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MODULO No.

5
“LA IGLESIA PREGONA
LA VENIDA DE CRISTO”
Justamente por esa época de tanto
ateísmo, escepticismo y hedonismo
europeo, nació en Norteamérica un hombre
(1782) que sería escogido por Dios para
tomar el hecho de 1798, junto a otros más,
y así desencadenar un interés masivo por
las profecías de la Santa Escritura. Esto,
debido a que muchos vieron en el
derrocamiento papal, la herida de muerte
de Ap. 13;5.
Este hombre habría de despertar a
toda una generación hacia la idea de
que Jesús pronto volvería a esta Tierra.
Con esto, Dios empezaba ese arduo
proceso mediante el cual su iglesia iba
a recuperar muchas de las doctrinas
bíblicas que la Reforma nunca logró
rescatar….
Ese hombre fue: Guillermo Miller. (1782
– 1849) Nació en Nueva York, era el
mayor de 16 hermanos, era agricultor, y
como era de escasos recursos, no podo
tener una educación formal. Pero era un
lector empedernido. Iba a la biblioteca y
se cultivaba autodidácticamente. Llegó
a leer libros que ponían en duda la
existencia de Dios. Esto llegó a afectar
su fe.
Pero Miller se dio cuenta que lo único
que dejaba quedarse sólo con la razón
(sin Dios y sin fe) era el desenfreno,
caos y depravación de la Francia
revolucionaria.
Así que se dedicó a estudiar la Biblia
(1816-1823). Luego de este tiempo, le
pareció que había hecho un
descubrimiento extraordinario: había
descifrado la fecha de la venida del
Llegó a esta conclusión, luego de leer
Daniel 8:14. Sus cálculos indicaban:
1843…..Pero siguió estudiando hasta
1832. Sentía que una voz le decía: “Ve
y dilo al mundo”. Finalmente hizo un
trato con Dios: si recibía una invitación,
él iría a predicar de la venida de Cristo.
Media hora después, estaba
recibiendo una invitación. Su primera
presentación produjo varias
conversiones. Las invitaciones
empezaron a crecer y crecer hasta
que se hizo demasiado solicitado en
distintas denominaciones.
Para 1830 ya varios pastores se
habían convencido de que Cristo
volvería en 1843. De ellos, el que más
se involucraría en la predicación de
Miller fue Joshua Himes. Fue él quien
motivó a Miller a llevar su mensaje a
las grandes ciudades. El fue su
promotor, su consejero, organizador,
asesor, etc.
Fue él quien le propuso la idea de
crear revistas y periódicos para
avanzar más rápidamente en la
difusión de este mensaje.

Así crearon las revistas: Signs of the


Times y el Midnight Cry, de los cuales
llegaron a publicarse hasta 10,000
diarios. Sólo en 1842 se distribuyeron
600,000. Pero esto no habría de ser
suficiente, Himes ideó campañas
evangelísticas…(130 entre 1842 y
Eso sería medio millón de personas
entre todas. Como a veces no les
prestaban templos o no cabían tantas
multitudes, Himes ideó crear una gran
carpa con capacidad para 4,000
personas.
Pronto con ayuda de unos asesores, y
ante la presión de la gente de poner una
fecha exacta, finalmente Miller anunció
el 22 de Octubre de 1844 como la fecha
del retorno de Cristo.
Pocos días antes de esta fecha, los
milleritas empezaron a alistarse para
su partida. Dejaron sus cultivos sin
cosechar, cerraron sus negocios,
renunciaron a sus empleos, vendieron
sus casas, se despidieron de todos,
etc.

Nota: Otros como la familia de Elena Harmon


ya habían sufrido la vergüenza de la
desfraternización en su iglesia metodista.
El 22 de Octubre de 1844 decenas de
miles de milleritas esperaban
ansiosamente a Jesús. Cuando llegó la
medianoche, todos clamaban y
miraban al cielo esperando que este
se abriera y por fin vieran a su
Salvador. Pero Cristo no llegaba….
Los hermanos pensaron que se estaba
probando su fe, y decidieron orar y
cantar más fuerte…. Las horas
pasaron y pronto llegó el amanecer.
Todos lloraron amargamente. (Ap.
10:8-11) Entonces se evidenció que
es lo que sucedería si la gente supiera
el día y hora de la venida de Cristo….
Que la gran mayoría realmente no
viviría permanentemente preparada,
sino que intentarían improvisar su
preparación.

Pronto el grupo millerita se fue dividió


en varios grupos, entre estos:
5. Los que no habían renunciado
realmente al mundo, sintiéndose
engañados, decidieron regresar al
3. Los que decidieron regresar a sus
iglesias;
4. Los que se propusieron regresar a la
Biblia, revisar en que se habían
equivocado y seguir confiando en la
Palabra de Dios.

Dios ya sabía que este chasco iba a ocurrir: Lo había


predicho
en la profecía del librito dulce en la boca y amargo
Dios no quería chasquear a su pueblo, pero
eso es lo que sucede cuando este hace caso
omiso de lo que ciertas partes de la Biblia
dicen. Miller y sus seguidores hicieron caso
omiso de las palabras de Jesus: “Nadie sabe
el día ni la hora…”

A los milleritas les pasó lo mismo que a los


discípulos, quienes se chasquearon por
haber hecho caso omiso de las palabras de
Jesus, que su reino no era de este mundo.
Miller no se ocupó de regresar a la Biblia en
busca de otras doctrinas, se enfocó en una
sola. Dios deja en claro que no se deben
sacrificar las demás doctrinas por una de
ellas.

Dios deseaba que el pueblo de los últimos


días rescatara las verdades que ni la
Reforma ni el millerismo habían recuperado,
y que hubiera un pueblo que sí lo hiciera
antes de su venida.
Beneficios del Chasco de 1844:

1. Dios filtró y purificó la iglesia de aquel


entonces. Dejó que salieran quienes no
estuvieran realmente convertidos.

2. Provocó que su iglesia aprendiera de sus


errores y viera lo inútil que resultará
siempre poner fechas para su venida.
4. Hizo que el grupo que quedó, comenzara
de cero y se propusiera configurar a partir
de la Biblia, únicamente las verdaderas
doctrinas que debían ser proclamadas
antes de la venida del Señor.

De este grupo fiel que no renegó, que no


regresó al
mundo, que siguió amando a Cristo a pesar
de ese
amargo chasco, surgimos los Adventistas del
ORIGENES Y AÑOS
FORMATIVOS DE LA IGLESIA
ADVENTISTA DEL 7º. DIA

(1839 – 1888)
II. DESPUES DEL CHASCO

El ambiente estaba lleno de emociones


negativas entre los milleritas. Habían sido
humillados, estaban confundidos, con duda,
desilusionados, etc. Muchos no salían de sus
casas. Se preguntaban: ¿Dónde nos
equivocamos? Entonces empezaron a
reunirse de nuevo para darse ánimo….
-Himes animaba a los hermanos a través del
Advent Herald y The Midnight Cry.
-Miller por su parte, ya sereno, afirmó estar
tranquilo y sobre todo, seguía creyendo en la
venida de Cristo.
-A pesar del chasco, Miller, Litch y otros,
siguieron pensando en fechas: 1845, 1846,
1847….Pronto vieron que esto era inútil.
-Descubrieron que el problema de poner
fechas era que, al no cumplirse, el resultado
sería la deserción y la incredulidad.
-Sabían que la fecha era correcta, pero lo que
había ocurrido en ella, era lo que
desconocían.
-Los estudios para saber que había pasado en
1844, llevó a algunos a conclusiones
equivocadas.
Ejemplo 1:

-Surgió la teoría de “la puerta cerrada”.


-Consistía en pensar que (basados en Ap.
22: 11 y 12) poco antes del advenimiento,
el destino de cada persona quedaría fijado
para siempre. Sus defensores (de la Advent
Herald) decían que eso es lo que había
ocurrido en 1844. Eso los indujo a no sentir
preocupación por los impíos.
Ejemplo 2:

-Otros presentaron otra teoría: “Que Cristo ya


había venido”, consistía en decir que estaba
invisiblemente sobre una nube, esperando que
sus fieles lo hicieran descender mediante
súplicas y oración diaria.

Después propusieron otra teoría: “La venida en


forma espiritual”, es decir, que todos los que lo
aceptaran serían inmortales e incorruptibles.
Ejemplo 3:

La teoría del “parto espiritual”.


Decía que Cristo ya había venido, que ya
estaban en el cielo, por lo tanto ya no
debían casarse. Los que ya estaban
casados, abandonaban su familia.
Otros que sentían que estaban en un
“sábado” milenial, decidieron no trabajar
más…
COMO DESCUBRIÓ NUESTRA IGLESIA
LA CREENCIA SOBRE EL SÁBADO

Cierto día una hermana bautista del 7º. Día


llamada Rachel Oakes visitó a un pastor
metodista llamado Frederick Wheeler. En la
conversación, ella lo desafió a guardar todos
los mandamientos de Dios, incluyendo el 4º.
Luego de mucho estudio, se convenció. Lo
transmitió a su iglesia, y pronto todos juntos
estaban ya guardando el día del Señor.
Luego un pastor bautista llamado T. M. Preble,
aceptó también el sábado. Luego de los
estragos del chasco, Preble decidió publicarlo
a través de uno de los periódicos mileritas.
Luego lo hizo más ampliamente a través de un
folleto. Tristemente 3 años más tarde, Preble
volvió a guardar el domingo. Pero su folleto,
iba a caer en mejores manos….
Uno de ellos fue Joseph Bates. El también
estuvo en el chasco. Gastó toda su fortuna
en la predicación milerita, pero seguía firme.

Al enterarse que ya había una iglesia no


bautista que guardaba el sábado, decidió
visitarla (la de Wheeler). Al llegar,
estudiaron juntos toda la noche….Se
convenció enseguida….
Más adelante, en 1846, fue Bates quien le
llevó el mensaje del sábado a los esposos
White. Al inicio ellos no lo aceptaban, pero
al tiempo terminaron convenciéndose
ante la contundencia bíblica. Más
adelante, John. N. Andrews escribió una
defensa del sábado del tamaño de un
libro.
COMO DESCUBRIÓ NUESTRA IGLESIA
LA CREENCIA SOBRE EL SANTUARIO

Aquí el personaje clave fue Hiram Edson,


un granjero metodista que también estuvo
en el chasco. Al día siguiente, el 23 de
Octubre, Edson y varios hermanos
estaban en una oración en su granero, y al
salir, mientras pasaba por un maizal Dios
le mostró lo que realmente había pasado.
Dijo: “se me apareció el cielo abierto… y vi
claramente y en forma definida que en
lugar de que nuestro Sumo Sacerdote
saliera del Lugar Santísimo del santuario
celestial para venir a esta tierra… al fin de
los 2,300 días, … ese día entró en el
segundo departamento de ese santuario… y
que tenía una obra que realizar el Lugar
Santísimo antes de venir a esta tierra…”
Pero fue en la Biblia, en Heb. 8 y 9 donde
hallaron el verdadero fundamento para
creer en un Santuario Celestial. Entonces
entendieron que Cristo había iniciado un
nuevo ministerio justo el 22 de octubre
1844. Ilusionado publicó un número
extraordinario acerca del santuario. Tuvo
que vender su platería de casamiento….
Más adelante, Edson conoció a Bates.
Edson se aprestó a contarle a Bates lo
referente al Santuario, y éste en
respuesta, lo concerniente al Sábado.
Luego de un profundo estudio bíblico,
ambos terminaron reconociendo que
ambos tenían razón.
COMO LLEGÓ A NUESTRA IGLESIA
EL DON DE PROFECIA

En el milerismose tenía total


desconfianza en manifestaciones
sobrenaturales, debido a la múltiples
falsificaciones que se suscitaban en sus
días. Esta oposición, contribuyó para
que dos individuos que recibieron
genuinamente el don de profecía,
terminaran rechazándolo.
Un bautista llamado William Foy, a
comienzos de 1842 recibió dos visiones
que trataban acerca del regreso de
Cristo.
Como era mulato, temía que la gente
rechazara también su mensaje. Al inicio
relató las visiones, pero pronto por
presiones financieras y de una tercera
visión que no comprendió, Foydejó de
Igualmente, antes del chasco, Dios
escogió a Hazen Foss, el cual también
recibió una visión, pero como fue
advertido que tendría oposición, rehusó
aceptar el encargo divino. Cuando se dio
cuenta de lo que había hecho, reunió a
unos cuantos para relatarles la visión,
pero ya no pudo recordarla. Foss advirtió
más adelante a Elena, que no fuera a
hacer lo mismo….
Dios entonces tuvo que llamar a la más débil
entre las más débiles: Elena Harmon, una
adolescente frágil de 17 años, quen incluso
había pasado por el chasco.

Su padre, Robert Harmon, era fabricante de


sombreros, y su madre Eunice Gould maestra
de escuela, y junto a sus 8 hijos, fueron
desfraternizados en su iglesia metodista por
estar asociados al movimiento de Miller.
Al principio ella no estaba tan dispuesta.
Pensaba en que era muy joven, enferma
y que podía envanecerse con semejante
don. Un ángel le dijo que Dios
conservaría su humildad mediante
aflicciones.
Durante sus visiones: perdía la fuerza,
luego recibía fuerza sobrenatural de tal
modo que nadie podía controlar sus
movimientos. Sus ojos permanecían
abiertos, pero su mente estaba
inconsciente de su alrededor.
Hubo una visión que duró 4 horas, en la
cual no respiró pero su corazón latía
normal. Al terminar la visión, a penas
podía ver.
Estos fenómenos sobrenaturales dieron
confianza a muchos (no a todos) de que
los mensajes dados, provenían realmente
de Dios. Algunos aún así lo rechazaban
porque creían que era autohipnosis.
Desde un inicio siempre hubo personas
que dudaron de la veracidad de su
ministerio (hasta la fecha).
Pero hubo uno que quedó
inmediatamente convencido de su
genuinidad: Jaime White. Como ella
recibía muchas invitaciones, y viajaba
mucho, y aunque siempre iba con su
hermana, Jaime se ofreció para
acompañarla. Comenzaron los chismes….
Jaime y Elena empezaron a enamorarse y
pronto en 1846 contrajeron matrimonio.
Como dijimos, Elena formaba parte del
grupo que se había propuesto dedicarse
al estudio de la Escritura. Cuando los
hermanos no hallaban como entender un
pasaje, ella recibía una visión y recibía la
explicación del caso.
Tuvieron 4 hijos:

Henry (murió a los 16 años);


Edson (impresor, escritor y compositor);
William (líder de la iglesia, compañero de
viajes de su madre y su consejero,
Secretario del Centro White)
John Herbert (murió a los 3 meses de
nacido)
El matrimonio White duró 35 años, hasta
que la muerte del Pr White los separó. El
trabajó mucho, se sacrificó hasta el
punto de enfermarse… Siempre fue
organizado, disciplinado, inteligente,
sabio administrador, equilibrado. Su
misión: dar a conocer los mensajes de
Dios al mundo.
La hnaWhite fue madre, esposa,
predicadora, consejera, profeta, escritora,
líder, pionera. Hablaba a auditorios de
miles, recorrió 24 veces los USA, recibió
más de 2,000 visiones, escribió decenas
de libros, viajó a Europa y Australia, fundó
colegios y hospitales, y fue la consejera
por excelencia de la hermandad
adventista.
Se cree que ella fue “el tercer autor más
traducido en la historia de la literatura, la
escritora más traducida, y el autor
norteamericano más traducido, sea
hombre o mujer.” Entre algunos de sus
libros: El Deseado de todas las gentes, El
Conflicto de los Siglos, El camino a Cristo,
Patriarcas y profetas, Profetas y Reyes,
Primeros Escritos, Historia de la
Redención, etc…
COMO DESCUBRIÓ NUESTRA IGLESIA
LA REFORMA PRO-SALUD

En el siglo XIX la medicina norteamericana


era un caos total. Los médicos sólo habían
recibido conferencias; prescribían drogas
peligrosas; 9 de cada 10 pacientes morían;
los hospitales constaban de camas sucias y
nada era esterilizado. Si alguien padecía de
los pulmones le recetaban fumar; podían
recetar igualmente licor, bañarse a diario era
considerado dañino para la salud.
Los pioneros (como fruto de la ignorancia
de las iglesias de las cuales procedían)
comían casi cualquier clase de carnes.
Pero la luz llegó en 1863. Estando en
Otsego, Michigan, la hermana White
recibió una visión en la cual se le hablaba
sobre la temperancia, la alimentación sin
carnes, el trabajo, el uso del agua,
ejercicio, aire puro, etc.
Si tomamos en cuenta el pésimo
conocimiento médico y salubritario de
aquel entonces, sería imposible suponer
que ella tomó estas recomendaciones de
la ciencia de aquellos días. Sencillamente
ella recibió información que hasta
nuestros días, la ciencia sigue
descubriendo.
Uno de nuestros pioneros que se distinguió
en el área de la salud fue John Kellogg. Fue
por muchos años el jefe del Sanatorio de
Battle Creek. Era excelente como médico –
cirujano; era un administrador astuto y un
inventor inigualable. Pero con el tiempo
aceptó el panteísmo, los negocios lo
absorbieron, menospreciaba a los
pastores, y terminó fuera de la obra.
COMO NUESTRA IGLESIA
LLEGÓ A ORGANIZARSE

Como los milleritas se oponían a


organizarse, los adventistas sabatarios
tendían a repeler esta idea. (Creían que
se convertían en Babilonia, o que como
Cristo estaba tan pronto a venir,
organizarse no sólo era innecesario,
sino daría la impresión que estaban
negando la cercanía de la venida del
Señor.
La organización vino como fruto de la
necesidad. Necesidad de pastores, de una
sabia remuneración de los mismos, de las
credenciales de los mismos, de la
legalización de las propiedades, de la
atención a todas las congregaciones que
iban surgiendo. El arduo trabajo, la
pobreza y la escasa salud, amenazaban
con la deserción de algunos ministros.
A algunos de ellos les ayudaban con
hospedaje, alimentación (azucar, papas,
cerdo, etc), algo de efectivo y algo de ropa.
El aspecto de ellos era deprimente. J. N.
Andrewshizo un estudio para saber que
decía la Biblia para sostener el ministerio.
Propusieron el plan de donaciones
sistemáticas. A quién? A un tesorero….¿no
es esto organización? Esta parecía
necesaria…..
Los esposos White, Andrewsy Bates, estaban
convencidos de una sabia organización.
Miraba el aumento de la feligresía, y la
necesidad de atenderla mediante una
distribución formal de ministros. Por otro
lado, la legalización de los templos, las casas
publicadoras, otros bienes, etc., impulsó a
nuestros pioneros a optar por la organizarse
como denominación religiosa.
Entonces … ¿Qué nombre le pondrían?
Algunos se llamaban: “el remanente”,
“rebaño esparcido”, “iglesia de Dios”, etc.
Finalmente David Hewitt en 1860
propuso nuestro nombre actual. La hna.
White aprobó cálidamente la propuesta.
Ahora ¿cuál sería la estructura
organizacional?
Aprobaron 3 niveles: iglesias locales,
asociaciones distritales o estatales y la
Muchos aclamaban al Pr. White para que
fuera el primer presidente de la
Conferencia General, a lo que el Pr.White
se opuso. Esto para que nadie pensara
que había promovido la organización con
el fin de ser él, el jefe de la misma.
La Asociación General se organizó en
1863, y su primer presidente fue el Pr.
John Byington.
QUE EL SEÑOR
TE BENDIGA…

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