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EVALUANDO PARA
APRENDER
1
OBJETIVOS
1. Reflexionar en torno a las prácticas evaluativas
más difundidas y su utilidad en el desarrollo de las
habilidades de lectura de los estudiantes.
INTRODUCCIÓN 5
LECTURA INICIAL 6
5. ENTREGA DE RESULTADOS 33
ACTIVIDAD FINAL 35
SÍNTESIS FINAL 36
DESTACANDO LO IMPORTANTE 37
BIBLIOGRAFÍA 38
4
MÓDULO 6
COMPRENSIÓN
INTRODUCCIÓN
Lograr que la lectura deje de ser un “trabajo de clases” y sea una actividad divertida,
un juego, pasa también por la evaluación. Por ello ésta, sin perder su sentido, debe
constituirse en una actividad que motive el placer de leer.
Este módulo aborda los aspectos evaluativos que se requiere considerar en toda actividad
a realizar por el docente, con el fin de verificar permanentemente que las habilidades
lectoras y de información, así como otros ámbitos relacionados con el tema, puedan
desarrollarse de manera adecuada, permitiendo que los alumnos(as) visualicen tanto
sus fortalezas como sus debilidades.
Para ello, el módulo toma en cuenta un enfoque que permite integrar la evaluación
como una estrategia más de enseñanza e incorporar los recursos que ofrece con las
necesidades de desarrollo de los estudiantes en el ámbito de la comprensión lectora.
5
En este sentido, este módulo es una invitación a adoptar nuevas formas de evaluar en
relación a los modelos pedagógicos actuales, de modo de transformar esta actividad en
una instancia de reflexión para los docentes y para los propios alumnos(as). A su vez,
ésta es una propuesta que llama a recurrir a los variados medios que hoy se ponen a
disposición de nuestros alumnos(as) para que se acerquen a la información y a la lectura.
Es así como la biblioteca CRA y sus recursos se convierten en un espacio privilegiado
en donde el alumno(a) podrá trabajar de manera activa, con documentos auténticos que
le ponen en contacto permanente con formas y contenidos de nuestra cultura escrita.
Dentro de este contexto, la flexibilidad es un tema importante, por lo cual usted podrá
proponer sus propios instrumentos de evaluación adaptados a su realidad, en un proceso
de reencantamiento de esta etapa del aprendizaje.
MÓDULO 6
LECTURA INICIAL
Cuatro inmensas pompas de jabón que caían desde la torre del reloj flotando,
resbalando, rodando, botando y rebotando sobre los tejados; que chocaban
luego contra el borde del alero del soportal de la plaza y se estrellaban sobre
las losas del suelo. Al reventar, todo el sonido que llevaban dentro se esparcía
por la plaza y se colaba por las ventanas entreabiertas de la clase.
Pensando, pensando, para encontrar las dos esdrújulas que le faltaban dejó
correr su mirada por encima de las cabezas de sus compañeros. Al otro lado de
la ventana se veía la plaza llena de sol. Un enorme abejorro golpeó un par de
veces contra el cristal y luego se coló en la clase. Revoloteó sobre los pupitres
asustando a algunos niños, divirtiendo a otros y distrayendo a todos.
MÓDULO 6
1. Evaluar hoy en día
1.1. Reflexión previa
Antes de entrar en materia, queremos presentarle ciertas situaciones o expresiones
escuchadas cotidianamente en los colegios. Puede que con algunas usted se sienta
identificado(a) o que, por el contrario, discrepe de ellas. Independientemente de los
sentimientos que le generen, le invitamos a comentar en el foro su opinión sobre estas
prácticas.
Caso 1
–Si siguen portándose mal... –los alumnos no hacen caso–. ¡Saquen una hoja!
– grita furioso el profesor.
– ¿Es con nota? –pregunta un alumno.
Caso 2
Caso 3
Caso 4
entrega de resultados, y por otra parte, nos enfrentamos a la cultura que los estudiantes
tienen respecto de la evaluación. Sin ir más allá, estos dos aspectos por sí solos nos
ponen de manera bastante frecuente en un escenario en el que tienden a perderse
nuestros compromisos asumidos y las decisiones pedagógicas que hemos adoptado
pensando en ayudar a los estudiantes en su proceso de aprendizaje.
analizar
Comencemos por interrogar los casos planteados y los enfoques desde donde se está
ejerciendo el acto evaluativo.
En el primer caso, estaremos de acuerdo en que se trata de una medida disciplinaria.
No cabe duda que el docente, como especialista en su área y nivel, evaluará contenidos
relevantes al subsector. Sin embargo, si interrogamos esta actitud tendríamos que
comenzar preguntado:
En el segundo caso, el estudiante dice haber leído el libro, y a pesar de ello obtuvo
una calificación que no responde a sus expectativas.
En el tercer caso, podríamos pensar que esa alumna ha desarrollado un bloqueo ante
escenarios evaluativos, tal vez producto de los fracasos reiterados. Ciertamente pueden
ser varias las explicaciones, pero las preguntas son las mismas:
Pero ¿por qué hemos tomado ese camino o por qué hemos enfatizado tan insistentemente
que este tiene que ser un proceso en que el alumno(a) transite de manera voluntaria?
No estamos hablando de lectura a secas; nuestro concepto de lectura tiene otras palabras
a su alrededor que precisan su sentido: lectura placentera, lectura con compromiso,
lectura como experiencia íntima, lectura como juego. ¿Para qué hacemos todas estas
10 cosas? ¡Sería tan sencillo entregarles una lista de textos y controlar su lectura cada cierto
tiempo! Pensando tradicionalmente, podemos suponer que seguramente los buenos
alumnos (as) van a leer igual y quienes casi nunca leen, tampoco lo van a hacer ahora,
simplemente porque no están interesados(as) en realizar sus deberes escolares y aprender.
Pero seguramente algo de esto ya se ha comenzado a discutir en nuestro foro inicial, y
es posible que estemos comenzando a ver este problema desde otra perspectiva.
Comprender
2.1. ¿Qué significa desarrollar habilidades lectoras?
Desarrollar habilidades lectoras significa, como hemos dicho en el módulo anterior,
aprender a comprender un texto. Recordemos que lo que ocurre en este proceso
comprensivo, en términos prácticos se relaciona con la acción de leer, en la cual ocurre
un proceso activo de construcción y elaboración de la interpretación del texto y sus
partes, donde la información previa del lector y la que ofrece el texto se complementan
en la elaboración de significados. La estrategia utilizada por el lector para dicha
elaboración variará según la meta, la naturaleza del material y la familiaridad de éste con
el tema. Finalmente, y en la medida en que también es un proceso metacognitivo, implica
controlar los propios procesos de pensamiento para asegurarse que la comprensión
fluya sin problemas.
Como vemos, no son pocas las funciones del pensamiento que los estudiantes deben
movilizar para llegar a ser buenos(as) comprendedores(as). Ello implica conocer dichas
funciones a cabalidad y observar su evolución tras la intervención pedagógica.
Algunos expertos afirman que si desde la enseñanza inicial se enseñara a los alumnos y
alumnas a reconocer los esquemas, los modos de expresión de los que se dedican a
escribir, no les sería difícil más tarde reconocer esos caminos y llegar a la misma fuente
del pensamiento desde su propia capacidad de integrarlos. Este argumento nos entrega
luces de cómo enseñar/evaluar estas habilidades. Mientras el alumno(a) no entienda
que leer es llegar a la mente del que emitió el mensaje, compenetrarse de su intención,
no iniciará este recorrido inverso desde sus propias capacidades y experiencia. En otras
palabras esta transacción que realiza el alumno(a) entre el sentido del texto y el proceso
de interpretación y reconstrucción de dicho sentido, se vería favorecido si conociera la
ruta que lo conduce a los esquemas de pensamientos del autor(a). 11
En consecuencia, una buena práctica en pedagogía es preocuparse por lograr que el
alumno(a) adquiera un buen nivel de comprensión. Para ello podemos tratar de alejarle
de la memoria irreflexiva y ofrecerle actividades interesantes: impulsarle a incursionar
en el pensamiento y las emociones de los autores y autoras cuyas obras lee; estimularle
a captar las ideas básicas, valorar, comparar, inferir, evaluar contenidos, relaciones,
valores, etc.
Variedad
o los espacios pedagógicos que elijamos? Seguramente usted ya sabe hacia dónde nos
dirigimos, pero más adelante insistiremos en este punto. De momento nuestra tarea
es encontrar un enfoque coherente con la necesidad de evaluar estas habilidades de
compresión lectora y acompañar a los estudiantes de manera efectiva en el desarrollo
de las mismas.
¿Entonces cuál es la postura del Equipo de Bibliotecas Escolares CRA del Ministerio?
Preguntas claves
• ¿Qué evaluamos cuando evaluamos la lectura en nuestros alumnos(as)?
Evaluamos la comprensión lectora.
MÓDULO 6
IDEAS
ACTIVIDAD 1: ¿QUÉ ES LA COMPRENSIÓN LECTORA?
14 ¿Qué factores
previos ¿Por qué es
¿Por qué este
¿Qué ocurre influyen en la importante
es también
cuando el comprensión conocer la
un proceso
alumno(a) lee? del contenido finalidad de la
metacognitivo?
del lectura?
texto y por qué?
En tal sentido la evaluación se transforma en un medio que permite asegurar que las
estrategias elegidas para aprender sean las adecuadas y consideren los propósitos
formativos y disciplinarios que correspondan, respeten las características propias de
los estudiantes y en suma sean una respuesta a un contexto determinado que asegure
el éxito en el aprender.
Aquella vieja convicción acerca de que el alumno(a) primero debe aprender a decodificar
y luego a leer comprensivamente, está superada, toda vez que según los estudios
revelan que en lectores fluidos los procesos de orden superior, como la construcción
del significado, influyen sobre los procesos de orden inferior, como la decodificación
de letras y palabras, y no al contrario, como se ha tendido a suponer5.
4 Medina, A.: “Zonas de Educación Prioritaria : Una apuesta a la excelencia y a la democratización”. En:
Revista de Educación Nº 294, 2002.
5 Courtney B. Cazden: “La lengua escrita en contextos escolares”. En Ferreiro, E. Gómez-Palacio, M.: Nuevas
perspectivas sobre los procesos de lectura y escritura. Ciudad de México, Sigloveintiuno Editores, 1986.
6 Morin, Edgar: Les sept savoirs nécessaires à l’éducation du futur. París, Ediciones Seuil, 2000.
7 Devanne, B.: Lire & écrire ; des apprentissages culturels. París, Ediciones Armand Colin, 1997.
2.3.2. ¿Cómo evaluamos la lectura desde la Evaluación
Auténtica?
Hemos dicho que nuestro enfoque evaluativo se centra en los desempeños de los
alumnos(as); es decir, privilegia su actividad, sus características y conocimientos previos y
los contextos donde ocurre su proceso de aprendizaje. Esto sugiere desarrollar estrategias
pedagógicas y evaluativas diferenciadas, adaptadas a los distintos ritmos, estilos de
aprendizaje y capitales culturales de un alumnado heterogéneo. También implica
reorientar el trabajo escolar desde su forma actual, predominantemente discursiva y
basada en destrezas, hacia una modalidad centrada en actividades de exploración,
búsqueda de información, construcción y comunicación de nuevos conocimientos y
competencias por parte de los alumnos(as), poniendo de relieve, como han indicado
nuestros expertos, la necesidad de construir y evaluar competencias de nivel taxonómico
alto, más que destrezas o conocimientos aislados.
Veamos qué tipo de abordaje nos propone la Evaluación Auténtica para dar cuenta de
estos principios.
b. ¿Qué características deben tener los textos que leen los estudiantes?
implica abrir espacios para que los niños y niñas adopten actitudes de interrogación
de los textos, activen sus propios conocimientos o esquemas cognitivos, anticipen
el contenido, realicen inferencias, formen imágenes mentales, elaboren esquemas,
organizadores gráficos, planteen y respondan preguntas, resuman, emitan juicios críticos,
escriban sobre los personajes, sobre el tema o el problema planteado por el texto. Todo
ello en el marco del involucramiento de los alumnos y alumnas con la lectura, como
una actividad placentera e interesante, como ya hemos indicado antes.
8 Condemarín, M., Medina, A.: Evaluación Auténtica de los aprendizajes; un medio para mejorar las
competencias en lenguaje y comunicación. Santiago de Chile, Editorial Andrés Bello, 2000.
9 Tierney, J. R.: “Literacy assessment reform: Shifting beliefs, principled possibilities, and emerging practices”.
En: The Reading Teacher N°51, 1998.
10 Revise el portal de la profesora María Verónica Moraga, integrante de la “Red Maestro de Maestros” para
conocer más sobre Evaluación Auténtica. Disponible en la dirección:
http://www.rmm.cl/index_sub.php?id_contenido=5257&id_seccion=4146&id_portal=622 Página consultada
en abril de 2008.
Una forma de asegurarse de que esto ocurra, vale decir, que el alumno(a) encuentre en
los libros una fuente de satisfacción, es acompañarle en la formulación de su proyecto
lector. Para ello será de suma importancia contar con información acerca de sus intereses
y capacidades lectoras. No olvide que usted dispone de una herramienta para conseguir
dicha información, como le mostramos en la Actividad 1 del Módulo 3.
11 Astolfi, J.P: L’erreur, un outil pour enseigner. París, ESF Editeur, 1997.
12 Perrenoud, Ph: L´Evaluation des élèves. Bruselas, Ediciones De Boeck & Larcier, 1998.
La Evaluación Auténtica y la comprensión lectora
¿Qué es la evaluación auténtica?
MÓDULO 6
motivación
ACTIVIDAD 2: ANALIZANDO UNA EXPERIENCIA PRÁCTICA
Es hora de hacer un alto que nos permita sistematizar desde la práctica, los
conceptos entregados hasta el momento. Le invitamos a realizar un ejercicio
de contrastación, para ello realice las siguientes actividades:
20
práctica
MÓDULO 6
3. Evaluar la lectura para aprender a leer: Aporte
de los Mapas de Progreso
En el primer punto de este texto hemos precisado nuestro objeto de evaluación: nos
interesa evaluar los procedimientos que nuestros alumnos(as) movilizan para realizar
la lectura comprensiva de un texto, es decir, aquel proceso complejo del que hemos
dado cuenta en el acto lector. Por lo tanto, algunas preguntas emergentes serán: ¿cuáles
son estos procedimientos?, ¿cómo se llaman?, ¿son jerárquicos?, ¿cómo se relacionan
unos con otros? Y lo más importante ¿cómo se manifiestan en el desempeño de nuestros
alumnos(as)? Si logramos precisar esta información, como ya hemos afirmado antes,
habremos dado un paso importante en la detección de las capacidades lectoras de
nuestros estudiantes, así como en sus tramos de desarrollo.
Un importante aliado para cumplir este propósito son los Mapas de Progreso.
De este modo, este instrumento ofrece criterios para observar el aprendizaje promovido 21
por el currículum a lo largo de los 12 años de escolaridad.
Se parte del principio que el aprendizaje está “dentro” de los alumnos(as), y es posible
observarlo indirectamente, a partir de realizaciones, desempeños o trabajos realizados
por éstos(as), los cuales permiten inferir dichos aprendizajes.
leer
a. Tipo de textos que se leen. En esta dimensión el progreso está dado por la
capacidad de leer una variedad cada vez mayor de textos literarios y no literarios de
creciente extensión, complejidad, variedad de propósitos, estructuras y modalidades
discursivas.
13 Disponible en la página oficial del Departamento de Currículum y Evaluación del Mineduc. Dirección:
http://www.simce.cl. Página consultada en abril de 2008.
b. Construcción de significado. Se refiere a la capacidad de construir el significado
de los textos a través del uso de diversas estrategias, que se orientan a lograr una
comprensión cada vez más profunda y detallada de los textos. Esta dimensión incluye
las siguientes habilidades:
Es importante destacar que los alumnos(as) de un nivel no están constreñidos a leer sólo
textos de la complejidad señalada para el nivel. La lógica del Mapa es que el alumno(a)
que posee una competencia de nivel 2, la expresa en su totalidad con textos de nivel
2. Si lee textos de nivel 3, con probabilidad la construcción del significado que haga
de ellos será más elemental que la que realiza un alumno(a) de dicho nivel. Asimismo,
podrá leer textos de nivel 1, y en ellos construirá un significado más profundo.
Nivel 1: Aquí los textos versan sobre temas reales o imaginarios que son familiares para
los estudiantes; usan palabras de uso común o con un sentido que se puede deducir del
contexto; pueden presentar expresiones con sentido figurado fácilmente comprensible;
utilizan pronombres personales y demostrativos fácilmente reconocibles.
Nivel 2: Los textos versan sobre temas reales o imaginarios; el vocabulario es de uso
frecuente, pero también contiene palabras no familiares; se presentan expresiones con
sentido figurado. Estos textos tienen una estructura simple, por ejemplo, una estructura
narrativa lineal.
Nivel 4: Los textos tratan temas diversos con un vocabulario amplio; presentan variados
recursos literarios; utilizan diversas estructuras y pueden integrar distintas modalidades
discursivas.
Nivel 5: Los textos tratan temas diversos, que presentan diferentes perspectivas del
emisor; presentan una variedad de recursos, registros de habla y niveles de formalidad;
pueden contener estructuras no convencionales.
Para profundizar en este tema, encontrará el documento completo sobre los Mapas de
Progreso difundidos por el Mineduc, en nuestro sitio Web:
http://www.bibliotecas-cra.cl sección “Recursos pedagógicos”.
MÓDULO 6
temas
3.4. ¿Cómo medir estos niveles? Sugerencia de
actividades
A las tareas definidas en los Mapas de Progreso para medir cada uno de los niveles de
lectura, que usted podrá consultar y aplicar según sus necesidades, quisiéramos agregar
una lista particular que representa nuestro punto de vista respecto del tema tratado.
A través de estas actividades usted podrá evaluar los diferentes niveles de lectura descritos
más arriba. En este sentido, es primordial incorporar estas actividades como parte del
quehacer pedagógico a lo largo del año escolar en los diferentes subsectores
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MÓDULO 6
PROGRESO
4. Estrategias e instrumentos de evaluación
La evaluación es por esencia plural y no debería considerarse como una simple
actividad, sino más bien como un procedimiento que se desarrolla en diferentes planos
y en distintas instancias15. Esta pluralidad implica que se utilicen variadas estrategias
evaluativas tales como la observación directa, entrevistas, listas de cotejo, proyectos,
producción de textos, pautas de observación, además de diversos criterios de corrección
y comunicación de resultados. Esta perspectiva ofrece distintas oportunidades para que
los alumnos(as) manifiesten su nivel de construcción y aplicación de conocimientos
complejos. Por ejemplo, para evaluar si un alumno(a) ha desarrollado competencias de
expresión oral, es necesario abrir espacios para que tome la palabra e informe sobre el
resultado de una investigación, cuente una experiencia, comente un libro, describa un
paisaje, participe en un debate, recite un poema o pronuncie un discurso, entre otras
posibilidades.
Sin descartar las pruebas elaboradas por el docente. Nos referimos a aquellas que
permiten al alumno(a) explorar en su experiencia lectora integral preguntas creativas,
generadoras de reflexión, emoción y valoración.
• ¿Qué y cuánto sabe el lector(a) acerca del contenido del texto que va a leer?
• ¿Adopta actitudes activas de lectura? Es decir ¿utiliza sus conocimientos previos
para ponerlos al servicio del acto lector, formulando hipótesis y anticipando el
contenido del texto a partir de su estructura? MÓDULO 6
• Finalmente, ¿tiene propósitos para leer el texto, se plantea preguntas que lo
estimulan a leer para buscar respuestas?
Para enseñar a los niños y niñas a poner en práctica estas estrategias y evaluarlas, puede
utilizarse, por ejemplo, la constelación de palabras o la técnica CQA18 que presentamos
a continuación.
Supongamos que desea leer a sus alumnos(as) el cuento “El Flautista de Hamelin”, pero
la idea es ayudarles a generar un anclaje respecto de la estrategia con la que deben
abordar el cuento para su comprensión. Para ello podría lanzar la siguiente pregunta
motivadora:
Seguramente las respuestas van a ser de muy variado tipo, ya que les está haciendo
reflexionar sobre una situación inesperada, no muy agradable y frente a la cual habrá
que hacer algo. Así, una forma de abordar la situación será pidiéndoles que se centren
en el hecho, exploren sus sensaciones y propongan una solución. Usted podrá trabajar
de forma colectiva la constelación de palabras y llenar los tres aspectos señalados en
conjunto. Luego de esta actividad nuestra constelación de palabras podría verse así:
Suciedad Susto
Luego de este ejercicio, y con la animación del docente, seguramente los niños y
niñas estarán en mejores condiciones para integrar en la estructura generada los
acontecimientos narrados en el cuento.
Esta técnica permite potenciar los conocimientos previos de los estudiantes y les ayuda a
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determinar sus propósitos frente a la temática de un texto particular. Requiere que éstos
focalicen su atención en tres preguntas, dos al inicio de la lectura y una al final:
17 Talamas D., Ivette: “Animación a la lectura como recurso holístico para aprender divertida y placentera-
mente a respetar el entorno natural”. En: Estudios Pedagógicos. Valdivia, 1998.
3. ¿Qué he aprendido? (A) Al finalizar la lectura el alumno(a) podrá verificar sus
interrogantes y apreciar lo que pudo y no pudo alcanzar.
Las dos preguntas realizadas antes de cada actividad movilizan los conocimientos
previos de los estudiantes y establecen sus propósitos frente a la lectura, generando
preguntas que desean responder.
Por ejemplo, si trabajamos un tema acerca del pingüino emperador, nuestra tabla CQA,
se podría ver de la siguiente manera:
¿Qué sé sobre el
¿Qué quisiera saber? ¿Qué he aprendido?
tema?
No obstante lo anterior, las preguntas son una herramienta eficaz para acompañar al
lector en su procesamiento de la información del texto, siempre que ellas sean formuladas
apuntando a que, junto con captar la secuencia y detalles del texto, el lector realice
inferencias, establezca relaciones intra y extratextuales, se forme una opinión personal
sobre los planteamientos leídos y procese el texto en su complejidad.
Taffy Raphael21 propone una categorización que resulta interesante para enriquecer
el tipo de preguntas que se formula a los alumnos(as) y define tres tipos de preguntas,
En las aulas, las preguntas más recurrentes son las “ahí mismo” y las “basadas en mí
mismo”, lo que revela un énfasis en las respuestas literales o en aquellas que expresan
un punto de vista del lector. A su vez, las menos frecuentes son las preguntas que
requieren un mayor procesamiento de la propia información del texto y un esfuerzo
creativo para elaborar una respuesta.
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Por el contrario, las preguntas ¿qué? o ¿dónde?, apuntan a respuestas más bien
literales.
¿Qué?
¿Cuándo? ¿Cómo?
¿Cuál? ¿Dónde?
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¿Quién?
22 Por Gajardo, A.M.; Lobos, M.T. Disponible en: Alejandra Merino: Evaluar para aprender: Cuatro ventanas
hacia la enseñanza del lenguaje escrito en la Educación Básica. Disponible en:
http://www.nave.ufc.br/artigo-alejandra.pdf Página consultada en abril de 2008.
ACTIVIDAD 3: APLICANDO ESTRATEGIAS DE EVALUACIÓN
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5. Entrega de resultados
En este apartado quisiéramos hacer explícita una diferenciación que seguramente
el lector atento habrá notado, y es que hasta el momento no hemos hablado de la
calificación (nota), sino que nos hemos enfocado en la cualificación o evaluación de
los procesos en que los alumnos(as) exhiben sus desempeños. Pero las notas son una
obligación institucional imprescindible para el registro de la gestión del establecimiento
y sirven para cuantificar una calidad de trabajo. En consecuencia, y en el marco de lo
que hemos venido planteando en este módulo, intentaremos transformar una valoración
cualitativa en un valor numérico, sin olvidar la cualidad que dio origen a esta nota
(qué, cómo, cuánto y para qué han aprendido).
Cabe destacar que no se trata de eliminar la nota, sino de cambiar su enfoque: la nota
como medio y no como fin.
Las estandarizaciones son los patrones cuantitativos que nos permiten traducir los
resultados obtenidos en los registros que hemos aplicado y recogido del proceso de
aprendizaje lector de los estudiantes (registros cualitativos).
Cualquiera sea el criterio de estandarización que usted adopte, éste debe reflejar la
progresión de los aprendizajes en el alumno(a), además de reconocer como resultado
final el aprendizaje logrado por éste(a). Lo que significa, por ejemplo, que si se aplica un
instrumento de evaluación en varias ocasiones, y existe una progresión en el aprendizaje
del alumno(a), esta progresión sea reconocida por el docente en la calificación final.
34
De la c u a l i f i c a c i ó n a la c a l i f i c a c i ó n
Objetivos:
1. Identificar necesidades de desarrollo de las habilidades de comprensión
lectora en los estudiantes a partir de los estándares entregados.
2. Incorporar la evaluación al diseño de una estrategia pedagógica.
3. Definir resultados cuantitativos (notas) a partir de registros cualitativos.
Contenidos:
• Comprensión lectora.
• Niveles del Mapa de Progreso de Lectura.
• Evaluación Auténtica.
• Estrategias de Evaluación Auténtica.
• Cualificación y cuantificación.
Descripción de la actividad:
1. Seleccione uno de los niveles del Mapa de Progreso de Lectura, aquel que
corresponda al nivel que usted atiende o en el que le interese trabajar.
MÓDULO 6
Síntesis Final
Hemos llegado al último módulo del curso, después de un largo recorrido en que
avanzamos juntos analizando conocimientos, enfoques y actitudes destinados
a mejorar nuestro trabajo como docentes y su efecto en los niños y niñas a
quienes enseñamos.
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Una vez respondidas estas interrogantes, envíelas a su tutor(a).
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Bibliografía
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