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2.

Postulados del Electromagnetismo


1. Breve reseña histórica: Fenómenos eléctricos y za sobre distribuciones. Transformación galileana de los
magnéticos. Importancia del Electromagnetismo. La des- campos.
cripción mediante campos.
6. Forma integral de las Ecuaciones de Maxwell: Ley
2. La carga eléctrica: Naturaleza. Propiedades. Distri- de Gauss. Ley de inexistencia de monopolos. Ley de Fara-
buciones de carga. Densidades superficiales y lineales. day. Ley de Ampère-Maxwell.
3. Corriente eléctrica: Concepto de intensidad. Con- 7. Discontinuidades de los campos: Discontinuidad del
cepto de densidad de corriente. Corrientes superficiales y campo eléctrico al atravesar una distribución superficial de
filiformes. Ley de conservación de la carga. carga. Discontinuidad del campo magnético al atravesar
una distribución superficial de corriente. Balance de carga
4. Ecuaciones de Maxwell en el vacı́o: Campos
en una superficie.
Eléctrico y Magnético. Formulación local. Compatibilidad
de las ecuaciones. 8. Conservación de la energı́a: Trabajo de las fuerzas
electromagnéticas. Teorema de Poynting. Energı́as eléctrica
5. Fuerza de Lorentz: Fuerza general sobre cargas. Fuer-
y magnética. Vector de Poynting.

2.1 Breve reseña histórica donde intervienen las dos cargas q y q  , la distancia entre
ambas y una constante universal k, para dar la fuerza me-
• Fenómenos eléctricos y magnéticos dida F . Comprobó que dicha fuerza es atractiva o repulsiva
dependiendo del tipo de electrificación de las esferas, y que
Las primeras noticias de lo que hoy conocemos como
su dirección era según la recta que las unı́a.
fenómenos electromagnéticos provienen del mundo griego.
Hacia el año 600 a.C. los filósofos helenos habı́an ya ob- La invención de la pila eléctrica por Volta (1800), permi-
servado que al frotar trozos de ámbar estos adquirı́an la tió generar corrientes eléctricas permanentes, lo cual llevo
capacidad de atraer pequeños fragmentos de papiro y paja. al descubrimiento de nuevos fenómenos. En particular, en
(La palabra electrón proviene de la voz griega para ámbar) 1820 Oersted descubrió la primera relación experimental en-
Asimismo, observaron que ciertas piedras provenientes de tre electricidad y magnetismo, al observar que una corrien-
la isla de Magnesia (la magnetita) eran capaces de atraer te eléctrica era capaz de desviar una aguja imantada (una
trozos de hierro. brújula). En 1831, el fı́sico inglés Michael Faraday realizó el
descubrimiento inverso, un imán en movimiento era capaz
Sin embargo, estos fenómenos no comenzaron a estudiar-
de producir una corriente eléctrica transitoria. Las ideas de
se intensivamente hasta el principio de la edad moderna
Faraday sobre electricidad y magnetismo fueron ampliadas
(aunque hay que señalar el descubrimiento de la brújula,
y formuladas matemáticamente por James Clerk Maxwell,
fenómeno puramente magnético, de importancia capital en
quién en 1872 presentó sus famosas ecuaciones, donde se
la historia de la Humanidad). En su obra De magnete
muestra que la electricidad y el magnetismo, junto con los
(1600), William Gilbert establece por primera vez la dis-
fenómenos de la óptica, obedecen un conjunto único de le-
tinción entre los dos fenómenos, electricidad y magnetismo.
yes. A partir de este momento, todos estos fenómenos se
A partir de este momento las investigaciones se intensifican,
engloban bajo el término electromagnetismo.
pero es sobre todo a partir de la segunda mitad del siglo
XVII cuando se empiezan a establecer las bases de lo que • Importancia del electromagnetismo
hoy denominamos electromagnetismo clásico.
En la actualidad se considera que sólo existen cuatro in-
Hay que destacar los trabajos experimentales de Caven- teracciones fundamentales en la Naturaleza: gravitatoria,
dish y Coulomb, que establecieron la ley de atracción entre electromagnética, fuerza fuerte y fuerza débil. Las dos
cargas eléctricas. En particular las experiencias de Coulomb últimas sólo se dejan sentir dentro de los núcleos atómicos
consistieron en la medida de la fuerza, mediante una balan- (distancias del orden de 10−15 m) y son responsables de la
za de torsión, que sufre una esferilla conductora cargada cohesión de los núcleos (la fuerza fuerte) y de los fenómenos
cuando se le acerca otra esferilla también cargada. El resul- radioactivos (la fuerza débil).
tado de sus observaciones se resumieron en la fórmula bien
La fuerza gravitatoria y la electromagnética son fuerzas
conocida análoga a la ley de atracción de masas de Newton:
de largo alcance, es decir, sus efectos se dejan sentir entre
qq  cuerpos separados por distancias muy grandes. La primera
F =k 2,
r

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es únicamente atractiva, mientras que la segunda puede ser recer un artificio destinado a facilitar los cálculos, y ası́ se
atractiva o repulsiva. De las dos, la más intensa es la elec- trató durante algún tiempo por gran parte de la comunidad
tromagnética. Ası́, entre dos electrones en reposo la fuerza cientı́fica. Sin embargo, posteriormente se comprendió que
eléctrica es aproximadamente 1036 veces más intensa que la el campo electromagnético posee realidad fı́sica en sı́ mis-
fuerza gravitatoria. La razón de que la interacción gravita- mo, entendiéndose como tal que es capaz de almacenar y
toria sea dominante a escala astronómica es la casi perfecta transportar energı́a y momento lineal y cinético.
neutralidad de los cuerpos macroscópicos.
En nuestra vida corriente la interacción electromagnética
2.2 La carga eléctrica
es de largo la más importante. De hecho, puede decirse
que salvo los fenómenos relacionados con el peso, todo lo
La carga eléctrica es una cualidad de la materia responsable
que nos rodea es electromagnetismo. La estructura de la
de la interacción electromagnética entre distintas partı́culas.
materia esta formada por partı́culas (protones, electrones,
neutrones) que interaccionan por medio de la electricidad y La carga eléctrica posee las siguientes propiedades:
el magnetismo, produciendo distintos estados de agregación
1. La carga es dual: existen dos tipos que se denominan
(sólidos, lı́quidos, gases). En última instancia, la impene-
positivo y negativo, discernible por el comportamiento que
trabilidad de los sólidos, poder pisar suelo firme se debe a
partı́culas cargadas con cada tipo muestran en su interac-
esta interacción. Todos los procesos quı́micos, desde el mo-
ción con otras dadas, y por la propiedad de neutralizar en
tor de combustión hasta los procesos biológicos se basan en
cierta medida su efecto cuando se combinan.
el electromagnetismo. Y toda la energı́a que recibimos del
Sol, gracias a la cual existe la vida sobre la Tierra, llega en 2. La carga está cuantizada: del conocimiento actual de
forma de ondas electromagnéticas. las partı́culas elementales se admite que existe una carga
mı́nima, que es la del electrón para el tipo negativo y la
Hablando ya en un nivel ligado a nuestra propia civili-
del protón para el positivo, ambas iguales en valor absolu-
zación, podemos argumentar que todo lo relativo a teleco-
to. Cualquier estado de agregación de la materia posee una
municaciones, radio y televisión se apoya en la existencia de
carga múltiplo de dicho valor.
ondas electromagnéticas. Las instalaciones eléctricas de una
casa o de una fábrica, o los circuitos integrados que permi- 3. La carga se conserva localmente: nunca se ha obser-
ten la construcción de ordenadores se basan en el fenómeno vado un fenómeno del cual resulte la creación neta de carga
de la corriente eléctrica. El tipo de energı́a más utilizado en en un punto del espacio. Siempre que aparece (o se des-
la vida cotidiana es la eléctrica. truye) una carga en un punto, aparece (o se destruye) una
carga opuesta en el mismo punto.
• Descripción mediante campos
4. La carga es un invariante relativista: su medida da
Los fenómenos electromagnéticos se manifiestan como
el mismo resultado en cualquier sistema de referencia, sea
fuerzas que actúan entre partı́culas o cuerpos materiales
cual sea su velocidad.
(cargas eléctricas, imanes, corrientes, etc). En principio se
intentó explicar estas interacciones basándose en el princi- La carga se simboliza habitualmente por la letra q. Su
pio de acción a distancia: una partı́cula ejerce una fuerza medida y la adopción de la unidad debe posponerse hasta
sobre otra situada a una cierta distancia, y la información que se describan la interacción electromagnética y las condi-
se transmite instantáneamente. Ası́ es como Newton trata ciones experimentales adecuadas para ello. Baste adelantar
la interacción gravitatoria en los Principia (1687). que la unidad en el Sistema Internacional es el Coulombio
(C) y que la carga del electrón es qe = −1.6 · 10−19 C.
Sin embargo, esta visión plantea algunos problemas con-
ceptuales. En la vida real la información sobre un aconte- Dado que la materia es discreta y la carga es una cuali-
cimiento tarda un cierto tiempo en llegar desde el lugar en dad suya, la distribución de la carga en el universo es
que se produce (ya sean los cotilleos en un bloque de ve- discreta. Sin embargo en la mayorı́a de las situaciones que
cinos o la publicación de las notas de un examen). Este y nos interesan el número de partı́culas constituyentes es tan
otros problemas indujeron a Michael Faraday a introducir grande que es conveniente adoptar la hipótesis de medio
la idea de que la interacción entre dos cuerpos cargados o continuo. Según ésta, en cada punto r del espacio pode-
magnetizados no ocurre directamente, sino que se produce mos definir una densidad volumétrica de carga mediante
a través de un agente mediador, que es el campo electro- la expresión
N
magnético. Ası́, al colocar una carga eléctrica en un punto, 1 
esta crea una perturbación en el medio que la rodea (que ρ(
r , t) = qi ,
∆τ i=1
hoy llamamos campo eléctrico). Si otra partı́cula cargada
se coloca en ese espacio, el campo en ese punto ejerce una siendo N el número de partı́culas cargadas encerradas en
fuerza sobre ella. Si se modifica el valor de la primera car- un volumen ∆τ que contiene al punto r. El volumen ele-
ga, esta modificación se traslada al campo, que a su vez la gido debe ser pequeño en relación con las dimensiones ca-
traslada a la segunda partı́cula, variando la fuerza ejercida racterı́sticas del sistema considerado, pero suficientemente
sobre ella. grande para que las fluctuaciones en el valor de N sean pe-
En un principio la introducción de este campo puede pa- queñas en comparación con N . En la mayorı́a de las situa-
ciones que estudiaremos es posible encontrar un volumen ∆τ

18
que cumpla ambas condiciones. Por tanto podremos consi-
derar la carga asignada a un volumen elemental dτ en el Ejemplo:
punto r por dq = ρ(r)dτ y aplicar el formalismo del cálculo Una esfera de radio R posee una distribución volumétrica de carga con
simetrı́a radial, descrita por la función
diferencial e integral desarrollado en el tema 1.

0 si 0 < r < R − d
Si tenemos una sola especie cargada, con carga q y número ρ(r) =
ρ0 si R − d < r < R.
de partı́culas por unidad de volumen igual a n(r), la densi-
dad resultará ser ρ(r) = qn(r). Si son s especies con cargas Se trata pues de una corteza uniformemente cargada de espesor d ad-
qi y densidades ni tendremos en general yacente a la superficie de la esfera. Si el espesor d es pequeño en
comparación con R puede ser útil definir una densidad superficial de
s
 carga que sustituya a la distribución en volumen. ¿Qué relación existe
ρ(r, t) = qi ni (r, t). con la densidad volumétrica?
i=1 Para responder a esta cuestión debemos asignar a cada elemento de
superficie dS una carga elemental dq. La densidad superficial será en-
tonces ρS = dq/dS. Si la superficie dS subtiende un ángulo sólido dΩ
desde el centro de la esfera, podemos escribir dS = R2 dΩ y dq queda
Ejemplo: definida como la carga asociada a dicho ángulo sólido:
Teniendo en cuenta que la densidad másica del cobre es ρm =
8.95 g/cm3 , que cada átomo posee un electrón de conducción y que  
ρ0  3 
R
el peso atómico del cobre es Pa = 63.55 g/mol, hállese el número de dq = ρ0 r 2 dr senθdθdφ = R − (R − d)3 dΩ.
portadores de carga libres (electrones) para 1 mm3 de este material. R−d dΩ(θ,φ)
3

Si un mol posee NA = 6.022 · 1023


átomos de cobre, que ocupan un
volumen τmol , la densidad de portadores (pasando todo a unidades
del sistema internacional) es
NA NA ρm NA 6.022 · 1023 · 8950 espesor r(r)
n= = = = = 8.48·1028 m−3 . cargado
63.55 · 10−3
τmol Pa /ρm Pa
dS
donde hemos usado que la masa de cobre correspondiente a un mol r0
es Pa y por tanto ρm = Pa /τmol . En 1 mm3 de cobre se incluyen
entonces R-d dW
N = nτ = 8.48 · 1028 · 10−9 = 8.48 · 1019 electrones.
R
Si el volumen considerado es de una micra cúbica los electrones de R-d R r
conducción incluidos son todavı́a del orden de 1011 , un número sufi-
cientemente elevado para justificar una aproximación de medio conti-
nuo.

Extrayendo un factor R3 del corchete y teniendo en cuenta la rela-


En otras muchas ocasiones tendremos que tratar con dis- ción entre dS y dΩ escribimos

ρ0 R3   ρ0 R  
tribuciones superficiales de carga (como en el caso de con-
ductores en equilibrio electrostático, o el bombardeo de ma- dq = 1 − (1 − d/R)3 dΩ = 1 − (1 − d/R)3 dS,
3 3
teriales aislantes con partı́culas cargadas que quedan depo-
sitadas en su superficie). Entonces se define análogamente y por tanto
una densidad superficial de carga como dq ρ0 R3  3
 ρ0 R  3

= 1 − (1 − d/R) = 1 − (1 − d/R) .
N dS 3 3
1 
ρS (r ) = qi , Si, como se nos dice, d << R podemos simplificar el resultado des-
∆S i=1 arrollando hasta el segundo término el paréntesis: 1 − (1 − d/R)3 
1 − [1 − 3(d/R)] = 3d/R. Sustituyendo obtenemos
con N las cargas encerradas en una porción de área ∆S,
de una capa muy delgada definida en un punto r de la su- ρS = ρ0 d.
perficie. La carga definida en una superficie elemental es
Es interesante notar que para que ρS tenga un valor apreciable des-
dq = ρS (r)dS. de el punto de vista macroscópico ρ0 debe ser muy grande, dado que
También es útil, aunque de menor interés conceptual, la d, el espesor de la distribución, se dice que es muy pequeño. Si por
ejemplo en una esfera metálica de 1 cm de radio la carga se distribu-
definición de una densidad lineal de carga λ(r), de tal forma ye en una capa de 10−8 m y la carga total es de 10−7 C, tendremos
que la carga asociada a un elemento dl de una lı́nea cargada ρS = q/(4πR2 ) ∼ 10−4 C/m2 , y ρ0 resulta ρ0 = ρS /d ∼ 104 C/m3 .
es dq = λ(r )dl. Podemos extrapolar este resultado a situaciones en las que ya no
hay simetrı́a radial. En general si tenemos una densidad volumétrica
El concepto de densidad volumétrica de carga permite re-
ρ(
r ) restringida a una capa de espesor e(
rS ) adyacente a un punto 
rS
presentar distribuciones discretas usando la función δ de de una superficie S, el elemento de carga asociado a un dS definido en
Dirac. Un conjunto de n cargas qi localizadas en los puntos un punto de la superficie es
ri se describe con la función
dq = ρdτ = ρedS = ρS dS → ρS = ρe.
n

ρ(r) = qi δ(r − ri ).
i=1

19
2.3 Corriente eléctrica corriente que se simboliza con el vector S . Esta magni-
tud es útil cuando existe una región del espacio de espe-
Se define intensidad de corriente eléctrica que atravie- sor e pequeño comparado las dimensiones tı́picas de nuestro
sa una superficie S dada como la carga total que pasa por sistema, en la cual está definida una corriente medible ma-
unidad de tiempo. Teniendo en cuenta la naturaleza discre- croscópicamente. En tal caso tiene sentido interesarse por
ta de los portadores de carga, para calcular la intensidad la intensidad de corriente que fluye a través de una lı́nea γ
habrı́a que hacer un recuento estadı́stico de portadores que contenida en la superficie S que soporta la corriente, pues-
en un intervalo ∆t atraviesan la superficie en uno y otro to que dicha lı́nea y el espesor e constituyen una delgada
sentido, multiplicar por la carga de cada uno y dividir por sección a través de la cual pasa la carga (ver figura).
el intervalo temporal elegido.

Dt q1 S
v1
e g dl
DS
jS dl

vDt

El caso más simple e ideal es el de un sólo tipo de porta-


dor con carga q1 , con número de partı́culas por unidad de La intensidad se relaciona con la densidad superficial de
volumen n1 , todas moviéndose con velocidad v1 ; la carga corriente mediante la fórmula

que pasarı́a a través de una superficie elemental ∆S y la 
intensidad serı́an (ver figura) I = S · dl⊥ ,
γ
∆q = q1 n1 (v1 ∆t) · ∆S
 ⇒ ∆I = q1 n1v1 · ∆S,

siendo dl⊥ un vector de módulo igual al segmento dl defini-
puesto que sólo debemos considerar las cargas encerradas
do en γ y dirección contenida en la superficie de corriente y
en un volumen cilı́ndrico contiguo a la superficie, con direc-
perpendicular al segmento. Nótese que edl⊥ forma un ele-
triz dada por el segmento v1 ∆t. Si en una situación general
mento de superficie adecuado para describir la delgada sec-
tenemos s especies distintas, cada una con una carga qi y
ción por la que fluye carga. Por tanto si queremos relacionar
consideramos la velocidad media vi de cada especie, podre-
mos obtener la intensidad mediante la fórmula la distribución superficial con una densidad volumétrica de
s corriente llegamos a la conclusión de que existe una  para la

∆I = qi nivi · ∆S.
 cual S = e. Si el espesor es muy pequeño, la corriente vo-
i=1 lumétrica debe ser muy grande para que el producto dé una
cantidad apreciable desde el punto de vista macroscópico, y
Observamos que podemos definir en cada punto del espa-
por ello se la considera como singularidad. Esta discusión es
cio un vector que denominaremos densidad de corriente,
en todo análoga a la que se hizo en el ejemplo del apartado
dado por
2.2 para relacionar las densidades de carga superficial y de
 s volumen.
 = qi nivi .
i=1 Ejercicio:
Un cilindro de radio R posee una distribución volumétrica de corriente
uφ para r − d < r < R, siendo d < R,
descrita por la función  = 0 
La intensidad que atraviesa una superficie S queda final- y nula para cualquier otro valor de la coordenada radial. ¿Qué va-
mente expresada como lor tendrı́a una corriente superficial que sustituyera a la distribución
volumétrica? Analı́cese el caso d << R.

I=  · dS.

S

La unidad de intensidad de corriente en el S.I. es el


Finalmente se introduce las distribuciones filiformes
amperio, simbolizado por ”A”, cuya definición operativa
de corriente cuando por una sección muy pequeña pasa
se verá en el próximo capı́tulo, y que se corresponde con el
una intensidad apreciable macroscópicamente. Es el caso
paso a través de una superficie dada de un coulombio en un
habitual de hilos metálicos usados en la confección de cir-
segundo.
cuitos eléctricos. Para ellos la propia intensidad I, con un
Al igual que con las densidades de carga, en la práctica sentido determinado por su signo, basta para caracterizar
se utiliza también el concepto de densidad superficial de la distribución de corriente.

20
∂ρ 
Ejemplo: + ∇ ·  = 0,
∂t
Un hilo de cobre de 1 mm2 de sección puede soportar sin fundirse una
corriente de 18 A de intensidad. Hállese la velocidad media de los
electrones de conducción para dicha intensidad. que es la ecuación de continuidad y representa la formu-
Si se admite que la corriente se distribuye uniformemente en toda la lación matemática de la conservación local de la carga neta.
sección del hilo podemos calcular la densidad de corriente de manera Si las distribuciones no varı́an con el tiempo se verificará
muy sencilla: ∇
 ·  = 0.
 
I=  · dS
 =j dS = jS → j = I/S. Ejemplo:
En una región del espacio con forma esférica se tiene una densidad de
Por otra parte sólo hay un tipo de partı́cula cargada con velocidad carga uniforme que varı́a en el tiempo, ρ0 (t). Esto implica necesaria-
no nula, que es el electrón de conducción cedido por cada átomo de mente un flujo de carga en cada punto de dicha región. Admitiendo
cobre. El ion positivo restante está en reposo, formando parte de la que el flujo tiene lugar en dirección radial, hállese la densidad de co-
red propia del enlace metálico, y no interviene en la conducción. Se rriente en cada punto y la intensidad que atraviesa los lı́mites de la
tiene pues que j = qnv, siendo q = −1.9 · 10−19 C, n el número de región considerada.
portadores por unidad de volumen y v la velocidad media que se nos
De la ecuación de continuidad en forma diferencial obtenemos
pide.
 ·  = − ∂ρ = − dρ0 .

El valor de n fue calculado en un ejemplo anterior (n = 8.48 · ∂t dt
1028 m−3 ). La velocidad media de los electrones de conducción en
Si la densidad de corriente es radial se puede expresar como  =
el hilo es
j(r, t)
ur . Su divergencia es
j I 18 2
v=
qn
=
qnS
=
1.6 · 10−19 · 8.48 · 1027 · 10−6
(m/s) = 1.33 mm/s.
∇ ·  = 1 ∂(r j) .
r 2 ∂r
El resultado puede sorprender si por ejemplo pensamos en el tiempo Sustituyendo en la expresión anterior se obtiene una ecuación en la
que transcurre entre accionar un interruptor y encenderse una bombi- variable r para la densidad pedida. Multiplicando toda la ecuación
lla; tiempo muy inferior al que necesitarı́a un electrón de la corriente por r 2 e integrando se llega a
establecida en recorrer algunos metros de cable. La resolución de esta  r
2 dρ0 dρ0 r 3 dρ0 r
paradoja es simple si tenemos en cuenta que al establecer la corrien- r j(r, t) = − r 2 dr = − ⇒ j(r, t) = − .
te ponemos casi instantáneamente en movimiento a todos los elec- dt 0
dt 3 dt 3
trones de conducción del circuito a la vez. Lo que se propaga muy
rápidamente es la información de que en un punto del circuito los La segunda cuestión se obtiene, bien integrando esta densidad de
electrones están en movimiento. Esta ”información” no es otra cosa corriente a través de la superficie esférica que limita la región don-
que el campo electromagnético, que introduciremos en los siguientes de está definida la densidad de carga, bien aplicando la ecuación de
apartados. continuidad en forma integral. Según lo último,
 
Otro comentario importante que podemos hacer aprovechando es- dq d 4 dρ0
te ejemplo es que la intensidad se suele relacionar con la carga que I =− =− ρ0 (t)dV = − πR3 .
dt dt esf
3 dt
atraviesa una sección del hilo escribiendo I = dq/dt. Debemos tener
cuidado en la interpretación de esta expresión, puesto que el diferencial Puede comprobarse que I =  · dS
 da el mismo resultado.
S(R)
de carga hace referencia a la carga que está fluyendo en el intervalo
dt, pero no se debe relacionar con una variación de la carga existente
en una porción del hilo. De hecho el hilo es neutro en la mayorı́a de
las aplicaciones (ρ = 0); la carga está en tránsito y no hay carga que
se acumule. Esto se discute de forma general en el siguiente epı́grafe,
dedicado a la ecuación de continuidad.
2.4 Las Ecuaciones de Maxwell

El Electromagnetismo postula que la presencia de cargas en


una región del espacio da lugar en general a la existencia de
• Ecuación de continuidad un campo eléctrico E(  r ) y un campo magnético B(  r)
que satisfacen las siguientes ecuaciones:
La conservación de la carga implica que la variación de
la carga encerrada en un volumen τ en la unidad de tiem-
po es debida exclusivamente a la que abandona dicho volu- ∇  = ρ,
 ·E
men a través de su frontera Sτ . Dado que un flujo positivo 0
(saliente del volumen según nuestro convenio) implica una 
disminución de la carga en el interior, se tendrá ∇  = − ∂B ,
 ×E
∂t

dq ∇
 ·B
 = 0,
− =  · dS,

dt Sτ


∂E
o bien, usando el concepto de densidad y el teorema de la ∇
 ×B
 = µ0  + 0 ,
∂t
divergencia,  
∂ρ
− dτ = ∇  ·  dτ,
τ ∂t τ
donde ρ es la densidad volumétrica de carga,  la densidad
y como el volumen considerado es arbitrario, se debe cum- de corriente y 0 y µ0 son la permitividad y la permea-
plir bilidad del vacı́o respectivamente, es decir, dos constantes

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universales cuyos valores en el Sistema Internacional son suma de los campos producidos por cada conjunto de fuen-
tes. Esto se suele denominar principio de superposición.
0 = 8.85 · 10−12 C2 s2 /(kg · m3 ); Un ejemplo simple: el campo eléctrico que producen dos
cargas puntuales es la suma vectorial en cada punto de los
µ0 = 4π · 10−7 kg · m/C2 . campos producidos por cada carga. Hay que prevenir sin
embargo de que, desgraciadamente, en muchas aplicaciones
Las ecuaciones de Maxwell que acabamos de escribir prácticas la presencia de una fuente modifica la otra, con lo
en forma local permiten determinar de manera unı́voca los que el principio anterior no puede ser aplicado.
campos eléctrico y magnético en todo punto del espacio,
siempre que conozcamos las densidades de carga y de co- Dado que en las ecuaciones de Maxwell aparecen las dis-
rriente. Esto es ası́ puesto que sabemos por el teorema de tribuciones de carga y de corriente, es necesario comprobar
Helmholtz que un campo vectorial puede ser reconstruido que son compatibles con la ecuación de conservación local
a partir de su divergencia y su rotacional, que son los da- de la carga. Si tomamos la divergencia de la cuarta ecuación
tos que nos aportan estas ecuaciones. El problema desde se tiene
el punto de vista matemático no tiene solución inmediata 

∂ 
E
mediante la aplicación de dicho teorema, puesto que en las ∇ · (∇  = µ0 ∇
 × B)  ·  + 0 ∇
 · .
ecuaciones E  yB  aparecen acoplados (uno interviene en las ∂t
fuentes vectoriales del otro). No obstante encontraremos en
el capı́tulo 4 la solución general. El primer miembro se anula, y si en el último término del se-
gundo miembro permutamos las operaciones de derivación
Ejemplo: temporal y divergencia, y utilizamos la primera ecuación,
Las ecuaciones de Maxwell permiten, de manera inversa, obtener las resulta
fuentes (cargas y corrientes) a partir del conocimiento de los campos.
0=∇  ·  + ∂ρ ,
Dadas las expresiones ∂t
 r , t) = E0 cos(ky − ωt)
E( uz , es decir, la ecuación de continuidad está implı́citamente con-
 r , t) = B0 cos(ky − ωt)
B( ux , tenida en las ecuaciones de Maxwell. No hay pues que
con E , B , k y ω constantes, comprobemos que efectivamente pue-
añadirla como un postulado más.
0 0
den ser campos eléctrico y magnético respectivamente y hallemos sus
fuentes.
De la primera ecuación de Maxwell, ∇
 ·E
 = ρ/!0 , obtenemos la den- 2.5 Fuerza de Lorentz
sidad de carga, que en este caso es nula: ρ = !0 ∇
 ·E = ∂Ez /∂z = 0.
Para completar la descripción de la interacción elec-
La tercera ecuación se verifica trivialmente: ∇
 ·B
 = ∂Bx /∂x = 0.
tromagnética es necesario establecer la fuerza sobre las
Para ver si se verifica la segunda ecuación evaluamos cada miembro partı́culas cargadas. Ésta viene dada por la fuerza de Lo-
por separado:
rentz:

 ×E  = ∂Ez u
 x = −E0 k sen(ky − ωt)
ux ,
∂y  + v × B).
F = q(E 

∂B
− = −B0 ω sen(ky − ωt)ux ,
∂t
Si se trata de una distribución volumétrica de cargas y
e igualando obtenemos la condición B0 ω = E0 k que debe cumplir- corrientes debemos sumar las fuerzas ejercidas sobre cada
se entre estos parámetros para que las expresiones propuestas sean
campos electromagnéticos. una de las partı́culas encerradas en un volumen dτ , lo cual,
usando un recuento estadı́stico sobre cada una de las s es-
La cuarta ecuación también debe verificarse, pero esto simplemente
determina el valor que debe tener la densidad de corriente  en cada
pecies, se expresa
punto del espacio: s s
 
1  
 − !0 ∂ B = B0 k dF = +
qi ni dτ E qi ni dτvi × B.

 = ∇×B − !0 E0 ω sen(ky − ωt)
uz .
µ0 ∂t µ0 i=1 i=1

Si los valores de los parámetros son tales que el primer paréntesis es


nulo, la densidad de corriente serı́a a su vez nula en todo el espacio.
Esta es la fuerza ejercida sobre el elemento de volumen con-
En tal caso el ejemplo que estamos manejando corresponderı́a a una siderado. Hemos tenido en cuenta que los campos E  yB
 son
onda electromagnética monocromática plana propagándose en el vacı́o. prácticamente los mismos para todas las partı́culas encerra-
Esto ya se verá en el tema 4. das. Ahora usando los conceptos de densidad volumétrica
de carga y de corriente podemos escribir

Una propiedad fundamental de las ecuaciones de Maxwell dF = (ρE +  × B)dτ.



es que son lineales. Esto implica que si consideramos los
campos producidos por ciertas fuentes (cargas y corrientes)
En el caso de distribuciones superficiales de carga y de
que denominaremos por “1”, y, por otro lado, los campos
corriente la expresión anterior se transforma en
producidos por otras fuentes “2”, entonces el problema con-
junto de encontrar los campos producidos por la combina-
ción de ambos conjuntos de fuentes tiene como solución la  + S × B)dS.
dF = (ρS E 

22
Finalmente, para distribuciones en forma de hilo, la inte- eléctricos y magnéticos conocidos.
gración de la fuerza elemental sobre un volumen dτ = S dl,
siendo S la sección del hilo, se realiza del siguiente modo: Ejemplo:
Descrı́base el movimiento de una partı́cula cargada en una región en la
 +  × B)S
dF = (ρE  + Idl × B,
 dl = λEdl  que existe: (a) un campo eléctrico constante y uniforme; (b)un campo
magnético constante y uniforme.

siendo dl un segmento elemental de la lı́nea de corriente, (a) Supongamos que la partı́cula posee masa m, carga q y velocidad

orientado según el flujo positivo de carga. Nótese que se ha inicial v0 , y que el campo eléctrico establecido E0 no es colineal con
esta velocidad. La ecuación de movimiento es
definido λ = ρS, I = jS, y en el segundo término se ha
d
v
aprovechado que  y dl son colineales. m = qE 0.
dt
Las fórmulas anteriores permiten establecer las unidades Esta ecuación vectorial se integra directamente para dar  v (t) = v0 +
en el S.I. de los campos E y B.
 Para el campo eléctrico la qE 0 t/m. Integrando de nuevo con la condición inicial  r (0) = r0 se lle-
ga a las ecuación horaria  r0 + 
r (t) =   0 t2 /(2m). La trayectoria
v0 t + q E
unidad, que no tiene nombre especı́fico, es el newton divi-
es un movimiento parabólico en el plano que forman E 0 y v0 .
dido por coulombio (N/C), mientras que para el campo
magnético la unidad se denomina tesla (T), y equivale a un (b) Para el caso de un campo magnético uniforme y constante elegi-
newton dividido amperio y por metro. mos un sistema de referencia con el eje Z en la dirección del campo.
La velocidad inicial tendrá en general dos componentes: una paralela
La fuerza de Lorentz es el último postulado necesario pa- aB y otra perpendicular, que denotaremos v y v⊥ respectivamente.
Podemos tratar convenientemente la ecuación de movimiento con esta
ra establecer las bases del Electromagnetismo: las ecuacio-
descomposición:
nes de Maxwell permiten conocer los campos eléctrico y
d  
magnético a partir de sus fuentes (cargas y corrientes) y la m v + 
v⊥ = q( v + v⊥ ) × B.

dt
fuerza de Lorentz nos dice cómo actúan estos campos sobre
En el segundo miembro podemos eliminar el producto de  v por el
la materia1 . Sin embargo en la práctica la situación en ex- campo magnético por ser colineales. La ecuación vectorial resultante
tremadamente compleja, puesto que las partı́culas cargadas tiene a su vez componentes paralelas y perpendiculares al campo:
son a la vez agentes productores de los campos y receptores d
v d
v⊥
de su acción. En muchas ocasiones no podemos caracteri- m = 0; m = qv⊥ × B
dt dt
zar ρ y  antes de conocer los campos que actúan sobre los (es conveniente convencerse de que los vectores que aparecen en la
portadores de carga, y por otra parte es claro que no pode- segunda ecuación son realmente perpendiculares al campo).
mos conocer los campos sin conocer sus fuentes; hablamos La primera de las dos nos dice que en la dirección del campo el
entonces de un problema acoplado. El ejemplo más claro lo movimiento es uniforme, con 
v (t) = 
v0 .
tenemos en un conductor en equilibrio electrostático (que La segunda ecuación gobierna la proyección del movimiento en el
se estudiará en el tema 5): las cargas producen un campo plano XY , perpendicular al campo. Si multiplicamos escalarmente
eléctrico que actúa sobre ellas mismas hasta alcanzar una por v⊥ el segundo miembro será nulo y por tanto
distribución tal que la fuerza total ejercida sobre cada par- d
v⊥
v⊥ ·
m = 0.
te de la distribución sea nula. Otro ejemplo es una antena dt
emisora de radiocomunicación: los electrones se mueven por Pero v⊥ · dv⊥ /dt = d( v⊥ |2 )/dt, por lo cual |
v⊥ · v⊥ )/dt = d(| v⊥ | es
el metal y producen ondas electromagnéticas, pero estas on- constante en el movimiento. También el módulo de la fuerza de Lorentz
es constante: |F  | = q|
v⊥ ||B|sen(π/2)
 = qv⊥0 B. La fuerza es perpen-
das actúan a su vez sobre la propia antena, de manera que dicular a esa componente de la velocidad y constante en módulo. Se
no sabemos a priori cuál es la corriente que la alimenta. trata pues de un movimiento circular uniforme. El radio de la proyec-
ción de la trayectoria en el plano XY , R, se obtiene como es habitual
Por este motivo, la organización de este curso introduc- igualando en módulo la fuerza de Lorentz a la masa por el módulo de
torio tiene dos partes bien diferenciadas. Hasta el tema 4, la aceleración centrı́peta propia de este tipo de movimiento, es decir,
qv⊥ B = mv⊥ 2 /R, con lo cual
inclusive, desarrollamos una teorı́a del Electromagnetismo
desde un punto de vista idealizado, en el que las fuentes R=
mv⊥0
.
son conocidas y llegamos a soluciones de validez general. qB
A partir del tema 5 nos enfrentamos con la materia des- La velocidad angular del movimiento será ω = v⊥0 /R = qB/m, y se
de un punto de vista práctico, tratando de caracterizar su denomina frecuencia de ciclotrón.
comportamiento en cuanto a distribución de fuentes y cam- La combinación de los dos movimientos estudiados (traslación uni-
pos se refiere. Veremos que se consiguen resultados valiosos forme y rotación uniforme en el plano transversal) produce un movi-
miento helicoidal, cuyas ecuaciones horarias se dejan como ejercicio.
pero restringidos a ciertos tipos de materiales de comporta-
miento sencillo (conductores óhmicos, dieléctricos simples,
etc.). Para ello habremos de añadir a los postulados ciertas
leyes empı́ricas o basadas en un tratamiento estadı́stico de • Transformación galileana de los campos
los constituyentes de la materia.
A continuación vemos algunos ejemplos sencillos de mo- Los campos no son iguales medidos en sistemas de refe-
vimiento de partı́culas cargadas en el seno de campos rencia en movimiento relativo. Para encontrar una relación
1 La situación es más complicada en realidad ya que existen partı́culas que, independientemente de si tienen carga o no, poseen un momento

magnético asociado con un momento angular intrı́nseco o espı́n, sobre el cual un campo magnético ejerce una acción no incluida en la fuerza
de Lorentz. No obstante el conjunto de postulados que proponemos es capaz de englobar este tipo de fenómenos si equiparamos el momento
magnético intrı́nseco al momento asociado a espiras de corriente. Estos conceptos, aún no definidos, se introducen en el siguiente tema.

23
entre ellos usaremos el principio de relatividad galilea- Desarrollando el producto vectorial triple y usando la condición de
na, según el cual la fuerza debe ser la misma en cualquier perpendicularidad impuesta se llega a
sistema de referencia inercial. E ×B
va =
 .
Supongamos que en cierta región del espacio existen cam- B2
pos eléctrico y magnético. Consideremos dos sistemas in- En el sistema de referencia que se mueve a esa velocidad no hay campo
erciales, Σ y Σ , el segundo con velocidad v0 respecto del eléctrico y el campo magnético es el mismo que en el sistema labora-
torio. Por tanto el problema se ha reducido al de una partı́cula que se
primero. Una carga de prueba q se mueve con velocidad mueve en un campo magnético uniforme, con velocidad inicial perpen-
v en Σ y con velocidad v  en Σ . Ambas velocidades se dicular al campo. El movimiento, como vimos en el ejemplo anterior,
relacionan mediante es circular, con radio y velocidad angular conocidos, que en este caso
resultan ser
mv⊥0 mE qB
v  = v − v0 . R= = ; ω= .
qB qB 2 m
Las fuerzas medidas en cada referencia son Visto desde el sistema laboratorio el movimiento es la composición
de un movimiento de traslación a velocidad constante va y otro de giro
 + v × B)
F = q(E  a velocidad angular uniforme ω y radio R. La relación entre estas tres
magnitudes son propias de una curva plana especial llamada cicloide,
y   que por cierto también describe el movimiento de un punto de una
F  = q(E
  + v  × B
 ) = q E  + (v − v0 ) × B
 . circunferencia que rueda sin deslizar por una superficie plana.

Hemos distinguido con primas los campos medidos según Σ


(pero no la carga, que es invariante). Igualando F a F  y
z
teniendo en cuenta que el resultado se debe cumplir para
cualquier carga de prueba (q y v arbitrarias) necesariamen-
 =B   y que E =E   − v0 × B
  , o, E
te debemos exigir que B
equivalentemente,
x y
 = E
E  + v0 × B,
   = B,
B  B

que son conocidas como la ley de transformación de los


campos. En su deducción está implı́cita la hipótesis de que
la velocidad v puede ser arbitrariamente grande. Si se im-
pone que la máxima velocidad alcanzable es la de la luz c 2.6 Forma integral de las ecuaciones de
(relatividad einsteniana) la ley de transformación se modifi-
ca, aunque la diferencia entre ambas sólo es apreciable para
Maxwell
velocidades relativas comparables con c.
Hemos presentado ya las ecuaciones de Maxwell en forma
diferencial (puesto que intervienen operadores diferenciales
Ejemplo:
Descrı́base el movimiento de una partı́cula cargada en una región en la en su expresión) o también llamada en forma local (alu-
que existen un campo eléctrico E  y un campo magnético B  constan- diendo a que se trata de relaciones entre magnitudes que
tes, uniformes y perpendiculares entre sı́, suponiendo que se parte del se cumplen en cada punto del espacio). En muchos casos
reposo en el sistema de referencia del laboratorio, en el que los campos
han sido medidos.
nos será de utilidad otra forma de expresar estas mismas
ecuaciones, que denominaremos en forma integral. Veamos
Este problema puede plantearse de dos formas diferentes: mediante
cada una por separado y de paso aprenderemos el nombre
integración de las ecuaciones del movimiento en el sistema de referen-
cia que se nos da, o bien tomando un sistema de referencia auxiliar particular que recibe cada ley.
para el cual el campo eléctrico no existe. Optamos por lo segundo pa-
ra ejemplificar el uso de las fórmulas de transformación de los campos
• Ley de Gauss
ante un cambio de sistema de referencia. La primera de las ecuaciones de Maxwell recibe el nombre
Podemos encontrar un sistema de referencia para el cual E   es nulo de Ley de Gauss:
debido a que E  y B son perpendiculares entre sı́. Si llamamos va a
la velocidad del sistema auxiliar respecto del sistema laboratorio, la

 ·E = ρ/0 .
ecuación que la determina será
Su forma integral se obtiene integrándola sobre un volumen
 = E
E va × B
 +  = 0.
τ arbitrario.  
Esta condición no determina completamente el  va (recordemos la ana-
∇  dτ = 1
 ·E ρ dτ.
logı́a algebraica del teorema de Helmholtz vista en el tema anterior) 0 τ
τ
puesto que necesitarı́amos conocer también el valor de va · B.  Esta
indeterminación equivale a poder elegir la dirección de va con tal que Usando el teorema de la divergencia en el primer miembro
esté contenida en el plano perpendicular a E  y que no sea colineal a
 (puesto que entonces el producto vectorial serı́a automáticamente y reconociendo la carga encerrada en τ en la integral del
B
cero). La opción más simple es tomar va perpendicular a los dos vecto- segundo se llega a
res, es decir, imponer la condición adicional va · B
 = 0. Multiplicando 
 = q(τ ) ,
vectorialmente por B  escribimos
 · dS
E
 ×E
B  +B va × B)
 × (  = 0. Sτ 0

24
es decir, el flujo de campo eléctrico que atraviesa una su- efecto, si la superficie sobre la que realizamos la integración de la ley
perficie cerrada es proporcional a la carga neta que encierra de Faraday es variable en el tiempo (circuito móvil y/o deformable) se
tendrá
dicha superficie.
 

∂B
 · d
E r=− · dS,

• Ley de inexistencia de monopolos. γS (t) S(t)
∂t

donde ahora la derivada parcial respecto del tiempo no se puede per-


Otra de las ecuaciones de Maxwell es mutar con la integración espacial puesto que la superficie varı́a en el
tiempo. De hecho puede verse la relación entre ambas:

 ·B
 = 0,
   
d  · dS 1  + ∆t) · dS
−
que establece que, al contrario de lo que ocurre con el cam- B  = lim B(t 
B(t) · dS
 .
dt ∆t→0 ∆t
S(t) S(t+∆t) S(t)
po eléctrico, no existen fuentes escalares para el campo
magnético (monopolos).  · dS
Si sumamos y restamos la cantidad B(t)  dentro del cor-
S(t+∆t)
En forma integral se tiene chete, podremos agrupar de forma que la derivada se pueda escribir
como
  
 
B · dS
 = 0. ∂B 1
(t) · dS + lim
 B(t) · dS −
  B(t) · dS .
 
Sτ ∂t ∆t→0 ∆t
S(t) S(t+∆t) S(t)

Por ser un campo solenoidal se aplican todas las propie- El lı́mite no calculado aún es el término nuevo que hay que considerar.
Vemos que se trata de la diferencia entre el flujo magnético evaluado
dades que se han estudiado
en el tema 1; en particular la en S(t) y el evaluado en S(t+∆t). Ambas superficies están conectadas
 · dS
constancia del flujo Φ = S B  para cualquier sección de por una superficie elemental ∆SL construida con los desplazamientos
un tubo de campo, o para cualquier superficie que se apoye 
v (
r )∆t de cada elemento d r del contorno de S(t) (ver figura). Un
en un mismo contorno. elemento de esta superficie puede escribirse d r×v (
r )∆t.

La unidad de flujo magnético es el weber (Wb). Se tiene


que 1Wb = 1T.m2 . gS(t+Dt)

• Ley de Faraday
S(t)
La ecuación que recibe el nombre de Ley de Faraday es v(r)Dt

∇  = − ∂B .
 ×E r
∂t gS(t)
dr
Si se integra sobre una superficie arbitraria S resulta
  
Por ser el campo magnético solenoidal el flujo a través de S(t) es
∂B el mismo que el flujo a través de ∆SL ∪ S(t + ∆t), puesto que ambas

 ×E
 · dS
=− · dS.

superficies tienen el mismo contorno. De aquı́ se deduce que el lı́mite
S S ∂t
es  
 
Aplicamos el teorema de Stokes al primer miembro e inter- − r × v] · B
[d  =− r· 
d v×B
 .
cambiamos el orden de derivación temporal e integración en γS γS
Esta integral de lı́nea se puede pasar al primer miembro y agrupar con
el segundo para obtener 
 para dar (E
la circulación de E v × B)
 +  · dr . Pero la expresión entre
 
  medido en sistemas
 · dr = − d
E  · dS,
B  paréntesis no es otra cosa que el campo eléctrico E
γS dt S de referencia ligados a cada elemento del contorno de integración. La
conclusión es que la ley tiene validez incluso para contornos móviles.
que es la forma integral de dicha ley. Esta ecuación po-
ne de manifiesto de manera muy intuitiva cómo se genera
• Ley de Ampère-Maxwell. Corriente de desplaza-
el campo eléctrico a partir de sus fuentes vectoriales: las
miento.
variaciones de flujo magnético tienden a producir lı́neas de
campo eléctrico en forma de circuitos contenidos en la direc- La última ecuación se conoce como Ley de Ampère-
ción perpendicular. Se trata de una contribución que hay Maxwell, e indica cuáles son las fuentes vectoriales del
que añadir al campo generado por la existencia de fuentes campo magnético (las únicas que posee):
escalares (cargas).

∂ 
E

 ×B  = µ0  + 0 .
Nota avanzada: ∂t
Si el circuito de integración se mueve o se deforma la ley integral
Junto a la corriente  existe un término relacionado con
sigue siendo válida, siempre y cuando interpretemos que el campo
eléctrico que se integra es el medido localmente, es decir, en sistemas

la variación del campo eléctrico, 0 ∂ E/∂t que se suele de-
solidarios con cada elemento de corriente que compone el circuito. En nominar corriente de desplazamiento. El apelativo de

25
corriente puede ser engañoso, puesto que no se trata de un es válida. Si usamos la versión integral de la ley de Ampère-Maxwell
flujo real de cargas; está más bien motivado por sus dimen- aplicada a un circuito circular definido por r = R, y teniendo en cuen-
ta que no se nos habla de la existencia de un campo eléctrico variable
siones fı́sicas, que coinciden con las de . en el tiempo,
La forma integral de la Ley de Ampère-Maxwell se obtiene   2π
 · d A
considerando una superficie S arbitraria B r= Rdφ = 2πA = µ0 I.
γ(R) 0
R

    Esto relaciona la constante A con la intensidad de corriente que crea



∂E
 · dr = µ0 I(S) + 0
B · dS
 , el campo. Como esto es cierto para cualquier valor de R elegido, la
γS S ∂t conclusión es que la corriente es filiforme. El campo magnético creado
por un hilo recto es pues

 µ0 I
B= uφ .

donde, como en el caso de la Ley de Faraday, se ha aplicado 2πr
el teorema de Stokes en el primer miembro. En el segundo
Lo visto en estos dos ejemplos se volverá a estudiar en el siguiente
se ha identificado el flujo de corriente a través de la super- tema, dedicado a las soluciones estáticas de las ecuaciones de Maxwell.
ficie con la intensidad I(S) que la atraviesa. También esta
presentación integral, al igual que la regla del flujo para el
campo eléctrico, nos da una idea cualitativa de la configu-
ración de lı́neas de campo magnético a partir de la de sus
fuentes vectoriales.
2.7 Discontinuidades de los campos

Esta sección muestra de manera general que la existencia


Ejemplo:
de singularidades en las fuentes da lugar a discontinuidades
 =
Si el campo eléctrico medido en el espacio resulta ser E r, (A/r 2 )
u
con A constante, ¿qué podemos decir de sus fuentes escalares y vecto- en el valor de los campos eléctrico y magnético, en forma
riales? análoga a lo que sucede cuando una función de una varia-
Se trata de un campo central y su rotacional es nulo, según vimos
ble f (x) sufre un salto en x = x0 y esto da lugar a una

en un ejemplo del tema anterior. No existen pues fuentes vectoriales singularidad de su derivada f (x0 ).
(es decir, campos magnéticos variables en el tiempo). En cuanto a las
fuentes escalares usamos la ley de Gauss: • Campo eléctrico:

 = !0 1 ∂ A Cuando existe una distribución superficial de carga, ρS (r)
ρ = !0 ∇
 ·E r2 = 0.
r 2 ∂r r2 definida en una superficie S el campo eléctrico sufre un sal-
La conclusión aparente es que no existe carga en ningún punto del es- to, entendido como la diferencia entre su valor a un lado y
pacio. Sin embargo el sentido común nos dice que si el campo eléctrico a otro de S. Vamos a establecer las ecuaciones que determi-
no es nulo, debe haber carga en algún sitio. La única posibilidad es
nan la discontinuidad a partir de dos de las ecuaciones de
que esté situada en el origen, donde el campo se hace singular y la
evaluación anterior de la divergencia no es aplicable. En efecto, la Maxwell en forma integral.
forma integral de la ley de Gauss nos permite confirmar esta sospecha.
Tomando una superficie gaussiana esférica centrada en el origen y de
radio R obtenemos 1 E1
 
 · dS
E = A 2
R dΩ = 4πA,
S1 n
S(R)
R2 DS E2
donde hemos expresado el elemento de superficie en función del ángulo
sólido elemental. La ley integral implica que 4πA = q/!0 , y de aquı́
obtenemos el valor de la carga que ha creado el campo. Como además 2 S2 e
el radio elegido puede ser tan pequeño como se quiera, llegamos a la
conclusión de que la carga es puntual.
S rs
Recapitulando, por la importancia de la expresión hallada, el campo
creado por una carga puntual q es
 = q
E 
ur . Aplicamos la ley de Gauss en forma integral utilizando un
4π!0 r 2
volumen de integración en forma de pequeña caja de pas-
Ejemplo: tillas (cilindro aplastado) con generatriz perpendicular a la
Si el campo magnético medido en todo el espacio resulta ser, en coor- superficie S en un punto dado (ver figura). Las dos bases
 = (A/r)
denadas cilı́ndricas, B uφ , ¿qué podemos decir de sus fuentes?
del cilindro, de área ∆S, son por tanto paralelas a la super-
En primer lugar, el campo propuesto es admisible puesto que es so- ficie cargada y están situadas de tal forma que el cilindro
lenoidal. En efecto, la aplicación de la divergencia a esta expresión
nos da cero y se cumple la ley de ausencia de monopolos. contiene una porción de la distribución de carga. La altura
e del cilindro puede tomarse tan pequeña como se quiera
En cuanto a las fuentes vectoriales, la aplicación del rotacional nos
sin que el requisito de contener parte de la distribución se
da  
 ur r
u u
  deje de verificar. Con estas condiciones el flujo a través de
 = 1  ∂/∂r 
φ z

 ×B ∂/∂φ ∂/∂z  = 0. la superficie gaussiana que encierra el volumen cilı́ndrico se
r 0 r(A/r) 0 
escribe
Nuevamente se nos presenta el resultado paradójico de un campo sin    
fuentes, ni escalares ni vectoriales. Y nuevamente la clave está en los  · dS
=  · dS
+  · dS
+  · dS,

E E E E
puntos singulares del campo. Para r = 0 la evaluación anterior no SG SL S1 S2

26
siendo SL la superficie lateral y S1 y S2 las dos bases, si- vector unitario perpendicular al rectángulo, que estará por
tuadas respectivamente en las regiones ”1” y ”2”, separadas tanto contenido en la superficie S. Su sentido nos determina
por la superficie cargada. Si tomamos lı́mite e → 0 el flu- a su vez un sentido de circulación del contorno rectangular.
jo lateral también tiende a cero, puesto que el campo debe Una base local ortonormal del espacio se completa con el
mantenerse finito y el recinto de integración tiene área cada vector tb = n × ta , también tangente a la superficie carga-
vez más pequeña. Por otra parte los flujos a través de las da, y perpendicular a ta . La circulación del campo eléctrico
bases se pueden aproximar por los productos de campo por se puede descomponer en circulaciones sobre cuatro tramos
área si ésta es suficientemente pequeña para que el cam- rectos:
po sea muy aproximadamente constante. Con todas estas 
consideraciones podemos escribir Γ= E  · dr = ΓAB + ΓBC + ΓCD + ΓDA ,

 · dS
E  1 · ∆S  2 · ∆S
1 + E 2 . de las cuales ΓBC y ΓDA tienden a cero cuando e → 0. Nos
E
SG queda, considerando los campos aproximadamente constan-
tes en cada tramo por ser éstos de pequeña longitud, ∆l,
Podemos expresar las superficies en función del vector nor-
mal a la superficie cargada, n, que tomamos dirigido de la Γ  −E  1 · tb ∆l + E
 2 · tb ∆l.
región ”2” a la ”1”, escribiendo ∆S 1 = −∆S2 = ∆Sn, mien-
Para aplicar la ley de Faraday debemos evaluar el flujo
tras que por otra parte la carga encerrada será ρS (r)∆S. La de ∂ B/∂t
 a través del rectángulo. Es claro que tampoco
ley de Gauss dará como resultado son fı́sicamente aceptables variaciones temporales infinitas
 1 · n∆S − E  2 · n∆S = ρS ∆S/0 , del campo magnético, y como el área sobre la cual eva-
E
luamos el flujo tiende a cero cuando e → 0, también lo
y cancelando el factor común se llega a una condición sobre hará el flujo. En consecuencia en la expresión anterior es
  escribir −tb · (
Γ = 0 y podemos  E1 − E  2 ) = 0, o bien,
las componentes normales del campo eléctrico:
0 = (ta × n) · E
 = ta · n × [E]  . Como el vector tan-
n · [E] = ρS /0 ,

gente ta puede ser elegido arbitrariamente en la superficie,
que se cumple en cada punto de la superficie cargada. Los lo anterior no es más que una proyección de una ecuación
corchetes denotan el salto E 1 −E  2 evaluando ambos campos vectorial que se debe satisfacer:
en las inmediaciones de la superficie. Es importante notar
que la definición del corchete y el sentido elegido para n n × [E]  = 0,
están relacionados: podemos tomar el sentido opuesto pa- Aunque esta forma de expresar el resultado es la más ele-
ra definir el vector normal a la superficie, pero en ese caso gante por involucrar vectores definidos en cada punto de una
la demostración anterior nos obligarı́a a definir [E]  como
superficie (y no vectores tangentes que pueden ser elegidos
E2 − E1 . En definitiva , sea cual sea la elección, la fórmula de infinitas maneras), la ecuación establece simplemente que
 
se lee ”la proyección normal del campo evaluado en la re- la componente tangencial del campo eléctrico es continua al
gión hacia donde apunta el vector normal a la superficie de atravesar la distribución, lo cual también se suele expresar
separación, menos la proyección normal del campo evaluado
en la otra región, es igual a la densidad superficial de carga E1t = E2t .
en ese punto dividido por 0 ”.
Ejemplo:
1 E1
 = (A/r 2 )
Si el campo eléctrico medido en todo el espacio es E ur para
r > R y cero si r < R, obténganse sus fuentes.

rs A n La aplicación de la divergencia y el rotacional a estas expresiones


tb ta dan cero (véase un ejemplo anterior). No hay pues fuentes distribuidas
en volumen. Sin embargo el campo sufre una discontinuidad en r = R
D B y por tanto en esa superficie esférica debe haber una distribución su-
2 E2 perficial de carga. Su valor se obtiene aplicando la condición de salto
 = ρS /!0 . Esto da A/R2 − 0 = ρS /!0 , o sea, ρS = A!0 /R2 .
n · [E]

Dl e Además podemos observar que la continuidad de la componente
S C tangencial se verifica, por ser nula a un lado y a otro de la superficie
r = R.

Una segunda condición da información sobre las compo-


nentes tangenciales del campo eléctrico y se obtiene a partir
• Campo magnético:
de la ley de Faraday en forma integral. Tomamos una su-
perficie de integración rectangular, contenida en un plano Podemos realizar el mismo tipo de análisis con las otras
perpendicular a la superficie S que contiene la distribución dos ecuaciones de Maxwell que restan por usar, lo cual nos
de carga (ver la figura de arriba). El rectángulo se localiza dará otro par de condiciones, ahora referidas a las compo-
de forma que corta la superficie cargada sea cual sea la lon- nentes del campo magnético en la proximidad de una su-
gitud e de los lados perpendiculares. Denotamos por ta al perficie sobre la que existe una distribución superficial de

27
corriente. La notación tiene en lo que sigue el mismo signi- cilı́ndricas, B = (A/r)uφ para r > R y cero si r < R, obténganse sus
ficado que anteriormente. fuentes.
La aplicación de la divergencia y el rotacional a estas expresiones dan
Usando la condición de ausencia de monopolos en forma también cero en este caso y no hay fuentes distribuidas en volumen. La
integral se deduce sin dificultad la condición discontinuidad en la superficie cilı́ndrica r = R evidencia la existencia
de una corriente superficial. La condición de salto n × [B]
 = µ0S da,
n · [B]
 = 0, teniendo en cuenta que 
n= ur , S = A/(µ0 R)
uz .
 se verifica trivial-
La continuidad de la componente normal de B
puesto que la única diferencia con el caso eléctrico es que no mente, por ser nula a un lado y a otro de la superficie r = R.
existe algo análogo a una densidad de carga, ni superficial
ni volumétrica.

B2 • Balance de carga en una superficie.


B2
n B1
B1
tb n
La conservación de la carga también se debe verificar en
ta tb cualquier superficie. De especial relevancia es el caso de
ta
js una superficie S en la que tenemos definidas singularidades
e de carga y corriente dadas por la densidad ρS (r) y S (r)
Dl js
e respectivamente. A un lado y a otro podemos tener defini-
Dl das distribuciones volumétricas de carga y corriente, ρi (r)
y i (r), con i = 1, 2 (ver figura).

Por el contrario una corriente superficial S (r) constitu- S1


ye una fuente vectorial de campo magnético, y la ley de
DS n j1
Ampère-Maxwell en forma integral debe analizarse con más
gDS
cuidado, siguiendo el mismo procedimiento que con la ley j2
de Faraday. Vamos a definir el vector ta como aquél que es
paralelo a S en el punto r de la superficie considerado (ver
S2 e
dibujo de la izquierda en la figura). La circulación de B es 
análoga a la que se vio para el campo eléctrico. El flujo que js
atraviesa el rectángulo se debe exclusivamente a la corriente rS

superficial, puesto que el campo ∂ E/∂t se mantiene finito
y el área tiende a cero cuando e → 0. Podemos escribir A partir de la ecuación de continuidad integrada para un
directamente −∆l tb · (B 1 − B 2 ) = µ0 I(S) = µ0 ta · S ∆l.
volumen elemental ya habitual con forma de caja de pasti-
Cancelando el factor común ∆l y usando la definición de tb llas se tiene
se llega a la ecuación escalar     
0=  ·  + ∂ρ =
∇ + d
 · dS ρdτ.
ta · n × [B]
 = µ0ta · S . τ ∂t Sτ dt τ
La integral de superficie representa el flujo de carga que es-
Si en lugar de un rectángulo perpendicular a la corrien-
capa por la frontera del volumen. En el lı́mite en que el
te superficial hubiéramos tomado uno tangente a la misma
grosor de la caja tiende a cero hay tres aportes: dos de
(dibujo de la derecha) el resultado serı́a
ellos son análogos a los encontrados en este tipo de análisis
 y B; otro es nuevo
tb · n × [B]
 = 0 = µ0tb · S , aplicado anteriormente a los campos E
y surge de la presencia de una singularidad superficial de
puesto que en tal caso la corriente no atraviesa el rectángulo. corriente:  
La última igualdad, aunque cierta por tratarse de dos vec-  · dS
 = ∆S( 1 − 2 ) · n +  · dS.

tores perpendiculares, parece caprichosa, pero es ası́ como Sτ SL

mejor se pone de manifiesto que las dos ecuaciones encon- En el flujo lateral no intervienen las distribuciones vo-
tradas son proyecciones en una base del plano tangente a la lumétricas puesto que el área lateral tiende a cero, pero
superficie de la ecuación vectorial en este lı́mite sı́ puede haber flujo de carga debido a la co-
rriente superficial definida en una fina capa de espesor δ,
n × [B]
 = µ0S , S = limδ→0 δ. Escribiendo dS  = δdr × n, siendo dr un
vector elemental del contorno de S2 se tiene
que establece una relación entre la corriente superficial en  
cada punto y el salto en la componente tangencial del campo
 · dS =
 S · (dr × n).
magnético. SL γS 2

Ejemplo: Si dividimos esta expresión por ∆S y tomamos lı́mite ∆S →


Si el campo magnético medido en todo el espacio es, en coordenadas 0 encontramos una expresión que definimos, por analogı́a

28
con el caso tridimensional, como la divergencia superficial tromagnética. Hemos definido ya la carga y la corriente
del vector S (se trata del flujo que escapa lateralmente por eléctrica, ası́ como sus posibles distribuciones; hemos de-
unidad de superficie): finido los campos eléctrico y magnético; hemos estableci-
 do la relación entre todos ellos (ecuaciones de Maxwell),
1 y hemos cerrado la descripción de la interacción electro-

 S · S = lim dr · (S × n).
∆S→0 ∆S γ magnética al definir la fuerza de Lorentz. Sin embargo, al
S
igual que en Mecánica, es de la máxima utilidad introdu-
cir magnitudes energéticas como herramientas para com-
Recordando la segunda definición intrı́nseca de rotacional
prender y analizar los fenómenos electromagnéticos. Vere-
podemos escribir ∇  S · S = n · ∇  × (S × n).
mos en breve que si en una región del espacio existen cam-
Por otra parte la integral de volumen no es otra cosa que pos eléctrico y magnético, también existen asociados a ellos
la carga encerrada, que vale ρS ∆S. En conclusión, la ecua- energı́as eléctrica y magnética, respectivamente.
ción que resulta es
De cursos introductorios de Fı́sica estamos acostumbrados
a analizar, por ejemplo, la caı́da de objetos en la superficie
 S · S + ∂ρS = 0
n · [] + ∇ terrestre mediante el cálculo de energı́as cinética y potencial,
∂t
entre las cuales pueden existir trasvases; también se tienen
pérdidas debidas a rozamiento con el aire, que pueden ser
que es de validez general si la superficie no se deforma.
interpretadas como transformación de energı́a mecánica en
energı́a de otro tipo (calorı́fica). Todo esto puede servirnos,
Ejemplo:
Si se bombardea la superficie plana de un material aislante con un haz
a modo de analogı́a, para entender los conceptos que ahora
de iones de intensidad I, y sección S, con una inclinación α respecto siguen.
de la normal, durante un tiempo T , hállese la densidad superficial de
carga depositada. • Trabajo de las fuerzas electromagnéticas.
Podemos distinguir dos medios: uno el material aislante, que no de-
ja pasar a los portadores de carga y dentro del cual podemos tomar Consideremos una distribución volumétrica de carga y de
 = 0; otro su exterior, del que proviene el haz, en el cual la densidad corriente. Sobre cada portador de carga, con carga q y ve-
de corriente en módulo es I/S si es uniforme. Si el medio es aislan- locidad v , la fuerza de Lorentz realiza un trabajo durante
te tampoco tendrá lugar migración superficial de la carga, por lo que
admitimos que no hay corriente superficial. En un punto sobre el que un intervalo dt dado por
incide el haz de iones se establece un balance de carga expresado por
la fórmula encontrada anteriormente, con S = 0. Tomando el vector dWq = F · dr = q(E
 + v × B)
 · v dt,
normal a la superficie apuntando hacia el exterior escribimos
I ∂ρS
− cos α + = 0, donde hemos tenido en cuenta que en ese intervalo de tiem-
S ∂t
El signo negativo proviene de que, al ser incidente, forma un ángulo po el desplazamiento sufrido por la carga es dr = v dt. El
mayor de π/2 con la normal a la superficie. Esta ecuación define la segundo término dentro del paréntesis desaparece por ser la
derivada de la densidad de carga como una constante. Integrando en fuerza de origen magnético perpendicular a la trayectoria
el tiempo,
 T del portador. Sólo la fuerza de origen eléctrico realiza tra-
∂ρS I
ρS = dt = T cos α. bajo, que sumado para todos los portadores encerrados en
0
∂t S
un elemento de volumen dτ conduce a
Como hemos dicho, si la superficie que consideramos se s

deforma, la fórmula anterior no es válida. Sirva como ejem- dW = qi nivi · E
 dτ dt =  · E
 dτ dt.
plo lo que sigue. i=1

En otras palabras, la potencia mecánica suministrada por


Ejemplo:
Hállese la densidad superficial de carga de un globo de radio R1 , con unidad de volumen a la distribución es
carga q, que se infla hasta alcanzar un radio R2 .
dW dP
Suponiendo que la distribución es uniforme en toda la superficie del = =  · E.

globo, la densidad superficial inicial es ρS1 = q/S1 = q/(4πR21 ), y
dtdτ dτ
la final es ρS2 = q/S2 = q/(4πR22 ). Está claro que durante el pro-
ceso ∂ρS /∂t = 0 y sin embargo la simetrı́a del problema impide la • Teorema de Poynting
existencia de una corriente superficial ni tampoco podemos considerar
densidades de corriente a un lado y a otro de la superficie del globo.
Acabamos de establecer que sobre una distribución de co-
La ecuación de balance de carga no se cumple, y ello es debido a que
la superficie varı́a en el tiempo. rriente el campo electromagnético realiza una fuerza que
por unidad de volumen conduce a la ”inyección” de una
potencia dada por  · E.
 Si esta expresión es positiva se
trata efectivamente de un aporte de energı́a por unidad de
2.8 Energı́a almacenada en los campos tiempo al sistema de cargas en ese punto. Si es negativa es
el sistema de cargas el que cede esa energı́a. La cuestión
En este capı́tulo pretendemos introducir todos los concep- que se nos plantea es de quién se extrae o a quién se cede,
tos básicos que se deben manejar dentro de la teorı́a elec- respectivamente.

29
Para contestar a esto vamos a presentar la potencia reali- puede aumentar o disminuir; el flujo de energı́a a través de
zada por las fuerzas electromagnéticas de otra forma. Usan- la frontera puede ser saliente (positivo) o entrante (negati-
do la Ley de Ampère-Maxwell para expresar la corriente se vo); el trabajo realizado por la fuerza de Lorentz puede ser
tendrá también positivo o negativo. Si este último es negativo sig-

nifica, en muchos casos, que existen fuerzas de otro origen
1 ∂ 
E 
 · E
 = ∇
 ×B  − 0  = 1 E
·E  ·∇
 ×B  · ∂E .
 − 0 E que están actuando en contra del campo electromagnético.
µ0 ∂t µ0 ∂t Dichas fuerzas son responsables de que se gane en energı́a
Haciendo uso de la identidad electromagnética. Tal es el caso, por ejemplo, de una cen-
tral hidroeléctrica, en la que la energı́a gravitatoria del agua

 · (E × B)
 =B  ·∇ ×E  −E  ·∇
 ×B  almacenada es responsable de la separación de carga que
y sustituyendo ∇  ×E  a partir de la Ley de Faraday queda produce la corriente eléctrica. La energı́a gravitatoria es
fuente de energı́a eléctrica. Por tanto, si  · Edτ
 es negati-
1 ∂ 
E 1 ∂ 
B vo, debemos entender que hay otro tipo de energı́a (térmica,
 · E
 =− ∇  · (E
 × B)
 − 0 E · − ·
B . nuclear, quı́mica, potencial, etc.) que está actuando como
µ0 ∂t µ0 ∂t
fuente de energı́a electromagnética. Bajo este nuevo pun-
Los términos con derivada temporal pueden relacionarse to de vista podemos reinterpretar el teorema de Poynting
fácilmente con las derivadas de E 2 y B 2 , con lo cual lle- escribiendo
gamos a la expresión final
  
 = ∂ (uE + uB ) + ∇
− · E  · P,
  dτ = d
∂t −  · E (uE + uB ) dτ + P
 · dS,

τ dt τ Sτ

donde se definen las cantidades


que leemos ahora ası́: la potencia cedida por el conjunto de
 = 1 E
P  × B,
 0
uE = E 2 , uB =
1 2
B .
cargas de una región τ al campo electromagnético se emplea
µ0 2 2µ0 en aumentar la energı́a almacenada en los campos en dicha
región y el resto escapa por su frontera.
La cantidad uE tiene dimensiones de energı́a por unidad Hay que hacer énfasis en la realidad independiente de los
de volumen, y es dependiente exclusivamente del campo campos y las partı́culas. Estas últimas constituyen un sis-
eléctrico en ese punto. Por este motivo se le denomina den- tema mecánico dotado de energı́a mecánica (cinética y de
sidad volumétrica de energı́a eléctrica. Análogamente interacción); por su parte se acaba de postular que los cam-
a uB se la denomina densidad volumétrica de energı́a pos eléctrico y magnético almacenan energı́a; el teorema
magnética. A P  se le conoce como vector de Poynting, de Poynting establece cómo se intercambia la energı́a entre
y su significado fı́sico es el de un flujo de energı́a por unidad ambos sistemas.
de superficie transversal. Ya se verán en temas posteriores
ejemplos de cálculo de energı́as y flujos de energı́as. Para clarificar más el significado del teorema de Poynting,
veamos dos ejemplos:
La ecuación encontrada es el teorema de Poynting, que
establece un balance local de energı́a en cada instante. En lo Ejemplos:
que sigue vamos a tratar de interpretar el significado fı́sico
1. El Sol constituye un excelente ejemplo de sistema formado por
de esta ecuación. cargas. Su interior es lo que se denomina un plasma, es decir, un
Quizás la mejor forma de entender la ecuación se consi- gas de partı́culas cargadas positiva y negativamente. Las reacciones
nucleares que tienen lugar en él constituyen la fuente de energı́a elec-
gue integrándola a un volumen arbitrario τ . Si hacemos tromagnética. Podemos suponer que posee una temperatura estable, al
esto, aplicamos el teorema de la divergencia y reordenamos menos en la escala humana de tiempos, y que por tanto el sistema está
términos resulta en un estado estacionario. Por tanto la energı́a electromagnética alma-
cenada es constante y la energı́a nuclear se transforma ı́ntegramente
   en radiación electromagnética. De los tres términos involucrados en el
d
− (uE + uB ) dτ =  · E dτ + P
 · dS,
 teorema de Poynting, sólo dos son distintos de cero e iguales entre sı́:
dt τ τ Sτ la energı́a nuclear trabaja en contra de los campos electromagnéticos,
pero no produce un aumento de energı́a, sino un flujo hacia el exterior.
que debe leerse: la disminución en la energı́a electro-
magnética almacenada en una región τ se emplea en trabajo 2. En un aparato de rayos X un haz de electrones es acelerado por
campos eléctricos muy intensos en cierta región, y luego se les hace
realizado por los campos sobre las cargas y energı́a que esca- chocar, con lo cual pierden su energı́a de manera brusca. En este
pa por su frontera. En otras palabras, parte se transforma proceso debemos considerar dos etapas.
en otro tipo de energı́a y parte se pierde. La transformación (i) En la primera los electrones adquieren velocidad por el campo
consiste en que el sistema de cargas incluido en la región τ eléctrico aplicado, sin emisión apreciable de radiación, porque la ace-
modifica su movimiento por efecto de la fuerza de Lorentz, leración de las cargas es relativamente lenta (en el tema 4 veremos que
lo cual revierte en una variación de la energı́a mecánica. el fenómeno de radiación requiere aceleración de cargas). El teorema
de Poynting queda en este caso
Hay que tener en cuenta que en un proceso cualquiera
 
cada uno de los términos del teorema puede tener signo po-
−  dτ = d
 · E (uE + uB ) dτ.
sitivo o negativo. En efecto, la energı́a electromagnética dt
τ τ

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La energı́a potencial eléctrica de las cargas disminuye (uB  0 y que las interacciones entre portadores pueden conducir a su
uE < 0) y se transforma ı́ntegramente en energı́a mecánica (poten- creación o aniquilación. En el caso del teorema de Poynting
cia mecánica positiva, porque  · E
 > 0).
la energı́a electromagnética surge de una conversión de la
(ii) En la segunda etapa los electrones pierden su energı́a mecánica
tras chocar, pero no ha habido variación de energı́a electromagnética energı́a mecánica de las partı́culas englobadas.
almacenada; debemos por tanto decir que toda esa energı́a escapa en
forma de radiación X. El teorema queda
Insistiendo más en el significado de este tipo de teoremas,
  pongamos un sı́mil basado en el sistema de calefacción de
−  · E
 dτ = P
 · dS,
 una casa. Los radiadores, estufas, o cualquier otro sistema
τ Sτ empleado en el interior de la casa constituyen las fuentes
con ambos términos positivos (nótese que el choque con un material de energı́a térmica. La temperatura de la casa es un indi-
muy masivo es una interacción con un campo eléctrico opuesto a la cador de la energı́a térmica almacenada en su interior. Por
corriente, y que por tanto  · E
 < 0 en el proceso).
último, el calor escapa en cierta medida por las paredes de
la casa (dependiendo de su aislamiento), y en particular por
j⋅E<0 las ventanas. Podemos establecer el siguiente balance: la
potencia calorı́fica suministrada por las fuentes es igual a
- + la variación de energı́a calorı́fica almacenada por unidad de
tiempo más la potencia calorı́fica que escapa por las paredes
e
y ventanas.
Puede demostrarse que los campos electromagnéticos no
j⋅E>0 sólo son portadores de energı́a, sino también de momen-
tos lineal y angular. Los teoremas de conservación de estas
magnitudes mecánicas deben contar con los campos como
realidades fı́sicas del mismo rango que las propias partı́culas.
Como último comentario, debemos tener en cuenta que si
Es instructivo comparar el teorema de Poynting con la la descripción que nos interesa de cierto sistema no es como
ecuación de continuidad. Ambos son teoremas de conser- conjunto de portadores sometidos a fuerzas bien definidas
vación: uno para la energı́a y otro para la carga. Estos (entre ellas la de Lorentz), sino como medios continuos suje-
teoremas siempre tienen una misma estructura, a saber, un tos a lo que se denominan ”leyes constitutivas”, el teorema
”término fuente”, que caracteriza la creación o destrucción de Poynting, tal como se ha enunciado, sigue siendo válido
de una magnitud (masa, carga, energı́a, cantidad de movi- pero deja de tener utilidad. Debe en tales casos redefinir-
miento, etc.), que se iguala a un término de tasa de creci- se lo que se entiende por energı́as eléctrica y/o magnética
miento temporal de dicha magnitud y otro de flujo de la y vector de Poynting, y la interpretación de los distintos
magnitud a través de la frontera. En el caso de la energı́a términos que aparecen en la ecuación de balance se hace
electromagnética existe un término fuente, − · E,
 mientras más complicada. A partir del tema 5, cuando estudiemos el
que en el de la carga neta no lo hay, puesto que se postula comportamiento electromagnético de los medios materiales,
que se conserva localmente. Si en lugar de la carga neta se entraremos en descripciones de este último tipo y veremos
analiza un balance de densidad de portadores de cada espe- definiciones de energı́as alternativas a las dadas en este apar-
cie por separado sı́ hay en general un término fuente puesto tado.

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