según los criterios que fije la Asamblea de los Estados Partes.
Artículo 80
Nada de lo dispuesto en la presente parte se entenderá en perjuicio de la aplicación por los Estados de las penas prescritas por
su legislación nacional ni de la legislación de los Estados en que no existan las penas prescritas en la presente parte.
Artículo 81
1. Los fallos dictados de conformidad con el artículo 74 serán apelables de conformidad con las Reglas de Procedimiento y
Prueba, según se dispone a continuación:
i) Vicio de procedimiento;
b) El condenado, o el Fiscal en su nombre, podrá apelar por alguno de los motivos siguientes:
i) Vicio de procedimiento;
iv) Cualquier otro motivo que afecte a la justicia o a la regularidad del proceso o del fallo.
2. a) El Fiscal o el condenado podrán apelar de una pena impuesta, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y
Prueba, en razón de una desproporción entre el crimen y la pena;
b) La Corte, si al conocer de la apelación de una pena impuesta, considerase que hay fundamentos para revocar la
condena en todo o parte, podrá invitar al Fiscal y al condenado a que presenten sus argumentos de conformidad con los apartados a) o b)
del párrafo 1 del artículo 81 y podrá dictar una decisión respecto de la condena de conformidad con el artículo 83;
c) Este procedimiento también será aplicable cuando la Corte, al conocer de una apelación contra el fallo condenatorio
únicamente, considere que hay fundamentos para reducir la pena en virtud del párrafo 2 a).
200
Estatuto De Roma
3. a) Salvo que la Sala de Primera Instancia ordene otra cosa, el condenado permanecerá privado de libertad mientras se
falla la apelación;
b) Cuando la duración de la detención fuese mayor que la de la pena de prisión impuesta, el condenado será puesto en
libertad; sin embargo, si el Fiscal también apelase, esa libertad podrá quedar sujeta a las condiciones enunciadas en el apartado siguiente;
c) Si la sentencia fuere absolutoria, el acusado será puesto en libertad de inmediato, con sujeción a las normas
siguientes:
i) En circunstancias excepcionales y teniendo en cuenta entre otras cosas, el riesgo concreto de fuga, la gravedad
del delito y las probabilidades de que se dé lugar a la apelación, la Sala de Primera Instancia, a solicitud del Fiscal, podrá decretar que
siga privado de la libertad mientras dure la apelación;
ii) Las decisiones dictadas por la Sala de Primera Instancia en virtud del inciso precedente serán apelables de
conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
4. Con sujeción a lo dispuesto en los apartados a) y b) del párrafo 3, la ejecución de la decisión o sentencia será suspendida
durante el plazo fijado para la apelación y mientras dure el procedimiento de apelación.
Artículo 82
1. Cualquiera de las partes podrá apelar, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba, de las siguientes
decisiones:
b) Una decisión por la que se autorice o deniegue la libertad de la persona objeto de investigación o enjuiciamiento;
c) Una decisión de la Sala de Cuestiones Preliminares de actuar de oficio de conformidad con el párrafo 3 del artículo
56;
d) Una decisión relativa a una cuestión que afecte de forma significativa a la justicia y a la prontitud con que se
sustancia el proceso o a su resultado y respecto de la cual, en opinión de la Sala de Cuestiones Preliminares o la Sala de Primera
Instancia, un dictamen inmediato de la Sala de Apelaciones pueda acelerar materialmente el proceso.
2. El Estado de que se trate o el Fiscal, con la autorización de la Sala de Cuestiones Preliminares, podrá apelar de una
decisión adoptada por esta Sala de conformidad con el párrafo 3 d) del artículo 57. La apelación será sustanciada en procedimiento
sumario.
3. La apelación no suspenderá por sí misma el procedimiento a menos que la Sala de Apelaciones así lo resuelva, previa
solicitud y de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
4. El representante legal de las víctimas, el condenado o el propietario de buena fe de bienes afectados por una providencia
dictada en virtud del artículo 75 podrán apelar, de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba, de la decisión por la cual se
conceda reparación.
Artículo 83
Procedimiento de apelación
1. A los efectos del procedimiento establecido en el artículo 81 y en el presente artículo, la Sala de Apelaciones tendrá todas
las atribuciones de la Sala de Primera Instancia.
2. La Sala de Apelaciones, si decide que las actuaciones apeladas fueron injustas y que ello afecta a la regularidad del fallo o
la pena o que el fallo o la pena apelados adolecen efectivamente de errores de hecho o de derecho o de vicios de procedimiento, podrá:
A estos efectos, la Sala de Apelaciones podrá devolver una cuestión de hecho a la Sala de Primera Instancia original para que la
examine y le informe según corresponda, o podrá ella misma pedir pruebas para dirimirla. El fallo o la pena apelados únicamente por el
201
Estatuto De Roma
condenado, o por el Fiscal en nombre de éste, no podrán ser modificados en perjuicio suyo.
3. La Sala de Apelaciones, si al conocer de una apelación contra la pena, considera que hay una desproporción entre el
crimen y la pena, podrá modificar ésta de conformidad con lo dispuesto en la Parte VII.
4. La sentencia de la Sala de Apelaciones será aprobada por mayoría de los magistrados que la componen y anunciada en
audiencia pública. La sentencia enunciará las razones en que se funda. De no haber unanimidad, consignará las opiniones de la mayoría y
de la minoría, si bien un magistrado podrá emitir una opinión separada o disidente sobre una cuestión de derecho.
Artículo 84
1. El condenado o, después de su fallecimiento, el cónyuge, los hijos, los padres o quien estuviera vivo al momento de la
muerte del acusado y tuviera instrucciones escritas del acusado de hacerlo, o el Fiscal en su nombre, podrá pedir a la Sala de Apelaciones
que revise el fallo definitivo condenatorio o la pena por las siguientes causas:
i) No se hallaban disponibles a la época del juicio por motivos que no cabría imputar total o parcialmente a la parte
que formula la solicitud; y
ii) Son suficientemente importantes como para que, de haberse valorado en el juicio, probablemente hubieran dado
lugar a otro veredicto;
b) Se acabare de descubrir que un elemento de prueba decisivo, apreciado en el juicio y del cual depende la condena, era
falso o habría sido objeto de adulteración o falsificación;
c) Uno o más de los magistrados que intervinieron en el fallo condenatorio o en la confirmación de los cargos han
incurrido, en esa causa, en una falta grave o un incumplimiento grave de magnitud suficiente para justificar su separación del cargo de
conformidad con el artículo 46.
2. La Sala de Apelaciones rechazará la solicitud si la considera infundada. Si determina que la solicitud es atendible, podrá,
según corresponda:
para, tras oír a las partes en la manera establecida en las Reglas de Procedimiento y Prueba, determinar si ha de revisarse la
sentencia.
Artículo 85
1. El que haya sido ilegalmente detenido o recluido tendrá el derecho efectivo a ser indemnizado.
2. El que por decisión final hubiera sido condenado por un crimen y hubiere cumplido pena por tal motivo será indemnizado
conforme a la ley de ser anulada posteriormente su condena en razón de hechos nuevos que demuestren concluyentemente que hubo un
error judicial, salvo que la falta de conocimiento oportuno de esos hechos le fuera total o parcialmente imputable.
3. En circunstancias excepcionales, la Corte, si determina la existencia de hechos concluyentes que muestran que hubo un
error judicial grave y manifiesto tendrá la facultad discrecional de otorgar una indemnización, de conformidad con los criterios
establecidos en las Reglas de Procedimiento y Prueba, a quien hubiere sido puesto en libertad en virtud de una sentencia definitiva
202
Estatuto De Roma
Artículo 86
Los Estados Partes, de conformidad con lo dispuesto en el presente Estatuto, cooperarán plenamente con la Corte en relación
con la investigación y el enjuiciamiento de crímenes de su competencia.
Artículo 87
1. a) La Corte estará facultada para formular solicitudes de cooperación a los Estados Partes. Éstas se transmitirán por vía
diplomática o por cualquier otro conducto adecuado que haya designado cada Estado Parte a la fecha de la ratificación, aceptación,
aprobación o adhesión.
Cada Estado Parte podrá cambiar posteriormente esa designación de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
b) Cuando proceda, y sin perjuicio de lo dispuesto en el apartado a), las solicitudes podrán transmitirse también por
conducto de la Organización Internacional de Policía Criminal o de cualquier organización regional competente.
2. Las solicitudes de cooperación y los documentos que las justifiquen estarán redactados en un idioma oficial del Estado
requerido, o acompañados de una traducción a ese idioma, o a uno de los idiomas de trabajo de la Corte, según la elección que haya
hecho el Estado a la fecha de la ratificación, aceptación, aprobación o adhesión.
El Estado Parte podrá cambiar posteriormente esa elección de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
3. El Estado requerido preservará el carácter confidencial de toda solicitud de cooperación y de los documentos que las
justifiquen, salvo en la medida en que su divulgación sea necesaria para tramitarla.
4. Con respecto a las solicitudes de asistencia presentadas de conformidad con la presente Parte, la Corte podrá adoptar todas
las medidas, incluidas las relativas a la protección de la información, que sean necesarias para proteger la seguridad y el bienestar físico o
psicológico de las víctimas, los posibles testigos y sus familiares. La Corte podrá solicitar que toda información comunicada en virtud de
la presente Parte sea transmitida y procesada de manera que se proteja la seguridad y el bienestar físico o psicológico de las víctimas, los
posibles testigos y sus familiares.
5. a) La Corte podrá invitar a cualquier Estado que no sea parte en el presente Estatuto a prestar la asistencia prevista en la
presente Parte sobre la base de un arreglo especial, un acuerdo con ese Estado o de cualquier otra manera adecuada.
b) Cuando un Estado que no sea parte en el presente Estatuto y que haya celebrado un arreglo especial o un acuerdo con
la Corte se niegue a cooperar en la ejecución de las solicitudes a que se refieran tal arreglo o acuerdo, la Corte podrá informar de ello a la
Asamblea de los Estados Partes o al Consejo de Seguridad, si éste le hubiese remitido el asunto.
6. La Corte podrá solicitar de cualquier organización intergubernamental que le proporcione información o documentos.
Asimismo, la Corte podrá solicitar otras formas de cooperación y asistencia que se hayan acordado con cualquiera de esas
organizaciones, de conformidad con su competencia o mandato.
7. Cuando, en contravención de lo dispuesto en el presente Estatuto, un Estado Parte se niegue a dar curso a una solicitud de
cooperación formulada por la Corte, impidiéndole ejercer sus funciones y atribuciones de conformidad con el presente Estatuto, ésta
podrá hacer una constatación en ese sentido y remitir la cuestión a la Asamblea de los Estados Partes o al Consejo de Seguridad, si éste le
hubiese remitido el asunto.
Artículo 88
Los Estados Partes se asegurarán de que en el derecho interno existan procedimientos aplicables a todas las formas de
cooperación especificadas en la presente parte.
203
Estatuto De Roma
Artículo 89
Entrega de personas a la Corte
1. La Corte podrá transmitir, junto con los antecedentes que la justifiquen de conformidad con el artículo 91, una solicitud de
detención y entrega de una persona a todo Estado en cuyo territorio pueda hallarse y solicitará la cooperación de ese Estado. Los Estados
Partes cumplirán las solicitudes de detención y entrega de conformidad con las disposiciones de la presente parte y el procedimiento
establecido en su derecho interno.
2. Cuando la persona cuya entrega se pida la impugne ante un tribunal nacional oponiendo la excepción de cosa juzgada de
conformidad con el artículo 20, el Estado requerido celebrará de inmediato consultas con la Corte para determinar si ha habido una
decisión sobre la admisibilidad de la causa. Si la causa es admisible, el Estado requerido cumplirá la solicitud. Si está pendiente la
decisión sobre la admisibilidad, el Estado requerido podrá aplazar la ejecución de la solicitud de entrega hasta que la Corte adopte esa
decisión.
3. a) El Estado Parte autorizará de conformidad con su derecho procesal el tránsito por su territorio de una persona que
otro Estado entregue a la Corte, salvo cuando el tránsito por ese Estado obstaculice o demore la entrega;
b) La solicitud de la Corte de que se autorice ese tránsito será transmitida de conformidad con el artículo 87 y
contendrá:
d) No se requerirá autorización alguna cuando la persona sea transportada por vía aérea y no se prevea aterrizar en el
territorio del Estado de tránsito;
e) En caso de aterrizaje imprevisto en el territorio del Estado de tránsito, éste podrá pedir a la Corte que presente una
solicitud de tránsito con arreglo a lo dispuesto en el apartado b). El Estado de tránsito detendrá a la persona transportada mientras se
recibe la solicitud de la Corte y se efectúa el tránsito; sin embargo, la detención no podrá prolongarse más de 96 horas contadas desde el
aterrizaje imprevisto si la solicitud no es recibida dentro de ese plazo.
4. Si la persona buscada está siendo enjuiciada o cumple condena en el Estado requerido por un crimen distinto de aquel por
el cual se pide su entrega a la Corte, el Estado requerido, después de haber decidido conceder la entrega, celebrará consultas con la Corte.
Artículo 90
Solicitudes concurrentes
1. El Estado Parte que haya recibido una solicitud de la Corte relativa a la entrega de una persona de conformidad con el
artículo 89, y reciba además una solicitud de cualquier otro Estado relativa a la extradición de la misma persona por la misma conducta
que constituya la base del crimen en razón del cual la Corte ha pedido la entrega, notificará a la Corte y al Estado requirente ese hecho.
2. Si el Estado requirente es un Estado Parte, el Estado requerido dará prioridad a la solicitud de la Corte cuando ésta:
a) Haya determinado, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 18 ó 19, que la causa respecto de la cual se
solicita la entrega es admisible y en su decisión haya tenido en cuenta la investigación o el enjuiciamiento que lleva a cabo el Estado
requirente con respecto a la solicitud de extradición que éste ha presentado; o
b) Adopte la decisión a que se refiere el apartado a) como consecuencia de la notificación efectuada por el Estado
requerido de conformidad con el párrafo 1.
3. Cuando no se haya adoptado la decisión a que se hace referencia en el párrafo 2 a), el Estado requerido tendrá la facultad
discrecional, hasta que se dicte la decisión de la Corte prevista en el párrafo 2 b), de dar curso a la solicitud de extradición presentada por
el Estado requirente, pero no la hará efectiva hasta que la Corte haya resuelto que la causa es inadmisible. La Corte adoptará su decisión
204
Estatuto De Roma
en procedimiento sumario.
4. Si el Estado requirente no es parte en el presente Estatuto, el Estado requerido, en caso de que no esté obligado por alguna
norma internacional a conceder la extradición al Estado requirente, dará prioridad a la solicitud de entrega que le haya hecho la Corte si
ésta ha determinado que la causa era admisible.
5. Cuando la Corte no haya determinado la admisibilidad de una causa de conformidad con el párrafo 4, el Estado requerido
tendrá la facultad discrecional de dar curso a la solicitud de extradición que le haya hecho el Estado requirente.
6. En los casos en que sea aplicable el párrafo 4, y salvo que el Estado requerido esté obligado por alguna norma
internacional a extraditar la persona al Estado requirente que no sea parte en el presente Estatuto, el Estado requerido decidirá si hace la
entrega a la Corte o concede la extradición al Estado requirente. Para tomar esta decisión, el Estado requerido tendrá en cuenta todos los
factores pertinentes, entre otros:
a) Las fechas respectivas de las solicitudes;
b) Los intereses del Estado requirente y, cuando proceda, si el crimen se cometió en su territorio y cuál es la
nacionalidad de las víctimas y de la persona cuya entrega o extradición se ha solicitado; y
c) La posibilidad de que la Corte y el Estado requirente lleguen posteriormente a un acuerdo respecto de la entrega.
7. Cuando el Estado Parte que reciba una solicitud de la Corte de entrega de una persona reciba también una solicitud de otro
Estado relativa a la extradición de la misma persona por una conducta distinta de la que constituye el crimen en razón del cual la Corte
solicita la entrega:
a) El Estado requerido, si no está obligado por ninguna norma internacional a conceder la extradición al Estado
requirente, dará preferencia a la solicitud de la Corte;
b) El Estado requerido, si está obligado por una norma internacional a conceder la extradición al Estado requirente,
decidirá si entrega la persona a la Corte o la extradita al Estado requirente. En esta decisión, el Estado requerido tendrá en cuenta todos
los factores pertinentes y, entre otros, los enumerados en el párrafo 6, pero tendrá especialmente en cuenta la naturaleza y la gravedad
relativas de la conducta de que se trate.
8. Cuando, como consecuencia de una notificación efectuada con arreglo al presente artículo, la Corte haya determinado la
inadmisibilidad de una causa y posteriormente se deniegue la extradición al Estado requirente, el Estado requerido notificará su decisión
a la Corte.
Artículo 91
1. La solicitud de detención y entrega deberá formularse por escrito. En caso de urgencia, se podrá hacer por cualquier otro
medio que permita dejar constancia escrita, a condición de que la solicitud sea confirmada en la forma indicada en el párrafo 1 a) del
artículo 87.
2. La solicitud de detención y entrega de una persona respecto de la cual la Sala de Cuestiones Preliminares haya dictado una
orden de detención de conformidad con el artículo 58 deberá contener los elementos siguientes o ir acompañada de:
a) Información suficiente para la identificación de la persona buscada y datos sobre su probable paradero;
c) Los documentos, las declaraciones o la información que sean necesarios para cumplir los requisitos de procedimiento
del Estado requerido relativos a la entrega; sin embargo, esos requisitos no podrán ser más onerosos que los aplicables a las solicitudes de
extradición conforme a tratados o acuerdos celebrados por el Estado requerido y otros Estados y, de ser posible, serán menos onerosos,
habida cuenta del carácter específico de la Corte.
3. La solicitud de detención y entrega del condenado deberá contener los siguientes elementos o ir acompañada de:
c) Datos que demuestren que la persona buscada es aquella a la que se refiere la sentencia condenatoria; y
d) Si la persona que se busca ha sido condenado a una pena, copia de la sentencia y, en el caso de una pena de
reclusión, una indicación de la parte de la pena que se ha cumplido y de la que queda por cumplir.
205
Estatuto De Roma
4. A solicitud de la Corte, un Estado Parte consultará con ésta, en general o con respecto a un asunto concreto, sobre las
disposiciones de su derecho interno que puedan ser aplicables de conformidad con el apartado c) del párrafo 2 del presente artículo. En
esas consultas, el Estado Parte comunicará a la Corte los requisitos específicos de su derecho interno.
Artículo 92
Detención provisional
1. En caso de urgencia, la Corte podrá solicitar la detención provisional de la persona buscada hasta que se presente la
solicitud de entrega y los documentos que la justifiquen de conformidad con el artículo 91.
2. La solicitud de detención provisional deberá hacerse por cualquier medio que permita dejar constancia escrita y contendrá:
a) Información suficiente para identificar a la persona buscada y datos sobre su probable paradero;
b) Una exposición concisa de los crímenes por los que se pida la detención y de los hechos que presuntamente serían
constitutivos de esos crímenes, inclusive, de ser posible, la indicación de la fecha y el lugar en que se cometieron;
c) Una declaración de que existe una orden de detención o una decisión final condenatoria respecto de la persona
buscada; y
3. La persona sometida a detención provisional podrá ser puesta en libertad si el Estado requerido no hubiere recibido la
solicitud de entrega y los documentos que la justifiquen, de conformidad con el artículo 91, dentro del plazo fijado en las Reglas de
Procedimiento y Prueba. Sin embargo, el detenido podrá consentir en la entrega antes de que se cumpla dicho plazo siempre que lo
permita el derecho interno del Estado requerido. En ese caso, el Estado requerido procederá a entregar al detenido a la Corte tan pronto
como sea posible.
4. El hecho de que la persona buscada haya sido puesta en libertad de conformidad con el párrafo 3 no obstará para que sea
nuevamente detenida y entregada una vez que el Estado requerido reciba la solicitud de entrega y los documentos que la justifiquen.
Artículo 93
1. Los Estados Partes, de conformidad con lo dispuesto en la presente Parte y con los procedimientos de su derecho interno,
deberán cumplir las solicitudes de asistencia formuladas por la Corte en relación con investigaciones o enjuiciamientos penales a fin de:
b) Practicar pruebas, incluidos los testimonios bajo juramento, y producir pruebas, incluidos los dictámenes e informes
periciales que requiera la Corte;
c) Interrogar a una persona objeto de investigación o enjuiciamiento;
k) Identificar, determinar el paradero o inmovilizar el producto y los bienes y haberes obtenidos del crimen y de los
instrumentos del crimen, o incautarse de ellos, con miras a su decomiso ulterior y sin perjuicio de los derechos de terceros de buena fe; y
l) Cualquier otro tipo de asistencia no prohibida por la legislación del Estado requerido y destinada a facilitar la
investigación y el enjuiciamiento de crímenes de la competencia de la Corte.
206
Estatuto De Roma
2. La Corte podrá dar seguridades a los testigos o expertos que comparezcan ante ella de que no serán enjuiciados o
detenidos ni se restringirá su libertad personal por un acto u omisión anterior a su salida del Estado requerido.
3. Cuando la ejecución de una determinada medida de asistencia detallada en una solicitud presentada de conformidad con el
párrafo 1 estuviera prohibida en el Estado requerido por un principio fundamental de derecho ya existente y de aplicación general, el
Estado requerido celebrará sin demora consultas con la Corte para tratar de resolver la cuestión. En las consultas se debería considerar si
se puede prestar la asistencia de otra manera o con sujeción a condiciones. Si, después de celebrar consultas, no se pudiera resolver la
cuestión, la Corte modificará la solicitud según sea necesario.
4. El Estado Parte podrá no dar lugar a una solicitud de asistencia, en su totalidad o en parte, de conformidad con el artículo
72 y únicamente si la solicitud se refiere a la presentación de documentos o la divulgación de pruebas que afecten a su seguridad
nacional.
5. Antes de denegar una solicitud de asistencia de conformidad con el párrafo 1 l), el Estado requerido considerará si se
puede prestar la asistencia con sujeción a ciertas condiciones, o si es posible hacerlo en una fecha posterior o de otra manera. La Corte o
el Fiscal, si aceptan la asistencia sujeta a condiciones, tendrán que cumplirlas.
6. Si no se da lugar a una solicitud de asistencia, el Estado Parte requerido deberá comunicar sin demora los motivos a la
Corte o al Fiscal.
7. a) La Corte podrá solicitar el traslado provisional de un detenido a los fines de su identificación o de que preste
testimonio o asistencia de otra índole. El traslado podrá realizarse siempre que:
ii) El Estado requerido lo acepte, con sujeción a las condiciones que hubiere acordado con la Corte.
b) La persona trasladada permanecerá detenida. Una vez cumplidos los fines del traslado, la Corte la devolverá sin
dilación al Estado requerido.
8. a) La Corte velará por la protección del carácter confidencial de los documentos y de la información, salvo en la medida
en que éstos sean necesarios para la investigación y las diligencias pedidas en la solicitud.
b) El Estado requerido podrá, cuando sea necesario, transmitir al Fiscal documentos o información con carácter
confidencial. El Fiscal únicamente podrá utilizarlos para reunir nuevas pruebas.
c) El Estado requerido podrá, de oficio o a solicitud del Fiscal, autorizar la divulgación ulterior de estos documentos o
información, los cuales podrán utilizarse como medios de prueba de conformidad con lo dispuesto en las partes V y VI y de conformidad
con las Reglas de Procedimiento y Prueba.
9. a) i) El Estado Parte que reciba solicitudes concurrentes de la Corte y de otro Estado de conformidad con una
obligación internacional y que no se refieran a la entrega o la extradición, procurará, en consulta con la Corte y el otro Estado, atender
ambas solicitudes, de ser necesario postergando o condicionando una de ellas.
ii) Si esto no fuera posible, la cuestión de las solicitudes concurrentes se resolverá de conformidad con los
principios enunciados en el artículo 90.
b) Sin embargo, cuando la solicitud de la Corte se refiera a información, bienes o personas que estén sometidos al
control de un tercer Estado o de una organización internacional en virtud de un acuerdo internacional, el Estado requerido lo comunicará
a la Corte y la Corte dirigirá su solicitud al tercer Estado o a la organización internacional.
10. a) A solicitud de un Estado Parte que lleve a cabo una investigación o sustancie un juicio por una conducta que
constituya un crimen de la competencia de la Corte o que constituya un crimen grave con arreglo al derecho interno del Estado
requirente, la Corte podrá cooperar con él y prestarle asistencia;
b) i) La asistencia prestada de conformidad con el apartado a) podrá comprender, entre otras cosas:
a. Si los documentos u otros elementos de prueba se hubieren obtenido con la asistencia de un Estado, su
transmisión estará subordinada al consentimiento de dicho Estado;
207
Estatuto De Roma
b. Si las declaraciones, los documentos u otros elementos de prueba hubieren sido proporcionados por un testigo o
un perito, su transmisión estará subordinada a lo dispuesto en el artículo 68.
c) La Corte podrá, de conformidad con el presente párrafo y en las condiciones enunciadas en él, acceder a una solicitud
de asistencia presentada por un Estado que no sea parte en el presente Estatuto.
Artículo 94
1. Si la ejecución inmediata de una solicitud de asistencia interfiriere una investigación o enjuiciamiento en curso de un
asunto distinto de aquel al que se refiera la solicitud, el Estado requerido podrá aplazar la ejecución por el tiempo que acuerde con la
Corte. No obstante, el aplazamiento no excederá de lo necesario para concluir la investigación o el enjuiciamiento de que se trate en el
Estado requerido. Antes de tomar la decisión de aplazar la ejecución de la solicitud, el Estado requerido debería considerar si se podrá
prestar inmediatamente la asistencia con sujeción a ciertas condiciones.
2. Si, de conformidad con el párrafo 1, se decidiere aplazar la ejecución de una solicitud de asistencia, el Fiscal podrá en todo
caso pedir que se adopten las medidas necesarias para preservar pruebas de conformidad con el párrafo 1 j) del artículo 93.
Artículo 95
Cuando la Corte proceda a examinar una impugnación de la admisibilidad de una causa de conformidad con los artículos 18 ó
19, el Estado requerido podrá aplazar la ejecución de una solicitud hecha de conformidad con esta Parte hasta que la Corte se pronuncie
sobre la impugnación, a menos que ésta haya resuelto expresamente que el Fiscal podrá continuar recogiendo pruebas conforme a lo
previsto en los artículos 18 ó 19.
Artículo 96
1. La solicitud relativa a otras formas de asistencia a que se hace referencia en el artículo 93 deberá hacerse por escrito. En
caso de urgencia, se podrá hacer por cualquier otro medio que permita dejar constancia escrita, a condición de que la solicitud sea
confirmada en la forma indicada en el párrafo 1 a) del artículo 87.
2. La solicitud deberá contener los siguientes elementos o estar acompañada de, según proceda:
a) Una exposición concisa de su propósito y de la asistencia solicitada, incluidos los fundamentos jurídicos y los
motivos de la solicitud;
b) La información más detallada posible acerca del paradero o la identificación de la persona o el lugar objeto de la
búsqueda o la identificación, de forma que se pueda prestar la asistencia solicitada;
d) Las razones y la indicación detallada de cualquier procedimiento que deba seguirse o requisito que deba cumplirse;
e) Cualquier información que pueda ser necesaria conforme al derecho interno del Estado requerido para cumplir la
solicitud; y
f) Cualquier otra información pertinente para que pueda prestarse la asistencia solicitada.
208
Estatuto De Roma
3. A solicitud de la Corte, todo Estado Parte consultará con la Corte, en general o respecto de un asunto concreto, sobre las
disposiciones de su derecho interno que puedan ser aplicables de conformidad con el párrafo 2 e). En esas consultas, los Estados Partes
comunicarán a la Corte las disposiciones específicas de su derecho interno.
4. Las disposiciones del presente artículo serán también aplicables, según proceda, con respecto a las solicitudes de asistencia
hechas a la Corte.
Artículo 97
El Estado Parte que reciba una solicitud de conformidad con la presente parte celebrará sin dilación consultas con la Corte si
considera que la solicitud le plantea problemas que puedan obstaculizar o impedir su cumplimiento. Esos problemas podrían ser, entre
otros:
b) Que, en el caso de una solicitud de entrega, la persona no pudiera ser localizada, pese a los intentos realizados, o que en la
investigación realizada se hubiere determinado claramente que la persona en el Estado requerido no es la indicada en la solicitud; o
c) Que el cumplimiento de la solicitud en su forma actual obligare al Estado requerido a no cumplir una obligación
preexistente en virtud de un tratado con otro Estado.
Artículo 98
1. La Corte no dará curso a una solicitud de entrega o de asistencia en virtud de la cual el Estado requerido deba actuar en
forma incompatible con las obligaciones que le imponga el derecho internacional con respecto a la inmunidad de un Estado o la
inmunidad diplomática de una persona o un bien de un tercer Estado, salvo que la Corte obtenga anteriormente la cooperación de ese
tercer Estado para la renuncia a la inmunidad.
2. La Corte no dará curso a una solicitud de entrega en virtud de la cual el Estado requerido deba actuar en forma
incompatible con las obligaciones que le imponga un acuerdo internacional conforme al cual se requiera el consentimiento del Estado que
envíe para entregar a la Corte a una persona sujeta a la jurisdicción de ese Estado, a menos que ésta obtenga primero la cooperación del
Estado que envíe para que dé su consentimiento a la entrega.
Artículo 99
1. Las solicitudes de asistencia se cumplirán de conformidad con el procedimiento aplicable en el derecho interno del Estado
requerido y, salvo si ese derecho lo prohíbe, en la forma especificada en la solicitud, incluidos los procedimientos indicados en ella y la
autorización a las personas especificadas en ella para estar presentes y prestar asistencia en el trámite.
2. En el caso de una solicitud urgente y cuando la Corte lo pida, los documentos o pruebas incluidos en la respuesta serán
transmitidos con urgencia.
3. Las respuestas del Estado requerido serán transmitidas en su idioma y forma original.
4. Sin perjuicio de los demás artículos de la presente parte, cuando resulte necesario en el caso de una solicitud que pueda
ejecutarse sin necesidad de medidas coercitivas, en particular la entrevista a una persona o la recepción de pruebas de una persona
voluntariamente, aun cuando sea sin la presencia de las autoridades del Estado Parte requerido si ello fuere esencial para la ejecución de
la solicitud, y el reconocimiento de un lugar u otro recinto que no entrañe un cambio en él, el Fiscal podrá ejecutar directamente la
solicitud en el territorio de un Estado según se indica a continuación:
a) Cuando el Estado Parte requerido fuere un Estado en cuyo territorio se hubiera cometido presuntamente el crimen, y
hubiere habido una decisión de admisibilidad de conformidad con los artículos 18 ó 19, el Fiscal podrá ejecutar directamente la solicitud
209
Estatuto De Roma
tras celebrar todas las consultas posibles con el Estado Parte requerido;
b) En los demás casos, el Fiscal podrá ejecutar la solicitud tras celebrar consultas con el Estado Parte requerido y con
sujeción a cualquier condición u observación razonable que imponga o haga ese Estado Parte. Cuando el Estado Parte requerido
considere que hay problemas para la ejecución de una solicitud de conformidad con el presente apartado, celebrará consultas sin demora
con la Corte para resolver la cuestión.
5. Las disposiciones en virtud de las cuales una persona que sea oída o interrogada por la Corte con arreglo al artículo 72
podrá hacer valer las restricciones previstas para impedir la divulgación de información confidencial relacionada con la seguridad
nacional serán igualmente aplicables al cumplimiento de las solicitudes de asistencia a que se hace referencia en el presente artículo.
Artículo 100
Gastos
1. Los gastos ordinarios que se deriven del cumplimiento de las solicitudes en el territorio del Estado requerido correrán a
cargo de éste, con excepción de los siguientes, que correrán a cargo de la Corte:
a) Gastos relacionados con el viaje y la seguridad de los testigos y peritos, o el traslado, con arreglo al artículo 93, de
personas detenidas;
c) Gastos de viaje y dietas de los magistrados, el fiscal, los fiscales adjuntos, el secretario, el secretario adjunto y los
funcionarios de cualquier órgano de la Corte;
e) Gastos relacionados con el transporte de la persona que entregue a la Corte un Estado de detención; y
f) Previa consulta, todos los gastos extraordinarios que puedan ser resultado del cumplimiento de una solicitud.
2. Las disposiciones del párrafo 1 serán aplicables, según proceda, a las solicitudes hechas por los Estados Partes a la Corte.
En ese caso, los gastos ordinarios que se deriven de su cumplimiento correrán a cargo de la Corte.
Artículo 101
Principio de la especialidad
1. Quien haya sido entregado a la Corte en virtud del presente Estatuto no será procesado, castigado o detenido por una
conducta anterior a su entrega, a menos que ésta constituya la base del delito por el cual haya sido entregado.
2. La Corte podrá pedir al Estado que hizo la entrega que la dispense del cumplimiento de los requisitos establecidos en el
párrafo 1 y, si fuere necesario, proporcionará información adicional de conformidad con el artículo 91. Los Estados Partes estarán
facultados para dar esa dispensa a la Corte y procurarán hacerlo.
Artículo 102
Términos empleados
a) Por "entrega" se entenderá la entrega de una persona por un Estado a la Corte de conformidad con lo dispuesto en el
presente Estatuto;
b) Por "extradición" se entenderá la entrega de una persona por un Estado a otro Estado de conformidad con lo dispuesto en
un tratado o convención o en el derecho interno.
Artículo 103
210
Estatuto De Roma
1. a) La pena privativa de libertad se cumplirá en un Estado designado por la Corte sobre la base de una lista de Estados
que hayan manifestado a la Corte que están dispuestos a recibir condenados;
b) En el momento de declarar que está dispuesto a recibir condenados, el Estado podrá poner condiciones a reserva de
que sean aceptadas por la Corte y estén en conformidad con la presente Parte;
c) El Estado designado en un caso determinado indicará sin demora a la Corte si acepta la designación.
2. a) El Estado de ejecución de la pena notificará a la Corte cualesquiera circunstancias, incluido el cumplimiento de las
condiciones aceptadas con arreglo al párrafo 1, que pudieren afectar materialmente a las condiciones o la duración de la privación de
libertad. Las circunstancias conocidas o previsibles deberán ponerse en conocimiento de la Corte con una antelación mínima de 45 días.
Durante este período, el Estado de ejecución no adoptará medida alguna que redunde en perjuicio de lo dispuesto en el artículo 110;
b) La Corte, si no puede aceptar las circunstancias a que se hace referencia en el apartado a), lo notificará al Estado de
ejecución y procederá de conformidad con el párrafo 1 del artículo 104.
3. La Corte, al ejercer su facultad discrecional de efectuar la designación prevista en el párrafo 1, tendrá en cuenta:
a) El principio de que los Estados Partes deben compartir la responsabilidad por la ejecución de las penas privativas de
libertad de conformidad con los principios de distribución equitativa que establezcan las Reglas de Procedimiento y Prueba;
b) La aplicación de normas de tratados internacionales generalmente aceptadas sobre el tratamiento de los reclusos;
e) Otros factores relativos a las circunstancias del crimen o del condenado, o a la ejecución eficaz de la pena, según
procedan en la designación del Estado de ejecución.
Artículo 104
1. La Corte podrá en todo momento decidir el traslado del condenado a una prisión de un Estado distinto del Estado de
ejecución.
2. El condenado podrá en todo momento solicitar de la Corte su traslado del Estado de ejecución.
Artículo 105
Ejecución de la pena
1. Con sujeción a las condiciones que haya establecido un Estado de conformidad con el párrafo 1 b) del artículo 103, la pena
privativa de libertad tendrá carácter obligatorio para los Estados Partes, los cuales no podrán modificarla en caso alguno.
2. La decisión relativa a cualquier solicitud de apelación o revisión incumbirá exclusivamente a la Corte. El Estado de
ejecución no pondrá obstáculos para que el condenado presente una solicitud de esa índole.
Artículo 106
211
Estatuto De Roma
1. La ejecución de una pena privativa de libertad estará sujeta a la supervisión de la Corte y se ajustará a las normas
generalmente aceptadas de las convenciones internacionales sobre el tratamiento de los reclusos.
2. Las condiciones de reclusión se regirán por la legislación del Estado de ejecución y se ajustarán a las normas generalmente
aceptadas de las convenciones internacionales sobre el tratamiento de los reclusos; en todo caso, no serán ni más ni menos favorables que
las aplicadas a los reclusos condenados por delitos similares en el Estado de ejecución.
Artículo 107
1. Una vez cumplida la pena, quien no sea nacional del Estado de ejecución podrá, de conformidad con la legislación de
dicho Estado, ser trasladado al Estado que esté obligado a aceptarlo o a otro Estado que esté dispuesto a hacerlo, teniendo en cuenta si
quiere ser trasladado a éste, a menos que el Estado de ejecución lo autorice a permanecer en su territorio.
2. Los gastos derivados del traslado de conformidad con lo dispuesto en el párrafo 1, de no ser sufragados por un Estado,
correrán por cuenta de la Corte.
3. Con sujeción a lo dispuesto en el artículo 108, el Estado de ejecución también podrá, de conformidad con su derecho
interno, extraditar o entregar por cualquier otra vía a la persona a un Estado que haya pedido la extradición o entrega para someterla a
juicio o para que cumpla una pena.
Artículo 108
1. El condenado que se halle bajo la custodia del Estado de ejecución no será sometido a enjuiciamiento, sanción o
extradición a un tercer Estado por una conducta anterior a su entrega al Estado de ejecución, a menos que, a petición de éste, la Corte
haya aprobado el enjuiciamiento, la sanción o la extradición.
3. El párrafo 1 del presente artículo no será aplicable si el condenado permanece de manera voluntaria durante más de 30
días en el territorio del Estado de ejecución después de haber cumplido la totalidad de la pena impuesta por la Corte o si regresa al
territorio de ese Estado después de haber salido de él.
Artículo 109
1. Los Estados Partes harán efectivas las multas u órdenes de decomiso decretadas por la Corte en virtud de la Parte VII, sin
perjuicio de los derechos de terceros de buena fe y de conformidad con el procedimiento establecido en su derecho interno.
2. El Estado Parte que no pueda hacer efectiva la orden de decomiso adoptará medidas para cobrar el valor del producto, los
bienes o los haberes cuyo decomiso hubiere decretado la Corte, sin perjuicio de los derechos de terceros de buena fe.
3. Los bienes, o el producto de la venta de bienes inmuebles o, según proceda, la venta de otros bienes que el Estado Parte
obtenga al ejecutar una decisión de la Corte serán transferidos a la Corte.
Artículo 110
1. El Estado de ejecución no pondrá en libertad al recluso antes de que haya cumplido la pena impuesta por la Corte.
2. Sólo la Corte podrá decidir la reducción de la pena y se pronunciará al respecto después de escuchar al recluso.
212
Estatuto De Roma
3. Cuando el recluso haya cumplido las dos terceras partes de la pena o 25 años de prisión en caso de cadena perpetua, la
Corte examinará la pena para determinar si ésta puede reducirse. El examen no se llevará a cabo antes de cumplidos esos plazos.
4. Al proceder al examen con arreglo al párrafo 3, la Corte podrá reducir la pena si considera que concurren uno o más de los
siguientes factores:
a) Si el recluso ha manifestado desde el principio y de manera continua su voluntad de cooperar con la Corte en sus
investigaciones y enjuiciamientos;
b) Si el recluso ha facilitado de manera espontánea la ejecución de las decisiones y órdenes de la Corte en otros casos,
en particular ayudando a ésta en la localización de los bienes sobre los que recaigan las multas, las órdenes de decomiso o de reparación
que puedan usarse en beneficio de las víctimas; o
c) Otros factores indicados en las Reglas de Procedimiento y Prueba que permitan determinar un cambio en las
circunstancias suficientemente claro e importante como para justificar la reducción de la pena.
5. La Corte, si en su examen inicial con arreglo al párrafo 3, determina que no procede reducir la pena, volverá a examinar la
cuestión con la periodicidad y con arreglo a los criterios indicados en las Reglas de Procedimiento y Prueba.
Artículo 111
Evasión
Si un condenado se evade y huye del Estado de ejecución, éste podrá, tras consultar a la Corte, pedir al Estado en que se
encuentre que lo entregue de conformidad con los acuerdos bilaterales y multilaterales vigentes, o podrá pedir a la Corte que solicite la
entrega de conformidad con la Parte IX. La Corte, si solicita la entrega, podrá resolver que el condenado sea enviado al Estado en que
cumplía su pena o a otro Estado que indique.
Artículo 112
1. Se instituye una Asamblea de los Estados Partes en el presente Estatuto. Cada Estado Parte tendrá un representante en la
Asamblea que podrá hacerse acompañar de suplentes y asesores. Otros Estados signatarios del presente Estatuto o del Acta Final podrán
participar en la Asamblea a título de observadores.
2. La Asamblea:
c) Examinará los informes y las actividades de la Mesa establecida en el párrafo 3 y adoptará las medidas que procedan
a ese respecto;
f) Examinará cuestiones relativas a la falta de cooperación de conformidad con los párrafos 5 y 7 del artículo 87;
g) Desempeñará las demás funciones que procedan en virtud del presente Estatuto y las Reglas de Procedimiento y
Prueba.
3. a) La Asamblea tendrá una Mesa, que estará compuesta de un Presidente, dos Vicepresidentes y 18 miembros elegidos
por la Asamblea por períodos de tres años;
b) La Mesa tendrá carácter representativo, teniendo en cuenta, en particular, el principio de la distribución geográfica
equitativa y la representación adecuada de los principales sistemas jurídicos del mundo;
213
Estatuto De Roma
c) La Mesa se reunirá con la periodicidad que sea necesaria, pero por lo menos una vez al año, y prestará asistencia a la
Asamblea en el desempeño de sus funciones.
4. La Asamblea podrá establecer los órganos subsidiarios que considere necesarios, incluido un mecanismo de supervisión
independiente que se encargará de la inspección, la evaluación y la investigación de la Corte a fin de mejorar su eficiencia y economía.
5. El Presidente de la Corte, el Fiscal y el Secretario o sus representantes podrán, cuando proceda, participar en las sesiones
de la Asamblea y de la Mesa.
6. La Asamblea se reunirá en la sede de la Corte o en la Sede de las Naciones Unidas una vez al año y, cuando las
circunstancias lo exijan, celebrará períodos extraordinarios de sesiones. Salvo que se indique otra cosa en el presente Estatuto, los
períodos extraordinarios de sesiones serán convocados por la Mesa de oficio o a petición de un tercio de los Estados Partes.
7. Cada Estado Parte tendrá un voto. La Asamblea y la Mesa harán todo lo posible por adoptar sus decisiones por consenso.
Si no se pudiere llegar a un consenso y salvo que en el presente Estatuto se disponga otra cosa:
a) Las decisiones sobre cuestiones de fondo serán aprobadas por mayoría de dos tercios de los presentes y votantes, a
condición de que una mayoría absoluta de los Estados Partes constituirá el quórum para la votación;
b) Las decisiones sobre cuestiones de procedimiento se tomarán por mayoría simple de los Estados Partes presentes y
votantes.
8. El Estado Parte que esté en mora en el pago de sus contribuciones financieras a los gastos de la Corte no tendrá voto en la
Asamblea ni en la Mesa cuando la suma adeudada sea igual o superior al total de las contribuciones adeudadas por los dos años anteriores
completos. La Asamblea podrá, sin embargo, permitir que dicho Estado vote en ella y en la Mesa si llegare a la conclusión de que la mora
se debe a circunstancias ajenas a la voluntad del Estado Parte.
10. Los idiomas oficiales y de trabajo de la Asamblea serán los de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Artículo 113
Reglamento Financiero
Salvo que se prevea expresamente otra cosa, todas las cuestiones financieras relacionadas con la Corte y con las reuniones de la
Asamblea de los Estados Partes, inclusive su Mesa y sus órganos subsidiarios, se regirán por el presente Estatuto y por el Reglamento
Financiero y Reglamentación Financiera Detallada que apruebe la Asamblea de los Estados Partes.
Artículo 114
Los gastos de la Corte y de la Asamblea de los Estados Partes, incluidos los de su Mesa y órganos subsidiarios, se sufragarán
con fondos de la Corte.
Artículo 115
Los gastos de la Corte y de la Asamblea de los Estados Partes, inclusive su Mesa y sus órganos subsidiarios, previstos en el
presupuesto aprobado por la Asamblea de los Estados Partes, se sufragarán con cargo a:
214
Estatuto De Roma
b) Fondos procedentes de las Naciones Unidas, con sujeción a la aprobación de la Asamblea General, en particular respecto
de los gastos efectuados en relación con cuestiones remitidas por el Consejo de Seguridad.
Artículo 116
Contribuciones voluntarias
Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 115, la Corte podrá recibir y utilizar, en calidad de fondos adicionales,
contribuciones voluntarias de gobiernos, organizaciones internacionales, particulares, sociedades y otras entidades, de conformidad con
los criterios en la materia que adopte la Asamblea de los Estados Partes.
Artículo 117
Prorrateo de las cuotas
Las cuotas de los Estados Partes se prorratearán de conformidad con una escala de cuotas convenida basada en la escala
adoptada por las Naciones Unidas para su presupuesto ordinario y ajustada de conformidad con los principios en que se basa dicha escala.
Artículo 118
Comprobación anual de cuentas
Los registros, los libros y las cuentas de la Corte, incluidos sus estados financieros anuales, serán verificados anualmente por un
auditor independiente.
Solución de controversias
1. Las controversias relativas a las funciones judiciales de la Corte serán dirimidas por ella.
2. Cualquier otra controversia que surja entre dos o más Estados Partes respecto de la interpretación o aplicación del presente
Estatuto que no se resuelva mediante negociaciones en un plazo de tres meses contado desde el comienzo de la controversia será
sometida a la Asamblea de los Estados Partes. La Asamblea podrá tratar de resolver por sí misma la controversia o recomendar otros
medios de solución, incluida su remisión a la Corte Internacional de Justicia de conformidad con el Estatuto de ésta.
Artículo 120
Reservas
Artículo 121
Enmiendas
1. Transcurridos siete años desde la entrada en vigor del presente Estatuto, cualquier Estado Parte podrá proponer enmiendas
a él. El texto de toda enmienda propuesta será presentado al Secretario General de las Naciones Unidas, que lo distribuirá sin dilación a
los Estados Partes.
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Estatuto De Roma
2. Transcurridos no menos de tres meses desde la fecha de la notificación, la Asamblea de los Estados Partes decidirá en su
próxima reunión, por mayoría de los presentes y votantes, si ha de examinar la propuesta, lo cual podrá hacer directamente o previa
convocación de una Conferencia de Revisión si la cuestión lo justifica.
3. La aprobación de una enmienda en una reunión de la Asamblea de los Estados Partes o en una Conferencia de Revisión en
la que no sea posible llegar a un consenso requerirá una mayoría de dos tercios de los Estados Partes.
4. Salvo lo dispuesto en el párrafo 5, toda enmienda entrará en vigor respecto de los Estados Partes un año después de que los
siete octavos de éstos hayan depositado en poder del Secretario General de las Naciones Unidas sus instrumentos de ratificación o de
adhesión.
5. Las enmiendas a los artículos 5, 6, 7 y 8 del presente Estatuto entrarán en vigor únicamente respecto de los Estados Partes
que las hayan aceptado un año después del depósito de sus instrumentos de ratificación o aceptación. La Corte no ejercerá su
competencia respecto de un crimen comprendido en la enmienda cuando haya sido cometido por nacionales o en el territorio de un
Estado Parte que no haya aceptado la enmienda.
6. Si una enmienda ha sido aceptada por los siete octavos de los Estados Partes de conformidad con el párrafo 4, el Estado
Parte que no la haya aceptado podrá denunciar el presente Estatuto con efecto inmediato, no obstante lo dispuesto en el párrafo 1 del
artículo 127 pero con sujeción al párrafo 2 de dicho artículo, mediante notificación hecha a más tardar un año después de la entrada en
vigor de la enmienda.
7. El Secretario General de las Naciones Unidas distribuirá a los Estados Partes las enmiendas aprobadas en una reunión de
la Asamblea de los Estados Partes o en una Conferencia de Revisión.
Artículo 122
1. No obstante lo dispuesto en el párrafo 1 del artículo 121, cualquier Estado Parte podrá proponer en cualquier momento
enmiendas a las disposiciones del presente Estatuto de carácter exclusivamente institucional, a saber, el artículo 35, los párrafos 8 y 9 del
artículo 36, el artículo 37, el artículo 38, los párrafo 1 (dos primeras oraciones), 2 y 4 del artículo 39, los párrafos 4 a 9 del artículo 42, los
párrafos 2 y 3 del artículo 43 y los artículos 44, 46, 47 y 49. El texto de toda enmienda propuesta será presentado al Secretario General de
las Naciones Unidas o a la persona designada por la Asamblea de los Estados Partes, que lo distribuirá sin demora a los Estados Partes y
a otros participantes en la Asamblea.
2. Las enmiendas presentadas con arreglo al presente artículo respecto de las cuales no sea posible llegar a un consenso serán
aprobadas por la Asamblea de los Estados Partes o por una Conferencia de Revisión por una mayoría de dos tercios de los Estados Partes.
Esas enmiendas entrarán en vigor respecto de los Estados Partes seis meses después de su aprobación por la Asamblea o, en su caso, por
la Conferencia.
Artículo 123
Revisión del Estatuto
1. Siete años después de que entre en vigor el presente Estatuto, el Secretario General de las Naciones Unidas convocará una
Conferencia de Revisión de los Estados Partes para examinar las enmiendas al Estatuto. El examen podrá comprender la lista de los
crímenes indicados en el artículo 5 pero no se limitará a ellos. La Conferencia estará abierta a los participantes en la Asamblea de los
Estados Partes y en las mismas condiciones que ésta.
2. Posteriormente, en cualquier momento, a petición de un Estado Parte y a los efectos indicados en el párrafo 1, el Secretario
General de las Naciones Unidas, previa la aprobación de una mayoría de los Estados Partes, convocará una Conferencia de Revisión de
los Estados Partes.
3. Las disposiciones de los párrafos 3 a 7 del artículo 121 serán aplicables a la aprobación y entrada en vigor de toda
enmienda del Estatuto examinada en una Conferencia de Revisión.
Artículo 124
Disposición de transición
No obstante lo dispuesto en los párrafos 1 y 2 del artículo 12, un Estado, al hacerse parte en el presente Estatuto, podrá declarar
que, durante un período de siete años contados a partir de la fecha en que el Estatuto entre en vigor a su respecto, no aceptará la
competencia de la Corte sobre la categoría de crímenes a que se hace referencia en el artículo 8 cuando se denuncie la comisión de uno de
esos crímenes por sus nacionales o en su territorio. La declaración formulada de conformidad con el presente artículo podrá ser retirada
en cualquier momento. Lo dispuesto en el presente artículo será reconsiderado en la Conferencia de Revisión que se convoque de
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Estatuto De Roma
Artículo 125
1. El presente Estatuto estará abierto a la firma de todos los Estados el 17 de julio de 1998 en Roma, en la sede de la
Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. Posteriormente, y hasta el 17 de octubre de 1998, seguirá
abierto a la firma en Roma, en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia. Después de esa fecha, el Estatuto estará abierto a la firma
en Nueva York, en la Sede de las Naciones Unidas, hasta el 31 de diciembre del año 2000.
2. El presente Estatuto estará sujeto a la ratificación, aceptación o aprobación de los Estados signatarios. Los instrumentos de
ratificación, aceptación o aprobación serán depositados en poder del Secretario General de las Naciones Unidas.
3. El presente Estatuto estará abierto a la adhesión de cualquier Estado. Los instrumentos de adhesión serán depositados en
poder del Secretario General de las Naciones Unidas.
Artículo 126
Entrada en vigor
1. El presente Estatuto entrará en vigor el primer día del mes siguiente al sexagésimo día a partir de la fecha en que se
deposite en poder del Secretario General de las Naciones Unidas el sexagésimo instrumento de ratificación, aceptación, aprobación o
adhesión.
2. Respecto de cada Estado que ratifique, acepte o apruebe el presente Estatuto o se adhiera a él después de que sea
depositado el sexagésimo instrumento de ratificación, aceptación, aprobación o adhesión, el Estatuto entrará en vigor el primer día del
mes siguiente al sexagésimo día a partir de la fecha en que haya depositado su instrumento de ratificación, aceptación, aprobación o
adhesión.
Artículo 127
Denuncia
1. Todo Estado Parte podrá denunciar el presente Estatuto mediante notificación por escrito dirigida al Secretario General de
las Naciones Unidas. La denuncia surtirá efecto un año después de la fecha en que se reciba la notificación, a menos que en ella se
indique una fecha ulterior.
2. La denuncia no exonerará al Estado de las obligaciones que le incumbieran de conformidad con el presente Estatuto
mientras era parte en él, en particular las obligaciones financieras que hubiere contraído. La denuncia no obstará a la cooperación con la
Corte en el contexto de las investigaciones y los enjuiciamientos penales en relación con los cuales el Estado denunciante esté obligado a
cooperar y que se hayan iniciado antes de la fecha en que la denuncia surta efecto; la denuncia tampoco obstará en modo alguno a que se
sigan examinando las cuestiones que la Corte tuviera ante sí antes de la fecha en que la denuncia surta efecto.
Artículo 128
Textos auténticos
El original del presente Estatuto, cuyos textos en árabe, chino, español, francés, inglés y ruso son igualmente auténticos, será
depositado en poder del Secretario General de las Naciones Unidas, que enviará copia certificada a todos los Estados.
EN TESTIMONIO DE LO CUAL, los infrascritos, debidamente autorizados por sus respectivos Gobiernos, han firmado el
presente Estatuto.
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