Professional Documents
Culture Documents
Integrantes:
Elmy Mondragón
Lida Caicedo Valencia
Marlen Alomia Riascos
Ana Teresa Mondragón Tovar
Gloria Inés Renteria Truque
LOS BEBÉS DESCUBREN EL MUNDO
Los bebés nacen con extraordinarias condiciones mentales que les permiten
procesar información amplia y realizar coordinaciones complejas. Son capaces
de dirigir la cabeza y la mirada en la dirección de los sonidos. Reconocen a la
madre por su olor y distinguen su voz por la entonación. Esta capacidad de los
bebés para identificar la entonación, así como las otras capacidades
mencionadas, prueban que desde su nacimiento, son bastante más sociables e
interactivos de lo que comúnmente se cree. Ellos pueden igualmente balbucear
de manera fluida y su balbuceo puede producir unidades de sonido en variados
idiomas.
A las pocas horas de nacer, los bebés imitan los gestos que
el adulto les hace, como sacar la lengua. Esta imitación
permite afirmar que ellos parecen tener ‘una tendencia
natural a orientarse hacia sus semejantes’
En otro plano, cualquier madre o adulto puede observar que a las pocas
semanas de nacidos, los bebés se defienden ante el objeto que se les acerca.
Lo más notable quizá es saber que el aire que se desplaza guía esa conducta,
pues sirve de indicio o señal para anticipar la proximidad y el desplazamiento
del objeto.
Desde los tres meses aproximadamente, las manos y los movimientos que se
pueden hacer con ellas son un objeto de interés. Pueden pasar largos ratos
mirándolas y aún más, si el cuidador o cuidadora juega con ellas. Ellos
muestran el mismo interés y entusiasmo cuando en la cuna se les ponen
móviles que intentan alcanzar. Hacia los cuatro meses, los bebés ya no sólo
observan y tratan de alcanzar el móvil, sino que empiezan a tratar de
relacionar sus propias acciones con las del objeto. Por ejemplo, observan que
el móvil se desplaza cada vez que sus manos lo rozan, descubriendo que sus
propias acciones logran impulsarlo.
No es menos notable que los bebés pueden distinguir y agrupar rítmicamente
los sonidos del lenguaje porque son muy sensibles a las variaciones temporales,
a la duración de los segmentos del habla, alargamiento de las sílabas y a las
pausas y variaciones de la voz.