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Manivela

Portabloque

Bloque de parafina

Fragmento de tejido

Cuchilla

Figura 1-1. Micrótomo para cortar los tejidos incluidos en parafina o en resina. El movimiento de la manivela (en la parte derecha de
la figura) hace que el bloque que contiene el fragmento de tejido suba y baje. A cada vuelta de la manivela, el bloque avanza una de-
terminada distancia (generalmente, 1-10 μm), de manera que al pasar por la cuchilla deja un corte de tejido. (Cortesía de Microm.)

Junqueira y Carneiro: Histología básica. © Masson, Barcelona, 2005


Lente ocular

Prisma

Lente
objetivo

Muestra

Platina

Condensador

Filtro de luz

Controles del movimento


de la platina
Controles de ajuste
del foco

Figura 1-2. Esquema de un microscopio óptico con sus


componentes principales y con el trayecto de la luz desde
la fuente lumínica hasta el ojo del observador. (Cortesía de
Lámpara Espejo Carl Zeiss Co.)

Junqueira y Carneiro: Histología básica. © Masson, Barcelona, 2005


A

C
Figura 1-3. Células de la cresta neural en cultivo estudiadas mediante
tres sistemas ópticos distintos. La preparación histológica no ha sido
teñida y en las tres imágenes fotográficas aparecen las mismas células;
se pueden utilizar las dos células pigmentadas para la orientación en
cada imagen. A) Microscopia óptica convencional. B) Microscopia de
contraste de fases. C) Microscopia de contraste de fases interferencial,
según Nomarski. Gran aumento. (Cortesía de S. Rogers.)

Junqueira y Carneiro: Histología básica. © Masson, Barcelona, 2005


Figura 1-4. Microscopia de luz polarizada. La imagen corresponde
a un fragmento de mesenterio de ratón teñido con el método del
picrosirio, que destaca las fibras de colágeno. El mesenterio se co-
loca sobre un portaobjetos y se observa por transparencia. Con la
luz polarizada, las fibras de colágeno muestran una birrefringencia
intensa y aparecen brillantes o con coloración amarilla. Aumento
mediano.

Junqueira y Carneiro: Histología básica. © Masson, Barcelona, 2005


Algunos planos
focales posibles

Lente Muestra
histológica
Detector

Obstáculo
con orificio

Plano
focalizado

Figura 1-5. Principio de la microscopia confocal. La luz originada en un


plano de corte atraviesa un pequeño orificio existente en un obstáculo in-
terpuesto y llega hasta un detector; mientras tanto, el obstáculo bloquea
los rayos originados en otros planos. De esta manera, en cada momento
sólo se visualiza un plano muy fino de la muestra estudiada.

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Fuentes
de láser

Rastreo de la
Obstáculo iluminación
con orificio

Divisor del haz


luminoso

Detector

Figura 1-6. Esquema convencional de un microscopio confocal. La


Lente iluminación procedente de una fuente láser alcanza la muestra y
se refleja. Un espejo dirige la luz reflejada hacia un obstáculo que
posee un orificio pequeño. El obstáculo bloquea la luz procedente
de los planos de la muestra que quedan por delante y por detrás
del plano focalizado. El láser realiza un barrido de la muestra
Plano para que sea posible la visualización de un área mayor del corte
focalizado histológico.
Muestra

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Figura 1-7. Microfotografía de células de riñón de hámster en
cultivo, teñidas con el colorante naranja de acridina. Mediante
un microscopio de fluorescencia, el ADN (en el interior de los
núcleos) emite una luz amarilla, mientras que el citoplasma (con
abundante ARN) muestra una coloración anaranjada. Gran au-
mento. (Cortesía de A. Geraldes y J. M. V. Costa.)

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Figura 1-8. Imagen fotográfica obtenida con el microscopio electró-
nico de transmisión 906E. (Cortesía de Carl Zeiss Co.)

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Cátodo

Ánodo Cañón de
electrones
Lente condensadora

Bobina
eléctrica Columna

Rejilla de cobre con Portamuestras


tres cortes histológicos

Lente objetivo
Ventana
de cristal

Lente intermedia

Lentes
protectoras

Placa fluorescente

Placa fotográfica
Figura 1-9. Esquema correspondiente a un microscopio de
Cámara CCD transmisión con sus componentes principales.

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Cátodo

Ánodo Cañón de
electrones
Lente condensadora

Bobina eléctrica
Columna

Lente

Rastreador

Lente
Amplificador Detector de
de la señal electrones

Monitor Muestra

Figura 1-10. Esquema correspondiente a un microscopio electrónico


de barrido con sus componentes principales.

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A

Figura 1-11. Autorradiografías correspondientes a las glándulas salivales


submandibulares de un ratón inyectado previamente con 3H-fucosa 8 h
antes de su sacrificio. A) Con el microscopio óptico se observan gránulos
negros de plata (flechas) que indican las regiones celulares que presentan
radiactividad. La mayor parte de la radiactividad se localiza en los gránulos
citoplásmicos de las células de los conductos glandulares. Aumento media-
no. B) Tejido preparado para su estudio con el microscopio electrónico de
transmisión. Se pueden observar los gránulos de plata que aparecen como
estructuras con configuración de ovillos (flechas) localizados principalmente
sobre los gránulos citoplásmicos (G) y en la luz (L) de los túbulos. Gran
B aumento. (Cortesía de T. G. Lima y A. Haddad.)

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Figura 1-12. Autorradiografías de cortes histológicos de órganos de
ratón inyectado con 3H-timidina. Las autorradiografías se expusieron
durante un tiempo prolongado, por lo que los núcleos radiactivos
aparecen fuertemente marcados y cubiertos por una gran cantidad
de granos oscuros. A) Se observan numerosas células epiteliales en
fase de división en la base de las glándulas intestinales, sin células en
fase de reposo en las vellosidades. B) En un corte de ganglio linfático
se puede observar que la división celular tiene lugar principalmente
en los centros germinales de este órgano. (Cortesía de T. M. T. Zorn,
M. Soto-Suazo, C.M. R. Pellegrini y W. E. Stumpf.)

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Figura 1-13. Microfotografía de fibroblastos de pollo cultivados e
infectados por Trypanosoma cruzi, que aparece en forma de peque-
ñas partículas dispersas en el citoplasma (flechas). A pesar de que
la separación entre las células no es visible, los núcleos se pueden
observar fácilmente (N). Tinción de Giemsa. Aumento mediano.
(Cortesía de de S. Yoneda.)

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Células intactas
1

Células
disociadas

2 Núcleos

3
Mitocondrias
y lisosomas

Microsomas

Ribosomas

Membranas
de retículo
endoplasmático

Figura 1-14. La técnica de fraccionamiento celular permite el aislamiento de los componentes de la célula mediante centrifugación diferencial.
La columna de dibujos que aparece en la parte derecha de la figura muestra los orgánulos celulares obtenidos en el fondo de cada uno de
los tubos tras la centrifugación. La fuerza de centrifugación se expresa en unidades g, equivalentes a una unidad de la fuerza de gravedad.
1) Un fragmento de tejido que se ha troceado con una cuchilla de afeitar o con una tijera y después se disocia mediante un homogenizador o
mediante ultrasonidos. 2) El tejido disociado se mantiene en reposo durante aproximadamente 20 min para que precipiten los grumos que no
se han disociado así como las fibras de la matriz extracelular. 3) El sobrenadante se centrifuga a 1.000 g durante 20 min; los núcleos quedan
precipitados en el fondo del tubo. 4) El sobrenadante se centrifuga a 10.000 g durante 20 min; precipitan las mitocondrias y los lisosomas. 5) El
sobrenadante se centrífuga a 105.000 g durante unos 20 min; precipitan los microsomas. 6) El sobrenadante se trata con desoxicolato sódico antes
de la centrifugación; los microsomas se disocian y precipitan por separado como ribosomas y como membranas del retículo endoplasmático
rugoso. (Modificado y reproducido con autorización de Bloom W, Fawcett DW: A Textbook of Histology. 9.a ed. Saunders, 1968.)

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Figura 1-15. Electromicrografías de tres fracciones celulares aisladas mediante centrifugación en un gradiente de densidades. A)
Fracción de mitocondrias, contaminada con retículo endoplasmático. B) Fracción de microsomas. C) Fracción de lisosomas. Gran
aumento. (Cortesía de P. Baudhuin.)

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Figura 1-16. La microfotografía de un corte histológico de hueso
tratado mediante una técnica histoquímica para demostración de
iones calcio. El precipitado oscuro indica la presencia de fosfato
cálcico en el hueso y el cartílago calcificado. El tejido cartilaginoso
no calcificado (coloración marrón) aparece en la mitad superior de
la imagen. Aumento mediano. (Microfotografía obtenida por P.
A. Abrahamsohn.)

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Figura 1-17. Microfotografía de un corte de riñón tratado mediante
el método de Gomori para la demostración de la enzima fosfatasa
alcalina. Las localizaciones en las que se observa la presencia de la
enzima (superficie celular) aparecen con coloración oscura debido al
precipitado de las sales de plomo (flechas). Aumento mediano.

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Figura 1-18. Detección de la fosfatasa ácida. Electromicrografía de
una célula de un riñón de ratón en la que aparecen tres lisosomas
(L) junto a un núcleo (N). El depósito oscuro en el interior de estos
orgánulos corresponde a fosfato de plomo que precipita en las zonas
en donde previamente había fosfatasa ácida. Gran aumento. (Cortesía
de E. Katchburian.)

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Figura 1-19. Microfotografía correspondiente a una vellosidad intestinal
teñida con la técnica del ácido peryódico de Schiff. La intensa coloración
del borde en cepillo de la superficie celular (flechas cortas) así como del
producto de secreción de las células caliciformes (flechas largas) se debe al
elevado contenido en polisacáridos en estas estructuras. Corte histológico
teñido con hematoxilina (tinción de contraste). Gran aumento.

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Figura 1-20. Las sustancias que presentan una gran afinidad
por una molécula pueden marcarse y utilizarse para la iden-
tificación de dicha molécula. 1) La molécula A presenta una
afinidad intensa y específica por una porción de la molécula
B. 2) Si A y B se ponen en contacto, A se une a una porción de
B que reconoce. 3) La molécula A se puede unir a un marcador
que sea visible mediante microscopia óptica o electrónica.
El marcador puede ser un compuesto fluorescente, una en-
zima como la peroxidasa, una partícula de oro o un átomo
radiactivo. 4) La molécula B se puede detectar en los casos en
los que está presente en la célula o en la matriz extracelular
incubándola con la molécula A.

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Figura 1-21. Algunos métodos de separación de las proteínas: ultracentrifugación (A) y cromatografía (B). A) Una mezcla de proteínas obte-
nidas a partir de células y de tejidos homogeneizados se centrifuga a alta velocidad durante varias horas. Las proteínas se separan en bandas,
según el tamaño y la densidad de sus moléculas. Inmediatamente, se extrae el medio en el que se ha llevado a cabo la centrifugación y se
divide en varias fracciones que contienen las distintas proteínas, para su análisis por separado. B) Se coloca una solución que contiene una
mezcla de proteínas sobre una columna ocupada por partículas que muestran propiedades diferentes. Por ejemplo, las partículas pueden
presentar cargas electrostáticas distintas (atraen las proteínas según su carga) o bien pueden presentar poros (actuando como un cedazo para
las moléculas de tamaños diferentes). Durante la migración de las proteínas en la columna, su movimiento se retrasa por la interacción con
las partículas. Cuando se ha recorrido todo el líquido de la columna, es posible recoger por separado los distintos grupos de proteínas.

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A

Proteína Muestras histológicas


de peso
1 molecular
conocido

2 Gel

3 Gel

Fuente de
energía

1 Gel

Gel

Placa de rayos X
Figura 1-22. Separación de las proteínas mediante electroforesis en gel. A) Aislamiento de las
proteínas. 1. Se obtienen mezclas de proteínas a partir de células y tejidos homogeneizados y se
tratan con un detergente (dodecil sulfato sódico) y con mercaptoetanol para separar las cadenas
y las subunidades de proteínas. 2. Las muestras se colocan la porción superior de una placa de
gel de poliacrilamida, que se somete a una corriente eléctrica continua. 3. Las proteínas presentan
migración a lo largo de un gel, según su tamaño y forma. Sobre el gel también se coloca una mezcla
Gel
de proteínas conocidas que sirve como patrón respecto a los pesos moleculares. B) Detección e
identificación de las proteínas. 1. Tinción. Las proteínas se tiñen y la intensidad de la tinción es
proporcional a su concentración. 2. Autorradiografía. Si algunas de las proteínas muestran radiac-
3 tividad, se pueden reconocer mediante autorradiografía. Para ello, se coloca una placa de rayos X
sobre el gel durante un cierto tiempo y después se revela. Las proteínas radiactivas se detectan
mediante la aparición de manchas oscuras en la placa de rayos X. 3. Inmunotransferencia. Las
proteínas pueden transferirse desde el gel a una membrana de nitrocelulosa. Esta membrana se
Membrana de incuba con un anticuerpo que reconoce las proteínas que pueden estar presentes en las muestras
nitrocelulosa tisulares.

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Figura 1-23. Técnica de inmunocitoquímica directa. 1) Molécula de
inmunoglobulina (Ig). 2) Producción de anticuerpos policlonales.
La proteína X de un ratón se inyecta en un animal de otra especie,
por ejemplo, en un conejo. El conejo elabora Ig frente a la proteína
X. 3) Marcaje del anticuerpo. Las Ig del conejo se acoplan a un
marcador. 4) Reacción de inmunocitoquímica. Las Ig marcadas
reconocen las diferentes porciones de la proteína X presentes en
un corte histológico y se unen a éstas; esta unión se puede detectar
mediante el microscopio.

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Figura 1-24. Técnica de inmunocitoquímica indirecta. 1) Produc-
ción de un anticuerpo policlonal primario. La proteína X de un
ratón se inyecta en un animal de otra especie, por ejemplo, en
un conejo. El conejo elabora diversas Ig contra la proteína X. 2)
Producción de un anticuerpo secundario. La Ig de otro conejo
(normal y no inmunizado) se aísla e inyecta en un animal de una
tercera especie, por ejemplo, una cabra. Se producen Ig de cabra
contra Ig de conejo. Las Ig de la cabra se purifican y se acoplan a
un marcador. 3) Primera etapa de la reacción inmunocitoquímica.
Las Ig del conejo reconocen diversas porciones de la proteína X
y se unen a éstas. 4) Segunda etapa de la reacción de inmunoci-
toquímica. Las Ig de cabra marcadas reconocen las Ig de conejo
y se unen a ellas, lo que indica la presencia de la proteína X.

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Figura 1-25. Microfotografía de una célula decidual de ratón cultivada in vitro. La proteína desmina, que constituye filamentos inter-
medios que forman parte del citoesqueleto, se detecta mediante una técnica de inmunofluorescencia (inmunocitoquímica) indirecta.
La mayor parte del citoplasma está ocupada por una rejilla de filamentos intermedios. El núcleo (N) aparece en azul. Gran aumento.
(Cortesía de F. G. Costa y P. A. Abrahamsohn.)

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Figura 1-26. Microfotografía de un corte de intestino delgado en el
que se ha aplicado un anticuerpo contra la enzima lisozima para
la demostración de la presencia de lisosomas en los macrófagos
y en las células de Paneth. La coloración marrón es el resultado
de la reacción que tiene lugar para demostrar la enzima peroxi-
dasa, que es el marcador acoplado al anticuerpo secundario. Los
núcleos aparecen teñidos con hematoxilina (tinción de contraste).
Aumento mediano.

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Figura 1-27. El antígeno carcinoembrionario es una proteína pre-
sente en diversos tumores malignos, principalmente mamarios
e intestinales. Esta microfotografía es una demostración inmu-
nocitoquímica de la presencia del antígeno carcinoembrionario
en un corte histológico correspondiente a un adenocarcinoma
del intestino grueso. El anticuerpo está marcado con peroxidasa,
que aparece con una coloración marrón. Tinción de contraste con
hematoxilina. Aumento mediano.

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Figura 1-28. Corte histológico correspondiente a una célula acinar pancreática incubada con un anticuerpo frente a la amilasa e incu-
bada de nuevo inmediatamente después con la proteína A marcada con partículas de oro. La proteína A tiene una gran afinidad por
las moléculas del anticuerpo. Las partículas de oro aparecen en forma de pequeños puntos negros sobre los gránulos de secreción
maduros y sobre los gránulos inmaduros en fase de formación en el complejo de Golgi. Electromicrografía. Gran aumento. (Cortesía

Junqueira y Carneiro: Histología básica. © Masson, Barcelona, 2005


Figura 1-29. Corte histológico correspondiente a un tumor epitelial
benigno (condiloma) estudiado mediante hibridación in situ. Las
zonas de coloración marrón se localizan en las áreas donde existe
ADN del virus del papiloma humano tipo 2 (HPVII). Tinción de
contraste con hematoxilina. Aumento mediano. (Cortesía de J. E.
Levi.)

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Figura 1-30. Forma que adoptan diferentes estructuras tridi-
mensionales cuando se seccionan en cortes finos. A) Diferentes
secciones en una esfera hueca y en un tubo hueco. B) Un corte a
lo largo de un único tubo enrollado se puede observar como si
fueran cortes de varios tubos. C) Los cortes efectuados a través
de una esfera sólida y a través de un cilindro sólido pueden ser
semejantes.

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