FELIX MANUEL HERNANDEZ MERAZ

Profa.: Juana Celestino Rodríguez

2° “P” Vespertino

LITERATURA

“ANALISIS LITERARIO”

DE

“EL ARBOL DE LA VIDA”

Miranda Horner

INTRODUCCIÓN
Esta historia habla de una dríada que vivía en lo que era un bosque
que tenía árboles, pájaros, tierra verde y fértil y otras formas de vida
forestales ya que a medida de que el paisaje cambiaba lo mismo le
pasaba a la dríada. Y habla de un dragón azul y su jinete que
habían caído en ese árido bosque, esta dríada estaba apunto de
morir ya que no tenia agua para poder tomar algo para el seco roble
en el que vivía esta dríada pensaba y maldecía el hecho de que un
dragón azul y su jinete hubiesen caído fuera de sus alcances y de
su ajado árbol ya que el jinete del dragón azul traía un odre y ella
decía “Si el combate de Dragones hubiese empezado un poco
antes y el Dragón azul hubiera caído un poco más cerca, tal vez
habría podido salvar a mi ajado árbol con el agua de ese odre” ella
pensaba que como podía proteger la tierra de esa horrible sequía
que no era natural.
Ella platicaba con el ajado roble ella decía que mala suerte la suya
que a ella y a su roble no le quedaba mucho tiempo de vida ya que
No había agua que tomar por que había pasado mucho tiempo sin
llover, momentos después se escucho la voz débil, de el jinete que
le ordenaba al dragón que se levantara, la dríada observaba como
el hombre se esforzaba para salir a rastras de debajo del colosal
dragón azul y el dragón había intentado girarse para proteger a su
jinete pero no lo consiguió. Pero el cuerpo dragón le había caído
sobre las piernas y las había aplastado. La dríada al verlo ella sabia
que la pesada armadura no le ayudaba en nada la situación al jinete
después el jinete le exigió al dragón que se moviera fue entonces
que la dríada intervino y ella fue quien le dijo que el dragón azul
estaba muerto y que había sostenido una fuerte batalla con un
dragón plateado y que le habían hecho una grave herida en el
vientre a su dragón y que había sido un combate glorioso el jinete
tornó velozmente hacia ella y el jinete le pregunto que quien era
exigiendo saber, ella le dijo que era una enemiga si el pretendía
hacerle daño al roble respondiéndole cruelmente pero al recordar
que el jinete sostenía en sus manos algo de sumo valor para ella
hablo con el jinete más razonablemente cuando el jinete iba
empezar a hablar con ella comenzó a toser enseguida tomo el odre
lo destapo y cuando le iba a dar el primer sorbo la dríada grito tan
fuerte que el volvió a tapar el odre y le pregunto que se acaso ella
también tenia sed y como el jinete seguía enojado con ella por la
manera en la que la dríada le había hablado argumento que no
obtendría gota alguna hasta pedirle una disculpa y decirle que quien
era y que era lo que hacia ahí ella cambiando su actitud se sentó y
cruzando las piernas, sonriendo le dijo “soy la guardiana de esta
área yo vivo aquí, después de esto el jinete se volvió observando a
su alrededor hasta le permitía su posición y el le dijo que esa no era
un lugar muy agradable para vivir, luego ella le contesto que antes
era un bosque con muchos arboledas y arroyuelos y que una sobre
natural sequía había estado matando lentamente ese hermoso
paisaje no cambiando en nada la expresión del jinete, el le pidió
ayuda diciéndole con un poco de sarcasmo y ofreciéndole a la
dríada un poco de agua a cambio de su ayuda, la dríada dejo que
creyera que estudiaba la propuesta. ¿Y que? Le pregunto el jinete
intrigosamente, contestándole ella finalmente ¿Me darás el agua
que has prometido? Sin reacción alguna pro parte del jinete, ella
pensó que el había perdido el conocimiento debido al dolor que le
ocasionaba el dragón en sus piernas, ella le diciéndole que
despertara con una voz ronca, y no habiendo respuesta alguna por
parte del jinete la dríada extendió su brazo todo lo que pudo y
consiguió arañar el suelo a lado del hombre y trantando de
despertarlo pero sin éxito alguno pensó y murmuro a caso esta fue
mi ultima oportunidad de mantenerte vivo inclinando la cabeza,
concentrándose, e intentando llegar a la conciencia del árbol, ella
sintió una presencia pero estaba demasiado escaso de energía.
Y susurrando entrecortadamente que todo moría a su alrededor. Y
que habría llorado si le hubieran quedado lagrimas y de milagro otro
ruido de dolor atrajo la atención hacia el jinete y animándolo le dijo
despierta, el jinete se incorporo cuidadosamente apoyándose en su
antebrazo derecho y exigiéndole con hostilidad le dijo que lo sacara
de ahí debajo con una expresión en su cara de hostilidad y de dolor
a la vez y la dríada moviendo la cabeza negativamente y le dijo que
el le había dicho que le daría agua si le respondía sus preguntas el
hombre limitándose observo fijamente a la dríada y luego afirmó
esta bien se dejo caer y desenroscó el tapón del odre, y vaciando
un poco sobre el tapón, estiro con mucho cuidando procurando de
no derramar su brazo izquierdo y dríada esperando todo el odre le
pregunto que si nada más le iba dar eso, y volviéndole a decir con
hostilidad el jinete le dijo que bebiera por lo que la dríada acepto el
tapón, y esta en lugar de beberla la derramo cuidadosamente sobre
la raíz prominente del ajado árbol, y el jinete poniendo una cara de
incredulidad le pregunto que era lo que hacia, y la dríada esperando
que cayera la ultima gota de agua para devolver el tapón, ella
respondió que tenia que proteger el árbol y diciéndole de buena
manera la dríada dijo que si por favor le daba el odre para que su
árbol pudiera sobrevivir, el jinete con un movimiento brusco se
apresuro a tapar el odre, preguntándole que por que el estaba vivo
y que ella también y que el árbol no y insistiéndole que le ayudara y
que después le daba más agua, ella diciéndole en voz baja que no
le podía ayudar, el jinete levanto la cabeza y la miro furioso ella
tristemente le contesto que desgraciadamente no le podía ayudar el
jinete hostilmente que por que no le podía ayudar ella casi
murmurando le dijo al jinete que no podía dejar la zona que rodeaba
al árbol en el que ella había nacido sin morir lentamente, también le
dijo que ya que el árbol se encontraba en ese estado era todavía
mucho menos sus limites restringidos y así empezaron una larga
platica.

Desarrollo
Ella le empezó a decir que desde que el había caído ella había
intentado acercarse a el pero eso era imposible que estaba
demasiado débil y no podía acercarse a un mas al odre que llevaba
el jinete agresivamente le decía que entonces el había estado
gastando fuerza y perdiendo el tiempo con ella ya que no le
ayudaba en nada, ella tratando de que le diera el odre le dijo que
sus amigos estaban a al menos a un día de vuelo de ahí y que a
juzgar por las heridas que el presentaba y por la armadura que el
llevaba no iba poder aguantar hasta el siguiente día ni tampoco ella,
ni su árbol el caballero mientras tapaba el odre le preguntaba que
por que razón le importaba tanto ese árbol, la dríada tratando de
evitarlo le dijo que talvez no era posible soportar hasta el día
siguiente debido al grado de las heridas que presentaba el jinete
protestando levanto su brazo izquierdo señalando hacia sus piernas
y le dijo que no sangraba, la hada le dijo que no pero que no iba
poder soportar el calor, el jinete defendiéndose le dijo que tenia
suficiente agua para soportar el calor, y diciéndole que lo dejara
tranquilo la dríada le dijo que no podía ya que necesitaba con
desesperación la poco agua que el contenía en ese odre ya que su
árbol estaba muriendo, y dejándose caer el jinete le pregunto que si
ella creía que con la poco agua que contenía el odre su árbol se iba
poder salvar ya que el también la necesitaba para poder sobrevivir
hasta que lo encontraran sus amigos, mientras el calor del sol
aumentaba ella le dijo al jinete que el agua curaría al árbol ya que
decía que el jinete era que estaba equivocado ya que nunca lo
encontrarían en una tierra tan desolada, el con una mueca de
desesperación, enojo y cansancio le dijo que guardara silencio que
tenia que descansar para reponer fuerzas y que sus palabras no le
importaban. La dríada comentándole le dijo que seria imprudente
que el se durmiera con las heridas que el tenia en especial por el
fuerte golpe en la cabeza, y el jinete con una mueca de no saber a
lo que se refería la dríada le pregunto que si era cierto, y la dríada
con una mueca de risa y quererse reír por que el jinete seguía
respondiéndole después de que el había dicho que se callara, ella
el comenzó a contar que hace mucho tiempo un hombre vestido de
una manera semejante había cruzado lo que entonces era un
bosque que ese hombre también había tenido heridas y al
recostarse en un árbol y quedarse dormido a la mañana siguiente al
mandar a un sílfide a ver cual era el estado de aquel caballero
había descubierto que había muerto durante el sueño y así empezó
a ponerle atención el jinete y tras la larga anécdota el pregunto que
si tenia alguna otra herida que la del pecho y también pregunto que
era un sílfide, la dríada prefirió contestarle primeramente la segunda
pregunta, y le dijo que eran pequeños elfos que tenían alas y
estaban hechas de magia y aire, y le dijo que no sabia ya que el
caballero llevaba todo su cuerpo cubierto por una armadura, y
añadió que tiempo después una hembra kender había encontrado a
aquel humano pero ya era demasiado tarde ya que aquel humano
ya era puros huesos, y la hembra llevo lo que quedaba en dirección
al bosque, el jinete refuñando le pregunto que si ella también sufría
por la presencia de los kenders, la dríada aceptando el comentario
del jinete le dijo que pasaban por ahí de vez en cuando y que nunca
habían intentado destruir el bosque como los humanos, mientras
tanto seguían platicando el jinete le hacia más preguntas, la dríada
pensó en ese momento que si tal vez si seguía contestando sus
preguntas le daría más agua para su árbol, así que ella le empezó a
contestar todas y cada una de las preguntas que le hacia el jinete,
ella le contaba que en todo el tiempo que ella había vivido en es
árbol había conocido a muchos animales del bosque, humanos,
elfos, e incluso algunos seres barbudos llamados enanos. Y la
dríada volviéndole a preguntar que si le daba el odre ya que el no lo
necesitaría por que al parecer no iba poder aguantar hasta el ocaso,
el caballero accedió y dijo que le daría otro tapón pero que seria
mejor que ella se lo tomara ella y que no lo derramara en su árbol, y
estirando de nuevo su brazo le dio el tapón, la dríada lo tomo y lo
volvió a derramar deliberadamente, y agrego que si el no entendía
como actuaba la naturaleza, diciéndole que ella había nacido de
ese árbol y que si conseguía salvarlo ella podría salvar todo el
bosque y que todo regresaría a su estado normal, y cuando le
devolvió el tapón del odre sus dedos se rozaron por el temblor de
las manos del jinete que se lo arrebato para cerrar rápidamente el
odre, y con una actitud negativa y con un tono de hostilidad le dijo
que como era posible que su ajado árbol pudiera salvar ese bosque,
y contestándole la dríada le dijo que no debía subestimar el poder
de la naturaleza, y ella también le dijo que si ella conseguía que su
árbol viviera un día más, así ganaría un poco mas de tiempo para
ver si tal vez volvía a llover, y con un tono de voz un tanto burlón le
dijo que si no se había dado cuenta de lo que había estado pasando
estos últimos años, el decía que habían llegado grandes dragones
a esas tierras, y que precia ser que hasta la misma tierra se
amoldaba a las necesidades de estos inmensos dragones, la dríada
tratando de persuadir al jinete para que le diera el odre ya que ella
se dio cuenta de que el árbol esta vez si había aprovechado el agua
vertida le empezó a decir que de todos modos ella estaba
convencida de que el iba morir y que la sangre que iba a derramar
el ayudaría a su árbol a sobrevivir, que para que necesitaba esa
agua si los amigos de los que tanto hablaba talvez iban en otra
dirección sin percatarse de la ausencia del mismo, y que su árbol
consiguiera un poco mas de tiempo pero que de todas maneras
necesitaba el agua de ese odre y que su sacrificio por dar el agua
no seria en vano ya que ayudaría para que pudiera florecer la tierra
en la que ellos estaban, al jinete le llegaron aquellas duras palabras,
el jinete tratándose de defender le dijo que el tenia sus propias
creencias y sus propias metas a las cuales seguir, agrego que
cuando el se convirtió en caballero de la oscuridad tuvo una visión
la cual hablaba de batallas que se ganaban en su nombre. Y que
nunca debía entregar la única esperanza de supervivencia a algún
espíritu de la naturaleza que se sentaba a lado de un árbol muerto y
dijo que en cuanto sus compañeros lo salvaran el volvería a montar
y conduciría a la victoria Takhisis. La dríada contestándole un tanto
triste que si las esperanzas en el futuro diferían de las suyas, y la
dríada volviéndole a decir lo importante que era que el árbol viviera
le dijo que si no se daba cuenta de que si no hubiera árboles ni
pájaros no hubiera vida en este planeta el no podría ningunas de las
metas que su señora le había impuesto, el caballero se volvió dejar
caer el le pregunto que si eran esos los pájaros de los que ella
hablaba y al levantar la cabeza ella vio unos buitres que volaban
circularmente encima de ellos, ella dijo que todo ser vivo esta en la
tierra por algo la dríada agregando que incluso los carroñeros
tenían una función y que si no hubiera de estos la tierra estuviera
llena de cadáveres y el empezó a hablar sin control tratando de
sacar de quicio a la dríada y contándole la historia de un compañero
que había perdido una batalla y se lo habían comido los buitres
terminando la anécdota la dríada se puso a pensar después se
pusieron a platicar acerca de la vida y el jinete le dijo a la dríada que
si a ella no le preocupaba que los buitres comieran su carne ella sin
ningún problema contesto que si su destino era morir fuera de su
árbol a ella no le causaría ningún problema ya que ella misma
pertenecía al ciclo de la vida, el jinete le pregunto que pasaría si ella
moría dentro del árbol ella le dijo que estando dentro del árbol su
cuerpo deja de existir y la dríada le pregunto que si sentía insultado
por su sinceridad el jinete sin pensarlo dos veces le dijo que no para
el era un rasgo admirable que alguien dijera la verdad y que el
prefería decir siempre la verdad. La dríada sonrió irónicamente
entonces la verdad no puede ofenderte.

CONCLUSIONES
La dríada cuando observo que el jinete perdía lentamente el
conocimiento y observo que los buitres se acercaban poco a poco al
cuerpo del dragón azul empezó a darle ánimos le dijo que si moría
ahí antes de que sus amigos vinieran a ayudarlo y como el insistía
no habría mancillado su honor mintiéndose a si mismo, el jinete se
mantuvo callado unos segundos antes de contestar el jinete casi sin
fuerzas dijo que sus amigos volaban delante de el antes de que el
dragón plateado y su jinete lo emboscaran, también agrego que
libraron un fuerte combate aéreo pero rayo el dragón azul fue herido
por la lanza del otro jinete, y al escuchar que el jinete hablo un poco
más fuerte y ya no tanto como un susurro pensó la dríada, el jinete
dijo que sus amigos sabían el rumbo que llevaban y que ya no
tardaban en llegar ya que ellos podían calcular donde lo perdieron,
y la dríada preguntadote le dijo que si no estaba mintiendo acerca
de lo que había dicho, y el jinete respondió que si ella tampoco
mentía acerca de lo del odre que la ayudaría a salvar su árbol y el
bosque y ella le respondió diciendo que tal vez no al bosque pero
que el árbol poseía magia suficiente para poder darle vida a ella y
que no le caviar la menor duda que si sacrificaba el agua ayudaría a
que el árbol reviviera, y que tal vez si su árbol revivía otros árboles
seguirían el mismo ejemplo, y cuando los buitres estaban apunto de
atacar a la herida del dragón la dríada con sus ultimas fuerzas dio
un grito tan fuerte que hizo que los buitres se apartaran a una corta
distancia, el jinete no entendía por que la dríada había hecho eso y
se lo pregunto, pero la dríada estaba demasiado débil y teniendo
otro tapón lleno de agua se lo dio a beber el hombre volviéndole a
preguntar pero sin respuesta alguna vio que la dríada poco a poco
se fue levantando hasta quedar sentada y el jinete le volvió a
preguntar que pro que lo había hecho pero a un sin respuesta
alguna fue entonces cuando el jinete le pregunto solo lo hiciste para
obtener más agua verdad, contestando la dríada ya que prefieres la
verdad te debo contestar así es dijo, el rostro del caballero a un no
convencido y todavía con algunas dudas, y mirando consternado a
la dríada ella le dijo que si el creía que ella duraría más tiempo que
el estaba equivocado ya que ella se había que dado sin energía al
espantar a los buitres, el jinete tratando de justificarse dijo que ella
estaba en mejor estado que el, y en acto de generosidad el jinete le
hablo a la dríada pero ella sin responder, antes de perder el
conocimiento ella solo pensó que ya era demasiado tarde, el cielo
se oscurecía con el crepúsculo y entonces ella sintió una inyección
de fuerzas y al recobrar el conocimiento le hablo al jinete y le
pregunto que cuanto tiempo había pasado pero no obtuvo
respuesta alguna puso la vista hacia el lugar donde se encontraba
el hombre, el había agachado su cabeza y estirado su brazo y en su
mano se aferraba un odre que se encontraba vació, y curiosamente
miro a todos lados y los buitres ya no estaban la dríada volteo hacia
su árbol y vio que el luchaba para poder vivir y que lo estaba
logrando hasta cierto punto. Dijo y pensó mientras se ponía de pie
que ese hombre había muerto con honor y que la comprensiva
reacción del árbol era una mezcla de esperanza, amistad y
esperanza.