Motivar la lectura y la interpretación de textos a través del cuento
como estrategia didáctica en los niños y niñas, permitiendo desarrollar su imaginación, exploración, comparación, reflexión, entre otras, convirtiendo el cuento en una extraordinaria herramienta educativa. JUSTIFICACIÓN El cuento se ha convertido en uno de los recursos más importantes que se utilizan en la etapa de Educación Infantil. Es una herramienta de información, formación y de aprendizaje, que estimula la imaginación, la creatividad y la curiosidad de los niños. Donde los niños y niñas pueden encontrar soluciones para sus propios problemas. Ya que a partir de las historias podemos mostrarles situaciones de la vida cotidiana, valores, sentimientos, moralejas… logrando que los niños y niñas se beneficien de las enseñanzas del cuento de una manera inconsciente, divertida y educativa, que contribuye al desarrollo integral del niño. Cuando cumplía 2 años Samuel, su madre Esther tomo la decisión de llevarlo a conocer el parque, ahí habían muchos niños y niñas con quien jugar. Es un lugar donde se respira un aire fresco, aunque Samuel prefería jugar solo, a él le encantaba ser un gran superhéroe, trepar los arboles, pero si su mama le daba permiso. Samuel se subía al barco pirata que había debajo de la sombra de unas palmeras donde el decía ser el capitán. Estando en el parque vio a su amiguito Leo con quien estudiaba en su hermoso Jardín. Pero Samuel no le gustaba jugar con nadie siempre quería estar solo. Visitando mas lugares encontró otra compañerita llamada Lauren que estaba jugando en la piscina de arena, su mama le dijo –Samuel ve y juega con tu amiguita pero Samuel insistía a estar solo y no jugar con nadie. Samuel siguió jugando solo pero su amiguita Lauren se puso a jugar con Leo, a armar castillos de arena. Samuel quería acercarse pero tenia mucha pena, pero su mamá lo animó, le hablo de lo hermoso de compartir con sus amigos un rato alegre, ella entró y se sentó junto a Leo y Lauren y Samuel se escondía a su espalda, ellos se reían y reían y Samuel sonrió y se animo a sentarse a armar castillos de arena junto a su mamá, Leo y Lauren.