del órgano permiten en el luevos procesos llamados a elaciones internacionaliza-la

actividad estatal en
 CAPITULO 15

LA SUPRANACIONALIDAD EN EL ÁMBITO DE LA INTEGRACIÓN

J Dentro del campo de la integración se ha recurrido a una expresión, la de

"supranacionalidad" con el fin de referir a uno de los conceptos más difíciles de
explicar en los procesos de integración.
Es decididamente uno de los más utilizados y referencia-dos, no obstante es
también el más debatido en su alcance v efecto frente a otros, con los cuales se
complementa, diferencia o contrapone.
La supranacionalidad para algunos potencializa a los Estados en un proyecto u
objetivo común, para otros señala un cercenamiento, pérdida o disminución de la
soberanía. Es por esto que el debate está siempre presente, ha dividido opinio-• nes
entre nacionalistas e internacionalistas y ha encendido las ¿polémicas más agudas
por su enorme importancia para comprender los efectos de los procesos de
integración1'18.

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 La supranacionalidad casi siempre ha sido enfocada desde un ángulo político; con la integración los efectos de este concepto
han penetrado en el mundo económico y jurídico, para luego afectar casi todas las esferas de interés.
Pero también en la integración ha habido una cierta par-cialización del concepto, se lo ha referido tradicionalmente para
identificar a las estructuras o entidades de tipo "supra-nacional", enfocando el tema desde el punto de vista orgánico, olvidando
que tiene otras dimensiones no menos importantes.
Este fenómeno se produce porque las instituciones y los conceptos que se utilizan en el campo de la integración provienen
del campo político, del cual se nutre terminológicamente; claro que las instituciones políticas al trasladarse o transformarse en
instituciones jurídicas, adquieren connotaciones diferentes que deben ser distinguidas y clarificadas. Precisamente la expresión
supranacional o supranacionalidad es un claro ejemplo de terminología extraída del campo político adaptada al plano jurídico
de la integraciónlcw
Esta circunstancia lleva a confusiones v dificultades concep-tuales, en especial cuando es estudiada frente a otra noción, la
de "soberanía", vinculada en el plano político al "poder" o al ejercicio del poder que integra a su vez uno de los elementos para
ubicar la noción de "Estado".
Terminológicamente "supranacional" significa "lo que está encima de la Nación", noción que trae aparejada una enorme
dificultad frente al plano jurídico político. Igual cosa cabe decir de la expresión "supraestatal", que significa "lo que está
encima de los Estados".
La precisión de las nociones "supranacionalidad" y "su-praestatalidad" por un lado, las de "intergubernamentalidad" o
"interestatalidad", por otro, referidas a las organizaciones y órganos con menor o mayor autonomía, y su distinción tienen
enorme ínteres teórico y practico.

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 PARTE III. ORGANIZACIÓN INSTITUCIONAL DE LOS PROCESOS...

El análisis es necesario no sólo por simple curiosidad doctrinaria, sino por el enorme impacto que ocasiona,
porque siem pre cuando encaramos estos temas explícita o implícitamente afectamos al concepto de soberanía.
Metodológicamente es posible encarar la supranacionalidad desde un triple enfoque, para simplificar su
comprensión.

La cxpresión(?upranacional con¡p ordc" j"rííj^~

Al referir al campo normativo sistematizado que se ubica sobre el orden jurídico nacional o en un plano paralelo al
mismo, jerárquicamente prevalente en el orden jurídico intema-cional.

La rxprt>sit'm&iprn)incio*ia¡ cnmc. referencia norma:iva

Al referir a la norma, que tienen características propias. El objetivo normativo trasciende el ámbito nacional y se
provecta a un ámbito regional o continental, con efecto prevalente v aplicación inmediata y directa.

La cxprcsiónfcupranacional como referencia orpánica\

Al referir a las organizaciones o instituciones supranacio-nales creadas por Tratados o Protocolos como órganos de
un proceso de integración.

La expresión "supranacionalidad" referida al órgano

La organización de carácter supranacional del tipo europeo, que ha revolucionado el sistema de relación de los
Estados, se caracteriza por tener un proyecto u objetivo común; representa-tividad diferente de la representación
estatal; reordenamiento o
reorientación de los "poderes" y "competencia" v autonomía en diversos campos como ya han señalado numerosos
autores.

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La atribución de competencia que otorgan los Estados a los órganos supranacionales o a los intergubernamentales tiene
relación con la noción de soberanía, cada vez más relativizada, pues implica la afectación de la noción de "poder".
El análisis de las competencias explícitas, implícitas y subsidiarias tiene por consecuencia directa vinculación con el "poder" o
facultad delegada por parte del Estado y determina en primer lugar la atribución o el otorgamiento de competencias, el alcance
del poder delegado y el reparto o modo de ejercicio del poder.
Con relación a la competencia explícita, la naturaleza de los poderes otorgados será siempre en los límites de competencias
materiales. La intensidad estará determinada o establecida por el marco jurídico.
En esta delegación es perfectamente posible que se trate simplemente de orientar la política de los Estados miembros, o en
otros casos hasta definir de políticas, legislarlas y ejecutarlas o administrarlas, en cuyo caso el límite de competencia material,
como el grado de integración, determinarán la intensidad de los poderes. El grado de unidad política, que evoluciona a la par
que ias instituciones, elimina la resistencia hacia intensificar la cesión o delegación funcional.
Las estructuras comunitarias o de integración son normalmente complejas, es decir se articulan en órganos técnicos, políticos,
deliberativos y legislativos, por lo que la delegación funcional que por razones de ejecutividad y eficiencia es otorgada a un
órgano institucional, es objeto de control o contralor por otros, donde se acentúa la representación o la intervención de
funcionarios estatales.
Naturalmente que las decisiones en las "áreas materiales atribuidas" están supeditadas a un interés regional —no ex-
clusivamente nacional—, común a todos los Estados miembros, produciendo un reordenamiento en el modo de ejercicio de
ciertos poderes que se vinculan a la "soberanía", pero que no implica necesariamente una eliminación o cesión de ella.

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PARTE III. ORGANIZACIÓN INSTITUCIONAL DE LOS PROCESOS.

Competencias implícitas
El ámbito de competencia no ofrece dudas cuando hablamos de las contempladas
específicamente en los tratados de integración y en los protocolos que establecen la
organización de sus órganos y el alcance de sus potestades.
No existen grandes dificultades cuando se trata de poderes |¡ explícitamente otorgados o
atribuidos en función del objetivo ; trazado por el tratado, pero es obvio que para el
cumplimiento H de su cometido los órganos tienen a su vez además del "poder atribuido",
competencias implícitas o inherentes que permiten C el desarrollo de las acciones y las
instituciones de integración.
El orden jurídico comunitario establece para los Estados, los órganos y los particulares
obligaciones, pero también derechos, no sólo porque están previstos explícitamente en los
tratados, sino por el desarrollo mismo del proceso de integración y a través de
disposiciones y facultades que implícitamente son otorgadas para lograr el objetivo
comunitario.
Este derecho inicialmente negado a toda organización internacional, bajo la idea de que la
atribución de competencia no puede ser sino delimitada y determinada específicamente,
jjjjg fue modificado paulatinamente al notar que no podrían, en mu^ Xchos casos, cumplir
sus objetivos sin desarrollar antes, o coñ-^comitantemente, otras acciones para lograrlo. La
jurispruden--cia internacional abrió de este modo el camino para aceptar las 'competencias
implícitas110.
:'■ El Tribunal de justicia de las Comunidades^Europeas ha de-'Sarrollado una interesante
jurisprudencia indicando que la ^competencia para/tomar compromisos internacionales
puede Sultar no sólo de una atribución explícita del tratado sino lente desprenderse de
manera implícita de sus disposi-
[ dotar de personalidad jurídica internacional a una entile tipo supranacional o
intergubernamental, implica tá-

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