Larry Adams Antonio Sánchez Aguilar Universidad de las Américas Puebla Texas Christian University
"El conocimiento es experiencia. Lo demás es solo información"
Alberto Einstein Cualquier proceso de aprendizaje parte del individuo. Ésta es la posición de los constructivistas[1]. Mas aún, hoy en día, para motivar al estudiante, resulta necesario presentar el material educativo en forma agradable y a la vez útil. Por otro lado, con el abaratamiento del Internet, por tanto, el acceso a la información, este medio ha sustituido radicalmente la necesidad de ofrecer en clase información estática a través de la escritura en el pizarrón o el simple dictado. Con lo anterior, se ha generando la necesidad de crear una nueva relación entre el maestro y sus alumnos. La nueva relación debe enfatizar la construcción del conocimiento más que la adquisición de la información, ésta es la tesis del presente artículo. Nuestra propuesta educativa se apoya en la teoría denominada constructivismo, la cual, aunque polémica, ha servido de base para generar cambios en los procesos educativos, enfatizando más las experiencias del educando en vez de los aspectos meramente informacionales del instructor. Un buen ejemplo de esta metodología se encuentra en las investigaciones de Roger Shanck [2] y Seymour Papert [3], que enfatizan el concepto denominado "hacer para aprender" (en inglés learning by doing). Dicho enfoque también es sugerido por autores como Thomas L. Magliozzi [4] y R. Pirsig [5]. Dentro de este enfoque, las Tecnologías de la Información, o simplemente TI, son necesarias para lograr estos objetivos. Sin embargo, diversos educadores todavía conceptualizan al uso de las mismas como algo extra, que aunque atractivas no forman parte integral del proceso educacional. La razón de sus críticas radican en cierto grado de desconocimiento del potencial real de las TI, y en la creencia que es difícil supervisar y evaluar el desarrollo del constructivismo en forma individualizada. En los últimos treinta años, los avances en las TI, específicamente en lenguajes orientados a objetos, en telecomunicaciones, del Internet y de los agentes inteligentes, nos permiten estimar que se pueden desarrollar sistemas educativos que satisfagan ambos lados del debate educativo; por un lado, ser constructivista en el método y obtener resultados cuando menos equivalentes a los de la educación tradicional. Para alcanzar esto, el sistema educativo actual debe utilizar las TI para resolver los aspectos relacionados con la adquisición de la información, y dedicar la interacción entre maestro y estudiantes para facilitar la construcción del conocimiento en los estudiantes, basado, tanto en las experiencias del maestro, como en las propias experiencias de los estudiantes. Pasado y presente de las TI A principio de los años de 1980, la computadora se utilizó como una calculadora o bien como una simple máquina de escribir. Quitando a las escuelas de ingeniería o ciencias, la presencia de la computadora en las oficinas de la facultad, sirvió principalmente como una herramienta de automatización de oficina; cuando más como un substituto al retroproyector. Como tal, se consideró un instrumento fiable pero prescindible. Sin embargo, con la llegada del Internet, la computadora se ha convertido en una verdadera herramienta de información, cuando menos entre los estudiantes que han entrado de lleno a la telaraña de la información denominada WWW, así como en el diálogo diario del "chat" y el "email". Para el caso de la biblioteca de las universidades, sus colecciones se han incrementado inmensamente, con los medios digitales en CD y mas recientemente, por el uso de colecciones digitales disponibles en el Internet. Igualmente, los periódicos más reconocidos son consultados a través de este medio. Una nueva tendencia en la publicación ha surgido bajo el término "impresión por solicitud" (en inglés "printing on demand"). Estos hechos se ven obvios y parece inútil hablar acerca de ellos. Sin embargo, en retrospectiva, es importante recordar que estos mismos hechos fueron rechazados y considerados por muchos como algo novedoso pero sin trascendencia duradera. Por otro lado, con la aceptación de los avances tecnológicos, se genera también un proceso de olvido de su origen y de rechazo a nuevos cambios que derivan del uso de la tecnología en sí. En el caso de las TI, podemos mencionar que, de momento, no son aceptados completamente, el banco en la casa, las reservaciones aéreas por Internet; o bien, encontrar direcciones y mapas, o algo tan elemental como consultar los horarios del cine. Poniendo énfasis en la biblioteca, para 1995, la gente no concebía la importancia que el Internet iba a tener, no sólo para las bibliotecas, sino para la misma comercialización del libro. Hoy en día, a partir del surgimiento de "Amazon.com", la compra en línea ha redefinido el concepto de una librería física. Igualmente, la biblioteca ha tenido que redefinir su función a partir del surgimiento de los buscadores de información como "Yahoo" y "Google". El concepto de un tesauro y una clasificación particular, han cambiado rápidamente en menos de 10 años. Corporaciones líderes como IBM y Xerox promueven fuertemente el concepto de información bajo solicitud, para lo relacionado con la información en los negocios. La hipótesis básica de este artículo es que la información está disponible y en su mayor parte a un costo reducido. Más aún, con la tecnología de agentes de software, la adquisición de la información ha empezado a ser una tarea para la computadora, siempre con un apoyo limitado de un usuario humano. Por lo anterior, esta fase en la investigación debe ser redefinida. Regresando al constructivismo, recordemos que éste se preocupa por la construcción del conocimiento, sin embargo el término conocimiento elude una definición claramente aceptada por todos , esto sucede normalmente con conceptos generales y apreciados, como la inteligencia, la verdad y la información. Por lo anterior, para los fines de este artículo, se plantea una distinción sencilla entre información y conocimiento. Por un lado, la información debe estar basada en hechos verdaderos, probados con anterioridad; o bien, en postulados iniciales en la definición de una teoría. En fecha reciente, L. Floridi [6] sugiere, que no existe otra clase de información mas allá de la que contingentemente es verdad; así, el equívoco o el engaño no son considerados como información. El conocimiento, por otro lado, está basado en creencias justificadas en la búsqueda de ser probadas para llegar a ser información verdadera; definido como tal, el conocimiento implica un juicio justo sobre diversas opciones, esto es, una toma de decisión basada en la experiencia. Así, toda vez que exista la información correspondiente y se encuentre disponible, consideramos labor de conocimiento a la difícil tarea de escoger de entre la información, la mejor opción. Adquirir la información y almacenarla, pueden ser delegadas a máquinas, mientras que la construcción del conocimiento es un proceso vivencial y personal, que se da en las mentes de los estudiantes, con el apoyo de sus maestros. Sucintamente, ésta es nuestra propuesta educativa, enfatizar el conocimiento y no la información. La siguiente tabla contrasta estos dos conceptos: Información < ===================== > Conocimiento 1. Disponible bajo solicitud < ========= > Difícil de encontrar
2. Económica < ==================== > Dispuesto a pagar por él
3. Sin compromiso < ================ > Altamente comprometido
7. Verdad probada < ====== > Producto de la experiencia, sujeto a validación
Considerando estas diferencias, deseamos enfatizar que la educación futura debe
enfocarse a los procesos de construcción del conocimiento y no tanto a la adquisición de la información. En la educación tradicional, un tiempo considerable de la clase se pierde proporcionando información a los estudiantes, usando medios diversos, como el dictado, el pizarrón y las notas del curso. Al fin de la clase y a veces, en los pocos minutos restantes, el maestro transmite sus experiencias a los estudiantes. Sería mejor que no se perdiera tanto tiempo proporcionando información, dejando que los alumnos accedan al Internet con tan solo algunas ligas bien seleccionadas por el profesor con anterioridad, y disponibles en su página; así, con la ayuda de la máquina, pueden reunir la información. Con esto permitir que más tiempo sea dedicado a la construcción del conocimiento. Aunque esto suene sencillo, recomendable e incluso obvio, amerita una largar reflexión, ya que no resulta fácil cambiar el énfasis tradicional de la diseminación de la información. Enfatizando los cambios que consideramos se tendrán que producir en el futuro mediato, presentamos una segunda tabla de contrastes sobre la educación del siglo XX y la del siglo XXI. Para ello presentamos una ampliación a los conceptos vertidos por Dolence y Norris [7]:
Siglo XX < ============================ > Siglo XXI
1. Tamaño tradicional del salón de clase <==>Acceso a través de un aula virtual
2. Evaluación tradicional < ==================== > Certificación
3. Programas estáticos < ====================== > Currícula flexible
4. Programas a 5 años < ====================== > Aprendizaje continuo
5. Sujeto a horario < ======================== > Mentoraje personalizado
6. Ranqueo Nacional < == > Atención de necesidades especificas individuales
Las TI como apoyo en la Educación
"Me lo platicas, seguro lo olvidaré. Me lo muestras, quizás lo recuerde. Me permites que lo haga, lo entenderé" Proverbio chino En la medida que el Internet se vuelva más imprescindible y forme parte de nuestra vida diaria, nuestros estudiantes serán capaces de tener a su alcance los videos de sus cursos, desde cualquier lugar y en cualquier momento. Con una adecuada motivación, no habrá limitante alguna para que en pocos minutos se acceda a cualquier conferencia sobre un tema en cuestión. De aquí que el papel del mentor será de gran importancia. Además, para corroborar que han aprendido, tendrán que demostrar sus habilidades y su conocimiento, y no solamente manejar la información de un cierto tema. La interacción de estudiantes con sus maestros será importante en la medida que enriquezca sus experiencias, por lo que la calidad de la actividad de mentoría será fundamental. Una vez más, para algunos educadores, estas ideas pueden sonar como una moda pasajera, aunque para nosotros, este es el futuro de la educación. Como último punto, presentamos una tercera tabla de contrastes en la educación, apoyada por las TI. En este caso comparamos las necesidades en la era industrial versus las necesidades en la era de la información:
Era Industrial < ==================== > Era de la Información
1. Se asume la existencia de aulas < == > Se asume la existencia de conectividad 2. Salones y bibliotecas < ====== > Espacios virtuales distribuidos en la red 3. Mono agente educativo < =============== > Agentes educativos múltiples 4. Lab y trabajo de campo < == > Labs virtuales con verificación en el campo 5. Aprendizaje en sillas < =================== > Hacer para Aprender 6. Basado en el pizarrón < ============= > Construcción del conocimiento 7. Información basada en casos < =========== > Información bajo solicitud 8. Adquisición de información < ============= > Selección de Información 9. Estudia luego trabaja < ======== > Fusión entre aprendizaje y trabajo Mientras que en la era industrial la infraestructura física resultaba ser un activo necesario para la educación, en la era de la información ambas, la planta física y la interconectivad total, son activos necesarios. La conectividad a alta velocidad está asociada también al concepto de gratificación instantánea del mundo de hoy, como lo encontramos en otras tecnologías, entre ellas, la televisión y la radio, donde la sociedad busca información actual bajo el esquema de solicitud. A querer o no, nuestros estudiantes viven un mundo en donde son motivados en términos de estímulos rápidos. Es entonces fundamental entender que el mentor a través de la conversación, más que la comunicación, deberá motivar a sus estudiantes a concentrarse en un tema y experimentar algo nuevo para construir su propio conocimiento. Las aulas de clase como tal disminuirán en tamaño, ya que los estudiantes quizás estén más dispuestos a asistir a conferencias abiertas que a la rutina de copiar un pizarrón o escuchar un dictado. El tiempo de la clase se reducirá y será valioso en la medida de las preguntas del estudiante, del conocimiento transmitido por el instructor y de la conversación generada. Cobra sentido entonces, una mesa donde tomar el café como sitio de reunión, y no un salón con sillas tradicionales con paletas para anotar; igualmente, el pizarrón deberá ser usado para la anotación espontánea, ya que las notas como tal estarán disponibles desde el Internet. La existencia de la información será el común denominador de los años por venir, sin embargo esto no implica que la información sea útil, a menos que los estudiantes sepan seleccionarla y aplicarla. Lo que es claro es que no habrá ninguna necesidad para proporcionar la información por otros medios distintos a las TI. Nuestra responsabilidad como educadores será la de proporcionar, junto con esa información, el consejo justo que sirva a nuestros estudiantes a construir su propio conocimiento y su concepción de la realidad. Para terminar, la evaluación actual del aprendizaje basado en la memorización quedara atrás y su lugar será sustituido por una labor más difícil, ya que evaluar el conocimiento es más complejo y polémico. Hoy en día ha surgido la tendencia del uso de exámenes de certificación, los cuales buscan determinar la competencia, la aptitud, la pericia y el juicio del estudiante, antes que su capacidad de memorizar. Referencias [1] Ernst von Glasersfeld Radical Constructivism: A Way of Knowing and Learning Falmer Press, London 1995 [2] Roger Shanck "Are We Going to Get Smarter? " In Brockman J.(ed) The Next Fifty Years. Vintage Books USA 2002 [3] Idit Harel & Seymour Papert Constructionism Ablex Publishing, New Jersey, USA 1993 [4] Thomas L. Magliozzi The New Theory of Learning available at http://cartalk.cars.com/About/Rant/r-rlast15.html [5] Robert M. Pirsig Zen and the Art of Motorcycle Maintenance: An Inquiry into Values, Bantam Books: NY 1977 [6] L. Floridi "Is Information Meaningful Data?" In Philosophy and Phenomenological Research to be published 2003 [7] Michael G. Dolence and Donald M. Norris Transforming Higher Education: A Vision for Learning in the 21st Century, SCUP, USA 1995 [8] Vincent Kierna "Technology will reshape Research Universities Dramatically" in The Chronicle of Higher Education Nov 8, 2002