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25 15 Enero 2010
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ace 11 años una niña de dos años tras salto de esta criatura fue efímera, pero no así las
saltar en la zona sensoriomotriz de la casas que construía, cada vez más firmes, equi-
sala me cogió de la mano y me solicitó padas, estables, duraderas y evolucionadas. Im-
“una casita”. Nos alejamos de los demás niños presionantes es la palabra.
y al otro lado de la sala le hice una casita con
prismas de espuma. Se recostó sobre la fila de Aquel regalo de la vida se quedó en pause es-
prismas central, apoyada contra la pared, mien- perando su momento, y ahora tras estudiar el
tras le construía las dos paredes laterales un salto, le ha llegado su turno. Al ponernos manos
Sobre hoyos, camitas y casitas Elena Herrán y Juan Ignacio Martínez de Moretín
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a la obra también recibimos otro regalo, la refe- sido muy grande y muy movido. De 24 criaturas
rencia de Jorge Oteiza, con la que arranca esta dos no construyen en absoluto. Una -niña, en
reflexión. El vacío y la ocupación del espacio concreto- se dedica a saltar hasta la extenua-
son dos de las grandes preocupaciones de este ción y otra –niño- se dedica fundamentalmente
genial escultor vasco del siglo XX. Nada más le- a relacionarse muy fusionalmente con una de
jos de nuestra intención explicar su obra o sus sus educadoras que participa en las sesiones.
preocupaciones. Humildemente rescatamos un Ambos presentan una hipotonía acusada y la
recuerdo de su infancia que más allá de conver- actividad asociada es opuesta: mientras una
tirse en una de sus preocupaciones artística y descubre el placer del movimiento asociada al
profesional, parece común o compartido con la salto, el otro necesita al adulto para equilibrarse
infancia humana. (Wallon, 1985).
Hemos vuelto a la sala de psicomotricidad per- Nueve criaturas obtienen resultados en todos los
trechados con dos cámaras de vídeo digital para macrocriterios –trozos grandes de la actividad
grabar toda la actividad de construcción de la que observar con significado compartido entre
zona simbólica de la sala en 2-3 años y anali- sus elementos y diferenciado del resto. En con-
zarla sistemáticamente de acuerdo a la meto- creto proponemos tres: preparación, ejecución
dología observacional y hemos encontrado re- y finalización-, lo que indica que son significa-
sultados muy interesantes. El más interesante y tivamente proactivas en la construcción: cons-
primero de todos es que, después de un riguro- truyen mucho y despliegan muchos niveles en
sísimo recorrido metodológico, hemos evaluado cada criterio -grupos de conductas similares,
la actividad de construcción a los 2 años. No que se ordenan dentro de un macrocriterio-.
la describimos, no la interpretamos, ni la con- Un participante presenta has-
tamos, ni tan siquiera la justificamos (Anguera, ta cuatro modalidades en un
2003). Tampoco encontramos nada espectacu- mismo criterio, lo que además
lar. Pero lo fundamental es que explicamos al- de su proactividad, informa
gunas características de dicha actividad, porque de flexibilidad y adaptabilidad
los resultados obtenidos nos lo permiten. a las circunstancias. En con-
creto, es la criatura que más
En esta primera aproximación, no hemos en- construye y que hemos estudiado aparte. Deja-
contrado patrones de conducta constructiva, mos sus resultados para otra ocasión.
pero sí pautas estables en los análisis de todo
el grupo que hemos realizado. La razón de lo
primero tiene que ver con que la muestra se- Criaturas normalmente poco proactivas en cons-
leccionada ha sido el 30% del total, el grupo ha trucción y búsqueda del espacio propio, realizan
Sobre hoyos, camitas y casitas Elena Herrán y Juan Ignacio Martínez de Moretín
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Sobre hoyos, camitas y casitas Elena Herrán y Juan Ignacio Martínez de Moretín
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Ahora nos ponemos con el análisis de la cons- gico y educación, I. Psicología Evolutiva (pp.113-
trucción del segundo año, y si encontramos de 130). Madrid: Alianza.
qué necesita protegerse la criatura humana ya · Rivière, A. & Sotillo, M. (2003). Comunicación,
os lo contaremos. suspensión y semiosis humana: los orígenes de
la práctica y comprensión interpersonales. En
M. Belinchón, A. Rosa, M. Sotillo, I. Marichalar
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Sobre hoyos, camitas y casitas Elena Herrán y Juan Ignacio Martínez de Moretín