Smith,Caol A. 20M.

'lnbrpretacianes
norteamaricanas
sabreIa nza y et
racismo en Guatenala",
en;ARENAS Claray otros(eds,)2004.
BIANCHI,
l,Racismo enGuatemala?
Abrlendo
etdebate
sobreuntematabü.AVANCSO,
Guatemala. 3
p p . 1 1 t- 16 5 .
_Interytretac ionesnarte americ anas
sobre Ia razq y eI racismo en
Gutatemala
Una genealogia critica
Caml A. Smith
En esteensayose expone el tema de c6mo
distintas generacionesde
anhop'logos norteamericanosse han ocupado
de roJtu*", de raza y
curturaen Guatemala.se trata d" rn" hirtou"
q,r" ,ro, Ä.r"lt q,r" t
habido considerabledificultaa *ri " "
que,bäsicamente;ruimo'"0öiidä"-i"","öTf,:ä;ää3
"o"
latinoamericanal de que oo
r""ir*o en Am.rica Latina.
Tambi'n sugiero que nuestra"*irtu
confusi'n"i enhe raza y racismo es el
resultado de hes herencias colonialisias
de la nues.,o
etnocentrismooccidental (en realidad, "*;öaä:
norteamericano; äU." el sig_
nificado de raza; la escasaatenci'n
que hemosprestadoa Ia forma
quelos sistemasde parentes"oy en
r"rä potencian las jerarquias
y g€nero;y la inadecuada diferen"i"Jioo de raza
que hemos hecho entre los
dos conceptosanaliricos mäs r*p#t"r^a"
cultura' A continuaci'n voy l" *t ra?.ay
r;r;;i.Lrevemente ";;"iä,
estos
" hes temas.
Los antropölogos norteamericanos
pensabanque el racismo no
existfaen Guatemalaporque
no segufalas reglascomunes de
propia sociedad (norteamericanal"pa." nuestra
razadeterminada. vimos c6mo ubiä ; ;;;;;a en una
gJJ" ; Guatemalaque consideraba
tener una ascendenci:
Trr "".äpu"ä"h"
llos que consideraba indios, comoiö.iärä a aqu6_
i*piäi""aoles alcanzar poder politico
 y
y d-iscriminändolesen cualquier sentido social-Sin embargo,nuestra Kaza y cultura no son s61o conceptos analiticos dificiles
distintos momentosde la
propia experienciacultural con una forma distinta de racismo (cuya escurridizäs-cada uno de ellos utilizado en
para explicar <cientificamente) la natu-
ä;f"."o.iu no estudiamosanaliticamente) nos indicaba que losguate- lirtoti" de la antropologia
gruposhumanos. Ademäs,
maltecos no eren racistas. En este ensayo describo algunas de las Äiu^de las diferenciasexistentesent.re
conceptos ideolöeicos dificiles y escurridizos-ligados
diferencias que se han daCo de forma sistemätica entre el racismo tarnbi6nson
popular como forrnas para comprelder
norteamericanoy el guatemalteco{latinoamericano}y expongoalgu- äoU" ri en Ia irnaglnaciön
generalmente
nas de las formas en las que esasdiferencias limitaban nuestra forma iroO*roor socialesy politicos- la cual los representa
interpretacio-
de entenderrarÄy racismo en Guatemala' Ina,bi.., unidos que separados.Ambos conceptosson
simultäneas de las diferencias
our,rupruruntacionesy explicaciones
Por razones similares, Ios anhopölogos norteamericanos esfu- f,u."t"t. Ambos encalnan un deseo de conocer las diferencias
diaron poco los sistemas gUatemaltecosde parentesco y matrimonio- y
huor*"tt sobrequd vincula las caracteristicasffsicas somäticas
de
Una eväluaciön räpida de las präcticas de parentesco de distintos los individuos y (u6 es inherente a la naturaleza de grupos sociales
guatemaltecosnos moströ que esas präcticas eren <<normales> {es
oarticulares. Ademäs, ambosconceptosderivanhistdricamentede una
y manifiestas -a diferencia de los sistemas de y
äecir, patriarcales)
<abiertos>, äeterminadaexperiencia con el colonialismo, el nacionalismo con
parentescomabilineales o los s-istemas de mahimonios a y poder a las perso-
se estudiaron ierarquiaspolitiias que atribuyen una posiciön un
io, q,r" los antropölogos prestaron tanta atenciön. No .r"r Uätaodoseen cliferenciasevidentes que tienen efectos culturales
algUnascalacted;ticas muy particulares s imFortantes de los usos de ybioldgicos que no pueden distinguirse fäcilmente entre sf. sostengo
päentesco y matrinroniales porque no habian surgido teorias sisi- äqui que, aunque se pensabaq'e los conceptosde r_a4y c'ltula elan
iicativas sobrelos lazosexistentesentre 6stasy las relacionesde clase, ,ontpätut particular de la antropologia,no ha habido un suficiente
casta,razay etnia sino hasta bastante recientemente -particularmente estuäioteörico de los mismos por parie de los antropölogos,los que
"ia
forrnuladai por acaddmicas feministas.Y En este ensayo se sugiere todaviatienen pendiente tratar directamentelos aspectospoliticos de
que las ideologias relativas a qsängr€ y sexoD(parentescoy matri- razay cultura.3/
monio) reproducengmpos yrelaciones de clase,casta,razayehicos.
Tambi6n iostengoque ios antropölogos necesitanprestarmucha mis Los antrop6logos,desdeFranz Boas,han sostenidoque raza y
atenciön a los sistemas familiares <nornales>2/ (en vez de concen- cultura son fenömenos completamente sepalados,y que la cultura
trarse en las präcticas de parentesco <<ex6ticasD) pa-rapoder ver los expiica mejor que la raza las diferencias humanas. sin embargo,no
vinculos existentes entre los sistemas laciales y de parentesco. söio por insistir en esa separacidn, la antropoiogia podrfa cambiar
sistemas completos de interpretacidn del mundo o hacer que
t desaparezca efracismo. Paraque podamosponer en tela de juicio la
Enhe los acad6micosque hatan los temes de raza y g6nem la rnis importante es
l tendäncia de la humanidad a dar una expiicacidn natural al orden
verena lvfari.inez-Alier (a97al, cuyo estudio sobre el matrimonio y el concubinato
entre los cubanos {el sig}o XIX mosffi c6mo el parentesco era la instituci6n social
socialen el que vive, atribuydndole diferenciasintrinsecas (lascuales
que principalmente conformaba el racismo de Cuba- Otros estudios importantes que puedenfäcilmente considerarsetanto biolögicascomo culturalesJen
r'tg"ä" tdnica similar fuemn escritos por Ann Stoler {1992} y Ana Maria Alonso vez de ah'ibuirselo a las relacionesde podel entre los pueblos, hemos
t19951.Vdasetambidn Maria Elena CasausArzü {1992)' de ocuparnosde c6mo el potler y Ia ideologfa (asi collro la cultura y la
tl
Tomo iafrase -sistemafamiliaf deG- Y\Iilliamskinner, quienestädesarrollando
una nueva forma de esfudiar los temas de parentesco basändoseen la riqueza de los tl
Tanto ]oel Kahn {1989) como Walter Benn Michaels (1992, 1995} y Verena
lrabajos sobre g6nero, demografia y präcticas de parentescoeumpeas esfudiadas por
trabaio de Margery Wolf {197a)sotrre Stolcke (19951han sef,aladouno o mäs problemas del concepto antropolögico de
Jackäoody lriiZZl asi "o-o *l revolucionario cultura en reiacidn a cömo trata ei tema de la raza.
los sistemasfamiliares chinos-
113
t12
biologfa) crean diferenciasque seconviertenen jerarquias excluyentes
-algo que pocosantropdlogoshan hecho.Afirmo que los antropölogos,
desdelos tiempos de Boas,no han tratado el tema del racismo popular
y que durante la posguerra de la SegundaGuerra Mundial evadimos
cada vez mäs el tema de laraza y el racismo.
Cada una de estas afumaciones suscitan cuestiones dificiles v
discutibles, especialmente porque se refieren al racismo y a fallas
analfticas. Es por esto que analizd cdmo los antropölogos desarro-
llaron y utilizaron genealögicay especificamente los conceptos de
raza, cultura y etnicidad -tal y como se aplicaron al contexto social de
Guatemala en los distintos debates que se han dado sobre las
relaciones entre indios y ladinos en Guatemalay sobre si Guatemala
es o ha sido una sociedadracista o no. {Aiado la etnicidad a los temas
en discusidn ya que 6sta fue una forma importante en que los
anbopölogos confrontaron la distinciön entre raza y cultura cuando
describian a los indios y ladinos de Guatemala,as(como una forma de
evitar el tema de raza y racismo.) Quiero dejar claro que no me estoy
distanciando de los problemasque hemos tenido con los conceptosde
raza, etnicidad y cultura. Aunque ahora critico las formas en las que
hemos utilizado estos conceptos, sölo he llegado a esta postura en
af,os recientes, inspirada sobre todo por mis lecturas y discusiones
con acad6micosmiembros de minorfas de color,los cualesestänen la
actualidad haciendo una critica importante sobre la antropologia
<colonialista>.Estaslecturas y discusionesme han convencido de que
es critico para la antropologia enfrentar las inc6gnitas existenciales,
no tratadas hasta ahora, sobre cdmo hemos teorizado los temas de
raza, etnicidad y cultura.
Los dosperiodos de la antropologia norteamericanaespecializada
en Guatemalaen los que me voy a centrar mäs son el de 1940-1g60(la
primera generaciönJy el de 1970-1990(la segundageneraciön).Unos
pocos antrop6logosculturales hicieron tratrajo de campo durante los
af,os 1930,pero, como continuaron su habaio a lo largo de los 1g40
y los 1950,los incluyo dentro de la primera generaciön,que es cuando
la antropologia cultural norteamericana desanollö una postura
unificada y hegemdnicasobre las relaciones de raza y culfura entre
indio y ladino, postura que todavia ha de ser cuestionada por los
114
acadfmicosmäs j6venes.a/hesento un breve contexto histörico para
estageneraciöny examino un periodo de hansiciön en los aflos 1.960,
jugd
durantelos cualesun socidlogomefcano, Rodolfo Stavenhagen,
un papel critico. Despuds,examino la segundageneraciön de aca-
ddmicosnorteamericanos,los cuales se dividen en dos Srupos, uno
particularmenteinteresadoen temasde polftica econömicay oho inte-
iesadoen temasde lacultura maya.Iamayoria de los investigadoresde
la segUndageneraci6nfdentro de los cualesme incluyo a mi misma),
influidos por la crecientereputaciön de la teoriamarxista de la escuela
estadounidensey por el fermento revolucionario de Amdrica Latina,
cuestionöciertoselementosdel enfoquede laprimerageneraciönpero,
bäsicamente,aceptdla visidn de razay cultura de [a misma. Menciono
una tercera generaciön de anhopölogos norteamericanos que comen-
7Äronatrabajar en los arlos 1990,pero no los estudio en detalle ya que
sus publicacionesrecidn estän viendo la luz. Estosacaddmicosestän
comenzandoa criticar la visiön que la segundageneraciön tiene sobre
las relacionesde raza, en parte porque se han visto influidos por los
escritos de los intelectuales mayas. Bn mis conclusiones intento
explicar por qu6 los antrop6logos norteamericanos han tenido tanta
dificultad al hatar el concepto de raza en Am6rica Latina y examino lo
que los acaddmicosahora califican como racismo cultural.
Influencias en IaAnhopologia sobre Guatemala
en el periodo anterior a la Segunda Guerra Mundial
Antes de la SegundaGuerra Mundial, los anhopölogosculturales de
Norteamdricaconsiderabanque su especialidadera el estudio de <lo
"l La mayoria de los acaddmicosnorteamericanosque abordo son mäs o menos
fieles a los problemas segün fueron formulados por su generaci6n en la academia
estadounidense. Algunos cubren un periodo mayor que una generaci6n y han cam-
biado sus ideas sobre los temas. Es dif(cil encasillar a estos acad6micos.Un buen
eiemplo de esto es Charles Wagluy, el cual claramente jug6 un papel en la transiciön
de la primera a la segundageneraciön. Richard Adams mantuvo con fuerza algunos
de los puntos de vista de la primera generaci6n,sin embargo,erabastanteoriginal en
la forma en la que los aplicatray, ademäs,recientementeha repudiado algunasde sus
teorias mäs tempranas(Adams 199a). Me gustariapensar que ahora estoy cuestio-
nando algunas de las postuas que adopt6 durante los aflos 1970.
115

primitivo> (stocking 1995), cediendo a la sociologia el estudio de la
cultura <,moderna>>, que era considerada por la mayoria de los aca-
ddmicos de la 6poca esencialmenteeuropea o de origen europeo.[6
mayor parte de nuestro trabaio en aquella 6poca se cenhaba sa
sistemas sociales muy pequeios y aislados (muchos de ellos en
sociedad.es tipo isla), que existfan en los territorios colonialeso en las
märgenesde los modernos estados-nacionales. El conceptode culfura
primeros anhopdlogos -Franz Boas y sus
utilizado por estos
estudiantesde los EE.UU. y Bronislaw Malinowski y sus esfuöantes
de Gran Bretafra- casi ciertamente llevaba en si las semillas de las
dificultades que nosotros ibamos a tener con el concepto.Dejo aohos
la critica de tal semilla, puestoque me alejaria demasiadode los temas
que quiero exponer aqui.t/ Sin embargo, examino brevemente una
presunci$n importante que sostenfancasi todos los antropölogos antes
äe los 1960:la presuncidn de que la cultura occidental (generalmente
considerada en singular) era rnäs dinr{rnica y transformadora que las
culturas no occidentales.
Los anbopölogos tenian diversasexplicacionessobrela dinämi66
occidental (valores, capitalismo, religi6n), pero la nayoria de ellos
crefa que la mäs dinämica cultura occidental transformaria de forma
invasiva las menos d.inämicasculturas no occidentales,a tal punto
que las ültimas desaparecerian.No es sino hastaahora que la mayoria
de nosotros admite que todas las culturas rnudan y cambian cons-
tantemente tantn por medio de dinämicas internas (las cuales operan
en las sociedadesmäs <simples>al igual que en la nuestra) e influen-
cias externas (que operan talto en nuestra sociedadcomo en las mäs
"l C,eorgeStocking {1993) ha hecho un comienzo sobre este pmyecto. Stocking
sostiene que el paso dado por Boas para dividir un paradigna racio-cultural
decimon6nico en las corrientes opuestasdel deterncinismo biol6gico y cultural tendia
a rcificar y esen-cializartarrto el concepto de raza,como el concepto de culhrra Pienso
que eslo no capta la nahrraleza del problema. Era importante mostrar gue los dos
änceptos describfan distintos fendmenos,pues{oque lo hacian- Sin emlxXgo'tambifn
erairnportante moshar qu.eninguno de los dosconceptosgldia explicar adec.uad,axrente
las diierencias hunranas: paü esta ültima talea em necesario mostrar que [ay
in-rportantesdiferencias humanasdentro de las razasy culturas, lo cual requeria prestar
atenci6na las relacionesde poder.{Sobreestepunto, v6aseKah& 1SBg.}
116
antropölogosque
<simples>),a lo largo de la historia.6/Algunos
naturalezaparticular de
OuU"j"to" en Guatemalaquerian capturar la
<tradicicnal> maya antes de que fuese absorbida por la
i,
"riart"occidental{ladina); otros querian estudial la nal.uralezadel
ätr*"
ladina. Pero,casi
,"mtio o <modernizacidn>de las culturas maya o
que las culturas <tradicionales> mayas serfan
todos entendieron
en vez de crear
englobadaspor formas culturales mäs occidentales,
su; plogas variantes <<modernas>. Por consiguiente,asumieron que
que vieron en
i" *"yot parte de las variaciones y cambiosculturales
lo, *y"r eran el resultado de una p6rdida cultual o ladinizaciön
(occidentalizaci6n).Esta presuncidn no era ünica de aquellos norte-
tipica de
americanosque estudiaban las culturas mayas,sino que era
como
utr periodo histdrico completo de la antropologiay de la forma
6staseocupabade la cultura y el.cambio.
La influencia mäs importante que recibiö la primera generaciön
de antropdlogosnorteamäricanosque estudiaronGuatemalavino de
Robert Redfield, el cual rcalizl la mayor parte de su trabajo en
M6xico.Al querer hacerun estudio comparativosobrela cultura maya
y suscambiäs,Retifield designö a su estudiantede la universidad de
Lhi""go, Sol Tax, para que organizaseel estudio de la cultura maya
enGuätemala.t/Redfield realizö su primer trabajode campoen Tepoz-
tlän, Morelos (un centro de reclutamiento zapatista)en 1926,
justo
despudsde la revolucidn medcana. La monogxafiade Redfield sobre
teptzdan (1930), que constituyö la basepara su estudio de las cul-
turas<follor(tradiciänales/ indigenas) de M6xico y Guatemala,presta
'fodo su traba-
relativamentepoca atenciön a la revotrucidnmexicana.
jo posteriorseflevd a cabo e'tre los mayasy mestizos,principalmente
u/
Erto punto de vista lo compartian igualmentelos evolucionistas,los seguidores
de Boas,los funcionalistas estructurales britSnicos y los estructuralistas franceses
{v6aseStocking 1995).
quien edit6
' I La relaci6n entre Re<lfieldy Tax Faedescritapor Rubinstein {1991),
una ddcadade correspondencia entle los dos acad6micos. Tax recibid apoyo de la
institucidn carnegie para su trabajo de campo en Guatemala,entre 1934 y 1941'
un periodo.
despuesie ofrecieranipoyo para su trabajo de canrpoen chiapas durante_
Redfield, quien fue Investigador
Duranteeste tiempo estuvo baio la supervisidn de
Asociaciode la Instituciön Carnegiede 1930 hastalos 1940'
1. 77

en Yucatän.E/Despu6sde 1935, Redfield se dedicd principalmente x
supervisarel trabaio de sus pupilos, tales como Alfonso Villa Roias,
un maesho que conocid en las aldeas 5rucatecasque 6l esfudiö; sin
embargo,Redfield era muy sistemätico en relacidn a lo que sus esfu-
diantesinvestigabantanto enYucatän como enGuatemala.Estableci6
un sistemapor medio del cual las notas que tomaron la mayorfa de los
etndgrafos de la primera generaci6n que estudiaban a los mayas se
depositaron en la Universidad de Chicago, y al cual tenfan acceso
tanto 61 como ohos que trabaiaban en el programa. I^a direcciön y
cenhalizaci6n de los programas de habajo de campo que Redfield
buscö, hizo que su huella marcara profirndamente los estudios sobre
Guatemala(vdaseRubinstein 1991).e/
El trabaio de Redfield sobre Yucatän I'a Culturu FokdeYuatan
(1941)trataba cuatro comunidades: la (principalmente mestiza/ladina)
ciudad y capital, M6rida: la ciudad-mercado dtnicamente dividida de
Dzitas; una comunidad maya relativamente uniforme (Chan Kom),la
cual6l consideraba<(campesina>; y una aislada comunidad maya de
Roo (Tusik), la cual 6l consideraba <hibal>. Estas comu-
Quintana
nidades constituian lo que Red-field consideraba el <contiuum folk
urbano> -que colocaba a los pueblos rurales mayas mäs <<simpleoen
el espacio/olk y a los pueblos <civilizados> (occidentalizados)en el
eqncio urbano-donde präcticamente todo el mundoera mestizo.Ia
prenisa bäsica era que cuanto mäs distante se enconhase una comu-
nidad de la ciudad <moderna>r,mäs <<pre-moderna>seria su cultura.
De hecho, los mayas <tribales> de Quintana Roo tienen sus origenes
ul
Siguiendo a los arque6logos, principalmente Alfred KidderySylvanus Morley,
quienes financiados por la Instituciön Carnegie comenzaron a hacer esfudios serios
sobrelos periodos cläsico y postcläsico de las ruinas mayas de ChichänltzA en 1924,
Redfield llevö a catro trabaio de campo en la cercana Chan Kom en 1933, como
Investigador Asociado de la Institucidn C-arnegie(Sullivan 1989)-
n
I El proyecto de Redfield sobre el sur de M€xico y Guatemalase llevd a cabo,apmxi-
madamente,desde1930 hasta 1944, inclusive- Fue organizado de forma muy similar al
programaHarvard{hiapas de EvonVogt, elcualcomenzövariasddcadasdespu6s(v6ase
Vogt1995),enelsentido de queRedfield,comoVogt, seleccionatraestudiantespaxaque
examinasenelementos particulares de temas que 6l queria que se investigaran-Tanto
Redfield como Vogt desdeframnbastante los anSlisi5 histörico-politicos.
118
y los trabajadoresde las plantaciones
bistöricos en los campesinos
del siglo XIX (entreindios
a causade la <guerrade castas>r
ä-erpos"iaos
y se asemeiaban a los mayas (prehistdricos> tan poco
,, mestizosJ
XX (Sullivan 19Bg).
äomolor mayasurbanoso campesinosdel siglo
su
i"zuo Redfield, sin embargo, eran las culturas las que ejercian
en vez de al conhario, por lo que no moströ
inäuencia en la historia
cultural en
Ispecial inter6s por colocar sus modelos del condnuum
peispectivahistdrica.
Al estudiar a los campesinosy a los pobladoresurbanos en vez de
los pueblos tribales, adoptar un amplio punto de vista sobre
el con-
textä regional y de clase de los sistemasculturales y hatar la conexiön
entre li gente urbana con la rural denho de la misma sociedad,
nuan"ta ie convirtiö en un importante pionero de la anhopologia.to/
y
Sin embargo, su estudio de las culturas maya, mestiza./ladina
occidental desde el punto de vista de la historia y la <civilizacidn>
apoyabamäs que cuestionaba el pensamientoesencialista sobre la
,äu y la cultura.l'l Redfield y la generaciönque 61formö prestaron
muy poca atenciön a los sucesoshistörico-politicos (tales como las
re.räluciones)o a los procesosideol6gicos(cömolas nacionesdefinian
a los indios o gfupos 6tnicos), tampoco hicieron distinciones si8-
nificativas en su tlabaio entre Mdxico y Guatemala:ambaseran parte
de Mesoam6rica, un ärea que ellos s6lo definieron en tdrminos
culturales. Bäsicamente,se vefan a sf mismos estudiando dos <.cul-
turas>r, la espaf,olay la maya (siendo los antropölogoslos expertosen
en la
ellasen vez de los historiadores)en una situaciön de <<contacto>,
que la economia politica y la ideologia no eran significativas.
Quizä la postura mäs consecuenteadoptadapor Redfield y sus
estudiantes,desde el punto de vista de los temas aqui hatados, fue
defender que el cambio y la modernidad estän asociados con las
culturas uibana y mestiza (ladina], mientras que la inmÖvilidad y la
'oI to Culhttu FoIkde Yucstön fue citado por casi todos los primeros antropdlogos
latinoamericanos porque era uno de los primeros estudios antropolögicos de los
campesinosy de la modernizacidn, temas clave para los latinoamericanistas.
tt/
M,r"h", han sido las criticas al conü'nuum folk-urbano de Redfield. Para un
efemploespecifico sobre Guatemala,v6aseHawkins (19S3).
119
 enfoquemäsqueenlaformac6moentendianrazaycultura.Elgrupo.
tradicifn son caracteristicasde las culturas mayas,expresandoasi la del <salvaie>al estilo de Boas"/
buscaba
oue hacia ta etnografia
nocifn de que la modernizaciön sdlo llegaria a ios latincarnericanos uadi"cionalesen äreas remotas
(tales corno Huehue
:;;;;td;d;
indfgenas po, medio del mestizaie o la ladinizaci6n. Redfield y sus <<modetnasD en la vida indigena
tenango),dond'e f"t"i"tt"ti"nes
estuäiantei tenian claro que el urestizajeera un procesotanto culfural tp Wisdom L940;Wagley 184x' 1949;La
Farge
ä*".iti'*.nimas
como bioldeico y pusieron dnfasis en los elementos culturales' Sin "; penetrar i" oet*ttcia> de la cultura
histdrico de Red-fielddaba a entender que los is+z; Aakes1951J,para pocler "" boasiana
**b".go,
ä; a" q"" ää*p"tätiese' Sölo una antropdioga
pueblo-sse"I-*oäeio
modernizarian y llegarian-a sef,sujetos histr5ricossölo si ""*; 9ät"
Al crear un cbnfunuumcul- trabajöenun*oor"ipiograndeycomercial[Bunzell'952)ylohizo
participaban en la clrltura <<occidental>- mayoressobrevieias <tradiciones>'
principaimente con informantes
iural que iba desde el mäs europeoal menos europeo y eqliparar las de Chicago trabaiaron
culturas dentro de ese continuum con un mayor o menor potencial Los antropdlogos in-fluidos por la escuela
para la hansformaciön culfural, los anhop6iogos como Redfield no dei occid.entemedio, un äreamapeada
sobretodo en las ti;;r;lds para
,6lo drb"o un tinte esencialistaal concepto de cultura, sino que {se (19371en los aflos 1930'preparändose
u"rri"ai"a" po. Soiio Estos
podria decir) parcialmente lo biologizaban- fiPoöia ser accidental el ro.m"äo, por-Redfield..'nl
ia afluencia de ro, "rt"ai"ntus
que todos u[nOttor que s€ enconhaban en la cüspide de la rinica y nüclu"tlot' donde se podia
eligieron asentamientos peqr'leflos.
civilizacidn progresista identilicada por ellos, la occidental, fueran partiiular fenbaseal O"Pio de reco-
seleccionar,, "p.oUi**"to"äu
especialmente las aldeas
todos ublancäsui) El modelo semievolucionista de Redfield permitia nocimiento de Chicago)' Tax recomendö
que los individ.uos cambiasen -por medio de la aculturacidn u poco corrientescaracteristicasestän
alrededordel lago Rtiltan {cuyas y
occidentali"aciön por lo que no era un paradigma <cläsicamente> descritas en Tax, ö;i;;to"e siendo compactas' tradicionales
eran una buena eleccidn para
racista; pero, clesdeel momento en que no perrnida que ciertas culturas
12/ relativamente homoge"lut al^interior'
camblasen,indirectamente apoyabacreenciasy präcticas racistas' poco-enaquellascomunidades
un anälisis funcionai. se trabaid muy
quetenfanunnümerosignificativotantodeindios"oTo9"ladinos:
ta primera generaciön norteamerisanäl 19410-1960 orieute de Guatemala'
la excepciön fue San LuIs Jilotepequffiel
(GiIIin' 19511 un soci6logo (Tumin'
y
Iniciaimente existian dos escuelasde antropologia especializadasen estud.iadopor un
""""p"ftgo en las zonasde las plantaciones'
Guatemala, la escueLaboasiana,con Franz Boas como profesor en la 1g52J.Ningün
""*pOiosotabaiö
Universidad de Columbia [o sus estudiantes en varios otros nuevos d o n d e c a s it o do s l o s l n a y a s e r a n t r a b a i a d o r e s a s ade
gran cantidad mayasque
lariados;pocos
yla escuelade RedJieldfmuy influida por Radcliffe-Brown y
puntos)-opologia tomaron.en cuenta y ningrlT o estudidla
i" social britänica), formada en la Universidad de
y
Chicago. LoJdor grupos diferian bäsicamente en su metodologia
"*t
los antropdlogosboasianos(talescomo
Wisdom' La Farge'
"/ Al;goal qoe Redfield, lugaresrnäs remotos y aislados
Wagl"y) tenian r" i*p'"'ii* 9t lr1:-tot
"q"ioät"aä mäs a los mayasprehist6ricos'
t'f
L^idu de Redfield sobrecömo la modernizaci6n funcionaba con
respectoa las que pudiesen enconüar t"
"tu*"l"ti"n
culturas indigenas se vio muy influidaporlas hansformacioues politicas e ideoldgicas tnl social municipal de Guaiemala
post revolucionario- La misiön EI articulo de Tax de 1937 sobrela organizaciön
q"" segün 6l observ6, en el M6xico
""o"tu"äron, iba a incorporar a los i-ndios a M6xi- atacatraotrasform asa*aut oi. lospunt osdeunit ladmEn aya{com oelidior
esencia' na, t aly
Tax estaba
del estado rne-xicano post revolucionario a los Chorti)'
;;U*"
"püblica" dirigida pcr el Estadc flomnitz- como lo utilizaba wi'C;;;; '"miO" maneiada por eI
äo inculcä'rloles una cultura mexicana pudiese sei mäs iäcilmente
6xito en lr4€xicoque defendiendo ,ro" *n:a"J""ätutal que de Ios rnayas
Ädler feSZ), un esfuerzoque habia comenzadocon mucho mäs nuevo mrätododu ääariJ";,Änciouarista". La gran rnayoria
c"*""äa en el siglo diecinueve(Mallon 1994)-sin embargo,Redfieid aplicd su "u*pJ variedad de unidades impuestas por el gobierno y
existentesentre modernos vive dispersa";;;
modelo a Guaternalasirr tomar en cuenta las diferencias histöricas
""
;;;;;;t out"r,r,,id"d"s puede definir su cultiua'
GuatemalaY M6xico-
t27
720

trabajaba varios meses cada a-floen las plantaciones de las tienas
bajas;y ningün antropdlogo habajd con los indios urbanos en lugares
como Quetzaltenango o Totonicapän, donde Ia mayoria de los mayas
se ganaban la vida como comerciantes a gran escala,artesanosque
contrataban habaiadores, o habajadores artesanales,en vez de ser
agricultores dedicados al cultivo del maiz para el autoconsumo.I-es
comunidades indigenas que reunfan los criterios boasianos y red-
fieldianos para su selecciön eran, de hecho, comunidades indigenas
bastante poco comunes.
El mdtodo de trabajo de campobäsico ufi Ii zadopor los anbopolqos
boasianos se basaba mucho en informantes clave para conseguir
informacidn sobre creencias y hadiciones (<<culturo), cubriendo
muchos campos pero compilando relativamente poms datos sobre el
contexto präctico. hobablemente, la mayor y mäs completa etnografia
de este tipo fue escrita por Charles Wagley, quien tenia mäs d6f65ds [q
normal sobre individuos y conductas reales [1941, 1949).Por su 1nrte,
los estudiantes de Redfield tendian principalmente a cenharseen algün
tema especifi.co{Sol Tax, por eiemplo, en la economia, Beniamin Paul,
en el ciclo de vida), examinando tanto los aspectossociales{präcticos)
y culturales (visi6n del mundo) del tema. Ambos tipos de antrop6logos
se concentraron en aquellos aspectosde la vida y de las comunidades
indigenas que eftm mäs independientes de los ladinos y del Estado.
Incluso cuando trataban la economia, que siempre habfa puesto en
contacto a indios y ladinos tanto a nivel regional como nacional,
hataron el fendmeno principalmente en la forma comooperaba dentro
de los limites de pequef,as comunidades (p. ei- Tal(' 1953).
Aunque ningün antropdlogo se especializd en las relaciones
sociales entre indios y ladinos, al principio de los af,os 1940 se habia
adoptado una posiciön general sobre el tema que no fue cuestionada
por ninguno de los anhopölogos de la primera generacidn. Esta
postura se habia establecido durante un debate que surgid enhe Sol
Tax y Morris Siegeltt/ sobrelas <relacionesraciales>en Guatemala.En
1941.,Siegel, quien trabaiö en una parte relativamente aislada de las
t'l
Despu6s de este altercado, Siegel häsicamente desapareci6 de la escena
etnogräfica. No s6 exactamente cuäl fue su suerte.
122
entre indios y ladinos
tierras altas guatemaltecas donde las relaciones
Huehuetenango),'u/
,'Ä p"tticu-larmente acres (San Miguel Acatän,
observ6 que
"si los nativos adoptasen <<costumbres de los blancos> con
respecto a la vestimenta, al habla, etc6tera, präcticamente no po-
drian distinguirse fisicamente de sus patrones y, por consiguiente,
llegarfan a ser cada vez mäs peligrosos pam un dominio blanco que
sebasaba,en su nlayor parte,en la diferenciacidnracial" {19a1:a28}.
siegel ademäs seflalö que la discriminacidnde los indios por palte
de los ladinos era pronunciada en la regi6n. Al af,o siguiente, Sol
Tax
censur6 a Siegel poi dar "un matiz racial a las rcIaciones $fricas en
Guatemala -un sesgobiolögico- que los pueblos de los que se ttata
no
Iesdan" (tS+Z:++):'lI-aldeaque el mismo Tax tenia sobre las carac-
teristicas particulares de los indios era la siguiente:
"No es dificil definir la distinciön entre indio y ladino tal y
como es corrientemente reconocida en Guatemala-Si el idioma
materno de una persona es indio y su espaflol (si lo tiene),
evidentemente,un segundo idioma; si lleva traie indio en vez de
vestimenta de tipo europeo; si participa en la vida politico-religiosa
de una comunidad india; si cualquiera o todas estascaracteristicas
se pueden decir de 6I (sic), ciertamenteva a ser consideradoindio
tanto por los indios como por los ladinos. La diferencia entre un
indio y un ladino no es biol6gica sino cultural" (1942:45)'
t6/
Hice trabaio de encuesta (sobre el poder politico y econdmico de indios y
ladinos) que cubria casi todo el occidente de Guatemala en los aflos 1970- Descubri
que las reiaciones 6tnicas entre indios y ladinos eran muy cäusticas(5rracistas) en el
norte de Huehuetena.ngo,especialmente en las räreasKaniobal, Chuj y Mam.
tt/
n"dfi"td llevd a cabo su ünico trabajo de campo en Guatemala en Agua
Escondida,un lugar que le eligiö Sol Tax. La unidad submunicipal estabaconstituida
por unas veinte lfamilias de ladinos pobres agricultores de autosubsistencia, que
Labianinmigrado recientementede Tecpiln. Redfield (yTax) estuvieronbuscandoun
äreaen el oeite de Guatemala donde indios y ladinos tuvieran aproxinadamente una
posiciöneconömicaparecida.Interesantemente,las discusionesdeRedfieldsobrelas
relaciones 6tnicas en Agua Escondida eran mucho mäs matizadas que las de Tax
(v6aseRedfield 19s6),en el sentido de que encontrduna considerablediscriminaciön
6toica {pem no "racista") en Agua Escondida-
123

segünTax, los ladinos son igualmente un producto cultural y son
püblicamente vistos como tales:
Unapersonacuyospadressonindiosentodoslossentidos'pero
reünetodbslos criteriospor los queseidentificaalosladinospuede
muy bien ser reconocidocomo ladina no sölo por sus vecinos
ladinosisinotambi6npor susmisnos parientesindios!Unavezque
sehaentendidoclaramentequela diferenciaentreindio y ladino no
es bioldgicasino cultural, no deberiaparecerexbolo que de dos
hermanos uno puedaserindio y el otro,quizäviviendoen la misma
ciudad,ladinoQ9az:a5) - i-entemente,durante la conferencia hubo algün desacuerdoentre 6l y
Tax defendfasu punto de vista basändoseen lo siguiente. himero'
sef,alaba que no siemprc se puede distin8uir fisicamente a indios y
ladinos. Slgundo, argumentaba que los ladinos en realidad no se
conciben a-sf mismo-s como biolögicamente superiores'l8/ Tercero,
interpretaba que la diferencia entre indios y ladinos era meramente un
probiema de äiferencia cultual. Y, linalmente, negabaque lg posicidn
atribuia
inferior de los indios se debiese a discriminaci6n, sino que la
de la cultura india, especiaknente el id-ioma-Ahibuir
a las <desventajas>
los problemas de Guatemala al racismo, sostiene Tax, conlleva "el
pefiaCIde canferira Guatemalaunprcblema rcciolque no existe."Tax
no estaban i'teresados en el tema del
i oüo, antopdlogos posteriores
udorrrioio ae tos utancos>, el problema de siegel; las posturas que
comuni-
adoptaronencuanto a iasrelacionesracialessebasabanenlas
porque habia
dadäsque estuöaron y que seleccionaron normalmente
po"or lädioo, en ellas. $gür DouglasBrinhall (1979aJ-gn eshrdioso
era
äe Guatemalade la segundageneraci6n-eipuntodevistade Taxno
despu6s.tnl
predominab" ät", däl debate sino que lo fue
"iqo"
t./
Eo las discusiones de Herenalo de la Conqttista, Tax otros
y antropölogos
se con-sideraban biolögicamente
norteamericanos admitieron que algunos ladinos
*p"'io'*'.sioembargo,tratanestomäscomounfen6menopococorrientequecomo
no hubo desafio
Jjo Upi"o. Y, hasta n.ioto"il, en la literatura norte'mericana 'n
que los ladinos no se conside-
päuri.,i la declaraciönque hizo Tax en 1942 sobre
" 20/
raban superioresa los indios.
tn/ a Tax por sus
Sriotoul_lsefralaque en la 6poca del detrate, |ohn Collier censurd
que segün el.argumento de
puntos de vista parroquiales sobre la raza. collier opinatra
A pesar de esta r6plica'
Tax. el racismo no existiria en ninsün iugar de las Am€ricas.
724
El consensoalcanzadopor los norteamericanosque estudiaban
Guatemalase difundiö a otros en la confelenciasobreMesoamdrica
que incluyd acaddmicosmexicanos,
{M6xicoy Guatemala)de 1949
guatemaltecos y norteamericanos. El libro que lesume la conferencia,
"Herencia
de Ia Canquisto (Tax, ed., 1952J,iücluye tanto ponencias
un considerablegrado de desacuerdosobre
como articulos It r111s5tra
casitodo exceptosobrelas relaciones6tnicas.El articulo que examinö
las relaciones6tnicasle fue encargadca un antropdlogomexicano
en Guatemala' Apa-
$ulio de la Fuente) que no habfa trabajado
los especialistasen Guatemalasobrela naturalezade las relaciones
ftnicas en ambospaisespero,finalmente,prevalecif el punto de vista
de Redfield/Tax {que tambi6n era la posicidn indigenista mexicanaJ
sobre raza y etnicidad. De la Fuente volvid a escribir su articulo y
describiöcdmo la identidad dtnica y las relacionesdtnicasa lo largo
de Mesoam6ricaeran relativamente invariables en toda la regi6n.'o/
Concluyödiciendoque taza]' cultura estabanmuy d6bilmentecorre-
lacionadasy que no existia el racismo en Mexico ni en Guatemala.
La ünica figura significativa de Ia prirnera generaciön de cien-
tificos socialesque no estuvo finalmente de acuerdo con el punto de
vista de Redfield/Tax sobre las relaciones laciales fue un socidlogo,
Melvin Tumin (1952).Tumin sosteniaque las relacionessocialesen
san Luis |ilotepeque er.an<tipo castas>y que los ladinos de la ciudad
eranracistas;que ellos pensabanque los indios eran bioldgicamente
inferioresa los ladinos y, basändoseen eso,pensabanque el matri-
monio entre inrlios y ladinos no ela apropiado. Es importante sef,alar
que Tumin no era un antropölogo y, por lo tanto, estabamenos sujeto
ila ortodoxia antropolfgica. Los antropdlogosque estudiaron Guate-
mala despu6sde 1960 citaron poco a Tumin, excepto por algunas
notas para seflalarque su postua sobre las relacionesftnicas era
los puntos de vista de Tax llegaron a ser dominantes entre los antropölogos
norteamericanosque estudiaron Guatemaia(y Amfrica Latina) despu6sde \942.
Presto que de la Fuente reescribidel ensayoque estarnosdiscutiendo (y la
versidn ree-scritasepublicö en el volumen] no podemossabercuäl fue su argumento.
Peropor el tono de la discusidnque se public6, parecieraque de la Fuentesugiriö que
hablaun mayor gradode racismo en Guatemalay Chiapasque en el resto de M€xico.
125
emönea,basändoseprincipalmente en que las relacionessociales<<tipo
castas>>s61oexistian en la India .2'll,asantropölogos citaban el habaio
de fohn Gillin sobre San Luis filotepeque mucho mäs que el de
Tumin, presumiblemente porque Gillin no era tan franco sobre la
discriminaciön racial en la comunidad. Es interesante seflalar que
Gillin y Tumin habajaron iuntos en San Luis |ilotepeque y que,
aparentemente,no estabanen desacuerdoconrespectoa los <hechos>
relativos a esa comunidad, sino s6lo con su interpretaciön.
Al especializarselos antropdlogosen el <Oho>rnooccidental, muy
pocos de ellos estudiaron a los ladinos. De hecho, para su propio
m6rito, Richard ddams fue el rinico antropdlqgo de la primera
generacidn que lo hizo. Adams observd que los ladinos eran el grupo
mäs heterogdneo de Guatemala, variando en cuantoa clase social, de
campesino y trabaiador a indushial y burdcrata gubernamental.
Tambidn observö que la <<culhrra>ladina variaba s%ün la clase social
y el periodo histörico en el que apareci6: los dadinos/vieioo eran
gente que desarrolld una cultura particular diferente a la india en el
periodo colonial y los ladinos (<nuevos))eran gente que asimilö el
modelo <.nacional>a fines del siglo KX y en el siglo XX. (Adams, sin
embargo, no prestö gran atencidn a las creencias ni a la cultura, sino
sdlo a sus indicadores materiales o conductistas.) En su habajo de
encuesta (1956), Adams tambiEn encontr6 ütil distinguir tres tipos de
indios: indios tradicionales, indios modificados (de transicidn) e
indios ladinizados; estos ültimos, segün 61, llegarian a la larga a
convertirse en ladinos <nuevos)).El trabaio editado deAdams sobre el
cambio en las comunidades indigenas (1957] sostenia que la
deshucciön de la ierarquia civico-religiosa <tradicionab>a causade las
reformas politicas llevadas a cabo por los gobiernos reformistas de
1944-S4llevarfa mäs leios el proceso de ladinizaciön. En un trabajo
21/
Los sociölogos de los ff.UU. se referianft,ecuentemente arelrciones raciales tipo
castas en los ffi.UU. y era a esto a lo que Tumin se estabarefiriendo. Los anhopdlo-
gos norteamericanosno seenconbabancdmodos contal paraleloyaque consideraban
que las relaciones raciales en Amr6rica Latina eran 6pmpletamente distintas a las
relaciones raciales en Norteamdrica y porque insistia-n en que rel;acionessociales de
castass6lo existianenla [ndia-argumento que defiende que lasdiferencias culfurales
(base religiosa de las relaciones de castas en la India) son mäs sip.ificativas para
hacer comparaciones que las relaciones de poder.
126
nosterior,Adams (1960Jpresentabaa los mayasde Totonicapän,que
labian abandonadosu jerarquia civico-religiosaen los aflos 1920,
,r"r ur gt"n medida comerciantesy seencontrabanaltamentealfabe-
tizadosy calzados{con zapatoshechospor ellos mismos),como indios
ladinizados.No observöque estosmismosmayasseenconhäbanentre
los mäs häbiles y eruditos expertosconocedoresdel calendario maya
en Guatemala {Carmack,1995).
Adarhs fue mäs cauto que Tax con respectoa las condicionesbajo
las que tendria lugar la ladinizaciön y lesp-ectoa lä naturaleza de las
relaiiones sociales entre indios y ladinos."l Sinembargo, su estudio
apoyabala postura de Tax/Redfield sobre la naturaleza de la trans-
färmaciön cultulal que seestaballevando a cabo en Guatemala-una
p1oglesidnlineal de maya a ladino, segünla genteentrabaen contacto
conlnstituciones (modernas>.Criticariamos ahorael exagerado6nfa-
sis que puso en una lista de rasgosmateriales(tipos de vestimenta,
herramientas,fogones)que aparecenen su encuestacentroameticana,
definiendo qui6n era indio y qui6n ladino (1956),pero en este res-
pectoAdams fue mäs sistemäticoque otros antropölogosde su tiempo
al describir las diferenciasculturales. En sus estudiosno dej6 de lado
las explicaciones sociales o ecolögicasa los fen6menos culturales;
seflalöexcepcionesa la regla; fue imparcial en la forma en que hatö
a Tumin (incluso desarroll6 una hipötesis para explicar la existencia
de relaciones de <casta>en San Luis); y observöque la conducta dis-
criminatoria (basändoseen la cultura) era comün a toda Guatemala,
especialmente en el altiplano occidental, donde los ladinos que
residian en comunidades indigenasgeneralmenteconstitufan una elite
provincial. Sin embargo, crey6 que no habia racismo y claramente
aceptd la proposicidn de que la ladinizacidn de la poblaciön indi-
gena no s6lo era inevitable, sino positiva. Su articulo sobre la
<nacionalizaciön>en Am6rica Central (publicado en 1967, aunque
aparecid una versiön anterior en 1958) fue una observaciön muy
vaticinadora de que la integracidn nacional en toda Amdrica Central
erad6bil, a diferencia de la situacidn en el Mddco posbevolucionario.
"/ Ad"-r, por ejemplo, estudid Chitulul, una aldeade Chichd en la que tanto Tax
como Redfield pensaron que se daban relacionesmuy igualitarias entre los indios y
los ladinos. Adams seflal6 lo contrario (1956:2a8-52).
r27
Atribuyö estos fallos de la integracidn nacional en Cenhoam6rica,
especialmente en Guatemala, a lrla falta de politicas nacionales
"integracionistas" fasimilacionistas] fuertes.23/
Muchos de los anhopdlogos de la primera generaci6n, pro-
bablementeanimados por Redfield, apoyaron totalmente aI Instituto
Indigenista de Guatemala, fundado en 19a5 ftaio la reforma del
gobierno de fuan |os6 Ar6valo) con el objetivo de implementar una
politica de asimilaciön indigena similar a la de M6xico. Redfield 5r
tax habian formado a un nünero de guatemaltecos {asi como a
varios mexicanos) en la Universidad de Chicago,zaldos de los cuales
(Antonio Goubaud carrera y Flavio Roias Lima) llegaron a ser
directores del Instituto Indigenista de Guatemala. El Instituto
guatemalteco recibiö asistencia de Sol Tax, Richard Adams y
üenjamin Paul, entre otros, p6ra sus primeros progfamas que busca-
ban integrar {ladinizar) a los indigenasguatema.ltecos.[El historiador
Dennis Casey, 7g7g, docurnenta esta asistencia-i De esta suerte, la
antropologia de los EE.UU. tle56 a tener una influencia signilicativa
en la politica guatemalteca por lo que respecta a los mayas. Por
ejemplo, las cifras de los censos reflejaban grandemente la pers-
pectiva de la antropologia en su definiciön de los indios. E[ censo de
igsc, llevado a cabo por el gobierno reformista y el de 1964, que
sigUiöprocedimientos similares, registraron una caida dramätica en
el porcentaje de poblacidn indigena de Guatemala.Mientras que en
23/
Acadfmicos guatemaltecos de tendencias izquiedistas, tales como Flores
,dlvarado (1973), criticaron firmemente a Richard Adarns por sus puntos de vista
sobre la ladinir.aci6n- Es importante sefialar que la critica se delrcria de haber hecho
a toda la autropologia norteamericana. Adams se con'rirtid en el objetivo princi-
palmente por e[ esfuerzo que hizo piüa que _susideas {y las ideas de la anbopologia
norteamericana) fuesen arnpliamente accesiblesa los acad6nnicosguatemaltecos. El
ven:no que llevaba el ataque a Adams se debia a esencialismo aasisnalistas guate-
maltecos y no a una preocupacidn por esencialismo de Adarns'
tnl
fr hecho de que Redfield y Tax educasenen antropologia a tantos latinoame
ricanos dice algo positivo en zu favcr. RedEeld,en prrticular, parece haber sido muy
g**;ro ru;h"iöo *" latiaoamericanos,tales como Villa Roias.6l
"" hicierou r.rn "olaboradores
esfueuo parainvitar a acaddmicoslatinoamericanos a sus
I Tax tanrbien
conferencias. No rne caus6 tan buena impresidn la forma en que se hat6 a los
colatxrradoreslatinoamericanos en las reunionespüblicas {v6aseTa;g ed-, fSSZI-
128
1921Guatemala era descritacomo 65%indigena (comolo habia sido
en 1950se vio que sölo lo era en un 54o/o y en un
en 1BB0y16g3),2sl
comenzando
i-Z% enlgO+. Aparentemente,muchos mayasestaban
ildicadores de
a usar zapatosy vestidos occi{entales, los nuevos
que hicieron el censo, basatlos en Ios
identidaa dtnica para los
ioai""aot"s de etn-icida6utilizados por los antr'pdlogos''ul
con respecto
Quizä la intromisidn antropolögicamäs importante
en que
a la situaci6n6tnicatin Guatemalafue la constanteinsistencia
individual. Coino Tax
la <cultura>que uno placticase ela una opcifn
sefia16 en 1941,un hermanoindio podiaseguirsiendoindio mientras
que el otro podia elegir ser ladino y ningün guatemalteco le daria
*ryot importancia. Entonces,para integrar Guatemalaen una ünica
identiaaa nacional todo lo que se necesitabaera alental a los mayas
a elegir el estatus preferido. Despuesde todo, casi todos los rasgos
indioi existenteseran bäsicamentenegativos:ios indios eran aquellos
..notenian salud, saneamiento,educaciön,capital ni capacidad
que
par{l producir alimentosy riqueza" (Goubaud catrera, 1964:25).En
el carnbio6tnico llevarfa a la movilidad de ciase.Puesto
"orrt*"o*ocia,
quelos guatemaltecosno eranracistas,segünlos conocimientosantro-
poldgicäsheredados,la homogeneizacidnde la cultura guatemalteca
sedÄe.ia conseguirsin esfuerzo.Es asi que, durante el periodo de la
reforma y la mayor parte de los aflos 1960, los antlopölo8os de los
de jorge Ubico. Estecenso
"/ t"*bi6n se realizö un censo en 1940, en tiempos
las cifras, como han seüalaclomuchos, con el äniuro de inJlar
claramente distorsiond
las cifras totales de poblacifn. Este es el ünico ceDsoque contabilizaba a la gente
,\aza,', es däcir, blalco, negru, indio, "mixto". Todos los censosrealizados
segünsu
de"spu6s de esa fecha s6lo definieron dos grupos, indios y ladinos; los individuos
entrabanen una u otra categoriasegirnla discrecidn del censor'
26/
Esprobableque censosanteriores tomasenen cuentael reconocimientopüblico
de una personaen su municipio. Desdeentonces,fohn Early (197a)ha demostrado'
al comp^arar ios materialesde los censoscon las partidas de uacimiento y defunci6n'
que los censos de 1950 y 1964 distorsionaron mucho las cifras relativas al grupo
Cir,ico.t4l calculd que la poblaciön inrligena en 1950 era del 56% y la de 1964 del
Des<leh.rego,laspartidas de nacimientos y defunciones no eran mrrcho mäs
50-olo.
precisasque los censoi oficiales, puesto que reflejan lo que los sacerdotesen un
municipio determinado pensabansobre cuäl era la identidad dtnica de una persona,
no cculo se considerabala persona a si rnisma-
729

EE.UU. dieron municidn al gobierno guatemaltecopara comenzal a
definir la poblaci6n indigena como una minorfa numdrica y hacer
esfuerzospara introducir al resto a los beneficios de la nacionalidad
guatemalteca.Segrin los expertos (Redfield,Tax, Adams y la mayorfa
äe los antropötogos que les siguieron), la barrera real para la
asimilacifn de los mayasera el aislamiento de las comunidades-Pocas
personas de la 6poca, ya fuesen anhopölogos o ciudadanos Suate-
inaltecos, observaron que la insularidad de las comunidades mayas
erauna conshucciön social y politica de los mayasy ladinos por igual,
manipulada por ambos grupos durante siglos y capaz tanto de una
resistenciacontinuada como de cambio. Tampoco tomaron en consi-
deracifn que los mayas habian estadocompletamenteintegradosen
la vida nacional gUatemalteca-comoploductores de la mayorfa de los
alimentos, como mAno de obra en las plantacionesy como el referente
en relaciön al que los ladinos se podian definir a si mismos como
por Io menos, cien af,os'
Supo dtnico y elite nacional- durante,
La hansici6n a lo largo de los aios 196O
La mayoria de aqudllos que estudiaban Guatemala a fines de los 1950
y en los 1960 [Nash, 1958;Reina, 1966;Colby y Van der Berghe,1969)
Lontinuö nabajando siguiendo la tradiciön de Redfield/Faxcon respecto
a las relaciones dtnicas -de hecho, estabadicidn todavia seenconhaba
muy viva en los aios 1980 (p.ei. RojasLima, 19SB).EI libro titulado
Herencia de la conqur'sto: Treinta ofios despudsfKendall et al., 1983),
inspirado en la coleccidn editada de Tax, de 1952,mäs que estar en
desacuerdo,lo que hizo, principalmente, fue aportar a las conclusiones
a las que llegö la primera Seneraciönde acad6micosmesoamericanosy
fuvo muy poco nuevo que decir sobre las relaciones 6tnicas. Ia
principaL diferencia de la segunda generacion de acaddmicos (una
diferencia que no se refleid en la segunda Hercncia) fue un mayor
inter6s en los cambios histdricos y en la economia politica. Eric Wolf,
quien habia habajado en M6dco con anhopdlogosmexicanosen los
ifros t9SO,desempef,daqui un papel principal. Oha diferenciaes que
la segundageneracidnleyö mäs el trabaioproducido por los acad6micos
gUatemaltecosy mexicanos de lo que lo hizo la primera generacidn.Y
äqu( dominaba el inter6s por la historia y la economia polftica.
130
El libro de Eric Wolf de 1959 sobre M6xico y Guatemala era
bäsicamente,lrna historia: desde el periodo precläsico hasta la
actualidad,con sölo un capitulo dedicadoal sigloveinte. Wolf prestd
especialatencidn al tipo de capitalismo que se estabadesarrollando
en Mdxico y Guatemalaasi como a las caracteristicasde su estructura
de clasesy a c6mo 6stasafectabana la cultura india y a las relaciones
dtnicas.No obstante, Wolf no retratö las relaciones sociales latino-
americanascomo racistas:6l considerabaque el ünico prejuicio de la.
Am6rica Media era <<social>-porque en el M6fco colonial '?o
descendenciade una uniön mirta podia conseguir de las autoridades
pertinentesun documentolegal que la declamse serölanca.u" (1959:
Zao). Su postura sobre el mestizaje y la ladinizaci6n se vio gran-
dementeinJluida por la exitosa politica integracionista de M6xico en
el periodo postrevolucionario, aunque 6l mostrd la transformaciön de
la cultura indfgena con mäs pesar que la mayoria de los otros
antrop6logosde la 6poca.Segrin 61,sin embargo,"estöclaro que es el
mestizoel que rcpresentael futuro de la Amörica Media" (1959:235).
Wolf centrd casi toda su atenciön en M6xico, aunque intentö crear
paralelosentre Mdxico y Guatemala, al sugerir que Guatemala iba
como medio siglo por deträs de M6xico.
Charles Wagley, quien bäsicamente abandonö los temas gua-
temaltecosuna vez que comenzö su trabajo sobreBrasil en los af,os
1940,escribiö junto con Marvin Harris un interesanteexamen de las
relacionessocialesde las <<minorias>> en las Amdricas, el cual comen-
z6 como un informe para la UNESCO fWagley y Harris, 1958). El
capitulo dedicadoa Mdxico observabaque los indios tenian el estatus
socioecondmicomäs bajo de Mdxico y sufrfan una considerable
discriminacidn social,especialmenteaquellosindios que retenian una
cultura <<colonial> (los tarahumaras del norte y los mayas del sur).
Concluian,sin embargo,que, dada la ausenciade barrerastipo castas,
'Ias minorias indios de Möxico sufriran una indudable y final acul-
furaciöny asimilaci1npor parte de Ia masade la poblaciön mexicana"
(195S:85J. En otro articulo, Wagley (1959)conhastabala forma c6mo
lasdiferenciasbioldgicaseran categorizadasen tres partesdistintas de
lasAm6ricas (los EstadosUnidos, Mesoam6ricay Brasil y el Caribe)
y sugeriaformas en las que la construccidn de una <<raza sociab en los
hes tipos de sociedad afecta las <<relaciones raciales> en ellas.
131

Notablemente, describid el (racismo) en los t.es casos, pero su
discusifn sobre el racismo en M6xico y Guatemalafue silenciada aI
concluir que "e/ <problemamcial> es,en gnLnmedida, un ptoblema de
clasessoiioeconömicas"(1968:417).El trabaiode wagley sobrela ra"a
fue muy poco citado por los antropdlogosque estudiabanGuatemala.
Rodolfo Stavehagen, un socidlogo mexicano influido por las
teorias marxista y de la "dependencia", publicö un estudio sobre
relaciones ftnicas y ,.le clase en Chiapas y Guatemala en 1969 fen
espaflolJ.Traducido al ingl6s en 1975, puede que este Uabajo haya
tenido un mayor impacto en la segundageneracidn de antropdlogos
especializadosen Guatemalaque cualquier otro nuevo trabajo. Lo que
Stävenhagenhizo, a diferencia de los demäs,fue criticar directamente
las suposiciones <culturales> de la primera generacidn de anho-
pölogosy colocar el terna de la raza y la cultura denho de un anäIisis
lirtOni"o de las economias politicas de M6xico y Guatemala. Segün
*la importanciaque losefuölogosabibuyerona
strspropias palabras,
Ios ilementis cultursles de los pueblos indios ha acultado dumnte
larga tiempo la naturaleza de las estuctutas socioeconömicas dentto
de-las qie estas poblacionesesf<infahom y siemprc han estado]
integradas,,[1975:167). stavenhagen definiö la etnicidad corno la
preiervaciön de relaciones de clase coloniales (es decir, <feudales>)
para ciertos prop6sitos econ6micos; vio el capitalismo como un
pto"uro que acabö con las relaciones6tnicas y las reemplazf por las
ielacionei de clase. Sin embargo, vio que regiones agrarias <sub-
desarrolladas>i,tales Como Guatemala y Chiapas, conservaban las
relaciones dtnicas de una forma distorsionada:
"...losdosgruposdtnicos[indiosy ladinos]podrianconsiderarse
comoestratosseparados denhodeunsistemaestratificado.Estosson,
enefecto,los rinicosestratosdeestesistemaporqueen Iossistemasde
valoresde ambosgruposlas caracteristicas 6tnicas[culturalesy, a
juegan u-n papel mäs importante en la
veces,incluso bioldgicasl
estratificacidnque el deotroscriterios.Losladinos no s6lomantienen
una posicidn mäs elevada en la escala objetivade las caracteristicas
soci6econdmicas, sino que tambi6n se consideran, los ladinos,
a los indics-Desdefan al indio como tal'
superiores
"...Los ladinos utilizan estereotiposffsicos para afirmar su
<<blancura en contra-steconla mayoroscuridadde losindios.Como
132
ha seflaladoTumin,esun problemade tiposideales,puestoquela
poblacidnladinaes,en efecto,mestiza.A pesarde estehecho,uno
deioscriteriosmäsvalorados entrelosestratossuperioresladinoses
el de su supuesta<salgre en
espaflolo... San Cristöbalde lasCasas
[Chiapas] parece haber una coincidencia entre la escalasocioeco-
n6micay el continuumbiol6gico.Loscriteriosraciales,no obstante,
no rlesernpeäan un rol crucial,precisamente porqueesimposible
clasificara la poblacidnen ninguno de los dos grupos6tnicos
atenidndose a unabaseexclusivamente fisica"(1975:195).
Retrospectivamente,uno puedever quelaposturade Stavenhagen
sobrela taza y las relaciones raciales en Chiapas y Guatemala era
significativamentediferente a la de la escuelade Redfield/Fax.El fue
uno de los pocos cientificos socialesde aquella 6pocaen sef,alarque
muchosmexicanostenian creenciasfuertementeracistasy en criticar
la polftica mexicanade asimiJaciönindigena tal y como fue llevada a
cabopor el Instituto Nacional In<iigenista."/ Sin ernbalgo,dado que
la mayor parte de su trabajo enfatizabala determinacidn econömica
de las präcticasdiscriminatoriasenvez que la ideolögicay porque
atacö el <<culturalismo>, sus opiniones sobre etnicidad fueron
consideradas economicistas{v6asep. ei.,Warren,1978}.El trabajode
Stavenhagen,al igual que el de Wolf, fue ampliamentecitado por los
antropölogosde la segundageneraciön que estudiaron Guatemala,
perola mayoria ignorö sus observacionessobrela razay se concentrö
en su anälisis de las relaciones 6tnicas, que puso el 6nfasis en la
formacidn y las relacionesde clase.
La segundageneracidn norteamericena: 1970-1990
Los acad6micos de la segunda generaciön llegaron de diversas
universidades y campos de educaciön. El centro de estudios
guatemaltecosde Chicagohabfa desaparecidoa finales de los 1950
y no habia ningün otro centro dominante -de hecho, rnucha gente
de la segunda generaciön no fue formada por un especialista en
" I Po, otra parte, Stavenhagenbäsicarnenteaceptd la posicidn de TaxlRedfield,
desdeel momento en que argrrmentdque "los criterios raciaies no juegan un papel
crucial". Sus propios argumentossobre cdrno los criterios raciales se utilizaron en
Chiapasirrdican que los criterios raclales si jugabanun papel crucial.
133
Guatemala.'ulEnlos EE.UU. existi6 un amplio interds en la ecouomin
politica durante los aflos 1970 debido al impacto que la guerra del
Vietnam caus6 en las sensibilidades acad6micas y la creciente
influencia de la teoria marxista entre los acaddmicosmäs jdvenes.Sin
embargo,la economia polftica no era la ünica <escuela>representada
en la segundageneraciön de estudiososde Guatemala.Alrededor de
un tercio de la generacidn siguiö interesadoprincipalmente en temas
culturales relativos a los mayas,aunque con 6nfasisdiferentesa los de
la primera generacidn. Miembros de ambos Srupos, sin embargo,
leyeion algo de la literatura especializada escrita por latinoame-
ricanos, especialmente trabajos producidos por guatemaltecos:p. ej.
Martinez Pelfuez(7971), Guzrnän Böckler y )ean-I-oupHerbert (1970).
Sölo por esta razön, ambos grupos llegaron a conocer la perspectiva
de la economia politica (v6asec.A. smith, 1gB7).häcticamente todos
los de la segunda generacifn leyeron a y se vieron influidos por Eric
Wolf y Rodolfo Stavenhagen.znl
Aquellos de nosotros interesadosen la economfa politica llevamos
a cabo estudios sobre los mecanismos especificospor medio de los
cuales los ladinos explotaban a los indios en el periodo contem-
poräneo -casi todos enfatizando la monopolizaciön de la tiena y la
economia de plantacidn (Davis, l970;Wassershom, 1975;W- Smith,
1975,lg77; Manz, 1977;p615ini, 1977;Falla, 1978;Brintnall, 1979a,
1979b; Bossen, 1982, 1934). Yo me concentrd en los monopolios
comerciales: cömo a lo largo de todo el altiplano occidental los ladinos
controlaban la venta al por mayor y la infraestructura del hansporte,
mientras que los indios trabaiaban principalmente como comerciantes
en el mercado o artesanosa pequef,aescala(vdase,p. ei-' Smith, \973,
1g7B),aunque mäs adelante puse mäs dnfasis en el conhol general
,"f po, ejemplo, yo trabai6 principalmente con un especialista en la China (G.
William Skinnerl en la Universidad de Stanford, atulque Ben Paul (de la primera
generaciön) me ayud6 con los materiales sobre Guatemala'
generaciön tambi6n convergi6
'nl El trabaio de ambos grupos de la segunda
alrededor de la situaciön de violencia experimentada por los indios en los aios 1980,
como lo ilustraban los ensayos editados por Carmack (19SSJ-los cuales incluian a
gente de todas las escuelasasi como varias personasde la primera generacifn (v6ase
tambidn Warren 1993J-
134
sobrelos recutsosestatales{1984,1989,1990).Todosnos esforzamos
en describir la particular naturaleza de las relaciones de clase entre
indros y ladinos y entre los ladinos de Guatemala y restamos
importancia al papel del racismo en esas relaciones. Enfatizamos
rnucho el hecho de que la mano de obra india era crucial para el
funcionamiento de la economia cafetalera de Guatemala y de que
habiasido obtenida coercitivamente de las comunidades indigenas
desdelos aios 1880. Präcticamentetodos nosotros esturtiamoslas
formas en las que las relaciones entre indios y ladinos se veian
alectadaspor clase y etnicidad mäs allä del contedo de la pequefla
comunidady hatamos la especificidadhistörica de Guatemala-temas
raramentediscutidos por la primera generacidn(aunque,v6aseAdams
lg7}),la cual estabamäs interesadaen mapear los puntos culturales
comunesen Mesoam6rica{M6xico y Guatemala).
El grupo mäs pequeflo de acad6micosde la segundageneracidn
queseconcentrö en la cultura maya tambidn prestd mäs atenciön a la
especificidadhistdrica de Guatemala que la primera generacidn de
acaddmicos.Dos miembros de este grupo, Robert Carmack {1973,
1979,1981)y su estudianteBarbaraTedlock (1982),buscaroncon-
tinuidadesde la cultura maya enhe el pasadoy el presente,sin negar
la historicidad de lo que continuö siendo (esencialmente>maya.3o/
Ohos tres miembros del grupo fWarren, 1978; Hawkins, 1984 y
Watanabe,1992) trataron los sfmbolos, cultura y cosmologiamayas
denho del contexto de las relaciones socialesentre indios y ladinos;
cadauno de ellos lo hizo de forma bastantediferente.3'lAl igual que
30f
Carmack es la principal figura de la generacidn, en parte, a causa de sus
importantes y numerosas publicaciones y, en parte, poryue se granieö pocos ene-
migos. C.omo etno-historiador que hizo tanto investigaciones de archivos como
etnogräficas,Carmack siempre tuvo cuidado en sef,alar que se dieron importantes
cambiostanto en las culturas indigenas como en las no indigenas de Guatemala(vdase
Cannack1995).Los Tedlocktambidnhicieronuntrabajo importantesobreGuatemala
fBarbaraTedlock, bajo la supervisi6n de Carmack;ftsnni5 Tedlock con sus estudios
deliteraturay los mayas).El trabajo de estastres personasha prestadoun apoyoclave
al movimiento maya que actualmente se estä dando en Guatemala.
tt/
Niogooo de estos acad6micos creö una uescuela, en el sentido de la primera
generaciöno incluso en el de los acad6micosde la economia politica. Carrnacktuvo un
135
aqudllos que se centraron en temas de economia polftica, todos los especialmente1979a).Brintnall sostuvo, siguiendo a Wagley {en
m"niionados retuvieron el uso del tdrmino grupo dtnico para especialWagley, 1959),que en Guatemalala descendenciao cono-
"qrri
describir las relacionesentre indios y ladinos. Y präcticamentetodos cimiento de los antecedentesfamiliares de una personasiempre era
"Lo
nosotrosreiteramosla creencia comfin entre los norteamericanosde un factor criiico para adjudicar una identidad a una persona:
que el racismo realmente no existia en Guatemala porque los indios simplerealidad es que a un indio se le define como una personacon
podiao,.llegar a convertirse>en ladinos. Un mayor nrirnero de noso- Dcdresindios y e un ladino conTouna personocon padres ladinos"
tos observ6que no era fäcii convertirse en ladino -que uno tenia que ßg79a:644)y ni la cultura ni la aparienciaafectana esavaloracidn.
aban{onar su comunidad para hacerlo y que hacian falta varias Mientras que las personascon ascendenciadesconocidaque se
generacionespalaque uno pudiese seraceptadöcomo ladino' Yvarios encuentran apa-rtadasde sus comunidades tienen una identidad
f,ertenecientesa la escuelade la economfa
politica arguyeron que el ambiguay la identidad de una personacon ascendientesde caräcter
pro"uro de ladinizaciön era, de hecho, un proceso de proletarizaci6n rnixto valia segrin la situaci6n y la comunidad, el linaje [herencia
porqrr" aqu6llos que se convertian en ladinos eran aqudllos que biolögica putativa) es la forma principal por la que una persona
il"ui"o peiaitlo el accesoa los recursosde suscomunidades[v6ase,p. adquiereuna identidad 6tnica. Brintnall llegd a la conclusi6n de que
ej., W. S*tith, 7977;C- A. Smith, 797B;Brintnall, tgzgb)'"'I la negaciöndel racismoguatemaltecopor parte de los antrop6logos
norteamericanosera obviamente absurda, puesto que "Ic pobla-
Ia irnica persona de toda la generaciön que cuestiond abier- ciön estö marcadamente dividida en dos grupos principales, uno de
tamente la forrna cömo la primera generaciön entendid el significado los cuales estd suieto aI maltrato flagrante a manos del otto"
de raza y racismo en Guatemala F;e Ilouglas Brintnall (v6ase (1979a:647).
El desaffode Brintnall de 1979 a los especialistasde Guatemala
a los que 6l
nümero de estudiantesque realizaron muchos tipos de anälisis distintos sobrela raza y el racismo fue en gran parte ignorado, tal y como lo
seguida basta cielo por Barbara
ni"" tp. ei.,fulanz,Bossen)-Su propia agenda' Eunto
.I."afäf las continuidades en la cultura maya desdeel periodo del pre habiasido el articrilo de Wagley sobrela <<razasocialD.Recuerdoque
contactohasta laactualidad. WarrenseviograndemeüteinfluidaprGeertz' pero prestö
"o -orh.", el articulo de Brintnall me impresiond bastante cuando lo lei por
poca atenciöna los tenrasde econonia politica; Watanabefue esfudiante de Evon Vogt primera vez y lo utilicd en la rnayoria de mis clases.Sin embargo,
ffiouO escuelasolrre Chiapas), interesado en aspec.tosdel m'ndo y sus valores. tambi6n recuerdo que mi posicidn con respecto a la raza continuö
"*
tr/ generaci6n siendoambivalente.Ahora, no obstante,piensoque nosoboslos de la
No hay muchos acad6micos <supervivientesr de la segunda
politica- Pocos de
norteamericana que adoptaseu e! punto de vista de la economia segunda generacidn cornetimos un error al no confrontar los
1980 debido a la gran violencia existente
nosotros realizamostrabajo de campo en los argumentosde Brintnall sobrela raza y el racismo ea Guatemalani lo
llevaronamuchos deestageneracidna incusionalen
enGuatemala,pemotrasrazones que esto dijo sobre nosotros. El hecho de que un indio pudiera
prim:ra generacifn
otras äreas,enlre ellas la fria recepcifn que tuvimos pr parte de la
de anhopologps. Me parece interesante qrre Beatriz Manz {la cual habai6 con Robert convertirse en ladino (generalmente despu6s de dos o tres gene-
C"r*"k] yyäo"-otl"" üoicasacad6micas <supervivientest delgrupo de Iaeconomia racionesy de rornper todos sus lazos familiares con los indios) no
y W. Smith dejamn la antuopologia; Pansini y Davis
p"titi*. bät""tt, Wasserstrom significabaque los ladino-sno fuesen racistas.Despu6sde todo iel
irabalamnp*ndpalmenteconONGBossenseespecializöenChina;Fallamrncaadoptö
-ilg*" racismonazi contralcs judios sebasömucho en sencillasdistinciones
determinada Ahibuyo el hecho de mi zupervivencia al hecho
"*d6mica estudi€ fenotipicas! Recuerdo haber escuchado literalmente cientos de
de que mi trabajomäs temprano fue sobre-el mercrdeo y a que principalmente
""
la i;*"g"fi" de las relaciänes 6tnicas; adenräs, mi critica a ia prirrrera generacidn fue rlisquisicionesde los ladinossobrela inferioridad de la <sangre>
india
que iro lrataron la econonria politica (cannack Tedlock' warren asicomo de su cultura -ricos y pobres,<blancos>y oscuros-cuando
acallada- Ins
de los
W"i*U*, na"'tinst han llegado mucho mäs lejos en el mundo acad6mico hicemi trabajode investigaci6nen el occidentede Guatemalaen los
de ellos hizo trabaio de campo en los 1980.
m.UU., aunquetampoco
"i"gUn"
136 137
 törmino de grupo 6tnico,
aflos 1970. Sin embargo, el hecho de que muchos de aqu6llos que A] comenzar a utilizar los antrop6logosel
adoptaron una posfura racista fuesen tan parecidos a la gente que volvid extremadamentevariable. Algunos antrop6-
,u r'igoifi""do se
eran puras consFucciones
despreciaban (que no es el caso en el racismo norteamericano), qs i,lnor"rortrrrieron que los grupos 6tnicos
formas -raza, clase, cultura,
hizo permenecer fetnoc6nhicamente) desconcertada. Mi confusi6n läA", que podfan definirse de varias
etnocdnhica, tal y como la de mis compatriotas, probablemente ä,^r*iOir-y elemento definitorio era s6lo la existencia de algün
"rryode frontera que
aumentd por el hecho de que 6a5i nin.gün guatemalteco nos parecfa ä'd" fenöment [p.ei., Barth, 1969).Ohos sei.alaron
popular $ en gran parte del acad6mico)habia una presuncidn
<<blanco>. äilr
"r"r.; ,tri"*uior a".r'' gopo 6trico estabanemparentadospor la
Seria demasiado fäcil deöir que la segunda generacidn evitd los äää*
;;;u" o linaje fKeyes,1981).Algunos utilizaron el t6rmino de grupo
temas de raza.y racismo en Guatemala porque todos estaban con- p"r" r"f"rirr" g*pot fenoti_picamentedistintos (es decir, los
vencidos de que la conducta disctiminatoria guatemalteca se podia ä; " diferenciacultural con obos grupos
In-ort"rti"*os de los EE.UU.)cuya
explicar sa lflminos de clase, aunque muchos de nosotros cier- y cuya aut6nticadiferenciacidn
I* L n""no, discutible [szwed, 1975J
tamente redujdsemos el tema al problema de clases.Aün asf, todos los (diferencias enbe, por ejemplo, haitianos' -iamaiquinos
äLu;
norteamericanos evitaron discutir raza yracismo, induso aquellos que no la etiquetäb'mos como
äG*üi".tos y negros estadounidenses)
no se enconhaban embelesados con los paradigmas de economia (Omi y Winant' 1994)' Y
äif"ren"i" <6tnicu fni incluso nacional)
politica. La explicacidn a esto se encuentra en lo que estaba t6.*itto para referirse a grupos que no podian
Jg,;or utilizaron
sucediendo en el campo de la antropologia mäs generalmente en ese "i cultura' donde sölo
ailtirrsati.tu de obos ni por su fenotipo ni por su
tiempo. Ios debates sobre las relaciones dtnicas y el etnocentrismo norteamericanos de
n"Ui"L" presuncion de <herencia>(es decir, l,os
habian reemplazado totalmente a los debates sobre las relaciones claridad no era sdlo
ä"r""tra"""ia irlandesa de los EE.uu.). Estafalta de
raciales y el racismo en algün momento de los 196o. Una de las tambi6n en el discurso
un- ptobt"m" en el discurso popular sino
razones para que esto sucediese es que el concepto de .<razar> casi se 6tnirco significaba (<raza
como concepto anbopolögico. ,""äC*i"o. Claramente, para algunos,
habia desacreditado completamente 'rupotipo decombinaciön' para
sociab>, para obos, grupo cultural y, algün
Franz Boas habia demostrado en los aflos 1920 y 193Oque las (razas)) que parece_haberestado deträs
onosmds. El princiial problema social
bioldgicas eran entidades biolögicas inestables y mutables que por
dela nueva terminoiogia era el inter6s por la asimilaci6n envezde
guardaban poca relacidn con la lengua o la cultura (Stocking, 196S); <modernizacidn>
,l.""is*o, ahibuible a la fascinacidn existentecon la
los antropölogos biolögicos de los 1940 y 1950 sostuvieron que la raza
caracteristicade los aflos 1950y 1960'
era un concepto sin sentido para la humanidad fMontague, 1964); y
unos pocos antropölogos culturales de los aflos 1960 habian Los academicos especializadosen Guatemala no discutieron
demosbado que no habian configuraciones culturales constantes de ampliamente el significado de etnicidad y pocos parecian,perturbados
raza fWagley y Harris, 1958; Harris, 1!m4). Para ocuparnos de estas po, t" evidente y considerable imprecisi6n que existia al usar el
complicaciones, comenzamos a emplear el todavia menos preciso iCr*irro. Algunos denominaron glupos 6tnicos a distintas comuni-
tdrmino <<6tnico>(como en grupo 6tnico, relaciones 6tnicas, etno- dadesindigenas (Brintnall, tgZgb); otros serefirieron eshictamente a
cenhismo) a partir de los aöos 1950. Con este cambio terminol6gico losindios en contraposicidn a los ladinos como Srupos6tnicos (colby
quisimos poner mayor dnfäsis en la cultura en vez de en la raza, al y van den Berghe, 1969; Watren, 1978); y ohos describieron una
mismo tiempo que manteniamos algunas referencias a la herencia o variedad de grupos 6tnicos ladinos asi como indios (p. ei. Pansini,
linaie. Pero ha de seflalarseque el cambio tambi6n nos permiti6 evitar 1g77).MuypocosacaddmiCoS tenfan claro cömo raza, cultura o clase
el cada vez mäs politizado tema del racismo. definian ,"rto, grupos: la mayoria de los antropdlogosmantuvieron

138 139
que sdlo tenia que ver con la cultura, pero lo hicieron principalmente jolagentesiadquierecaracteristicasdeclase,idiomayculturales,asi
präc-
lenouplcosde sus padres.Asi, el matrimonio y las
uv'-v

al referirse a los puntos de vista de la primera generaciön sobreeste cornolasgos

aunquesäanclaramentefenömenosculturales'
tema; algunos de nosotros sugerimosque la clasey el origen nacional ticasdereprocucclon,
efectosbioldgicos[raciales)'El
jugaban algun papel a la hora de definir los grupos 6tnicos; y por lo nuedeny tienen, u,, r'tti*" instancia,
de distinguirse del racismo cuando las distin-
menos un acad6mico (Pansini, !977) pensö que todos estosfactores fär"Äirrrmo deja
eran relevantes, al observar que la raza era la distincidn mäs que seanr,r-,b"r", originales,adquieren mültiples
läo",""""rquiera
importante utilizada por los guatemaltecos (<<blancos>) de elite de ^:mificad.os V seordenanen una;erarquiade poder'Los antropölogtls
de etnocentrismo
ascendencia europea relativamente <pura> para distinguirse de la lffä"" r."Uärsesentido mäs cdmodoscon la idea
rnutua mäs que discriminaci6n ierärquica)
nrayoria de los ladinos.3t/ ' äl.räi't*nrica e*clusiön
' ,,roü€eraunt6rminomenosevaluativo'Pero'comosanjek(1994)ha
Al no haber un debatesostenido sobreestostemas,la mayoria de ef s,rpri*lt el debatesobre tazay racismo de la academia
l"rätt"
nosobosperdimos de vistaelhecho de quelas conshuccionessociales progresistasino mäs bien un paso para
ä, f", gn UU. ,,ä fu. un paso
diferenciadoras (cualesquiera que sean sus bases) se ramifican a lo
evitarun tema Politico Pol6mico'
largo de dimensiones müItiples fcultura,lenguaje, clase,biologial para
que conforman la
explicar, defender y reproducir formas de exclusiön social cargadas Algunos de los antropölogos (e historiadores)
de los 1990(p."i', H"lu, 1995;Forster'1995; Little-Siebold'
de poder. Incluso aün cuando la cultura es la base principal para seneraciön
a las generaciones
hacer distinciones 6tnicas,si la distinci6n prohibe [o restringeen gtran ffi;, N;ir"n, 1S95)estäncomenzandoa cuestionar
manera)el mahimonio y lareproduccidn enhe grupos diferenciados, de academicosnorteamericanosen relacidn al tema de raza y
distintos grupospueden distinguirse.(ylo serän)utilizando rnäsde un ",u.l,iu' q"" un üuevo concepto (<<identidad>i para tratar el
;;;il v"
criterio (idioma, clase,biologia, ademäsde cultura) y las präcticasde "äriran postura dg tul las culturas'
t *" a" la äiferencia. Estos adoptan la
exclusiön tambifn se basarän en mäs de un criterio. Segün se nrul- oueseconstruyensiempreabasedeelementosfluidos,fragmentados,
tiplican los criterios, los grupos se distinguirän por mäs de un rasSo de varias. dimensianes
il;;; t prästados ordenados a 1o largo se
<<heredado> porque no pueden distinguirse fäcilmente entre sf los
[rr1o*"a; biologia, cultura, g6nero, sexualidad' poder' estilo)'
diferentesmecanismosde herencia. (Tanto la clasecomo la cultura asi müItipies y
äo*pi"rrd.n mejoi si se les ve desde la perspectiva_de
como el fenotipo pueden todos ser <<heredados>; es probable que Estageneraciön
."*üi"rrt", id.entidades(raza,clase,g6neroy demäs).
..<herencia> polisdmico -referido igualnnentea la por acad6micos
seaun t6rmino tan seha visto inspirada por los argumentospresentados
herencia cultural, propiedad y rasgos biolögicos- a causa de la ä;^;;il ip. cittov, 1ee4;I{all, rggz;williams'le'e; Michaels'
confusiön popular que existe sobre los mecanismos de transmisiön "i.,
1995;Anzaldüa, 19si; Gordon s'f', Trouillot' 1992J
y por feministas
cultural a lo largo de las generaciones).Puestoque la mayoria de los Las publicacionesde estagene-
[p.ei., Moote, 1995;Hooks, 1993)'3a/
sistemassocialeserigen fronteras entre distintos grupos sociales{sean iä.i0" son todavfapoco numerosascomo paraseranalizadas'
pero me
6stosnaciones,grupos 6'nicos, razas o clases)limitando y regrrlando voy a referir a alguirasde ellas en las siguientessecciones.quetratan
el mahimonio y las relaciones sexualesenfuelos grupos, la mayoria ,oür, po. qud los norteamericanoshan tenido tanta dificultad
con el
temade la raza en Am6rica Latina'
ttf
Pr"b"bl"mente sea significativo que Pansini eierciese como sacerdote durante
diez aios en la comunidad en la que desarrolld su tratlajo de campo y de ahi que 3a/ por y sobre los
tuviera un entendimiento mäs profundo sobre los sistemas de creencias y sobre la Tambidn se han visto influidos por la literatura escrita
1989}'Bastosy Camus(1992J
ideologia justilicativa de los guatemaltecos <blancosu,de lo que lo tuvieron la rnayoria intelectualesmayas{v6ase,p-ei., Cojti 1995;COCADI
describenel movimiento inielectual ]'sus fi8uras clave'
de los antmpdlogos.
L47
140
Distintos tipos de ierarquias raciales y sistemas familiares Me gustaria senalar ya desde el principio de mi exposiciön
que
algunosde los temas aqui consider"do, son muy espinosos.
iPor qu6 tuvieron los anhopöloggs norteamericanostanta dificultad
con los temas de la raza y el racismo en Guatemala?Como senal6 wagley argumentabaque todaslas formasde asignar
<<raza sociar>
antes, hay tres razones que explican nuestras dificultades: nuesho prestanalguna atenciön a la apariencia o fenotipo,"a
la ascendencia
etnocentrismo sobre la definicifin de raza; nuestra falta de atenciön a o descendenciay a la curtura ä nivel sociocultur"i, u.rrrq.ru
los dis-
la forma en la que parentescoy matrimonio reproducen la desigUal- tintos 6nfasisconducen a distintos tipos de sistemas.Er
6nfasis en el
dad social; y nuestro desarrollo inadecuado del concepto de cultura. estafussociocultural representa un considerable pot"nciar
para la
CharlesWagley dio unos primeros pasosimportantes con respectoal movilidad individual (e incluso gruparJ;el 6nfasis
en
primer problema en su artfculo de L959sobrela <razasocial>,autrque vez de en la herencia desdibuiid fronteras, de ""i" "p*i"ncia
tar forma que uno
p"rur"an bastantetf mi dos.Me gustariaelaborarsobresu tipolo- tiene un continuum-o jerarqufa racial (de, digamor, *a,
"hor" a mäs
gia para mostrar algunas de las diferencias sistemäticas que existieron oscuro)sin grupos claramente delimitador; Cof"ri, "i"ro
t" t
än la forma como norteamericanos y Egatemaltecosentendieroll lazä permite demarcar grupos raciales inequivocor,"i ,iu_j.""r, que "ruo"i"
haya
y cultura. Esto requiere que tome en cuenta tanto teorias populares reglasclaras para adjudicar una raza. sö puede colocar
a la gente de
como acadfmicas sobre descendenciay herencia, apariencia o belleza, herencia<<mixta> en un <gupo medio> (tai como ui*;ä
o en uno
sexualidad, mecenismos Ieploductivos y g6nero,Io cual sdlo puedo. delos exhemosde una distribucidn porarizada.En los
EE.uü., la regra
hacer de forma esquemätica. fPara un estudio mäs completo de estos de la hipodescendenciacoloca a los individuos de
herencia mixta en
temas en Guatemala, especialmenteaquellos relativos ataz2, clasey el polo del estatusmäs bajo; es decir, cualquier p"rroo"
ä descen_
g6nero,v6aseSmith 1995,1997).En otras palabras,requiere que tome dencia claramente africana es conside.ada^afroam*ria.o- ..negra,,
än cuenta los sistemas guatemaltecos (especialmenteladinos) de (ponidndose poca atenciön en el color), una
p".roo" d" h"."o"i"
g6nero, parentesco y matrimonio, a los que casi ningün antropdlogo <<hispana>es considerada -hispanä ,.**Onr.ru/
9|gamentg o En
iorteamericano prestd atenciön en el pasado.tt/ M6xico y Guatemala,pot er conhario, mien-hasque
a una poblacidn
grandeprincipalmente <mestiza>se la diferencü
Parapoder establecerla dinämica histdrica bäsicade los sistemas ;;il;äaciones
<blanco e <<india>, el estatusde un mestizoindividuar tambidn
de razalclase/gdnerode Guatemala, trato aqui las relacionespostuladas se ve
irfluido por laapariencia, caracterfsticascurturabr
como si fuesen relativamente fiias, a pesar de que durante los ültimos t;q;;;. En am-
boscasos,sin embargo,las principales basespara
20 af,os estas relaciones han experimentado considerables cambios. adquirir y adjudicar
una identidad son la herencia y er parentäsco.
En esta discusiön no intento sepala.rlos temasrelativos a sistemasde Lo que realmente
diferenciaa los sistemasde categJrfasiaciales,
categorias raciales y la construccidn de sistemasde familia/gfne1o, ya entonces,esel nümero
dey el cömo se hata a ra gente i" n"r"rr"i" <<mixta>
que ion profundamente interdependientes. Sin embargo, si estudio -lo cual uene que
ver con acuerdos de.emparejamiento (matrimonio
por separadoalgunos de los temasrelativos a la cultura ftal y como los y 10.*",
de reproducciönf y tipor de paniarc"ao-- "tt"r-
äntop$logos la teorizan) porque suponen una problemätica diferente. l1dy"r
habianestudiado hasta los-aflds 1gg0.
t"tar--q,r" oo ,"

tt/
H" de sef,alar el trabajo extremndanrente importante llevado a cabo por taurel tu/
Lo, sistemascatesöricosno son simples,
Bossen, en 1984, scbre parentesco, mahimonio y relaciones de g4nem. Adelantada sin embargo;es bien sabidoque en los
E'uu' tanto los .blanc'os,,como los unegÄs,
a su tiempo, el trabajo de Bossen sobre gdnem fue en gran parte ip.orado por los an- hacen distiicioous b"su J"olo. y q,r"
eDcieftasregionesde los.EE.tfu'.
tropdlogos norteamericanos que esfudiaron 6ualsmala hasta los aios 1990 {v6aseC r" pur"irroo "o
a variasidentidades <mixas>
n. Smitn 1995). Puede que €sta seauna de las razones por las que comenzö a trabaiar Dominguez19s6).I^acrasificac'iön*.ääärn
{vdase "uquetas,a a
ercasode los EE.UU.,et sistema la crasificaciöniuridica; en
en China, donde hacia tiempo que las relaciones de genem se tomaban en serio. tegal ha,tili;; h *cil;;i;;ä:;f,aur,"i".

142 143
 En Norteamfrica, las relacionessexualesentre gentede distintas
(razas sociales))han estadosiempre estigmatizadas,asi como los hijos
generalmente
de herencia mixta. Las relacionessexualesinterraciales
se daban entre hombre <blancosode clase alta
(con frecuencia
propietarios de esclavosi y mujeres que no elan blancas; pocas de
ästas relaciones fueron legitimadas a travds clel matrimonio' Los
hombres <<blancos> casi siempre se casaroncon mujeres de su misma
,*t" y estatus sccial y tuvieron sus descendlentesreconocidoso
legitimos con sus esposa.s; los hijos que tenian con ohas mujeres eran
por sus *"dt"r y tenian el mismo estatussocial y racial que
,o, *"dt*r. (si su madre era una esclavanegla, el hijo era un esclavo
"rLdo,
negro.) Ios padres de clase alta präcticamente no hacian demandas
,oü.* sus hijos ilegitimos e hicieron poco para cambiar su estatus.l,as
mujeres ubläncasJy los hombres de color no mantenian relaciones
sexuaies;si tan sölo hubiese una sospechade una transgresiönsexual
oo* pareja asi, se los desterrabao mataba a los dos. Hist6ri-
"ot "
camente, las uniones mixtas de cualquier tipo eran relativamentepoco
comunes excepto en la regidn de las plantaciones del sur, donde los
nijo$ a" hereniia mixta permanecfanidentificados con sus madres.
I
En Am6rica Latina, el sisterna patriarcal general era parecido
aunque algo mäs relajado. se esperabaque los varones <<blancos>
podJrosos-mantuviesen relaciones regularmente tanto con mujeres
qo* oo eran blancas corno con <blancas>y se esperabaqrre tuviesen
üi;o, ambasclasesd.emujeres. Al contrario que sus hombres, se
"op
esperaba que las muieres <<blancas> de clase alta fuesen virgenes
*o'1", del matrimonio y mondgamasdespu6s de 6ste. sin embargo,
en An€rica Latina, al contrario que en Norteam6rica, se esperaba
q"u ios hombres <<blancos> de clase acomodadadiesen algün tipo de
reconoclmiento y ayuda a su descendenciade sangrc<<mixta>' Desde
del
i,r"go, sus hereäeros legitimos eran los hijos de sus esposas
mismo estatus;aunque sus hijos <ilegitimos> recibian con frecuencia
por tener
alguna ayuda (educaciön,por ejemplo)y reconocimiento
a su
uri p"drä <blanco>. Los hombres acomodados reconocian
en parte porque cuantos
desdendenciailegitima voluntariamente,
mäs hijos tuviesen mäs meioraria su estatus{tanto si eran legitimos
como ilegitimos). Sin emtrargo,el estatus de los hombres acomo-
No
dados cle Norteamdricano aumentabacon sus hijos ilegitimos-
144
estä totalmente claro por qu6 existfa esta diferencia: puede que
hubiesetenido que ver con el mayor poderque tenian las mujeresde
las elites en Nortearndrica;puede que hubiese tenido que ver con
queel poder sexualy a la fecundidad tuviesenun 6nfasismayor en
ArndricaLatina; puede que irubiese tenido que ver con la Iglesia
Cattilica.El modelo latinoamericano no era necesariamentemäs
benigno,pero produjo mucha uräsgentede herenciamixta asi como
un estatus<medio>para esagente.
En las regiones esclavistas {Brasil, el Caribe), ias esclavas
concubinasestablesde los hombres <blancos>asi como sus hijos de
herencia<<mixta>> eran manumitidos con frecuencia por los amantes/
padres,los cuales eran tambi6n sus dueflos (R. T. Smith, 1982;
Higrnan,1976;Degler,1971.). Los hijos de herenciamixta seencontra-
ban en una ambigua categoria<<media>, dentro de la cual la movilidad
social era relativamente alta. La gente de la categoria <media> se
dividia en varias jerarqufas-ocupacional, riqueza, color. El color era
especialmenteimportante para las mujeres, cuya fortuna y posi-
bilidadesmaritalesdependianmucho mäs de la apariencia (y color)
que las de los hombres. Varios acaddmicoshan seflalado que las
personasde herenciamixta en Brasil y el Caribe nunca conforma-
ron una identidad o grupo sociocultural, al ser estosindividuos mäs
competitivos dentro de estacategoria que fuera de ella (Degler, 797'I-.;
Skidmore,1993;R. T. Srnith, 1988, 1992).Lo mismo se puede decir
de los mestizos latinoamericanos.El tiempo, la clase social y los
carnbiospoliticos dividieron aün mäs a la gente de la clase <mixta>.
En las regiones no esclavistas de Arn6rica Latina, donde las
personasque no eran de herencia blanca eran principalmente indios
(estoincluye a M6xico y Guatemala),las reglas del matrimonio y el
patriarcadoeran rnuy parecidasa las de las regionesesclavistas,con
una diferencia marcada.Las comunidades indigenas (a diferencia de
las comunidades negras) fueron capacesde <<cerrarse> a las incur-
siones sexualespredatorias de los hombres <blancos>y guardar
celosainentela sexualidad de sus mujeres. Las mujeres de tales
cornunidades no estaban tan fuertemente constreflidas como las
mujetes de las elites: no se esperabaque llegasenvirgenes al matri-
monio y no tenian que evitar la compafliade hombresdesconocidos
r45
deepu6sdel mahimonio. Perosf deblan evitar a los hombresde fuera "adoptaban el nacionarismoy materialismo
del estado
de euscomunidades,especialmentea los hombresque no eran indl- mexicano'siendola-metaeugen6sica no valorarravari"d.J a" tipo,
bioldgicosy culturalesq.," c-ooformabanla nacidnmexicana,sino
geneß.Por estarazdn, despu6sdel periodo delaconquista,la mayorfa eliminarIa heterogeneidäd enfavordeunanuevaho-og".r"ia"d, ul
de los espaf,olesque mantuvieron relacionesoctramaritalescon mu- mestizoeuropeizado" (1991:150).
ieres(lo cud se esperabaque hiciesen)las tuvierroncon muieresque sabemos, por el trabajo nevado a cabo en otras
se habfan marchado o habfan sido expulsadasde sus comunidades regiones der
mundo, que präcticamente todos los proyectosnacionalistas
(indfgenaso mestizas).En estossistemassocialee,entonces,el mes- alaban
a algunos y marginan de los gr.rpo, 6tnicos
tizafebiol6gico y crrlturd eracorriente,el estatusdel padreiugdalgün 19-hor (o raciales) de la
nac-io-n(v6ase,p. ei., Gilroy, rggz; Wiitiams, tggt; Soior,,
papel a la hora de adiudicar un estatusy una cultrua a sus hiios. fle Malkli, 19gs).Ademäs parecerfadesprendersede esie
1990;
nugvq, laSmuiereSqblancasrraramentemantuvieronrelacionescon racismo <<moderno> de este tipo penetra mucho
trabajo que er
hombres de color. Este segundomodelo cambi6poco a poco con el p.ozurrdamente
{hastael ego)que ohos tipos de iacismo. -at
üempo, puesto que los hombres mestizosque adquirfan riqueza y
podenutilizaron esa riqueza y @er para casarsecon muieresde Los descendientes.<legitimos> de padresy madres <<blan6ssyr,
posici6n mäselevadapor su color y cultura. [a esposaque sepreferla Mdxico y Guatemala_, siempre tuvieron un estatusmäs erevadoque los "o
hijos, <ilegitimos> de herencia mixta, lo cual *"nt
eraaquellade color mäsclaro que el de su maridoyque tenfa muchos rrro la fuerte
correlaci6n existente enhe raza, cultura y estatus (para
de los ahibutos culturales de la oligarqula tradicional o de los muy Guatemala
v6ase,p. ej.,MartinezpeLäe2,1g71; CasausArzü, lggij. por lo tanto,el
emuladoseuropeos.fle esaforma, el capital @ltural, econdmicoy
mestizajeno erradicö las distincionesde color o racio-culturales
epiddrmicoombinado delos hiios de la pareiaeratfpicamentemayor hizo impracticables, como han sugerido varios
ni las
que el de sus padres. americanos(p. ej. Tannenbaum, ts+21-Las jerarquias """äe*i"os
norte-
s6lo habrian
De estasuerte,seconsiderabaque el mestizajeen Am6ricalatina desaparecidosi las reracionessexuaräsenne ras
distintas razas y
rblanqueabu y civilizaba> simult6neamente(e decir,eraqn ploceso culfuras hubiesen sido promiscuas-lo cual nunca
fue el caso. Las
muieres de las elites ten(an un gran inter6s
biol6gico asl como culttlra! -procesofuertementealentado.El hecho normas
estrictas de matrimonio y legitimidad, las cuales "r,les"orrr"**
de que el procesofuesegeneral,multigeneracionaly significaseuna hacian conservar
supropiovalor. De ahf que tanto el mahimonio como
emefor{a>tanto biolfgica mmo cultual, indica que los latinoameri- el nacimiento de
hijos legitimos siemprefueran importantes a la
canosaperrasaisUngutanenhe cultuay biologfa.Nancyleys Stepan estatus;y siempre sevalord mucho la blancura (que
hora de adquirir un
(1991)sefida quela celebraci6nlatinoamericanadela mezclabiolfgica belleza) particularmente_ enhe las mujeres. Los
era la clave para la
-la cual, segrlnpensabanlos intelectualesde la 6poca,<blanquearfa> claramentemestizospodian mejorar su estafusgeneral
hombres que eran
(embellecerfa)y mejorar{aculturalmentea susnacioner no terminf por medio de su
riqueza o poder. sin embargo, 6stos contrib-uyero.r'"
con las presuncionesracistasenropeasy norteamericanas. El pro- *".rt"ner la
pdsitode estaret6ricasobreuna <razo mestizanrperioretacuestionar feyrquia segünel color al casarseconsistentemänte *,r;"."s mäs
blancasque ellos y de mayor distincidn <.culturab. "or,
Al observar ras
el racismo ecterior (el racismo norteamericanocontra los latino- preferenciasmahimoniales de las elites
de M6xico, cr""alrl"mnitz_
americanos)y 'reJTejabauna considembleonsiedaden rclaciöna la Arfler cita-el popular dicho mexicano, *gringos
no,gringo, sf.,, Las
identidadmcial latinoameicano"(1991:149). En el casode M6xico, mujeres <blancas>extrajeras eran bienvenidas
en el procesode mestizaie denbo der circulo
por eiemplo, sdlo se admitla a los indios dirigente,al conhario que los hombres<blancos>
A ambos
mocicanosi se les valoraba por su color y culfura, sin "*t*i".",
embargo, las mujeres no

146 147

representabanla amenazapolltica de los hombres.En estesentido, Alan
i"i*h, t19gg) observa que iningün presidente mexicano ha estado
orrJ"" con urxr muier mfs oscula que 6l! Se puede observar un
"a*ao
patrfn muy similar en Guatemala, a lo largo de la historiay hoy en dfa.
iinto es p"rfo"uUtmeote obrrio enbe las elites (CasausArzü, 1(X)2),pmo
esue nfodelo mäs general enel sentido de que, aunque los mestizosde
rtna
clases mis baias ti"o*tr mültiples relaciones sscuales, plafieren
esposade piel m6s clara (v6aseC. A Smith' 1995, 1gtl7)'
Äl estar relacionados los proeos sociales con el color y la
cblancura.r,6stos tenfun, por lo tanto, efectos bioldgicos: los ladinos
de las clases altas tienen un mlor mucho mfs claro que los indios,
principalmente porque han_seguidg,de forma consistente, estrategias
qor,oo"o a muieres-de piel näs,c.lara-y mäs europeas con hombres
y, de esta forma, -el aTotisano,o forma de eva-
Äeu oi*rr. "gmo
luacidn sodäl penetra hästa el nivel rnfs intimo. En las familias se
punto de que 6stas
haen distinciones a causa del color hasta el
influyen en decisiones sobre educaci6ny empleo. Entre -!* conocidos
para
ladinos con fresuencia se elegfa a los hiios de un color mäs claro
segph eshrdios superiofes en vez de a los hiios mäs ossuros, siendo la
ufrU*AOo ootm"l-"nte qlre' ellos tienen una mayor opottunidad de
lo
teÄer6xin, de llegor a *t algo.' Nunca hrve completamente claro
quelesto siggifrüba: que los htios de color m6s claro eran consi-
derados intrfnsecamente supedores o que se pensaba que estarfan
afectaba
*uoo, suietos al racismo (o colorismolguatemalteco, lo cual
sus oportunidades de 6xito. Cuando se bataba de tomar decisiones
A maü'imonio, se discuüa tanto sobre el color como sobre la
-"U1" o <promesa)r,especialmente al evaluar a las muieres.3?[o que
riqueza
.J"q"trA alarmantädel <colorismo>en Guatemalafue c6mo habfa
p"oätr"ao uasta el ego:muchos individuos de piel mäs oscura sevefan
"iär
3?
n favoritismo por el solsl tamhidn se pudo encontrar entre
a sce n d ier ons oc ialme n te q u e y o c o n o c fe n T o to n i capdn-ysedi ol ami sma
explicaci6n- Era nuy *-ä vJr deutro de estas familias mahirnonios aneglados
de dxito y muieres a: g"1.f fu. No se hicieron disti-nciones
"JU".Uo-fr"s ; ;"*
-is
del color än comrmidades indlgeras mÄs igualitarias y hab{a poca
;;ä;"t*
;$"d" de que las muiems de piel m6s clara se casasencon hombres
dentro de esascomunidades'
comomenosdeseables y con menosprobabilidadesde tener6xito que
los individuos de piel mäs clara.
Los antropölogosnorteamericanosapetrasse dieron cuenta de
esto.Dieronpor sentadoque s6loaquelloselementosde la cultura que
permanecianestrictamenteen el dominio cultural [vestido,idioma,
costumbres)tenian importancia pa-raei procesode ladinizacidn, a
diferenciade los elementosculturalesque tenian efectosbioiögicos:
el 6nfasisen el blanqueamiento,las normas reguladorasdel matri-
monio y la reproduccidny ia transmisiön de ia cultura. Al separar
estrictamentecultura y biologia ignoraron c6mo ambos fenömenos
habian llegadoa unirse y a ser interdependientes.Nadie analizö el
hechode quelaladinizaciön fueseun procesomulti-generacionalpara
intentar dlegar a serD mäs europeo, tanto fenotipica como cul-
turalmente.Nadie estudid las reglasreproductivas que conveltian en
esposasa las mujeres de piel mäs clara cuya castidad habia sido
celosamentecustodiada,mientras que convertia en concubinas a las
mujeresde piel mäs oscura y de virtud cuestionable {quizä porque
erandemasiadopobrespara poder ser vigiladas constanternentej;que
separabael destino econörnico y mariial de los hijos legitimos e ile-
gitimosy, en ültima instancia, separabaa los grupos de ladinos entre
si segrinsu estrategiareproductiva y su comportamiento sexual,tanto
como separda los iadinos de los indios. Y sin embargo,las normas
culturales que regian el matrirnonio y el concubinato reprodujeron
distinciones sociales (de color, fenotipo, cultura y modales) que se
hadujeronen raza.Laspräcticas que reproducian distinciones de tipo
cultural y biolögico iban con frecuencia unidas a una conviccidn
darwinista/lamarckianade los ladinos de que aquellosindividuos que
hacianesfuerzospara <asimilarse>(o ladinizarse)eranbiolögicamente
superioresa aquellos que no los hacfan. De esta forma, <cultura> e
ideologiallegaron a formar parte del proceso de <formaciön de una
raza). Aunque ciertos marcadoresculturales podian por si mismos
familias indias que ponera la genteen posicidn de ser ladinos potencialmente en cierto
momento,Ia gente tenia que hacer esfuerzospara mejorar cultural y
biol6gicamentea lo largode variasgeneracionespara poder consoiidar
su posicidrncomo ladinos. ZCömo,en estascircunstancias,no se dio
cuentael pueblo ladino que raza y cultura eran manifestaciones
mäs ricos
alternativasdel mismo fendmeno hered.itario'l

148 lrlg
 La falta de atenciön prestada a los temas de
g6ner9,s/ sistemas racismo es que los <rasgosculturales> ten(an tanta capacidad para
y mültiples procesos präcticasdiscriminatorias como los <rasgosraciales>.
familiares, sexualidad, lägiti*idad, color los desencadenar
y biolögica indios y
iorrot,ro"aos en la reproäucci6n cultual -de Si los guatemaltecosno distinguian enhe rasgos culturales y
ptrra entender c6mo los
ft;;r explica el problema norteamericano racialesde la misma maneraen que lo hacianlos anhopdlogos-si ellos
Muy pocos anho-
guatemattäco, p*tcibian y consbuian las razas' pensabanque los aspectosculfurales o de la psique eran tan innatos
mahimoniales y de parentesco de los
iOtogo, estudiaron los arräglos como los aspectosbiolögicos- Zqud derechoteniamos nosohos para
lad.inos d"eGuatemala, instituciones socialesdave que ligaban razay imponer nueshas distinciones entre wa y cultura en esa situaciön,
,
culfura en eI continuo proceso de mestizaie.Sehicieronrelativamente especialmente sin haberlaesfudiado?Sabiamosque razaycultura bran
sobre lü i-Fresionantemente diferentes arreglos matri-
po"* antdnimos en el ldxico antropolögico, pero no habia forma de que
"rt"aios con los arrqSlos
*ooi"t", y de parentesco indios que, en contraste supidramosc6mo taz-aycultura sehaslapabanpara los guatemaltecos:
phneados para pr_evenir el mes'tizaje cultural o bio-
|"dil, pl"ciä simplemente asumimos que si un individuo podia cambiar de grupo
Dada considerable
la
l6gico @ässen,1984, fue la principalcxcepci6n)- <6tnico>al adquirir ciertas caracteristicasculturales {permaneciendo
generalmente prestada p9r los antropologos a estos temas' la somäticamenteigual)-lo cual no eraposibleen el sistemaracial norte-
estudios sobre
ünica exiticaciön ptauiibte lnra laausencia de tales
"tI""iO" americano- Iaraza. no eran un problema y el racismo no edstia. Sin
norteamericanos
Guatemia esla falü de voluntad de los anhopölogos embargo,no tenfamos ninguna evidencia que nos aseguraseque los
palasometelsusconcelrcionesetnoc6ntricassobreraza,culturay guatemaltecostenfan el mismo sistemade categorfasque nosohos y si
hs varias cultrnas de Guatemala.s/
iarentesco al escrutinio äe una considerable informaciön que ellos no tenian: la präctica ladina
comün (en cualquier nivel de clasey estatus)de llamar <indios revesti-
Peroicuälserialaexplicaciöndequelosantropdlogosnose
A pesar dos>a aquellosindividuos cuya herenciaeraincierta; la creenciade que
o"ofu""o del racismo como fen6meno cultural en Guatemala?
d"To al respecto,-no$epuede pong en duda que l'a uno podia <mejoran su raza y cultura siguiendo ciertas eshategias
äuiät
los escal- ones mäs reproductivas;la creenciade que aquellosindios que rehusabanadoptar
discriminaciön en conha deios inöos los relqö a
""g"ti"*
la cultura ladina eran biolögicamente inferiores; y asi sucesivamente.
U"iotauf.;erarquiaemndmica,evitöquetuvieranpoderpolitimfuera
y mantuvo ungradode divisidnsocial entrcellos Puedeque los anhopölogos hayan querido deshacersedel racismo en
äJr*
"o-"oiaäa"s alascastas-en el mundo destruyendo el concepto de raza. Pero esta täctica no fun-
y los ladinos,la cual ä asemeiabanäsalaportheidq*e
(reservast narginales y cion6. La mayor(a de la gente no hace distinciones sistemäticasentre
el sentido de que se mantenia a los indim en
los intercambios wÄy culfura.
6stoss6lo entraban en contacf o con los ladinos durante
blanco> (como lohabia denominado
e;Up" econömico. El <domirrio Nuestros problemas con eI concepto de cultura
que induso los l;adinos de piel
frA"äii Siegel) era tan pronunciado
razön por la que
oscura se sintieron discriminados. Pareceque la ünica El debateque se estä dando en los 1990 sobre el <racismo cultural>
oomo
los anhopdlogos no identificaronestas präcticasdiscriminatorias irdnicamentereplica muchas de las dificultades que los antropölogos
que estudian Guatemala han tenido con los conceptos de raza y
tu/
cultura.no/Etienne Balibar introdujo la noci6n de <racismocultural>
V6""" nota 35-
tn/ ruta enonne
O*b"rf" aclarar esto sefialando q'e los anhopotogos Festamn to/
nl p.i*"r acad6micoque se ocup6 del <nuevo>racismofue Martin Barker(1981J,
tales omo matrimonios
atenciön a Ios tipos <ex6ticos> de sistemas de lnrentesco, el cual observöc6mo se estabadesarrollandouna clara ideologia racial alrededorde
ä"t p.l-* *äa.", ,151smasde 'mitades- y lnrentesco manilineal Si el sistema i,nmigrantesdel Tercer Mundo que iban a Europa. Balibar y Stolcke han llevado esta
-
de Darentesco parccia(noünab {esdecir, pahiarcal), selepresta}rareliativamentepoca critica del (nuevo) racismo al campo del racismo (culhral>-
lugar, no s6lo en Guatemala o America l-atina-
"i"lää"".idquier
150 151
para ab:ucar el poderoso sentiniento anti-inmiSratorio existente
actualmente en Europa que piantea la inconmensurabilidad de las
culturas, las cuales se creian frjas e inmutables {algunas de ellas 'uru;-
versolistas y ptogrcsistos, o{rus inemediablemenb pfüailofistas y
primitivas' [1990:25]), en forma parecida a como una generacidn
anterior planteö la inconmensurabilidad de las razÄs.El racismo cul-
hrral es, segün 6l sugiere:
'un racismo cuyo tema dominante no es la herencia bioldgica
sino ia insuperabilidad de las diferencias culturales, un nrcismo que,
a prirnera vista, uo posfutä la superioridad de ciertos grupos o
pueblos con relacidn a otos sino <s6lo>el periuicio de abolir las
fronteras, la incompa.tibilidad entre los estilos de vida y las tra-
diciones' (199O:21)-
-[Esta] connbinaci6n de präcticas, discursos y representaciones
desbo de una red de estereotipoc afectivos nos permite explicar Ia
formacidn de una comunidad racista---y tarnhi€n laformaen laEre,
ccino un refleio en un espeio, individuos y colectivos que son pmsa
del racismo {sus <obietm>} se encuentran constrcfüdos ä vexsecomo
una comunidad" {1990:18)"
Baliber sostiene que los acaddmicos han dado demasiada impor-
tancia a las iustificaciones (elaboradas por los intelectuales) de las
präcticas excluyentes, al cambiar del leguaje de labiologia al lenguaie
de la cultura o la historia, mientras las iustificaciones no cannbiamn
la naturaleza o los efectos de las präcticas excluyentes. PaFa Balibar,
el lenguaie de la justificacidn no es lo que define el racismo, sino las
präcticas. Al primero io considera ideolagia, a las segundas, conducta
polftica. Io que Balibar enctlentra de <nuevo> e importante en
relaciön al racismo culfural es que 6ste prueba que el razonamiento
bioldgico no es la ünica manera de <fijao y naturalizar la conducta y
afinidades humanas, para despuds ordenarlas jerärquicamente; esto
puede hacerse igual d; fäcilmente on el concepto de cultura. üsta es,
entonces, no una nueva präctica sino una rnuy antigua-
Verena Stolcke (1995] no estä de acuerdo con Balibar e intenta
diferenciai lo que gllz dgasmina <fundanenialismo cultural> del
racismo biolögico, aun cuando los encuentra igualmente esencia-
lizantes y con pareciclas consecuencias sociales y polfticas. El däsico
racismo hioldgico del siglo XIX surgi6, segün Stolcke, para naturali"ir
y explicar un orden sociopolftico jerärquico cuyas victimas se creyd
queseencontrabanen esasituacidn (enel ültimo peldaio de la ierar-
quia] a causade sus propios defectosinherentes,innatos {racialesJ.
Stolckedescribeel fundamentalismocultural como un iipo diferente
deideologiaporqueno <inferioriza>al otro,sinoque solamentesefiala
la inconmensurabilidadde la cultura del otro en relacidn a la cultura
de uno mismo (1995:aj.Seflalaque incluso aunque 6ste consid.ere
como peligrosa ia <mezcla cultural> de ideniidades eruaizadas
territorialmente,el fundamentalismo cultural tiene en cuenta la <asi-
miiacidn> 1r,por lo tanto, es mäs rnaleable o acomodaticio que el
racismobiolögico.Al mismo tiempo, ella percibe que la hostilidad
contra los inmigrantes podria tener visos racistas, siendo una ex-
presidn popular comün que '?os inmigrantes llevan ntarcada su
extranjeriaen la frente" (1995:8].Sin embargo,Stolcke sostieneque
mientras los idedlogos del fundamentalismo culturai reifican y
naturalizan las fronteras culturales y las diferencias, hacen grandes
esfuerzospara que no se les considere racistas.al/
En su anäiisis, Stolcke sölo toma en cuenta las construcciones
intelectualesdel racismo;no haceningrin intento paraocuparsetle los
sentirnientospopuiares.
Lo que me resuita interesante de la nocidn de Stolcke sobre el
fundamentalismocultural esque 6stadescribatan bien algunosde los
supuestosproblernäticosimbuidos en la concepciönde cultura de los
antropölogosnorteamericanos: 1) que las retdricas pollticas y aca-
ddrnicas sobre ia exclusidn puedan ser nitidamente separadasy
analizadas aparte de las <reacciones y sentimientos populares>
(1995:3);2j que raza j/ cultura sean maneras fundamentalmente
diferentesde interpretar las diferencias humanas; y 3J que aquellos
drdenes sociales que permiten la "transici6n" o la <asimilaci6n>
nt/
Stoi"k, no se ocupa del racismo popular, sino mäsbien de las formas püblicas
e inteiectuales de racismo. Olvida sefiaial que en el debate actuatr,los iunda-
meutalistasculturales hacengrandesesfirerzospor distanciarsedel racisrrrodel siglo
)'iIX debido a los fallos poiiticos e ideolögicos de la Aiemanianazi. Sin ernbargo,
desdemi punto de vista, los verdaderosternastienen que vei con las formas popu-
iareso del <sentid'.rcomün>rrie racismo en las que no se hace una clara distinci6n
entrela biologia y la cultrua.
153
 pero no
puedan ser excluyentes, esencialistas o fundamentalistas, no prestemosatenciön a cömo las relacionesde poder y la ideologia
ir:"rrä.;iöbü; de esta posiciö1es su separatismo radical de seven involucrados en la creaciön de la raza y li cultura, el racismo
social
ä;;"Läen la ret6rica, uolu ideologia y en la organizaci6n cultural es un peligro real y presente.y miennas no ataquemoslos
de c6mo la mayoria de los
-lo cual no es en absoluto caracteristico existencialismostejidos en nuesfooactual concepto de c'ultura, ese
y cultura, tegrr1 su sentido comün' conceptono podrä erradicar los biologismos que existen en las mäs
seres humanos entiende re?a
forma de entenderrazaycul-
Tomando en cuenta lo que p"t"t* serla popularesconcepcionesde cultura.
;;g,1" el sentido -au la mayoria de la gente en la mayoria Tambi6n senospodrfa acusarde no haberlespregrptado a los mayas
"o*,ro
la interpretaci6n acad6mica de estos fenömetros
ääl"r"J*ras_, la cultura conlos gu9 foabaiamossi eran objetode racismo-o qu6 experimentaban
refleiar lan?y
deberia, de algunal"t*t, a"t rcz6nd9l por idee y c6molo habrian descrito. se ha desarrolladoen fa riluma d6cadaun
realidad ünica creadas
como dos manifestaJones de una lögica' Uno significativomovimiento mayacuyospor[avocesintelectuales
äö ] indiferentes a la incompatibilidad @emetrio
"r"" """irr"" u organizacidn social son coiti, Demehio RodriguezGuajän,Victor Montejo, Eniique sam colop,
deberia medir si una ret6rica, ideologia hma otzoy) han contado todos gräficamente sus expeiiencias con el
de la exclusi6n
ärri", por medio du lo que 6stas hagan en el campo racismoen Guatemala.las voces püblicas de los intälect'ales mayas,
que desplieguen'
;ht;; p.t mediodeldpo de aparaioiustificativo nunra bugcadaspor los anhopölogosnorteamericanosantesdela d6cada
a la manera en que los
iDdnde nos deia esto en relaciön de la violencia, han hecho que <estaile la burbujo del racismo
en
de la raza y la cultura -y
antrop6logos norteamericanos se ocuparon Guatemala.Ahora muchos ladinos reconocensus sentimientosracistas
rraertqg w9' sin lugar a dudas' y estän-luchando para aceptarlos.y, ahora, präcticamente todos
del racismo culturJen Guatemala? ros
culhual) existe, y siempre ha
el <racismo> (tanto biolögico como anhopdlogosnorteamericanosque eshrdianGuatemalaaceptancon poca
antropölogos norteamericanos
existido, en Guatemalt I qo" los discusidn el hecho de que el racismo sea y siempre häya sido
una
uu" la manera en la que ellos caracteristicaimportante de la sociedadguatemalteca.Esie fenomeno
aborreclan v*rrc ffi" """rtionaba
habiandelineadoyseparadolosconceptosderazaycultura.Cuando q* me pregrrntepor qu6 gentecomo yo,
lry eue escuchamosmuchas
1offroq* este dilema,los antrop6lo-gosno regresaron historiassobre el racismo provenientesde los *"y, <nointelecfuales>
cultura
;jö;#pios bSsicosy preguntaron.cdmo entendian raTay
"ooiooi", conlosque habajamoshacemucho tiempo, no lucüamosmäsduramente
nn ääUio, ellos (nosotros) utilizamos nueshas paraintentar entendery representarel fändmenode la razay
fo, gi"t"*"ftecos. el racismo
resolvimos que el origen de la discriminacidn
definiciones y-".rtto" en Guatemala. Todos nosohos estamosahapados en tos'paradigma,
;;6i",
än öuatenala era la eo-vez de la raza. Entendimos que esto reinantesen nuesho tiempo. sin embargo,la anhopologia precia
ä de
podlasuperarsepormeaiodeunaladinizaci6ngradual,lacual aprendersobre las consbuccionessociaresde los uänorl,
oä" de los
nosotros aso**u *a inevitable. No se nos puede culpar por nuesba paradigmasoccidentales.ver cömo explotabala burbuja "r,
del racismo en
falta de *ot"oaiJ*ito y previsi6n de la räsistencia y fuerza de la GuateTylaha sido para mf ro" reveradorasobrec6mo los
asimilacionistas o la resultante "*p"ri"ncia
cultura indfgena ante los-intentos anhop6logosse encuentran abapados en las redesde ro, propio, sigri-
que se daria entre indios y ladinos- si se nos ficados,raramentecapacesde cuestionaresossignific"oos
i;rJä"io""o""iente sio poner su
puede culp"., oo oüJ"oi", por no describir
adecuadamentelos efectos confiTza en perspectivas alternativas del mirndo q,r" -ääo,
y Balibar, po,
del <racismo rr"t;n öuatemala. como seflalan stolcke sentado.
""tt anbopol-6qi"g cultura
de
el hecho de que p"-J" "tilizar el concepto
"" tanü facilidad como el Y tambi6n se nos puede acusar de haber permitido
para iusti{icar praiticas discriminatorias'con conceptoantropolögico central de cultura haya permanecido
que el
que todos los anbopölogos se preocu'
äoncäpto de raza, deberla hacer ucamentetan oscuro.Ideamosel concepto
anari-
t6rminos. Mienbas
;;;;"'d" distinsui.y aclarar el significado de los de cultura paraexplicar las

154 155
 Bibliografia
diferenciashumanasentdrminosd.istintosalosraciales.I,ohicimos
en los contextos
, de los horrores del racismo establecido
"J "."* nacionalist'a' Pero a] establecer el conceptc de cultuia' no Adarrrs,Ricbard N. 1I 56. Cultural Surveysof Panam a-Nicarogua-Guatem al a-
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""ittf"f
;;i;;rs su relaci6n con ohas formas de diferencias vforld Hea]th orgar:ization. (La secciönsobreGuatemalafue traducida
decir,c6mosereiacionanlasdi-ferenciascu]turdesconlasöferencias eu 1956 cornoEncuestasabrcls cultura de los ladinosde Guatemclo nor
sociales,conlavariac!önbioldgiea,conlasdiferenciasdeestilo'can el Seminario de IntegracidnSocial, Guatemala.)
i", ntiiricas- Al deiarlo como un terreno inexplorado e 1957, ed. Political Changesin Guxtenutlan indian Commwnities:A
y con un
iä.pir*ao, lo ,rtili"u-os para exqlirylo todo {slminatrcs
"-p-ri"ncia"
Slrmposium.Nueva Orlea;rs:MAzuP, Tulaae Uuive;sity.
nada' Tarnpoc;c exploramos
concepto,"o r*"ogudo que no explicaba 1958."The problemofnationalcultureinCentralAmerica".pp. 341-
imaginaciön popul"r entendia las djferencias hrmanas 1r
;;"'i" y con restrrectoa 59 en P. Bosch-Gimpera, ed., Nfiscel]anes PauI Rivet, octogenorio dicata
;ä; ese eien.limientÄ vatiaba culturalmente ffi . M6xico: Congreso Internacional de America n i stas-
determinad***tperiuociascolonialesynacionales'sinembergo'es
descolonizar ia antropal'gia 1960. "Explotacidn de Ia maderaen el municipio de Totonicapän."
crucial explorar estostemas si quereuros
Boletindel Instituto IndigenistaNacionql Z:7-31.
Yhacerqueseaconr.incentepciiticayanaliticanreute.Eslmremosque
tercera gene-
il;ääcos latinoamericanistas y guatemalistasde la 1967. "Nationalization." pp. 469-B9 en Handboakof Mi ddle Ameri ccn
racifn asu311er! estatarea- lndians, Vol. 6. M. Nash, ed. Austin: Universiiy of Texas Fress.
197O.Crucifixianby Power.Austin: University of Texas Press.
Ag'adeciulie lrtas
1994."Ladinizaci6ae historia: ei casode Guatemala".Mesaam1ricq
Megustariaagra<ieceramisestudiantesKathyDitrl'SilviaEscarcega- y 28:289-3AL
y Circe-S-turm' qlre son tan duros con mi lögica
i"ää" u,". Gieene ütiles ccmentarios a este Nonso, Ana F-4aria.1995. Threod of Blood: Colonialism, fr"evalution, and
estilo como yo ,o CON los sltyos'. sus
'6y a Aran Yengoyan y Gendei'on lvfexico'sNordhern Fronüer.Tucsou: Llniversitv of Alizona
*tt*fr. famUi6n Äe gustaria agradecerles Press.
y Aram apoyd rnis irtentos de
crrarlie 1{are sus "y"ar. y cultura' lg:"d me resultö de
"rrg*"äoi*, A*'rzaldüa,Gloria. 1987. Borderlandsfin Frontera: The Neut Ivtestiza. San
volvet a habaiar to, äo"*ptos de raza
.nia" y* q"u y" que teniamos ideas muy distintas Francisco:Aunt Lute Press.
päi""i* "uTrril rne dio muchas sugerenciasy
sobre el concepio Ju'"dä,,". rambi6n Balibar,Etien-ne.1991. "Is There a 'Neo-Racisra'?"En fiace, Naäon, Class:
que se ofirpan de la historia Ainbiguousldentities,E. Balibar e I. Wallerstein, eds. Londres: Verso.
referencias para las secciones
ääötG"ä_scbre todo al encontrar el libro con la correspondencia Barker,Martin. 1981. Tle New Racism:Cansewqtivesand the ldealogr of the
entreSo]'TaxyRobertRedfieldyprestärrnelo.CharlieHalehaestado Triöe.Londres:]unction Books.
durante vadcs af,os. Me
estudiando estcs mismos teroas conrnigc conmigo la Barth, Fredrik, erl. 1g69. EtÄrub Groups and Boundanes.Boston: Little,
öö;;;;;;; d, referencias irnportäntes y discuti6 Brcwn.
secciönsobreelracisinoyeiparente.scoentr-eiosguatemaltecos.Final
a todcs lcs que participaron Bastos, Santiago y lr{anuela Camus. 1992. Quehranda e} Siiencio
y principahneot*, *e g*ttar?a agradecer
por su$ algurnentos' criticas y Orgori zoci an es del Pueblo Ma5,a.ysut 4u* andas, 1gI 6-1SgZ. Guateiaala:
en ia prctlucci6n tie äste voluuren
que se mq hicieron' la FIÄCSO.
puntcs de visla. ftfägtrl todas las sugereucias
muy coher-entes. Pero,si Lohubiese hecho, Bcssen,Laurel- ig82. "Plantations and labor force discrimination in
mavoria de las *J;;;,
l*gn articulo seria un pequeflolitrrn' Guaternaia".Cure nt Anthrop olog1r23:263-6B.
"riJ ""ää"t.*r",io
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