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Mickey Meece
The New York Times
NUEVA YORK.- Gritos, intrigas y sabotajes son los signos que delatan la presencia de un
abusador en el trabajo, tendiendo trampas a los empleados a cada paso. Quienes estudian los
ambientes laborales aseguran que en tiempos de crisis económica, como la actual, los niveles de
estrés aumentan y es probable que los maltratadores afilen la lengua y salgan al ataque.
Quizá no sea sorpresa para nadie que la mayoría de los abusadores son varones, como revelan
las investigaciones de un grupo de defensa, el Instituto contra el Acoso Laboral. Sin embargo, el
40% de los abusadores son mujeres. Pero por lo menos los abusadores varones no hacen
distinción de género, e intimidan prácticamente a hombres y mujeres por igual. Las mujeres, en
cambio, prefieren, al parecer, a las de su mismo sexo, y más del 70% de las veces eligen como
blanco a otras mujeres.
¿Cómo van a atravesar las mujeres el "techo de vidrio" de la desigualdad laboral si tienen que
esquivar los ataques verbales que les dedican otras mujeres entre boxes de oficina, pasillos y
salas de reuniones?
No nos gusta hablar de eso porque "va en contra del comportamiento que se espera de nosotras
como mujeres," dijo la señora Klaus. "Se supone que somos las que alimentan, las que apoyan."
Muchas mujeres que aún trabajaban se mostraron reacias a hacer público el hecho por temor a
empeorar las cosas o poner en peligro su carrera. Una contadora de California dijo que se
incorporó recientemente a una empresa y que de inmediato fue excluida por dos mujeres que
trabajaban allí. Una de ellas incluso la empujó durante una discusión en la cafetería, aseguró la
contadora. "Es como si estuviéramos de nuevo en la secundaria", señaló.
Una ejecutiva de alto rango comenta que cuando finalmente logró "romper el techo de vidrio",
otra mujer que andaba atrás del mismo puesto les dijo a los directivos: "No puedo trabajar con
ella, es una pasiva-agresiva". La estrategia funcionó: pronto la ejecutiva perdió su empleo y se lo
dieron a su acusadora.
Una de las razones por las que las mujeres eligen como blanco a otras mujeres "es
probablemente la idea de que se enfrentarán con una persona menos hostil, alguien menos
propenso a responder a la agresión con agresión", afirma Gary Namie, director de
investigaciones del Instituto contra el Abuso Laboral.
Los especialistas en liderazgo se preguntan: ¿las mujeres están siendo "demasiado agresivas"
porque hay muy pocas oportunidades de progreso? ¿O es un estereotipo y las mujeres sólo
están siendo percibidas de esa manera?
Estereotipos de género
Los estudios sobre los estereotipos de género de la organización Catalyst sugieren que sin
importar cómo decidan mandar las mujeres, la percepción de los demás nunca será "del todo
buena". Es más, la organización descubrió que las mujeres tienen que trabajar el doble que los
hombres para lograr el mismo grado de reconocimiento y demostrar que pueden liderar.
"Si las mujeres de negocios actúan según los estereotipos de su género, se las considera
demasiado blandas", reveló el estudio de Catalyst, realizado en 2007. "Y si actúan en contra de
los estereotipos del género, se las ve como demasiado duras."
"Las mujeres sienten que tiene que ser agresivas para que las asciendan, y entonces lo son
cada vez más. Después, de pronto, parecen sentir la necesidad de ser compañeras y ayudarse,
en lugar de ser competitivas", dijo Laura Steck, presidenta del Centro para el Crecimiento y el
Liderazgo de Sunnydale.
Es abuso toda forma de agresión (hostilidad) verbal o psicológica que persiste durante más de
seis meses. Las 29 preguntas del cuestionario incluyen: durante los últimos 12 meses, ¿lo han
mirado sistemáticamente de manera hostil? ¿Le han hecho el vacío? ¿Lo han tratado
repetidamente de manera brusca o irrespetuosa? ¿No logró que otros denunciaran falsos
rumores contra usted?
El Instituto contra el Acoso Laboral dice que el 37% de los trabajadores han sido acosados o
intimidados. Sin embargo, muchos empleadores ignoran un problema que, según el instituto,
atenta en definitiva contra los resultados, la productividad y los gastos de salud. Los casos rara
vez van a juicio, pues no existe una ley que se les aplique de manera directa, y los costos
legales son muy altos.
Sebastián A. Ríos
LA NACION
"El pensar que tengo los bebitos congelados no me deja dormir." Así expresó María (éste no es
su nombre real) el motivo de su insomnio. Y también, la causa de su indecisión. Ella y su marido
habían optado por congelar embriones como parte de un tratamiento de fertilización asistida,
pero luego de un año todavía no habían decidido su descongelamiento y posterior transferencia
en busca de un embarazo.
Uno de esos estudios, cuyos resultados fueron presentados recientemente en el XIII Congreso
Argentino de Medicina Reproductiva, halló que, a casi cuatro años de haber congelado
embriones, tres de cada cuatro parejas (el 74%) todavía no habían decidido si finalmente los
descongelarían.
Motivos de indecisión
"Una pareja que desea dar vida y que tiene tristeza por no poder hacerlo, cuando tiene
embriones criopreservados se transforma de un minuto a otro en una pareja que tiene una
sobredosis de hijos virtuales -señaló Barón-. Siente culpa por no poder tener hijos, por tener
embriones criopreservados y por no querer transferirlos."
Esa culpa, según observó la especialista, se nutre de prejuicios y conceptos erróneos sobre la
criopreservación. "El temor de que congelar los embriones cause malformaciones es uno de
ellos, cuando en realidad no existen evidencias de que la criopreservación tenga ese efecto", citó
Barón. Otra fantasía es que los embriones que no se seleccionan para un primer tratamiento de
fertilización y se congelan son de menor calidad, lo que tampoco es cierto.
Existe, además, una dificultad para representarse qué es un embrión criopreservado, dificultad
que no sólo alcanza a las parejas con problemas de fertilidad, sino que trasciende a toda la
sociedad, como demostró un estudio de la Impsi realizado en personas sin trastornos de
fertilidad.
"Es común la fantasía de que el embrión congelado es un niño completo, enfrascado y frío -dijo
Barón-. Uno les dice que el embrión es un potencial de vida, pero para las parejas que tienen
embriones criopreservados por momentos el embrión no tiene vida y, por momentos, sí."
Terapias efectivas
"La verbalización, discusión y análisis de los sentimientos y fantasías que puede despertar la
criopreservación de embriones cooperan con la decisión de iniciar un tratamiento y previene que
en un futuro impacten negativamente en los pacientes, de modo que dificulten la decisión de
transferencia cuando ya están criopreservados."
Preguntas y respuestas
Permite realizar varios procedimientos de fertilización asistida sin tener que empezar de cero
cada vez. De esta forma, reduce el costo de los procedimientos así como también la medicación
(y sus efectos secundarios) a la que se somete a la mujer.