Sociedad y burocracia

Confusión general entre ambos términos.

Fruto de una paciente, constante y continua prédica marxista, es común
que hoy en día la gente crea que la palabra "sociedad" es sinónima de burocracia, o esta
de aquélla. ¿De donde viene esta creencia generalizada?. Rastreando en las fuentes,
encontramos que K. Marx denominaba con la palabra "sociedad" al "proletariado", de
quien decía era la clase social más numerosa; conforme a su tesis famosa por la cual,
luego de la "revolución social" el proletariado tomaría el poder, implantaría una
dictadura y –en una etapa siguiente- estos hechos harían "desaparecer" al estado, este
ultimo vendría a fusionarse con el proletariado, es decir, en términos marxistas la
"sociedad".1
A su vez, debemos recordar que para K. Marx y F. Engels, el "estado"
era la "sociedad de clases", y la "revolución" que buscaban (y profetizaban)2 terminaría
con la victoria de una "clase" sobre la otra; o sea, manejaban también como sinónimos
los conceptos de "estado" y "sociedad", esta dividida en dos "clases sociales", y luego
de la "revolución", una sola "clase": la "proletaria". Así tenemos la asimilación de las
palabras "estado = proletariado = clase social = sociedad". Todos estos términos, K.
Marx y F. Engels los empleaban como sinónimos.
En palabras de los propios K. Marx y F. Engels:
"El proletariado debe aprovechar su supremacía para arrebatar el capital a la
burguesía, centralizando todos los medios de producción en manos del Estado, o sea,
en manos del propio proletariado constituido ya en clase rectora." (Vid. Manifiesto
Comunista (1848), Marx y Engels, págs. 74 y 75 (Progress Publishers), Moscú, 1975,
edición en lengua inglesa.)
Esta enseñanza cuajó en nuestra cultura profundamente y así nos llegó
hasta nuestros días, instalándose en el inconsciente colectivo mediante la educación
primero y la permanente, a veces sutil, a veces agresiva, propaganda después.
Entonces, pues, para la mayoría de nuestros contemporáneos, la sociedad
esta representada por el estado, en una palabra, por los burócratas que se encaraman en
su órgano rector: el gobierno. De allí, que toda acción que estos burócratas o sus
acólitos emprendan con ánimo de expoliar al prójimo, se pretenda santificar
agregándole la palabra "social" o adicionando "sociedad" en alguna parte de las
oraciones que emplean.
Cuando le gente piensa y habla de "la sociedad" piensa en sus
representantes burocráticos; cuando los burócratas hablan de "la sociedad",
idénticamente, piensan en sí mismos como tal.
A partir de allí, quedó instalado en el inconsciente colectivo que los
gobiernos "representan" y "defienden" a los pobres por ser esos mismos gobiernos la
representación de lo que originariamente fue el proletariado y ahora se denomina
genéricamente con las palabras "pobres, excluidos, desamparados, descamisados, etc."
según épocas y lugares diversos, posteriores a la difusión del Manifiesto Comunista
Y si no lo hacen "deberían" hacerlo; la conciencia marxista de nuestro
pueblo exige –pues- a los gobiernos la defensa de los pobres, es decir, de un sector
social, y no la de los ciudadanos en su conjunto; aquí se revela entre otras cosas, la
conciencia sectaria del pensar marxista y colectivista en general. Conciencia sectaria

1
Véase sobre este tema L. V. Mises, Socialismo. Western Unión Editorial.
2
Véase K. R. Popper, La sociedad abierta y sus enemigos, Ed. Planeta-Agostini. España.
que indica que solo debe defender el gobierno a un sector d la sociedad y no a la
sociedad en su conjunto.
En la práctica esto implicó que de inmediato aparecieran tantos grupos
sociales como ideologías creían que también merecían ser acreedores de algunos de los
rótulos aceptados y antes mencionados ("pobres, excluidos, desamparados, marginados,
descamisados, etc.")
Desaparece así el concepto de sociedad como un todo (el concepto
clásico) y se lo reemplaza por el de grupos sectarios, lo que halló su máxima expresión
–posiblemente- en el ideario fascista de Benito Mussolini plasmado entre 1922 y 1945,
y adoptado -en mayor o menor grado- por diferentes naciones en modo algo mas
atenuado con posterioridad hasta nuestros días.
En la sociedad fascista, el estado representa en forma absoluta las
corporaciones, se arroga esa representación, lo cual es la esencia del fascismo, y deviene
en dictadura por esta propia característica y dinámica, que fue gráficamente
ejemplificada por el propio Mussolini cuando resumió la doctrina fascista en su célebre
fórmula "Todo dentro del Estado, todo por el Estado, todo para el Estado, nada fuera del
Estado" (a veces se la cita incompleta, pero esta fue la fórmula original y completa).