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I Este texto, Baro;a: su"ealismo, te"or y transgresión,

de Juan Pedro Quiñonero,


supuso un verdadero reto para TALLEIl .
-también para otras editoriales avanzadas dd pais-.
Aceptado, replanteamos el reto al lector. Sin más.
¿Significa, verdaderamente, una critica antioficial de Baroja?
¿Una recuperación de Don Pío desde un ángulo existencial,
dramático, anárquico, demencial, surrealista?
¿Viene a incidir en la caducidad de una crítica académica,
plantea la extinción del comentario de texto habiruaI?
Este texto es una provocación al devenir de la crítica y d ensayo
literario históricos que nos sitúan ante el cadáver momificado
de la ensayística parroquial. Este texto participa de la
heterodoxia de la problemática actual. Es una invitación
a una fiesta que carece dd sentido suntuario de la erudición,
un atentado contra los esquemas mentales criticos y de lectura
tradicionales, al tiempo que, con premeditada y tenaz fregancia,
nos propone otra metodología cuyos valores estimativos
pertenecen ya al ensayo europeo, universal,
y que programan, ante todo, su convencionalidad.
La dinámica de tal ejercicio transcurre desde la posición inicial
del escritor -Baroja- y del crítico como lector/escritor
-Quiñonero-, hasta la metodología conflictiva de aceptar
d uso dd tiempo humano como tal crítico,
lector u hombre, y la necesidad siempre voluntariosa
y contradictoria de la lectura y la escritura.
Ambas son la muerte violenta dd tiempo humano;
la palabra, el arma utilizada. Exigencia límite a la sensibilidad
individual de la comunidad y su historia literaria.
La densa vegetalidad dd texto, creada sobre una colección
de palabras, nos representa un bosque absolutamente extraño:
la ~ran familia de palabras pertenece a la gran familia
de los actos humanos orgánicos y son una transgresión
al vocabulario del ensayo literario al uso,
crean y destruyen la orgía de la lectura y la escritura,
allanan los límites y habitan, cerebrales, en el conocimiento
y el silencio.
Juan Pedro Quiñonero nace en 1946, Totana, Murcia.
Vive en Córdoba y Valencia. Estudia Periodismo.
Ha viajado pOr Europa -vive algún tiempo en Pads-
v América. Hace ya varios años que fijó su residencia en Madrid
donde colabora como critico e informador literario
en el diario Informaciones.
Ha publicado: Proust y la revolución, 1972 (ensayo),
v Ruinas. 1973 (novela). Tiene inédito el texto De la naturaleu.
INDICE

@ 1974 Taller de Ediciones


Josefina Betancor

Ambros 8
Teléfono 255 12 66
Apartado de Correos 9129
Madrid 28
Dedicatorias 9

4) LAS FABULAS y LA REVOLUCION 13


..
ISBN 84-7330-018-1
O. 1 Una revolución sin precedentes 17
Depósito legal: M. 19.626 - 1974
O. 2 Tres claves: raíz niettscheana, enfrentamientos
de anarquismo y marxismo, la herencia de Ma-
llarmé 21
O. 3 La escritura: el fango y el texto 28
Cubiertas Baroja y Mallarmé O. 4 La fábula: gruta donde convocar un desorden
J. P. Quiñonero por Ruiz Anchfa ilimitado 43
Composición Rodrigo Alemán
O. 5 Una orgía de vampirismo y desolación 50
O. 6 Surrealismo y revolución 54

LA CRITICA. CUESTIONES DE METOOO 67


Impreso en los Talleres Tipográficos «Velograb
Cnlle Tracia 17 Madrid 27
11 UNA PEDAGOGIA DE LA LOCURA 73

11. ~ El acto fallido de la historia 77


1'"1''' ,,' r 11 1/~1"lftn 11. 2 Lenguaje y corrupción 81
1'11'", ,1 111""_"1
11. 3 La tierra baldIa que los signos inventan y cal-
cinan 90
11. 4 La defecación es belleza 98
11.' Los signos, la sangre y los excrementos 113
\
n. 6 Las máscaras y el extertor fecundo de la có-
pula 120
n.7 El degolladero o el crimen 127
"1
In MISTERIO y CRIMEN EN LA ESCRITIJRA 135

III. 1 Muerte y silencio 139

IV UN ALIENTO FETIDO 185

189 En vano se purifican si se ensucian con sangre,


IV. 1 El jadeo como si uno que hubiera andado entre el barro qui-
siera lavar sus pies con barro. Cualquiera que lo vie-
ra haciendo esto, lo consideraría necio. Y ellos oran
a imágenes de dioses, como si alguien pudiera con-
versar con cosas fabricadas, pues no conocen a los
.. dioses y héroes tal como son.
I

Muerte es todo lo que vemos, cuando estamos des-


piertos; mas lo que vemos cuando estamos dormidos,
es sueño.
HERÁCLITO

estos pensamientos errantes a través de la eternidad

]OHN MILTON, El para/so perdido

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