ELEODORO BENEL ZULOETA

Recopilacion: José Saavedra De los Ríos

Eleodoro Benel, nace un 05 de agosto del 1874 en el pueblo

de Santa Cruz de Succhabamba-Cajamarca, sus padres
fueron: don Andrés Benel y doña María Zuloeta, su esposa
fue doña Domitila Bernal.

Fue un hacendado, latifundista heredero de gran cantidad

de tierras, lo que le permitió la captura del poder político y
de los aparatos del Estado a nivel local, configurándose un
acentuado gamonalista que estaba en relación directa a la
debilidad del poder central en la zona, ésta debilidad se
manifestaba entre otros aspectos:

 En la dependencia de los prefectos, alcaldes y

demás autoridades al poder terrateniente.
 En la escasa presencia militar del Estado central en
comparación a la existencia de verdaderos ejércitos
particulares en las principales haciendas.
 Así como en la incapacidad del Estado central de
imponer orden frente a los continuos conflictos inter-
terratenientes, luchas en las cuales, los campesinos
eran utilizados como "carne de cañón".

EL Dr. Salomón Vilchez, en su obra Fusiles y Machetes 1960 -, describe a

Benel: “Cuando tuvimos la oportunidad de conocerlo personalmente en su
hacienda Silugán (Cutervo), en diciembre de 1925, lo encontramos dirigiendo
los trabajos de molienda de caña dulce. Estaba de ropa de faena un tanto
descuidado. Hombre de talla mediana, ágil y desenvuelto en sus ademanes;
trigueño, firmes facciones, nariz aguileña, amplia frente, altivos bigotes, ojos
negros de mirada penetrante, con voz delgada, pero enérgica y persuasiva."

Participó en la vida política y en muchas oportunidades estuvo perseguido por

las autoridades por rencillas de diversa índole. En 1894 Eleodoro Benel se
enrola en la montonera pierolista contra el gobierno de Cáceres. , En 1906
Benel alcanza una posición predominante en la zona central del departamento
de Cajamarca, gracias a la adquisición de tierras, el ingreso a los nuevos
circuitos comerciales y el "enganche" de mano de obra andina para los
latifundios azucareros de Lambayeque. Crecientes rivalidades con otros
hacendados culminan en un intento de asesinato en su hacienda La Samana
(Santa Cruz entonces provincia de Hualgayoc) donde fue atacado por sus
mortales enemigos los hermanos Raimundo, Domingo y Baltasar Ramos,
quienes llegaron hasta su casa y la prendieron con dinamita, Benel y los suyos
rechazaron el ataque que costó muchas vidas, desde entonces tuvo que
mantenerse alerta y le acompañaba en todo momento su fiel e inseparable
sobrino Misael Vargas, con quien tenia que hacer frente en Utijiaco a otro
temible enemigo Anselmo Díaz. En 1912 Benel apoya la candidatura de
Billinghurst y ocupa Santa Cruz para decidir el voto.

En 1914 Benel arrienda la hacienda

Llaucán - ubicada en Hualgayoc,
propiedad del Colegio San Juan de
Chota (donada por el Pte. Ramón
Castilla en 1861). Los campesinos de
Llaucán se levantan contra Benel y se
opusieron a que éste asuma la
administración, a causa de la negativa de los campesinos de pagar un aumento
excesivo en la merced conductiva impuesta por Benel, los campesinos toman
la hacienda por lo cual el locatario (Benel) solicitó la intervención del Prefecto
de Cajamarca. Entonces, el 3 de diciembre de 1914, el Prefecto de Cajamarca
Sr. Belizario Ravines llega con tropas gubernamentales para darle posesión,
los campesinos le salieron al encuentro para oponerse, los ánimos se exaltaron
y de las ofensas verbales pasaron a los hechos, una campesina llamada
Manuela Huamán coge las bridas del caballo del prefecto y con una varilla para
hilar golpea a este, el Capitan Raviens hijo del prefecto sale en defensa y
descarga cinco tiros sobre esta mujer, el fuego de la fusilería dejó el campo
cubierto de cadáveres Lewis Taylor ofrece parte de la descripción sobre lo
ocurrido aquel 3 de diciembre de 1914 dice: En medio de carnicería, Ravines
(hijo del Prefecto y capitán de las tropas) perdió la cabeza y ordenó a las tropas
dar caza a los campesinos en retirada. Los soldados primero cargaron con
bayoneta contra los heridos esparcidos por la pradera y luego dispersaron por
toda la hacienda. Niños, mujeres y hombres fueron arrastrados de sus casas y
asesinados. Otros fueron derribados mientras escapaban por los caminos
rurales o se escondían en los campos. Al final del día, más de 150 campesinos
habían perecido, mientras que las tropas sólo tuvieron a un hombre levemente
herido. Benel se retiró a su fundo La Samana resuelto a enfrentar a quien
quisiera capturarlo.

Como consecuencia de esta masacre, En 1917 Benel

fue apresado en Hualgayoc y enjuiciado en
Cajamarca, ingreso a la cárcel el 15 de diciembre de
1917 aplaudido por una una gran multitud. En 1919
Benel ayudado por su hijo Casinaldo, con una orden
fraguada, franqueó la puerta de la cárcel para huir
velozmente, por la ruta de Llapa, protegido por 40
jinetes armados, empieza a convertirse en figura
legendaria. Apoya la candidatura oficialista de
Aspíllaga y ocupa Chota para decidir las elecciones
parlamentarias tras el golpe de Leguía. Desde
entonces, hasta su muerte, viviría Benel en abierta
pugna contra la ley, en franca rebeldía contra el
gobierno local y nacional.
Cuando parecía que se había olvidado de él, el Subprefecto de Chota envió un
fuerte contingente de gendarmes reforzados con la gente civil de Anselmo
Díaz, para capturarlo. Después de 3 días de combate los asaltantes fueron
rechazados con grandes bajas. Quince gendarmes quedaron prisioneros y
Benel los remitió a Chota, dejándolos amarrado en las afueras de la ciudad,
con una “carta de devolución” dirigida al Subprefecto . En febrero de 1919, con
motivo de la asamblea de mayores contribuyentes, los "guapos" de Benel y los
"chetillanos" de Leóncio Villacorta atacaron la ciudad de Chota. La refriega duró
varios días, murió el Subprefecto Merino y tropas llegadas de Cajamarca
obligaron a retirarse a los asaltantes; la asamblea no logró instalarse. Benel se
refugió nuevamente en la Samana, donde tuvo una peremne y vigilante actitud
de defensa contra los enemigos lugareños y las autoridades del gobierno
nacional. 1920. Benel adquiere las haciendas Silugán y Sedemayo en Cutervo
y Nuevamente ocupa Santa Cruz. El 22 de septiembre de 1922 su hijo
predilecto, Casinaldo Benel Bernal cayó asesinado a balazos en la plaza de
armas de Santa Cruz, en la puerta del templo. Los acusados de este crimen
fueron los Alvarado que como los Ramos, ambas familias de Santa Cruz
formaban parte de otro grupo terrateniente, enemigo de Benel. Benel jura
luchar hasta el final y no perdonar nunca la muerte de su hijo.

En 1924 se produce la revolución de Chota, Germán Leguía y Martínez,

ministro de Gobierno renuncia a la cartera y junto con otros políticos, entre ellos
Arturo Osores, pasaron a la oposición para combatir la reelección del
presidente Leguía. Poco después, Arturo Osores, el Coronel Samuel Alcázar y
el Tte. Carlos Barreda, deportados en el Ecuador, ingresaron subrepticiamente
a país, y se concentraron en la hacienda Sillangate, en la provincia de Cutervo.
Organizaron un grupo armado y planearon una revolución anti leguista. A este
grupo se le unieron diversos grupos armados, establecidos desde algún tiempo
en la región entre otras las encabezadas por Eleodoro Benel, Avelino Vásquez
de Cutervo, Benjamín Hoyos, Alberto Cadenillas, Regulo Regalado, Arturo
Acevedo y N. Arrascue. En su primer ataque los revolucionarios lograron tomar
Chota, manteniéndola en su poder 4 días. Sin embargo la repentina
enfermedad de Osores, la presencia de los regimientos de Artillería # 1, de
infantería #11 y gendarmes de infantería de Lima, así como la ayuda prestada
por los bandoleros Anselmo Díaz, Leoncio Villacorta y Vidal Avellaneda, en
Churucancha, donde se habían concentrado las fuerzas de Osores y Benel,
deciden la acción a favor de las fuerzas del gobierno. El triunfo gubernamental
significó el fusilamiento del Coronel Alcazar y Tte. Barreda. Osores hecho
prisionero, fue internado en la isla San Lorenzo, donde con su familia
permaneció 6 años. Benel con su gente se retiró a la hacienda La Samana en
Santa Cruz.

El 20 de enero de 1925 el
Comandante Manuel
Valdeiglesias a cargo del
batallón Nº 11 de Lambayeque,
recibió la comisión de atacar a
Benel, la valentía de este jefe y la
superioridad de sus efectivos con
inagotable dotación de municiones quebrantaron la resistencia de Benel en la
hacienda la Samana

Benel se retiró a su hacienda Silugán (Cutervo) tanto porque carecía de

municiones, como por que querian la paz, salieron de la Samana con 60
fusileros fieles, sumaban unas docientas personas entre mujeres hombres e
hijos. La ruta que siguieron fue La Esperanza, la coordillera de Huambos ,
Mababamba, Callayuc y al final las montañas y bosques de Silugan (Cutervo),
el viaje duro 4 días. En su camino venció a los "guapos" de Manuel Alarcón que
trataron de cerrarle el paso cerca de Huambos Viejo.

En Silugán residió con sus hijos Andrés, Segundo , Lucila y Donatila ,

dedicándose a trabajos de agricultura. Allí conservaba algunos "Maucers,
Savages y Winchester" reorganizó sus fuerzas y la región quedó a merced de
Benel y Avelino Vásquez, Sus “guapos” a quien él les llamaba “sus muchachos”
eran hombres de poncho color guinda oscuro sin rayas, con grandes
sombreros de palma, algunos de ellos hacían de centinelas estaban en lugares
estratégicos para no ser vistos.

En junio de 1925 se concentraron en Cutervo, al mando del Mayor Cervantes,

fuertes efectivos de la Guardia Republicana y del Ejército que después de
muchos preparativos salieron con rumbo a Callayuc el 06 de julio, pero en el
Portachuelo de Cumbe (Callayuc) fueron sorprendidos por las balas de los
Vásquez y Benel, cayendo en las primeras descargas junto a sus soldados el
jefe del pelotón de exploradores el Teniente Pedro Quijano Hoyos, con
heridas de consideración, el combate se prolongó hasta la noche,
reanudándose la mañana siguiente y al atardecer, el valiente capitán Acevedo
había conseguido abrirse paso con sus hombres hasta el valle de Cuches, la
corneta tocó retirada, dejando en manos de los adversarios apreciable cantidad
de armamento municiones y caballos.

Unido a los hermanos Vásquez (cutervinos) hizo retirarse del Palo Solo a
fuertes fectivos del ejército y de la gendarmería. En julio de 1925 se inician las
negociaciones para un arreglo. Benel reclamó los robos y destrucciones
hechas en su perjuicio y de sus peones arrendatarios, Benel pidió además que
el pacto comprendiera a los Vásquez.

En Lima se había movido invisibles resortes a raíz de estos acontecimientos

por lo que después de dos meses en noviembre de 1925, cuando todos
esperaban un nuevo ataque se tuvo noticias de que se firmaba una tregua
entre el Gobierno y Benel, éste tenía garantías a cambio de devolver el
armamento, caballos y ganado que fueron tomados de la tropa del Portachuelo
del Cumbe y Cuchea, las tropas se retiraron de toda la región y dejaron sólo en
la ciudad de Cutervo a la Guardia Urbana, quienes sufrieron ataques y
quedaron a la merced de los Vásquez y Benel.

Al finalizar el año 1926 el ministro de Gobierno Celestino Manchego, se

propone reincorporar la provincia de Cutervo al Gobierno Nacional, para lo cual
se envía a la zona la flamante y moderna Guardia Civil, comandada por el
Coronel Antenor Herrera.
Después de muchos ataques, Benel con pocos hombres fieles, acosado por
todas partes, perseguido de cerca por el Tte. Temoche y los hombres civiles de
Grimanes Berrios y Santiago Altamirano, el 28 de noviembre de 1927 al ver
agotadas sus municiones, en el sitio denominado el Arenal (Callayuc- Cutervo)
se disparó un tiro en la sub mentoniana con su fusil savage que tenía.

El cadáver fue conducido a

Cutervo en una rústica camilla de
palos y expuesta a la vista del
pueblo en la plaza de armas.
Luego se puso en severa capilla
ardiente en la Municipalidad con
solemnes honras fúnebres, se dio
sepultura en el cementerio de la
ciudad, la misión de las tropas
estaba concluida, posteriormente
los familiares trasladaron los
restos al cementerio de esa
ciudad de Chota.

La Guardia Rural posteriormente a su muerte salió a perseguir a los seguidores

de Benel, llegan a la casa hacienda de Silugan mas tarde la edificación fue
incendiada y dinamitada, para que no quedara rastro (Se muestra al lado
izquierdo la casa hacienda tomada por la Guardia Rural)

PARTIDA DE DEFUNCION DE ELEODORO BENEL

En el registro Civil del Concejo Provincial de Cutervo, se encuentra asentada la

siguiente partida de
defunción:

"Hoy a las tres de la tarde

del día doce de diciembre
del mil novecientos
veintisiete, se presentó
ante esta alcaldía del
Concejo Provincial de
Cutervo (Perú), don
Carlos Vargas Villanueva,
de treinta icho años,
soltero, comerciante
natural de Cutervo, y domiciliado en esta ciudad, y manifestó que el día
veintiocho de noviembre último, había fallecido en el sitio "El Arenal",
comprensión del distrito de Callalluc, de esta provincia, don ELEODORO
BENEL ZULOETA, a consecuencia de heridas producidas por armas de fuego,
siendo el extinto de cincuentaitres años de edad, casado, agricultor, natural del
distrito de Santa Cruz, de la provincia de Hualgayoc, hijo legítimo de don
Andrés Avelino Benel y de doña María Raymunda Zuloeta.- Presentó como
testigos a don Armando Piedra, de veintiún años, domiciliado en esta ciudad y
a don Cruz Quipe de veintisiete, domiciliado en esta ciudad. En fe de lo cual
firmaron con migo el declarante y testigos .- Doce de diciembre entre lineas -
vale.-

• El alcalde (f) Alberto Castro.-El declarante (f) C. vargas V..-

• (f) Armando Piedra Zúñiga.- (f) Cruz Quispe

Fotografia de la ex-
hacienda Silugán (Cutervo-
Callayuc) tal como es en la
actualidad, en este lugar se
refugió Eleodoro Benel con
su familia y sus "guapos".
En la parte alta se
encuentra el Portachuelo
lugar donde se realizó un
enfrentamiento con la
tropas gobiernistas. La
habitan familias cuyos
ancestros, fueron trabajadores y ayudantes de Benel, se ha construido una
capilla y algunas viviendas, hasta hoy se cultivan frutales y caña de azúcar.

Fotografia con los restos mortuorios de Benel frente a la Iglesia matriz de la ciudad de Cutervo, se aprecia
al centro el cadaver, con la gendarmeria y pobladores a su alrededor - 1927 -